-Sector Calaxis, sistema Atlas- -4.242100.M30-

Dos meses antes:

"...No lo sé, hermano." Tras un pequeño debate, la clara voz de Roboutte Guilleman mostro incertidumbre ante el planeta que él, su hermano Sanguinius y casi el resto de sus hermanos observaban en la pantalla de la torre del navegante. "Esto parece ser un mero engaño de los poderes ruinosos."

"Guilleman," la tranquila voz de Sanguinius hablo con una pequeña sonrisa. "Nuestro padre nos ha bendecido con sus dones; meros engaños no son visibles ante nuestros ojos. Puedes ver con total claridad que este planeta no está contaminado por el caos, sino también está intacto de cualquier desastre climático o bélico, y lo más hermoso es que la humanidad ha progresado enormemente en este mundo sin la ayuda de otras colonias perdidas."

"Pero lo que nos mostraron los Servocraneos espía…" Magnus comenzó con los brazos cruzados y mirada pétrea. "Me deja algo indeciso: ¿Una humanidad que el cual sufrió una mutación genética masiva que les permitió acceder poderes no psíquicos de manera desconocida y no tenga ningún rastro de esencia disforme? Suena demasiado bueno para ser verdad en mi opinión."

Y era verdad, hace no muchos meses atrás, el Primarca de los Ángeles Sangrientos había encontrado este planeta mediante las cientos de miles de balizas que el Emperador había lanzado al espacio para ver el estado de las colonias perdidas en el universo antes de iniciar la gran cruzada. Sanguinius encontró este planeta el cual era un poco parecido a lo que era Terra durante el segundo milenio. (Como su padre les había descrito una vez) Dicho mundo era pacífico y no mostraba ningún daño en su superficie.

Eso fue en el exterior…

Cuando el Mecanicum envió a los Servocraneos al interior del planeta para investigar, encontraron algo que los conmociono, enojo, horrorizo y asombro.

Este planeta mostraba a los humanos (y diferentes seres el cual podrían ser Xenos) poseer poderes asombrosos y aterradores. Un ejemplo sería una mujer crear monstruosidades de piedra de varios metros de altitud, un hombre adulto crear varias copias de sí mismo, un niño de cinco años escupir fuego de su boca mientras estaba disfrazado de un animal reptil y un adolescente crear imponentes columnas de hielo y fuego con una naturalidad innata.

Casi todo el planeta (específicamente el 80% de la población) mostraba todo tipo de habilidades únicas.

Los navegantes y personal de la lágrima roja junto con algunos de sus hijosenloquecieron a ver esto. El primer pensamiento que le vino a Sanguinius fue simple: Caos.

Este planeta estaba lleno de adoradores a los poderes ruinosos, deben ser adoradores a Tzeentch o alguno de los cuatro ya que es totalmente imperdonable que los humanos cayeran tan bajo para ganar esta clase de poderes. Para su rabia más profunda era que en cierto modo los niños estuvieran vinculados a esta blasfemia de nacimiento al exhibir sus poderes como a otros niños y sonriendo con felicidad como si él le agradeciera a la gran embaucador por darle un gran regalo.

Si o sus hermanos (o probablemente su padre) vieran semejante vileza en la humanidad sembrada en este planeta seria inmediatamente limpiado junto con su gente de toda mancha del caos con prometió y torpedos ciclónicos. Pero Sanguinius no tomaba decisiones como esa a la ligera.

Tenía que ordenar las cosas y planear en consecuencia.

Pero repentinamente se sintió confundido y consternado. Sondeo con su mente la inmensa red de almas en este planeta con la ayuda de los navegantes Seudo-humanos y notaron que ninguna sola alma mostraba una mota de energía disforme, ningún hombre, mujer o niño portaba en su cuerpo esencia misma de la disformidad.

Estaban limpios… eso era imposible.

Horas más tarde cuando los Servocraneos volvieron con toda la información recopilada del planeta, la lágrima roja salió del sistema para investigar a fondo los misterios que abarcaban este enigmático planeta en su regreso a Baal.

La información fue sustancia y útil a la vez preocupante e impactante.

Este planeta cuyo nombre era similar a la suciedad comenzó a manifestar una mutación genética masiva de origen desconocido que inicio cuando un bebe comenzó a emanar luz de su cuerpo. Sanguinius no podía creerlo ¿Él bebe era otro de sus hermanos perdidos? Recordó que su padre había hecho 20 de ellos y que los había recuperado todos cuando los dioses del caos los separaron en todo el universo ¿había uno más que su padre no le conto?

Esto resulto ser una falsa alarma ya que dicho bebe había fallecido de vejez y los Primarcas eran inmortales. Volviendo a lo que estaba, la humanidad dentro de este planeta comenzó a desarrollar alteraciones genéticas que le permitieron desarrollar una alta diversidad y gamma de poderes extraordinarios y que era hereditario para las generaciones futuras. Las personas que no había desarrollado ninguna de estas mutaciones poseían una articulación extra en el dedo meñique del pie.

La primera generación que desarrollo estas habilidades de forma aleatoria produjeron consigo una larga serie de conflictos bélicos y caóticos en la que la sociedad se vio colapsada debido a la falta de control de estas mutaciones y a los diferentes gobiernos del mundos los usaron dichas mutaciones como armas de destrucción masiva.

Muchas guerras fueron desatadas en el mundo al punto que lo convertirían en un alberque donde la anarquía y violencia. Pero dicho futuro en camino fue detenido por los llamados "Vigilantes" personas con las mismas mutaciones genéticas que ayudaron a detener los criminales, asesinos y genocidas en un enfrentamiento fuego contra fuego. La humanidad casi cae en un abismo sin fondo gracias a estos vigilantes quienes habían realizado grandes hazañas heroicas a tal punto que inspiraron a los demás gobiernos a crear una especie de defensores de la justicia y la paz el cual operen dentro del margen de la ley.

La era de los vigilantes se había ido y dio paso a la era de los Héroes.

Por muy estúpido que sonaba en la mente del Primarca, vio que los Heroes en realidad era como un ejército que hacia cumplir la ley y el orden del cual operaban en diferentes partes del mundo en ciertas partes del mundo. Luchando y defendiendo a la humanidad de aquellos que usaban sus poderes para hacer el mal.

La furia hirviente de Sanguinius se había atenuando lentamente hasta convertirse en real curiosidad. ¿Así que la llegada de estos "Dones" tenía que ver con la genética y no lo psíquico o lo sobrenatural? Le recordó exactamente a los Marines espaciales de su legión y de la de sus hermanos. (Específicamente de sus dos hermanos Leman Russ y Vulkan)

La semilla genética de los lobos espaciales era que cada Astarte tenía ligeras cualidades de un animal canino con un agudo sentido del olfato y del olor; las salamandras poseen su piel tan negra que pueden resistir altas temperaturas y cualquier tipo de radiación además de ver en el oscuridad.

Sanguinius hizo una doble toma y vio sus prístinas alas reclinadas sobre sus hombros como una capa, luego vio la imagen de un Héroe adulto poseyendo la misma alteración genética que tenía. El ceño del Ángel se atenuó cuando se dio cuenta en lo hipócrita que estaba siendo al querer condenar un planeta lleno de mutantes… cuando él era uno también.

Su padre una vez le llamo la atención sus alas y… bueno, eso era todo; el resto de sus hermanos admiraron sus alas con diferentes reacciones: Magnus estaba muy interesado y deseoso de comprender su anatomía, Roboutte estaba ligeramente degustado pero mantuvo las apariencias por respecto a todos, Horus se mostró comprensible, Vulkan acepto su anormalidad como es y Lorgar lo miro como si él fuera lo más diabólico y profano de la creación, cosa que Sanguinius podía notar por la forma en que lo miraba en las reuniones.

Lo que no sabía era como abordaría el asunto de este planeta por lo que se vio obligado a organizar una reunión importante con algunos de sus hermanos para debatir cual sería el destino de este mundo.

Los que vinieron a la reunión fueron Magnus, Fulgrim, Corvus Corrax, Lorgar Aurelian, Vulkan, Roboutte Guilleman, Ferrus Manus y Horus Lupercal.

"Yo voto para que sea purgado." Y hablando del rey de roma. Ese comentario provino de la tranquila y prístina boca de Lorgar, el primarca de los portadores de la palabra se encontraba con las palmas juntas en una oración ferviente. "La mutación que rodea cada poro de este mundo debe ser limpiado con fuego santo. Su vil presencia es una afrenta al imperio y sus enseñanzas."

"Lorgar, ya hemos sondeado el planeta y no encontramos ninguna rastro de esencia demoniaca." Vulkan llamo a su hermano con tono desaprobatorio. "No podemos simplemente 'purificar' a estas personas que no representan una amenaza absoluta para nadie en el imperio."

"Tus buenas intenciones están cegándote como siempre, hermanito." Lorgar hablo manteniendo su amistoso gesto facial y su tono de voz sereno. "¿Ver a estos horribles monstruos proteger civiles inocentes fue suficiente para ganar tu suave corazón?"

"¿Acaso escuchas lo que sale de tu-" Vulka trato de réplica sintiéndose ofendido pero fue Horus quien lo corto.

"Ya fue suficiente los dos." Horus alzo la voz en el grupo con los brazos cruzados. "No está en nuestras manos decidir si este mundo es apto para ser destruido, esa decisión pertenece a Sanguinius."

"Gracias, Horus. Pero por esta razón he convocado esta reunión. Una parte de mi quiere aniquilar a estos mutantes, pero viendo mi propias alas, veo que esa decisión sería moralmente hipócrita." El primarca de los Ángeles Sangrientos enfatizo extendiendo levemente sus prístinas alas.

"Por favor, San." El fénix de Chemos: Fulgrim hizo un gesto despreocupado junto a un tono de voz comprensivo. "Ninguno de nosotros ha expresado disgusto alguno por tus alas; son una obra de la maravillosa genética que ha infundido nuestro padre-"

"Fulgrim, por favor." Ferrus cortó el intento de consolación de su hermano a Sanguinius antes de que tratara de humillarse así mismo. "Todos incluyéndote sabemos la verdad sobre las alas de nuestro hermano, es noble que trates de consolarlo pero no somos niños pequeños."

Fulgrim bajo los brazos con soltó un suspiro de derrota mientras mantenía su sonrisa. "Tienes razón."

"No importa las cosas que digan sobre mis alas, eso no cambia lo que soy y yo siempre los voy a querer como mis hermanos incluso si siente disgusto hacia mí." Sanguinius declaro con amabilidad hacia sus hermanos separados al nacer.

"Pero volviendo con el tema que tienes sobre tus hombros: ¿qué piensas hacer con este mundo si no quieres destruirlo?" El maestro de guerra de Cethonia trajo de regreso el enigma que tenía sobre sus cabezas.

"El deber que todos tenemos en la Gran Cruzada: anexarlo al imperio." Fue la respuesta del Angel de Baal.

"PFFT! Buena suerte con eso." Corvus contraataco con burla en su voz.

"Hermano, te comprendo. Pero el público del imperio ni mucho menos Malcador aceptarían una civilización humana llena de mutantes en su sociedad por tan buena y dócil que sea." Roboutte uso el aplastante poder de la lógica en su hermano mayor. "Puede que nuestro padre llegue a aprobarlo, tal vez incluso algunos miembros del Mecanicum, pero hay muchos habitantes del imperio que sufrieron mucho en manos de los mutantes y preferirían acabar su existencia que aceptarlos en nuestra sociedad."

"Apoyo el argumento de Guilleman, Sanguinius." Magnus miro a su hermano con seriedad. "No hay forma de que pueda pasar."

"Ya esperaba esa clase de respuesta de ustedes." Fue en este momento que una sonrisa de complicidad creció en los labios de Sanguinius para la creciente confusión del el resto de los primarcas.

"Que hiciste?" Lorgar dejó de sonreír y su máscara se estaba agrietando lentamente.

"Antes de que hiciera esta reunión. Al primero que notifique de mi hallazgo fue a nuestro padre; al principio se mostró escéptico y… ¿Hilarante? sobre esto pero lo convencí de abrir un parlamento con las mayores autoridades del planeta." Sanguinius respondió la confusión de sus hermanos mostrándoles un pergamino el cual decía lo siguiente:

En el 06 de octubre de la fecha local de Terra. Le doy autoridad a mi hijo Sanguinius para establecer un dialogo pacifico con el mundo identificado como 'Heracles I' del sistema Atlas en el sector Calaxis. Con el propósito de anexarlo al nuevo imperio de la humanidad utilizando todos los medios necesarios para ello.

Cuando dicha tarea sea completada, la población mundial será puesta bajo extrema vigilancia por el Mecanicum para averiguar cuál es su verdadera lealtad.

Firma: El Emperador de la humanidad.

PD: Malcador el Sigilita y los altos señores de Terra han aceptado dicho encargo, tiene absoluta libertad de llevar a cabo esta misión diplomática.

"A veces me pregunto cómo llegas a lograr este tipo de cosas, Sanguinius." Horus dijo con una mirada consternada.

"Bueno, eso fue inesperado." Corvus inclino un poco la cabeza hacia arriba. "Estas seguro de que no es una broma?"

"Yo no miento, Corrax." El Angel de Baal respondió con una sonrisa.

"Esto es un error." Lorgar dijo con tranquilidad pese a tener un ceño que fue esculpido en su rostro. "Pero si esta es la voluntad del santo Emperador, no me voy a oponer a ello."

"Que piensas hacer ahora ya que tienes la autorización de nuestro padre?" Magnus pregunto mostrándose curioso al abordar una misión pacífica.

"Voy a reunir un grupo de diplomáticos del administratum para que sean mi voz en todo el planeta. Luego voy a reunir a todos los líderes del planeta para convencerlos de unirse bajo una bandera demostrándole la verdad sobre que peligros y aberraciones yacen en las estrellas." Sanguinius se dio la vuelta para contemplar el planeta que estaba frente suya. "Iré personalmente a la región del cual habitan los 'Heroes' para apaciguarlos con mi presencia. El primer contacto iniciara en dos meses estándar.

"Ya veo… en ese caso te deseo buena suerte en tu misión, Sanguinius." Roboutte asintió al lógico plan que su hermano creo. "Si deseas ayuda, con gusto podremos ofrecerte ayuda cuando se presente la oportunidad."

El Angel de Baal le dio una sonrisa honesta a cada uno de sus hermanos. "Muchas gracias."


En el presente: -un día después de la revelación de Sanguinius-

Toshinori Yagi (alias: All Might) no pudo estar más conmocionado en su vida.

Se había despertado muy temprano el día después de que los alienígenas llegaron, habían rodeado las ciudades del mundo con aterradores naves espaciales y habían descendido seres de imponente armadura y armas temibles. Todos estaban al borde de sus sillas con temor de que el peor escenario posible hubiese ocurrido y la humanidad tendría que luchar contra una facción alienígena para salvaguarda la esperanza del mundo.

Decir que el mundo estaba impactado cuando el líder de esta facción se revelo como un humano (Y uno hermoso en ello) fue la subestimación del milenio. Esto sin duda algo totalmente inesperado para el ex héroe número uno del mundo. Su teléfono no para de sonar ante todas las llamadas y mensajes de texto que no pudo leer ya que estaba con total asombro e incredulidad al atestiguar como el resto del mundo el hecho de que la no eran los únicos humanos en el universo.

Cuando pudo reorganizar sus pensamientos fue cuando escucho las palabras de este ser al que se presentó como Sanguinius: Primarca de los Ángeles Sangrientos.

All Might tenía su cara pegada al televisor cuando vio al 'Primarca' acercarse sin hostilidad a Endevaur quien apenas había salido de su conmoción pero su asombro no podía quitárselo del rostro. El primarca hacia que Endevaur pareciese un niño en cuanto a tamaño. El llamado Sanguinius le dio unas cuantas que ninguno pudo escuchar para luego dirigirse hacia la multitud de civiles para dirigirse a los medios de comunicación para que pudieran responder algunas preguntas.

Según había respondido: El Primarca era uno de veinte lideres creados genéticamente por el líder supremo de la humanidad al que presento como: "El Emperador de la humanidad" y luego dijo que su misión en este mundo era anexarlo junto a muchos más bajo la sombra de la Gran Cruzada. Luego les pidió amablemente a las grandes autoridades del mundo que se reunieran para establecer las pautas para el anexo de su mundo al imperio de la humanidad dentro de un mes cuando sus fuerzas estén totalmente establecidas.

Fueron tan pocas respuestas que engrandaron miles más: ¿Qué era el imperio? ¿Quién era el emperador? ¿Qué es la gran cruzada? ¿Había más mundos habitados por humanos a lo largo del universo? ¿Qué es un primarca?

¿Cuál sería el futuro para la humanidad… en este planeta?

Toshinori como muchas personas en el mundo no pudieron dormir bien esa noche.

Y justo cuando amaneció: otra bomba cayó.

El gigante espacial quería reunirse con todos ellos… en la sede oficial de la Comisión de Seguridad Publica de Héroes…

All might casi chorrea sangre como un volcán al recibir ese mensaje por parte del director de la UA. Está bien… ahora este imponente hombre quiere establecer una reunión con todos los héroes de la ciudad (y quizás todo el país) esto es sin duda preocupante ya que no sabía el propósito mismo de esta reunión repentina.

All Might le escribió al director Nezu, preguntándole el propósito de la reunión, donde y a qué hora se celebrara. Esperaba que esto fuera una oportunidad para aclarar todas las dudas que estaba carcomiendo su mente.


Al salir de la parada del tren, Izuku fue recibido por una mirada espectacular.

En el horizonte del distrito comercial de Mustufatu estaba estacionada la gigantesca nave espacial del Imperio de la humanidad junto con otras naves estacionadas en ciertos lugares de la región. Muchas naves alienígenas habían desplegado y sobrevolaban la ciudad con una capacidad de maniobre literalmente fuera de este mundo.

Midoriya trago un nudo y se acomodó el cuello de la camisa mientras se dirigía a la escuela, fue algo extraño de que las clases estuvieran activas cuando ayer bien podría haber sido el fin del mundo.

Enserio, todavía no podía quitarse la cara de sorpresa cuando vio al líder de dicha flota espacial revelarse como un simple humano. Impactante es quedarse corto, varios teóricos conspiradores estaban extasiados de que sus sospechas fueran confirmadas. ¿De verdad la humanidad esta esparcida por la galaxia? Eso sin duda fue aún más impactante.

Izuku camino por las calles viendo a los civiles salir de sus casas para hacer sus deberes diarios o pasar el tiempo con sus conocidos y seres queridos… solo que había un temor en sus caras, la mayoría de ellos caminaba en silencio sin decir una palabra o algunos grupos susurraban por temor de que los visitantes del espacio los estén escuchando. Midoriya trago saliva nuevamente al ser parte de este ominoso estado emocional de la gente, a donde sea que estuviese había un estado de miedo perpetuo en cualquier ciudadano que se topara con él.

Los héroes que patrullaban las calles también mostraban un temor que bien pudieron esconder con una máscara de seriedad y profesionalismo, fue sorprendente para Izuku que ellos fueran los más tranquilos pero también estaban totalmente conscientes de la tensa situación en la que estaban.

El poderoso rugido de un motor lo saco de sus pensamientos y llamo su atención como de todos los demás civiles al ver una de esas naves espaciales sobrevolar tranquilamente por encima de los edificios, todos quedaron paralizados hasta ver un grupo de ciudadanos ir hacia una parte donde más y más se estaban reuniendo. Algo estaba pasando y necesitaba ver que era así que corrió hacia dicho lugar para ver que sucedía.

Para cuando llego, sus ojos se abrieron con asombro e impacto como los demás al ver lo que parecía ser un desfile militar en la que el ejército imperial se movilizaba. Humanos como todos ellos llevaban armaduras militares color verde de aspecto avanzado cargando armas de avanzada tecnología con el emblema del águila de dos cabezas, todos ellos tenían un rostro pétreo mientras marchaban en orden siendo guiados por lo que parecía ser un oficial vestido con un uniforme de la antigua unión soviética; junto a ellos había caminantes móviles que se parecían mucho a esas antiguas películas de ciencia ficción y grandes tanques de guerra.

Izuku estaba maravillado por la presentación del ejército imperial, todo el mundo estaba grabando el espectáculo con sus teléfonos e incluso había un camión de noticias con una reportera transmitiendo la marcha en vivo.

"Oi, Midori-kun!" Una familiar voz llamo a Izuku y vio que esa persona era Mina Ashido.

"A-Ashido-san!" Izuku saludo a su compañera de clases con una inclinación. "Buenos días!"

"Buenos días. Es una locura que sigamos teniendo clases con toda esto pasando." La niña de piel rosada dijo con una sonrisa mientras miraba la marcha del ejército imperial. "Es como estar en set de filmación."

"S-sí, yo mismo no puedo creerlo." Izuku se rasco la nuca nervioso, la actitud positiva de Ashido era sin duda contagiosa. "Nadie está dejando de hablar de ello."

"Si, es una locura, pero al mismo tiempo es una genialidad." La sonrisa de Mina se amplió. "Un universo lleno de humanos ¿crees que haya humanos poseedores de dones como nosotros?"

"Eh bueno… no podría estar totalmente seguro…" Izuku no estaba seguro de cómo responder eso. "Aunque podría haber una teoría con respecto a ello."

"Oi! Son los marines espaciales!" Un Transeúnte grito y todos jadearon audiblemente cuando vieron a los mencionados aparecer en la marcha.

Ambos jóvenes abrieron los ojos al ver los enormes caballeros espaciales marchar por las calles con su imponente armadura anaranjado rojizo, con sus armas en mano y sus mochilas cohete encendidas; los Dreadnaughts marcharon pesadamente con algunos Astartes flotando por los aires.

Uno de estos Marines capto su mirada en Izuku y Ashido quienes se encogieron internamente mientras lo veía pasar, sin duda eran tan intimidantes de cerca como lo mostraron en las noticias.

"Increíble… Me pregunto qué fuerte deben ser para portar esa armadura." Izuku se preguntó a sí mismo.

"No lo sé, pero su líder es sin duda el ser más lindo de todos." Mina dijo melosa con sus cachetes oscureciéndose de tono. "Tiene una cara tallada por los mismos ángeles!"

"huh…?" Midoriya inclino la cabeza confundido ante lo que hablo mina.


Luego de que se dieran cuenta de que llegarían tarde si seguían viendo el espectáculo, ambos jóvenes se dieron prisa para ir a la escuela para después descubrir algo sumamente curioso.

Había otros Marines espaciales… pero estos se veían diferentes a los que habían visto en el desfile. El color de sus armaduras era de un verde grisáceo con bordados de bronce y hombreras negras, el emblema de estos gigantes era de un dragón blanco. Había seis de ellos y no llevaban armas en sus manos, solamente una especie de espada enfundad en sus caderas.

Pero la multitud de estudiantes reunidos era sin duda enorme, todos estaban reunidos y formados mirando hacia la plataforma en la que los Marines espaciales y los profesores Snipe y Vlad King estaban encima.

Midoriya y Ashido se detuvieron para contemplar lo que estaba pasando cuando algo repentinamente llamo su atención.

"Chicos!" una familiar y enérgica voz llamo a ambos y vieron que se trata nada más que Ochako Uraraka quien estaba junto con Tenya Ida, Eijiro Kirishima y otro más compañeros de su clase como Kyoka, Yaoyoruzu, Aoyama y Shoto Todoroki.

"Están aquí!" Mina literalmente se lanzó hacia un desprevenido Kirishima en un aplastante abrazo. "No pensé que estarían aquí con todo lo que está pasando!"

"Tampoco yo, es una auténtica locura lo que está pasando!" Kirishima soltó a Mina del aplastante abrazo. "Todavía no me puedo quitar la sorpresa de encima."

"Como han estado?" Izuku le pregunto a sus compañeros y amigos de clase.

"Con toda la honestidad del mundo: me siento indeciso a la vez confundido." Ida respondió hizo una mirada a los marines parados sobre la plataforma de presentación. "Toda esta repentina situación me deja sin idea alguna de lo que deparara ahora."

"Un universo lleno de humanos? Es impactante a la vez que preocupante." Momo junto entrejunto los brazos tragando levemente.

"No me gusta mucho esto, no he podido dormir bien con esta bomba sobre nosotros." Jiro doblo los largos lóbulos en sus orejas con nerviosismo.

"Las cosas no parecen dar un gran brillo por lo que veo, solo espero que el director Nezu aclare las cosas." Aoyama argumento con preocupación en su perfecto rostro.

"El director Nezu va a hablarnos?" Izuku pregunto con ligera sorpresa.

"Si, creo que tiene que ver con esos… 'Marines espaciales' que están junto a Snipe-sensei y Vlad King." Todoroki respondió por los demás.

"Se ven muy diferentes a los que estaban en la televisión." Uraraka murmuro con interés ante los gigantes de armadura verde y bronce. "¿No decían llamarse: Ángeles Sanguinarios?"

"Ángeles Sangrientos." Yaoyoruzu corrigió. "Quizás estos Marines sean de una compañía distinta al que vimos en televisión."

Todo murmullo se apagó cuando el sonido de un dedo golpeando el micrófono sonó por los altavoces de la plataforma, los estudiantes de UA se tensaron y se mantuvieron firmes cuando vieron al director Nezu de la prestigiosa escuela de héroes.

"Buenos días, mis queridos estudiantes." Nezu comenzó a saludar a los jóvenes reunidos con su típico ambiente de positivismo. Varios de ellos notaron como los Marines estaban mirando al peculiar director de UA. "Muchos o quizás todos ustedes deben sentirse de diferentes modos tras los acontecimientos de anoche. Quiero que me creen que yo también tengo esa clase de sentimientos justo ahora."

La forma tranquila con la Nezu había expresado sus palabras parecía desmentir su estado emocional el cual era el mismo de siempre.

"Ahora, quiero asegurarles a todos ustedes que no hay razón de preocuparse." Nezu miro sobre sus hombros a los marines formados junto con Snipe y Vlad King. "Los caballeros que tengo detrás mía son los Marines espaciales pertenecientes a la legión de las Salamandras, una compañía separada de los Ángeles Sangrientos. Ellos vinieron personalmente para velar por su seguridad por un mes hasta que las naciones del mundo lleguen a un acuerdo con el Primarca Sanguinius."

Nezu se cayó por un momento para ver y escuchar las reacciones de los niños, y lo que vio fue conmoción mezclada con temor e incertidumbre. Él no los culpaba, todo es tan nuevo para no solo para los niños, sino para todas las personas del mundo entero.

Solo esperaba que las cosas no se salieran en control en este futuro incierto.

"Ahora, déjenme presentarles a nuestros honorables invitados."


-Sede Oficial de la Comisión de Seguridad Pública de Héroes-

-hora Actual: 1:10 P.M-

"Llegamos." All Might hablo cuando salió del vehículo, acompañado por su amigo el inspector Neobasa.

La entrada del edificio estaba repleto de un sinfín de entrevistadores, camarógrafos, noticieros, ect quienes estaban siendo contenidos por la policia. La entrada del edificio estaba resguardada por dos Astartes los cuales estaban tiesos como una estatua mientras el público les toma un millar de fotos y les hacían miles de preguntas que no iban a responder.

"Veo que son muy disciplinados." Neobasa dijo casualmente mientras se abría paso de la multitud con All Might detrás y le mostro su placa a los guardias quienes les permitieron abrirse paso.

All Might se quedó un par de segundos viendo al Astarte el cual apenas movió su cabeza hacia su dirección. El ex héroe número uno se mostró estoico mientras se adentraba a la sede.

Ambos hombres saludaron a la recepcionista y esta les informo que el personal ya estaba reunido y que el invitado especial estaba con ellos. Toshinori podía sentir su corazón martillando levemente mientras los dos se adentraban al ascensor y ascendía hacia el piso acordado.

"Sé que estas nervioso." Neobasa dijo al notar la forma tensa e All Might. "Yo también lo estoy. Esto es algo a lo que nosotros nunca estábamos preparados."

"Temo mucho lo que vaya a suceder en el futuro." All might relajo sus hombros. "Si ellos quieren que nos vinculemos a su gobierno: decir no está fuera de discusión."

Neobasa no dijo nada. Las puertas del ascensor se abrieron y los dos salieron para encontrarse con la familiar presencia de Hawks. El héroe #2 tenía los brazos cruzados con una expresión algo abatida el cual escondió rápidamente cuando vio a los dos últimos individuos.

"Chicos!" Hawks saludo a los dos hombres con positivismo. "Ya era hora de que llegaran."

"Esperamos no haber llegado tarde. El trafico estaba muy pesado gracias a la marcha del ejercito Imperial." Neobasa se disculpó con una pequeña inclinación.

"Nah, no llegaron tarde. De hecho llegaron justo a tiempo, los demás llegaron un poco tarde también." Hawks hizo un gesto desdeñoso con su habitual sonrisa.

"Entonces… ¿nuestro invitado se encuentra adentro?" All Might pregunto yendo al punto del asunto.

El rostro de Keigo se puso serio y asintió con severidad.

"…Como lo hizo?" All Might señalo la pequeña puerta en cual las personas normales entrarían. "¿Lo hizo sin su armadura?"

Hawks soltó un suspiro de malestar para luego negar. "No. Él es tele transporto ahí."

"¿Tele transporto?" Neobasa miro a Toshinori quien le devolvió la mirada.

"No importa." All Might se puso serio y regreso su mirada al héroe volador. "¿podemos entrar?"

Hawks asintió y se hizo un lado para abrir la puerta y los tres se adentraron a la sala de reuniones. El ex héroe profesional y el inspector de la policía de Mustufatu quedaron estupefactos al ver a todos los héroes hasta el top 40. Cada uno de los héroes profesionales tenía un rostro de absoluta seriedad mientras que la presidenta de la comisión: Saya Adams hablaba con sus asesores en silencio.

En el medio de la mesa de reuniones estaba el hombre que comenzó con todo esto. Sanguinius estaba sentado sobre una silla que inexplicablemente podía sostener todo el peso de su gruesa armadura, junto al estaban dos Astartes de los Ángeles Sangrientos los cuales tenía su rostro al descubierto dándole a cada uno de los presentes una mirada sin emociones. El Primarca estaba tenía los ojos cerrados hasta que vino All Might y sus miradas se encontraron por primera vez.

No es broma, el hombre era apuesto en todos los sentidos, su rostro parecía ser esculpido por entidades divinas. Pudo notar que algunas mujeres no paraban de mirarlo con esa clase de mirada soñadora. No solo eso, la mirada que proyectaba era de puro poder y conocimiento lo cual le provoco un frio en la columna vertebral.

Podía sentir el ardor subiéndose a la garganta pero reprimió ese impulso y se dirigió a su asiento donde la mirada del Primarca lo seguía con la mirada.

"Gracias a todos por haber venido." La presidenta Saya anuncio a todos los héroes involucrados. "También le agradezco por a nuestro invitado, Saguinius-dono al reunirse con nosotros para deja en claro nuestros asuntos por venir."

Sanguinius le dio una mirada a la presidenta al ser llamado de esa forma pero lo ignoro mientras que los Heroes miraban inquisitivamente a la presidenta Adams.

"Hemos convocado esta reunión para que nuestro invitado pueda presentarse adecuadamente con todos ustedes, además de hacerles un anuncio el cual es de gran importancia." La presidenta dijo y su mirada paso sobre los heroes. "Luego de eso: todos ustedes podrán hacerle las preguntas que quieran a Sanguinius-dono. Señor, si es usted tan amable…"

El Primarca tras ser llamado, se levanta de su asiento y evalua todas las expresiones de las personas que se encuentran en esta sala. Sus estaban rodeando sus hombros como si se tratase de una capa hecha de plumas blancas. Las miradas de los Heroes variaban entre el asombro, temor, evaluación y curiosidad.

"Si. Como todos ustedes acaban de ver: soy tan humano al igual que ustedes, también pudieron notar lo que ustedes conocen como 'Don' en mi cuerpo." Sanguinius dijo al señalar sus enormes alas. Se compartieron muchas miradas y se intercambiaron palabras ante la implicación. "La primera vez que vi su planeta, me dio absoluta curiosidad en porque cada individuo es diferente e sin embargo sigue siendo tratado con total normalidad."

Más miradas y susurros. Sanguinius pudo notar algunos gestos faciales de preocupación.

"Quiero aclarar que no he venido a este planeta con intenciones de conquista así como mis hermanos tampoco, vengo aquí para darles a cada uno de las personas a formar algo más grande que ellos mismos; Algo que nos reunificara como una sola especie en la galaxia que supere a las mayores adversidades que aguarda el inmenso cosmos de la vía láctea."

Sanguinius noto que varias miradas de los héroes mostraban admiración y algunos sorpresivos ante las cosas que sabían.

El Primarca dio un discreto inhalación y luego hablo.

"Mi nombre es Sanguinius. Vengo de un planeta llamado Baal: un mundo envenenado por la radiación atómica. Tras ser separado de mi familia cuando era tan solo un bebe por los peores enemigos de mi padre. Cada uno de mis veinte hermanos hemos sido esparcidos por la galaxia. Cuando los nómadas de Baal me encontraron cuando era tan solo un bebe, debatieron de que si debían matarme debido a mi mutación."

Muchos quedaron atónitos por la revelación de que existen otros humanos con alteraciones mutagenicas mientras que otros estaba enojados ante el hecho de matar a un bebe solo porque es diferente al resto de los demás, era un tema algo delicado que se originó en la época donde los dones comenzaban a aparecer por todo el mundo; los gobiernos del mundo al ser testigo de lo catastrófico que podían ser los poderes, los usaron con fines corruptos y también hubo muchos de estos individuos que los usaron para cometer atroces crímenes. Había cientos de marchas de gente sin don que deseaban la total aniquilación de los poderes y todavía existían en algunos países del mundo.

Hubo horrorosos casos en las que países como Israel, Palestina, Nigeria y varios otros país del sur que cometieron actos de exterminio de humanos con dones ya sean por motivos religiosos, por un bien mayor o simplemente por miedo.

Pero cuando la era de los vigilantes termino y dio paso a la era de los Heroes, la gente con poderes fueron aceptados en la sociedad como gente común con los mismo derechos humanos.

El solo hecho de asesinar a alguien por solamente ser diferente no es igual que racismo.

Como si pudieran leer su mente, Sanguinius prosiguió: "Puedo comprender el enojo de algunos de ustedes, pero debo aclarar que la humanidad fuera de este planeta es constantemente temerosa de los mutantes que habitan sus mundos por una buena razón, la mayoría de estos mutantes son totalmente hostiles a sus congéneres. Los mutantes locales de mi planeta eran salvajes adoradores de seres oscuros y me querían totalmente muerto."

Algunos pudieron asentir con entendimiento de lo que el Primarca estaba tratando de aclarar.

"Volviendo a lo que estaba: al final del asunto, los chamanes de mi gente optaron por la razón y me dejaron vivir como uno más entre su gente y muy pronto llegaría a ser muy aclamado como un individuo digno de admiración y respecto." Sanguinius se inclinó y le dio una mirada significativa a cada individuo de esta sala. "Cada uno de ustedes es como yo, un individuo que pese a sus diferencias sigue siéndose leal a sí mismo y a sus congéneres, lo cual respeto mucho."

El Primarca se quedó en silencio para que sus palabras hicieran efecto en los héroes que estaban en la reunión. Muchos de ellos dieron asentimiento y se sintieron un poco alagados por las palabras de un gigantesco hombre de otro planeta.

Era el momento…

Sanguinius cerró los ojos y se levantó de la silla y abrió los ojos con una mirada de absoluta seriedad. Todos se tensaron levemente ante lo que podría hacer a continuación.

"Antes de que hagan sus preguntas. Permítanme contarles de cómo hemos ascendido más allá de las estrellas, les advierto de que lo que voy a decir será duro de escuchar ya que la historia de la humanidad esta pavimentada con dolor y sufrimiento de incontables almas desafortunadas. Les sugiero que presten mucha atención porque el tiempo podría ser crucial."

CONTINUARA…