Bien mis terrones de azúcar, esta es la ultima actualización del día de hoy, y vamos a culminar con algo muy genial.
Un terrón de azúcar hoy esta de cumpleaños, si, así es... Un terrón hoy esta de manteles largos, que si cae su día en el presente.
Jajajajajaja, sin mas... Permitanme decirles que KuranKaname001, hoy estas cumpliendo años, así que estas mas loquilla.
Sin mas espero que disfruten y algo mas...
Advertencia de contenido lemon, así que menores de edad están advertidos, yo no me hado responsable de traumas, yo advierto de antemano, ahí ustedes saben mis terrones de azúcar.
Sin mas disfruten mucho la lectura.
Kagaho, ataco de inmediato a la tersa piel de aquel cuerpo, deseaba probarla, el cuello es cálido, suave, con un sabor irresistible.
No sabía si sería capaz de controlarse en sin dejar ni una sola marca en ese lugar, pero le es por completo imposible.
Su excitación está creciendo, sabe que no parará, no quiere hacerlo.
Esa boca, los labios de Kagaho, la lengua, todo está proyectando sensaciones únicas, un inmenso placer crece en quién recibe esas atenciones.
Las lamidas, que se sienten delirantes esa lengua húmeda y caliente recorriéndole solo el cuello, los labios besando cada centímetro de su piel, los chupetones que hace el espectro en su cuerpo.
Hace sentir al Dios una satisfacción única, no tanto por ser tratado de esa manera, sino que lo poco que queda de ese sentimiento dentro de este cuerpo, está desapareciendo.
Alone, olvidara ese amor por el Pegaso de esta época y se dejará consumir por el placer de otro hombre.
-Aaaahggg… Lo haces… Bien…- Le proporciona palabras de aliento, para que siga con ese trabajo tan bueno.
Escuchar la dulce voz de su Dios, es suficiente para calentar más al peli azulado, no será más brusco que eso, no se lo permite a sí mismo, pero… No parara de eso está consciente.
Después de seguir besando ese cuello, dejándole suaves marcas de chupetones, no lo puede negar.
Su mene y corazón le dictan que dejara algo que indique que fue él quien tomo el cuerpo de Hades, de su señor, de aquel a quien le ha entregado toda su lealtad, que jamás le fallara y daría su vida por él.
Bajando levemente por la clavícula, delineando con su lengua los huesos que se ven, está jugueteando con quién ha amado desde tiempos inmemorables.
Pero lo hace, y que puede ver de reojo como el pelinegro, arquea su espalda, echando su cabeza apara atrás, está disfrutándolo, eso le da una luz verde, que hace lo correcto, pero no por eso, deja de estar angustiándose por el momento que pronto llegara.
El siguiente objetivo del espectro son aquellos pezones rosados y erguidos que se aprecian, demasiado lindos, muy hermosos, apetecibles, que invitan a Kagaho a tocarlos, lamerlos, chuparlos.
Jamás se imaginaria que haría esta clases de cosas con su Dios, pero está allí, siendo el afortunado de tocarlo, de saciar esos deseos impuros con el cuerpo que debería solo representar el recipiente de su señor Hades, y lo está profanando.
-Mi… Señor…- Aun duda, en su puede hacerlo, no puede dejar que su mente se apague y solo gobiernen sus instintos -¿Puedo… Tocar sus…?- Esta sonrojado, caliente e hipnotizado por ese cuerpo y rostro, que le es imposible ignorar.
-Hazlo, se siente muy bien- El pelinegro, recostado en la cama, con las manos sobre su cabeza, dejando campo libre al espectro, sonríe, le parece algo adorable que le pida permiso, si ya ha estado tocándolo por mucho tempo.
Aunque al parecer del Dios del inframundo sería mejor que ya procediera a penetrar ese cuerpo, que ya no mostrara ningún tipo de resistencia, pues la conciencia y sentimientos del antiguo dueño, desaparecen con cada toque, y es magnificó.
Al saber que tiene permiso, sonríe ligeramente, su cuerpo ya está reaccionado, ahora con esto que hará, está más que listo para que su miembro pueda satisfacer a su señor, pero cree que aún debe esperar.
La túnica abierta, deja una clara vista del cuerpo deseado, tan blanco y puro, zonas rosas que se ven gloriosas y que deberían ser tocadas.
-Gracias…- Agradece ser aceptado y sin pensarlo más.
Los instintos, están dominando a Kagaho, pero está bien, su Dios lo acepta como es.
La boca del espectro, se encarga de tomar el pezón derecho, con sumo cuidado, lamiéndolo, mientras con la mano izquierda toca el de la misma dirección, con suavidad, lo aprieta, lo toca…
Es hermoso el tacto, el saborearlo, es perfecto, es mejor que cualquier cosa que hubiera probado o tocado antes.
Bueno el cuerpo de su señor es lo mejor que alguna vez tuvo la fortuna de tocar.
Lamiendo esos botones rozas con tranquilidad, cuidando la desesperación que con esto perdiera en cualquier momento esa oportunidad.
Su frenesí va aumentando, al escuchar como el pelinegro lo está disfrutando.
Su señor gime, no cubre esos sónicos obscenos en ningún instante, como deseando que sean escuchado por el espectro, para que siga más rápido, sea más brusco, lo que sea… Que lo haga disfrutar más.
Pero su espectro no puede hacerle daño alguno.
Con todo ese amor que posee Kagaho por su señor Hades, será delicado, cuidoso, incluso si su mente se dispersa por ser quien pruebe el maravilloso cuerpo de ese Dios, no desea dañarlo, de verdad teme hacerlo.
Sus lamidas son suaves, pero intensas, chupando con delicadeza los pezones, sintiendo el deseo que algo saliera de ellos, pero sabe que es imposible.
Piensa en tantas cosas al hacer esto.
"¿Lo disfrutará mi Señor Hades?
¿Por qué yo, fui el afortunado de hacerlo?
Sé que en esto no existe amor, pero… Desearía que lo fuera…
Lo amo Dios Hades, lo amo tanto, lo he deseado desde tiempos inmemorable… Yo… Quiero permanecer con usted siempre"
Eso pensamientos, esos deseos, los sentimientos que jamás creyó que pudieran hacerse realidad, vienen desde tiempos antiguos.
Son los recuerdos de Bennu, desde su primera existencia y que Kagaho ha hecho como suyos, pues el humano también está perdidamente enamorado de lo que Hades es.
Se aferrara a ese amor, quiere hacer disfrutar a su Dios todo lo que sea necesario, pero ya está también este espectro ansioso por alcanzar el mayor éxtasis, y si tiene esta oportunidad no debería desaprovecharla.
Puede sentir el miembro del Dios del inframundo chocando contra el propio.
Sus prendas ya son un estorbo, debería deshacerse de ellas… La presión es un delirio, pero desea hacerlo.
Jura que será cuidadoso, pero solo poder ver como su saliva cubre ese pezón que se encuentra ya un tanto rojo por el juguete de su boca y fijarse en el otro que también está así por el maltrato dado con su mano.
Sabe que debe complacer a ambos botones rosas.
Su boca ligeramente abierta, aun puede apreciar los gemidos dulces de su señor, quiere seguir dándole este placer obsceno, darle atención a ambos lados.
Es capturado el pezón algo rojizo por la caliente boca del otro, para aliviar ese sentir con su saliva y cuidado, mientras al que succiono hace pocos segundos es tocado por la mano derecha.
Sin embargo Hades, está ya cansado de eso, necesita ya terminar con esto de una vez, es un hombre paciente, pero ahora mismo, su cuerpo cosquillea, desea que este recipiente aprenda de una vez por todas su lugar.
Aunque lo esté disfrutando como un loco, sintiendo esas caricias, las lágrimas cayendo de esos ojos cristalizados, son clara señal que el placer solo aumenta, pero la desesperación por ser tomado se intensifica.
-¡BASTA KAGAHO!- El tono es firme, potente y demandante.
El espectro, de inmediato se detiene, para levantar su vista, estando sobre su señor, podría ser considerado como una falta de respeto, pero…
No sabe si sea necesario levantarse o no.
-Mi… Mi… Señor… Yo… Lo siento… Me…- Baja la mira, pues si sigue con lo que está haciendo, podría de nuevo perder la cordura, las mejillas rojizas de su Dios, el cuerpo dejado con sus marcas y besos, es una muestra de lo que se ha dejado llevar.
Se imagina que tal vez disgusto a su señor, por no haber sido cuidadoso, por lastimarlo de alguna forma, se siente culpable.
Pensando que cualquier castigo que este le dé, será insuficiente, está cometiendo un terrible pecado con quien ama, a quien debería estar respetando.
-Tardas demasiado- Son esas las palabras del pelinegro recostado, con una sonrisa de triunfo, como si fuera él quien debiera penetrar y no al revés.
Esas palabras, son primero incomprendidas por el espectro, levantando su cabeza ligeramente, para entenderlo.
-¿Cómo dice?-
-Si quiero que esto funcione, solo hazlo- Se incorpora, para lograr alcanzar el rostro del otro, dedicarle una sonrisa y de nuevo tomar otro beso del espectro que aun esta incrédulo de esta oportunidad.
En esta ocasión desde luego correspondió, se está tomando demasiados permisos este espectro, pero… Es inevitable que con esta acción, no desee abrazar a su señor Hades.
Desea profundizar el tan ansioso beso, pero inmediatamente se rompió muy rápidamente.
-Solo hazlo- Le dicta con un tono suave, y una sonrisa de deseo –Este cuerpo ya está preparado para que lo hagas, no necesitas ser cuidadoso, no me lastimaras a mí-
Entendiendo que esto es lo que preocupa a ese espectro, por eso ha sido tan cuidados, pero es suficiente.
-Pero…- Intenta protestar, sabe que lo siguiente, lo hará perder por completo el control.
-Lo deseas, y te doy la oportunidad, solo hazlo- Se acerca para susurrarle estas palabras, el aliento de ser boca chochando con el rostro del pelinegro –Vamos, disfrutarlo, sirve a tu Dios, y no te resistas-
Es una orden directa, Kagaho no la va a desobedecer, aunque temé lastimarlo de cualquier forma.
Incluso su cuerpo se lo pide a gritos, que lo hace, con el miembro esta aun atrapado entre sus ropas.
Y notando como su señor, está esperando por él, ver el cuerpo que estará por profanar, lo enciende, lo excita demasiado, no se podrá contener en esta ocasión, ya no más.
Rápidamente su cuerpo es despojado de su ropa, dejando ver ese pene, que tiene una buena longitud y grosor, goteando el líquido pre seminal, dispuesto a seguir adelante con su principal objetivo.
La túnica de su señor será manchada, pues este aun la lleva puesta pero abierta por completo, sin ese cinturón que ayuda para que la ropa no exponga el cuerpo de su dueño.
El pene del pelinegro es aun el de un joven adolecente, desde luego es más pequeño que el de un hombre, como él de ese espectro que, no puede evitar ver lo que está a su alcance.
No creía que vería una faceta de esta índole de su señor Hades, pero… Es todo parte del experimento que desea finalizar, del hecho de hacer que este cuerpo olvide el amor que aun profesa por el Pegaso, para que su Dios tenga total control de este.
Las piernas abiertas sobre la cama, invitando al otro a penetrar ese lugar, aun virginal, rosado y sumamente estrecho, desde luego nadie había siquiera tocado ese cuerpo, y un espectro lo hará.
-No lo dudes, haz feliz a tu Dios-
-Si…- Estará en un trance de sus propis sentimientos, pero la mirada con un destello de lujuria, la boca ligeramente abierta, deseando solo ingresar ya en ese cuerpo.
No tarda más que unos segundos en colocarse de nueva cuenta sobre el pelinegro, el cual de nuevo esta recostado, dejando sus manos arriba, mirando de reojo hacia abajo, admirando como el otro se encuentra.
-No se necesitara preparación alguna- indica esto, con una gentil sonrisa –Podrá soportarlo-
Con un poco de duda en su corazón, sabe que esto herirá el cuerpo de su señor, pero… Si es una orden directa de su Dios, debe obedecer, sin rechistar.
-Como desee…- Aun intenta ser firme con esto y actuar como un espectro solemne, aunque esto se va abajo, en el instante que su pene húmedo, duro y palpitante, empieza a rozar esa entrada.
Kagaho, frunce el ceño, es demasiado bueno el sentir solo tocar ligeramente esa zona, es suave al tacto, y de pensar que penetrará hasta el fondo, lo comienza excitar de nueva cuenta.
Debe ser firme en lo que procederá a hacer.
Sujeta las pálidas piernas, ese roce de piel cálida, puede notar como sus manos hacen presión, es suficiente para darle el valor necesario y comienza a empujar.
Se acerca más, de a poco su miembro inicia la penetración, ese cuerpo una vez inocente antes de ser poseído por el mismo Dios del inframundo, conoce el placer carnal, del cual los humanos son unos depravados al experimentarlo a diario.
Kagaho, puede sentir los pliegues del ano, como lo envuelven, es demasiado estrecho, lo hace sentir tan bien, su respiración se vuelve agitada, como si le faltará, el sudor se presenta, mas sigue firme en sujetar esas piernas que le sirven de apoyo.
Puede ver como su falo es devorado por el cuerpo de su señor.
Además que ver al recipiente de Hades, arquear la espalda con desesperación, las lágrimas corriendo por esas rojizas mejillas, los gritos de excitación con algo de dolor se pueden apreciar, las manos apretando las blancas sabanas y los dedos encogiéndose.
La primera vez, siempre será dolorosa, pero es algo que ya está pasando.
Está haciendo sufrir a su Dios, lo puede ver, aprieta sus dientes, es muy bueno este sentir, pero… no puede evitar el malestar en su ser, porque está hiriendo a quién ama.
-¿Mi… Mi señor…?- En este punto, cree que es mejor salir y dejar esto así, no puede siquiera moverse, por temer herir más.
-Haaarrgg… Ka… Ga... Ho… Mue… Vete…- Le dicta estas palaras, entrecortadas, con la voz de éxtasis total, es simplemente magnifico, ese intruso.
Y más porque nota como la débil conciencia de Alone, va muriendo de apoco…
Siente ese sufrimiento, por permitir que alguien más lo tome de esa forma.
Entiende como fusionan los humanos y sus pensamientos, las reversas que tienen.
De solo entregarse a quién aman y en aquella época, que lo haga antes de confesar tu amor, con alguien que no amas, seas obligado o no.
Es una vergüenza completa, que hará sentirse sucio y mal ese joven.
De nuevo una orden que no puede desobedecer no quiera hacerlo, deseaba seguir hasta las últimas consecuencias con su señor.
Asiente solemnemente, sus ojos fijos en el cuerpo que marcó con sus besos y chupetones, nota como el miembro de su señor, esta erguido, dejando salir liquido pre seminal.
Significa que lo está disfrutando, que lo excita.
Entonces no parara, pero será cuidadoso en el momento de seguir.
Sin más empieza el vaivenee, primero saliendo con cuidado, y luego volviendo a entrar.
Unas penetraciones muy suaves, sintiéndose gloriosas para el espectro y quien es el recipiente de Hades, al principio sufriéndolas, pero de a poco… Las sensaciones que le proporcionan son demasiado satisfactorias.
Jadeante es la voz del pelinegro, su cuerpo aún se está tensando, pero de a poco se relaja, dejando escapar gemidos sonoros por toda la habitación.
Kagaho, sabe lo que hace corrompe el cuerpo de Alone, el recipiente de su señor Hades, es suyo ahora… Solo porque lo penetra con cuidado, pero se vuelve suyo solo por estos instantes.
Es magnífico hacer algo así.
Por años creyó que no tendría ni siquiera oportunidad de ser visto de esa forma por su señor Hades, y ahora en este instante está haciendo más que cualquier espectro pudiera.
Disfruta escuchar ese choque de pieles, el sudor de ambos cuerpos combinándose, los fluidos de ambos saliendo de a poco de esa entrada.
Siente que está llegando al éxtasis, con cada estocada brindada a su señor, es apretada esa zona, es cálida, es preciosa.
Su Dios lo es todo para él, le obedece ciegamente en cualquier cosa que desee o necesite y esta no será la excepción.
Así pasan el tiempo, Kagaho sigue entrando y saliendo de esa entrada, que previamente nadie se había atrevido a tocar.
Pero eso quedo en el pasado, ese espectro disfruta el trabajo que su señor le confirió.
Por otra parte, el cuerpo reacciona a como debe ser, los espasmo en su cuerpo, como se relaja y tensa de repente, sus lágrimas caen, los gemidos, no son de la misma voz del Dios del inframundo, pero el cabello y ojos no han cambiado a cómo eran originalmente.
Solo es lo que queda de conciencia de Alone, sintiendo que su ser ya no podrá jamás volver a como era antes.
Incluso, podía haber seguido luchando contra el mismo Dios de inframundo, pero… Con esto, con ser tomado y violado por un espectro, los rastros de lo que aún queda de su mente, trae los dulces recuerdos que paso con Tenma.
Que jamás podrá volver a vivir, pues ahora… Su cuerpo, no solo pertenece a Hades como recipiente, si no que Kagaho lo ha tomado también de otra forma.
De la manera que deseaba que solo una sola persona hiciera, por ahora… Eso jamás pasaría.
Se rinde, no luchara más, esos sentimientos se sienten destruidos, por no haber sido más fuerte, por no evitar que Hades hablará por él, y que dejara que su cuerpo se moviera por el placer.
Es derrotado por la realidad, por lo que ahora constara su alrededor.
Jamás volverá con quien ama, nunca se lo lograra decir, su corazón sangra de dolor, pero su cuerpo se inunda de un terrible placer que lo atormenta y asusta.
Solo cierra sus ojos, aceptando que es inútil resistirse, que ahora era mejor morir, y olvidar que su cuerpo perteneció a alguien que no ama.
Y por lo tanto esto significaría que el plan de Hades funcionó, logro destruir lo poco que aún lo obstaculizaba de tener a su recipiente por completo a su disposición.
Pero dejaría que aun disfrutara, esas estocadas que el espectro dedica con tanta devoción.
Bennu, esta solo concentrado en seguir con su labor, pero durante esta labor besa esas torneadas piernas, al tenerlas levantadas a su alcance, las caricias y lame.
Está obsesionado con solo devorar esa piel, pero sin olvidar empujar su miembro más adentro, que su pelvis toque a su señor.
El continuo vaiveneé, es un éxtasis de proporciones inmensurables, pero de a poco llega ese instante en donde se liberará su semen dentro de ese cuerpo.
No sabe si sea correcto hacerlo, pero es imposible resistirse, está a nada de alcanzar ese clímax tan deseado, y aun quiere seguir mucho más.
-Arrrggg… Mi señor… No creo… Poder… Resistir más…- Le indica, que sería mejor para el bien de su señor, no dejar salir ese caliente semen dentro.
Pero la repuesta que el da es otra.
-Hazlo Kagaho, dentro de tu señor- Sonríe de forma lasciva, de nuevo ese tono de quien el espectro ama, es la recompensa que le da a su fiel sirviente, por servirle.
Ahora es verdad, de la pobre conciencia de Alone no queda nada… Sus sentimientos siendo lo único que aún ataba a este cuerpo a ese mundo, que no permitían al Dios del inframundo tomar por completo control.
Y ahora, ya nada puede evitar que Hades prosiga sin interrupciones internas.
Por eso, dejara que su espectro termine en su interior, como último acto de satisfacción y una sublime recompensa.
Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me a robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?
Aquí la ultima actualización del día de hoy, y es para el terrón de azúcar que esta cumpliendo algunos añitos.
Así que deben de darle una linda felicitación a KuranKaname001.
Espero que disfrutes el regalo que te he hecho.
Y claro que te vamos a cantar la canción de la familia terrón de azúcar, así que disfrútalo de antemano y felicidades.
Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades KuranKaname001 tu cumpleaños si que si.
Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades KuranKaname001 tu cumpleaños si que si.
Así que disfrútalo y obvio compártelo con tus hermanas terrones por favor.
Sin mas a responder los hermosos comentarios de mis terrones de azúcar:
KuranKaname001: Jajajajaj disfruta el capitulo de hoy, gracias siempre voy a tener buenos fic's de calidad. jajajaj duro contra el muro y sumiso contra el piso.
Anonimus1000days: Así es, Alone... Su corazón, pertenece a Tenma, pero su cuerpo ahora pertenecen a otro... Y eso causa dolor y estragos a su mente, que ha perdido.
Muy atrevido a mi parecer.
Jajjaajajaja escupe de nuevo tu atole y juguito, jajajajajaja
Esto estuvo fuerte.
Hasta hoy y hasta mañana mi terrón de azúcar.
Bueno mis terrones de azúcar, mil gracias por apoyarme, estar conmigo siempre, leyendo mis locuritas.
La verdad que lo agradezco tanto, siempre seré muy feliz por esto.
Y por favor sigan cuidándose, no se expongan y hagan caso a las medidas de higiene.
Los quiero mucho.
Ammu se va.
