El Guardián del Hermano.


Capítulo 7: Baile.


Harry despertó viendo una figura borrosa a lado suyo, intento agarrar su varita, pero noto que no estaba en sus bolsillos, de hecho, no tenía bolsillos

–Tranquilo señor Potter –escucho a una vez ordenar –Soy yo, Madame Pomfrey.

Ella tranquilamente coloco los lentes en su cara, Harry entonces confirmo que estaba solo con la medimaga de la escuela y que estaba en una camilla del hospital.

–¿Cuánto tiempo estuve aquí? –pregunto Harry.

–Dos días –respondió ella –tuvo suerte, señor Potter, su encuentro con ese fantasma pudo terminar peor, parece que intento drenar su alma cuando lo atrapo.

–¿Drenar mi alma? –pregunto Harry.

–Si… nunca había visto algo así– contó ella –el director dice que debió ser en el momento que te atrapo con esos árboles…

"Robo mi energía ¿la habrá usado para convertir esos árboles en esos monstruos de madera?" se preguntó Harry.

–…, le aconsejaría no realizar actos físicos muy exigentes ni hechizos mas poderosos que un Lumos durante un tiempo –dijo ella. –Les informe a sus profesores. También tendrá que tomar un trago de esta poción cada mañana –le paso una botella grande con un líquido purpura espeso.


Lo único que Harry quería era volver a tener clases normales, pero parece que eso era mucho pedir.

Su tapadera no había sido solo descubierta, había sido destrozada más allá del punto de reparación, no podía atribuirlo a la suerte, no podía decir que le salía bien un hechizo poderoso en particular, había sido descubierto, ya no servía como guardián.

Las personas que antes habían pedido explicaciones no estaban por ningún lado. No podía decir que extrañaba a Montague o al profesor Snape, aunque le gustaría hablar con Montague pare ver si se deshizo del hechizo que Harry puso sobre el en venganza por decir esas mentiras a Skeeter, cada vez que iría al baño el inodoro salpicaría en su pierna, sin excepción.

Pero realmente quería ver a Tom, aunque no tenía nada que decir.

Casi extrañaba a Fleur acusándolo de ser un mentiroso… casi.

Con su poder enormemente disminuido hasta quien sabe cuándo, sus conocidos no dirigiéndole la palabra y todos conociendo de lo que era capaz nunca se había sentido tan atrapado, ni siquiera cuando fue capturado por Quirrel.

Harry tampoco sabia si quería volver a casa para navidad, no tenia idea que era lo que sus padres pusieron en esa vociferadora, siendo que la silencio tan pronto la vio, (lo que le pareció una reacción normal de un joven de dieciséis)

Después de salir de sus clases de historia de la magia se encontró a la prefecta de su año, Queenie Greengrass en la puerta.

–Harry, el profesor Snape quiere verte en su oficina –le dijo.

Harry fue a las mazmorras a ver que era lo que quería el profesor Snape.

Toco la puerta y una vez el profesor le permitió, entró.

Como el resto de las mazmorras la oficina de Snape, era cavernosa, húmeda y fría, a Harry no le sorprendería descubrir que ahí Salazar Slytherin encerraba a sus enemigos a pudrirse.

–¿Quería verme profesor?

–Obviamente, Potter –respondió el profesor Snape. –. Como campeón del torneo de los tres magos tengo que informarle sobre que deberá abrir el baile de invierno.

–Yo no bailo –respondió Harry.

–No recuerdo haberte preguntado –afirmo Snape –Como es la tradición, al menos que quiera humillar a la escuela, usted bailara.

La respuesta salió de inmediato de los labios de Harry.

–No.

Harry podía sentir la tensión en el aire, mientras los negros ojos del profesor Snape lo perforaban.

–¿Como dijo? –inquirió Snape.

–Dije que no –respondió firmemente –, no me metí al torneo y no iré al baile.

–Lo hará si no quiere recibir un castigo –Amenazo Snape

–Supongo que estoy castigado –contesto Harry.

–Todos los sábados del siguiente mes –agrego el profesor Snape.

–Está bien, supongo… Señor debería revisarse esa vena en su frente.

Habiendo acordado todo Harry estaba a punto de irse cuando el profesor decidió agregar algo.

–Y su hermano será echado del equipo de quidditch –dijo con voz helada.

Harry se congelo en la puerta.

–Usted no puede hacer eso –respondió Harry.

–Puedo encontrar la forma –respondió con alegría –, después de todo el siempre ha sido propenso a romper las reglas, solo imagínelo, Thomas Potter tiene otro altercado con el señor Malfoy y en resultado un profesor, dándose cuenta que los castigos no servirán de nada, le quita lo que más le importa.

Los ojos verdes y negros se cruzaron con ferocidad por varios segundos de silencio.

–Solo tengo que abrir el baile –aclaro Harry.

–Y encontrar pareja –agrego Snape.

Unos segundos de tenso silencio después Harry se retiro de la oficina de Snape.


–No pensé que me pedirías consejos románticos, cachorro –dijo Sirius esa noche cuando le habló a través del espejo que le dio en su cumpleaños.

Harry se inclinó un poco –No me llames cachorro, y si tengo unas preguntas

–Lo que quieras.

–¿Como invito a una chica a salir?

Sirius río –Es muy simple, solo te acercas y le dices "¿Quieres salir contigo?" y listo.

–¿Solo eso? –pregunto Harry desconcertado.

–Solo eso.

–¿No tengo que darle chocolates o flores o…?

–Si una chica necesita chocolates y flores para salir contigo estas gastando el tiempo –respondió Sirius –significa que ella realmente no quiere salir contigo, o se cree mucho, de todas formas, es un desperdicio.

Harry asintió, deseaba tener papel a mano para anotar todo lo que le dijera su padrino.

–Por cierto, Canuto, que tan enojados estaban mis padres por lo del torneo.

Sirius lo considero un instante–Te recomendaría no estar en casa esta navidad.

"Como si tuviera otra opción"

–A propósito, deberías aclararle a tu madre que en realidad no estas saliendo con la francesa, no se si corazón aguantara más –comento en broma.

–¿Que tendría de malo? –pregunto Harry genuinamente confundido.

–A las madres no les suele gustar que sus hijos salgan con chicas tan lindas, ni idea de porque será. Tal vez crean que son vanas y superficiales, al revés es lo mismo –agrego Sirius –no sabes cuantos hechizos tuve que evitar en mi adolescencia.

–Gracias Sirius.

En cuanto termino la "comunicación" Harry guardo el espejo en su baúl junto a su cama y se fue a dormir.

Harry despertó al día siguiente decido a invitar a la primera chica que se encontrara.


–Entonces, Ced ¿Ya pensaste a quien invitagas al baile? –pregunto Fleur a Cedric en el almuerzo. Ella puso su atención en el porque era el chico mas guapo en Hogwarts, alto, castaño y con ojos azules. Ser otro de los campeones solo aumentaba el atractivo.

–En realidad, si –respondió con una sonrisa de sus perfectos dientes blancos.

Fleur soltó una risita –¿Puedo sabeg de quien se trata?

El negó con la cabeza –Aun no, no la he invitado y quiere hacerlo en grande.

Fleur soltó su encanto veela, para un cuarto veela como ella lo único que puede hacer es realzar su belleza, que bien porque no le parece correcto volver a los hombres idiotas para tener una cita (no le parece correcto con magia, ya tiene ese efecto).

Lo malo del encanto es que tiene que hacer esfuerzo consciente para mantenerlo apagado, pero en ese momento no era necesario.

Fleur coloco su mano en el hombro de Cedric y se acercó a su rostro –Apuesto que digá que sí.

Se lo quedo viendo unos instantes, estaban muy cerca, ella cerro los ojos…

–¡Hola, Harry! –Saludo Cedric, Fleur casi cayo hacia adelante al inclinarse tanto.

–¡Hey, Cedric! –respondió Potter, Fleur no pudo evitar pensar en la prueba anterior y en ese Patronus… ya se había dicho que era imposible que haya sido él, no solo era muy improbable que los dos se hayan encontrado en Francia hace años, también difícilmente el hubiera realizado un hechizo tan complejo a tan corta edad… aunque invoco esos golems…

–¿Has visto a Patricia Stimpson? –Pregunto Potter.

–Creo que esta en clase de pociones –respondió Cedric –¿Por?

–La invitare –respondió –adios Cedric… adieu Fleur –agrego como si recién se diera cuanta que ella estaba ahí.


–Me sorprende que me hayas invitado, Harry –comentó la atractiva prefecta de Hufflepuff en un aula vacía –, no hablamos mucho.

Patricia Stimpson o "Trixie" como había insistido en ser llamada era una bruja de la edad de Harry, con pelo negro trenzado y ojos ámbar, fue la primera en clase durante un tiempo lo que la termino convirtiendo en la prefecta de Hufflepuff de sexto año.

–Pero para eso son los bailes ¿no? –respondió Harry –para conocer gente y divertirse.

Una pequeña sonrisa se formo en sus labios –Tienes razón, entonces… me concede esta pieza –y extendió su mano a Harry.

–Se supone que yo digo eso –respondió Harry.

–Cállate y baila –respondió ella juguetonamente y comenzaron a practicar.


Vestido con su túnica verde botella Harry esperaba en la puerta de la sala común de Hufflepuff, un conjunto de barriles.

Ella paso por la puerta y Harry se quedó sin palabras, estaba hermosa, iba con una túnica turquesa con un lazó blanco en la cintura.

–Te hice esperar mucho… ¿Harry?

–Para nada –respondió en cuanto logro recuperar los sentidos –. Estas muy linda.

Ella sonrió –Gracias, tu también.

Juntos bajaron al vestíbulo, donde esperaban todos a que dieran las ocho en punto. Vio a su hermano junto a una chica de pelo negro, piel cobriza y vestido rosa. Warrington iba con Queenie, y Bletchley con una chica de Beauxbatons. Montague no había conseguido a nadie.

Cedric había ido con Cho Chang, la buscadora de Ravenclaw y Fleur, que vestía una túnica plateada, con Roger Davies el capitán del equipo de Ravenclaw, que definitivamente estaba babeando. Por su parte Krum estaba yendo con una chica de túnica azul… ¿Esa era Hermione Granger? Tan arreglada se veía bastante diferente, pero habría que ser bastante estúpido para no reconocer a una chica solo porque este peinado y con un vestido.

Pasaron bajo cientos de pequeñas hadas que adornaban el comedor. Y fueron al gran comedor, los muros estaban recubiertos de escarcha y cientos de guirnaldas de muérdago y hiedra cruzaban el techo negro lleno de estrellas.

La profesora McGonagall les indico que comenzaran a bailar.

Fleur bailaba junto a Davies, que estaba con cara pasmada, aturdido por ser la suerte de ser la pareja de Fleur, y Krum bailaba con Hermione. Y Cedric con Cho, Harry hizo su mejor esfuerzo para bailar lo mejor que pudo con Trixie, después de unos minutos habían terminado y en la opinión de Harry lo habían hecho bastante bien.

Cuando los campeones terminaron ellos se sentaron en las pocas sillas vacías que quedaban. Harry entonces tuvo la oportunidad de hablar con su hermano.

–¿Como estas? hermano–pregunto intentando parecer casual.

–Hola Harry –respondió él.

–No nos hemos presentado, soy Harry –le dijo a la cita de su hermano.

–Soy Parvati Patil –se presentó.

Mientras tanto Trixie y Tom se presentaban.

Charlaron un poco y se pusieron al día, aparentemente Dumbledore le había pedido que no molestara a Harry con preguntas y por eso no le había hablado.

"Pero pudiste saludarme" pensó Harry antes de recibir un dolor de cabeza.

Fleur mientras tanto paso la cena criticando Hogwarts mientras Davies parecía demasiado ocupado viéndola, como escuchar lo que dice.

Bailo unas cuantas canciones más con Trixie, pero sus pies habían comenzado a doler después de un rato.

–Podemos volver a la sentarnos –pidió Harry –¿por favor?

Volvieron a la mesa y Trixie aprovecho que Fleur había ido al baño para hacer algunas preguntas a Roger Davies.

–¿Te gusta Hogwarts?

–Mucho.

–¿Te molestaría que alguien lo insultara?

–Me enfurecería.

–¿Te das cuenta que tu cita lo ha estado haciendo toda la noche? ¿Verdad?

–¿Lo hizo?

"Por Merlín, es un estúpido" pensó Harry, sentiría pena por Fleur si no fuera que parecía agradarle.

–¿Tienes algo por las francesas?

–No que yo sepa.

–¿Rubias? –pregunto Harry.

–Están bien.

–¿Las chicas que te tratan mal? –pregunto Trixie después.

–No creó.


Mientras tanto en unos arbustos Tom Potter se besaba con su pareja de baile.

Después de los que unos treinta segundos, se separo de ella y miro su hombro detenidamente.

–Parvati… –dijo un poco preocupado.

–¿Sí? –pregunto sonriente.

–Tienes un insecto en tu hombro.

Parvati rápidamente reviso su hombro derecho y comenzó a gritar.

–¡AH! ¡AH! ¡QUITALO! ¡QUITALO!

–Shh, vas a hacer que Snape nos encuentre…

–¡MATALO! ¡MATALO!

–Tranquila… solo lo golpeare con el dedo para no lastimarlo…

Eso hizo, el escarabajo cayo en el piso a unos metros de ahí, antes de emprender vuelo fue pisado inadvertidamente por Hagrid que paseaba junto a Madame Maxime.


Nota del autor: Aunque dije que pensaba hacer esta historia OC/Ginny, es principalmente por las similitudes con el Harry canon, sin embargo, como pueden ver por como termino su cita, no son iguales y nada está definido para esos os, por el momento la única pareja definida es el eventual Fleur/Harry.

Recuerden revisar, eso realmente me encantaría.