Y así se quedaron, abrazados mientras la música sonaba de fondo y ambos se sentían realmente felices, en paz. Llegó la hora de separarse y se miraron, más bien, Onoda le miró mientras Midousuji desviaba su vista a otro punto de la habitación, el escalador besó la mejilla de su novio y luego le tomó del rostro para besar su frente.

—Kimo, deja eso.

—¿Por qué? —preguntó mientras le veía con una expresión triste.

—Es asqueroso...

—Perdón... —Onoda sonrió—. Solo quería demostrarte mis sentimientos...

—Sakamichi...

En cuanto pronunció su nombre se acercó a su frente y la besó sorprendiendo a Onoda, luego le besó en los labios, por último tapó los ojos del escalador evitando que lo viera.

—Midousuji-kun —dijo sonrojado.

—Manten los ojos cerrados, te traje un regalo.

—S-Sí —Onoda escuchó los pasos de Midousuji alejarse, mantuvo sus ojos fuertemente cerrados esperando su regreso.

—Estoy aquí, extiende los brazos. —Onoda obedeció de inmediato y dejó el regalo en sus manos—. Abre los ojos.

—Wooaa, M-M-Midousuji-kun, esto es... —dijo impresionado al ver el CD con el sountrack de la película de Love Hime—. ¡No puedo creerlo, gracias, muchas gracias! —exclamó con brillos en los ojos.

—No es nada. —Rascó su nuca mientras se le escapaba una sonrisa de lo más coqueta.

—Midousuji-kun... cómo podré pagarte esto —dijo Onoda a punto de llorar de felicidad.

—Haa, me pregunto con qué... —dijo mirando a la nada.

—¡Lo que sea!

—Me lo pensaré. —Rió con suavidad.

Todo fue risas y diversión hasta que tuvo que ser obligado por Onoda a escuchar el famoso CD y a bailar la canción de la película con él, al menos ambos lo hacían un poco mejor y evitaron pisarse a toda costa. Para Midousuji era asqueroso, totalmente repugnante tener que estar en esa posición y en esa situación, bailando como si esto se tratara de alguna película romántica, solo pensarlo le revolvía el estómago. Pero ver la sonrisa de Onoda y la alegría en sus ojos le aliviaba el alma, en él veía el color amarillo, ese color que lo deja vacío y que lo llena a la vez de toda esa paz. El color de la felicidad.