Habían iniciado su relación hace algunas semanas y aún nadie lo sabía, absolutamente nadie, era como un secreto que tenían Midousuji y Onoda, era lo mejor considerando lo que pensaba el resto del equipo sobre Akira, además suelen sobreproteger mucho al de gafas por lo inocente e ingenuo que es en algunos temas. Pero una noche ese secreto se derrumbó por completo.

Esa noche Kinjou y Tadokoro organizaron una reunión con la idea de juntar al equipo una vez más, por desgracia no estaba Makishima, pero no por eso fue menos divertido. Tadokoro y Naruko fueron los primeros en beber en exceso compitiendo por quién se emborrachaba primero, Teshima hablaba con Aoyagi mientras comía de los aperitivos, Imaizumi charlaba con Kaburagi sobre ciclismo, el resto de miembros que no eran titulares se encontraban en la cocina y, por último, Onoda se mantenía un poco al margen sin saber que decir y con su vaso de alcohol medio vacío mientras su novio, Midousuji, también se mantenía callado, incómodo, asqueado de estar rodeado de zakus. Creyó llevarse mejor con ellos, pero ahora que están juntos con los que antes eran sus senpai, se volvían insoportables... Gritos, risas escandalosas, canciones random cantadas horriblemente, de verdad le daban ganas de arrancarse la piel por la desesperación.

—Sakamichi.

—Dime, Midousuji-kun —le dijo con una sonrisa, Akira le miró con desagrado.

—Kimo, ¿estás ebrio?

—Ah, no, quiero decir, no lo sé, me siento más relajado que de costumbre y tengo calor...

—No tienes remedio, Ahomichi. —Onoda sonrió y le abrazó de sorpresa.

—¡Midousuji-kun! —exclamó alertando a todos.

—¡Ahomichi, sepárate! —gritó con el ceño fruncido y las mejillas coloradas, trató de empujarlo sin éxito, quién diría que Onoda borracho tiene más fuerza.

—¡No quiero, Midousuji-kun! ¡Te quiero tanto!

—¡PIGGII! —exclamó empujándolo tan fuerte que cayó encima de Imaizumi—, Kimoimichi. —Onoda rio feliz como si le hubieran contado un chiste y Midousuji palmeó su frente incómodo.

Se creó un silencio tan incómodo que Midousuji no soportaba, no podía dejar de maldecir a Sakamichi por ser tan descuidado, ahora lo dejó a él solo con este problema y el de gafas no dejaba de reír ni de sonreír como si estuviera en otra dimensión.

—¿Que significa esto? Algo raro está pasando aquí —dijo Naruko con desconfianza y manejando un tono extraño por estar al borde del coma etílico.

—Si es alguna de tus estupideces y quieres dañar a Onoda será sobre mi cadáver —dijo Imaizumi, Midousuji se burló en su cara.

—Yowaizumi-kun, eres un asco tratando a tu amigo como si fuera un niño —dijo y rio, luego jaló del brazo a Onoda poniéndolo a su lado—, me da igual si están de acuerdo o no, pero ambos estamos juntos.

—¡¿EEHH?! —exclamaron todos al unísono.

—¡M-Midousuji-kun! Perdón, por mi culpa... —dijo con un tono de voz extraño por todo el alcohol en su sangre.

—Sakamichi, tarde o temprano lo iban a saber —le dijo frunciendo un poco el ceño.

—...Es verdad, pero... chicos, lo lamento mucho... no quería ocultarlo, pero pensé que se molestarían conmigo, ya saben... no se llevan muy bien con Midousuji-kun.

—No estamos molestos contigo —dijo Naruko mientras todos asentían.

—No podríamos enojarnos contigo —añadió Teshima.

—Onoda, es normal que tengas pareja, no seas tan tímido —comentó Tadokoro con una sonrisa—, a mi me da igual si es otro hombre.

—No conozco mucho a Midousuji, pero no me opongo —dijo Kaburagi.

—Por mi está bien —dijo Aoyagi.

—Es parte de crecer, Midousuji parece ser el indicado para ti —dijo Kinjou con sus típicos consejos.

—Yo admito que no estoy de acuerdo...

—Ey, estrella, no lo arruines.

—Dejame terminar, no estoy de acuerdo con que estés con alguien como Midousuji, pero tendré que aceptarlo, eres mi amigo, si eres feliz está bien —terminó Imaizumi y Onoda le miró con los ojos llorosos.

—Imaizumi-kun —le llamó emocionado, estaba a punto de lanzarse a abrazarlo, pero Midousuji le detuvo de forma sutil agarrándole de la ropa y mirando al otro con cara de pocos amigos —Midousuji-kun... Perdón, me emocioné de más, gracias Imaizumi-kun.

—No es nada, al parecer tu novio se puso algo celoso —mencionó con la intención de molestarle.

—Kimo, ¿celoso yo? —dijo mientras se avalanzó hacia delante casi pegando su cara al otro y sacó su lengua, sonriendo—, querrás decir que tú lo parecías hace un minuto, pobrecito Yowaizumi-kun, ¿tienes celos de que yo este con Onoda?

—¡No digas tonterías! Solo lo protejo de ti —le señaló con el dedo picándole el pecho.

—Haa, kimoi, eso nadie te lo cree, eres asqueroso.

—¡O-Oigan! Ya paren, enserio —dijo Onoda nervioso estando debajo y entremedio de ambos—, por favor, no quiero que peleemos, Imaizumi-kun, no es necesario que te preocupes tanto por mi, Midousuji-kun, te dije que hicieras el esfuerzo de no molestarlo —habló desesperado, quería detener este problema que se había creado de la nada, y que los demás decidieron ignorar pues siempre solían discutir entre ellos.

—Bien —dijo Midousuji de mala gana borrando la sonrisa de su rostro y volvió a su lugar.

—Onoda, solo te estoy defendiendo.

—¡No necesito que me defiendas! —exclamó con el ceño fruncido y de inmediato se arrepintió—, ah perdón, no quise decirlo así... ¡Pero es la verdad! Midousuji y yo somos una p-pareja, si tenemos problemas lo resolveremos entre nosotros, no te metas por favor, Imaizumi-kun —dijo haciendo una pequeña reverencia y se pegó a Midousuji terminando la charla.

—La cagaste —comentó Naruko de la nada.

—Cállate —contestó de inmediato Imaizumi cuando salió del trance.

Onoda muy rápido olvidó todo el tema, se veía feliz charlando con Midousuji sobre Love Hime o el anime de temporada. Sí, es feliz junto a él.