Las llamas quemaban todo a su pasó reduciendo todo a cenizas. Nadie lo podía escuchar. Él miró una figura oscura tan familiar, él reconoció esa persona y cuando trató de gritar no podía hacerlo. Su voz no podía salir de su boca, trató de volverlo hacer pero no hubo repuesta, algo evitaba que gritara, quería gritar, hacer que esa persona se detuviera. Comenzó a correr yendo detrás de la figura, no supo cuanto tiempo corrió pero no podía alcanzarlo, no importaba el esfuerzo que hacia, era imposible lograrlo alcanzar. Las llamas crecieron ya no había nada solo fuego. No había un fin podía sentir como el humo le afectaba a sus pulmones. Quiso seguirle el paso pero llegó a su límite, se cayó de rodillas tosiendo fuertemente, podía sentir las lágrimas caer en sus ojos. Estiro su brazo hacia su padre... Su padre comenzó a desaparecer entre las llamas... "¡Padre! ¡Padre, no te vayas! ¡Padre!" Gritó con toda su fuerza que le permitió sus pulmones. Vio como la figura se detuvo y miró hacía él. Pronto escombros cayeron hacia la figura. "¡PAPÁAA!" Gritó con total desesperación. Abrió los ojos con lágrimas acumuladas a sus ojos, cuando sintió su brazo izquierdo estirado hacia arriba del techo. Quiso tomar algo que no pudo agarrar, ni salvar. Sus ojos miraban hacia la oscuridad, no podía ver nada. La oscuridad dominaba la habitación, se levantó del suelo duro y frío. Eduardo se comenzó a limpiar las lágrimas con sus manos, en este momento se encontraba muy confundido. Vagamente pudo recordar que abrieron la caja musical y... Nada... No podía recordar nada más. Solo que Sasha...
Al recordar alas chicas a su corazón comenzó a latir con fuerza. "¿¡Sasha!?" Gritó llamando a su amiga. Su gritó de su voz se multiplicó escuchándose por todo el lugar. No hubo repuesta alguna por su gritó. "¡Anne!" Volvió a gritar llamando a su otra amiga. "¡Marcy!" Y Ninguna respuesta por parte Marcy, miró a su alrededor en busca de luz, podía sentir como la desesperación infundía en su cuerpo. Su corazón comenzó a latir locamente, casi perdió el control sin embargo sabía que perder la calma no lo iba ayudar.
Cálmate, cálmate y piensa... No es momento para desesperarme...
Tenía que calmarse lo sabía. Respiró profundamente para después sacar el aire de sus pulmones. Ahora se sentía mucho mejor, volviendo a tener en control su sentimientos comenzó analizar el lugar que estaba. No había luz absoluta en este lugar así lo que primero que hizo fue agarrar su mochila y sacar su dispositivo móvil, por una parte agradecía mucho que Sasha lo hubiera presionado que aceptará el teléfono. Eduardo puso su huella digital abriendo la pantalla de bloqueo del celular lo primero que vio en la pantalla de inicio de su celular era una foto en grupo en la playa de los Ángeles con ellas, pero eso no le importó mucho ya que entró en llamadas y buscó el contacto de Sasha.
Presionó a su contacto agregado en favoritos ya que Sasha se puso en contactos favoritos. El número inicio a marcar, podía escuchar como la llamada iniciaba... Para Eduardo ese lapso de segundos para que la llamada conectará le parecía muy largos.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde"
En su voz salió un involuntariamente: "¿Qué?" Tragó saliva nervioso pero no perdió la calma, volvió a llamar. "El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" ¿Esto era alguna de broma pesada de Sasha para alguno de sus videos de sus redes sociales? Negó con la cabeza, ella no haría eso con él. Volvió a marcar.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Apretó los dientes frustrado, tal vez Sasha tenía el teléfono en modo silencio o apagado... Debería márcale a Anne, ella siempre contestaba. Y busco en sus contactos a Anne encontrado la y marcándole. La llamada inició...
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde"
"Vamos Anne contesta..." Movía su pierna pisando el suelo con desesperación.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde"
"No soy bueno para las bromas Anne..." Dijo rascándose el cabello con su mano libre. ¡Marcy! Pensó en su cabeza, ella siempre estaba pendiente en su celular por sus videojuegos móviles que tenía descargado. Volvió a buscar su contacto y llamó.
"Vamos, vamos Marcy... Contesta por favor" Si esto es otra de esas pesadillas que soñaba esperaba poder despertar lo más pronto posible.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Tragó más saliva y el sudor frío comenzaba a bajar en frente. No tenía que perder la esperanza. Volvió a marcar.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Marco otra vez.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Y otra.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Y otra.
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde" Y otra nuevamente.
"Por favor contesta..."
"El número que marcó no está disponible. O está fuera de área, por favor llamar mas tarde"
Y finalmente la última... Nadie de las chicas contestaba a su llamada. Cerró los ojos. Se sentía frustrado, enojado, desesperado, en este momento sentía varios sentimientos tan negativos pero estaba muy preocupado por ellas más que nada en el mundo. Se sentía miserable por no haberlas cuidado de alguna manera, por no estar junto con ellas. Estaba volviendo a fallar, les falló...
¡Eres un inútil! ¡No puedes hacer algo bien! ¿¡Por qué no estás con ellas!? ¡Piensas seguir siendo inservible!
Sus pensamientos oscuros volvieron pero antes que esos pensamientos los dominarán reaccionó golpeando sus mejillas con las palmas abiertas.
No puedo quedarme aquí. Tengo que encontrarlas...
Cerró los ojos y respiro profundamente, el latido de su corazón comenzó a calmarse, abrió los ojos ya sabiendo que hacer, busco en su celular la luz de linterna que estaba instalada en el teléfono y predio esa linterna iluminando todo frente suyo. Muchas cosas antiguas y rotas había frente suya, piedras gigantescas partidas en pedazos en el suelo dejando daños por el lugar. Avanzó un poco más mirando el suelo donde estaba pisando, abrió los ojos cuando se dio cuenta que estaba parado sobre un gran círculo con varios detalles incrustados en el suelo.
Esas gemas las reconocía, las había visto en aquella caja musical que lo trajo aquí. Se agachó en el suelo alumbrando esas gemas, el color de aquellas gemas no eran tan brillantes como la de la caja musical parecían que no tenían casi color. Su investigación no termino ahí empezó a revisar todo el lugar para saber más o menos en donde estaba, enfocó la luz de su celular a otros lugares donde se encontraban estatuas antiguas con la forma de unos caballeros peculiares. Algunos de una forma más pequeña y regordeta, esas estatuas tenían en mano una espada. Miró hacia otro lado específicamente a su izquierda donde otra estatua estaba colocada con una gran hacha, está estatua estaba mayormente más grande, corpulenta y más regordeta, y finalmente estaba la última que era más delgada con una lanza en su mano, no era tan alto o corpulentos como las otras estatuas pero tampoco no tan pequeña como las primeras que vió, sería el termino medió. Todas esas estatuas miraban específicamente un solo lugar y estás estaba ordenadas perfectamente en fila.
Dio una vuelta hacia las miradas de las estatuas estaban mirando. "Es donde yo llegué..." Murmuró. Volviendo acercándose hacia donde había llegado, miró con más detalle el suelo agachándose. El suelo se encontraba quemado con símbolos extraños que no entendía. Tal vez esto se formó por su llegada. "... ¿Esto es letra nórdica?..." Murmuró incrédulo.
¿Acaso de alguna manera viajamos en el tiempo, a una era que no deberíamos estar?
Se preguntó por su cabeza, no descartó ese hecho pero siguió revisando el lugar, encontró columnas que mantenían el techo y estable. Todo el lugar parecía deteriorado por el paso del tiempo, más aparte las plantas que estaban creciendo algunas parte del lugar estás se estaban filtrando por la gran habitación.
... Ok Eduardo... Hay que enfriar primero la cabeza y repasemos lo que he descubierto. De alguna manera esa caja musical me trajo alguna manera atrás en el tiempo posiblemente en la era media... Y justamente estoy parado donde llegan los viajeros del tiempo... Puede sonar tan surrealista pero es un hecho...
No sabía si reír o llorar por hacer algo tan increíble como viajar por el tiempo, los científicos tendrían tanta envidia que solo un par de adolescentes hicieron una gran hazaña que es viajar por el tiempo solo con una caja musical... Debía de alguna manera hallar la caja sin embargo había un pequeño problema él no tenía la caja musical si no Anne o Sasha... Tal vez Marcy... No recordó quien fue la última que sostuvo esa caja musical pero recordar aquel objeto peligroso... El escalofrío pasó por su cuerpo por que esa cosa podía ser algún peligro para ellos, tan solo tenerlo ya era un peligro. Primero que nada no sabía cómo funcionaba aquel objeto, ¿Los podía devolver devuelta a su tiempo? ¿Podían viajar aún más al pasado o al futuro? Varias preguntas surgieron en su cabeza pero negó con la cabeza ignorando aquellas preguntas que surgieron por su cabeza. No es el momento de pensar en eso, tengo que encontrarlas y después descubrimos como funciona.
Avanzó cuidadosamente por el lugar comenzado a explorar. Siguió un camino de alfombra roja antigua no sabía dónde lo iba guiar pero es mejor que quedarse ahí sin hacer nada. Él estaba preocupado por las chicas pero no iba permitir que sus emociones lo dominarán. Su padre siempre decía que en situaciones sin esperanza mantuviera fé y se calmara. Eduardo siguió las palabras de su padre. El camino de la alfombra había acabado cuando está se encontraba cortada y ese pedazo no se encontraba aquí. Eso no fue lo único podía escuchar el sonido de gotas chocando contra el suelo iluminó hacia arriba viendo el origen de las gotas de agua.
¿Acaso estoy en el subsuelo?
La pregunta vago por su cabeza unos minutos pero seguía caminando hacia frente en busca de alguna salida. En un momento del camino el sudor comenzó a formarse en su frente, un ambiente de alta humedad estaba presente mas adelante. Se limpio la frente siguiendo hacia delante. Miró la batería de su celular que tenía el ochenta y siete porciento de batería. Agradecía no siempre utilizar su teléfono. Cada vez que avanzaba más allá de la oscuridad el ambiente se volvía cada vez más tétrico y viejo... ¿Tenía miedo? Sí, tenía miedo, miedo de estar solo en un lugar desconocido, miedo por no encontrar a sus amigas, miedo quedarse ahí por siempre... Aún así con ese miedo seguía adelante.
El eco de sus pisabas se volvían cada vez más audibles, podía escuchar sus pisadas por todo el lugar, era increíble que se escuchará a varios metros. Muchos más preguntas se estaban formando en su cabeza, ¿Dónde estaba? ¿Sasha, Marcy y Anne estaban bien? ¿Podría salir de aquí? preguntas que necesitaban una respuesta. Aceleró el ritmo de su marcha cuando en una de su pisadas tocó suelo débil. "No puede ser cierto..." Sonó más una queja que una súplica. Escucho y sintió como el suelo comenzó a derrumbarse. Su cuerpo reaccionó a tiempo saltando, cayendo a suelo seguro. Soltó un suspiro cuando pensaba que estaba a salvo, ese pensamiento duró poco cuando menos se lo espero. El suelo comenzó abrirse, abrió los ojos y hizo lo que lógicamente haría una persona, correr. Hizo su mejor esfuerzo para acelerar su velocidad, corriendo con todas sus fuerzas sin ni siquiera mirar atrás por el miedo de caer. Su corazón latía mil por hora podía sentir como el suelo roto lo seguía sin parar. No quería caer hacia abajo... Sin embargo no pudo llegar a nada. Cayó hacia el vacío de la oscuridad quiso gritar con todas sus fuerzas trató, pero nadie más lo escucharía cerró los ojos aceptando su triste destino... Y chocó contra algo... ¿Suave? Abrió los ojos cuando su cuerpo rebotó y su cuerpo golpeó un hongo gigantesco y nuevamente rebotó suavizando su caída. En el suelo estable... O no y volvió a caer está vez en agua helada.
Cerró su mandíbula con fuerza. El agua se encontraba helada. "Ma-ma-maldición..." Maldijo enojado, de todas la cosas le tendría que pasar ésto. Ignorando su enojo buscó superficie para salir del agua fría, Eduardo notó la luz de su teléfono a unos metros de él, comenzó a nadar hacia su teléfono, escalando para alcanzarlo. Eduardo llegó a tierra firme donde por ahora el suelo es estable. Tomó su teléfono e hizo una mueca de lástima cuando vio que la pantalla del teléfono estaba estrellada, no estaba tan mal... Eso quería creer aún podía visualizar la pantalla solo con pequeñas manchas de tinte suelto por la pantalla. Suspiró y comenzó a buscar una salida. Y se se dio cuenta de algo.
Mi mochila, ¿Dónde está?
Busco su mochila por dónde estaba pero no la encontraba. Suspiró nuevamente molesto a saber donde se encontraba su mochila volteo y alumbró el agua. "... No podía ser un lugar mejor..." El sarcasmo de Sasha se le había contagiado un poco, solo lo utilizaba cuando se encontraba enojado. Colocó el teléfono con una piedra para que alumbrará la mochila donde se encontraba para no tener mucha dificultad en buscarla. Suspiró y volvió a entrar al agua. "Odio los calcetines mojados... Es la peor sensación del mundo" Tomó su celular y comenzó avanzar ignorando esa sensación tan molesta en sus pies mojados. Luego se preocuparía en secarse cuando hallé madera seca o la superficie misma. En su avance empezó a notar como se adentraba a un lugar diferente podía ver la misma estructura que había haya arriba. Sintió como el ambiente cambio, sintiendo el aire más pesado, este ya no era agradable podía sentir una sensación de peligro haya frente suya. Dudó en dar un paso enfrente. "No me puedo quedar por siempre..." Decidió avanzar aunque sabía que no era buena idea.
*TRACK* Casi soltó su teléfono por el susto que se llevó. Una luz se encendió frente suya Iluminando el caminó. Observó que había unos escalones hechas de piedra. Las plantas atravesaron parte de los escalones. Comenzó a subir las escaleras. Cada vez que subía no había un fin parecía interminable miró hacia atrás viendo que la oscuridad era muy profunda.
¿En serio cuánto faltaba? Movió su teléfono hacia frente pero Eduardo no se dio cuenta de la vida animal que habitaba... Fue un gran error... Varios murciélagos chillaron de forma aguda por la molesta luz que los golpeó. Bajaron hacia Eduardo atacando la específicamente el teléfono que producía la mayor luz que les molestó. Su reacción fue violenta atacando Eduardo, pasaron los murciélagos sintiendo las mordeduras y golpes contra su cuerpo. Eduardo se cubrió completamente con su cuerpo usando a favor su chaqueta que le cubrió mayormente las heridas. Cada vez el miedo lo dominaba pero sabía que si hacia algo brusco los murciélagos jamás iban a parar, guardo su teléfono en su chaqueta escondiendo la luz. Pasaron los minutos y los murciélagos lo dejaron en paz. Eduardo tembloroso avanzó subiendo y solo Iluminando con su pantalla donde pisaba, pasó lento y seguro.
Finalmente llegó a salvo. *TRACK* Y otra luz prendió delante suyo esa no era la única fuente de luz también había una antorcha natural frente suya en el suelo. Encontró una espada en el suelo, con un diseño similar a una espada romana, la espada se le notaba el uso de los años. Entonces esto reforzaba la idea que había viajado en el tiempo. Justamente cuando trató de llamar guardo silencio. "¡Hay..." Inmediatamente cerró la boca.
¿Debería de gritar? ¿Sasha, Anne y Marcy estaban aquí? Nada me lo asegura.
La desconfianza dentro de él creció cada vez más. No confiaba mucho en las personas de este tiempo, gracias a su interés a los documentales a la historia antigua sabia que está era es muy peligrosa. Dónde no dudaría en atacarlo solo por su supervivencia. Y no era el mejor socializando, ahora comunicarse en idioma muy viejo no iba salir muy bien. Por ahora solo confiaba plenamente en Sasha... si Sasha o Marcy se encontraban con estos individuos ellas de alguna manera se podrían comunicar con ellos con Anne tenía un poca esperanza. Sasha podría ser increíble con su habilidad para socializar.
Ella era genial en muchas cosas. Sasha es muy hábil con las palabras, su agilidad en los deportes sumado a su fuerza de voluntad ella jamás se rendía tomaba los retos como si su vida dependiera de ello. Ella podía amenazar a los adolescentes mayores con ellos sin necesidad de utilizar fuerza bruta solo usando ese carisma combinado con las amenazas sutiles que ella realizaba, ahora comprendía con eso de las redes sociales, la información es poder. No pudo evitar pensar en sus otras amigas.
Anne, aunque ellos eran iguales de sumisos sabía que la chica tenía una gran bondad en su corazón ayudando aquél que necesitará ayuda, le recordaba a él en su primeros años con su ideal tonto. Anne podía ser carismática igual que Sasha siendo más amable que ella ayudando con bondad sin querer algo a cambió.
Y Marcy... ¿Qué podía pensar de ella? Ellos eran iguales de antisociales siendo muy pésimos en crear nuevas amistades. Recordó los días que Sasha los presionó a ellos para que mejorarán sus habilidades sociales y el resultado no fue muy agradable... Vaya recordarlas provocaba que se tranquilizara mucho más de lo que pensaba. No podía perder la esperanza. Tomó la espada por su seguridad, ésto iba a funcionar más que sus puños en una pelea de espadas.
Al recorrer este lugar descubrió muchas cosas parecía un tipo de mazmorra de esa clases de videojuegos que Marcy jugaba, parecía que le perteneció a un reino antiguo, no sabía si era una base militar antigua, ya que había celdas por ahí cerradas y destruidas. Miró con más detalles esas celdas pero no había nada, solo cerraduras y esposas gruesas rotas en el suelo. Eso no le trajo tranquilidad. Eduardo en su camino piso algo suave. Miró hacia abajo de lo que piso, iluminó aquél objeto. Era una bandera con el símbolo de una calavera que no pudo reconocer, parecía una clases de tipo humanoide atravesado por más de ocho espadas... Era demasiado genial, el diseño le gustó sin embargo no era el momento de elogiar aquello. Podían ser bandidos que estaban explorando la mazmorra. Dejo de observar la antigua bandera. Y cuando dio tres pasos hacia delante se detuvo casi soltando su teléfono. Abrió los ojos y su respiración se detuvo en un segundo. Lo que vio hacia delante lo dejo paralizado.
Lo que estaba viendo eran varios cadáveres que se hallaban en el suelo en diferentes posiciones. Unos atravesados con espadas, hachas, lanzas, otros partidos a la mitad como si fueran de papel. Eduardo estuvo seguro de algo, aquí hubo una batalla campal. Podía verlo en los cadáveres con diferentes armaduras cada uno perteneció a una facción diferente. Eduardo se acercó hacia unos de los cadáveres, haciendo una mueca de dolor. Pelearon hasta el final... No hubo piedad entre ellos.
Esto cada vez se estaba poniendo mucho peor. Eduardo estaba seguro de su conocimiento en antiguas cosas pero no podía reconocer la armadura de los cadáveres. Algunos tenían un diseño más de fantasía como los videojuegos, otros más toscos siendo parecido en su mundo... Y si miraba con detalles los huesos de esos cadáveres no eran muy grandes casi de su tamaño o siendo muy inferior de tamaño.
¿Enanos? ¿Acaso no viaje en el tiempo... o viaje un mundo de fantasía...? ¿No me golpe la cabeza hace un momento?
Cerró los ojos pensado. Una de dos o se golpeó algún momento la cabeza o su imaginación estaba jugando con él burlándose de si mismo. Aparto la mirada hacia otro lado. "... No puede ser real..." Negó en un susurró. Ignorando los cadáveres siguió su camino pero notó algo simple. Tenía que pasar por esos cadáveres para llegar al otro lado. "... Puedes hacerlo... Puedes hacerlo..." Y así siguió hacia el camino de cadáveres, podía sentir como pisaba antiguos huesos y los quebraba con facilidad.
... Deben de haber estado bastante tiempo aquí...
En su caminata tuvo un descuido cuando tropezó con uno de los cadáveres, cayó hacia el suelo. Soltó de inmediato la espada y puso su brazo hacia delante reduciendo el golpe duro que se iba a dar si no fuera por su rápida reacción. Cuando trató de levantarse sintió como su tobillo estaba sujetado por algo. Trató de moverlo para salir de lo que estaba atorado, hizo nuevamente fuerza pero su pierna no salía de lo que estaba sostenido. Giró hacia hacia atrás Iluminando a ver con lo que estaba atorado. De todas cosas que pudo imaginar jamás pensó ver algo tan estúpidamente irreal. Uno de esos esqueletos que hacen momento pisaba movió su cabeza hacia él. Eduardo parpadeó con incredulidad y cuando quiso liberarse el esqueleto puso más fuerza en su tobillo. "¡Suéltame!" Con su otra pierna libre le dio una patada en la cara, la patada que dio no fue tan fuerte por el susto que se llevó. Aunque ese golpe fue lo suficiente para que lo soltara, Eduardo aprovechó este momento para escapar.
Sin embargo lo detuvo un espadazo, casi siendo rebanado por unos centímetros. Miró hacia su atacante un esqueleto sin un brazo con una armadura simple, de su misma altura lo comenzó atacar con la espada corta sostenía algunos segundos. Lanzo el filo de la espada hacia el pecho del Eduardo, este lo esquivó con facilidad ya que no era tan rápido de lo que pensaba y vio que la armadura viviente le costaba levantar la espada. Miró como la armadura no le cubría una pierna y aprovecho el momento para darle una fuerte patada. Eduardo lanzó su patada, la fuerza que dio en esa patada fue suficiente para partir la pierna del muerto viviente. Derribando el caballero hacia el suelo. Pero no acabo ahí la pelea otro muerto viviente lo atacó por la espada de forma horizontalmente, Eduardo saltó hacia atrás manteniendo distancia. Agradecía por tener su instinto afinado. Eduardo respondió con un contraataque, con un combo básico fue directamente hacia el esqueleto y empezó con un rápido jab para seguir con cruzado directamente en su rostro y finalizar con dos golpes un gancho potente y uno directo, eso fue suficiente para arrancar su cabeza hacia arriba. Podía sentir como su nudillos ardían de dolor por haber golpeado metal en su puños. Su instinto le aviso que diera vuelta y golpeara a su nuevo atacante, está vez un esqueleto sin tanta armadura. Eduardo ya no dudo en golpear a su enemigo, no podía contenerse estaba peleando por su vida, está pelea no era una práctica, está era una real. Así Eduardo se enfrento a varios esqueletos que comenzaron a sumarse cada vez más.
Parecía que cada vez que uno que vencía aparecían dos más. Eduardo distraído seguía peleando hasta que uno de los esqueletos se puso detrás suyo, el esqueleto no tenía brazos y atacó con la única forma que se le permitía abrió la boca mordiendo a Eduardo en el hombro izquierdo con bastante fuerza. Eduardo gritó de dolor mirando hacía al maldito esqueleto que lo estaba mordiendo, su reacción fue darle un gran puñetazo en el cráneo. Lo atravesó con facilidad y cayó en el suelo el esqueleto. La pelea duró bastante tiempo tomó otra espada en el suelo y atacó ferozmente. Pasaron los minutos y Eduardo parado entre las partes derribadas de sus enemigos, Eduardo se encontraba respirando con dificultad él miró sus manos rojas con heridas. La sangre corría en sus manos.
No es fue idea utilizar mis puños...
Hizo una mueca de dolor pero tenía que aguantar pronto saldrá de aquí, buscaría la salida y las buscaría a las chicas. Ahora su preocupación subió a niveles extremos, no se dio cuenta de su estado que estaba, Eduardo había recibido algunos pequeños cortes en la pelea, no eran tan graves solo heridas pequeñas hechas por las espadas, cuchillos y hachas que utilizaron esos muertos vivientes. De todas las cosas que podría imaginar Eduardo jamás pensó pelear en su vida pelear por su vida con esqueletos vivientes. Cada vez parecía un videojuego que Marcy le invitaba a jugar. Se tiró en el suelo sin importarle ya la suciedad.
¿Por qué estamos aquí? ¿Cómo llegamos a este lugar? ¿Sasha, Anne y Marcy están bien?
*¡POW, POW, POW!* Escucho pasos pesados acercándose hacia él. Eduardo se paró rápidamente y formó su guardia esperando al siguiente enemigo. La oscuridad ocultaba este ser. Eduardo pudo observar como dos orbes rojos con mucha intensidad brillaban hacia él. Eduardo tragó saliva sintió como su coraje vaciló, giró la cabeza hacia los lados, tenía que mantener la calma para ganar.
Y su nuevo oponente al fin se mostró. De una altura más de un metro de ochenta y una armadura que Eduardo pudo reconocer. De niño Eduardo admiraba a los guerreros legendarios que hacían cosas imposibles que otros no podían hacer. Leía historias, comics, libros, relacionados con ellos, podía ver un documental sin dormirse en esos temas. Eduardo era de las personas que se emocionaban en escuchar sus logros y actos heróicos que hicieron. Y ahora en este momento uno estaba frente suya, con una armadura imponente, que sólo miró en uno de los videojuegos que Marcy jugaba. El caballero acompañando con un gran pedazo de madera fuertemente sostenido en sus guantes de acero.
"¡ROOAAAAHHHHH!" Rugió el caballero... No era ni siquiera un caballero parecía más una bestia... Una bestia salvaje. La valentía que alguna sintió desapareció su instinto más básico le gritó que huyera ahí. ¿¡Qué está pasando aquí!? ¿¡Esto es un maldito sueño!? ¿Qué hago, qué hago? Su cuerpo no reaccionaba por más que querría correr estaba paralizado por el miedo. Y ese fue un error que pago con cuerpo, hace un segundo estaba parado ahí temblando y al otro se encontraba en el aire. No supo lo que había pasado solo sentía el dolor recorrer en su cuerpo mayormente en sus costillas ahí fue donde el golpe conectó. No se dió cuenta en el momento que se había movido. ¿Acaso tenía preocuparse por eso? Moriría si no hacia algo, cuando sintió caer en algunos huesos y los partió se comenzó a levantarse con dolor. Tenía que correr no podía enfrentarse a eso, tenía que reunir toda fuerza restante que permanecía en su cuerpo. Trató de ponerse en pie, levantando un poco su cuerpo y fracasó debido el dolor de su cuerpo. Podía escuchar los pasos pesados yendo hacia él. Cada pasó escuchado por el era como si el tiempo se volviera cada vez más lento.
Levántate...
Se dijo hacia si mismo, forzando su cuerpo ir una sus límites. Pero nada, su cuerpo no reaccionaba.
¡Levántate, Levántate!
Una parte del gritaba de forma desesperada, podía sentir la desesperación penetrando su valentía. No podía levantarse. Levantó la cabeza hacia el monstruo que se le acercaba. Podía ver cómo la espada estaba siendo arrastrada en el suelo, dejando la marca del arma. Un líquido extraño caí debajo de su casco.
¿Esté es mi fin? ¿Moriré? ¿Por qué? ¿Qué hice mal? ¿Soy demasiado débil? ¿Me lo merezco? ¿Qué pasará con Sasha, Marcy y Anne?... ¿Por qué tengo que morir
¡Levántate, Levántate, Levántate!
Apretó los dientes enojado, estaba molesto. Molesto por no ser lo suficiente fuerte, molesto consigo mismo. Él tenía que sobrevivir de cualquier manera, tenía que encontrarlas. Si el estaba sufriendo con un criatura así no se quería imaginar con las criaturas de allá afuera. Tenía que ir más allá de lo que podía hacer... Pero su cuerpo no respondía mientras algo dentro de él gritaba con todo su ser que se levantará.
¡Levántate, Levántate, Levántate, levántate, Levántate, levántate, levántate, levántate!
"¡LO SÉ! ¡SE QUE TENGO HACER, IDIOTA!" Gritó con todas sus fuerzas. El caballero monstruoso no le importó el grito de Eduardo. Dio en su último paso hasta quedar frente a Eduardo, poca distancia los separaba. Levantó el gran roble listo para finalizar con Eduardo y bajo el peso del objeto hacia el chico. El roble cayó directo hacia Eduardo.
Rompe tu límite...
El instinto de Eduardo reaccionó usando el cien por ciento de su fuerza, su voluntad hizo que se moviera. Movió su cuerpo esquivando y rodó por el camino. Se levantó ignorando el dolor recorriendo de su cuerpo, nuevamente sentía el calor recorrer en su cuerpo. Listo para poder pelear miró en el suelo y había una lanza en el suelo y no dudo en tomarla. Agarró la lanza del suelo y corrió hacia el Berserker que esté no tardó en reaccionar y respondió enviando su arma hacia Eduardo. Eduardo apenas pudo ver el ataque pero siguió su instinto y rodó hacia delante quedando cerca. Los ojos del Berserker miraron hacia Eduardo pero fue demasiado tarde por que Eduardo lanzó la lanza entre una parte del cuerpo que no estaba blindando, esa parte fue el cuello que atravesó. El caballero no acabo ahí utilizo su brazo libre para atacar a Eduardo intentando golpearlo con su fuerza bruta, rompiendo algunas estructuras. Eduardo tomó otra arma del suelo está vez una espada larga y aprovecho su agilidad yendo punto ciegos del caballero monstruoso.
El caballero no era tan rápido de lo que pensaba y utilizo su velocidad a su favor para saltar hacia su espada y decapitar al caballero limpiamente. La cabeza del caballero rebotó en el suelo y vio como el caballero cayó en el suelo. Sintió la gloria de haberle ganado un enemigo poderoso, Eduardo no pudo evitar sonreír con confianza sin embargo no había acabado. La lanza fue separada del cuerpo del caballero. Su cuerpo se levantó caminando tranquilamente hacia su cabeza y tomó su cabeza y se la colocó en su lugar.
Pronto los ojos del berserker brillaron aún más mirando a Eduardo. Eduardo dio uno pasos incrédulo de ver que esa cosa seguía viva a pesar de que fue decapitado hace unos segundos. "... I-Intruso..." La voz del caballero sonó tan polvorosa y profunda. Cómo si fuera la primera vez hablando después de varios de años. La cara de Eduardo se transformó en incredulidad cuando lo escucho hablar. Se levantó como si nada le hubiera pasado. "Debes de morir Intruso..." El cuerpo del caballero se empezó a retorcerse como si se estuviera rompiendo los huesos y comenzó a gruñir de dolor. Eduardo observó como su brazos cambiaron de forma haciéndose más grande y uno se formó como una espada deformada. El líquido oscuro tomó aún más al caballero y este atacó a Eduardo con mucha más velocidad. Eduardo fue salvado por que tropezó con un cadáver, si no hubiera tropezado estuviera muerto. Eduardo comenzó a esquivar los ataques del caballero pero su brazo derecho fue cortado por la espada del caballero. Gruño Eduardo sintiendo la sangre salir de su cuerpo. Sabiendo que no podría siempre esquivar Eduardo comenzó a correr cuando tuvo la oportunidad.
Eduardo corrió los más rápido que pudo haciendo una gran distancia entre él y el caballero terrorífico. Agarró su brazo derecho lastimado por el corte, miró hacia atrás la espalda y el caballero había dado un gran saltó, Eduardo cayó hacia delante por la caída del caballero había provocado un gran cráter en el suelo. Abrió los ojos adolorido y vio que a pasos lentos se estaba acercando hacia él con la espada cortando el suelo en su camino hacia el humano. El caballero levantó su espada y listo para acabar con Eduardo la bajo hacia él...
"¡INTRUSOS, INTRUSOS, INTRUSOS!" Una alarma empezó a sonar por toda la habitación y la luces cambiaron de color a uno rojo. El caballero había detenido su espada justamente en la nariz de Eduardo y se fue dejando a Eduardo en el suelo asustado. El Berserker escalo por la paredes hacia el techo y rompió el techo, entrando por el agujero que había provocado. Eduardo como pudo se levantó del suelo y comenzó a correr. No supo cuánto tiempo había pasado desde que había comenzado a correr.
Había pasado un tiempo desde que había empezado a correr. Se había detenido en una estructura rota donde pudo esconderse. Eduardo en este momento estaba vendando su brazo lastimado con su camisa de la escuela que la había utilizado para hacer una venda improvisada. Había perdido su teléfono y su gorra favorita en ese maldito pasillo y si lo quería recuperar volvería a encontrarse con ese caballero... Un escalofrío pasó por su cuerpo, solo pensar enfrentarse a él miedo volvió a él. Intento dejar de pensar en eso hecho todo su peso en la pared, ahora tenía que tratar de descansar.
"Tú cuerpo es tu templo y tienes que dejarlo descansar cuando te lo pida. No lo olvides Eduardo"
Un gran suspiró soltó cansado, recordó perfectamente las palabras del seños Leon. Sabía que no podía enfrentarse a esa cosa en ese estado que se encontraba, miró su brazo derecho lastimado por solo un golpe del caballero. El dolor era apenas soportable, ya estaba acostumbrado a recibir golpes pero ésto estaba a otro nivel. Podía sentir el dolor invadir su cuerpo y el cansancio lo invadió. No podía y ni quería descansar. Sentía que iba a volver por él si se quedaba aquí, se levantó nuevamente antes de caer en el suelo. Había llegado su límite. No sabía cómo a sobrevivir en este lugar, no quería volverse a encontrar con ese caballero.
Eduardo se levantó iba a seguir pero un agudo dolor paso por todo su cuerpo. Todo el dolor se originó en la herida que tenía en su hombro. "¡GUH! ¡GAAAAAHHH!" Cayó en el suelo retorciéndose de dolor sintiendo como todo su cuerpo estaba siendo torturando, la temperatura de su cuerpo se elevó ardiendo y sudando. Movió su cuello hacia la herida y vio ese extraño líquido oscuro que estaba goteando en su hombro.
"¡AAAHHHHH!" Se escuchó el gritó por todo el lugar Eduardo no podía este dolor y sus párpados se volvieron pesados y antes que se diera cuenta se desmayo.
"H-hey Eduardo te veo un poco aburrido, ¿quieres probar un videojuego en lo que esperamos? Miré hacia mi derecha Marcy había llegado hacia mí, que me encontraba esperando a Sasha y Anne, sostenía bastantes bolsas de compras, mayormente de Sasha. Habíamos venido al centro comercial a comprar más cambios de ropa para mí... Bueno ese era el plan original antes que Sasha y Anne hayan quedado hipnotizadas con la nueva ropa que llegó. Miré entre las bolsa y ella, los videojuegos no me llamaban demasiado la atención al menos que sean... "Es el nuevo Hunter souls" Dió justo en el clavo, al menos que tengan temática medieval o relacionado con algo de héroes llamaba mi atención.
"... Bueno tengo bastantes cosas... No creo que sea el momento..." Dije, no quería molestar a Sasha por que en cualquier podría venir.
"Y-yo cuídare las bolsas por ti, dale una oportunidad" Ella argumentó dejando su mini consola en un asiento de espera. Lo pensé varias veces no quería hacer enojar a Sasha siempre que me dice algo lo cumplo al pie de letra pero Marcy pocas veces me ha pedido algo... La cara Marcy se transformó en una de expresión adorable de súplica y junto su dos manos en una, un: "Por favor" Salió de su boca.
Dejé salir un suspiro. "... Bien... Solo será unos minutos..." A Marcy le brillaron los ojos y velozmente antes que me diera cuenta tomó las bolsas de compra y las bajó rápidamente hacia el suelo. Vaya a veces me sorprende como en un puede convertirse en un atleta profesional.
"¡Comenzaremos con tu creación de personaje!" Ella tomó su consola portátil y me enseñó el menú de creación. ¡Primero elegiremos la raza de tu personaje, están Humano, Elfo, Elfo Oscuro, demonio, No Muerto, Hombre Lobo, Hombre Oso, Reptiliano! ¡Cada uno con sus estadísticas, ventajas y desventajas, yo te recomiendo como jugadora experimentada que utilices la raza hombre lobo ya que eres un jugador novato vas a necesitar un personaje fuerte, y descubre un secreto que pocos jugadores han conocido que es la trasformación bestial que la puedes conseguir desde el inicio cumpliendo los requisitos que es derrotar el jefe a puños limpios..."
Marcy explicó completamente a detalle cosas que ni sabía del videojuego. Miré entre la pantalla y ella que seguía con su explicación duradera. Bueno es algo clásico de ella, cuando le emocionaba investigaba a fondo de ello no importaba cuantos días pasarás, horas, minutos, segundos, ella siempre completaba con una investigación que se proponía.
"¡Y así los creadores decidieron meter la raza hombre lobo!" Me quedé callado asistiendo con la cabeza. Creó que solo memorice lo con el 50 porciento de lo que dijo.
"... Entonces podemos crear el personaje..." Le señale pantalla donde ni siquiera hemos elegido una raza.
"...Oh, cierto, cierto, perdón me deje llevar..." Dijo avergonzada con las mejillas sonrojadas. Yo negué con la cabeza y formé una media sonrisa en mi rostro.
"No te preocupes Marcy, siendo sincero me gusta esa característica de ti" Yo la elogie por que me impresionaba su entusiasmo. Marcy al recibir mi elogió ella se sonrojó intensamente poniendo su consola de videojuego entre su cara cubriéndose de vergüenza. "... ¿Está bien?" Pregunté y ella asintió varias veces.
"... Sí..." Ella asistió rápidamente y me entrego su consola portátil a mi cuando se tranquilizó.
Bien aquí vamos. Empecé a ver las siete razas disponibles y iba a elegir la raza Humano cuando Marcy hizo un sonido de disgusto. Entonces note que no quería eligiera esa raza, bien. Baje hacia otra raza que está era Elfo, escuché el mismo sonido Marcy de disgusto de Marcy, tenerla a mi espalda y que viera lo que estaba haciendo era un poco incómodo pero no me quejó. Baje hacia abajo a otra raza, Elfo Oscuro... Mismo sonido... Está bien Marcy utilizaré tu raza que quieres que elija. Fui casi hasta abajo de las razas eligiendo la raza Hombre Lobo y eso provocó que Marcy hiciera un sonido satisfecha con mi elección.
"¡Buena elección Eduardo, ahora a hay que personalizar a tú personaje!" Ella saltó detrás de mi sosteniéndose en mis hombros.
"Está bien..." Bueno no quiero alguien tardar mucho así que haré algo simple. Comencé con la piel del personaje, bueno lo pondré moreno, color de ojos marrón, cabello oscuro negro. Bueno lo hacía parecido a mi ya que no tenía tanta imaginación como Marcy para crear un personaje desde cero. Solo hubo diferencias de mi como la musculatura y altura lo hice de un metro con noventa centímetros y musculoso el personaje. Eso me tomó como unos cinco minutos en crearlo, no quería darle más detalles, como tatuajes, cicatrices.
"¡Genial, ahora tienes que darle una historia de fondo a tu personaje, pero tienes que elegir sabiamente su historia le dará diferentes Atributos para tú personaje!"
... ¿No puedo comenzar a jugar ya? Ignorando mi pregunta comencé con solo tomara otros minutos. Empecé con una historia trágica, el único sobreviviente de su clan de hombres de lobos que buscaría a los culpables de la destrucción de su pueblo y hogar, entrenando cada día de su vida con diferentes guerreros, bandidos, bestias salvajes. Eligió el camino de la espada sangre oscura para asesinar a los asesinos de su clan. Dirigiéndose al nuevo reino desconocido donde aquí iniciaría la historia del personaje. Fue algo simple sabía que podía elegir muchas más historias pero no quería leer las demás, este videojuego tenía mucho detalles.
"Trágica historia que le elegiste a tu personaje, pero está bien por qué tienes vigor once, diez de fuerza, siete de estamina, resistencia nueve, inteligencia cinco, suerte tres, aprendizaje cuatro, destreza doce y fé dos" Ella me señaló a mí personaje. Bueno creo que está bien. "¡Ahora lo último y mejor es nombrar a tu personaje! ¿Cómo lo llamarás?" Ella me miró esperando mi respuesta... Y yo no tenía alguna... No pensé en como llamarlo. ¿Kuro? No, no me gusta. ¿Black? demasiado simple... ¿Zero? Puede ser... O que tal... Emil... Recorde la abreviatura del segundo nombre de mi padre. Me gusta. Ya sabía cuál escoger.
ComencéComencé a escribir el nombre. "Emil. es un nombre bonito" Marcy me elogió, no sabía si lo hizo por lástima o lo que dijo fue verdaderamente cierto.
Yo solo asentí con la cabeza. "Sí, es un buen nombre..." Sonreí levemente. Finalmente terminé con el personaje iniciando con el prólogo del videojuego. Mi personaje estaba atrapado en una celda bastante antigua sin armadura, pronto apareció desde arriba un caballero deja caer un bolsa llena de objetos. Mi personaje mira desde arriba con desconfianza pero no duda en tomar la bolsa y al abrirla, la bolsa contenía una armadura simple de hierro antigua, con casco completo. Comencé a equipar el personaje no fue tan difícil pero el menú de personaje parecía bastante complejo. Cuando quise equiparle un arma a mi personaje me di cuenta de un pequeño problema... No había ningún arma...
"... Ehh... Marcy, ¿No hay ninguna arma?" Señale la pantalla donde mi personaje no tenía ningún arma.
"Sí, tienes razón. No utilizarás ninguna arma, si quieres conseguir la forma bestial para tu personaje" Ella me explicó. Está bien, conseguiré esa forma.
Mi personaje salió de la celda con la llave que tenía la bolsa anteriormente, todo normal y pacífico no había ningún enemigo de hecho en el suelo había como cenizas escritas con un mini tutorial para saber controlar el personaje. Me lo aprendí rápidamente y seguí adelante encontrado al primer enemigo, un no muertos sin armadura con una espada rota, cuando iba atacar, ataque antes que el lanzado simples puñetazos hacia el enemigo. Venciendo lo a los cuatro puñetazos.
"¡Bien hecho Eduardo, venciste a tu primer enemigo!" Marcy me felicitó como si alguna clase de niño.
"... Gracias..." Seguí adelante para salir de el castillo que estaba atrapado vencí cada enemigo que se me cruzaba a mi caminó, así seguí hasta encontrarme con aquel caballero que me ayudó, se encontraba bastante lastimado. Me miró y comenzó con su diálogo.
"... Oh saliste a salvó... Es bueno ver que tuviste suerte a diferencia de mi... Hahaha..." Se señaló así mismo específicamente en sus heridas, su risa sonaba forzada y dolorosa, el personaje estaba muriendo.
Miré hacia Marcy. "Marcy, ¿hay alguna manera de salvarlo?" Mis rostro no mostró mis emociones ni sé si mí voz me delató, odiaba ver la gente sufrir o morir. Sabía que a veces era inevitable... Pero yo si pudiera evitarlo... Los salvaría. Aunque fuera un simple videojuego.
Marcy me miró sorprendida por hacer preguntando. "... Ah... No. No puede ser salvado, muchos jugadores lo han intentado hacer pero no hay manera, está programado a morir"
Abrí la boca para intentar preguntar si no había más maneras o una forma secreta. Pero si ella lo dice debe ser cierto. "... Ya veo..." Fue lo que dije y seguí jugando el videojuego. Antes de morir el caballero me entregó unos frascos y una llave para escapara de ahí. Después de unos segundos murió tranquilamente, fue bueno ver qué no sufrió más.
Seguí adelante, dejando ahí su cuerpo aunque me hubiera gustado que el videojuego te hubiera dado una opción para enterar su cuerpo como un buen héroe que me ayudó. Pasaron los minutos y seguí explorando, enfrentando distintos enemigos con una mayor dificultad, morí algunas veces ya que aún no me adaptaba a los controles, no era un experto en los videojuegos los podía ver por un pequeño lapso de tiempo. Marcy me ayudó cuando notaba que se me hacía difícil el juego, me dió consejos de como vencer los enemigos o zonas secretas para conseguir objetos importantes que me iban ayudar más adelante. Así fue hasta llegar finalmente a la zona del jefe.
"¡Muy bien Eduardo lo haz hecho bien para ser tú primera vez!" Ella me alabó por mi progreso cada vez volviéndome un poco mejor sin embargo su alabanza duró poco ante que su cara cambiará a una muy seria. "Aún así, no te confíes te enfrentarás a unos de los jefes que la comunidad clasifica como uno de los más difíciles por su gran dificultad. ¡Pero no te preocupes Marcy la cazadora está aquí para ayudarte!" Anunció orgullosa e infló su pecho con una postura llena de confianza.
"Mi heroína, gracias por salvarme" Le seguí el juego y ella levemente se sonrojó.
"... D-De nada... Antes que vayas entrar contra el jefe escuchar mí consejo. Utiliza tu entorno para ganar...
Eduardo abrió los ojos de repente, despertando del sueño. Recordó su herida en el hombro y vio que no tenía nada, la herida en si se había curado completamente. Acaso todo lo que sufrió fue un sueño la única pista que tenía que si fue real era la parte de la mordida, puso su mano en su rostro incrédulo por todo lo que pasó ayer. No todo fue malo tuvo un sueño no hace mucho que lo ayudaron a tranquilizarse. Marcy podría ser increíble a veces con sus consejos, agradecía a su amiga por ser una gran de videojuegos de estilo medieval supervivencia, ya que esos recuerdos le iban a servir de mucho. Quiso levantarse pero sentía aún el cansancio, quería volver a dormir pero en su habitación tranquilamente por el resto del día. Nunca pensó en querer volver a dormir, ahora es lo que él quería sin embargo tenía que levantarse. Cuando quiso levantarse comenzó a sentir en su espalda una sensación incómoda, varias patitas pequeñas podía sentir que estaban caminando alrededor de su espalda. Se levantó de inmediato asqueado y con miedo, un grave error que pago con su cuerpo al sentir el dolor prematuro. Gruño a dolorido ignorando los pocos insectos que estaban en su cuerpo.
"Ahhh... Mala idea hacer eso..." Cuando el dolor desvaneció dejó salir un suspiro más tranquilo relajando su cuerpo. Ahora más tranquilo miró a su alrededor viendo que no fue una maldita pesadilla, todo anteriormente fue real. "... Hubiera preferido que hubiera sido pesadilla..." Recordó los acontecimientos de ayer como llegó a este castillo, mazmorra, templo o lo que sea que fuera, como enfrentó a esos muertos vivientes... Y a ese temible caballero. Sintió el escalofrío pasar por su cuerpo, jamás olvidaría esa sensación tan horrible al creer que iba a morir... Dolorosamente otra vez lo recordó si no hubiera si por esa alarma estaría muerto. Su mirada se volvió hacia el camino que había recorrido ayer. No volvería ahí contra ese caballero, tomó el otro lado del camino donde el peligro no lo acechaba aún. La estructura cambio a medida que avanzaba siendo que las paredes estaban más cuidadas y había luces Iluminando el caminó aunque a veces las luces parpadeaban. Eduardo caminaba a pasó lento pero estando alerta a los posibles peligros, evitaría todo el peligro que hubiera ya que no estaba en condiciones para pelear.
Se detuvo cuando miró una gran puerta destrozada. Eso no le dio buena señal, Eduardo se preparó para correr si había algo peligroso. Avanzó mirando más a detalle la puerta, hecho de un mineral metálico que no reconocía se agachó cuidadosamente y lo tocó. Podía sentir el frío de la puerta metálica, se levantó para caminar adelante. Eduardo comenzó a escuchar el sonido de agua fluyendo la curiosidad dentro de él creció. Entró por dónde la puerta debería estar colocada, aprovechando el gran orificio se sorprendió lo que había dentro, un patio de entrenamiento de esas antiguas con sus muñecos de entrenamiento, por otro lado había tres edificios grandes repartidos alrededor y al otro lado estaba otras gran puertas destrozadas. Todo el lugar se encontraba en malas condiciones y había zonas destrozadas igualmente como ese mini campo de batalla que había visto, pero en este no había ningún cadáveres solo armas en el suelo como si hubieran tomado desesperadamente las armas.
Entonces posiblemente ellos fueron los que pelearon contra... el caballero.
Llegó a esa conclusión. Y finalmente miró los más hermoso del lugar había un estanque de agua, ese estanque era el origen del sonido del agua por que notó que una cascada se encontraba conectada hacia ese estanque. El lugar se encontraba en malas condiciones y había zonas destrozadas igualmente como ese mini campo de batalla que había visto, los cadáveres abundaban en el suelo con armas caídas.
Eduardo se acercó al estanque de agua, quería beber agua desde que había despertado había tenido sed. Miró como el agua estaba de un color azul fuerte con diversas plantas flotando en la superficie. Dejó de observar el estanque de agua y miró sus manos sucias y lastimadas.
... ¿Debería de beber agua? No. Más tarde, por ahora explora si es seguro estar aquí...
Su exploración comenzó con el edificio más cercano. Este se veía más elegante, ya que este edificio estaba de color blanco con estatuas hacia arriba de... ¿Ranas humanoides pareciendo ángeles? Eso lo dejo asombrado, dejando su asombro a un lado siguió su exploración entrando. La puerta era muy elegante hecha de madera con oro fino. El edificio a pesar de la estructura destruida se encontraba bastante bien a comparación de los otros edificios. Miró los muebles acomodados como en una sala de reunión. Pudo ver qué había más puertas y unas escaleras para subir hacia arriba, prefirió ir hacia las puertas abriendo la izquierda... Solo era un gran baño gigantesco. Había espejos colocados en la pared con joyas incrustados en los bordes. "¿Acaso hubo alguien de realeza?"
Su pregunta quedó en el aire, cada vez descubría más cosas sobre este lugar. Salió de la habitación yendo hacia la otra puerta y entro viendo que era una habitación con hornos de piedra, estufas y un gran refrigerador... Más y más cosas avanzadas encontraba por está habitación abriendo el refrigerador y viendo como este seguía funcionando. "¿Viaje a un paralelo? ¿Uno medieval tecnológicamente avanzado?" Las preguntas que hacia le estaba comenzando a provocar dar de dolores de cabeza, se estaba preocupado cada vez más.
Finalizó de revisar la habitación y subió por las escaleras hacia el segundo piso de la habitación, en su vista vio como estaba destruido gran parte del segundo piso una habitación completamente destruida, el cuarto estaba derrumbando. Eduardo avanzó hasta detenerse en entrada, muchos escombros estaba aplastando varias cosas de la habitación. Libros esparcidos en el suelo, algunos libros se mantenían en un estado reconocible mientras los demás eran literalmente cenizas o irreconocibles. Tomó un libro del suelo, soplando los restos de polvo que cubrían aquel libro, cuidadosamente comenzó abrirlo esperando obtener repuestas cuando una parte del sabía que no las iba obtener... Y tuvo razón, la escritura estaba a un idioma que no entendería, lo único que más o menos pudo entender eran los dibujos de algunas páginas. Formulas extrañas, bocetos de criaturas que jamás había visto en su vida. Todo los dibujos que entendió cada vez se alejaba de la realidad acercándose a un mundo de fantasía. Más papeles chamuscados esparcidos en el suelo. Ya no sabía que pensar, cada vez que descubría más cosas de este mundo dejando atrás la lógica que el conocía. Siguió buscando los libros obteniendo vagas repuestas a sus preguntas. "¿En qué mundo estoy?"
Después de un rato Eduardo se encontraba en la sala de estar sentado haciéndose una venda improvisada con la camisa de su escuela, la tuvo que rasgar con ayuda de un cuchillo que encontró en la cocina de la casa y comenzó a vendar su brazo. Exploró las dos edificios restantes, en el segundo edificio en la entrada del edificio había muchas literas, estantes de armaduras y de armas. Los estantes de armaduras y de las armas se hallaban vacías pero algunas armaduras y armas estaban en el suelo.
Encontró varias cosas utilices que le iban a servir para sobrevivir. Tomó una espada y una daga junto partes de armaduras no tan voluminosas, la armadura consistía con unas hombrera de acero que le cubría medio brazo derecho y dejando su brazo izquierdo un poco desprotegido ya que solo la hombrera llegaba solo hasta el hombro pero le daba una mayor flexibilidad, en sus brazos los protegía unos brazaletes mixto de cuero, metal extraño. En sus piernas solo se colocó en encima de sus pantalones unas placas de acero oscuro ajustando sus pantalón y en su pecho colocó una pechera metálica desgastada. Finalizando en su equipo de protección con una capa larga para protegerlo del frío. Esas partes de armadura tomó.
Y en el último edificio era un almacén de provisiones aunque ya nada servía, encontró unas cajas metálicas llevando un tipo de cargamento peligroso, ¿Cómo lo supo? Ya que había algo que en su mundo y este mundo compartían, tenían una señal de advertencia donde el dibujo explicaban que no tenía que mover bruscamente la caja o si no miró el otro dibujo que era una calavera... Se imaginó lo que le pasaría.
Y eso fue todo lo que halló. Ahora Eduardo estaba bebiendo agua en el estanque lo bueno que el agua estaba limpia aunque le hubiera gustado hervir el agua para darle mayor higiene y seguridad al tomar del agua. Ya no tenía sed alguna pero aún tenía el problema de la comida. Tenía que salir a cazar... Está sería su primera vez yendo en busca de su comida viva, podría ir en busca de insectos o que tal murciélagos... No mala idea, los murciélagos portaban muchas enfermedades que podría contagiarse si consumían el animal, ni estando loco haría una sopa de murciélago aunque hirviera la carne del murciélago eso no sería suficiente para limpiar su carne con sus diversos virus.
Iría a lo fácil, insectos. Fáciles de encontrar, solo su única preocupación era asegurarse que estos no fueran venenosos, tóxicos, o algo así. Agradecía haber trabajado un tiempo en Thai Go con los padres de Anne y sumando los conocimientos de Marcy y Anne sobre los insectos que ellas le compartieron, no era un gran experto como Señora Boonchuy o Marcy ya que ellas tenían un tiempo investigando aunque usaría la experiencia que obtuvo para sobrevivir.
Cazar insectos fue algo fácil de este mundo estos insectos eran del tamaño que el conocía. Había hecho una hoguera improvisada, tuvo que romper los palos de las lanzas que había en el suelo para reunir madera y reunió rocas en el suelo para hacer la base de la hoguera pegando los palo y que se cargaran entre si para un equilibrio lo difícil fue hacer que encendiera por que está era su primera vez haciendo el método de las dos piedras que chocarán entre si para hacer chispas. En un inicio le costó bastante a Eduardo, era fácil verlo en televisión en ese tonto pero entretenido programa que se llamaba «La Islas De Los Sospechosos». Por suerte no se hirió un dedo golpeado las piedras. Mirando el color dorado de los insectos significado que ya estaba su carne lista para consumir agarró el palo donde los había colocado en un palo de lanza que afilo para darle punta y poner ahí todo los insectos que había conseguido a cocinar con la hoguera. Sopló aire hacia los insectos cocinados y tomó el primer bocado.
... Jugoso... Aunque le falta sal.
Pensó masticando el escarabajo jugoso. Ya sé había acostumbrado al sabor y textura.
Lo bueno es que ya estoy acostumbrado a comer insectos. Gracias a la señora Boonchuy y Marcy por darme comida con insectos... La primera vez que comí un insecto fue cuando la señora Boonchuy me ofreció un típico comida de Tailandia. Fue una experiencia desagradablemente buena. Descubrí que los insectos no sabía tan mal, un gusto que de vez de cuando aún seguía comiendo.
Eduardo siguió con el otro insecto que está era una mantis religiosa de color café oscuro, la mantis era un poco más grande que en su mundo tal vez era por su entorno donde vivía.
Terminando su comida se levantó a seguir explorando no quería quedarse más tiempo descansado, sabía que se estaba forzando tenia que descansar para que sanará completamente, un parte de él le decía que se quedará ahí descansando y la otra que buscará una salida para encontrar a sus amigas. Al final decidió buscar una salida, exponiéndose hacia el peligro. Salió por la otra puerta metálica caminado por unos minutos hasta ver como el entorno comenzaba a cambiar siendo más rocoso y abierto. Las luces cambiaron ya no siendo las lámparas instaladas si no piedras luminosas de diferentes colores incrustadas entre las paredes y techo, la naturaleza abundaba aún más, desde árboles super gigantes enterrados profundamente y hongos igualmente de altos. El viento paso por su cuerpo levantando su capa, sintió como el calor descendió sintiendo el frío remplazando el calor anterior. Así siguió con su búsqueda hacia una salida.
"¡Rocky, controla esa babosa!" La joven rana miró a su padre. Tragó saliva de los nervios ya que está era la primera vez saliendo del pueblo preferiría volver al puesto a vender las verduras y frutas de su familia, ya entrañaba a su madre, a su seis hermanos, ocho primos, diez tías y a sus dos abuelos. Quiso negarse en un principio pero él era el hermano mayor de la familia Vinheim ya era un anfibio adulto y tenía que encargarse del negocio familiar que duraron por generaciones. No quería decepcionar a su padre siempre hablaba mucho del vínculo familiar y del negocio esa historia se la sabía de memoria que podría escribirla y hacerla un libro para venderlo después, aunque pensado lo no sería una mala idea. "¡Rocky deja de soñar despierto!" El gritó de su padre lo saco de sus pensamientos volviendo a la realidad.
"¡Ah-ah Perdón papá!"
"¡No mires para atrás muchacho, mantén tu vista de enfrente y manos firmes!"
"¡Cla-claro papá!" Rocky soltó un suspiro cuando su padre quitó la mirada de él. A veces quería volver a ser un niño como antes o al menos saber la razón por que su padre siempre era duro con él.
"Muchacho, ¿Sabes por qué te trato tan duro?" Rocky fue aturdido como si hubiera leído su mente. Rocky tragó saliva ansioso de escuchar la explicación dura de su padre.
"No... Papá... Yo quiero saberlo" Sus palabras fueron un susurró que apenas fueron escuchadas por su padre. El caracol donde estaba su padre aceleró el paso para estar alado de su hijo. Su padre Astora era demasiado cerrado con él desde de su infancia, adolescencia y hasta ahora pero en este momento se estaba abriendo con él.
"Mira hijo... Yo... No sé como decirlo... Hace mucho yo no era el anphibio duro que conoces" Respiro profundamente para decir su siguientes palabras, era difícil para el abrirse con su hijo. "Nunca te conté como murió mi padre... Mi padre murió por mi inmadurez. Recuerdo el día la última vez que lo vi... Justamente estábamos en un viaje así hasta que fuimos atacados por mantis asesinas... Yo por créeme ser valiente intente pelear contra las mantis... Soñaba ser un aventurero o un mercenario... Tener aventuras, fama, gloria y mucho dinero, así que cada vez que veía peligro me probaba a mi mismo haciendo ese tipo de estupideces" Tomó la cuerdas con más fuerza sintiendo esa frustración de esa noche. "Mi padre me salvó... No pude vencer a las mantis. Mi padre tonto... Sacrificó su vida por la mía... No pude hacer nada solo correr por mi vida... Desde ese día dejé mi estúpido sueño de ser aventurero y seguí con el negocio familiar..."
"Papá... Lo siento pero no fue tu culpa"
"No muchacho... Sí fue mi culpa. Era joven y estúpido, si hubiera evitado esa pelea inútil, mi padre estaría vivo" Astora bajo la mirada tristemente.
"Papá... Yo..."
"¡Oho que bonita conversación!" Padre e hijo fueron sorprendidos por una voz desconocida.
"Muchacho es mejor que te vayas..." Astora sintió el peligro, cuando escucho el zumbido de mosquitos.
"¿¡Qué está pasando papá?"
"¡No hagas preguntas muchacho, haz lo que digo!" Gritó su padre mirándolo seriamente.
La discusión duró poco cuando un gran mosquito típico de Amphibia entró entre medio los carruajes.
"Casi lloró por trágica historia anciano. Pero dejemos aún lado los cuentos tristes, ya sabrás por que venimos" Miró como palmeó un par de veces el arma que tenía en su cinturón. Una espada corta hecha de hierro. "Podemos hacerlo por las buenas, ya sabes sin tanta violencia y con poquita de sangre por ahí, por allá. O por las malas que sería para mí la mejor opción, ya sabes sin testigos sin tanto problemas en el futuro" Lo miró con gracia. "Solo quiero el dinero y la mercancía anciano, tu decides"
Tragó saliva pensado que hacer, intentó mirar a su hijo de forma discreta pero el bastardo se puso en su cara con una sonrisa descarada. "¿Preocupado por tu hijo? También lo estaría... Si tuviera, ¡hiahiahia!" Empezó a reírse.
"¡NO TIENE NADA QUE VER DEJALO EN PAZ!" Astora se alteró, gritando al bandido.
Este detuvo su risa en seco.
"Anciano decrépito, vuelve a gritarme y tú hijo será el primero en morir..." Astora abrió los ojos, este tipo los iba a eliminar si o si. No podía quedarse en brazo cruzados tenía que salvar a su hijo de alguna manera.
El bandido siguiendo con el asaltó puso su mano entre su boca y chiflar. "Muchachos agarren al niño" Pudo escuchar el sonido de varios mosquitos acercándose atrás. Más de seis jinetes de mosquitos los rodearon. Dos jinetes se acercaron a su hijo y lo agarraron a la fuerza.
"¡Papá ayúdame!" Su gritó pidiendo su ayuda. Astora soltó las riendas y quiso ir por su hijo pero fue detenido por una espada. La espada estaba en su cuello, Astora miró el dueño de la espada, el líder de los asaltantes.
"No haga ningún movimiento imprudente, anciano. Al menos que quiera que lo hagamos por las malas. Escucha atentamente, vuelva agarrar la riendas y detenga la babosa en este preciso momento. Dile a tu hijo que haga lo mismo"
Astora hizo lo que dijeron. "Hijo detén a Goliath" Rocky miró a su padre nervioso. Los bandidos le soltaron la manos para que hiciera eso.
Finalmente detuvieron la babosas dejando a merced toda la mercancía. El líder bruscamente lanzó astora hacia el suelo. "¡Papá!" Gritó asustado por su padre. Su padre levantó su brazo en señal que estaba bien.
"¡E-Estoy bien!" Dijo adolorido por la caída del suelo.
"Amarren al anciano y al bebé llorón. No queremos problemas" Ordenó a sus lacayos e hicieron casó. Tomaron padre e hijo y los sujetaron.
El grupo de asaltantes comenzaron abrir a la fuerza las carretas donde tenían la mercancía. Mantuvo la calma aunque por dentro Astora estaba hirviendo de irá, ver como sin cuidado estos destrozaban lo que no les servían. Eran animales salvajes sin una pizca de bondad. El líder lo estaba disfrutando viendo sentado en su montura todo el saqueó.
"¿Papá e-estaremos bien? Astora no estaba seguro si decirle la verdad o darle falsas esperanzas. Podía sentir como su hizo temblaba de miedo eso lo hacía enojar cada vez más.
"... Lo estaremos... Mantén la calma, no permitas que estos cretinos te asusten"
Pasaron los minutos y algunos miembros de los asaltantes se estaban empezando a quejar cuando no encontraron algo de valor.
"¡Petrus aquí no hay nada que valga la pena!" El segundo a mando del grupo bandidos informo a su líder, llamado petrus. Petrus un anfibio joven rana prodigio en los robos, asaltos.
"... Billy, Billy. Tienes que aprender a buscar bien y sacar buena información, ¿No es así?" Billy su mano derecha una salamandra varón con varias cicatrices y con poca armadura, mostrando sus cicatrices de forma de intimidación. Astora se preocupó por dentro, todo el dinero se encontraba debajo de la carreta de Goliath. Ahí se encontraba todo los bienes, cosas de valor y dinero extra. "Mirá y aprende Billy. Si vez al anciano está sudando mucho demás, con tan solo verlo se ve claramente esta escondiendo algo, ¿No es así anciano?"
El cuerpo de Astora se contrajo. Petrus confiaba en sus habilidades y su experiencia, sabía que el anciano estaba escondiendo algo con tan solo verlo, fue bastante bueno manteniendo la cara piedra. Pero es una lástima él era demasiado agudo.
"Jefe, ¿quiere que lo haga hablar?" Billy pregunto ansioso, quería torturarlos.
"Aún no Billy. Seremos más profesionales. No es nada personal anciano solo quiero cosas de valor" Se comenzó acercar quedando frente de él. "Te haré una sola pregunta y espero obtener una respuesta satisfactoria. ¿Dónde está?"
"Es todo. Ya no tenemos nada más de valor..."
Petrus sonrió y dijo: "Mentiroso. Se que estás mintiendo, tu movimiento corporal te delata, de seguro en este momento tu corazón está palpitando como un loco. Miré anciano tengo buenas virtudes y una de esas es mi paciencia..." Miró por un momento a sus compañeros para después volverlo a ver. "... Pero ellos no crean que tengan esa virtud así que volveré a preguntar. ¿Dónde está?"
Astora guardo silencio. "... No hay más de valor... Es todo"
Petrus suspiro decepcionado. "Así que elegiste tu orgullo, bueno Billy encárgate de ellos. Háblame cuando esten listos" Petrus se fue y el segundo de mando se acercó sacando dos navajas.
"¡Papá diles la verdad!" Su hijo Rocky entro en pánico.
"¡Hoho, el muchacho ya quiere hablar! Es una lástima ya saque a mis pequeñas bebés. Están demasiadas oxidadas y necesitan un lubricante especial y antes que pregunten que líquido utilizó..." Pasó una daga en su lengua. "Lo sabrán pronto..." Y saboreo su daga.
Rocky no pudo más controlar el pánico y empezó salir de ahí. Empezando a moverse de forma brusca.
"¡Mantén la calma Rocky!" Su hijo no le hizo caso y siguió con movimientos bruscos. El sicópata se acercaba hacia su hijo.
"Antes de comenzar con mi show quisiera preguntar, ¿Derecha o izquierda, niño?"
"¡MALDITO LOCO COMIENZA CONMIGO, DEJA MI HIJO EN PAZ!"
"... Con que te haz vuelto mudo niño. Bueno comenzaré con la... ¿derecha? Nah. Mejor con la izquierda" De forma brusca agarró la cara de Rocky y iba a clavar la navaja directo a su hijo. "No mueras de dolor. Quiero divertirme un rato contigo" Rocky no pudo más y se desmayo. Billy hizo una mueca molesta por el resultado de su intimidación.
"Bueno supongo que lo despertaré con mucho dolor" Aún así no iba a parar.
"¡ESTA BIEN HABLARÉ!" Al final cedió. Jamás podría soportar como a su hijo lo torturaban.
"Muy tarde para decir anciano estúpido" Billy casi puso su navaja en el ojo de Rocky pero fue detenido por su líder que puso una mano en su hombro.
"Billy detente, no vez que el anciano ya quiere hablar. Baja ese cuchillo y veamos que quiere decirnos" Billy no cuestionó la orden de su jefe y obedeció, alejándose de su líder y dejando que tuviera espacio con el anciano.
"¡¿Por qué tienes alguien como él?!" Gritó Astora molesto.
"Anciano yo no cuestionó que tú familia utilice solo a su familia como empleados y creo que no es el momento de cuestionar al tipo que prácticamente acaba de salvar a su preciado hijo... O hubieras preferido tener un hijo ciego"
"¡Tú! ¡No te saldrás con la tuya!"
"... ¿Quieres que le hable otra vez Billy y haga su magia o prefieres hablar?" Astora inmediatamente guardó silencio. "Tic tac, el tiempo esta en su contra"
"... Está... Todo está... ¡Maldición! Todo está en el carruaje de mi hijo, debajo del carruaje hay un escondite... Solo la puedes abrir con mi llave que la tengo en mi bolsillo"
"Vez como fue de fácil. Nos ahorramos los problemas"
"¡Entonces déjanos ir!"
"Eso no será posible" Petrus dijo viendo sus manos tan normal ignorando a astora.
"¿¡Qué!?" Gritó Astora.
"Antes que empieces a gritar, te diré la razón por que no lo puedo dejar ir. Por tu cara se que sabes la respuesta pero eres un testigo y como dije, a mí no me gusta tener futuros problemas"
"¡ERES UN DESGRACIADO, PEOR QUE LA BASURA!"
"Por favor mantenga la calma, Billy será rápido y eficaz está vez, así que esto es un adiós. Billy diviértete pero se rápido. No quiero perder más tiempo" Petrus se levantó alejándose.
"¡VUELVE AQUÍ!"
"Veo que tienes energía anciano, no te importará ser el primero" Saco sus navajas oxidadas y cuando iba empezar a torturarlos una gran sombra cayó sobre Billy, tomando su rostro para después chocarlo contra el suelo.
"¡Nos atacan!" Un miembro del grupo de asaltantes avisó llamando la atención de todos.
Petrus miró a la figura y la reconoció.
"¡Idiotas no pelen contra él" Aunque haya gritado y avisado, no lo escucharon ya querían vengar a su segundo de mando. Los tontos cargaron contra la figura oscura. Uno de los bandidos elevó su espada llevando la espada hacia la cabeza de la figura oscura... Y la figura oscura respondió moviéndose una velocidad anormal tomando la espada en su mano.
"¡MALDITO suéltame!" Así comenzó un forcejeo que no iba a ganar. Utilizó toda su fuerza para mover la espada pero estaba encerrada entre la mano de la figura oscura.
Petrus a lo largo de sus experiencia como bandido había escuchado la leyendas sobre él, todo aquel que fuera bandido, mercenario, ladrón, comerciante, caballero, civil, hasta la misma torre de sapos habían escuchado sobre él. En este momento estaba viendo una leyenda legendaria que pocos anfibios querían encontrarse con él. Y estos idiotas no sabían a quien se estaban enfrentando... Tantos apodos tenía este anfibio, el ejecutor, el carnicero, asesinó de cien anfibios pero el nombre por qué era más conocido... Es Balam El inmortal. Petrus no dudo un segundo más y aprovecho el momento para subirse en su mosquito e irse a toda prisa, abandonando a sus miembros de su grupo. Pero antes que su mosquito arrancará su torso del cuerpo fue sujetado por una especie de cadena que lo amarró. No pudo hacer forcejeo por que fue jalado hacia atrás provocando que cayera en el suelo. Cuando pudo levantar su mirada y ver quién fue el que lo jalo lo miró. Fue Balam que en su brazo que sostenía en su guantelete una especie de dispositivo en su brazo.
"¿¡Jefe a dónde ibas!?" Gritó un miembro incrédulo.
"¡Nos intento abandonar, deja de perder el tiempo y ayúdanos!" Gritó un compañero suyo, específicamente un sapo.
Cada miembro rodeo a Balam levantando sus armas contra él. Balam con calma observó miembro por miembro, se levantó del suelo revelando su gran altura, algunos de los miembros dieron pasos atrás al ver la imponente figura que tenía delante suya. Las luz de la luna reveló a Balam. Con una armadura que cubría todo su cuerpo, no revelaba que tipo de anfibio era, ¿Acaso un sapo del desierto, una rana del valle del sur? No revelaba nada sobre su identidad la armadura se le notaba que había pasado por tanto, rasguños, cortes hechos por armas. Y su casco se veía cuernos incrustados sobre una bestia salvaje, y finalmente una capa oscura lo acompañaba.
"¡¿Quién eres?!" No respondió Balam y dejo de perder el tiempo. En mano aún sostenía la espada y pronto cerró su mano partiendo la espada en dos en mano. El bandido quedó en shock al ver como su preciada arma fue fácilmente rota. Balam no perdió más tiempo y le dió un buen puñetazo bien colocado en el rostro a la rana que seguía sorprendida, mandándolo en el aire a varios metros a distancia.
"¡Vamos por el!" Gritó el sapo levantado su gran hacha de batalla, los demás bandidos lo acompañaron yendo junto su compañero.
"¡IDIOTAS NO TRATEN PELEAR CONTRA ÉL!" Su advertencia fue ignorada y en cambio cargaron contra Balam. Balam esquivó la hacha moviéndose a un lado y dando un puñetazo en el estómago del sapo, noqueando al instante al sapo. Otro miembro, una rana quiso hacerle un ataque sorpresa con sus dagas, saltando por su espalda y queriendo clavar la dagas en su espalda. Balam dio media vuelta y lo agarró por la garganta, usando a la pobre rana como proyectil se lo lanzó a los otros miembros de la banda asaltantes. Estos soltaron sus armas para no sostener a su compañero y no lastimarlo en el proceso.
Error suyo. Cuando miraron donde estaba Balam, ya no estaba su gran figura desapareció en la oscuridad. "¿A dónde fue?"
"¿¡Cómo alguien tan grande pudo desparecer tan de repente!?
"¡Es demasiado fuerte!"
"¡Mantengan la calma chicos!" El gritó de uno de los miembros hizo que reaccionaran.
"Hagamos un círculo, si lo hacemos lo podremos ver donde sea donde este" Estuvieron de acuerdo e hicieron caso haciendo el círculo.
No se lo esperaron. Balam arriba de los árboles estaba observando a los restantes miembros. "Ocho en total..." Recargo la herramienta que tenía instalada en antebrazo. En sus pierna saco una dardo de cuerda, sosteniéndola en su mano. Balam en cuestión de segundos hizo una estrategia para vencerlos. Saco unas más de sus múltiples herramientas específicamente una pequeña bola gris, la pequeña bola en realidad era una bomba de humo, Balam la lanzó hacia el centro donde se encontraban los bandidos.
"¿Qué demonios?"
"¡No lo respiren, puede ser veneno!"
"¡MALDITO COBARDE! ¡DONDE ESTAS!"
Todos se encontraban confundidos y con miedo. Miedo por no ver a su enemigo. Balam lanzo la cuerda de dardo directo en la pierna de uno de los miembros, tomando a uno de los bandidos desprevenido. Balam se lanzo hacia el suelo levantando llevándose hacia arriba. Balam comenzó a pelear usando confusión a su favor. Noqueó miembro por miembro sin mucha dificultad, en cuestión de segundos de todos estaban derrotados en el suelo. Balam camino hacia los civiles atrapados.
"¿Tú eres Balam el inmortal?" Astora pregunto con temor. Balam miró inmediatamente hacia astora y confirmo moviendo la cabeza. "Gracias... Gracias... Por salvarnos..." Agradeció casi queriendo llorar.
"¿Su hijo está herido?" Balam preguntó cortando la ataduras.
"No. Se encuentra bien, solo está desmayado por el susto que se llevó"
"... No se preocupe, ahora están a salvo" Aunque su voz fuera profunda y fría podía sentir la preocupación por ellos. No era alguien con malas intenciones.
"¿Qué harás con ellos?" Astora pregunto.
"Irán a la prisión" Antes que preguntará algo más, Balam saco en su cinturón un pistola de bengala primitiva. Disparó hacia arriba sacando el proyectil rojo hacia arriba.
"Vendrán los guardias por ellos. Mientras ustedes pueden esperar aquí o irse, yo me aseguraré que ellos no se vayan"
"Entendido, es bueno saber aún haya héroes que salven a los débiles"
Balam no contesto lo que dijo astora y siguió caminando hacia petrus que se encontraba arrastrándose en el suelo queriendo escapar. "¿Vas algún lado?" Petrus se detuvo al escuchar la voz de Balam.
"No... Ya sabes me gusta estar en el suelo y que la luz de la luna me este asoleando, es una rutina diaria que hago para que mi hermosa piel este lisa como siempre"
Balam ignoró su clara burla y sarcasmo. "Petrus Leeroy, buscado vivo o muerto por los delitos de robo armando, secuestro, extorsión y fraude, usted está arrestado. No haga ningún movimiento imprudente o su condena será aún más larga" Balam saco una esposas especiales para los criminales.
"Vaya alguien hizo su tarea. No me esperaba encontrar con el ejecutor del mismo Rey Andreas, y yo que pensaba que solo hacías tu justica en Newtopia" Petrus fue esposado y fue lazando juntos sus demás miembros. "¿En serio me va dejar con estos brutos? Me van romper los huesos cuando sepan que los intenté abandonar"
"..." Simplemente Balam se alejó de Petrus. Sacando un libro suyo Balam tacho el nombre de Petrus, este libro contenía los peligroso criminales que seguía afuera en Amphibia.
"¡Señor Balam!" Astora llamó corriendo hacia Balam. Balam se detuvo lo que estaba haciendo y guardo el libro mirando hacia Astora que tenía algo en sus manos. "Como agradecimiento por favor tome ésto" En su mano tenía una gran bolsa de monedas.
Balam negó con la cabeza.
"Debo de rechazar su recompensa. Mientras estén bien para mí es una recompensa suficiente"
"¡Pero usted necesita una recompensa por su esfuerzo!" La rana vieja no iba aceptar un no de su salvador.
Balam ya estaba acostumbrado a la gente insistente, entonces decidió tomar una pequeña recompensa. "Tomare una de sus frutas como recompensa"
"Lo que usted quiera" Balam se acercó a las cajas donde la frutas se hallaban. Tomó una fruta parecida una manzana. "¿Solo eso?" Asintió Balam, confirmando su recompensa. "Estoy en deuda con usted. La familia Vinheim está en deuda con usted, todo lo quiera será dado, ¡Gracias por salvar..." Su agradecimiento fue Interrumpido cuando en el cielo hubo una gran explosión de luces cayendo hacia la espalda de Balam. Balam volteó alarmado viendo a kilómetros a distancia donde la luz había caído. Sus párpados se abrieron cuando reconoció los colores de la luces que cayeron.
"Señor Balam, ¿Qué está pasando?" Balam tardo en contestar pero recupero la calma y respondió rápidamente.
"Problemas..."
Había pasado horas desde comenzó su exploración Eduardo sentía que jamás iba poder salir de ese lugar. Eso creyó hasta encontrarse con una compuerta avanzada salida misma de una película de ciencia ficción. Esta compuerta no tenía nada para abrirla o jalar, la intentó empujar hacia delante pero fue inútil no había manera de abrirla. Eduardo frustrado lanzó una patada hacia la puerta. "... ¿Este es mi final?" Se dejó caer en el suelo rendido. Todo el camino que recorrió fue por nada. No se rindió y volvió levantarse y golpear la puerta con todas su fuerzas. Le dolía todo el cuerpo pero eso no importaba cuando se enojaba.
"Advertencia, advertencia, advertencia, por favor deje de golpear la compuerta" Una voz robótica habló. Eduardo abrió los ojos mirando a todos lados de dónde provenía la voz. Miró nuevamente hacia la puerta llevándose un gran susto cuando una bola del tamaño de una pelota de fútbol lo estaba mirando. Era un ojo conectada hacia la puerta. El ojo parpadeó mirando a Eduardo.
"¿¡Puedes abrirme!?" Gritó Eduardo mirando el ojo extraño. Ya no le importaba que seres se iba encontrar, tenía que salir de ahí.
"Necesito identificación para dejarlo entrar"
"¿Identificación? Soy humano, me llamo Eduardo" Aunque se haya presentado fue ignorando por el ojo. El ojo parpadeó para después en su ojo sacar una luz verde que comenzó a analizar a Eduardo.
"Por favor no se mueva...Analizando... Analizando... Analizando... Sujeto no identificado. Por favor regresé a su celda"
"¿¡Qué, de que hablas!? ¡Necesito entrar ahí!" Dio otra patada hacia la compuerta.
"¡Advertencia, advertencia, advertencia! ¡Último avisó, regrese a su celda, antes que se autorice el uso de la fuerza!" El ojo robótico se torno de color naranja parpadeando entre color naranja a rojo.
"¡Yo no soy un criminal, déjame salir de aquí"
El ojo ya no respondió si no se escondió en la compuerta entrando en un agujero. Eduardo se quedó mirando la compuerta con furia, su furia duro poco cuando varias luces se encendieron y una alarma comenzó a sonar. "¡SUJETO NO IDENTIFICADO SE ESTA RESISTIENDO, ENVÍEN REFUERZOS!"
"¡Estúpida máquina!" Eduardo empezó a correr devuelta pero en su camino piso una placa que hace un momento no estaba ahí. Haber pisado la placa provocó que las estructura comenzará a cambiar, hubo un gran temblor por el suelo pronto Eduardo fue encerrado entre paredes que subieron del suelo dejándolo sin salida. La desesperación creció dentro de él, aunque corriera buscando una salida no encontró ninguna.
*Swing* *Swing* Swing* El sonido de varios ascensores subiendo no dieron buena espina para Eduardo. Percibió como se detuvieron y se abrieron revelando varios robots de forma en híbrida entre rana y un caballero. Levantaron porras eléctricas viendo a Eduardo como objetivo. Eduardo sacó su espada y empezó a defenderse de la horda de robots que iban tras él, se agachó esquivando un porrazo giró hacia su espalda y vio un robot yendo hacia él, Eduardo cortó la cabeza de el robot. Detrás del robot que decapitó llegaron dos robots, casi fue rodeado pero rodó antes de ser acorralado, Eduardo se levantó y atacó a varios de los robots, fueron rebanados fácilmente por la espada que tomó hace horas. Aunque no era muy bueno utilizando la espada ya que solo balanceaba el arma como un inexperto.
Prefería utilizar sus puños, no podía quejarse ya que la espada lo estaba ayudando bastante aún así fue golpeado y sintió el dolor en su espalda. La electricidad hizo el trabajo deteniendo su cuerpo paralizado lo por unos segundos. Eduardo en lo que se estaba recuperando otro robot atacó y pudo reaccionar moviendo su cuerpo y atacando con una tajada atravesando limpiamente. Eduardo pronto fue abrumado por los robots y fue golpeado con las porras eléctricas, su cuerpo no pudo más pronto cayó en el suelo aturdido.
"Objetivo neutralizado..." Habló uno de los robots.
"Aseguren el espécimen"
Eduardo fue analizando por uno de los robots. "Detectó una mínima anomalía, la infección inicio hace quince horas. El individuo esta infectado. ¿Qué hacemos con él?"
"... Elimínelo..." El ojo se volvió de color rojo.
"Entendido" La porra que sostenía en cuestión de segundos se transformó en una espada afilada. Sería una muerte rápida y eficaz el humano no sufriría dolor, fue una lástima eliminar la única especie quedaba viva ya que pronto volverían apagarse.
Y como si fuera un milagro los robots se detuvieron viendo hacia la compuerta que se abrió bruscamente. Dando pasos pesados Balam miró a los robots, analizó rápidamente lo que había pasado. Y su conclusión es que el humano de alguna manera había sobrevivido, eso era algo bueno un portador de la caja de la calamidad estaba bien. Ahora tenía que salvarlo. Sacando su lanza que se tenía en su espalda, lanzó la espada atravesando robot que iba a ejecutar a Eduardo. "¡PELIGRO, PELIGRO, PELIGRO, ELIMÍNELO!"
Los robots hicieron caso a la orden y empezaron a atacar a Balam. Balam está vez no espero y actuó yendo de frente sacando su espada y escudo comenzó a destruir robots. El primero que intentó atacarlo ni siquiera pudo calcular la velocidad del individuo. Balam no miró hacia atrás donde el robot se encontraba en el suelo partido en dos, los demás robots entraron en modo batalla mejorando aún más su cuerpo robótico. Las espadas comenzaron a salir fuego azul, sus brazos se volvieron robustos, todo su cuerpo tomó una estructura una mucho mejor para detener a Balam. Aún con todas esas mejoras no pudieron ser rivales para Balam.
Rebanados por la mitad, rotos, sus partes salían volando por los aires mientras que Balam con una gracia de velocidad iba tras ellos hasta parar y estar junto Eduardo que lo protegió de las hordas de Robots.
Pasó un tiempo y Balam saco su lanza del último robot, el ojo que vigilaba la compuerta estaba sorprendida por haber observado las habilidades de tal individuo. Ya no tenia recursos para acabar con los intrusos. Al menos que... La IA avanzó por las habitaciones yendo hacia la habitación donde se encontraba el espécimen perfecto para acabar con los dos Intrusos. Las alarmas se activaron sonado por todo el lugar.
Balam tomó cuidadosamente a Eduardo cargándolo entre brazos, miró al humano con curiosidad ya que esta era la primera vez viendo a un humano real y no en los libros históricos que se encontraban en el castillo de Newtopia, está información solo la sabía el ya que era uno de los anfibios que el Rey Andreas confiaba. La misión aún no acaba tenía que sacar al humano llevarlo a Newtopia para que este al menos en un lugar seguro pero el viaje le tomaría semanas... Y eso no era el único problema, estaba el problema actual sobre la investigación de la corrupción y de alguna manera la caja de la calamidad había llegado otra vez a Amphibia, tenía que encontrar a los dos usuarios restantes. El plan del Rey Andreas se tenía que completar y él tenía que cumplir con esa misión. No volvería a permitir que nadie sufriera en Amphibia.
Balam pasó por compuerta entrando a las instalaciones de investigaciones antiguas que hacían aquí. Viendo tecnología antigua pero muy avanzada, esta tecnología era muy valiosa pero muy inútil en si ya que no había energía para activarla. Balam sabía cosas de estás instalaciones, no era una información muy agradable hubo horrores en este lugar. Miró hacia las varias cápsulas que se encontraban hacia arriba de él. Mantuvo su expresión estoica aunque no se le iba a notar debido a su casco.
Escucho sonidos en los conductos, soltando cuidadosamente a Eduardo en el suelo Balam gruño, maldiciendo por dentro ya que sabía que iba a tener que enfrentar al guardián de esta instalación. Los ojos de Balam ya estaban adaptados a la oscuridad podía ver cada cosa. De pronto ya no hubo ruido, Balam no bajo la guardia si la levantó aún más. El guardián arriba hacia el destruyendo el conducto, Balam saco su escudo y lo levantó sintiendo la fuerza del golpe, Balam salió volando a distancia chocando contra varios aparatos electrónicos. El humo se disipó y se encontraba Balam intacto del golpe, Balam observó al caballero he hizo una mueca molesta a darse cuenta que entró en modo asaltó, este era el guardián que cuidaba estas instalaciones.
Interiormente Balam sabía que no iba poder evitar está pelea tenía que vencer al guardián si o si, ya que no había otra opción. Saco su espada y escudo. Había mucha tensión en el aire, ninguno atacó como si se estuvieran estudiando. Y el guardián se cansó de esperar fue el primero que corrió hacia Balam. Balam no perdió más tiempo y también avanzó, los dos corrieron levantando el polvo en la habitación y chocaron espadas, provocando una onda expansiva. Balam ataco haciendo cortes profundos en el líquido oscuro del guardián, el guardián gruño furioso y levantó su espada pesada. El guardián comenzó arremeter contra Balam pero esquivó fácilmente esos golpes tan rápidos. Balam utilizó su escudo para protegerse de los golpes, Balam activó en su escudo circular un modo ofensivo en el escudo. El escudo saco sierras y empezó a girar rápidamente, Balam lanzo el escudo hacia el guardián y logró cortarle el brazo.
El líquido oscuro goteo en la herida del miembro perdido del guardián. Este gruño furioso y comenzó a deformarse aún más, en su espalda varios tentáculos salieron por su espalda, estos estaban muy afilados como si fueran la punta de una lanza. Los tentáculos atacaron a Balam como si tuvieran vida propia yendo en diferentes ángulos contra Balam. Balam logró cortar los tentáculos del guardián pero este no se lo dejo tan fácil que le hiciera tales cortes. En un segundo se le regeneraron todos los miembros que había perdido y rugió abriendo su boca y sacando una energía roja oscura por su boca quemando todo lo que estaba atrás de Balam. Sintió el dolor recorrer por su brazo sintiendo la herida provocada por el guardián. No le dio importancia a esa herida y siguió peleando como si no le hubiera pasado nada. Su escudo regreso gracias a la cadena que estaba conectada en su guantelete la jalo hacia el y volvió a cortar los tentáculos del guardián. Utilizó su escudo como arma a distancia cortando más miembros del guardián.
El guardián se regeneraba aunque sufriera daños fatales. Balam gruño interiormente cansado de ver que seguía vivo el guardián, por última vez atravesó el guardián en el pecho y vio un objeto circular dentro del guardián.
Así que tiene un maldito núcleo...
Pensó Balam, con razón era tan fuerte. Decidió ir con todo, se equipo con su lanza llevando las dos armas en manos. Su posición de guardia cambio siendo más ofensivo.
El guardia saltó hacia Balam usando su gran cuerpo hizo un gran cráter y Balam dio un saltó hacia atrás esquivando los ataques. Los empezaron atacarse Balam llevando la delantera por sus ataques precisos lastimó por muchas veces al guardián sin embargo el guardián se regeneraba sin importarle las heridas que sufría. Esta pelea era un duelo de resistencia Balam atravesaba y cortaba mientras que la el guardián atacaba sin descanso. Balam estaba retrocediendo dando pasos hacía atrás y esquivando en el progreso.
"¡Maldita bestia!" Rugió cubriéndose con su lanza y espada de los ataques salvajes. Agradeció que su armadura lo protegía de los ataques infernales. Giró su cuerpo esquivando un espadazo, vio como los brazos del guardián estaban transformándose en armas afiladas. Chasqueo la boca viendo que el guardián estaba evolucionando a un ritmo anormal tenía que acabar con esto rápido, tenía que encontrar el núcleo dentro su cuerpo. Respiro profundamente Balam relajando todo su cuerpo pero pronto su cuerpo comenzó a sacar vapor Balam empezó a gruñir como una bestia, pronto su respiración se hizo agresiva, sus músculos crecieron y su corazón empezó a latir. Llevando su cuerpo límite atravesó fácilmente al guardián. Los corto en dos y observó en cámara lenta las partes del guardián viendo cada detalle, no encontraba el núcleo del guardián, entonces estaba en su cabeza. Piso el suelo y saltó haciendo un hoyo en el suelo y con su lanza lo atravesó justo medio los ojos.
Sintió como la lanza había golpeado el núcleo pero no lo había destruido. El cuerpo del guardián se deformó pero pronto se recuperó y atacó a Balam en el aire. Los dos empezaron el último asaltó siendo agresivos Balam olvidó su defensa y el guardián se hizo aún más grande y monstruoso. Balam rugió como una bestia salvaje y guardián le regreso el rugido.
Eduardo abrió los ojos. Despertando después de que lo hayan noqueado, su visión estaba nublada por oscuridad, podía sentir el suelo temblar. Se intentó levantar tropezó en el suelo sintiéndose bastante débil. Eduardo abrió completamente los ojos cuando justo en su cara algo grande fue lanzado impactando con varias objetos. El guardián se levantó viendo a Balam acercándose. Los dos chocaron armas y Balam soltó sus armas utilizando principalmente sus puños golpeó al guardián en la cabeza. El guardián se recuperó y envío sus tentáculos hacia Balam. Algunos tentáculos penetraron a Balam, sangre azul cayó en el suelo y Eduardo estaba viendo todo eso e iba escapar pero se detuvo viendo a Balam lastimado. Recordó que esa persona lo había salvado así que era momento de regresarle el favor de ayudarlo, saco la navaja que había traído.
Tenía miedo de enfrentarse a esa cosa pero la persona que lo había salvado se encontraba en peligro. Eduardo corrió atacando la espada del guardián encajando la navaja en su espalda. El guardián miró hacia atrás furioso, los tentáculos se separaron del cuerpo de Balam y atacaron a Eduardo. Eduardo no pudo esquivar todos los tentáculos fue atravesado en el hombro, en la pierna y un brazo por los tentáculos afilados. Sintió un dolor inhumano en su cuerpo pero no se rindió con sus mismos dientes mordió con fuerza el tentáculo. El guardián furioso levantó hacia Eduardo iba terminar con el humano de una vez. Sin embargo el guardián dejándose llevar por emociones olvidó su oponente peligroso. Balam saltó hacia la espalda del guardián y tomó con sus dos manos la cabeza del guardián. El guardián intento atacar a Balam pero fue demasiado tarde por que Balam le arranco la cabeza del guardián llevándose consigo el núcleo, aplastó la cabeza del guardián con su manos y el cuerpo del guardián cayó en el suelo acabado. La pelea había durado más de lo que quería miró hacia el humano que lo había ayudado. "¡Niño!" Gritó al ver que las heridas del humano eran graves. Se acercó hacia el humano y saco de su bolsillo viales conteniendo un extraño líquido color esmeralda. Lo abrió rápidamente y se lo dio al humano por la boca. "¡Pronto estarás bien!" Balam tomó en sus brazos a Eduardo tratando de mantener despierto al humano. Pero Eduardo no pudo más y cerró los ojos.
Dentro una instalación desconocida una sombra oscura observa como la luces del cielo caían. El cielo fue atravesado por aquellas luces que él reconocía.
"Señor, detecte múltiples anomalías hacia la instalación tres, cuatro tres"
"Lo he visto Nori... Gracias por el aviso. Así que entonces era cierto la leyenda de la caja de la calamidad..." Se rió ligeramente viendo el espectáculo en el cielo. Tan pronto la luz que apareció, desapareció rápidamente. "Heh... ¿Balam que harás ahora? Las tres estrellas han llegado en Amphibia" Camino hacia el balcón acercándose más haya y miró su brazo escondido entre larga capa. "No importa... Pronto Newtopia caerá. Y la familia Tancred volverá a tener todo lo que perdió..."
Así que fue todo amigos jajaja. Si me tarde más de lo que iba pensar que iba durar este capítulo. La verdad pues este es el prólogo para Eduardo viviendo los misterios que hay en Amphibia y aún muchas cosas que se van a descubrir en el futuro para Eduardo y Balam.
Espero que le haya gustado el capítulo que tenga una bonita tarde.
