Candy sintió un golpe leve en la mejilla, era Anthony quien la saludó con un beso fugaz, Albert se detuvo al ver la escena donde su sobrino le puso a Candy el brazo en la cintura.
Anthony ¿Qué haces aquí? —, preguntó sorprendida.
—Mis hermanos me dijeron que hoy vendrías a inscribirte y, heme aquí dispuesto a acompañarte hasta que termine el proceso.
—No es necesario que te quedes, como ves la cola es kilométrica hay varios delante de mí.
—No te preocupes por eso que ya lo tengo resuelto —, le dijo guiñándole el ojo.
— ¿A qué te refieres?
Anthony se le acercó al oído para que los que estaban alrededor de ellos no lo escucharan —, tengo una conocida que nos va a ayudar, ven conmigo, así evitarás hacer esta enorme fila. —Le agarró la mano y la jaló, ella un poco temerosa de perder su lugar no avanzó con él.
—Me da miedo perder mi turno.
—Confía en mi pecosa, te explicaré en el camino.
Candy buscó a Albert con la mirada pero ya no lo encontró.
—Pues bien, en el portón de la universidad me encontré a la mamá de uno de mis ex compañeros del colegio, al verme me reconoció, me platicó que trabaja en la rectoría y me preguntó que hago aquí, le comenté que venía a acompañarte, ella se ofreció a inscribirte sin que hagas fila, pero no me saldrá gratis, quiere que recomiende a su hijo para trabajar en el canal, así que accedí, ¡no dejes ir esta oportunidad!
—No tenías que comprometerte por mí.
—Para mí es un placer serte de utilidad, ¿conversaste con mi tío? lo vi merodeando por aquí ¿Qué vino a hacer? A nada tiene que venir.
—No tuvimos oportunidad —, Candy rectificó su respuesta para verse indiferente ante Anthony —, me refiero a que no tenemos nada de que conversar.
—Espero que pronto se vaya a Escocia.
— ¿A que vino? ¿Por cuánto tiempo se quedará? —, le preguntó Candy tratando de disimular su interés.
—Según para hacer auditorias, pero mejor cambiemos de tema, me invitaron a los dulce dieciséis de una chica de la Iglesia, y quieren que tenga una intervención musical, me gustaría que me hicieras la discante. —la invitó Anthony entusiasmado.
—No me agradan las fiestas y…
— ¿Cuándo te convertiste en el grinch? Candy, anímate tienes una voz hermosa, yo te acompañaré con el piano y tu cantarás "Mi tributo".
—Ese canto es uno de mis favoritos.
—Lo sé, me acordé qué te gusta, ¿Entonces si o si?
—Espero que no se decepcionen, esperan escucharte cantar a ti no a mí.
—No, de mi sólo esperan a que toque el piano, pero les daremos una sorpresa, entonces así quedamos hoy llevaré mi teclado a tu casa para que ensayemos ¿de acuerdo?
Candy lo dudó un poco pero luego asintió, entraron a la rectoría le dio sus papeles a la conocida de Anthony, ahí mismo rellenó el formato para el concurso de la beca, firmó todos los documentos que le indicaron, por último le dieron su recibo donde pagó la colegiatura; él le dijo a Candy que se despediría de la señora que por mientras lo esperara en su auto. Cuando salió de la oficina Anthony le dijo a la señora:
—Deme la solitud de beca de mi amiga.
—No te preocupes Anthony, yo misma la llevaré a ese departamento.
—No quiero que entregue el formato.
—Pero vi que tu amiga está entusiasmada con eso…
—Ella quiere irse porque tiene problemas en su casa, pero yo prefiero que los resuelva. ¿Sabe algo? ahorita mismo llamaré al canal para que citen a Michael para una entrevista, pero rompa esa solicitud.
La señora deseaba que su hijo obtuviera ese empleo por lo que marcó el número que le dictó Anthony —, ten el teléfono.
Anthony habló con el de recursos humanos para que contrataran a su ex compañero como asistente de producción, luego de eso la señora rompió aquel papel delante de él.
Candy abrió el auto de Anthony y escuchó una voz de reproche.
—Tanta confianza hay entre ustedes que ya hasta te da las llaves de su Mustang.
Ella giró y vio a Albert con el ceño fruncido.
—No veo ningún problema en ello —, le contestó Candy con mirada desafiante —, o es que tu familia también impedirá que Anthony y yo sigamos con nuestra…— Candy vio que Albert poco a poco estaba desorbitando los ojos y arqueando las cejas —, relación —, completó la frase con la intención de que se enterara de que le era indiferente su presencia.
— ¿Relación? ¿Qué tipo de relación puedes llevar con un drogadicto?
—Lo siento mucho señor Andrew, pero creo que no es de su incumbencia tiene años que usted y yo dejamos de ser amigos.
— ¿Amigos? Eso fui para…
—Tío ¿Qué haces importunando a mi novia? —, dijo Anthony en son de broma, sabía que Albert quedó como jefe de familia y le debía cierto respeto.
—Sólo me acerqué para saludarla, te felicito, has elegido bien.
—Así es tío, ella me llevará de nuevo al redil, es lo que necesito: una chica buena, dulce, hermosa —, al decir eso dibujó un beso con su boca y la acercó a él, ella alzó su rostro y unieron sus labios con Albert de testigo.
—Es mejor que no haga mal tercio, nos vemos en la casa Anthony.
Albert se retiró de ahí, se sentía ofuscado, los celos lo invadían. Candy abordó el auto sintiéndose devastada pensó que Albert se violentaría y la llevaría con él.
Anthony fue a dejarla a su casa y entró a pedirle permiso a Braulio para ensayar en la recámara de Candy.
—Muchacho, no creo que sea buena idea.
María intervino—, Déjalos ensayar en la cochera.
Después de lograr el permiso, Anthony se fue a almorzar a su casa y a descansar un rato para regresar con Candy.
Antes de salir escuchó que le cuestionaban con una voz autoritaria —, ¿A dónde vas con ese teclado?
Hola chicas les comento que hice un trato con una amiga y me pidió que actualizara Olvidé como amar, es por eso que la actualicé, si ella me hubiese dicho que actualizara olvidé como amar 2 pues la hubiese actualizado.
Luisa te cumplí, muchas gracias. Desde el próximo sábado si Dios lo permite subiré un fic navideño, les comento que será corto y que terminará antes del 24 de Diciembre primero Dios porque es para un concurso. Saludos y acepto sugerencias de que fic quieren para la siguiente actualización.
