Los personajes son de S. Meyer y las canciones son de Melendi.
Summary: Jasper y Alice se conocen desde niños, algo surgió entre ellos y murió, ahora que ha pasado el tiempo él recuerda lo mejor de ese momento que vivió con el amor de su vida.
Caballero desplomado
"¿Qué estará haciendo ella ahora? ¿Será feliz? ¿Se acordará de mí?" esas y muchas más preguntas se repetían en mi cabeza desde que me encontraba metido entre estas cuatros paredes que consideraba casa, pero no era mi hogar.
Llevaba tres años sobreviviendo. Mi vida era una rutina cíclica, pero no me importaba. Tenía cinco años cuando dejamos mi Houston natal para mudarnos a Biloxi, la empresa de mi padre había creado una sucursal y él era el indicado para dirigirla. Desde luego mis padres, estaban contentos, un ascenso, en aquel momento no lo sabía, lleva un aumento de sueldo.
Con mi corta edad no entendía porque tenía que dejar a mi amigo Peter, me puse a llorar cuando mi madre me dijo que Peter no podía venir con nosotros, ni tampoco yo podría pasar tiempo con él en su casa, porque nuestra nueva residencia estaba muy lejos. Peter era mi vecino, ambos teníamos la misma edad y nuestras madres eran amigas.
Nos mudamos a un vecindario en Biloxi donde todas las casas eran iguales y pegadas entre sí, si no fuera porque había un número que las diferenciaba no sabrías cual era la tuya. Cuando llegamos justo a tiempo, el camión de la mudanza estaba estacionándose en la puerta.
De la casa de al lado, salió una niña, iba con su madre, debía tener mi edad, pero era muy bajita. Tenía el pelo negro, era corto pero el suficiente para hacerle dos coletas. La niña parecía un hada en miniatura.
—Alice, entra en casa —dijo su madre desde el umbral.
—Mamá, te dije que vendría un matrimonio con un niño de mi edad a esa casa —señaló mi casa — muy pronto.
—Vale, pero ahora entra en casa. —Su madre tiraba de ella — ya te he dicho que no tienes visiones, que tarde o temprano alguien compraría la casa y suelen ser familias con niños porque el vecindario es muy seguro y está diseñado para eso.
La madre consiguió llevarse a la hija al interior de su casa, pero la pequeña iba refunfuñando, me reí bajito porque era muy graciosa, pequeñita y refunfuñando.
Como es de esperar en un vecindario de ese tipo, mi madre y la madre de Alice, se hicieron amigas, por tanto nosotros también. Ella tenía una hermana menor, Cynthia, era apenas un bebé llorón que siempre estaba pidiendo por su madre.
Alice y yo terminamos en el mismo colegio, aunque ella tenía más amigos y yo hice los míos propios, siempre estábamos juntos cuando estábamos en casa, o bien yo iba a jugar con ella a su casa o ella venía a la mía.
Alice fue mi primer todo, el primer beso, aunque fuera breve y como consecuencia de un juego infantil.
—Hola Jasper —dijo cuándo le abrí la puerta de casa, ambos teníamos 14 años, ya no quedaba nada de la hadita refunfuñona que conocí cuando me mudé, aunque seguía dando miedo si se enfadaba — ¿Vienes esta noche a la fiesta de Charlotte?
—No sé si mis padres me dejaran.
—¿Por qué no? Eres un chico responsable. Dile que sus padres estarán allí.
—¿Una fiesta con padres?
—No van a estar, tienen una cena con unos amigos, por eso nosotros estaremos de fiesta.
—Le peguntaré a…
—Hola Alice —nos interrumpió mi madre — ¿qué haces por aquí?
—Hola señora Whitlock, venía a invitar a Jasper a una fiesta en casa de nuestra compañera Charlotte.
—¿No sois muy jóvenes?
—Sus padres estarán en casa, más que una fiesta es una reunión de amigos.
—Está bien pero pronto en casa.
Los dos nos fuimos a casa de Charlotte, allí ya estaban Dimitri, Aro, Jane, Alec y Bree. Solo faltábamos nosotros dos. Después de cenar unas pizzas con refrescos, jugamos al juego de la botella. Al principio no quería pero Alice me convenció.
—¿Todos sabéis como se juega no? —Todos asentimos a lo que dijo Charlotte —lo vamos a hacer más divertido, mientras jugamos a la botella, tenemos variedad. Empiezo yo, si no queréis besar a esa persona beberéis un chupito de Tequila o responderéis una pregunta.
Ella empezó y tuvo que besar a Jane, fue muy calienta ver el morreo que las dos se pegaron, y eso que a ambas les gustaban los chicos. Cuando fue el turno de Alice, convenientemente la botella se paró en mí, pensaba que no me besaría, pero se lanzó a mi boca como si fuera la última gota de agua en medio del desierto. Después de ese beso, ya nada fue igual, cada vez que la tenían que besar o alguien me besaba a mí, yo me ponía celoso y vi que ella también.
Alice también fue mi primera novia, después de esa fiesta, le pedí salir conmigo, fue la primera chica con la que bailé sin pisarle los pies y mi primera vez en el ámbito sexual. Ambos fuimos a la universidad de Nueva Orleans, ella para hacer una licenciatura en administración de empresas y yo para hacer la licenciatura en ingeniería civil y ambiental. Pensamos que no lo conseguiríamos, porque ella había aplicado a más universidades donde podía estudiar esta carrera, pero por suerte para ambos terminamos en la misma universidad y compartiendo un piso.
Al estar en carreas distintas, nuestros horarios fueron distintos, y cada uno tenía su grupo de estudio, eso hizo que fuéramos distanciándonos hasta que rompimos nuestra pareja. Pero seguíamos llevándonos bien.
—¿Esto es definitivo? — le pregunté cuando ella decidió terminar con lo nuestro.
—No lo sé, mientras estemos estudiando no podemos ser más que amigos.
—¿Por qué? ¿Te gusta otro?
—No seas idiota, pero tenemos horarios diferentes, amigos diferentes, y solo nos vemos cuando llegamos a casa a dormir. No tenemos vida juntos fuera de estas cuatro paredes.
—¿Y más adelante?
—Más adelante veremos.
Esperaba que lo nuestro funcionara cuando termináramos los estudios, aunque ella no me dio esperanzas, tampoco me las quitó. Durante los años universitarios, me liaba con cualquier chica que estuviera dispuesta, intentaba darle celos, para que volviera conmigo, pero eso se volvió en mi contra, ya que ella terminó echándose un novio, un compañero de su clase y al que había visto a veces por casa cuando estábamos en época de exámenes.
Estoy tan desesperado que le he escrito una carta, que sé nunca leerá, pero me dijo mi terapeuta que escribiéndole como me siento, podré sobreponerme a su recuerdo.
Alice, sé que no vas a leer esto, pero me gustaría que supieras que te sigo amando. Hace día que no salgo de casa, lo de fuera no me interesa. Sé que te hice daño y no me besarías ni aunque fuera una predicción de profeta. Recuerdo tu cara amenazante cuando me decías que algún día lloraría, y yo me ría de ti por eso, pero tengo que darte la razón, desde que te fuiste no he dejado de llorar por la pena que me dio perderte.
Estoy solo entre las cuatro paredes que es mi habitación, me estoy volviendo loco. Tengo las paredes llenas de posters de bellas mujeres, pero solo me importas tú. Que mis labios ya no son el cementerio donde los tuyos vienen a morir. Me has robado el aire y me va a costar sobrevivir. Me has tirado al mar de pies atados y sujetando los recuerdos con las manos.
En el pasado me quedé, cuando te volvías loca siempre que te tocaba donde en el amor resbalas por debajo de la ropa, cuando me pedias guerra una y otra vez.
Besos
Jasper.
Con la carta llena de lágrimas, la pliego y la guardo. Poco después entra María, la prima de Peter, ella es mi última amiga con derechos.
—¿Otra vez llorando por esa chica que no te supo valorar? —pregunta enojada.
—Fuimos amigos desde pequeño, y sé que no me porte bien.
—Le das mucha importancia a ella. Jasper, abre los ojos, ella se fue, y aunque vuelva dudo que retoméis lo vuestro.
—Sobre todo después de lo que hice.
—No sé qué hiciste, pero olvídala. Yo tengo un remedio para ello.
María comenzó a besarme, pero mi cuerpo no respondía, hoy no estaba para nadie, sobre todo porque es el día que le pedí salir, si hubiéramos continuado juntos, celebraríamos diez años.
María se marcha furiosa de mi casa, tal vez sea mejor así, no tengo el cuerpo para fiestas. La única mujer a la que amé, amo y amaré, es Alice Brandon.
Gracias a Cary, mony17 y Jade HSos por dejarme sus reviews, también a las personas que solo leen. Espero que este OS os haya gustado y ya estoy preparando el siguiente.
