CAPÍTULO 19 (Arco II): Comprensión


Luan terminó de mojarse la cara y salir del baño para ir por su chaleco y sudadera en su habitación, escuchó como el piso inferior comenzaba a oírse actividad, supuso que serían, sus hermanas, Elías o los hermanos de este haciendo cosas en el primer piso de la casa. La ex castaña bajó las escaleras y se topó con Lynn y Leni caminando, abrazadas una de la otra.

Al llegar a la cocina, encontró a Luna y Lisa ayudando a la hermana de Elías, Merly.

-Oh! Luan.-Dijo al verla llegar.-¿Que tal? ¿que haces aquí?

-Ah, hola ... eh...-Murmuró.-Estoy bien, solo ... solo bajé un rato.

-Hey ... sis.-Dijo Luna, llamando a su hermana.

-Hola, Luna.-Le saludó con una ligera sonrisa.-Hola Lisa ¿que hacen?.

-Ayudamos al Sr Harman y a su hermana.-Respondió la genio.-Regresaron tras hacer unas compras según nos han dicho.

-Oh, ya veo.-Respondió.-Oigan ... ¿necesitan ayuda? si quieren... puedo hacer algo, solo pidanmelo.-Comentó tímidamente.

-¡Oh, Fantástico, Luan!-Respondió Merly.-Ya que lo dices, puedes ayudarme con la harina que está en esa bolsa, iré a buscar una fuente donde ponerla, aunque creo que mejor sean 2.

-Ok.

La ex comediante tomó el saco de harina y lo puso en la mesa de la cocina como la castaña le había indicado mientras que ella revisó los cajones buscando un par de fuentes grandes de plástico, puso ambas arriba y con Luna y Luan, las llenaron de harina.

Merly entonces echó agua sobre una fuente, y Luan con otra, y esta junto con Luna fueron las encargadas de mojar toda la harina hasta que se hiciera masa, mientras que Lisa ayudaba a Merly en buscar otros ingredientes para lo que iban a preparar, Merly buscó en los muebles superiores, y Lisa en los de abajo.

Mientras tanto, en el segundo piso, Lori estaba pasando la aspiradora en su habitación que compartía con Leni, ya había aspirado el primer piso y aspiró las habitaciones de sus hermanas, avisándoles primero, claro.

Solo quedaba la suya y la de Leni y finalmente terminó, ordenó el cable de la aspiradora y miró su habitación, se veía bastante limpia, cosa que dejó la Loud mayor satisfecha.

Aunque, sin embargo, observó a detalle el lugar, la cama suya, y la cama de Leni estaban respectivamente al lado de la ventana y al lado de la puerta, un mueble entre medio de ambas camas, y un armario al frente suyo a los pies de esas.

Era exactamente como era su antigua habitación, en Royal woods.

Lori suspiró y se pasó el dorso de su mano por la frente, viendo su habitación que compartía con Leni, ambas hacían todo juntas desde que tenía memoria, en las buenas, y en las malas, compartían habitación, iban a un mismo grupo de amigas, o bien, tenían el mismo tipo de amistades, y casi siempre iban juntas al centro comercial.

Siempre hicieron todo juntas desde que tenía memoria.

La chica se quedó cabizbaja, pues tal como vinieron a su mente viejos recuerdos nostálgicos al ver su habitación, casi por tracción, avanzaron hasta los momentos en el que tanto ella, como el resto de sus hermanas consideraban el peor momento de sus vidas, lo cual hacía que solo tuviera ganas de lamentarse, llevándose la palma de su mano al rostro, soltando un pesado suspiro, quizás fue demasiada nostalgia para ella.

-Desearía que las cosas hubieran sido diferentes.-Pensó.-Quizás así, nada de esto habría pasado... y no estarías pasando por todo esto, Leni.

Guardó la aspiradora y fue al baño a lavarse las manos, al subirse las mangas de su sudadera, se reveló que los brazos de Lori estaban completamente vendados, desde la muñeca hasta probablemente el hombro, a pesar de que sus heridas ya habían cicatrizado hace mucho, ella se las vendo hace un par de semanas, pues para Lori, tener que ver siempre sus cicatrices era como si, una y otra vez, le restregaran lo que tuvo que soportar con sus hermanas en el reformatorio. Uno pensaría que las cicatrices de sus hermanas también tendrían ese efecto en ella, pero lo cierto es que no fue para nada así.

Lori había hecho una promesa de ser una buena hermana mayor a partir de ahora, protegería a su familia sin importar que, haría lo que sea para ayudar a sus hermanas menores en lo que fuera necesario, una forma de intentar redimirse para convertirse en algo mejor.

Y también para honrar a su hermano en donde quiera que estuviese en esos momentos. En su nombre, Lori hizo la promesa de ser una buena hermana mayor, anteponiendo a sus hermanas antes que sus propias necesidades, tal y como Lincoln lo hizo.

Miró un poco sus vendajes y soltó un suspiro, entonces procedió a lavarse las manos y la cara, necesitaba despejar un poco su mente. Pero entonces, la puerta tras suyo se abrió, era una de sus hermanas.

-¿Lucy?-Dijo al verla pasar, y esta parecía igual de sorprendida al ver a su hermana mayor, pues no esperó encontrarla allí.

La gótica no respondió, desvió un poco la mirada y empezó a juguetear con sus dedos.

-Lucy.-Dijo Lori.-Tranquila, esta bien, no me molesta que estés aquí...además ya había terminado de lavarme.

Lucy volvió a mirar a su hermana, manteniendo las manos juntas, se mostró como si quisiera decir algo, pero entonces se arrepintió, y permaneció en silencio.

-¿Lucy?-Preguntó la mayor.-¿Que pasa?

Entonces ella se acercó a la gótica con preocupación, pero esta le respondió con sus brazos rodeándole la espalda y posando su rostro en su pecho suavemente, Lori no tardó en ver que Lucy la estaba abrazando, y seguramente era por alguna razón.

Lori entonces correspondió y le acarició el cabello con suavidad.

-Lucy.-Dijo ahora un poco más preocupada.-¿Por que no dices algo? ¿Qu... que pasa?

Pero ella solo negó con la cabeza como respuesta, y antes de que Lori pudiera decir algo más, la gótica la tomó de la mano e hizo que la acompañara a su habitación y a la de Lynn, la soltó cuando Lori se quedó frente a la entrada, mientras que Lucy se colocó en medio de ambas camas.

Cabe destacar que, a diferencia de la habitación de Lori y Leni, la de Lynn y Lucy era en cierto modo, más casual, pues las camas no se diferenciaban mucho una de la otra, el lado de Lynn ya no tenía cosas de deportes a su alrededor, solo una cómoda a un costado, mientras que el lado de Lucy ya no era de un estilo gótico, aunque su cobertor era negro con flores grises, pero nada más, una habitación doble común y corriente, sin mucho que destacar.

-¿Lucy?

Entonces la ex gótica se arrodilló frente a su cama y sacó algo de debajo. Lori soltó un suspiro a la par que se llevaba la mano a la boca, pues lo que su hermanita había sacado, era nada menos que el peluche de felpa de Lincoln, bun bun. O al menos eso parecía.

-¿D...D...De donde sacaste eso?-Preguntó Lori, sorprendida y consternada a la vez.


(Flashback, 4 años atrás)

Lincoln había regresado con Lucy de la escuela temprano, el albino había llamado poco antes a sus padres diciéndoles que tendrían que regresar pronto ¿la razón? Lucy había recibido una fuerte humillación por parte de sus compañeros, hubiera sido peor si Lincoln no hubiera llegado a tiempo.

Dejó que la gótica fuera a lavarse por los huevos y basura que le habían arrojado encima, pero pudo notar ligeros sollozos de su parte cuando subió las escaleras. No era la primera vez que pasaba eso, la cuarta más bien, y Lucy claramente no era la única que lo estaba padeciendo.

Pasó un rato y Lincoln se quedó a esperar a su hermana mientras se bañaba, y como no había ruido en la casa en ese momento, además de las paredes delgadas, el albino oyó como el agua de la bañera dejó de fluir, indicando que la gótica había terminado de bañarse, y esperó un poco más mientras Lucy iba a su habitación a cambiarse.

Lincoln no podía evitar seguir sintiéndose triste por su hermana menor, fue entonces que recordó algo que había estado haciendo a escondidas de todos, sencillamente no recordaba a esas alturas la razón del porque había iniciado dicho "proyecto", pues fue hace más de 2 meses y con todo lo ocurrido recientemente, el ya tenía mucho de lo cual preocuparse.

Aún así, recogió aquello que guardó debajo de su cama, la cual no creyó volver a tomarlo: era un conejo de peluche, similar a bun bun, aunque este no estaba tan bien tejido como el original.

-¿Lincoln?

El chico se sobresaltó del susto al ver a su hermana atrás suyo, la chica ya se había terminado de vestir, pues aún tenía puesta la toalla en la cabeza.

-Ah... Lucy.-Dijo reincorporándose.-No te sentí venir.

-Ya estoy... acostumbrada.-Dijo rodando la cabeza a un lado hacia abajo.

-Esta bien... esta bien, Lucy.-Dijo poniendo su mano en su hombro, la gótica entonces notó en la otra mano de su hermano al peluche que el había sacado de debajo de su cama.

-¿Que es eso?-Preguntó Lucy al ver el peluche que Lincoln tenía y que el mismo elaboró.

-Oh, esto.-Dijo viendo el muñeco.-Es... algo que hice hace mucho tiempo, y que dejé a medio terminar después.

-¿por qué?-Preguntó.

-La verdad yo también quisiera recordar por que empecé a hacerlo en primer lugar.-Respondió llevándose la otra mano a la nuca.-Fue hace tanto tiempo que ya ni puedo recordar, además... con lo que ha ocurrido recientemente tampoco me ha dado oportunidad para hacer memoria.

-Pues... es un lindo trabajo de tu parte, Lincoln.-Comentó Lucy.

-No estoy seguro.-Respondió viendo al peluche que estaba sosteniendo.-Aún tiene partes que no he tejido del todo bien, pues todavía tiene partes que no he tapado con hilo, no soy tan sastre como Leni.

El albino se llevó la mano a la barbilla y reflexionó un poco respecto a dicho peluche con Lucy a su lado.

-Mmmhhh, si el trabajo hubiera sido mejor, quizás se lo hubiera regalado a Lily o alguna de ustedes para su cumpleaños...

-¿Por que regalarnos algo así?-Preguntó Lucy, confundida.-Bueno... con Lily podría ser, pero yo dudo que necesite alguna vez uno, además... yo tengo a Edwin.

-Uno nunca sabe, Lucy.-Respondió.-En mi caso, Bun bun me ayudó a dormir desde que tenía 2 años.

-Oh.


(3 Días antes del juicio)

Lucy yacía escondida en el sótano, abrazada contra su cuerpo, temblando; esta vez no le habían arrojado cosas como de costumbre en la escuela, ahora había evolucionado a golpizas, del mismo modo que a sus hermanas mayores sin importar de los intentos mayormente infructuosos de Lincoln para parar las golpizas contra sus hermanas por parte de la gente de la ciudad.

De pronto, Lucy oyó como alguien movía las cajas que ella había puesto a su alrededor, la gótica se exaltó al principio, sin embargo, se calmó bastante al ver que era Lincoln, pero se sintió avergonzada al tener que ser vista así por parte de su hermano.

-¡Lucy!-Dijo el albino.-¿Estás bien? ¿que sucedió?-Preguntó, muy preocupado.

-Por favor, no me veas.-Rogó ella, cubriendo su rostro con sus brazos y desviando la mirada.

Pero Lincoln solo abrazó a su hermanita, la cual al sentir su calor, luego de tanta humillación desde hace días, simplemente le correspondió, enterrando su rostro en el pecho de su hermano mayor.

-Lo siento, Lucy.-Dijo el albino, en un tono entristecido.-Si hubiera llegado antes...

-No, por favor.-Dijo con la voz quebrada.-No digas eso, esto no fue culpa tuya.

No dijo más y siguió dándole su afecto y consuelo a su hermana menor, no se separaron por un buen rato, hasta que Lucy se calmó un poco, pero su rostro estaba hecho un desastre por todo su maquillaje escurrido por sus lágrimas.

Lincoln no sabía como iba a terminar todo esto, y temía por sus hermanas, en este caso, Lucy era con la cual tenía que estar, pues aquel día, fue de las menores que peor lo pasó. Fue entonces que recordó lo que tenía en su bolsillo, y lo sacó, era el peluche que había tejido el mismo, ahora estaba mejor tejido y cubierto a comparación de la última vez que Lucy lo vio, y ahora tenía una camisa naranja como la que el albino solía usar, pero no era abotonada, sino una camisa simple. Lincoln le mostró y entregó aquel muñeco a su hermana.

-Ten.-Dijo Lincoln.

Lucy no entendió lo que su hermano estaba intentando hacer, por ende, lo miró confundido, a pesar de que su cabello cubría sus ojos, su rostro era uno de tristeza y desconsuelo. Lincoln permaneció con su mano con el conejo de peluche frente a Lucy para entregárselo, dentro de poco, la gótica tomó al muñeco, y lo rodeó con sus brazos mientras esta era a su vez abrazada con Lincoln.

-Lincoln...

-Tranquila, hermanita.-Respondió el.-Estoy aquí, ya pasó, solo... consérvalo, tu lo necesitas más que yo.


(Fin del flashback)

-¿De donde sacaste eso?-Preguntó Lori, sorprendida al ver el muñeco muy parecido a bun bun.

-Lincoln.-Dijo ella.

-¿El... te lo dio?

La ex gótica asintió, y abrazó al peluche contra su pecho, aunque por su flequillo no se veía, Lucy cerró los ojos al abrazar dicho conejo que Lincoln le había regalado, de algún modo, se las arregló para conservarlo durante todo este tiempo, ni siquiera Lynn sabía que lo tenía a pesar de que compartían habitación.

-Oh, Lucy...

Conmovida, y a la vez triste por su hermana, Lori se puso a su altura, y la abrazó, Lucy simplemente se dejó querer, permitiéndose derramar unas cuantas lágrimas.

-Lucy... perdóname.-Dijo Lori, con un nudo en su garganta.-Esto es mi culpa.

"Lucy, perdóname, esto fue culpa mía" la voz de su hermano resonó en su mente al oírlo de su hermana mayor esta vez, se mordió los labios y abrazó con fuerza al peluche que su hermano le regaló, pudiendo sacar nuevamente lo que sentía.

-¡No!-Se quejó ella, sin llegar a gritar.-¡Esto no fue culpa tuya, fue...! ...fue culpa de todas, de todas nosotras...

Lori suspiró, y no se separó de ella, algo que Lucy tampoco quería hacer pronto.

-Por favor, hermana.-Pidió ella.-No digas eso, ya... ya no hay nada que hacer.

-Esta bien.-Dijo Lori con tristeza por su hermanita.-Lo sé... ya... ya no hay nada que hacer, solo tenemos que seguir adelante. Es todo lo que podemos hacer...

Lori abrazó con fuerza a su hermana, y esta se dejó querer, pues en ese momento de dolor, era lo que Lucy más añoraba.

Regresando a la cocina, Luna y Luan trabajaban con la masa ayudando a Merly, mientras que esta era ayudada por Lisa en los demás ingredientes como chocolate empolvado y chispas para poner encima, además de huevos y azúcar para hacer también pancakes, cabe destacar que fue una buena idea para que las chicas pudieran distraerse un poco y hacer algo dentro de la casa además de su tarea, comer, hacer sus camas, almorzar, y andar deprimidas todo el tiempo, necesitaban algo que ayudara a su animo.

-Eh, disculpe, señora Merly.-Dijo Lisa.-me quiero disculpar por mi ignorancia pero, ¿que es lo que vamos a celebrar exactamente?

La castaña entonces hizo desaparecer su mirada serena que tenía hasta entonces, pasando a ser una de nerviosismo y un poco de tristeza, pero no por si misma, sino por Elías.

-No es algo sencillo de explicar, chicas.-Respondió.-en especial para mi hermano... es algo complicado.

-¿O...Ocurrió algo?-preguntó Luna con timidez.

Merly no respondió, solo rodó los ojos por un momento.

-...si.-Dijo en voz baja, con un tono de tristeza.-Pero no creo que me corresponda a mi decirles, esto va más por mi hermano, solo esperen a que todo esté listo, les prometo que pronto lo sabrán, solo esperen, ¿si? que Elías sea el que les explique todo.

El tono en que la castaña hablaba indicaba que era mejor hacer caso a lo que decía, pues no parecía algo fácil de discutir, ni para ella, ni para Elías ni Audley probablemente. Quizás no era un bueno momento para insistir, pues dicho tema parecía bastante delicado según lo vieron las 3 hermanas Loud.

-Esta bien, señora Merly.-Dijo Luna.-Si usted lo dice, creo que después se lo preguntaremos a el.

-A propósito.-Dijo Luan.-¿Donde está ahora el Sr Harman?


El mencionado estaba terminando de hacer su cama, se le veía bien en animo, además de satisfecho de concluir con la limpieza de su dormitorio, cabiendo señalar que su cama era de 2 plazas.

-Nada mal.-Se dijo así mismo.-¿No crees, amor?

Elías volvió a mirar aquella foto donde estaba el junto a una mujer y una niña, los 3 sonrientes y felices en dicha foto puesta en su velador a la izquierda de la cama, se acercó y la acarició con sus dedos, fijándose en la mujer y la niña que lo acompañaban. Soltó una pequeña sonrisa de nostalgia al contemplarla.

Luego fue al primer piso tras salir de su dormitorio, ya que estaba ayudando a su hermana en la cocina, y no la iba a dejar sola, pero cuando fue al pasillo, chocó accidentalmente con Lori, que acompañaba a Lucy.

-¡Ow!

-¡Ay!

-Perdón... fue mi error.-Dijo Elías.-No te había visto, Lori.

-No, no, descuide.-Le respondió la mayor.-Fue también mi culpa, no lo sentí, creí que estaba en la cocina con su hermana, Señor Harman.

-Bueno, si, estaba.-Dijo el castaño.-¿No me sintieron cuando subía las escaleras?

-Ehhh... no.

-Oh, bueno, esta bien.-Respondió Elías.-Que tal si bajamos, mi hermana debe de necesitar ayuda.

Ambas hermanas asintieron y junto al castaño, bajaron las escaleras, yendo detrás suyo, aunque luego, Elías no tardó en volver a dirigirse a Lori y a Lucy bajando las escaleras.

-Chicas, a propósito.-Dijo el doctor.-Mañana iré a la ciudad mientras van a la escuela ustedes, van a tener que acompañarme cuando las recoja.

-¿Por que?-Preguntó Lori.

-Merly y Audley no estarán en casa, y solo yo tengo el auto... además se que le aún... les pone nerviosas tomar el autobús solas.

-Oh.-Respondió.-Es...Esta bien, señor Harman, si usted lo dice...

Y fueron a la cocina a ayudar a Merly y a sus demás hermanas que la estaban ayudando, Lori entonces se ofreció para ayudar a la hermana de Elías en Lugar de Lisa, Merly y Elías agradecieron mucho la ayuda de las chicas; en una de esas, Lisa aprovechó para preguntar por que iban a preparar todo eso, sin embargo, Elías respondió que eso era para la noche del día siguiente, donde iría luego de nuevo de compras por unas pocas cosas más, pues además de sus hermanos, vendrían también sus padres, las hermanas Loud se quedaron sin palabras, pues no se esperaron algo así.

Sin duda, la fecha de mañana, Lunes, era muy importante para los Harman por alguna razón. Y eso los haría hacer una "celebración" en familia, pensar en eso para Lucy, le hizo recordar ese flashback con Lincoln, y la pobre se desanimó de nuevo, pues la familia del hombre que la acogió a ella y a sus hermanas se veían realmente felices y muy unidos, tanto como para tener una celebración que harían juntos, casi del mismo modo que ellos lo hacían en fiestas como Halloween, Navidad, año nuevo, entre otras.

Pero eso fue antes de que los denunciaran. Y gracias a eso, ahora estaban donde estaban.

Lucy miró al muñeco que Lincoln le había regalado, pues no lo había soltado en ningún momento, haciéndose pasar su mano por su mejilla por una lágrima que había derramado al verlo, tuvo suerte de que nadie lo notara, no así, Luan vio lo que Lucy tenía.

-Lucy...-Dijo ella.-¿Ese es...?

La gótica solo asintió, y le permitió ver con más cuidado al conejo de felpa, con un gran parecido al original, bun bun.

Luan no pudo evitar acariciar la cabeza del muñeco, era tan parecido que inevitablemente, al igual que Lucy, le hacían recordar su antiguo hogar, a su familia, a su hermano... su razón de ser quien fue una vez.

Sintió entonces como Lucy ponía su mano en su hombro (pues Luan estaba arrodillada a la altura de Lucy) dándole una mirada que reflejaba su comprensión, y a la vez confianza, al fin y al cabo, si algo tenían en común todas, era el profundo dolor que sentían todas luego de todo lo que pasaron, en especial cuando pensaban en Lincoln, y lo mucho que lo extrañaban, después de todo lo que hizo por ellas, en especial cuando Royal Woods las acosaba, era obvio lo mucho que añoraban con volver a verlo.