Disclaimmer: Los personajes de la siguiente historia pertenecen a Clamp, si no fuese así, Sak y Shao serían novios desde el primer capítulo. La historia es de mi propiedad.
Summary: Porque ella tenía una palabra de la A a la Z para describirlo.
Capítulo dedicado a: julietamarilyn; Naty-chankawaii; Ale; chococat825 y navesa77.
I de impaciente
Todos teníamos defectos. Algunas personas tenían más que otras. Algunos, tenían defectos que se acentuaban mucho, que, de alguna forma u otra, terminaban caracterizándolos. Yo entraba en ese último grupo. ¿Mi defecto? Era sumamente impuntual.
Desde que tenía memoria siempre llegaba tarde a todos lados; no hubo día en toda la primaria en que pudiera entrar al salón antes que el maestro, y durante toda la secundaria y preparatoria se repitió la misma situación. Lo mismo ocurría con salidas o reuniones ocasionales que tenía con amigas… la última en llegar, y encima veinte minutos tarde, era la misma… Sakura Kinomoto.
Por ese pequeño defecto era más bien conocida en mi entorno. Todo el mundo sabía que si querían hacer las cosas de forma puntual, no podían contar conmigo.
Luché contra ello toda mi vida, pero no hubo caso. Mi impuntualidad parecía ser incorregible… iba a ser algo que me caracterizaría el resto de mi vida, acompañándome hasta el día que muriese.
Pero llegado un momento ya todos estaban acostumbrados a mis tardanzas… excepto Shaoran.
Shaoran detestaba enormemente que yo llegara tarde a todos lados… cenas, salidas, a su casa, o a cualquier otro sitio. Si bien sabía que era algo contra lo que no podía combatir, terminaba impacientándose hasta el punto en que su irritación era inaguantable. Y pese a los años de relación y convivencia, jamás lograría ser paciente conmigo, así como tampoco yo lograría ser puntual.
-Sakura, ¿sigues sin estar lista? –preguntó entrando a nuestro habitación sin tocar.
-¡Shaoran! ¡Estoy desnuda! –chillé al borde de una hemorragia por la vergüenza, mientras intentaba taparme con la toalla con la cual había salido de la ducha-. ¿¡No te enseñaron a tocar antes de entrar a algún sitio!?
-No seas vergonzosa –dijo-, después de todo no hay nada que no haya visto antes cuando tú y yo…
-¡Cállate y sal de la habitación en este mismo instante! –de haber tenido algo en la mano con total seguridad se lo hubiese lanzado por la cabeza. Él rió a carcajadas, pero no salió sino hasta que me recordó que íbamos diez minutos atrasados.
Hoy teníamos una cena con Tomoyo y su novio Eriol en un restaurante sumamente formal, por lo que debía prepararme con más esmero que el que usaba en los días normales, el cual era casi nulo. El resultado de esa ecuación daba claramente, que, pese a que Shaoran me apurase, hoy llegaríamos tarde.
Varios minutos después, completamente vestida, maquillada y peinada, salí de la habitación en dirección a la sala, donde mi novio se encontraba vestido con un traje que parecía haber sido hecho justo a su medida. Y aun seguía sin poder creer que ese chico pudiera parecerme más atractivo de lo que ya era.
-Ya venía siendo hora de que salieras –pronunció volteando para verme. Su cara fue digna de fotografiar y en ese mismo instante supe que la espera había dado sus frutos-. Mierda –masculló.
-¿Cómo me veo? –pregunté dando una vuelta sensual, dejando a la vista la espalda descubierta que llevaba mi apretado y corto vestido.
-Sakura, creo que no iremos a la cena.
-¿Por qué? ¿No te gusta cómo me vestí?
-Ese es el problema –se relamió los labios muy sensualmente y mi interior estalló-. Me gusta demasiado… y me gustaría demasiado arrancártelo en este mismo momento par-
-¡Claro que no! Insististe en que me apurara para ir a la cena con Tomoyo y Eriol, ¿y ahora que estoy lista no quieres ir? –exclamé teatralmente fingiendo enojo.
-Ya vamos suficientemente tarde, podríamos no ir y utilizar este tiempo haciendo otras cosas más interesantes.
-Por supuesto que iremos, se lo prometí a Tommy. Las otras cosas que quieras hacer pueden esperar –caminé hasta la puerta para así dirigirme al ascensor, antes de que a mí misma se me ocurriera permanecer encerrada en la habitación con Shaoran.
-No pueden esperar…
-Claro que pueden. No seas impaciente, Shaoran.
Durante el viaje permaneció con el ceño fruncido y completamente callado, a excepción de algunos insultos dichos por lo bajo. Claramente el castaño estaba sumamente frustrado y eso a mí me divertía a sobremanera. Sus miradas de reojo a mi corto vestido que dejaba a la vista mis piernas, no lo ayudaban mucho para poder tranquilizarse.
La cena, sin embargo, se sucedió en forma tranquila. Tomoyo y Eriol habían asegurado que no hacía mucho que nos habían estado esperando, aunque por supuesto mentían para no hacerme sentir mal. Conversamos amenamente como cualquier grupo de amigos lo hacía luego de tantos años de amistad, sobre trabajo, pasatiempos… nosotras nos enfrascamos en hablar sobre moda y ellos sobre política y economía.
-¿Qué les parece si pedimos algún postre? –preguntó Tommy con su tan característica emoción, luego de dar como acabado el plato principal.
-En otra ocasión. Con Sakura estamos un poco apurados –rechazó Shaoran sin siquiera preguntármelo.
-¡Por supuesto que no! –refuté yo-. Me encantaría una rebanada de pastel de fresa, ¡ya sabes lo que me gustan! –mi amiga sonrió alegre mientras llamaba a una moza para que trajera nuestro pedido. Mi novio, en cambio, no parecía estar de buenos humores.
-¿No crees que ya deberíamos regresar? –cuestionó susurrante a mi oído.
-No lo creo, apenas y hemos estado dos horas con ellos –respondí tranquilamente-. Es solo un postre, no seas tan impaciente, Shaoran.
-Deja de jugar, Sakura. Estás torturándome completamente a propósito y lo sé.
-¿Torturándote yo? –Fingí demencia-. No sé a qué te refieres.
-¿Ocurre algo? –interrumpió Tomoyo al ver que aun seguíamos susurrándonos el uno al otro.
Negué rápidamente y desvié la conversación para así no tener que seguir soportando las preguntas del castaño. Si él era impaciente, tendría que luchar contra ello porque yo no daría mi brazo a torcer.
Una hora después ya estábamos de camino al nuestro departamento. Sabía que el castaño se vengaría, pero lo que no sabía era si aquello me preocupaba o todo lo contrario… si moría porque tomara venganza en ese mismísimo coche.
Llegamos, estacionamos donde siempre, y subimos por el ascensor hasta nuestro departamento; todo en un completo silencio que empezaba a preocuparme. Empezaba a creer que él estaba aplicando la ley de hielo conmigo, lo cual significaría que no me dirigiría la palabra hasta el día siguiente en la mañana… y eso si es que contaba con algo de suerte.
-Oye, ¿ocurre al-?
No había alcanzado a terminar de formular la pregunta, cuando sus feroces labios arrasaron con los míos, con tanta rudeza, que mi espalda terminó chocando con la puerta recientemente cerrada. Respondí con la misma pasión, abrazándolo por el cuello con toda la intención de pegarlo aún más a mi cuerpo.
-Ha sido una tortura esa cena –comenzó a esparcir besos en mi cuello, robándome suspiros.
-Yo no creo que haya sido tan mala.
-No sabes lo que resistí para no terminar llevándote al baño y arrancarte el vestido en ese mismo lugar.
-Habría sido una falta de respeto para Tomoyo y Eriol –susurré con la última pizca de cordura, para luego perderla completamente ante los besos que el castaño estaba esparciendo por mi piel.
-A la mierda ellos.
-Me excita que seas tan impaciente con estas cosas –mordí su labio inferior y él gruñó.
-A mi me excita tu vestido… pero estoy seguro que verte sin el sería aún más excitante.
Buenos días, tardes, noches.
Estos dos días he recibido visitas inesperadas (mentira, eran esperadas) y me distraje más de lo normal y no escribí el capítulo sino hasta hoy, por eso subo unas horas más tarde de lo normal, pero al fin y al cabo en el día en que lo debo hacer. Estoy orgullosa de mi misma (?
Nuestros castaños se pusieron cachondos… Realmente no sé cómo llegó a ocurrir eso, simplemente mis manos tomaron el control, y luego la impaciencia de Shaoran y luego todo y ¡Pum! Éste fue el exquisito resultado.
Espero lo hayan disfrutado. Recuerden dejarme jugosos reviews, los cuales adoro recibir, leer y contestar :*
¡Pasamos los 100 reviews! Eternamente gracias… ¡y vamos por más!
Siguiente capítulo la J ¿Pista? Como todas las que se me ocurren son muuuuuuuy obvias, pasaré a descartar lo que no es… No es un sentimiento, no es una cualidad o defecto, ni tampoco es un objeto. Me hago la misteriosa muajajajaja.
Las "ganadoras" a quienes les dedique los capítulos, serán aquellas que adivinen la palabra TAL CUAL está en el título del capítulo. Hago la aclaración antes de que me tiren con tomates y termine asesinada jajaja.
Besos sabor a moras,
LadySuzume-Chan.
