~Tres años atrás~
—¡Vamos Mimi!— Ánimo la pelirroja Takenouchi de dieciséis años.
La castaña hizo una mueca, no estaba preparada todavía, era muy pronto y muy difícil.
—Sora tiene razón.—Esta vez habló la rubia de ojos verdes— Es tiempo de que lo hagas.
—P-pero.— Balbuceo— N-no puedo.
Zoe rodó los ojos— ¿Cómo que no puedes? Claro que si puedes y debes hacerlo.
—Pero es difícil.—Nuevamente habló la castaña Tachikawa— Yamato no quedrá ir conmigo.— Se lamentó.
Sora Takenouchi, Mimi Tachikawa y Zoe Ishida eran amigas desde toda la vida, desde que comenzaron a estudiar se habían vuelto las mejores amigas, eran inseparables, andaban en todos lados juntas y sabían sus secretos, entre ellos el secreto mejor guardado de la Tachikawa.
Su amor platónico hacia el hermano de la rubia.
Yamato Ishida.
—Nunca sabrás si tienes oportunidad si no le dices.— Comentó Sora.
Hace tiempo las chicas le venían insistiendo a la Tachikawa que se animara a declararse al chico, ya que, llevaba muchos años mirándolo y tanto Sora como Zoe afirmaban que el chico de vez en cuando miraba a la castaña. Pero, tristemente Mimi nunca se había animado a declararse, esta era la oportunidad exacta para estar con el chico, ya que, se acercaba el baile donde las chicas invitaban a los chicos, pero, la chica insistía en no invitarlo, ya que, tenía un gran complejo y ese era...su físico. Tenía problemas en los ojos y debía usar unas gafas de vez en cuando, además era muy tímida, a esto se le sumaba el hecho de que Yamato hace unos meses tenía una banda y en cada concierto miles de chicas se le acercaban y ella se sentía inferior, porque estaba seguro de que Yamato nunca la miraría más que la mejor amiga de su hermana.
—Chicas no puedo.— Declaró—Y no me insistan por favor.
Sora y Zoe intercambiaron miradas sin evitar soltar un suspiro. Era inútil simplemente, Mimi nunca invitaría al rubio al baile.
—Si sigues así cualquiera se te puede adelantar.— Habló nuevamente la rubia—Pero, como su hermana no me gustaría verlo en la fiesta con cualquier otra que no seas tú.
Mimi sonrió de lado— Zoe me agrada mucho tu consideración.— Agradeció— Pero, es imposible, él nunca iría con una chica como yo.
—Nunca lo sabrás si no te atreves a preguntarle.— Habló esta vez la pelirroja Takenouchi.
Mimi hizo una mueca, ya que, sabía que su amiga tenía razón. Aún así no se atrevía, quizás, conocía a Yamato desde que había ingresado a Kinder, pero, eso no significaba que tuviera la confianza de pedirle que la acompañase al baile.
Suspiró.
—Todo sería más fácil si yo fuese tan bella como ustedes.— Les comentó a sus amigas.
Sora rodó los ojos— Mimi, tu eres mucho más hermosa que nosotras dos.
Mimi hizo una mueca, ya que, sabía en su interior que solo lo decía por lastima y porque la quería, pero, la verdad es que ella no era tan linda como ellas, Zoe era rubia, su piel era pálida y sus ojos verdes, físicamente atraía a muchos chicos, mientras que Sora era pelirroja, piel bronceada y ojos ámbar, tenía buen físico y atraía a muchos porque además de ser buena persona jugaba a fútbol, cosa que los chicos aman. Ella tristemente era común, castaña y ojos miel, sin ningún atributo físico.
—Solo debes subirte el autoestima.— Finalizó esta vez la rubia— Si haces eso mi hermano caerá rendido a tus pies.
Mimi dirigió su mirada hacia el calendario, en rojo estaba marcada la fecha...
2 de Abril
Esa sería la fecha, aun quedaba un mes, pero, nunca sería capaz de subir su autoestima en todo ese tiempo.
—Sora ¿tú con quién irás al baile?— Mimi le preguntó a la pelirroja.
Sora sonrió—Quiero invitar a Taichi.— Respondió— Espero que no me rechace.
—Dudo que te rechace, Taichi siempre ha estado loco por ti.— Esta vez habló la rubia.
—¿Y tú Zoe con quién irás?— Mimi le preguntó a la rubia.
Zoe hizo una mueca y llevó una mano a su nuca— No estoy segura todavía.— Contestó— Había pensado ir con Koichi, mi mejor, ya sabes. Pero, está de novio con tu hermana, así que, dudo que quiera ir conmigo.
Sora y Mimi intercambiaron miradas, ya que, aunque la rubia no lo dijera e intentase esconderlo ellas más que nadie sabían que la rubia quería invitar al hermano de la Tachikawa, Takuya, porque a pesar de que vivían gritándose a los cuatro vientos que se odiaban no podían evitar darse ciertas miradas que evidenciaban la atracción que tenían.
—Esto de invitar a chicos es complicado.— Zoe hizo una mueca— Es más fácil que los hombres la inviten a una.
Mimi carcajeo levemente, para su amiga era fácil decirlo porque Sora y ella pertenecían al grupo de las chicas mas lindas, deseadas y pretendidas del Internado, a diferencia de ella.
—Bueno, ustedes se ahorraran tener que rechazar mas de una rosa roja.—Comentó la chica Tachikawa.
Zoe sonrió— En eso tienes razón.— Tristemente la última vez que la rubia había rechazado rosas en el último baile que habían hecho las cosas no habían salido bien, Junpei Shibayama un chico gordito le había propuesto a Zoe ir con él al baile, Zoe lo rechazó y el día de la fiesta el chico había hecho todo un escándalo—¿Con quién crees que irán los demás chicos?— Preguntó la rubia intentado ocultar su curiosidad de saber con quién iba cierto castaño de apellido Tachikawa— Takuya y sus amigos.
Mimi hizo una mueca, la verdad no sabía con quién iría su hermano o los amigos de su hermano— No sé, pero, quizás Taichi o Yamato lo sepan, ya que, son del mismo grupo de amigos ¿no?
Zoe hizo una mueca, ya que, sabía perfectamente que si le preguntaba a su hermano por el hermano de Mimi empezaría a hacer sus preguntas de hermano mayor y terminaría haciéndole la misma advertencia de todos los años ¡Con mis amigos no!
—¿Chicos no es genial esto?— Preguntó Takuya mientras señalaba el gran cartel que se encontraba estampado en la pared del Internado donde decía:
Fiesta del amor
Chicas invitan a los chicos.
—Las chicas tendrán que invitarnos.— Leyó Taichi.
—¡Al fin se hizo justicia!— Exclamó Ryo— Siempre somos nosotros los que humillamos nuestro orgullo invitando a las chicas, es bueno que ellas se humillen una vez aunque sea ¿puedo ir con más de una chica o tendré que romper muchos corazones?
Yamato rodó los ojos, Ryo tan creído como siempre.
—No creo que muchas chicas quieran invitarte a ti.— Esta vez habló Takuya— Ya que en general las chicas se vuelven locas por el cantante principal de su famosa banda.
Todas las miradas se fijaron en el rubio quién simplemente rodó los ojos.
—Las chicas no solo me ven a mi, también miran al guitarrista.— Señaló a Kouji— Al baterista.—Señaló a Ryo— y a los demás.
—No seas modesto Yamato.— Taichi lo abrazó con un brazo por los hombros— No es malo reconocer el hecho de que todas las chicas de este lugar muere por ti ¡Mira que eso no es mala suerte! Cuanto daríamos nosotros por estar en tu lugar.
Yamato hizo una mueca, de vez en cuando salía con una chica para divertirse, pero, eso no significaba que le gustara, ya que, sus sentimientos no iban a ir por ellas, mientras existiera...ella.
—Hablas por ti.— Esta vez habló Kouji seriamente, ya que, no compartía esa idea de Taichi. A él no les interesaba tener a un montón de chicas detrás de él, solamente la de una, pero, si era sincero nunca sería posible.
—¡Vamos! Admitan que es genial tener a un millón de chicas tras ustedes por su banda.— Esta vez habló akuya.
—En vez de hablar de eso, ustedes dos.— Yamato señaló a Taichi y Takuya— Deberían preocuparse por quién los invitará a ustedes, ya que, dudo que alguna chica quieran estar con ustedes.
—¿Estás seguro?— Preguntó Taichi desafiantemente.
Yamato asintió.
—Quizás nosotros no tenemos una banda, pero, hay muchas chicas mueren por los capitanes del equipo de fútbol ¿no?—Takuya apeló a su fama de futbolista, ya que, por un lado era cierta, muchas chicas morían por ellos al ser los jugadores principales.
—Bueno, sea como sea, pueden ir con cualquier chica menos con mi hermana.— Advirtió Yamato— ¿Me entendieron?
Inconscientemente Takuya hizo una mueca ante esto, pero, que disimuló al instante— Bueno, la misma advertencia podría hacer yo...— Comentó el chico— Aunque ahora que lo pienso Koichi se saltó esa advertencia.
—No hablemos de mi hermano en su ausencia.—Kouji defendió a su hermano.
—Tranquilo, solo decía.— Nuevamente habló Takuya— Pero, ya saben, no quiero que alguno de ustedes se acerque a mi otra hermana.
—No te preocupes por mi.—Habló Ryo— Yo sé muy bien que Rika no se resistirá a mi encanto y me invitara al baile.
Kouji rodó los ojos— Sueña con eso.— Se cruzó de brazos— Dudo que mi prima sea tan tonta para hacer aquello.
—¡Ya verás Minamoto!— Exclamó el Akiyama— Rika caerá a mis encantos.
Kouji negó con la cabeza, ya que, sabía que su prima nunca haría cosa tan tonta como esa.
—Demás queda decir que con Hikari no ¿cierto?— Esta vez habló Taichi.
—¡Oigan! ¿En qué momento empezamos a hablar de las mujeres de sus respectivas familias?— Preguntó el Akiyama.
Los chicos intercambiaron miradas, ya que, de alguna forma su amigo tenía razón. Nunca hablaban de ellas, ya que, preferían guardarse ciertos comentarios fueran insultos, piropos, entre otras cosas, lo mejor era no meter a las hermanas, primas o amigas cercanas en sus conversaciones.
Yamato suspiró, ya que, inconscientemente hablar de las hermanas lo hacía pensar mucho en cierta chica castaña de ojos color miel, hermana de Takuya, quién no le decía más de dos palabras, el rubio siempre se preguntaba a que se debía eso, seguramente porque era tímida, aunque, con sus amigas no parecía serlo tanto. Quizás, la culpa era de él, ya que, era muy serio y frío con los demás.
Algunas veces se preguntaba que cosas pasaban por la cabeza de la Tachikawa.
¿Sabía de su existencia?
Claro que sí, pero ¿decidía ignorar que existía? Aunque fuese el hermano de su mejor amiga.
~Actualidad~
—¿Mimi?— Preguntó la rubia hermana de Yamato sorprendida al ver a la castaña frente a ellas— ¿Nuestra amiga? Mimi Tachikawa.
La castaña asintió— ¿Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos? ¿no?— Tanto la rubia como la pelirroja no pudieron evitar ir hacia la chica y abrazarse como hace años no lo hacían.
—Cuando mi madre me había comentado que tu familia volvía a la ciudad no lo pude creer.— Comentó Sora— Pero, supuse que volverías a este lugar, a tu casa.
—Dije que volvería y aquí estoy.—Contestó la chica.
—Tanto tiempo sin vernos.— Comentó Zoe— En un momento pensé en que te habías desaparecido de la faz de la tierra
—Zoe tiene razón, de un momento a otro dejaste de postear en tus redes sociales.—Nuevamente habló la pelirroja—¿Dónde estabas? ¿Por qué de un momento a otro te desapareciste de nuestras vidas?
Mimi hizo una mueca, bueno, la situación había ameritado que se privara de sus redes sociales luego de haber dejado Japón, principalmente por obligación de sus padres, así que, había perdido contacto con sus amigas— Les contaré todo lo que me ocurrió luego de que nos fuimos a Nueva York, ya que, todo tiene una explicación.— Contestó— Pero, quiero que sepan que si no las llame o algo así no es porque las olvidara, al contrario, siempre las recordé, pero, en su tiempo ustedes sabrán mis razones de porque no hable con ustedes.— Suspiró— Y porque estuve tan desaparecida.
Sin duda, tendría que algún decirles la verdad, ya que, merecían saberlo, pero, todavía era muy pronto, algún día les diría, pero, todavía no.
—Volviste como te fuiste.— Koichi le comentó a su amigo— Sin decir palabra alguna.
Takuya sonrió— Bueno, yo soy una caja sorpresa.— Comentó el chico mientras dejaba su bolso sobre su cama.
—Una caja sorpresa que viene con agregado.— Esta vez comentó Kouji.
—¡Exacto! Si tú volviste Takuya significa que toda tu familia volvió.— Comentó Koichi intentando no preguntar directamente si cierta chica había vuelto.
Takuya negó con la cabeza— Al internado volvimos solo Mimi y yo.—Respondió— Nuestra hermana se quedó en Nueva York y lógicamente nuestros padres están en esta ciudad, pero, en sus cosas.
Koichi hizo una mueca ante esto, no le había gustado la respuesta del chico— ¡Basta Koichi!— Se dijo mentalmente, ya que, no valía la pena preguntar por la hermana menor de Takuya desde...esa noche.
¿O si?
—¿Muchas cosas han cambiado desde mi ida?— Preguntó el moreno.
—Ni tantas.— Contestó Kouji la verdad sin mucho interés, la verdad es que la cosas en sí si estaban diferentes a como eran antes todo por ese 3 de Abril, pero, no era necesario comentarlo ¿o si? Bueno algunas cosas si eran dignas de mencionar, cosas que quizás no tenían nada que ver con esa noche.
—Daisuke se convirtió en el co-capitán de Taichi.— Esta vez habló Koichi.
—¿Y es bueno ese niño?— Preguntó Takuya.
—Un año luego que te fuiste cuando tuvo edad suficiente entró al equipo avanzado del Instituto y le ha ido bien.— Comentó el Kimura— Los chicos siguen teniendo su banda, Sora sigue siendo la presidenta del comité del Internado. Que por cierto hacen fiestas muy buenas.
—Me imagino.— Takuya rodó los ojos recordando como eran las fiestas clandestinas que organizaba el comité del Instituto para desestresarse los días sábados.
—Sigo soltero desde...—Hubo un segundo de silencio por parte del Kimura, ya que, sabía que no debía decir lo otro— Bueno, ya sabes.—Suspiró— Y cuatro meses después de que te fuiste mi hermano formalizó su relación con Zoe.
Takuya abrió los ojos platos al escuchar aquello...¿Su mejor amigo con la rubia? ¿Kouji con Izumi? ¿Kouji con la chica que él a...?
Suspiró.
—¿De verdad?— Preguntó Takuya sorprendido— N-no sabía aquello.— Pasó una mano por la nuca.
Kouji hizo una mueca— Bueno, solo se dio.—Contestó.
El chico castaño supuso que su amigo no le daría detalles, pero, la verdad esa respuesta lo había dejado peor ¿Solo se dio? ¿Cuando? ¿Dónde? ¿Cómo? y ¿Por qué?
Suspiró nuevamente.
Debía suponer que su ida traería diversos cambios que nunca imaginaría.
—El comité del Instituto está trabando firmemente para la fiesta de inicios de clases, pero, necesitamos muchas cosas todavía.— Hikari le comentó a Rika.
—¿Cómo cuales?— Preguntó la Nonaka mientras habría la ventana de su cuarto para que el olor a cigarro saliera.
—Aún nos faltan las bebidas.— Contestó Hikari— ¡Ya sabes! Los chicos y chicas no solo se conforman con jugo o bebida normales.
Rika sin duda lo sabía.
—Pero, al ser una fiesta "legal"— Hikari hizo énfasis en la última palabra— Autorizada por tu madre no podemos servir alcoholes y pueden hacer reclamos o hay una gran probabilidad que traigan alcohol los demás aún sabiendo que está prohibido y eso nos puede meter en un problema.
Eso era verdad.
—Y debemos pedirle a los chicos que toquen, ya que, son la mejor banda de la ciudad.— Comentó Hikari—Pero, desde que se hicieron famosos es difícil conseguir que toquen en algunas fiesta, ya que son muy solicitados.
—Demás que te dicen que si.—Contestó Rika— Siempre aceptan tocar cuando trata algo del Internado. Aunque bueno, si te dicen que no déjamelos a mi.— Guiñó un ojo— Dudo que Ryo me diga que no a mi.
Hikari carcajeo levemente, sinceramente la relación de la Nonaka y el Akiyama era muy chistosa, mientras él moría por ella, ella simplemente lo usaba para divertirse.
Voy a hacer un pequeño arreglo con el capítulo 1 y 2, los voy a unir, en pocas palabras serán uno y este será el capítulo 2.
Koichi y Kouji son primos con Rika, se me había olvidado comentarles.
Espero que les esté gustando.
