Desde estos capítulos Damar quedará un tanto afuera e ingresarán a la trama nuevos personajes: Yuri, Tomoki, entre otros (Miyako tendrá un poquito de protagonismo)

El día comenzó bastante ajetreado para los habitantes del Internado, era el primer día tanto en la primaria como en la secundaria como en la preparatoria y la universidad, y algunos verdaderamente parecían no haber dormido la noche anterior, algunos parecían no haber escuchado la alarma ya que corrían por el campus, otros por los nervios no habían desayunado, y otros simplemente se veían normales, este era el caso de Mimi Tachikawa y sus dos mejores amigas, quienes parecían asistir a un desfile de modas.

—Primer día de universidad ¡Qué nervios!— Exclamó Izumi y tomó el brazo de su amiga, Mimi.

Mimi sonrió— ¡Lo bueno es que estudiaremos la misma carrera!

Sora hizo una mueca— ¡Que tristeza que yo sea un año mayor! Me encantaría estar con ustedes.

La rubia hizo una mueca— Si es una pena.

Mimi suspiró—¡Lo bueno! Es que nos podemos juntar en el recreo, ya que, tenemos los mismo horarios ¿no?

Sora sonrió— En eso tienes razón.

Las tres observaron el edificio frente a ellas, era inmenso en comparación a la preparatoria y a la secundaria, parecía ser el triple, bueno, universidad privada de millonarios ¿no?

Mimi sonrió, empezaría una nueva etapa de su vida, una que la ayudaría a independizarse de una vez por todas de su padre y de su madrastra, quienes se habían encargado de hacer de su vida un infierno, a pesar de que un tiempo verdaderamente su padre había sido su héroe, luego de lo que le había hecho verdaderamente lo desconocía.

~En la preparatoria~

—Bienvenidos a todos ustedes mis alumnos.— Saludó una mujer de cabello rosa y ojos del mismo color— Mi nombre es Yoshino Fujeda, como ya saben seré su profesora, de este su último año de preparatoria. Estoy muy feliz de comenzar este nuevo año, ya que, será el último, pronto pasarán a la universidad y pues...

Rika se cruzó de brazos y volteo hacia la ventana— Otro discurso de inicio de clases como todos los años.— Pensó sin interés.

Suspiró.

Por lo menos el próximo ya sería diferente, tendría un poco más de libertad, al pasar a la universidad. Podría tomar o fumar antes de clases y nadie le diría nada, ya que, se supone que los profesores de universidad no son como los profesores de preparatoria, secundaria o primaria que viven pendiente de sus alumnos ¿no?

Nuevamente suspiró y su mirada volvió hacia la profesora.

—Y pues...— Habló la profesora Yoshino— Este año tenemos una alumna nueva.— Señaló la puerta y al lugar entró una chica de aparentemente unos diecisiete años de ojos marrones y cabello castaño que estaban a la longitud de los hombros— Por favor, preséntate.

La chica sonrió como niña de de cinco años— Hola, mi nombre es Juri Katou.— Se presentó— Me da gusto conocerlos.

—Por favor, toma asiento.— Le ofreció la profesora.

Juri asintió y con su mirada buscó un asiento libre, cuando ya hubo encontrado uno avanzó en dirección a él y al sentarse quedó junto a una chica de cabello lila y anteojos quién no dudo en sonreírle.

—Hola.— Saludó la castaña.

—Hola.— Respondió la chica de anteojos— Bienvenida.

—Gracias.— Contestó Juri.

—Me presento, mi nombre es Miyako Inoue, aunque algunos me dicen Yolei.— Se presentó a la chica extendiendo su mano.

La castaña sonrió—Hola mucho gusto, mi nombre es Juri.

—Creo que seremos compañeras este año.— Comentó la Inoue— Ojalá seamos buenas amigas.

Juri sonrió, la chica de anteojos era agradable— Lo mismo digo.

Taichi se apoyo contra su escritorio, estaba agotado, cansado, tenía mucho sueño, sus ojeras lo decían— No puedo creer que las vacaciones se acabaron.

Yamato rodó los ojos, sinceramente, no extraña los reclamos del Yagami, suspiró, siempre se lamentaría haber entrado en la misma carrera con el chico, él siempre pensó que luego de la preparatoria se libraría de él ¡Pero! Su padre literalmente lo obligó a comenzar a estudiar un Licenciado en Economía Políticas, algo que él no quería, pero, que según su padre le ayudaría a cuidar su fortuna. Hizo una mueca, luego de sacar ese licenciado y juntar algo de dinero se pagaría la carrera que verdaderamente le interesaba.

—Ahora comienza otro año más.— Se lamentó el Yagami— De estrés y noches sin dormir para aprobar.

—Bueno, si no dejaras todo a ultima hora creo que no tendrías que trasnochar.— Comentó el rubio.

Taichi hizo una mueca— ¡Olvídalo!

—Entonces, no reclames, Yagami.

Taichi suspiró y levantó su rostro del escritorio— Oye, Ishida, dime ¿cómo lo haces para estar tan tranquilo?

Yamato alzó una ceja— ¿Por qué preguntas?

—Porque, estás muy tranquilo...—Respondió Taichi— Y la chica que decías decir el amor de tu vida volvió solo ayer.

Yamato frunció su ceño ¿acaso al Yagami le gustaba meterse en su vida? Ya se había tardado en arruinar su día, como siempre. Suspiró— No te responderé eso, Yagami.

—¿Por qué no?— Preguntó el Yagami— Somos amigos, no deberías tener miedo de hablar de eso conmigo, sé lo importante que fue esa chica, y ahora volvió sin avisar, jodidamente hermosa, más de lo que ya era.

En eso tenía razón, Mimi se había puesto más hermosa de lo que la recordaba, verdaderamente era una chica que a cualquiera dejaría sin aliento, ya no parecía una niña de quince años, ahora verdaderamente parecía una mujer, así como las que les gustaban a él.

¡Pero!

Eso lógicamente no lo hablaría con él. Claramente su llegada le había afectado, en gran manera, tanto así que no había pegado ojo en la noche recordando cosas que habían vivido ambos, las veces en las cuales le había dicho te amo al amanecer ella en sus brazos, las veces que le había dado un beso declarando que era la chica que más había querido y las veces en la cual el sintiéndose mal la chica había llegado a su lado. Momentos que habían vivido juntos, momentos que habían experimentado, momentos que de un momento a otro habían...

Desaparecido.

Hikari observó a su alrededor y no pudo evitar sentirse un poco alarmada ¡Se suponía que Takeru debía estar ahí! Los alumnos ya habían entrado a sus salones y ella por esperarlo a él aun no entraban. Suspiró ¿por qué su mejor amigo debía ser tan impuntual? Rodó los ojos.

—Hola preciosa.— Una mano rodeo su cintura provocando que Hikari volteara.

—¡Takeru! Por fin llegas.— Exclamó aliviada y un poco enojada.

Takeru la atrajo hacia él— Discúlpame, preciosa, pero, me quedé dormido.— Se disculpó y acercó su rostro al de la chica— Pero, aquí estoy...— Observó sus labios— Y quiero mi beso de buuenos días.

Hikari alzó una ceja y con su mano derecha detuvo los labios de su amigo— ¡Hey! Olvídalo, tenemos que entrar a clases.

—Pero, Hikari.— Se lamentó el rubio.

—Si hubieras llegado temprano quizás te hubiera besado.— Respondió la castaña antes de tomar una mano de su amigo y tirar de él—¡Vamos a clases!— Comenzó a caminar, Takeru suspiró resignado y sin más, caminó tras la chica.

~Horas más tarde~

Takuya, Koichi y Kouji salieron de la universidad en dirección al campus para su recreo al ser las primeras clase del año todas habían terminado temprano. Takuya y Kouji habían esperado unos pocos minutos cuando el Kimura había aparecido ante sus ojos y habían decidido ir al campus a pasar el tiempo.

—No entiendo como después de insistir tanto con la Escuela de Medicina en Tokyo terminaste quedándote aquí, Koichi.— Takuya le comentó al mayor de los gemelos.

Koichi sonrió— Bueno, me propusieron hacer los años básicos aquí, así que, pensé ¿por qué no?—Suspiró— No me gusta estar lejos de mi gemelo.

—¿Y tú, Kouji?— Takuya volteo hacia el menor de los gemelos— ¿No que te ibas a ir a recorrer el mundo?

—Bueno, tu dijiste que ibas a ser futbolista y aquí estas.— Le respondió el Minamoto.

—¡Ouch! Eso dolió.— Comentó el moreno— Bueno, tu sabes que mi padre nunca me permitiría perder dinero en esas cosas ¿no?

Kouji asintió, algo similar ocurría con él, su padre había dicho que era mejor que estudiara antes de viajar por el mundo, aunque, lo que había pesado más en su balanza había sido que si se quedaba podría estar vigilando a Rika, para que no cometiese otra locura como la de esa vez. Los tres chicos caminaron y se sentaron en unos asientos cerca del gran edificio.

—Y díganme ¿qué otras cosa han sucedido en mi ausencia?— Preguntó el moreno.

—Muchas cosas, pero, creo que sería un poco tedioso contarte lo que ha sucedido año a año ¿no?— Comentó Koichi— Aunque, podría contarte cosas importantes.

—¿Importantes?— Cuestionó el moreno.

Koichi asintió— Bueno, la madre de Rika es la nueva directora desde ese año en que te fuiste y pues, tiene muy corta a nuestra prima.

—¿De verdad?— Preguntó Takuya sorprendido.

Kouji asintió— Aunque en general nos tiene cortos a todos.— Comentó.

—Cada cierto tiempo revisa los cuartos y departamentos completos.— Habló nuevamente Koichi— Y créeme, Ryo ha perdido más de la mitad de sus ganancias por eso, siempre le encuentran algo nuevo.

Takuya hizo una mueca ¿acaso el Akiyama nunca se daría cuenta que vender esas cosas verdaderamente arruinaban la vida de las personas? Verdaderamente no había aprendido luego de que ocurriera eso con Henry y Rika esa vez.

—De vez en cuando también envía de improviso a la inspectora Tally Onodera a media noche a revisar a los alumnos, sobre todo cuando son sospechosos de algo para revisar que no estén, tu ya sabes, drogados o borrachos.— Comentó Koichi y se acercó levemente al moreno— Y a varios los han encontrado en pleno de...— Carcajeo levemente— actos prematrimoniales.

Actos prematrimoniales.

Takuya alzó las cejas e intentó evitar que una carcajada saliera de sus labios, ya que, él sabía a lo que se refería el Kimura, así era como le nombraba a cuando las parejas tenían...eso. Y pues, era gracioso como lo llamaba el mayor de los gemelos.

—Verdaderamente es molesta la situación, ya que, muchas veces uno está lo más tranquilo durmiendo y llegan.— Comentó Kouji— De improviso.— El Minamoto no pudo evitar recordar las treinta veces en la cuales ¡por fin! había conciliado el sueño luego de un largo día y ¡plap! tocaban la puerta.

—Y tienen llaves en caso de que no le habrás a los dos minutos.— Finalizó Koichi.

—¡Vaya! Se pusieron exigentes.— Habló Takuya.

—No es para menos, luego de lo que ocurrió esa vez que me fui de pasantía.— Comentó Koichi y al decir esto tanto Takuya como Kouji hicieron una mueca y las expresiones de sus rostros cambiaron, evidentemente el Kimura ignoraba esto, pero, cada quién había pasado algo en esa noche, algo había sucedido también que había marcado al Internado, algo que había marcado esa noche, que no les gustaba recordar.

La chica Inoue y la chica Katou salieron de la preparatoria para disfrutar de su recreo en el campus que conectaba a todas las instituciones del lugar.

—Entonces ¿vienes del internado de Shinjuku?— Miyako le preguntó a Juri.

La castaña asintió— Si, pero, tuve que cambiarme, ya que, mis padres así lo quisieron.

—¡Wow! Debe ser difícil cambiarte en tu último año de preparatoria.— Comentó la peli-lila.

—Si, pero, me gusta conocer gente nueva.— La Katou sonrió y ambas tomaron asiento en una banca de la plaza central del campus. Juri observó el lugar— ¡Wow! Este lugar es hermoso, grande y con mucho verde.

Miyako sonrió— Si, la verdad es que con los años pareciera que está en mejor estado.— Comentó— Este es el sector de la preparatoria y universidad, en general, los de secundaria usan el sector que está más atrás.

Juri recorrió el lugar con su mirada, muchos asientos, algunos árboles, muchas flores, mucho césped, una gran fuente era increíble. Habían muchos alumnos de preparatoria y algunos universitarios en ese lugar, pero, de repente algo llamó su atención -y evidentemente la atención de todos- ya que, tres chicas venían caminando, una pelirroja, una rubia y otra castaña, quienes acapararon la atención de todos los chicos del lugar y algunas chicas, las tres vestían súper bien, aunque, de una forma bastante provocadoras -a su parecer-

—¿Quiénes son esas chicas?— No dudó en preguntarle la Katou a la Inoue.

La peli-lila acomodó sus lentes y observó a la chicas— ¿Te refieres a esas tres chicas de ahí?

Juri asintió.

—Ellas son las chicas más populares de este lugar.— Respondió la chica de anteojos— Sora Takenouchi, Izumi Ishida y la castaña es una chica que estuvo tiempo afuera, pero, regresó, su nombre es Mimi Tachikawa.

—¡Wow! Logran llamar la atención de todos los chicos de este lugar.— Comentó la castaña observando como todos en el campus dirigían sus miradas a las tres chicas.

—Si, pues, tu sabes como son los chicos.— Comentó la peli-lila— Todo entra por los ojos.—Y dicho esto ambas chicas carcajearon levemente.

Mientras que a unos escasos metros de ambas chicas se encontraba un grupo de chicos, ciertamente un año menor que ellas, Hikari había recibido una llamada, así que, había tenido que alejarse por unos minutos de su amigo Takeru, quién en esos momentos se encontraba con un chico de cabello castaño, piel pálida y ojos verdes, de nombre Tomoki, además, de estar con Daisuke.

Los tres observaban atentamente a las chicas que caminaban por el lugar.

—¡Wow! ¿Quién es esa chica que está con tu hermana?— El castaño de ojos verdes le preguntó al rubio.

—Es una amiga de Izumi, se llama Mimi Tachikawa.— Contestó Takeru sin interés.

—¡Wow! Es hermosa.—Comentó Tomoki— Es genial recibir a una chica nueva por estos lugares.

Daisuke hizo una mueca— Ni tan nueva.— Comentó— Ella estuvo aquí hace unos años.

—¿Enserio?— Preguntó el chico Himi.

Takeru asintió— Si, ella fue novia de mi hermano Yamato.

Tomoki sonrió de lado— ¡Wow! Tu hermano si que tiene buen gusto.— Comentó un tanto embobado al ver a la chica— ¿Y por qué terminó con un bombón como ella?

Takeru hizo una mueca— No estoy seguro, de un día para otro sus hermanos y ella se fueron de este lugar sin dejar rastro alguno.

—Por eso, entonces, no la conocía.— Comentó el oji-verde— ¡Vaya! Es guapísima, que pena que tu hermano ya no esté con esa preciosura.

Daisuke rodó los ojos— ¡Ya, deja de mirarla!— Le exigió sonriendo— Es muy grande para ti, dudo que te mire siquiera.— Se burló levemente.

Tomoki hizo una mueca y volteo hacia su amigo. Suspiró— Tristemente, tienes razón.

Las tres chicas se sentaron en una banca.

—De verdad me alegra que regresaras Mimi, no soportaba estar en clases sin mi mejor amiga, mi compañera de toda la vida.— Exclamó Izumi.

—Y pues, también te extrañábamos en el departamento y en los recreos, era extraño que nos observaran solamente a las dos.— Comentó Sora.

Mimi sonrió y abrazó levemente a sus amigas— No saben todo lo que las extrañé, verdaderamente me hicieron faltas.

—Tu igual nos hiciste falta a nosotras.—Respondió Izumi— Te fuiste de la noche a la mañana. De un momento a otro pasamos de ser tres a dos.

Mimi hizo una mueca— Si, es que, mi padre tuvo un problema en su trabajo y luego de lo que pasó en...—Hizo una pequeña pausa— Ustedes ya saben.— Respondió rápidamente— No quiso dejarnos solos, así que, nos llevó a Nueva York con sus padres.

—Verdaderamente sentimos tu ausencia amiga.— Comentó la Takenouchi.

—Bueno, ya no la sientan, porque, aquí estoy para ustedes.— Respondió la castaña pasando una mano por las puntas de su cabello.

—¡Por cierto! Chicas, hoy ensaya la banda de mi hermano ¿les gustaría asistir?— Preguntó la rubia.

Sora sonrió— Me encantaría, es genial escucharlos tocar, así aprovechó de ver a Taichi que entrena en la cancha de en frente.

—¿Y tú, Mimi?— Izumi le preguntó a la Tachikawa.

La castaña se mordió el labio inferior ¿Ir al ensayo de la banda de Yamato?

—¡Claro! Si no te molesta ir al ensayo donde está mi hermano presente.— Izumi habló.

Mimi hizo una mueca, aún se sentía lista para estar frente a frente con él, pero, si era sincera nunca lo estaría del todo, nunca se convencería sola de eso, de alguna forma debería comenzar a enfrentar a aquellas personas y cosas que había dejado atrás, esta era la oportunidad— No me molesta.— La incomodaba un poquito, pero, debía comenzar a ser valiente, no podría estar toda la vida escapando—Me encantaría ir.

Izumi sonrió— ¡Genial!

~Minutos después~

Takuya, Koichi y Kouji se levantaron del lugar donde estaban, cada quién debía volver a su respectiva clase, los de preparatoria ya habían ingresado hace varios minutos a sus clases, pero, ellos tenían horarios diferentes, en diferentes salones.

—Bueno, creo que llegó hora de separarnos.— Comentó Koichi antes de alejarse.

—Koichi tiene razón.— Habló Kouji.

—Nos vemos después.— Se despidió Takuya antes de alejarse en dirección a las escaleras, la verdad es que tenía tiempo para llegar, pero, quería aunque sea por ser el primer día ser responsable. Caminó con tranquilidad, sin apuro, pero, antes de llegar a aquel lugar ante sus ojos apareció la última persona que quería ver en todo el universo.

—¡Takuya!— Exclamó Ryo Akiyama sonriendo— El amigo que regresó.

Takuya hizo una mueca ¿cómo podía ser tan hipócrita? Habían pasado años, pero, él sabía que no le simpatizaba en lo absoluto, con suerte lo consideraba como su amigo.

—¿Cómo estás?— Preguntó el Akiyama.

Takuya rodó los ojos— Estoy bien.— Respondió sin interés.

—¿Vas a tu clase?

—¿A ti que te importa, Akiyama?— Preguntó el hermano de Mimi.

—¡Hey! No tienes que ser mala onda conmigo, Takuya.— Comentó el chico— Estamos en la misma clase por eso preguntaba.

Takuya suspiró ¿por qué tenía tan mala suerte? ¡Justo quedar con él!

—Al parecer no estás de animo.— Comentó el Akiyama— No pensé que estarías tan estresado como los demás por su primer día de universidad.

No era eso, francamente no le agradaba el Akiyama y no quería hablar con él.

—Pero, bueno...—El chico abrió su mochila y sacó una botella— Yo tengo algo para calmar esos nervios.

Takuya abrió los ojos sorprendido y un tanto alarmado, de Ryo se podía esperar cualquier cosa— ¿Qué es eso?

Ryo sonrió— Es un delicioso vino de uvas fermentado durante un año.— Comentó— Es bueno para el estrés.— Llevó su mano hacia la tapa.

—¡Oye! No vas a tomar eso aquí.— Advirtió el Tachikawa.

—¿Por qué no?— Ryo alzó una ceja— Puedo tomar lo que quiera.

Takuya rodó los ojos, definidamente el chico no pensaba, ese lugar no era el apropiado para tomar esa cosa. Sin esperar más, en un rápido movimiento le quitó la botella al Akiyama—¡Dame eso, Ryo!— Reclamó el hermano de Mimi.

—¡Oye!— Exclamó Ryo— ¡No me la quites!

Takuya rodó los ojos— Tu verdaderamente no cambias, Akiyama ¿Cómo traes alcohol a la preparatoria?

—Bueno, es mi vida, yo veo lo que tomo o no.— Respondió el Akiyama— Ahora ¡devuélvemelo!— Exigió.

—No.— Respondió Takuya seriamente, no iba a dejar que el chico actuara tan imprudentemente sobre todo en ese lugar, ya que, no era el sitio. Ryo sin esperar más se abalanzó contra el chico, pero, el hermano de Mimi fue más rápido y se alejó impidiendo esto, el Akiyama nuevamente volvió a abalanzarse sobre él, pero, nuevamente Takuya lo esquivó. Por última vez Ryo se lanzó contra él, Takuya lo esquivó, pero, no alcanzó a darse cuenta que la tapa de la botella se salió y por ende, todo el líquido de la botella cayó sobre una persona, mejor dicho sobre una chica, sobre...¡Izumi!

Sora y Mimi observaron atentamente a su amiga quién estaba empapada de un líquido morado que ensuciaba y dejaba marcada su blusa blanca, parte de su falda y su cabello. Izumi abrió levemente la boca sorprendida, bajó la mirada hacia sus manos, estaba totalmente pegajosa, mojada.

¡Su cabello!

Fue lo primero que pensó y al levantar la mirada lo primero que vio fue a un Takuya con el brazo extendido y la botella abierta.

Izumi frunció el ceño— ¿Qué te sucede, Takuya?— Preguntó totalmente enfadada— ¡Me mojaste!

—¿E?— Balbuceo Takuya— P-pues...— Observó la punta de botella.

—¿Cómo tan inepto?— Preguntó enojada la chica— ¡Mi ropa, mi pelo! ¡Todo está arruinado por tu culpa!

—D-disculpa, Izumi, no quería.— Intentó disculparse el moreno— La botella se abrió sin querer y justo...

—Justo dio hacia mi ¿no?— Izumi interrumpió al hermano de Mimi y rodó los ojos sarcástica— Recién llegas y ya me das problemas.

—¡Hey! Fue un accidente.— Habló Takuya.

Izumi simplemente suspiró frustrada— Supongo que me pagarás la lavandería ¿no? Porque esta cosa.— Olió levemente su ropa— ¿Vino?

Mimi alzó una ceja— ¿Trajiste alcohol, hermano?

Takuya negó con la cabeza— No.— Cerró la botella— Esto es de Ryo, yo simplemente estaba se lo quite intentando mantenerlo sobrio.— Y sin decir más lanzó la botella contra el nombrado.

Ryo la atrapó y frunció el ceño— Gracias Tachikawa, ahora me dejaste sin desayuno.— Reclamó.

—Mejor agradéceme tomar muy temprano no hace bien.— Contestó el moreno.

Ryo rodó los ojos y sin más, se alejó del lugar.

Izumi suspiró y se cruzó de brazos observando al hermano de Mimi— Y bien...—Takuya volvió su mirada hacia la chica— Supongo que me pagarás la lavandería ¿no?

Takuya observó de pies a cabeza a la chica y se dio cuenta de algo.

La lavandería le costaría un ojo de la cara.

La manchas de vino no salían fácilmente de la ropa, hizo una mueca, apenas comenzaba el año y ya se quedaba sin mesada.

¡Gran inicio de año!

¡Hello! Oigan, de verdad, me divertí escribiendo este capítulo, sin cosas tóxicas. Eso de "actos pre-matrimoniales" es como un conocido mío y amigo de mis padres nombró a "eso" y la verdad es que siempre que me acuerdo me mato de la risa y pues, obviamente tenía que salir, no sé, enserio me da mucha gracia jiji

Estaba pensando que en cada capítulo les dejaré una pregunta para ir conociendo más lo que les gusta leer o lo que les gustaría y pues, ojalá respondan Jejej La pregunta de hoy es: ¿Quién es el chico más guapo para ustedes y la chica más linda de Digimon? (De toda la saga, pueden darme hasta dos nombres)

mariacredenza02: Si jaja empezaron las preguntas, ya veremos que sucedió con el bebé de Mimi, me gustaría escuchar sus teorías cuando las tengan jejej Todavía estoy planeando el reencuentro, quiero que sea emocionante antes que todo Jajaj lo de la mamá de Mimi me lo saqué casi de improviso y pues, algún día contaré como murió. La reacción de su padre sin duda quería que fuera como fuerte, no sé si lo conseguí, pero, quería que dejara ver eso de que él quería hacer ver a la sociedad que eran "la familia perfecta" Bueno, el Kouzumi no es mi favorita, la verdad es que nunca lo ha sido, pero, luego de leer algunas historias ya no se me hace del todo desagradable, así que, la paso, ya veremos que ocurre con ellos, con Takuya, y pues, veremos si algún día Kouji llega a preguntar por Damar o si ella vuelve en algún momento, por ahora, Damar estará afuera, ese siempre fue mi plan -incluso pensaba empezar con el presente y que algún día cuando ella volviera contar lo que había ocurrido hace tres años atrás, pero, la verdad es que conté antes lo que sucedió y pues, ahora dejaré en receso a Damar- Lo que puedo asegurar es que si algún día vuelve verdaderamente llegará cambiada. Te lo enviaré cuando vea que leíste este capítulo sin duda, en realidad te enviaré la idea de lo que verdaderamente iba a ocurrir, no todo lo que había escrito, ya que, quizás me lo reserve, si es que algún día regresa Damar o no. Me alegra saber que te encanta esta historia y su desarrollo, la verdad es que siempre intento innovar, pero, algunas veces me quedo corta, saber que les gusta me deja tranquila. Te mando un gran abrazo a la distancia y nos vemos en el siguiente capítulo.