¡Holii! Sé que dije que no actualizaría eso se debió a que estaba triste, porque, hoy recibía unos resultados de una prueba muy importante para la U y pues, pensé que me había ido mal, pero, me equivoqué estoy feliz y con muchas ganas de hacer muchas cosas deporte, cantar, escribir, etc. Así que, aquí estoy, ojalá les haya guste este capítulo.


~Horas más tarde~


Yamato y los demás miembros de la banda guardaron sus instrumentos en el lugar donde siempre los guardaban luego de ensayar. El rubio observó a todos lados, según su amigo, Izumi vendría al ensayo, pero, no finalmente no había venido ¡y necesitaba hablar con ella!—Izumi no vino al ensayo.

Kouji hizo una mueca— Pues, me había dicho que vendría.

—Ella siempre cumple lo que dice.— Comentó el rubio— ¿Qué le habrá ocurrido?

—No sé.— Contestó Kouji.

Yamato se mordió el labio inferior, la razón por la que necesitaba hablar con su hermana era principalmente porque necesitaba hablar sobre la recién llegada, Mimi. Izumi era una de las mejores amigas de la castaña, así que, ella podría ayudarlo a entender algunas cosas.

Suspiró, verdaderamente la castaña había logrado afectar su mundo, su cabeza, con tan solo su llegada, ya no sabía que hacer o como actuar, miles de recuerdos venían a su mente, siempre.


~Tres años atrás~

Yamato observó atentamente el cartel frente a él.

"Terapia psicológica"

Suspiró, él nunca había ido al psicólogo, a diferencia de Takeru e Izumi, porque lo encontraba innecesario, pero, luego de lo que había ocurrido, asistir a esa terapia junto a Takeru e Izumi sería una forma de ayudarlos, aunque fuera algo mínimo para lo mal hermano que había sido. En verdad que remediar su error.

Unas manos se posaron en sus ojos y no pudo evitar sonreír, ya que, sabía perfectamente por su suavidad quién era— ¿Quién soy?— Preguntó una voz dulce.

—Mimi.— Contestó Yamato y en un rápido movimiento volteo hacia ella tomándola por la cintura— Llegaste.

La castaña sonrió— ¿Pensaste que no?— Preguntó— Dije que no te dejaría solo, mucho menos en este momento.— Besó su mejilla.

Yamato suspiró, le hacia tan bien verla, en cualquier otro momento le hubiera dado un gran beso, pero, en la situación y en el lugar donde estaban no debían. Él no podía desconcentrarse, en ese minuto estaban en ese lugar para apoyar a Takeru, quién evidentemente había quedado shockeado luego de lo que había ocurrido necesitaba esa terapia, esa pequeña rehabilitación, tristemente había probado esa cosa y no era bueno.

—Gracias por venir a apoyarme.

—No tienes que agradecerme.— Comentó la castaña— Sé que esto es difícil para ti y si puedo darte mi apoyo para que te sientas mejor entonces lo haré. Te amo y quiero estar siempre que me necesites.

Yamato sonrió.

Era una sensación maravillosa saber que por fin alguien lo apoyaba.


~Actualidad~

Sora, Izumi y Mimi ingresaron al comedor, era la hora de cenar y la verdad es que las tres estaban hambrientas.

—¡Oh! Que hambre tengo.— Exclamó la rubia.

—¿Qué sucedió finalmente con tu ropa, Izumi?— Sora le preguntó.

Izumi se mordió el labio inferior— Ni me lo recuerdes.

Mimi observó atentamente el lugar. Suspiró, era difícil ver ese lugar luego de lo que había ocurrido específicamente en el armario que encontraba a un costado. Se mordió el labio inferior y no pudo evitar observar a su amiga rubia que se encontraba frente a ella, la hermana de Yamato, la hermana del padre del bebé que esperaba. Muchas veces se arrepentía de verdad no haber confiado en sus amigas, sobre todo en ella, ya que, el bebé era de su sangre, y pues, merecía saberlo ¿no? Quizás, si hubiera sido más valiente, quizás, si se hubiera atrevido en contarle su secreto, tal vez, si hubiera confiado en ella nada de lo que sucedió hubiera ocurrido.

Las únicas personas que se habían enterado de lo que había ocurrido habían sido sus hermanos, su padre y su "madre", había sido un proceso difícil que nunca podría olvidar, era parte de su vida, era algo que siempre estaría con ella.

Izumi observó hacia la puerta y pudo divisar como cierto chico moreno ingresaba al lugar— Y hablando de mi ropa.— Debía cobrar y sin más, se encaminó hacia el chico.

Takuya hizo una mueca al ver a la chica caminar hacia y verdaderamente consideró la idea de salir corriendo, la chica evidentemente no estaba alegre.

—Buenas noches, Tachikawa.— La chica saludó seriamente.

—Buenas noches, Ishida.— Takuya saludó a la rubia— ¿Qué necesitas?

—Tu sabes que necesito.— Contestó Izumi y estiró su mano— Terminemos con esto y dame el dinero.

Takuya suspiró— No tengo efectivo para pagarte.— Contestó— Tendré que ir a un Banco a retirar dinero.

—Está bien, puedo esperar hasta mañana.

—¡Por cierto! ¿Cuánto dinero es?— No pudo evitar preguntar el chico— Digo, para tener una idea de cuanto dinero sacar.

Izumi suspiró— Pues, el conjunto me costó ochocientos dólares, ya que, los compré en Estados Unidos.

—¡Ochocientos dólares!— Exclamó Takuya— ¿Estás bromeado?

Izumi negó— No.

Takuya hizo una mueca y suspiró— Verdaderamente estás loca ¿cómo comprarte un conjunto de ropa tan caro?

—Porque me gusta la ropa de diseñador.— Contestó la chica— Y lógicamente compraré los modelos originales.

Takuya suspiró, verdaderamente nunca entendería a las chicas, Izumi era como Mimi, mientras más cara la ropa mejor, según ellas, mientras que él con unos pantalones comunes, una remera y zapatillas deportivas era feliz.

—Bueno, mañana luego de clases tendré el dinero.

—Está bien.— Izumi asintió y su mirada se centro hacia las escaleras tras ellos donde venía un par de gemelos bajando y sin más, caminó en dirección a su novio.

Kouji alzó una ceja al ver que su novia hablaba con el hermano de Mimi, verdaderamente era extraño verlos juntos, sin llorar o gritar, ya que, antes de que luego de que ocurriera eso con Ryo, ambos hablaban como esas parejas dramáticas de novelas. Izumi en un momento dejó de hablar con él y caminó hacia ellos—¿Qué estabas haciendo con Takuya?— No pudo evitar preguntar más intrigado que otra cosa.

Izumi hizo una mueca— Pues, le estaba pidiendo dinero.

—¿Dinero?— Cuestionó el Minamoto.

—Me arruinó la ropa que llevaba hoy.— Contestó la rubia— Me lanzó un líquido que dejó una mancha terrible.— Señaló su cabello.

—¿Y por qué no fueron a la lavandería?— Preguntó Koichi inocentemente.

Izumi se cruzó de brazos— Fuimos, pero, la mancha no salió.

—¡Wow! No lleva ni una semana aquí y ya tienen problemas.— Comentó el Kimura.

Izumi rodó los ojos— Pues, su amigo encuentra la forma de hacerme enfadar.— Suspiró.

Kouji simplemente hizo una mueca, curiosamente la relación del hermano de Mimi y la hermana de Yamato había comenzado de esa forma, ambos odiándose y discutiendo siempre, sinceramente, no podía evitar preguntarse si esta vez la historia sería igual. Porque, aunque Takuya hubiera estado enojado con ella, años habían transcurrido y ahora ninguno era ese adolescente de quince años.

Izumi se mordió el labio inferior, estaba muy enfadada con esa situación, no por la ropa específicamente, eso le importaba en parte, pero, lo que más la había frustrado la persona con la cual había vivido esa situación. Lo que más quería era olvidar todo lo que había ocurrido con él en el pasado, quería centrarse en el presente. Suspiró y tomó la mano de su novio— Mejor vamos a cenar, estoy hambrienta.


Ahí estaba el rubio que tanto había movido su vida, sinceramente nunca se cansaría de mirarlo, era hermoso.

—¡Hey! Tus ojos no salen del hermano de Mimi.— Comentó Sora.

Mimi sonrió de lado y suspiró.

—¿Aún te interesa, no?

—Quizás...— Respondió de una forma bastante imparcial, la verdad es que si lo quería, lo amaba, siempre lo había y no lo había dejado de amar aunque se hubiera ido.


—¡Wow! El guitarrista de los Teenages Wolves ¡tiene un gemelo!—Exclamó sorprendida.

—Si ¿no los sabías?

Juri negó con la cabeza— No.— Contestó— Pero, me alegra saberlo, amo a los Teenages Wolves.

—Y justo quedaste en el mismo Internado de ellos.— Comentó Miyako.

Juri sonrió— ¡Me encantan sus canciones! Sobre todo una llamada "Nadie más"— Comentó— Dice...— Se preparó para cantar— Nadie más podrá hacerme decir "te quiero" Nadie más compartirá lo que yo siento, Nadie más será princesa de mi cuento, Como me falta tu amor.

—¿Sabes? Yo estaba presente la primera vez que Yamato y su banda tocaron esa canción.— Comentó la chica de anteojos.

—¿Enserio?

Miyako asintió— Fue en una fiesta que se hace siempre, hace tres años atrás.— Habló— Yamato se la decidó a una chica en esa ocasión.— Llevó una mano a su mentón— Aunque ahora que lo pienso creo que ha sido la única vez que le ha dedicado una canción a una chica o a declarado que escribió una canción pensando en una chica.

—¡Wow! Esa chica debía ser muy afortunada.— Comentó Juri.

—Bastante.

—¿Quién fue la chica?— Preguntó la castaña.

—Pues, la chica fue...

—Buenas noches.— Una mujer rubia de ojos lilas ingresó al lugar interrumpiendo a la chica.

—Buenas noches señora Nonaka.— Saludaron todos a coro.

La mujer sonrió— Me alegra ver que todos están bien, espero que hayan tenido un buen día.— Habló— Hoy comenzaron sus años escolares y la verdad es que un nuevo año comienza espero que todos se sientan a gusto en este lugar, que sean responsables en sus labores como alumnos y también espero que estén con mucho ánimo para cumplir con sus como habitantes de este Internado, espero que sean correctos y responsables como nuestra sociedad lo requiere.— Suspiró— Desde mañana comenzaran sus labores domesticas los niños consentidos como ustedes.

—¿Labores domésticas?— Preguntó Juri intrigada.

Miyako hizo una mueca, tristemente luego de lo que había ocurrido hace tres años atrás, la nueva directora había buscado una forma de tratar con los niños de sociedad dándoles labores domesticas para que no ocuparan su tiempo en cosas sin sentido o malas -como drogarse, emborracharse, entre otras cosas- Suspiró— La directora Nonaka cree que la mejor forma de corregir a niños de sociedad es dándole labores como lavar los platos, ayudar en la cocina, trapear, entre otras cosas.

Juri abrió los ojos sorprendida— ¡Vaya! En mi Internado pasado no hacían ese tipo de cosas.

—Pues...—Suspiró la Inoue— Luego de algo que ocurrió hace unos años creen que es la mejor forma de "hacernos aterrizar"

¿Algo que ocurrió hace años?

—¿Hacernos aterrizar?

—Según la directora y su ayudante, el dinero hace que las personas pierdan la cabeza, sobre todo los adolescentes.— Comentó la peli-lila— O eso es lo que quedó demostrado hace un tiempo.

Juri volvió su mirada a la mujer.

—La listas estarán en el tintero de la entrada, también la página web del Internado para que verifiquen cuales serán sus labores.— Finalizó la mujer— Sin extenderme más que tenga buena noche.


—¿Labores domesticas?— Preguntó Mimi sorprendida.

Sora e Izumi asintieron.

—Luego de lo que ocurrió esa noche, cuando la madre de Rika tomó el mandó de la dirección de este lugar creyó que la única forma de impedir que perdamos el tiempo en...—Sora se detuvo un momento— Ciertas cosas.— Rodó los ojos— Creyó que lo mejor era utilizar nuestro tiempo en lavar platos, hacer aseo, entre otras cosas.

Mimi hizo una mueca— ¡Qué horror!

—Lo sé.— Contestó la rubia y levanto su mano— Gracias a eso con suerte me dura mi manicura.

—Lo peor es limpiar los baños.— Comentó Sora haciendo una cara de disgusto—Ya que no es ¡uno! sino diez de cada departamento.

Mimi movió levemente la cabeza, eso no sonaba algo que una chica como ellas haría, claro que no— ¿No que le pagan a personas por hacer esas cosas?

—Se suponía, pero, la madre de Rika cambió muchas cosas.— Respondió la oji-verde— Ahora quiere que "trabajemos"

—¡Un espanto!— Exclamó la castaña.

—Lo mismo digo.— Contestó la chica Ishida.


—¿Labores domésticas?— Preguntó Takuya incrédulo.

Los gemelos asintieron.

Takuya suspiró— Este lugar al parecer empeoró en algunas cosas mientras no estuve.

—Bueno, las labores domésticas son aburridas, pero, le quitan tiempo a algunos de hacer tonterías.— Comentó el Kimura.

—¿Verdaderamente lo hace?— Preguntó el moreno sorprendido.

Koichi y Kouji intercambiaron miradas— No.— Respondieron a coro.

Takuya no pudo evitar lanzar una leve carcajada, era como si se hubieran puesto de acuerdo para responder.


Luego de cenar Takeru acompañó a Hikari a su departamento, ambos entraron y no se sorprendieron al ver que este estaba vacío.

—¡Wow! Ahora que solo tienes a Rika como compañera vivirás prácticamente sola.— El rubio le comentó a su amiga.

Hikari hizo una mueca— Me pregunto ¿por qué no nos habrán asignado compañera? Eso nunca se había dado. Generalmente hay departamentos donde hasta hay una cuarta persona.

—Bueno, quizás, los números de inscripciones fueron menores.— Comentó el rubio.

—Quizás...—Comentó la castaña.

Ambos tomaron asiento en uno de los sofás de la sala principal del departamento, Takeru la abrazó por los hombros e Hikari recostó su cabeza en su pecho.

—¿E? Oye, Hikari...—Takeru llamó a la chica— Aún no me has dado el beso de hoy y llegué temprano a clases.

Hikari sonrió, estaban en medio de la preparatoria, lógicamente no lo besaría en frente de todos, suspiró y posó sus manos en sus hombros— Bueno, ahora si te doy el beso de hoy.— Y sin esperar más sus labios se unieron en un suave, delicado y cálido beso. Duraron así unos segundos, tranquilos disfrutando del contacto. Pero, llegó un minuto en el cual este beso se hizo más intenso, sus labios se abrieron y sus lenguas comenzaron a bailar coordinadamente y según pasaban los segundos el beso casi desesperado..

En un momento dado Hikari dejó caer su espalda contra él sofá y Takeru quedó sobre ella. Takeru se separó levemente de sus labios y comenzó a besar el rostro de la chica con besos suaves y delicados, bajando desde la frente hasta el mentón y en un momento dado el chico comenzó a besar su cuello.

Hikari alzó su mirada y observó el reloj de su pared, era tarde—¿E? Takeru— Lo llamó balbuceando levemente— Creo que debemos parar.

—¿Por qué?— Takeru escondió su rostro en el cuello de la chica— Estamos bien así.

Hikari hizo una mueca— Lo sé, pero, no sabemos cuando harán una inspección sorpresa y no creo que sea buena idea que nos vean tan juntos.— Estaban en la sala principal de su departamento, solamente abrazados, pero, la inspectora era verdaderamente exagerada en algunos sentidos cuando le tocaba hacer la inspección.

Takeru hizo una mueca y suspiró— Tienes razón.

Ambos se levantaron del sofá.

—Pero, mañana volveré por más besos.

Hikari rodó los ojos divertida— Si llegas temprano y eres responsable sin problema te los doy.

Takeru sonrió y caminó en dirección a la puerta— Entonces, nos vemos mañana preciosa.— Se despidió y giró hacia la puerta para abrirla, pero, antes de tocar la manilla esta se abrió y

¡Puff!

La puerta se estampó contra su rostro.

—¡Takeru!— Exclamo Hikari preocupada.

El rubio llevó una mano a su frente— ¡Ouch!— Se quejó.

Rika apareció tras la puerta y observó atentamente al chico al cual sin querer había golpeado y fue todo un poema su cara, el día al parecer no terminaría de mala manera. La Nonaka no pudo evitar carcajear al ver al chico— ¡Ups! Lo siento ¿te golpee Takeru?— Le preguntó entre risas.

Takeru hizo una mueca— Si.

La risa de la Nonaka se hizo más intensa.

—¡Oye! No te rías.— Exclamó el oji-azul.

—Lo siento, pero, no puedo evitarlo.— Comentó— Ya era hora que me devolvieras unas cuantas bromas que me has hecho.

—¡Esa vez fue un accidente!

—Y lo mío de ahora es venganza divina.— Contestó la Nonaka.

—Te gusta fastidiarme Nonaka.— Comentó el rubio.

—Es que, fastidiarte es toda una comedia.

Hikari intentó aguantar ciertas carcajadas que amenazaban a salir de sus labios, sinceramente, le encantaban esas escenas entre su amigo y la pelirroja, desde hace tiempo ambos la chica lo venía molestando por diversión y Takeru en cierta medida le seguía el juego, ya que, era divertido.

—Ya mejor me voy, no vaya a ser que me llene de tu vibra.— Bromeo el rubio.

—No sería malo, porque, mucha falta te hace tener mis vibras.— Contestó la Nonaka.

Takeru simplemente rodó los ojos y una sonrisa se formó en su rostro— Ya me voy, buenas noches chicas.

—Buenas noches.— Respondieron ambas y fue así como el rubio desapareció.

Rika cerró la puerta y luego observó pícaramente a la Yagami—¡Vaya! Takeru y tu solos aquí.— Comentó la Nonaka.

Hikari se mordió el labio inferior— No empieces.

—Tranquila, sé que todavía son muy inocentes como para cometer algún paso apresurado, no los molestaré.— Habló la Nonaka— Todavía.

Hikari suspiró, de vez en cuando Rika los molestaba a Takeru y a ella por estar a solas, ya que, era bastante extraño que tuvieran tanta confianza de estar solos, de vez en cuando besarse y no dar...ese paso. Aunque, según las palabras de la Nonaka eso estaba bien, ya que, ni ella aún se atrevía a dar el paso, porque, todos en ese lugar eran unos patanes y todavía no encontraba al chico indicado. Nuevamente suspiró y volteo en dirección hacia su amiga— ¿Cómo estuvo tu día?

—Terrible.— Rika se lanzó sobre el sofá frente a la castaña y suspiró— Tuve una charla con mi madre y ya te imaginarás como estoy.

—¿Enfadada?

—Y disgustada.— Completó la Nonaka— ¡Me molesta que se meta en mi vida!

Hikari hizo una mueca— Rika, tu madre simplemente se preocupa por ti.

Rika rodó los ojos— Estoy a unos meses de cumplir dieciocho, debería de una vez por todas dejarme sola, ya estoy en edad de tomar mis propias decisiones.

—Pero, Rika, aunque ya seas grande ella no puede despreocuparse de ti, eres su hija.— Habló la Yagami.

—Pues, cuando verdaderamente necesité que fuese mi madre no estuvo ahí.— Comentó la Nonaka— Ya no es tiempo para se preocupe.

Hikari suspiró— Estaba sola, debía sacarte adelante, y quiso hacer lo posible para que nada te faltara.

—Pero, no fue la madre que necesite.— Habló nuevamente Rika enfadada— Cuando necesitaba hablar con ella simplemente no estuvo, ahora no la necesito.— Suspiró frustrada— Quizás, si mi pare estuviese vivo pensaría diferente, pero, ya que no está.

—Rika, tu madre ya te ha dicho que el murió, pero, antes de morir ambos ya se habían separado.— Comentó Hikari.

—Aún así, Hikari, aunque hubiesen estado separados estoy segura que no me hubiera hecho tanta falta como la que me hizo mi madre en su momento.—Contestó la pelirroja—Muchas veces verdaderamente desearía que estuviese vivo y en vez de tener una imagen en blanco y negro de él tenerlo enfrente para hablar.— La chica llevó una mano a su mochila y de ahí sacó una foto en blanco y negro, apenas legible, en la foto había un hombre, pero, con suerte se veía bien.

Hikari hizo una mueca y observó la foto— Llevas siempre esa foto en tu chaqueta.— Comentó— Cada vez se destiñe más.

Rika suspiró— Lo sé.— Respondió observando la fotografía en su mano.

—¿Nunca has pensado en pedirle a tu madre una más legible?— Hikari no pudo evitar preguntar.

Rika hizo una mueca— Siempre, pero, según ella todas se perdieron luego de que su casa de incendiara.— Comentó— Esto es lo único que queda. Y tristemente, se está destiñendo, ya que, es muy antigua.

—¿Y no le has preguntado a uno de sus familiares si tiene una foto de él o algo que te sirva como recuerdo?— Preguntó la castaña.

—El único familiar de mi padre que conozco es a Kousei Minamoto y sus hijos gemelos.— Comentó la Nonaka y alzó la mirada, ya que, se dio cuenta de que la idea de la chica no era tan descabellada— Nunca le he pedido una foto de mi padre.

—Quizás, tenga alguna ¿no?— Habló Hikari— Se supone que ellos ¿eran?

—Primos.— Contestó la pelirroja— Aunque, tienes razón, con algo de suerte quizás tenga algo en sus álbumes antiguos, le preguntaré cuando lo vuelva a ver.


Sora, Izumi y Mimi luego de cenar no dudaron en ir a su departamento y descansar, mañana el día también sería agitado como hoy.

—Tengo mucho sueño.— Exclamó la rubia mientras daba un pequeño bostezo— Este día verdaderamente me dejó agotada.

—Agotada ¿por tanto enfados con el hermano de Mimi?— Preguntó la pelirroja.

Izumi frunció el ceño— Ni me lo recuerdes, lo único que quiero es olvidar lo que sucedió.— Caminó hacia su habitación— Me iré a dormir, buenas noches.

—Buenas noches.— Respondió Mimi.

—Bueno, yo también iré a dormir.— Comentó la pelirroja.

Mimi asintió y Sora caminó se introdujo en su habitación y cerró la puerta. La castaaña Tachikawa quiso imitar las acciones de sus amigas, pero, antes de que pudiera llegar a su habitación.

¡Toc, toc!

La puerta sonó y tuvo que volver a ella para abrir, pero, cuando hizo esto verdaderamente se arrepintió ya que hay enfrente se encontraba...él.

—Hola Tachikawa...— Saludó el rubio de ojos azules, quién la miraba expectante.


Continuará jajaj...

Pregunta del capítulo: ¿Qué pareja les desagrada de la saga de Digimon?

(También me dio curiosidad de otra cosa -nada que ver- ¿Ustedes conocen la serie The100?)

Adrit126: (respuesta a primer comentario) Que bueno que encuentres bonito encontrar mi historia y la leas, gracias por responder mi pregunta y coincido contigo Mimi e Hikari son las más bonitas (respuesta a segundo comentario) Pronto sabremos que ocurrió con él, y también si Mimi aborto o no, si Damar está siendo buena tía cuidándolo o simplemente lo dieron en adopción. Me alegra saber que te encariñaste con ella, me alegra saber que les gusto ese personaje que prácticamente está siendo moldeada y creada por mi en esta historia. Sin duda, Takuya se sentirá incómodo, pero, ya veremos como irá su relación, como se reparará en algunos sentidos. Aquí está la continuación ojalá te guste, sigas leyendo y comentando, saludos a la distancia.

Samy: SI actualicé dos voy como avión, ya veremos que sucedió luego de ese día y que hizo cambiar a los personajes en algunas cosas. Aquí traje más capítulos y pronto tendremos respuestas. Jajaj Ken sin duda es lindo, no te culpo elegirlo antes que Takeru, aunque, igual es hermoso jajaj Mimi e Hikari van arrasando en esta encuesta jajaj Ultimamente intento poner más Takaeri y pues, veremos más takari asi que sigue leyendo y sabrás lo que ocurre con ellos jiji Saludos.

mariacredenza02: Si jajaj ojalá no se arranquen los pelos, Mimi tiene que estar de lado de ambos de su hermano y mejor amiga jaja veamos como lo hará. Sentía de verdad que si quería poner a Miyako debía poner a Ken, ya que, no quiero dejarla sola, aunque no profundizaré mucho en eso jiji y pues Juri simplemente le gustan los de la banda Jejej como a todas jejej pero ya veremos quién será su romance, tengo una idea, pero, necesito saber algo antes. Me gusta que Kouji y Yamato sean amigos al igual que Takuya y Taichi jiji Kouji ahora tiene otra situación él quiere que sean sinceros con él, ya que, tampoco tiene interés de pasar un mal momento con ellos porque sabe que tuvieron algo, ya veremos como Yamato resuelve sus dudas. Veamos como Rika dejará las drogas y pues, poner mucho ojo en el tema de su padre -es lo único que diré jejej- Amo las escenas Takari intentó que sean chistosas y tiernas, ya veremos que sucedió con Henry. Aquí estoy de vuelta jaja si necesito inspiración, pero, la verdad había pensado en detenerme porque pensé que estaría triste por algo que comenté anteriormente, pero, aquí estoy jiji Es que igual no quiero hacerlos esperar mucho, quiero avanzar lo más posible con esta historia. Espero que sigas leyendo, saludos y nos vemos en el próximo cap.