—¿Te encontraste con mi hermano?— Preguntó Izumi sorprendida.

Mimi asintió.

—¿Y como fue?— Pregunto la rubia intrigada.

—Terrible.— Contestó la castaña— Tu hermano nunca había sido tan frío y distante conmigo.

Izumi hizo una mueca ante esto— Bueno, es entendible.— Habló seriamente— Te fuiste de un día para otro, sin decir algo, ni siquiera enviaste un mensaje.

Mimi suspiró, Izumi tenía razón, era entendible que Yamato estuviese dolido con ella, ya que, se había ido de un momento a otro sin decir adiós, luego de haber prometido que estaría con él siempre.

—Sufrió mucho cuando te fuiste.— Habló Izumi— Y ciertamente quedó desconcentrado, aunque, en general todos quedamos desconcertados, no dijeron algo, ni siquiera un pequeño indicio de que los tres se iban a ir.— Comentó— Entiendo que la situación de tu hermana al consumir tantos sedantes fuera preocupante, pero, Takuya y tú pudieron haber dicho algo ¿no?

Mimi hizo una mueca, muchos habían sacado por conclusión que se habían ido por causa de la dependencia de su hermana por los sedantes y ansiolíticos, pero, la verdad es que todo había sido por ella, por su culpa, y tristemente ni si quiera se habían podido despedir, ya que, su padre les había prohibido decir palabra alguna, tanto así que tomó poder de sus redes sociales, cambió su número de móvil, entre otras cosas.

—Mi hermano te quería mucho...

—Lo sé.— Contestó Mimi bajando la mirada al suelo. Verdaderamente no sabía cuanto duraría guardando su secreto, ni a sus mejores amigas que le contaba todo se los había contado. Suspiró y volteo hacia la profesora que estaba explicando su clase.

Juri observó su reloj de pulsera, se acercaba la hora de almorzar y Miyako aún no volvía ¡Y tenía hambre! Las tripas le sonaban, verdaderamente había sido mala idea no desayunar.

Suspiró. Nota mental: Antes de salir del salón haría que Miyako revisará todas sus cosas para no tener que volver.

Hizo una mueca y volteo hacia la preparatoria que se encontraba a varios metros de ella, pero, apenas hizo esto, no pudo ver la preparatoria, ya que, alguien chocó contra ella haciéndola caer al suelo.

—¡Ouch!— Se quejó Juri, pero, al levantar su mirada pudo sentir como el alma se le iba del cuerpo, ya que, con el chico que había chocado no era nadie más y nadie menos que ¡El gemelo del guitarrista de los Teenages Wolves!

—¡Ups! Lo siento.— Se disculpó Koichi y estiró su mano derecha a la chica que yacía en el suelo— No quería empujarte.

Juri observó detenidamente la mano antes de tomarla— ¿E?—Balbuceo— N-no te preocupes.— Respondió antes de levantarse del suelo con ayuda del chico.

—Verdaderamente soy un idiota, estaba tan preocupado en mi libro de anatomía que no me di cuenta por donde iba.— Habló Koichi— Nuevamente me disculpo.

Juri limpió el polvo de su falda— No te preocupes.— Contestó.

Koichi observó detenidamente a la chica, por el uniforme evidentemente era de preparatoria, pero, si hacía memoria no recordaba haberla visto antes— Creo que nunca nos habíamos visto.— Comentó— ¿Eres nueva?

La castaña asintió— Si, mi nombre es Juri Katou.— Se presentó.

—Mucho gusto, mi nombre es Koi...

—No es necesario que te presentes, ya sé quién eres.— Juri inocentemente interrumpió al chico— Te llamas Koichi Kimura.

Koichi alzó una ceja— ¿Cómo lo sabes?

—Pues, soy fan de los Teenages Wolves y pues, no pude evitar informarme de como se llamaba el gemelo del guitarrista.— Respondió la chica Katou.

—¡Oh, vaya!— Exclamó el Kimura— Así que ¿habías preguntado por mi?

Juri asintió— No directamente, pero, al verte con tu gemelo una amiga me dijo tu nombres y pues, lo supe.

—¡Hey! Juri.— Y fue así como Miyako interrumpió la conversación entre ambos y apareció en el lugar provocando que tanto la nombrada como el oji-azul voltearan— Ya es hora de...—Miyako quiso informarle a su amiga que debían ir a almorzar, pero, al levantar la mirada se encontró con el Kimura—¡Oh! Koichi, hola.— No pudo evitar saludarlo.

—Hola Miyako.— Saludó el chico.

La chica se acercó y los observó atentamente— Al parecer estoy interrumpiendo algo.

Koichi y Juri intercambiaron miradas y negaron de una forma casi coordinada con sus cabezas.

—Sin querer pasamos a tropezar, me ayudó a levantarme y pues...— Contestó Juri.

—Me estaba comentado que sabía mi nombre porque le gusta la banda de mi hermano.— Finalizó Koichi— Y justo llegaste tu.

—Ah.— Comentó Miyako fijamente su mirada en su amiga— Pues, venía a decirle a Juri que debíamos ir a almorzar.

Y fue en ese momento en el cual las tripas de Juri recordaron el hambre que tenía hace unos minutos, verdaderamente necesitaba comer.

—A si, ya es hora de comer.— Habló la castaña observando su reloj de pulsera.

—Justo yo iba para allá.— Comentó Koichi— ¿Les parece si vamos juntos?

Juri sonrió. Miyako igual— ¡Muy buena idea!— La peli-lila tomó el brazo de su amigo— Juri es nueva todavía y no le hará mal conocer a más personas, mucho más si es el gemelo del guitarrista de su banda favorita.

Koichi no pudo evitar lanzar una leve carcajada ante esto— Está bien.

Takuya suspiró enfadado mientras portaba un gran bolso con "libros" en su interior, la verdad es que parecían ladrillos, pesaban mínimo una tonelada, estaba seguro de que en cualquier minuto el cierre de aquel bolso colapsaría y se abriría. Suspiró, más encima no solo debía cargar ese bolso que pesaba una tonelada, sino que además llevaba en su espalda su propia mochila con sus libros de economía -algo que odiaba- y que a pesar de no pesar tanto como el bolso lila de Izumi que llevaba en brazos, igual pesaban un buen—Verdaderamente no sé como acepté hacer esto.— Admitió molesto.

Tanto Sora como Mimi no pudieron evitar lanzar una carcajada, mientras que Izumi cruzada de brazos observaba un tanto molesta al moreno— Bueno, si no hubieras ensuciado mi ropa, nada de esto estaría sucediendo.

—Dije miles de veces que fue un accidente.— Habló Takuya.

—Bueno, si quieres repararlo págame los cinco mil dólares y quedas libre.— Respondió la oji-verde.

Takuya suspiró, esa chica sabía exactamente que era imposible pagar esa suma de dinero. En Estados Unidos cinco mil dólares era casi un sueldo mínimo, cinco mil dólares no alcanzaban a ser ni siquiera el dinero de dos meses de mesada, sino que de cuatro o más. Se mordió el labio inferior, cuando la chica dijo que tendría que obedecerle para pagar la deuda había pensado en miles de cosas, pero, no en eso ¿ahora se había vuelto su "burro de carga"?

Izumi suspiró y volteo en dirección al Internado, era la hora de almorzar y debían ir para allá, pero, antes que pudiesen dar un paso cierto chico de cabello negro-azabache y ojos azules apareció en escena— ¡Cariño!— Exclamó la rubia y se lanzó a sus brazos para depositar un rápido beso en sus labios en señal de saludo.

Takuya hizo una mueca ante esto, nunca había visto un beso entre ambos y la verdad es que era...incómodo.

—Hola Izumi.— El oji-azul saludó a la chica tomándola por la cintura y observó a sus acompañantes, Sora, Mimi y ¿Takuya? Alzó una ceja ¿él chico estaba cargando el bolso lila de la chica?— ¿Takuya?

—Hola.— Saludó el chico.

Kouji observó a la rubia—¿Qué hace Takuya portando tu bolso?

Izumi hizo una mueca— Está pagando por eso que te comenté.

—¿Pagando?— Cuestionó Kouji— Pensé que te pagaría con dinero.

—Eso mismo pensé.— Izumi suspiró y se alejó levemente del chico cruzandose de brazos— Lo que sucede es que ¡este!— Señaló al moreno— No tiene los cinco mil dólares para pagarme, ya que, según él es mucho dinero.

Takuya hizo una mueca— Primero que nada, "este"— Se señaló a si mismo— Tiene nombre y apellido, me llamo Takuya Tachikawa.— Habló— Y segundo, no tengo dinero porque verdaderamente lo que me pides es una locura.— Dirigió la mirada a su amigo— Izumi me está pidiendo cinco mil dólares ¡eso es casi un sueldo mínimo en Estados Unidos!—Suspiró—Y a mi no me dan esa cantidad de mesada al mes, no tengo ahorros.— Ya que, lo había utilizado en todo en el verano yendo a fiestas y partidos fútbol— Y además, Kouji ¿no crees que es muy exagerado ese precio?

Kouji hizo una mueca, aunque no quisiera decirlo en voz alta, Takuya tenía razón en varios puntos razón, sobre todo en la pregunta que le había hecho. Era mucho dinero por una simple ropa.

—Para ti no será exagerado, pero, ya te he dicho que eso vale una ropa de diseñador decente.— Respondió la rubia.

—Bueno, podrías comenzar a buscar un precio decente para ropa ¿no?— Preguntó Takuya provocando que Izumi frunciera el ceño.

Sora observó atentamente la escena, evidentemente Takuya lograba hacer arder en ira rápidamente a la rubia, ya veía que en cualquier momento se le lanzaba al rostro para arañarlo. Suspiró, debía intervenir— En resumen, Kouji, por todo lo que acabaste de escuchar, creo que entenderás que Takuya de alguna forma debe pagarle a mi amiga será haciéndole algunos favores.

—Por eso mi hermano lleva su bolso.— Finalizó Mimi.

—Es buena idea que te devuelva de alguna forma eso.— Comentó Kouji— Pero ¿que te lleve el bolso?— Preguntó— ¿No crees que quizás es un poco infantil?

Izumi hizo una mueca— Bueno, es uno de muchos favores.— Contestó— Mi bolso pesaba mucho y pues...—Se detuvo, ya que, una idea bastante...interesante...vino a su cabeza— Supongo que tu mochila igual debe pesar ¿no?— Le preguntó a Kouji.

El Minamoto alzó una ceja ante la pregunta, pero, antes de que pudiera responder la chica le sacó la mochila de la espalda.

—Takuya puede llevarla también.— Dijo Izumi.

—Espera...—Habló Takuya— ¿Qué?

Izumi sonrió— Lo que escuchaste, llévale la mochila a mi novio.

—¡Oye! Eso no es parte del trato.— Habló Takuya.

—Bueno, pues, debes cumplir mis órdenes ¿no?— Comentó la chica posando la mochila del Minamoto en uno de los hombros del moreno— Tu mismo dijiste que serían cincuenta favores por los cinco mil dólares, este es uno de ellos, lleva la mochila de mi novio.

Takuya suspiró y rodó los ojos, no solo debería llevarle el bolso a la rubia y su mochila, sino también debería llevar la mochila del Minamoto ¡No era justo! Suspiró y volteo hacia su amigo pidiendo un poco de misericordia.

Kouji simplemente sonrió de lado, bueno, ver a su amigo de esa forma era divertido, debía admitirlo, de alguna forma debía devolverle las bromas que le hacia desde primero de primaria ¿no?—Muy buena idea, Izumi.

La rubia sonrió, mientras que Takuya bajaba la mirada rendido y decepcionado ¡Se vengaría de su mejor amigo algún día! Alzó la mirada y suspiró. Al menos llevaba dos favores de cincuenta, cada vez irían quedando menos y se salvaría de pagar esos cinco mil dólares.

—¿Te encontraste con Mimi?— Preguntó Taichi sorprendido.

—Si.— Contestó Yamato.

—¿Y como fue?— Preguntó el Yagami.

—Terrible.— Admitió el rubio.

Taichi hizo una mueca.

—Por un lado tenía muchas ganas de abrazarla, besarla, pero, gran parte de mi quería reclamarle por haberse ido sin decirme algo, por irse sin decirme algo.— Habló Yamato con pesar en la voz.

—¿Y que parte ganó?— Preguntó el castaño.

—La segunda.—Respondió el rubio—Nunca había sido tan frío, distante y bruto con ella, le comencé a reprochar porque verdaderamente eso quería hacer. Se fue sin decirme un adiós, cuando se suponía que éramos novios.

Taichi suspiró, no era necesario que su amigo le diera tantas explicaciones, ya que, él había sido testigo de la forma tan destrozada que había quedado luego de la idea de la chica— Entiendo, tu la querías mucho ¿no?

Yamato suspiró— No solo la quería.— Apretó su puño— Yo la amaba.— Nuevamente suspiró— Pero, ella me dejó, sin explicación.— Se mordió el labio inferior— Me había prometido que no dejaría, pero, hizo lo mismo que mis padres, no cumplir si promesa y se fue sin si quiera decir adiós.

Sin duda, verla significaba cosas positivas y negativas para él, pero, verdaderamente no sabía que hacer, que decir o como actuar.

—¿Y que planeas hacer?— Preguntó Taichi— ¿Ignorarla? ¿Tratarla mal? ¿o darle una oportunidad?

—No sé.— Admitió Yamato—La verdad es que todavía no sé como actuar ante ella.— Suspiró— Lo que verdaderamente quiero antes de todo es una explicación de su parte, quiero saber porque de un momento a otro se fue, porque de un momento a otro me dejó de hablar, porque de un momento a otro se olvidó de mi.

El rubio entrelazó sus brazos tras su nuca y observó un punto fijo en el techo, se sentía perdido, se sentía mal, verdaderamente mal.

Taichi se mordió su labio inferior, la verdad es que hace mucho tiempo veía a su amigo de esa forma, estaba triste, dolido y enfadado por esa situación. No lo culpaba, pero...—Estoy seguro que tiene una explicación, Mimi siempre ha sido fanática de las redes sociales y de un momento a otro desapareció, de seguro algo debió haberle ocurrido.

—Siempre pensé eso.— Habló el rubio— Pero, de un momento a otro desapareció del mapa, pero, pues, ahora volvió y quiero que me de una explicación.— Habló Yamato— Porque verdaderamente me dejó...—Suspiró— Sin entender.

Taichi suspiró y observó a su amigo verdaderamente se veía mal, lo entendía— ¿E? Yamato.— Lo llamó.

—¿Si?— Preguntó el rubio.

—Se que estás mal por este tema.— Habló el Yagami— Pero, necesito hablar con tema muy importante contigo.

Yamato hizo una mueca— ¿Qué tema quieres hablar conmigo?

—Quiero que hablemos sobre...—Se ruborizó levemente— La intimidad de nuestros hermanos.

Yamato dirigió su mirada a su amigo ¿Qué rayos había dicho?— ¿Qué?

Taichi suspiró— Es que, ayer vi salir a Takeru del departamento de mi hermana y pues...—Hizo una mueca— Estaban solos, ya que, la compañera del departamento de Hikari todavía no volvía.

—¿No me digas que estás insinuando que ambos hicieron algo?— Preguntó el rubio.

—Pues...no.

Yamato alzó una ceja.

—Bueno, si.— Contestó Taichi.

Yamato rodó los ojos— ¿Y que tiene de malo?

—¿Cómo "qué tiene de malo"?— Preguntó Taichi alarmado— Takeru e Hikari no deben hacer esas cosas.

—¿Por qué no?

—Porque son pequeños.— Contestó Taichi— Y no deben adelantarse.

Yamato nuevamente rodó los ojos— No son tan pequeños, tu hacías esas cosas desde los catorce o quince años. Además, están en la edad.

—En la edad de las hormonas y metidas de pata.— Habló Taichi— Yo no quiero que cometan algún error.

—¡Vamos, Taichi! Sora y tú han comprado ya dos test de embarazo.— Comentó Yamato— No creo que seas el más apropiado para hablar de eso.

—¡Cállate Ishida! Este tema es serio.— Hablo el Yagami ofendido— ¡Son nuestros hermanos pequeños! ¡Todavía son unos niños! Tú y yo debemos hablar de esto.

—¿No deberías hablar con ellos mejor para que se cuiden?

Taichi negó con la cabeza— No, este tema debemos hablarlo los dos, porque, yo no quiero que se cuiden.— Habló— Lo que quiero es que les enseñemos a abstenerse.

—¿Qué?

—Lo que dije, quiero que les enseñemos a abstenerse.— Respondió el castaño— No quiero que tu mano pase ni una mano demás por el cuerpo de mi pequeña hermana, ella todavía es una niña ingenua, no quiero que se pase la raya.

—Pero, Taichi ¿hablarles de abstinencia?— Preguntó Yamato— Nosotros no somos quienes para hablarles de eso.

Taichi suspiró— No importa eso, lo importante es que evitemos que den un paso demás, todavía son unos pequeños.

Yamato hizo una mueca, verdaderamente Taichi actuaba como un "adulto responsable" cuando trataba de su hermana, Hikari, a pesar de tener una vida desordenada -como él- Suspiró y rodó los ojos, sabía que su amigo seguiría insistiendo con ese tema, siempre que trataba de ellos insistía hasta que él le daba la respuesta que él quería escuchar. Suspiró— Está bien, hablaré con Takeru.— Pero, exactamente no de la abstinencia, sino de una forma de cuidarse, ya que, no quería ser tío tan pronto.

—Muy bien.

Yamato suspiró, tenía muchas cosas que pensar y pues, ahora tenía que pensar en Takeru y su in...esa cosa. Nuevamente suspiró. Eso le traía recuerdos.

Alerta: Escena subida de tono de Mimato

~Tres años atrás~

Yamato observó a su costado, en ese lugar se encontraba Mimi durmiendo plácidamente. La observó detenidamente y recordó que...

Habían pasado la noche juntos.

¡Wow! Que bien se sentía recordarlo. La chica dormía con una sonrisa, plácidamente, se veía tan bella durmiendo a su lado, verdaderamente era una princesa. Rosó sus labios con los de ella y esta se removió entre sueños.

Mimi abrió los ojos un tanto desorientada— ¿Yamato?— Lo llamó.

—Aquí estoy, princesa.— Le respondió.

Mimi se mordió el labio inferior y observó a todos lados, verdaderamente había ocurrido verdaderamente había sucedido, había estado con el amor de su vida.

Ambos unieron sus labios en un dulce beso, que con el paso de los segundos se hizo más intenso, Mimi se subió sobre Yamato mientras este la agarraba de la cintura y ella acarició su rostro.

—Fue la mejor noche de mi vida.— Le susurró cuando se separaron unos centímetros, a pesar de que habían estado en un lugar pequeño, a pesar de que se había dado de un momento a otro, a pesar de todo, había sido la mejor noche de su vida.

Yamato sonrió— Y aún no termina.— Comentó, había sido una sensación increíble acariciar su cuerpo que quería hacerlo otra vez, Mimi sonrió al sentir como las manos del chico subían de sus piernas a su abdomen y luego a sus pechos, sus dedos comenzaron a masajear sus pezones y ella suspiró disfrutando cada toque, cada caricia. Yamato observó admirado la hermosura de la castaña, era una diosa del olimpo, sexy y dulce a la vez. Esta vez no fueron sus dedos sino sus manos completas que se apoderaron de todos sus pechos apretándolos y amasándolos, en un minuto los mordió.

Mimi gimió, esas caricias eran excelente, besó sus labios y luego se sentó levemente sobre el chico y su miembro rosó su flor, Mimi bajó la mirada hacia ellos curiosa, se había sentido tan bien sentirlo dentro de ella

¿Qué sucedía si?

Su mano recorrió el abdomen tonificado del rubio y bajó hasta el muslo derecho del chico, lo acarició con las puntas de sus manos provocando que Yamato sonriera, luego rosó la punta de su miembro. La mirada inocente volvió hacia el rubio, tenía muchas ganas de sentirlo otra vez en ella, así que, alzó levemente las caderas y Yamato entendió lo que la chica quería hacer. Mimi se alzó, se acomodó y el miembro del chico entró nuevamente en ella de una forma diferente, ahora era ella quién lo aceptaba, ya no dolía del todo, al contrario, se sentía lo mejor del mundo, movió de arriba para abajo las caderas para que lo que estaba sucediendo fuera más rítmicamente, mientras Yamato con sus manos apretaba con todas sus fuerzas los pechos de la chica, ingresar en ella estaba siendo diferente a lo que había ocurrido anteriormente, ahora ella estaba tomando el control.

Mimi bajó su rostro y besó al rubio mordiendo su labio inferior.

Yamato se sentó y apretó la cadera de la chica contra él para que la penetración fuera completa, Mimi clavó sus uñas en su espalda—Eres perfecta.— Le habló el chico contra sus labios.

Mimi sonrió— G-gracias.— Respondió con la respiración agitada. Yamato tomó su cintura y giró sobre ella, aún estaban unidos, eso era lo mejor, la chica gemía y eso le encantaba. Rosó sus labios sobre los de la chica y luego mordió su cuello, era irresistible sin duda.

Todo estaba siendo perfecto, para Mimi sobre todo, estaba teniendo su segundo vez con el chico que tanto quería de una forma tan diferente a la primera.

¡Pero!

—¡Oh no! ¿Qué ocurrió en este lugar?— Un grito llamó su atención seguido de sonidos de unas especies de ruedas.

—¡Este chico está inconsciente y su corazón está dejando de latir!— Otro grito llamó su atención.

Ambos voltearon a la puerta y Mimi tuvo la intención de levantarse, pero, Yamato la agarró antes de esto, aún estaban unidos, Yamato besó sus labios suavemente mientras algunos gritos se escuchaban afuera y luego de un segundo su miembro salió de la flor de la chica.

Mimi hizo una mueca— ¿Qué son esos gritos?— Preguntó sorprendida y tomó la camisa del chico para tapar su torso desnudo.

—No sé.— Contestó Yamato.

Y de un momento a otro el sonido de una ambulancia comenzó a sonar.

Ambos se miraron sorprendidos.

—¡Oh no!— Exclamó la castaña y se levantó del lugar donde estaban, Yamato hizo lo mismo— ¿Qué habrá ocurrido?

Yamato hizo una mueca— No sé, pero, evidentemente no es bueno.— Habló el chico— Vístete y busquemos la forma de salir de aquí.

Mimi asintió y buscó en el lugar su vestido.

Oigan, que Koichi y Juri se lleven bien no significa que serán pareja necesariamente, aunque, podría ser, pero, no estoy segura.

Pregunta del día: Me gustaría que le asignaran una canción a las parejas Jiji es que últimamente he estado asignándole canciones y me gustaría saber ustedes cual les asignarían a Mimato, Taiora, Takari, Takumi, Ryuki (RikaxRyo) y Kouji con Damar Jejej y si quieren asignarle a otra pareja de esta historia diganme nomas jajaj

Samy: Pronto sabremos que sucedió con su bebé y con ello, me alegra saber que lo encuentras interesante, si tristemente dio un vuelvo, Yamato está herido, pero, ya veremos como esto se soluciona. Sobre Takeru e Hikari, pues, ambos son amigos con ventaja si es que se puede decir así, Hikari no tiene permiso para tener novio hasta los diecisiete, entonces, Takeru por eso no se lo ha pedido jiji Ya veremos que sucede con ellos. Tranqui Miyako no se meterá en el Takari, ella será simplemente la que le informará en parte a Juri lo que sucedió hace tres años. Ojalá sigas leyendo, comentando y te envió un gran abrazo a la distancia.

Osiita: Me alegra que se tu primer Review en esta historia, ojalá sigas comentando jsjsjsj Muchas gracias por responder la pregunta jiji entiendo que quieras que estén juntos yo igual amo esa pareja, ya veremos como actúan ambos en este nuevo presente y como afrentan sus problemas jijiji Te diste a entender super bien y pues, lo tomaré en cuenta, ya veremos que ocurrirá. Saludos para ti también, ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un abrazo a la distancia.

mariacredenza02: Si tristemente fue frío, pero, como tu dices en tu comentario Yamato está dolido y confundido, no sabe que pasó, como pasó, solo sabe que se fue, pero, ya veremos como Mimi se arma de valor para contarle y para reconquistarlo antes. El padre de Mimi simplemente quería deshacerse de su nieto, pero, ya veremos que sucedió en verdad. Taichi sin duda está para detective jijiji Gran parte de su cambio se dio por lo que sucedió esa vez, pero, ya veremos que seguirá ocurriendo Jajaj La madre de Rika casi los tiene en una cárcel, pero, ya veremos como les irá a Kouji y Rika. Takuya será un esclavo excelente jajaj quiero hacerlo sufrir con escenas cómicas y de esa forma veremos como evoluciona su relación con Izumi Jajaj entiendo que te sientas entre la espada y la pared, ya que, ni yo sé que hacer con esas parejas jajaj ya veremos que ocurrirá. Espero que sigas leyendo, comentando, que te encuentres bien y te mando un gran abrazo a la distancia.