Capítulo II:

El calentamiento del día había empezado, los pasos de los chicos de Peach Creek, el trote y la atenta vigilancia de las "Witches" en sus "Protegidos" era el comienzo de un nuevo día para ellos. El Sol comenzaba a salir y las aguas del Mar del Norte eran bañadas por sus rayos dorados, reflejándose en un espectáculo digno de la Madre Naturaleza. Pronto sería de día, uno más de esa guerra que acababa de empezar y que no tendrían descanso alguno, ahora que las Crueles habían arrasado con incontables ciudades, pueblos y Capitales de varias Naciones de África, reanudando su plan de conquista mundial.

Los Eds eran los que estaban al frente, esta vez, mientras que Kevin y los demás permanecían atrás, siguiéndoles el paso y sin detenerse. El tiempo fue pasando y cuando culminaron con el ejercicio de calentamiento, pasando al de cardio-respiratorio, Minna se acercó para darles un comunicado sumamente importante a los presentes.

- Antes de comenzar con el siguiente ejercicio, quiero anunciarles esta noticia de suma importancia. Más bien dos.- Dijo y luego se corrigió así misma, aclarándose la garganta y dejando que el ambiente quedara sumido en un profundo silencio, en donde solo el viento fresco del Mar del Norte se hacía sentir, movía sus cabellos y el polvo asentado en las playas junto con la arena hasta conformar una serie de pequeños "remolinos" inofensivos que desaparecían en cuestión de segundos.- Esta madrugada hemos logrado destruir la fuente de interferencias y también logramos dar con una de las "Colmenas" que las Crueles tenían bajo su control para lanzar ofensivas contra los países de Europa.- Relató y aquello fue una gran novedad con respecto a la cuestión del frente.

- ¡Genial!.- Festejó Kevin.-

- Sin embargo.- Interrumpió la Comandante pelirroja y el chico se quedó con las palabras en la boca. La emoción había durado muy poco.- La destrucción de la "Primer Colmena" solo ha sido una victoria pasajera.

- ¿Qué quiere decir?.- Preguntó el pelirrojo con asombro y ella cerró los ojos, siendo Mio la que se acercó para responderle.

- Lo que Minna está explicando, Kevin, es que tenemos otras seis "Colmenas" por destruir. Eran siete, pero descontando a la que se destruyó esta madrugada, tenemos este número actual.- Le contó la Mayor de Fuso, mientras que el joven no podía dar crédito a lo que estaba oyendo.

- ¿Y en dónde están esas otras, Señorita Sakamoto?.- Esta vez fue Nazz quien lanzó su interrogante, hallándose de pie y elongando su cuerpo.

- Las otras seis están posicionadas en varios sitios del Mundo, la "Segunda Colmena" está ubicada en África y hasta hace poco nos hemos enterado de que Praga, Varsovia, Viena y Budapest, así como también Sudáfrica hasta casi llegar al África del Norte, han sido arrasadas hasta sus cimientos por una nueva ofensiva enemiga.- Agregó Mio y esta vez su tono de voz era mucho más serio al respecto y también gélido.

Ellos notaron su semblante y esa expresión que tanto impresionaba al verla así. Como una Veterana de la guerra contra los "Neuroi" en el Pasado, la joven nipona sentía furia ante aquellas personas que habían tenido la osadía de dañar a otros que no les habían hecho nada. Ahora estaba claro de que esa lucha no iba a ser como la otra, sino de que la iba superando, con el pasar del tiempo, en algo mucho más peligroso y de que no tendría una solución por la vía diplomática. Las Crueles no conocían la piedad ni tampoco la paz, estaban dispuestas a todo, pondrían todas las cartas sobre la mesa y con ello sacarían los mayores beneficios para sí mismas.

- ¿Mayor Sakamoto?.- Preguntó Kevin y ella salió de su frialdad.

- Sí, disculpen.- Dijo e hizo una pequeña reverencia.

- No, no tiene por qué hacerlo, Señorita Sakamoto, no hace falta.- Le respaldó Nazz a ella.

- Lo sé, pero...todo esto...es inaceptable. Juro que no pienso descansar hasta ver a las Crueles sentadas en el banquillo de los acusados y que paguen por todo el daño que han causado.- Lanzó un juramento y de ahí sintió la mano de Minna sobre sus hombros.

- Todo el Mundo está esperando lo mismo que tú, Mio, sin embargo, mientras que ellas sigan en pie y atacando a las Naciones del Planeta, entonces tendremos que responder con lo que tenemos.- Dijo con la voz seria pero tranquila.- Ahora, escuchen, hay otra cosa más que necesitan saber al respecto y es sobre el combate que hemos tenido esta madrugada.- Pidió su atención y los presentes se pusieron de pie.- Su amigo, Doble D, ha sido de una gran ayuda y nos proporcionó una excelente cobertura a la hora de destruir la "Primer Colmena".- Relató y eso dejó sin palabras a los chicos, quienes se voltearon hacia el joven de la gorra negra.

- Oh no, no, no, solo fue algo pequeño, nada más que eso. No podría aceptar parte del crédito.- Sostuvo el chico.

- Tonterías, ¿"algo pequeño" estás diciendo?. Doble D, sea de cualquier tamaño, esa ayuda que nos has proporcionado ha sido más que suficiente para destruir esa posición enemiga y saber en dónde están las otras. Gracias a ti y a tus investigaciones, nos has puesto en una escala mucho más avanzada que las Crueles y si seguimos así, podremos detener sus planes.- Le felicitó Minna y eso era algo que no se esperaba, llevando a que bajara la cabeza.

- Oye.- Le llamó Eddy y éste alzó la vista.- Lo que hiciste, no es algo para que te sientas humillado: Diste un gran acto de valentía, amigo. Debes sentirte orgulloso de ello.- Dijo el chico de remera amarilla.

- Sí, es verdad, Doble D, eso fue increíble, yo también saber cómo es la "Magia".- Añadió Ed con emoción.

- Mira de que, entre los tres, eres el único que no me cae mal, pero...¡amigo, eso debió ser genial!.- Se unió Kevin a las felicitaciones, por lo que el joven intelectual se sintió renovado en el aspecto moral.

Era la primera vez en la que no terminaba herido, humillado o atado a un árbol por las acciones que llevaban a cabo él y sus amigos con las estafas. Algo así no se veía todos los días pero, en ese momento, él pudo ver a los demás y no sentir vergüenza u otras emociones negativas, sino de que estaba recibiendo el respeto que se merecía. Con la cabeza en alto, mirando a los presentes, sabía bien que esto era importante en su vida, ahora tenía que cumplir con el resto del camino, de su papel a la hora de desarrollar un "Suero" para que éste diera el poder necesario y la resistencia a la hora de combatir en el frente contra los "Shadow Neuroi".

- Agradezco, desde lo más profundo de mi corazón, este apoyo que me han dado, amigos.- Se dirigió el intelectual hacia los presentes.- No quisiera hacer una promesa, porque sé de que, en estos momentos, lo que más se necesita son acciones y no palabras, así que no descansaré hasta que los resultados sean aptos para todos ustedes y de que podamos luchar contra ellos.- Habló ante todos ellos, quienes escucharon con atención, mientras que Trudie daba un paso al frente.

- Es verdad y aquí hay algo más importante: Cuando comiencen a desarrollar la "Magia" en su interior, ahí es donde deberán aprender a manejarla correctamente y para ello, hay alguien que conocemos muy bien y de que será una gran ayuda para ustedes.- Señaló la castaña oscura.

- Una pregunta.- Pidió Sarah la palabra y Trudie se la concedió, viendo los primeros resultados en el comportamiento de aquella pelirroja.

- Adelante.- Dijo la Oficial.

- ¿Saben el nombre de esa persona? ¿Vive lejos?.- Preguntó por la curiosidad.

- Se llama Anna Ferrara y ella ha sido Instructora de Mio, Yoshika, Perrine y Lynne en el Pasado. Es una gran mujer y también una de las mejores en este campo, pero también es muy severa y estricta, así que obedezcan sus órdenes y verán de que se ganará su confianza.- Respondió la joven ante esa pregunta y aquello fue un poco incómodo.- Cuando Doble D haya desarrollado un "Suero" para ustedes y lo hayan tomado, además de que se genere la "Magia" en su interior, irán con la Señorita Ferrara para que los entrene y aprendan a dominarlo.- Les contó la Teniente en aquellos momentos.- ¿Alguna pregunta?.-

- ¿Vive por aquí?.- Fue Jimmy quien ejerció el uso de su palabra.

- En Romania, más bien la zona de Venecia, las afueras.- Respondió Francesca.

- Se ve que la conocen muy bien.- Recalcó el albino con curiosidad.

- Exacto, nosotras entrenamos con ella cuando fue la guerra contra los "Neuroi", aunque ahora les toca a ustedes y cuando tengan que usar las escobas como las Brujas.- Resaltó Lynne con simpatía en su voz.

- Awww, siempre quise hacer una cosa así.- Se emocionó el amigo de Sarah, ya que eso le traía muchos recuerdos a los cuentos de hadas que se había traído consigo.

- De acuerdo, ya es tiempo de volver a los ejercicios. Comenzarán con los abdominales y lagartijas, andando.- Ordenó Minna, volviendo a aquella actividad y no se dijo nada más.


Las columnas de humo se elevaban hacia los Cielos, distintos colores entremezclaban a las mismas con el negro, gris y blanco. Hacia abajo podían apreciarse incontables incendios que se habían desatado sobre la Ciudad de Abuya, Capital de Nigeria. La devastación era imposible de describir con palabras: Los edificios y rascacielos ya no estaban de pie, los hogares eran pilas de escombros y cenizas, la gente huía despavorida, mientras que, desde su nave Central, las Crueles estaban al mando de aquella ofensiva.

- Coordinen el fuego sobre esas bases militares al Norte de Abuya.- Ordenó Lee a sus fuerzas y éstas cumplieron con esa palabra.

En un abrir y cerrar de ojos, el fuego se concentró sobre dichas instalaciones, las cuales desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos, solo quedaron ruinas y humo por doquier. Todo lo que significaba infraestructura de defensa eran montones de chatarra en llamas y con ello se podía apreciar el avance de aquellas fuerzas invasoras.

- Mis fuerzas y la "Segunda Colmena" están posicionadas sobre el Desierto del Sahara, además de que tienen una buena posición de tiro para ir hacia Europa del Sur y destruir cualquier rastro de resistencia sobre este continente.- Oyeron a May, quien iba a salir hasta su nave y dirigiría el resto de la operación. Marie y Lee se acercaron hasta ella y le colocaron sus manos sobre los hombros, regalándole una sonrisa de tranquilidad.

- Ve y destruye a esos malditos. Y si las "Witches" vienen a molestarte, ya sabes qué hacer con ellas.- Le dijo la peli azul oscura.

- Je, pueden confiar en mí.- Dijo la rubia y tras despedirse, ésta partió con rumbo al Norte para continuar con las operaciones de guerra.

- Muy bien.- Vio Lee a su hermana irse y con ello se giró hacia Marie.- Coordinemos el fuego, ahora, sobre las Capitales de Liberia, Ghana, Sierra Leona, Malí, Mauritania. Que se produzca toda una oleada masiva de refugiados.- Sostuvo con frialdad y desprecio hacia las vidas que corrían peligro.

Marie la escuchó y contempló la devastación en las calles de Abuya, al igual que en las otras que habían arrasado hasta sus cimientos, se podía apreciar la desesperación de la población civil y el intento de escape hacia zonas más seguras, mientras que los bombardeos continuaban con mayor intensidad. Cruzó sus brazos contra su espalda y de ahí salió hacia el exterior de su nave para ver más de cerca el operativo.


En la plataforma exterior, la peli azul era recibida por las columnas de humo y el olor a incendios que se alzaba desde abajo. Un esbirro se le acercó y le pasó un holograma sobre el avance de las fuerzas "Shadow" hacia el Norte de África, mientras que las otras continuaban destruyendo las Naciones del Este de África, así como también de sus vecinos en el Golfo de Adén y el Mar Rojo.

- May llegará en un par de horas hacia el Norte de África. Solo nos queda esperar a que su victoria resulte efectiva y de ahí avanzaremos hacia el Sur de Europa.- Sostuvo la peli azul oscura, mientras que le traían algo de beber por el calor seco que había allí y ella lo disfrutaba, en especial el "espectáculo" de allí abajo.- Oye, ¿dónde crees que deberíamos hacer nuestra boda con los Eds?.- Pregunto, a través de su comunicador.


En el interior de la "Sala de Mando", Lee contemplaba el mapa holográfico en silencio, la pregunta de su hermana le llegaba hasta sus oídos pero ésta no respondía. Solo se quedaba allí, mirando al mismo y respirando profundamente, inflando su pecho con el aire que entraba por sus fosas nasales y luego se quedaba pensativa un buen rato. Extendió su mano derecha hacia la posición que se venía más adelante, siendo ésta Níger y Chad, las cuales había comenzado a recibir los feroces bombardeos contra ellos. Sin embargo, Lee arrugó el entrecejo, solo ella podía sentir aquel frunce debajo de su cabello que le cubría esa zona y de ahí llevó su mano derecha hasta el mentón, viendo que tenían otras Naciones más por atacar.

- "República Centroafricana, Burundi, Toga, Ghana, Costa de Marfil, desde esa zona hasta el Océano Atlántico vamos a necesitar tener buenos puertos para la flota".- Pensó hasta que la voz de Marie la sacó de la misma.

- "Lee, ¿me recibes?".- Volvió a llamarla ésta.

- Sí, te escucho, Marie, ¿qué pasa?. Estoy ocupada.- Respondió con seriedad en su voz.


- Oye, no seas tan fría, solo te preguntaba en dónde te gustaría que celebremos nuestra boda con los Eds.- Le lanzó aquella interrogante, mientras que el viento movía sus cabellos azul oscuro.


Ante esa interrogante, la pelirroja se quedó, nuevamente, callada y de ahí pasó a rascarse la barbilla, mientras que su mano derecha se movía desde el Sur hasta llegar a la región comprendida desde Marruecos hasta Egipto.

- Es una propuesta sumamente interesante pero, por ahora, no tengo un sitio ideal para nuestra boda.- Recalcó.- Ahora, concéntrate en el trabajo y luego de que hayamos conquistado Europa pasaremos a ese punto.- Prometió con seriedad, mientras que la otra debía obedecer eso al pie de la letra.


Los entrenamientos habían concluido, por ese día y los chicos se preparaban para descansar y realizar otras actividades. Doble D, tras darse una buena ducha y así quitarse el sudor que tenía consigo, se fue para la habitación que tenían Eila y Sanya. Abrió la puerta y vio que la albina yacía profundamente dormida, por lo que repitió el mismo "procedimiento" y fue hasta su banco de trabajo para continuar con las investigaciones del contenido que tenían los barriles de Rolf.

Bajo la luz de aquella lámpara, el chico tomó una jeringa, su interior rebosaba del mencionado líquido y lanzó un par de gotas sobre la superficie del cristal que estaba debajo de la lupa. Esperó un poco para ver qué clase de reacción habría a continuación. Su vista quedó fija. Nada, miró su reloj, todo seguía como antes, ni una sola respuesta. Se fregó los ojos y comenzó a sentir cansancio, esos ejercicios y la misión de anoche habían sido un "combo" bastante agotador.

Hasta que, de golpe, algo comenzó a llamar su atención.


[Lamento, otra vez, la tardanza, pero he estado ocupado y ahora que estamos en Diciembre y que estoy cerrando otros frentes, se me complicó muchísimo con las actualizaciones. Voy a dejar descansar este fic hasta el fin de semana/Lunes que viene y de ahí a darle con todo.

Bueno, se viene algo muy importante para el capítulo que viene, así que a prepararse.

Mando saludos y agradecimientos para todos ustedes y hasta la próxima, amigos.

Buen inicio de día Miércoles de mi parte.].