Capítulo VIII:

(Continua "Saving Pearl Harbor", OST del "Medal of Honor: Rising Sun")

La Batalla del Norte de África continuaba, en medio de intercambios de disparos entre las tropas de aquellos países y las Fuerzas "Shadow Neuroi" bajo el mando de las Crueles, aquello no parecía tener fin, era un verdadero "bucle" donde los combates persistían, el Infierno mismo estaba sobre esas tierras o tal vez podía ser como la Batalla de Panion, en donde los Ejércitos del Egipto Ptolemaico habían sido derrotados por el Rey Antíoco III El Grande de Siria, debido al poder de sus efectivos, incluyendo los "Argiráspides", los elefantes y los temibles "Catafractos" junto a los Carros Escitas que destruyeron las líneas enemigas.

Desde el "Puente de Mando", las Crueles observaban la destrucción desatada sobre las líneas enemigas: Las barricadas, alambradas y trincheras habían sido destruidas junto a las fortificaciones que no paraban de arder. Cada vez que un grupo de "Shadow" terminaba con su bombardeo, otro escuadrón lo reemplazaba y así sucesivamente hasta reducir las posiciones enemigas a meras montañas de escombros y polvo. May se sentía orgullosa de los Ejércitos que tenía bajo su mando y encima no estaban teniendo bajas, lo cual les daba la delantera de que el combate terminara mucho antes de lo previsto.

- Bueno, bueno, parece ser que ganaremos Egipto después de todo.- Dijo la rubia.

- No pienso dejar de pie esa Nación, la arrasaremos hasta los cimientos y sobre la base de las Pirámides construiremos un colosal monumento para que nos recuerden sobre quiénes son sus Reinas.- Esta vez fue Lee la que habló, mientras que iba abriendo una botella de gaseosa y se preparaban para brindar. Fue llenando las copas hasta casi tocar el borde y de ahí procedió a tomar la suya.- Hermanas, por un Futuro prometedor, por nuestro Imperio y que el legado de nuestro abuelo sea eterno.- Dio su discurso de victoria, ya podían dar por terminado aquello pero, de improvisto, las alarmas comenzaron a saltar sobre el lugar.

- ¿Eh? ¿Y eso?.- Quiso saber Marie y se acercó hasta la pantalla para ver qué era todo ese escándalo.

Tecleó un par de veces hasta dar con el resultado, uno que no se esperaba y que le desagradó en lo absoluto. Su boca casi se le cae al piso cuando vio que una fuerza de combate, una que conocían muy bien y que había sido la responsable de la pérdida de la anterior guerra en el Pasado, se dirigía hacia el campo de batalla. Cuando May y Lee miraron hacia la misma, casi se ahogaban con el contenido de la gaseosa. La pelirroja escupió contra el piso y corrió para ver qué estaba ocurriendo y si se trataba de una broma. Desgraciadamente, para ellas, no lo era.

- ¡Son las "Witches", malditas ladrones de novios, ya lo verán!.- Bramó May, mientras que corría hacia donde estaban sus efectivos.- ¡No dejen que ataquen nuestras líneas, acaben con ellas, ahora!.- Ordenó la rubia.

- ¿Cómo puede ser posible que hayan venido?...Esperen.- Pidió Marie, ya que algo no estaba del todo bien en la pantalla. Aclaró un poco la misma y notó que aquellas Guerreras no venían solas, sino que estaban acompañadas por un grupo de chicos que ellas conocían. La peli azul oscura no puedo lanzar un grito de furia al ver a su "amado" Doble D volar con las Witches.- ¡¿Qué?! ¡Ese es mi hombre, malditas, no de ustedes!.

- ¡¿Y ahora qué...?!.- Lee tampoco pudo decir nada más. Se quedó callada y en su posición cuando observó que Eddy reía por un chiste que aquella italiana de cabello negro le había contado.- Mi novio...mi prometido...mi futuro marido...él...él...él...- Apretó los puños con fuerza, no había que hacer un berrinche infantil, sino concentrarse en su tarea.-

- ¡NO, MI ED, NO!.- La voz de May fue la que se quebró y comenzó a llorar cuando aquel chico de chaqueta verde se hallaba con cierta rubia de Karsland. Quería tirar abajo cualquier cosa para saciar su ira pero Lee se le acercó y le tomó de los hombros, obligándola a verle de frente, a los ojos.

- Este no es el momento para tonterías y caprichos, May.- Advirtió con seriedad.

- Pero...Pero...Ed...yo...- Balbuceaba por el constante dolor emocional que sentía, por lo que la pelirroja le dio una bofetada en el rostro, dejando pasmada a la rubia y a la peli azul oscura.

- Lee...tú...- Tartamudeó Marie, mientras que la otra se sobaba la mejilla derecha. El calor del impacto, la mano de su hermana persistía pero ella no se mostraba furiosa ni tampoco quería llorar. Era una Cruel, no podía demostrar tener esa clase de "sentimientos de niña débil", su misión era continuar con el legado de su abuelo a cualquier precio, así que dirigió unas palabras a May, la cual estaba muda y helada.

- No quiero que muestres, de nuevo y frente a nuestras tropas, lágrimas de cobarde. ¿Qué eres? ¿Una Cruel o una gallina?.- Le advirtió con frialdad y ella no supo qué decir.- ¡Responde!.- Exclamó y la pobre rubia sentía que sus palabras estaban atoradas en su garganta.

- Yo...Yo...Yo...- Volvía a tartamudear la chica y se le sumaba un feroz temblor en su cuerpo.

- ¡¿Qué eres?!.- Volvió a preguntarle. Parecía un Sargento ante los nuevos reclutas a los cuales buscaba moldear a su imagen y semejanza.- ¡¿Eh?! ¡¿Una Cruel o una gallina?! ¡Responde, Lee! ¡Responde!.- Elevó el tono de su voz y parecía estar escupiéndole pequeñas gotículas de saliva a su rostro.

- Yo...¡Yo soy una Cruel!.- Dijo, entre lágrimas y con la moral levantada. Acto seguido, ella la soltó.

- Bien, muy bien.- Respondió y felicitó.- Muy bien, así me gusta.- Movió la cabeza en señal positiva.- Ahora, vamos a concentrarnos en terminar esta batalla, ya nos ocuparemos de nuestros novios y descuida, nos casaremos con ellos. Tienes mi palabra.- Juró y pudo notar una sonrisa en el rostro de ambas chicas.- ¡Ese es el espíritu!.- Exclamó.- Y ahora, ¡vamos, a la carga, aplastemos a esas inútiles de las "Witches"!.- Ordenó con el puño levantado en el aire y dando un grito de batalla.- ¡POR LA FAMILIA CRUEL!.

- ¡POR NUESTRA FAMILIA! ¡POR EL ABUELO!.- Lanzaron Marie y May un juramento, mientras que partían hacia el "Puente de Mando".

Lee estaba parada en el Centro, la vista suya se enfocaba sobre el campo de batalla, así que comenzó a mandar a sus fuerzas hacia el frente.

- Yo iré con las mías y hundiremos a los barcos antes de que lleguen esas pesadas.- Dijo May, mientras que salía afuera.

- May.- Le llamó la pelirroja y se volteó.- Ten cuidado, ¿sí?. Nada de hacerse la heroína.- Pidió y ella asintió con la cabeza.

- Quédate tranquila, volveré sana y salva.- Prometió y salió hacia el exterior, subiéndose a una nave piloteada por un grupo de sus "Shadow", enfilando rumbo hacia el Norte.

Pocos minutos después de que las Crueles retomaran la situación, sus Ejércitos ya estaban sobre los del Norte de África, quienes resistían como podían al feroz embate que, ahora, estaba destruyendo los edificios de suma importancia como el Cuartel General y la Estación de Radio, los cuales ardían a más no poder y los heridos no paraban de aumentar, así que debieron ser llevados a los barcos.

El General Ahmed notó como una enorme "sombra" cubría el Sol, el aire se volvió gélido y con ello notó a una enorme avanzadilla de naves "Shadow". Uno de sus Soldados observó, con unos binoculares, a la que parecía estar al mando, siendo ésta una chica rubia y de pecas, la cual estaba parada en medio de una plataforma y dando las órdenes.

- Hundan la flota, ahora.- Ordenó May y los cañones "Shadow" se prepararon para disparar. El color iba pasando de un lila a un violeta intenso, la concentración de energía iba a ser devastadora y lo fue cuando se lanzaron unos misteriosos "rayos", los cuales cayeron en picada, igual que las bombas desde un avión y que impactaron contra los primeros navíos que estallaron por los aires junto al Puerto y los mueles.

- ¡Alá Bendito!.- Gritó Ahmed, quien se cubrió los ojos por el polvo que se levantó debido a las explosiones.- ¡¿Esos barcos...estaban...?!.- Un nudo en su garganta se formó y estuvo a punto de caer de rodillas hasta que uno de los Capitanes fue hasta él.

- ¡General, descuide, esos estaban vacíos, no había nadie allí! ¡Han picado en el anzuelo pero solo fue momentáneo, ahora se nos viene la parte más complicada!.- Le informó un hombre joven y proveniente de Libia.

Desde su plataforma, May observó los primeros barcos que ardían y muchos ya se estaban hundiendo. Los muelles eran una auténtica bola de fuego junto a los edificios que formaban parte del mismo. Fue entonces que volvió a dirigirse hacia los suyos.

- Destruyan los buques de menor tamaño y luego empiecen con los grandes, donde están llevándose a los refugiados y heridos.- Ordenó, mientras que tomaba asiento en su Trono Imperial, sin embargo, algo comenzó a sonar sobre los radares que atrajeron su atención.- ¿Eh? ¿Qué pasa ahora?.- Quiso saber y al acercarse hasta notó un misterioso "Punto Solitario".- No es nada, solo un pájaro o una bandada...- Qué equivocada que estaba, ya que, en esos momentos, los instrumentos se volvieron locos y las alarmas habían comenzado a saltar sin parar.- No puede ser...son...

En aquel instante, una explosión sacudió su nave, llevando a que ella se cayera al piso y casi rodara hasta el vacío, aferrándose a su Trono y de ahí se reincorporaba. Mientras que hacía aquella acción, notó como una enorme columna de humo que variaba del gris al negro se elevaba desde una de sus naves de batalla, la cual había sido alcanzada y se precipitaba hacia el Mar Mediterráneo. No había señales de la tripulación, nadie respondía a las llamadas de sus Camaradas. Simultáneamente, otro estallido, una segunda nave voló en cientos de fragmentos y se desplomaba, igual que un cometa, hacia la tierra.

- ¡Son ellas, las "Witches"!.- Alertó.- ¡Maniobras de evasión y respondan al fuego, ahora!.- Ordenó ella a viva voz, justo cuando una tercera nave recibía la misma respuesta y ésta fue muy cercana a su posición.- ¡No dejen que interfieran en la conquista!.

Encendiendo los motores, la flota de May se puso en marcha, preparando sus armas para atacar a los enemigos, tras haber perdido a tres de las suyas y justo en ese momento oía un zumbido, tan parecido a los de avión de combate y un destello blanco que la impresionó.

- "Lamentamos mucho "arruinar" su fiesta, Crueles, pero esto se terminó".- Oyó, tanto la rubia como sus dos hermanas, la voz de cierta castaña oscura.

- ¡Barkhorn!.- Exclamaron las tres al reconocerla y se veía a la chica junto a las demás, sosteniendo la radio militar que llevaba Sanya.

("We´re hit!", OST de "Medal of Honor: Rising Sun")

- ¡Chicos, ya hemos llegado, estén listos!.- Pidió Yoshika, mientras que le sacaba el seguro a su arma, una "Schnellfeur M712" y disparaba contra una de las naves, acompañada por Lynne, Mio y Perrine.- ¡Recuerden, no se separen!.- Volvió a repetir la misma orden.

- ¡Vuelen en formación, tenemos que quitarles presión a los Ejércitos de allí abajo!.- Ordenó la Mayor Sakamoto, mientras que desenvainaba su katana y trazaba un potente arco que partió al medio a una de las naves enemigas, atravesando el "Núcleo", llevando a que estallara y regara con sus diminutos fragmentos el suelo hasta desaparecer. Todo eso había sido visto por Kevin y Nazz, los cuales no pudieron decir ni una sola palabra ese momento tan importante de sus vidas.- Ustedes, vengan conmigo.- Pidió y le obedecieron.

El ataque había empezado, uno que nunca se había visto sobre los Cielos de África. Parecía ser sacado de alguna película de acción. Las primeras en lanzarse contra las líneas enemigas que comandaba May fueron Yoshika, Lynne, Charlotte, Perrine, Eila y Sanya. Aquel grupo de chicas había logrado atravesar la feroz resistencia que éstos ejercían contra ellas, mientras que los chicos de Peach Creek permanecían a un lado.

- ¡Este es su "Bautismo de Fuego", no se queden atrás!.- Les llamó la peli naranja de Liberion.- ¡Dennos una mano!.

Eso les sacó de sus pensamientos.

- Oh sí, sí, cierto, ¡al ataque, amigos!.- Pidió Ed, mientras que volaba y cargaba contra un "Shadow Neuroi" que estaba distraído.-

- ¡Ed, vuelve aquí, es peligroso!.- Gritó Eddy y fue tras él, seguido por Doble D, Sarah y Jimmy.- ¡Ed!.- Volvió a llamarlo su amigo de baja estatura pero el chico ya había partido al frente de batalla.

Abriéndose camino entre los "Shadow Neuroi" y las "Witches", Eddy y los otros tres fueron tras el fan de la Ciencia Ficción. Aquello no podía ser descrito como una mera batalla, sino un cruento enfrentamiento en donde las balas junto a la "Magia" colisionaban" contra los enemigos, pero también estaban las contra-ofensivas que éstos lanzaban. Doble D observó a Eila y Sanya, las cuales peleaban juntas y en un momento dado, una de las naves enemigas disparó un rayo, siendo detenido por un "Escudo" que la peli plateada formó para protegerse tanto a ella como a su amiga. Hubo una explosión seguida por una columna de humo gris, acto seguido, ambas salieron intactas y fue la primera chica del Norte de Europa quien le dirigió una mirada a Doble D, mostrándose preocupado por ella y luego asintió, dándole un "mensaje" de que estaban bien y de que le agradecía por su muestra de empatía.

- ¡DOBLE D!.- Oyó el grito de Kevin y Nazz, llevando a que éste se volteara y viera a una enorme nave enemiga que estaba por atacarlo, sin embargo, el pelirrojo y la rubia volaron en picada contra aquella máquina de guerra.

- ¡Dios, lo va a matar, resiste!.- Pidió la Líder de las Porristas y apuntaron con sus manos hacia donde estaba el enemigo, creando una esfera que se dividió en cientos de "balas" y que fueron lanzadas contra la nave, igual que una lluvia pero que, apenas pudo hacerle un daño muy pequeño. Acto seguido, ésta desapareció.

- ¡¿Qué?! ¡No, ¿qué pasó?!.- Preguntó Kevin.

- Recuerden que esto es apenas un comienzo, tienen la "Magia" pero pronto va a ir acostumbrándose más a ustedes. Descuiden, pueden pelear.- Se acercó Mio, quien había destruido otro "Shadow" con su katana.

- Pero...apenas pudimos llamar su atención.- Apuntó Nazz, sin embargo, la peli negra negó con la cabeza y señaló hacia una brecha que estaba expandiéndose sobre la armadura de la nave.

- ¡¿Nosotros lo hicimos?!.- Quiso saber el pelirrojo y Mio asintió con la cabeza.

- Y ahora deben terminar el trabajo, pero dense prisa, su regeneración es mucho más rápida y si pierden unos segundos, eso nos complicará en poder destruirlos.- Apuntó la Mayor de cabello negro, por lo que los tres volaron en dirección hacia la nave enemiga.

- ¡Doble D, sal de aquí y ayuda a los demás!. Nosotros nos ocuparemos de este infeliz.- Se acercó Kevin y se hizo tronar los nudillos.-

- De acuerdo, pero tengan cuidado, esto es muy serio.- Pidió el chico de la gorra negra, mientras que se alejaba de allí.

Eddy había logrado alcanzar a Ed, quien disparó una serie de "balas mágicas" contra un grupo de naves enemigas, sin embargo, éstas se habían dado la vuelta y comenzaron a dispararles, por lo que debieron emplear una acción evasiva, mientras que, desde abajo, la situación era indescriptible debido a los combates que estaban dando Minna, Trudie y Erica para sacar a los heridos y civiles que quedaran atrapados allí.

Yoshika y el resto de sus amigas estaban dando lo mejor que tenían, causando bajas a los "Shadow" pero cada caído significaba un nuevo "Soldado" para sus filas. La batalla no parecía tener fin y para empeorar las cosas, el grueso de aquellos Ejércitos estaban sobre ellos y ni se podía olvidar a la "Colmena" que avanzaba como un bastión volador hacia su presa.

- Allí está...- Quedó Erica sin palabras que aquella fortificación enemiga iba hacia ellas. Fue entonces que, tomando su arma, trazó un arco ascendente y se posicionó junto a Minna y Trudie, las cuales habían terminado de sacar a las tropas, heridos y civiles atrapados entre los escombros.- ¡Chicas, allí, miren!.- Señaló hacia el Este.

Una inmensa "fortaleza" avanzaba hacia ellas, desde su interior, igual que un tsunami, emergían cientos de naves enemigas, las cuales estaban atacando a todo lo que se moviera y enfilaban con rumbo al Mar Mediterráneo. En medio del fragor de la batalla, Eddy había alcanzado a Ed, tomándole del brazo, justo cuando un rival iba a dispararles pero, cuando todo parecía perdido, el chico cerró los ojos y una descarga de "Magia" impactó contra el "Shadow Neuroi", el cual estalló y cayó envuelto en llamas, desplomándose contra el suelo.

- ¡Wow, a ver a mí!.- Pidió Ed y atacó a dos naves, las cuales tuvieron el mismo destino.- Asombroso.

- ¡Ed!.- Escuchó la voz de Sarah y cuando pensó de que ella le iba a decir algo feo, ésta se acercó y lo abrazó con fuerza.- ¡No vuelvas a hacer una cosa así, casi me da un susto enorme. Pensé que te iba a perder!.- Dijo y él notó la calidez de su hermana, por lo que pasó su mano por los cabellos de la niña para tranquilizarla.

- Jeje, tranquila, no volverá a pasar. Te lo prometo.- Juró, mientras que Jimmy y Eddy lo veían todo. Sin embargo, cuando eso estaba ocurriendo, la sombra de la "Segunda Colmena" se dirigió hacia donde estaban ellos, los "Shadow" emergieron y empezaron con un feroz ataque, por el cual tuvieron que responder y también ceder terreno ante los embates enemigos.

Una a una, las naves caían destruidas por la "Magia" de los chicos de Peach Creek. Doble D había derribado otra, el Cielo estaba repleto de disparos y explosiones junto al humo, por lo que todo aquello quedaría registrado en los libros de Historia.

- ¡Chicos, por aquí!.- Oyeron la voz de Johnny, quien les estaba llamando y agitaba los brazos en el aire.

- ¡Vamos con el pelonchas, de prisa!.- Ordenó Eddy pero cuando se dirigían hasta esa posición, una poderosa descarga enemiga los separó, siendo Jimmy alcanzado y separándose de la mano de Sarah, mientras que iniciaba un feroz descenso contra el suelo.

- ¡JIMMY, VUELA, DE PRISA, RECUPERA TU ALTITUD!.- Pedía la pelirroja con desesperación pero era en vano, el niño se encontraba inconsciente, producto de la explosión y los "Shadow" rodeaban al mismo.- ¡JIMMY! ¡DEBO SALVARLO, DÉJENME!.- Rogaba Sarah pero Ed no la dejaba ir, ya que era peligroso. Eddy contempló aquel cuadro. Maldijo su suerte, maldijo el día en el que ese albino les había hecho esa "jugada" para inculparlos de algo que no habían hecho durante el "Día de la Amistad". Cerró los ojos, una parte suya le decía que era mejor dejarlo caer y que pagara caro por sus acciones...pero también estaban los remordimientos, el peso de su decisión podría debilitar al grupo, por lo que optó por una cosa.

Se hizo a un lado de donde estaban Ed, Sarah y Doble D, miró hacia abajo, respiró y exhaló hondo hasta...de golpe...él voló en picada hasta donde se encontraba aquel albino, abriéndose camino entre los "Shadow Neuroi".

- ¡Chicos!.- Oyeron la voz de Francesca y ella notó que sus rostros estaban pálidos.- ¿Qué? ¿Qué ocurre? ¿Y Eddy?.- Preguntó y fue Doble D quien señaló hacia la posición en la que el joven se encontraba.

La italiana de cabello negro se quedó muda, no podía decir nada al respecto, mientras que veía a aquel chico luchar contra los invasores, derribándolos y usando su poder contra éstos, dejando restos en llamas y un fino "polvo" que desaparecía cuando estaba por tocar el suelo.

Volaba en picada, igual que una bomba que era lanzada desde un avión a gran altura o como las aves de presa cuando divisan al objetivo. Jimmy estaba a escasos metros, por lo que logró agarrarlo del brazo con fuerza y así cargarlo en su espalda.

- ¿Eh...Qué...Qué pasó?.- Preguntó y vio a su "Salvador".- ¿Eddy? ¡Eddy! ¡¿Qué...Qué pasó?!.- Quiso saber el albino.

- Luego te respondo, pero no te pienses que con esto se soluciona lo que hiciste ese día contra nosotros.- Advirtió el chico de baja estatura. Aquellas palabras eran afiladas, demostraba de que aún tenían esa "deuda" pendiente y lo único que podía hacer era esperar a que se solucionara con el tiempo.

Mientras que Eddy llevaba a Jimmy consigo, las "Witches" habían logrado diezmar a gran parte de la flota enemiga, pero May era la que estaba al mando y no parecía ceder, sino de que los exhortaba a seguir combatiendo hasta el final. La Batalla de África había sufrido un giro descomunal. Aquella rubia pensaba que así debió haberse sentido el Rey Antíoco III El Grande Siria cuando sus Ejércitos fueron vencidos en la Batalla de Magnesia, aunque la diferencia era que el Monarca había desechado las ideas del General Aníbal Barca de Cartago y optó por repetir la misma victoria que en Panion pero le salió mal y con respecto a las Crueles, su plan sufrió un gran golpe cuando sus filas empezaron a menguar por la llegada de las "Witches".

- "¡May, a este paso perderemos nuestras fuerzas por completo, debemos retirarnos, ahora!".- Le exhortó Lee, mientras que ella conducía a su flota para cubrir el repliegue.

- ¡No, me niego con ceder, vamos a ganar!.- Juró y ordenó disparar contra los enemigos.

Algo se acercaba al chico de baja estatura, una poderosa luz iba hacia él y lo único que llegó a hacer fue llegar hasta Sarah y Ed para entregarles a Jimmy. Acto seguido, intentó encarar la amenaza pero no pudo formar un "Escudo Mágico" a tiempo, por lo que su cuerpo recibió todo el impacto y ante los ojos de Francesca y Doble D, los cuales llegaron para darle una mano cuando fue demasiado tarde.

El golpe había sido demoledor, su cuerpo no parecía reaccionar y sus ojos se estaban cerrando por el impacto. En un último esfuerzo, intentó alcanzar las manos de la italiana, quien se había lanzado para salvarlo y con los gritos de sus amigos, Eddy se iba "sumergiendo" en un "Mar de Silencio", oscuridad y frío, mientras que el humo salía de su cuerpo y ascendía hacia los Cielos.

- ¡EDDY!.- El grito de Francesca rasgó el aire e inició un rápido descenso para salvarlo.

La joven "Witch" aceleró e intentó por alcanzarlo. Aquello parecía imposible y su "Unidad Striker" estaba casi al límite, podía estallarle en cualquier momento pero era la determinación que ella tenía en salvar a ese chico pero un sonido llevó a que redujera la marcha.

Un golpe, eso era lo que había ocurrido, uno que dio contra la superficie de una nave y que era estaba conducida por Lee, la cual se acercó y comprobó que su "pareja" estaba bien. Su corazón latía, no tenía inconvenientes o daños en su cuerpo, por lo que había llegado justo a tiempo.

- Mi Hombre, ¿te creías que te dejaría solo con esas idiotas?.- Preguntó Lee, mientras que Eddy iba abriendo los ojos, su vista estaba nublada hasta que se arregló y se horrorizó al ver a la que tenía frente suyo.

- ¡AHHHH! ¡Suéltame, nunca seré tu novio, monstruo!.- Bramó el chico, quien sentía una profunda rabia.

- No, no.- Le detuvo la pelirroja.- No digas tonterías, sabes muy bien que eres mío y nadie más. Nos casaremos, lo mismo tus amigos y serán nuestros esposos. Serán Reyes.- Intentó convencerlo pero el joven no pensaba lo mismo.

- Después de todo lo ocurrido, desde el momento en el que nos secuestraron en Peach Creek hasta ahora, lo único que deseaba era verlas tras las rejas por un buen tiempo pero...ahora...¡ahora solo siento una profunda rabia contra ti y tus hermanas por lo que están haciéndole al Mundo!.- Exclamó.- ¡Sí, sonará hipócrita de mi parte pero, antes, preferiría estar con otra persona antes que contigo!.- Finalizó pero cuando estaba por irse, la "Guardia" de Lee le impidió escapar y oyó sus pasos que iban hacia él.

- Traté de ser buena, de que cedieras y te unieras a nuestra causa pero al final me doy de que, en el fondo, eres alguien que necesita un merecido "castigo".- Dijo y lo agarró con fuerza, zarandeando su cuerpo como si fuera una bolsa de papas en el aire y de ahí lo miraba de cerca.- Jejejeje, vas a ser un novio y un marido muy obediente porque no querrás verme enfadada.- Lanzó esa amenaza pero no vio que alguien había entrado, destruyendo el vidrio del "Puente de Mando", destruyendo su "Guardia de Élite" y le dirigía una patada que la hizo rodar contra el suelo.

Se levantó con dificultad tras el impacto sufrido. Su labio estaba sangrando, un par de gotas se resbalaron hasta dar contra el suelo, el sonido del líquido que empapaba la superficie y luego Lee se pasaba el dorso de su brazo contra la herida para limpiarse. Acto seguido, ella encaró a la persona que estaba allí, de pie, protegiendo a Eddy. La reconoció al instante, apretó los dientes, su sangre hervía como el agua dentro de una tetera. Recordó a esa chica que había salvado al que iba a ser su esposo.

- Nunca pensé que una "Witch" como tú fuera tan obstinada como para meterse en mi camino, quitarme al amor de mi vida y encima destruir el legado de mi abuelo. Pero esto no sucederá hoy, sino de que serás tú quien caiga.- Advirtió tras hablarle y ponerse de pie por el golpe sufrido.

- ¡Ja!.- Se río Francesca y le apuntó con el dedo índice.- ¿Llamas a esto "amor"? ¿Secuestrar a una persona? ¿Acosarlo y hacerle la vida imposible?. Me parece a mí de que tú eres la única culpable, junto a tus hermanas, de los crímenes que has cometido, Lee Cruel.- Dijo con seriedad la italiana.

- Ahórrate las palabras, maldita. Tú has cometido un gravísimo error que te costará la vida, no querrás verme enfurecida más de lo que estoy; así que, retírate y deja a Eddy o sufre las consecuencias.- Lanzó su amenaza pero la peli negra no se movió de allí, sino de que tomó posición de batalla, lista para pelear.- De acuerdo, ¡tú lo pediste!.- Finalizó y cargó contra ella, igual que un toro al lanzarse contra el torero que lo provoca.- ¡TOMA ESTO! ¡ESTE GOLPE ES POR MI ABUELO!.- Gritó y el mismo dio contra el estómago de la italiana, quien salió volando hacia atrás, dando contra una mesa con papeles que salieron volando por todas partes, además de quebrarla por la mitad al mueble.

- ¡FRANCESCA!.- Gritó Eddy pero Lee le inmovilizó.

- Ah no, sé un buen novio y quédate aquí.- Dijo la pelirroja, mientras que la peli negra se levantaba y veía cómo aquella oponente quería llevárselo de allí.

- No...¡Esto aún no termina!.- Juró y eso llamó la atención de la oponente, quien se hartó y decidió poner punto final al asunto.

- ¡Agh, eres igual de pesada que un mosquito!.- Bramó pero, esta vez, el golpe le salió: Francesca la superó en fuerza y con un rápido movimiento logró darle una patada en el pecho, sacándole el aire, dejándola inmovilizada pero había mucha más rabia en su interior que la mantenía de pie para continuar peleando.- ¡MUÉRETE, MALPARIDA!.- Le deseó y sacó una navaja que llevaba consigo, pero la militar logró contenerla, sujetando su brazo derecha, ejerciendo una enorme fuerza pero que iba a perdiendo con el paso del tiempo.

Eddy miró el enfrentamiento, no podía dejar que su amiga sufriera, así que juntó coraje y lo primero que hizo fue correr hasta el tablero de control Central, allí no había nadie, por lo que divisó un botón con unas letras escritas en un idioma raro, así que lo presionó y eso llevó a que las alarmas comenzaran a saltar.

- "Secuencia de auto-destrucción iniciada. Faltan 3 minutos para la explosión".- Anunció una voz mecánica desde la computadora y cuando Lee se giró para ver quién había sido el responsable, ella se quedó horrorizada de ver al "Amor de su vida" yacer ante la acción que efectuó. Pero eso no era todo, el chico corrió hasta donde estaba Francesca y la ayudó a ponerse de pie.

- ¡Eddy, ¿qué haces?!.- Preguntó la pelirroja, quien se levantó.

- Algo que debí haber hecho hace mucho tiempo: Desde que aparecieron en el pueblo, solo nos han estado acosando, haciendo nuestras vidas más que imposibles, incluso nos robaron aquellas monedas de cuando habíamos cambiado el estilo de Ed junto a la casa del árbol que teníamos. Ahora, es tiempo de pagar, Lee y eso significa mi "punto final" para ti.- Le espetó y de ahí se giró hacia la italiana.- ¿Estás bien, amiga? ¿Te hizo algún daño?.- Preguntó, tendiendo su mano para que se levantara.

- Descuida, estoy bien, no me hizo ningún daño.- Respondió con energía y una sonrisa que cautivó al chico pero que alejó su mirada del rostro de la peli negra, mientras que Lee apretaba con fuerza la navaja en sus manos.

- ¿Así que así es como me pagas, Eddy?.- Preguntó la pelirroja con una voz tétrica y de ahí alzó la cabeza.- ¡Muy bien, así será, pero nunca desistiré de ti, serás mío sin importar nada!.- Exclamó pero al momento de que se lanzó contra Francesca, la nave comenzó a sufrir las primeras explosiones que la azotaron. Esa fue la oportunidad para la Oficial de las "Witch" de tomar ventaja y tomó la mano de la oponente, la cual portaba la navaja pero al momento de querer tirarla contra el piso, una segunda explosión llevó a que el objeto en cuestión se desviara de su curso y...

Un grito desgarrador inundó todo el lugar, en medio de la evacuación, Lee Cruel se levantó y con una mano sobre su ojo izquierdo, el cual manaba sangre y con su mano intentaba frenar la pérdida, por lo que escapó de allí hacia una capsula de escape, no sin antes dejar un aviso.

- Esta no será la primera y última vez que nos veamos, "Witch". No tendrás tanta suerte, ni tú ni tus amigas. Tenlo por asegurado.- Prometió la pelirroja y escapó del lugar, herida, destruida pero con una promesa que haría cumplir, tarde o temprano.

El sitio estaba listo para volar por los aires, la voz de la computadora dio a conocer de que quedaban muy pocos segundos, así que ambos debían escapar de allí.

Por su parte, en el exterior, la batalla estaba inclinando la balanza a favor de las "Witch" y sus Aliados. Las Fuerzas "Shadow Neuroi" habían empezado a retirarse pero Minna, Trudie y las demás no podían dejar escapar a la "Segunda Colmena", por lo que iniciaron una rápida ofensiva aérea para destruirla, aprovechando de que la mayoría de sus tropas estaban fuera del interior para protegerla.

- Oigan, ¿puedo ir con ustedes?.- Preguntó Johnny con Tablón.

- Sí, Rolf también desea hacerlo. Un homenaje para mis antepasados.- Añadió el extranjero.

- De acuerdo, no hay problema.- Les permitió Yoshika con Lynne ir con ellas.- Pero no se separen de nosotras.- Pidieron y ambos amigos dieron su palabra.

El ataque se había iniciado, devastando a las pocas fuerzas enemigas dentro de la "fortaleza", a pesar de la feroz resistencia que éstas impusieron, pero no sin antes advertir a las Crueles de lo que estaba ocurriendo en esos instantes.

- ¿Qué?.- Se preguntó Marie y de ahí vio que un mensaje estaba arribando a su computadora y lo comenzaba a leer hasta su rostro se volvió rojo de la ira.- ¡NO PUEDE SER!.- Exclamó con un arrebato de ira y May la oía, ya que había llegado al recibir noticias de que Lee estaba herida.-

- ¿Qué haremos?.- Se acercó la rubia a ella y al ver que la otra estaba en recuperación, se giró y tomó una decisión.

- Ordena de que se retiren, ya no podemos hacer nada por la "Segunda Colmena".- Pidió y ella tuvo que obedecer.

Volviendo a la "fortaleza" enemiga, las "Witch" habían logrado destruir las defensas y con ello acceder hasta el "Núcleo" que ésta poseía, llevando a que la "Segunda Colmena" comenzara su proceso de caída y al salir de allí, junto a Johnny, Tablón y Rolf, contemplaron cómo ésta estallaba por los aires y regaba con los escombros el suelo arenoso del Sáhara.

La victoria fue abrumadora y con la retirada de los "Shadow Neuroi" de allí, quedaba cerrado aquel frente de batalla, sin embargo, a pesar de los festejos y los fuegos artificiales, las Oficiales sabían muy bien de que esto no iba a terminar, aún quedaban otras "Colmenas" alrededor del Mundo, los ataques contra los demás países no cesarían y apenas comenzaba la "fiesta".

- Oigan, ¿vieron a Eddy Francesca?.- Se acercó Charlotte hacia Minna y Trudie, ya que ambos no aparecían.

Pocos segundos quedaban en la nave que, anteriormente, había estado bajo el liderazgo de Lee pero ya no quedaba nadie. Eddy había usado una buena parte de su poder y no le alcanzaba para volar, por lo que a Francesca se le ocurrió una gran idea. Ella se acercó hasta él y le tendió su mano, llamando la atención del chico de baja estatura, quien alzó una ceja.

- Agárrate fuerte de mí.- Le dijo con amabilidad en su voz.

- Pero, eso es mucho peso, nos caeremos.- Quiso usar la Lógica pero aquella chica era muy especial, no era como otras personas, sino de que le gustaba vivir ese estilo.

- ¿Y qué?. No ocurrirá nada, además, estás en buenas manos, ¿acaso crees que te dejaría caer?.- Indagó con una sonrisa cómplice, mientras que se reía.

Dudó un instante, sin embargo, al final, terminó por ceder y al aferrarse a Francesca, ella inició el vuelo de escape, saliendo de allí justo antes de explotara la nave, cuyos restos cayeron en llamas contra el suelo del Desierto, mientras que ambos observaban la destrucción bajo el Sol de la tarde.

El sonido de la "Unidad Striker" de la italiana era el único allí presente, Eddy podían observar la determinación que su amiga tenía. Ya lo había demostrado en Peach Creek y devuelta cuando peleó contra Lee.

- Oye, ¿estás bien? ¿Te lastimaste?.- Preguntó pero, al ser tomado por sorpresa, él negó con la cabeza.- De acuerdo, eso es lo importante. Ahora volvamos con los demás, esta batalla ya ha terminado.

- Espera.- Le detuvo el chico.- Gracias.- Le agradeció.- Muchas gracias...En serio, gracias por ayudarme, después del ataque, cuando Jimmy había sido herido, yo...yo lo salvé...aunque...- Miró hacia a un lado, lo ocurrido en su pueblo seguía latente pero Francesca entendió el mensaje.

- No te preocupes. Entiendo tu posición, no querías que nada malo le pasara e hiciste bien, lo salvaste, aún así, tu camino recién comienza, Eddy. El de todos ustedes ha iniciado y esta batalla ha sido, únicamente, la punta del iceberg, vendrán nuevos enfrentamientos, las Crueles no se darán por vencidas. Esta derrota es, solamente, un mal sabor de boca pero volverán para obtener lo que buscan. Están movidas por el deseo de poder y dominación, pero les impediremos hacerlo. Vamos a triunfar, solo tienes que tener confianza y verás que los objetivos se cumplirán.- Auguró la italiana, dándole ánimos al chico, quien parpadeó unos segundos y sintió las cálidas manos de ella sobre las suyas.

- Tienes razón. Lo haré, no me pienso dar por vencido.- Juró éste, mientras que evitaba un pequeño rubor que apareció repentinamente.-

- ¡Así me gusta!.- Exclamó ella y pusieron rumbo hacia donde estaban los demás.

El viaje duró poco y llegaron hasta el buque insignia de la Armada de Egipto. Minna, Mio y Trudie estaban conversando con el "Alto Mando" y los resultados eran excelentes: El Norte de África estaba asegurado, pero eso no le quitaba el peligro de ser potencial blanco de nuevos ataques enemigos, Europa del Sur también estaba bajo la misma situación, sin embargo, la seguridad podía establecerse allí. Sumado a ello, las pérdidas para las Crueles durante la Batalla de África habían sido severas, además de que se habían agendado la destrucción de la "Segunda Colmena", por lo que era un motivo para celebrar, aunque ellas optaron por no hacerlo.

No descansarían hasta la guerra terminara y las Crueles estuvieran tras las rejas.

- ¡Eddy!.- Se alegraron Doble D y Ed de verlo sano y salvo, mientras que descendía con Francesca en la cubierta del barco. Pronto, se sumaron los demás personajes.

- Oye.- Le llamó Sarah y al voltearse, notó que la chica le dio un abrazo.- Es una muestra de mi agradecimiento: Salvaste a Jimmy de una muerte segura. Nunca lo olvidaré. Puede que seas un bobo y todo, pero aún así elegiste hacer un acto noble por él. Muchas gracias, Eddy.- Mostró ella sus respetos y de ahí fueron los demás a felicitarlo, mientras que Francesca lo miraba con una sonrisa en su rostro, dándole ánimos para que siguiera y lo hizo.

Mientras que lo felicitaban, Minna dio un paso al frente y habló ante todos ellos.

- Hoy hemos ganado una batalla sumamente importante, una que ponía en peligro la seguridad tanto de África como de Europa. Sin embargo, la guerra todavía sigue, tendremos que seguir peleando hasta el final, porque ellas, las Crueles no conocerán el descanso. Continuarán con sus ofensivas pero el día de hoy, esta victoria nos abre las puertas para la esperanza en las personas que están sufriendo, así como también han sido partícipes de su "Bautismo de Fuego" y hemos conseguido destruirles una nueva "Colmena". Si continuamos así, lograremos llevarlas a una crisis sin salida y tendrán que rendirse, así que...- Minna dirigió la mirada hacia donde estaban los chicos de Peach Creek y les hizo la venia militar, al igual que Trudie y las otras.- ¡Hoy se han ganado nuestros respetos, sus poderes han comenzado a surgir y con lo que aprendieron, irán dominándolos pero hoy mismo han hecho historia, dejaron escritas sus hazañas en las páginas que serán leídas por las generaciones futuras y les digo esto: Excelente trabajo, chicos. Muy bien hecho!.- Les felicitó la Comandante y con ello estallaron los aplausos.

Los Eds y los chicos de Peach Creek, junto a las "Witches", sabían muy bien que ahora vendrían días muy importantes, batallas complicadas en donde deberán poner en práctica todo lo que aprendieron en los entrenamientos. Las Crueles no se rendirían y volverían a las suyas, pero, aún así, la esperanza de que el Mundo tenga un Futuro prometedor seguía latente.

Pronto, la flota puso rumbo hacia Brittania. Era el momento de descansar, recuperar las fuerzas tras una larga batalla en las ardientes arenas del Sáhara.

Fin del "Arco II: La Batalla por África"

[Bueno, bueno, amigos, tal y como dice el mensaje, aquí termina este Arco, pero aún quedan otros más y les dejo este aviso: El "Arco III" va a ser uno muy importante, solo diré eso. Dejaré descansar este fic por unos días, ya que necesito terminar otros que tengo en "Wattpad" y, posiblemente, en dos semanas, vuelva con éste.

Sin más que decir, les agradezco a todos ustedes por seguir esta historia. Les envío mis saludos y agradecimientos.

Cuídense, amigos. Buen comienzo de día Jueves de mi parte y hasta la próxima.

Próximamente: "Arco III: La Guerra Antártica/Antarctica War".