Arco III: La Guerra Antártica
[Hola, amigos, ha pasado un tiempo desde mi última actualización y les debo una disculpa, más que nada he estado terminando otros frentes, los cuales ya cerré y ahora puedo darle mayor atención a "Ed, Edd, Eddy Shadow Neuroi Invasion".
Bueno, como sabrán, durante los eventos del "Arco II", los chicos recibieron la inyección de "Magia" y tuvieron su "Bautismo de Fuego" en África, en donde lucharon contra las Crueles. Sin embargo, en esta nueva entrega, las cosas se van a poner más complicadas. Tengan esto en mente, porque es aquí donde las cosas se van a ir poniendo mucho más interesantes. Sumado a ello, quiero trabajar, además de las batallas, la relación de amistad/futuras relaciones entre las chicas con los Eds, por lo que puede que me demore un poco en actualizar (además de que en Febrero me voy de vacaciones y no podré escribir, ya que estaré ocupado).
Pero bueno, mientras tanto y que aún falta para Febrero, es hora de ir a la historia. Agradezco, nuevamente, a los seguidores de este fic, en especial a Matfix y Franco M. Romano.
¡Comencemos!.].
Capítulo I:
Una serie de pequeños golpes contra la superficie de un escritorio resonó por la "Sala de Operaciones". Sentadas en sus respectivos asientos se hallaban las hermanas Crueles, quienes habían tenido que retroceder y con ello perdieron la Batalla de África. Sus fuerzas habían sido diezmadas y hasta perdieron la "Segunda Colmena", provocando que el desbande fue generalizado y de ahí tuvieran que reorganizarse para continuar con sus campañas. Una derrota puede afectar la moral de las tropas e incluso a sus Comandantes. También suele suceder cuando se dejan llevar por el orgullo y el desenfreno en el poder, una vez que se instalan allí, el mismo los corrompe y cuando se produce una guerra, éstos quedan tan apegados que se niegan a dejar sus puestos.
La Primera Guerra Mundial había sido un duro hecho para los que pelearon en la "Triple Alianza", sobre todo cuando el "Plan Schlieffen" había sufrido alteraciones por parte del General Helmuth Von Moltke El Joven, sobrino del famoso militar que dirigió a las tropas alemanas y prusianas contra la Francia del "Tercer Imperio" bajo el mando del Emperador Napoleón III. Para May, esa humillante derrota era comparada con la Batalla de Magnesia, en donde los Ejércitos de la República Romana ganaron sobre las Fuerzas del Rey Antíoco III El Grande de Siria.
En un momento dado, Lee se levantó de su asiento, repentinamente y de ahí encaró al mapa, llevando sus manos a apoyarse sobre la pantalla.
- Aún podemos lanzar nuestras ofensivas. Si perdimos África, la recuperaremos, hermana, no hay por qué alarmarse.- Sostuvo Marie pero la pelirroja negó con la cabeza.
- No se trata de ver cuándo podremos recuperar tal posición perdida. No, Marie, esto es distinto y hablo de mantener el equilibrio en nuestras victorias. Ahora, la balanza se inclina en contra nuestra porque las "Witches" tienen a nuestros novios con ellas. Sin embargo, esto es solo el principio, ahora mismo tengo pensado algo en mente, un plan infalible y que ni siquiera ellas van a poder salir del asombro.- Prometió y con ello se puso a discutir con ellas sobre ese asunto.
Marie y May se miraron la una con la otra, "intercambiaban" información al respecto y les preocupaba que Lee estuviera tan tranquila. ¿Acaso ella ya tenía un plan de antemano para poder destruir a los enemigos que tanto les estaban causando problemas?.
- "¿Qué será lo que tienes en mente, hermana?".- Se preguntó la rubia con dudas y de ahí notó que ella apuntaba hacia un punto en el Norte.
- Aquí es donde comenzará la acción y ya tenemos a la "Tercer Colmena" lista para el combate.- Anunció y eso dejó con dudas a las dos hermanas restantes.
- Pero...¿qué piensas sacar de allí?.- Quiso saber Marie.
- Todo a su debido tiempo, con calma. La Antártida misma será nuestro nuevo frente por el cual vamos a combate.- Prometió y de ahí optaron por ver qué más iba a suceder. Ellas notaban aquella herida en su rostro, ahora que estaba limpiada y sanada, pero la cicatriz nunca se iba a ir de su ojo; producto de su pelea contra Francesca Lucchini.- Por ahora, vamos a lanzar operaciones relámpago sobre Europa y otros Continentes, así que andando, tenemos mucho trabajo que hacer.
Dicho esto, las tres partieron para sus posiciones respectivas. Había un "Imperio" por comandar y necesitaban tener todo el tiempo posible para cumplir con las obligaciones dictadas y con ello obtendrían la lucha contra las "Witches". Tal y como Lee había dicho, el tiempo era su máximo aliado.
- Nuestra próxima ofensiva será aquí: En la Antártida, como se dijo, pero vamos a tener que llevar al máximo nuestras fuerzas y capacidades logísticas.- Apuntó Lee en el mapa.
- Pero, ¿qué hay de importante en ese Continente?. No hay nada, salvo las estaciones científicas.- Señaló Marie.
- Allí cuentan con investigaciones sumamente importantes, las cuales nos serán de una gran importancia, además, si destruimos esa zona, será otro golpe y uno doble.- Respondió la pelirroja, segura de sí misma.- Y esta misión va a ser muy importante, que nuestros Ejércitos se preparen, volvemos a la acción.- Pidió, concluyendo aquella reunión y dejaron la "Sala de Operaciones".
El éxito de la misión en África repercutió sobre Europa, las noticias habían llegado y con ello, las celebraciones estallaron por todo el Sur, desde España hasta los Balcanes, inclusive, pero aquello era una victoria que apenas llegaba a representar un 5% del éxito de las campañas bélicas iniciadas desde el estallido del conflicto contra los "Shadow Neuroi".
El grupo conformado por las "Witches" y los chicos de Peach Creek iniciaron el descenso hacia las pistas de aterrizaje ubicados en el Cuartel General de Brittania. Allí fueron recibidos por Anna Ferrara, quien los observó y asintió con la cabeza ante los jóvenes. Acto seguido, ésta realizó un movimiento y efectuó la venia militar frente a ellos, quienes se quedaron sorprendidos.
Sin palabras, eso era lo que habían recibido los chicos ante la Veterana de Venecia después de haber aprendido con ella. Esa muestra de respeto duró unos minutos y con ello, la mujer caminó de un lado para el otro de donde se ubicaban, oyéndose el paso de sus zapatos contra el suelo.
- Tengo que felicitarlos. Han demostrado una gran hazaña este día en África.- Comenzó a hablar la mujer.- Estuve escuchando, en la "Sala de Comunicaciones", sobre los acontecimientos durante el combate contra las Crueles. Han peleado muy bien.- Cuando iban a celebrar, Anna alzó su mano derecha en el aire, deteniendo todo intento emotivo.- Esto fue apenas el comienzo de lo que estarán enfrentándose de ahora en adelante, ya no hay vuelta atrás y deberán controlar sus poderes, por eso seguirán entrenando tanto con las chicas como conmigo. Es muy importante todo esto y la guerra va a ponerse más complicada.- Dejó ese aviso y aquello llevó a que Johnny diera un paso al frente.
- ¿Qué tanto?.- Preguntó pero la Veterana guardó silencio.- Señorita Ferrara, por favor, queremos saber.
- Lo siento, Johnny, pero eso es cuestión de ustedes mismos. En la guerra no vendrá nadie a decirte cómo prepararte, ahora es parte de ustedes esto y cuentan con la "Magia".- Respondió la mujer con seriedad pero bajo un tono de preocupación.- No dejen que nadie los venza, ustedes ya no son niños cualquiera, son "Witches", Soldados y sé que darán lo mejor para derrotar a esta raza de "Shadow Neuroi", tal y como ellas y yo hicimos en el Pasado.
- Ella está en lo correcto.- Habló Nazz, girándose hacia sus amigos.- Esto no es un paseo por el parque, ni mucho menos una película de "Hollywood", amigos. Nos encargaron un gran poder y con ello hay que tener responsabilidad.- La porrista rubia cerró el puño y pensó en los suyos, mientras que fluía la "Magia" por aquella parte de su cuerpo y suspiro.- Ninguno de nosotros quería esta guerra, pero hoy dimos nuestro "Bautismo de Fuego", ¿qué es lo más sagrado para los que pelean? ¿Hay que quedarse de brazos cruzados y esperar a que la ayuda venga?. Eso no ocurrirá, nosotros somos la esperanza para esa gente junto a las "Witches". Ahora recae en nosotros tomar cartas en el asunto y enfrentarnos a las Crueles sin miedo. No es un Pecado luchar por la Justicia y la gente que amamos, ellas nunca entenderán las palabras y...- En ese momento, Nazz se calló unos segundos.- Tal vez piensen que estoy equivocada.
- Para nada, estás en lo correcto.- Le respaldó Johnny.- Tú misma lo has dicho: Ninguno de nosotros quería una guerra. Aquí nadie es culpable, el destino quería que así fueran las cosas y ahora las tenemos a ellas amenazando al Mundo. Yo tampoco me pienso quedar callado, peleamos juntos y triunfaremos de la misma manera. ¿No es así, Tablón?.- Habló el chico de camisa blanca y luego alzó a su "amigo" para que diera su opinión. Hubo unos segundos de silencio y de ahí asintió con la cabeza.- Él también comparte lo mismo.
Ella se sintió agradecida por el apoyo del chico calvo y de ahí notó que Mio colocaba su mano sobre sus hombros. Alzó la mirada y allí estaba ella.
- Lo que hoy hicieron fue una gran hazaña, pero las cosas se irán poniendo más complicadas con el correr del tiempo. No deben bajar la guardia y terminarán sus últimos entrenamientos, los cuales serán para que dominen sus poderes al 100%. Pero en cuanto a ti, Nazz, hay algo en lo que quisiera hablar contigo.- Dijo la Mayor peli negra y de ahí pidió la atención de la rubia.- Dentro de un rato lo discutiremos.- Prometió y se alejó de allí, dejando a la chica con una gran cantidad de dudas.
- Por ahora, amigos, vayan a descansar. Se lo han ganado.- Pidió la Comandante Minna, quien se hallaba cruzada de brazos y mirando a los presentes, "pasando lista". Una vez terminado el asunto, lanzó un grito para que las filas se rompieran y así fue que se alejaron para llevar a cabo sus actividades.
Anna fue con Mio y las otras Oficiales, alejándose del camino y con ello, algunos aprovecharon el momento para estar con sus amigas. Jimmy fue el primero en irse con Sarah, sin embargo, el chico albino tenía una cosa por hacer. Vio que Eddy estaba con Ed y Doble D, caminando hacia el Cuartel General cuando el chico les detuvo el paso.
- ¿Y ahora qué?.- Se preguntó Eddy con asombro y de ahí vio que el muchacho le tendía su mano.-
- Una "Oferta de Paz". Me salvaste la vida, Eddy, durante la Batalla de África.- Dijo el joven, cosa que llevó a que el otro cerrara los ojos.
Eddy se quedó pensativo, ese momento en el que había estado a punto de ser convertido en el novio de Lee, tanto en Peach Creek como en el frente, le llevó a que reflexionara al respecto. Le había dicho a Jimmy, claramente, de que lo había hecho porque estaba en las normas militares lo de no dejar atrás a un Camarada de Armas, pero aquí estaba también un tema de amistad que tenían el albino con Sarah. Fue entonces que estrechó su mano, pero no dijo nada, permaneció callado un rato, movió la cabeza y se fue de allí.
Aquello llevaría su tiempo.
- Oye, Eddy, lo que hiciste por Jimmy fue un muy buen acto de bondad.- Le dijo Doble D.
- Es verdad, arriesgaste todo para traerlo de regreso. ¿Qué te motivó?.- Preguntó Ed, curioso, mientras que iban llegando hasta la habitación que compartía con Francesca.
No supo qué decir en aquel momento, solo se limitó a respirar hondo y con ello miró a sus amigos con tranquilidad.
- Cualquiera lo hubiera hecho, pero dado en el contexto en que nos hallábamos, fui yo quien fue a rescatarlo del peligro.- Respondió y de ahí bostezó.- Disculpen, chicos, pero tengo sueño. Me voy a dormir.-
- Ve a dormir, yo tengo que hacer unas anotaciones más en mi cuaderno de investigaciones.- Añadió Doble D.
- Yo iré a leer mis cómics, nos vemos, amigos.- Se despidió Ed y con ello partieron para sus respectivos lugares.
El chico de baja estatura entró en la habitación y cerró la puerta. Tenía sueño, así que fue preparándose para acostarse en la cama. El sueño le estaba por vencer y fue entonces que lo aprovechó, cerrando los ojos y dejándose llevar por Morfeo. La Italiana no se encontraba en el lugar, la habitación estaba silenciosa, no se oía ni un solo movimiento o ruido dentro de la misma. Tal vez estaría con sus amigas o durmiendo en algún lugar del exterior.
Estaba sumergido en su "Mundo", esperaba poder hallar un poco de paz después de aquel enfrentamiento pero, por algún motivo, el chico sintió que alguien estaba allí, de pie y mirándolo, por lo que abrió los ojos y se encontró con cierta chica, la cual, estaba en esa posición, con la mirada clavada en él y eso llevó a que eso casi le diera un ataque de pánico.
- Jejejejeje.- Lanzó aquella risa que al otro no le gustaba que lo asustaran, pero no se enojó con su compañera de cuarto.- Oh, ¿dormías?.
- No, estaba practicando meditación, Francesca.- Respondió Eddy, mientras que se refregaba los ojos y se dirigía para el baño.
- Ohh, vamos, no seas aguafiestas. La estás pasando bien conmigo y encima todos están hablando de tu hazaña cuando rescataste a Jimmy en el frente.- Le dijo la Italiana y de ahí el chico se mojaba la cara con agua fresca de la canilla. Francesca se hallaba sentada en su cama, recostada contra la misma y mirando al joven, el cual salió del baño.
Éste volvió a su sitio pero la otra no se iba de su posición.
- Oye, ¿no tienes algo que hacer?. Digo, eres una Oficial, ¿no tienes tareas por cumplir?.- Quiso saber éste, pero ella negó con la cabeza.
- Para nada, ¿qué? ¿Acaso me estás echando?.- Preguntó y fingió que se puso a llorar.- ¡¿Acaso no me quieres?!.
- ¡No, no, lo siento, no te enojes, por favor, no era mi...!.- Intentó enmendar las cosas pero la Italiana estalló en una serie de carcajadas y le dio un golpecito contra el vientre.
- ¡Jajajaja, te la creíste!.- Exclamó, muerta de la risa.- ¡Deberías haber visto tu cara, estabas desesperado!.-
Eddy quería irse de allí, no era que la odiara, pero ese día estaba muy activa. Se preparó para levantarse de la cama, siendo detenido por Francesca.
- Era una bromita, no seas así.- Se defendió la peli negra.
- Lo sé, es que...- El chico de baja estatura se llevó la mano contra la nuca, quedándose pensativo.- Se sintió raro. A Jimmy aún le tengo ese resentimiento por lo que nos hizo, pero ahora...me encuentro en una especie de "Vacío".- Alegó y de ahí notó que la peli negra se le quedaba viendo, recostándose en la cama.- No sé cómo describirlo, es como si una parte mía dijera que lo debía dejar allí, pero la otra me instaba a salvarlo...y lo hice.- Recalcó y de ahí sintió la mano derecha de Francesca sobre sus hombros.
- ¿Sabes cómo se llama eso?. Tener empatía. No lo quieres perdonar, está en tu decisión y serás tú mismo quien vea el momento, pero tampoco puedes vivir con ese recuerdo. Ya pasó. ¿Acaso quieres tener resentimientos toda la vida?. Debes seguir adelante, Eddy. Además...- En aquel momento, la Italiana suspiró profundamente y sonrió.- La Batalla de África fue el "Bautismo de Fuego" para ustedes, diste una gran batalla y no solo eso, también te enfrentaste a Lee, aunque fue por unos momentos.- Le dio aquellas palabras de motivación, cosa que dejaron al chico sin palabras.- No vivas con ese sentimiento, tarde o temprano habrá que poner las cartas sobre la mesa.
Eddy se quedó pensativo, aquello era un presagio, tal vez no se cumpliría, todo dependía de los acontecimientos. De ahí, éste miró a la joven a los ojos.
- Gracias por el consejo.- Le agradeció.
- Para eso están los amigos.- Respondió, mientras que se quedaba mirando al techo.- Oye, dejemos de lado esta aburrida "rutina", vayamos a dar un paseo, hagamos algo productivo. Tenemos mucho de qué hablar.- Propuso, enérgica y sin que Eddy pudiera decir una sola palabra, ésta se levantó y tomó de su mano, saliendo de la habitación.
- ¡Ed!.- Oyó el amante de la Ciencia Ficción la voz de Erika, quien fue corriendo hasta él.-
- Me alegra mucho verte. ¿Qué estás haciendo?.- Preguntó con tranquilidad y ella se encogió de hombros.
- Ah, aburrida, las demás Oficiales están en una reunión así que...¿Qué tal si nos vemos una película?.- Propuso la rubia.
- Pero, ¿no te dará miedo?. La última vez casi te reta Trudie.- Quiso saber el chico pero la muchacha no le importó eso.
- No, tranquilo, no pasará nada, además, jejeje, tengo ganas de ver una película contigo. Tienes muy buenos gustos.- Resaltó Erika y con esa aprobación, aquella muestra de confianza, el amante de la Ciencia Ficción fue a traer su colección de DVDS y al escoger uno de éstos, lo puso en el reproductor y comenzó la función.
Una película tranquila, una de zombies para pasar el rato, aunque Ed había preferido ir con "Zombieland" para que no asustara la rubia. Ésta, por su parte, había ido a traer, desde la cocina, un tazón con palomitas de maíz para disfrutar de la función. Mientras que disfrutaban de aquella comida, Erika se estiró y miró a su amigo.
- Dime una cosa, Ed.- Le llamó la atención a éste.
- ¿Sí?.- Preguntó el chico, desviando la mirada.
- ¿Te sientes contento de estar aquí?. Mira que no es fácil ser militar, pero esa es mi pregunta. ¿Cómo lo ves?.- Le lanzó esas interrogantes al chico.
- Bueno, es verdad, ni siquiera me esperaba esto de tener "Magia" y volar, ya que, al principio creía que era como en las películas, pero lo terminas viendo desde otra perspectiva.- Respondió y ella asintió con la cabeza.- Aún así, las cosas cambian, una persona, con el tiempo, va comprendiendo la posición en la que se encuentra y aquí, con ustedes y mis amigos, me...me hace sentir feliz de poder contar con ustedes, sobre todo contigo, Erika, ya que eres una gran amiga.- Alegó y eso llevó a que la rubia se sonrojara por esa muestra de amabilidad.
- Awww, eres muy dulce.- Dijo la chica, dándole un abrazo.
- ¿En serio?. Muchos piensan que soy un tonto.- Las palabras que dio el joven dejaron callada a la otra.
- ¿Un tonto? ¿Quiénes?. No importa. Tú no lo eres, una muy buena persona, tienes un gran corazón, te preocupas por tus amigos. Tal vez seas algo "bruto" pero es un porcentaje de un 10% y eso no significa que no seas un peligro. Tú tienes que ser tú mismo. Nadie te obliga a cambiar.- Le dijo con determinación, mirándolo de frente. Acto seguido, lo tomó de los hombros y éste la miró a los ojos.- Escúchame, no quiero, ¿sí?, no quiero que nunca más vuelvas a considerarte algo así: No eres un tonto, eres gran persona que daría todo por sus amigos. Jamás te desprecies a ti mismo por lo que digan los demás. Ellos no te conocen en el fondo, solo sacan "conclusiones" baratas. Tú vales mucho más que esos supuestos "genios", ¿de acuerdo?.- Dejó aquel apoyo moral en el chico.
- Sí...- La voz de Ed sonó baja pero de ahí alzó la vista.- ¡Tienes razón, Erika, yo no soy ningún tonto!.- Exclamó, ahora, con determinación.- No me pienso dejar aplastar por gente así, ni siquiera las Crueles.
- ¡Exacto!.- Se unió la Oficial de cabello rubio.- Dime una cosa, ¿qué hacían ellas con ustedes?.
- Solo nos vivían acosando y queriendo que fuéramos sus parejas, nada más que eso.- Respondió y la muchacha asintió con la cabeza.- Hasta nos arruinaban las estafas que hacíamos. Sí, estaba mal eso pero no le queríamos hacer daño a nadie, eran fallos que ocurrían muchas veces en los proyectos.- Añadió y la chica le palmeó los hombros.
- ¿Lo ves?. Esas tres no son nada para ustedes, solo vivían para eso: Molestarlos, hacerles la vida imposible. Eso no es amor, ni mucho menos una amistad.- Recalcó Erika y él asintió.
- Tienes razón, debimos ser más listos, pero ahora que estamos aquí, ya no nos volverán a perseguir, aunque no quisiera depender de los otros, también uno debe valerse por sí mismo.- Recalcó el muchacho.
- No está mal que, de vez en cuando, alguien reciba ayuda, nadie es perfecto, recuerda eso.- Le animó la muchacha.
- Gracias por tu apoyo, Erika, te lo agradezco un montón.- Finalizó el chico y ella sonrió ante ese hecho.-
- No hay de qué, para eso estoy, no solo como tu "Guardiana", también como tu amiga.- Sostuvo con sinceridad y de ahí tomó el control remoto.- Bueno...¡ahora, veamos esta divertida película de zombies!.- Pidió y fue subiendo el volumen.
Para Ed, tener a Erika como su "Protectora" era lo mejor que le pudo haber pasado. Aquella chica de Karsland era muy especial, no solo por su dulzura, amabilidad y preocupación, también tenía un buen gusto para las películas e incluso no le importaba tener su habitación tan limpia. Sí, era como verse en el espejo y cuando la oyó reírse desde que comenzó la película, reconoció de que, tal vez, tenían algo mucho más grande que compartir.
Doble D se hallaba sentado en su mesa de trabajo, anotando en su "Diario de Investigaciones" sobre los últimos acontecimientos y más con los resultados durante la Batalla de África, pero lo que él no vio fue que alguien lo tomó por sorpresa: Una sombra emergió y cubrió la luz del Sol que entraba allí, por lo que sintió una punzada de asombro y al voltearse notó de que se trataba de aquella muchacha de cabello blanco-plateado. Ésta se hallaba de pie en el umbral y de ahí quedaron en silencio un buen rato. Acto seguido, Eila llegó hasta la habitación.
- Ya me estaba yendo, solo terminaba de anotar unas cosas y listo.- Dijo el joven de gorra negra.
- No, no hace falta.- Las palabras salieron de los labios de Sanya, cosa que tomó por sorpresa al otro, quien no podía crédito.
En medio de su silencio, Sanya había sido la que habló y aquello era el "preludio" a lo que pasaría con él más adelante.
[Tal y como dije, he comenzado a enfocarme en el tema de las relaciones amistosas y su posterior evolución que tendrán los Eds con Erika, Eila, Sanya y Francesca. Por otro lado, también me enfocaré en los demás chicos de Peach Creek con el resto de las "Witches" y la próxima movida de fichas de las Crueles.
Lamento mucho si tardé en actualizar pero tuve un par de "Bloqueos" pero ya está, además de que el calor ha sido terrible en Buenos Aires. Sí, una ola de calor que ya terminó pero fue la peor. Pero descuiden, seguiré escribiendo.
Mando saludos y agradecimientos para todos ustedes, amigos. Cuídense y buen comienzo de día Miércoles de mi parte.].
