Capítulo V:

Aquella chica de cabello azul oscuro ya no era la misma que había conocido y soportado, al igual que sus otras dos hermanas, desde un largo tiempo. Había cambiado. Él lo sabía. Esa persona con la que estaba luchando era un verdadero monstruo, no tenía escrúpulos ni pasión. Tampoco podía decirse lo mismo de su alma y corazón, ya que un manto de oscuridad le envolvía hasta nublarle la razón, la vista misma que la podría salvar de una desgracia, era su única "vía" de la que transitaba por esos momentos. Doble D la vio cargar hacia él, cuando se interpuso y evitó que disparara contra Eila y Sanya, frustrando su plan de asesinato y de ahí mostraba su verdadera Naturaleza.

El chico de gorro negro permaneció en su posición, aún así, su cuerpo estaba listo. La tenía en la mira y cuando ésta saltó hacia él, se defendió y trazó un arco ascendente, cerca del pecho de Marie, cuya remera de mangas largas se cortó por el golpe que recibió. El aire mismo parecía ser filoso y cuando se giró, ésta tocó su parte afectada, unas pequeñas líneas de sangre que manaban pero nada más que eso. Ladeó la cabeza y le lanzó una mirada burlona. El intelectual seguía en pie y con su espada en ristre.

- Te lo advertí, te di varias oportunidades pero eres testaruda...¡no!. Todo lo contrario, eres una caprichosa que piensa que puede tenerme a mí como un objeto. ¡¿Qué poder te da para decidir algo así?!.- Preguntó Doble D hacia ella.

- Ya lo deberías saber, es tan simple.- Le espetó la chica con un aire de desdén.

- ¿Sí? ¿Cómo?. Adelante, explícamelo.- Desafió el intelectual y la peli azul oscura tragó saliva ante tener una respuesta, aún si fuera una simple. De ahí, el joven miró hacia un lado.- Ya me lo temía: No la tienes. Nunca la tuviste, ni siquiera con Lee y May. Solo nos ves como objetos. Si yo estuviera tu lugar, ¿te gustaría que te tratara de la misma manera que nos lo hacían a nosotros? ¡¿Eh?! ¡Responde, Marie!.- Le ordenó el chico pero eso parecía hacerla enojar aún más.

La había golpeado con la pura verdad. El interior de la chica parecía estar ardiendo a más no poder. Era una furia contra sí misma, contra las "Witches" que le habían sacado a su novio y notó que unas lágrimas bajaban por sus ojos hasta que formó una sonrisa siniestra. Doble D lo pudo sentir pero todo fue tan rápido. La rival se lanzó y atacó con una severidad nunca antes vista, dirigiendo todos sus ataques contra él, quien intentaba defenderse a como de lugar pero la rapidez de su oponente era aterradora.

- ¡Tú debiste estar conmigo, al igual que tus otros dos amigos pero nos rechazaron injustamente! ¡Ahora que el "Legado Kanker" se expande por el Mundo, ya no me importa si te tengo que tratar como a un Rey, porque no lo serás, sino de que te convertirás en un esclavo personal. No podrás ni pestañar sin que yo te lo ordene y si intentes escapar, te torturaré de la peor manera! ¡No, mejor aún, destruiré tu mente cuando haya capturado a esas dos malditas "Witch" y de ahí verás que, lo que vaya a venir, será solo el principio! ¡Me reclamarán, incluso de rodillas, que les de una muerte rápida pero no será así! ¡¿Sabes cómo se las mataba a las Brujas en la Edad Media?! ¡Quemándolas en la hoguera...sí, queman...!.- Marie no tuvo tiempo para terminar con su oración. Doble D cargó contra ella y de un modo violento. Sus ojos, abriéndose como si fueran platos, no pudieron describir lo que había despertado.

Atacando a diestra y siniestra con su espada y la "Magia", el chico de gorro negro destruyó a todo esbirro de ella y de ahí, enfocó aquella mirada suya, cegada por la ira, las lágrimas y la decepción, principalmente. Lo que ella había dicho había sido lo más inhumano e imposible de imaginar. Su corazón parecía romperse cuando pensó que aún humanidad dentro de la peli azul oscura. En un momento dado, atacó a Marie desde uno de los flancos y de ahí le provocó una serie de cortes que iban desde el rostro hasta el abdomen, siendo, en esta oportunidad, bastante serios y la sangre que caía contra el piso, entremezclándose con el barro. Ella se agarró aquella zona e intentó dar lástima pero el joven no iba a caer en su trampa.

- Intenté, por todos los medios, encontrar tu humanidad dentro de ti, ¡incluso habría dado mi vida por demostrarlo!. Pero estaba equivocado, tú y tus otras dos hermanas son de lo peor. Son genocidas, monstruos, careces de alma.- Apuntó con su espada a Marie y ésta, por primera vez, sintió un profundo terror en su corazón al elevar la mirada y ver que los ojos de aquel chico estaban humedecidos por las lágrimas de la ira y la decepción.- Haz hecho un daño irreparable contra esta gente, ¡mataste a familias inocentes!.

- Así es la guerra. ¿Acaso debo...?.- Preguntó pero terminó por recibir una bofetada en el rostro por parte de Doble D.

- Antes que nada, voy a odiar lo que hice contra ti y en segundo lugar, eso no te da poder para ir asesinando a toda persona inocente que se encuentre en tu camino. ¡Los Humanos merecen vivir!.

- ¡Jajajajaja, si tanto los quieres, entonces muere por ellos!.- Le reprochó Marie y de ahí, cerrando sus ojos y mirando hacia ella, el intelectual tomó su decisión.

- Ni los animales hacen una barbaridad como las que ustedes han hecho. No son ni ese tipo de rótulo, sino seres innobles. No me importa lo que vaya a pasar en lo que quede de esta guerra: Que vivan o mueran, sus actos siempre las perseguirán. Cargarán con una "miasma" mil veces peor que la que tuvieron que afrontar los Griegos tras el intento de tiranía por parte de Cilón de Atenas. No habrá compasión con ninguna de ustedes.- Le dejó ese mensaje a la peli azul oscura, pero ésta, tras ponerse de pie, lo encaró personalmente.

- ¿Así que mis hermanas y yo vamos "a pagar los platos rotos"?. Dios, dices tantas tonterías, Doble D. Pero ya que esta guerra se ha puesto muy "entretenida", tengo que reconocerlo: Nunca, en toda mi maldita vida, me sentí tan bien como ahora en ver a incontables basuras morir entre las llamas y los bombardeos.- Dio aquello y de ahí tomó su arma y volvió al ataque.- ¡Y en cuanto a ti...!.- No tuvo tiempo y corrió, lista para herirlo o algo peor, pero, en aquel momento, viendo que ya no tenía más remedio, el chico de gorro negro alzó su espada y trazó un arco que golpeó, justo en el blanco, uno de los hombros de Marie.

Ésta sintió como el metal atravesaban carne y hueso. Dejó caer su arma, la cual estaba por disparar y de ahí sintió un profundo dolor que le recorría todo su cuerpo. Era como el fuego que quemaba la piel, la sangre empezó a manar a borbotones, mientras que ella soltaba su arma, ésta caía contra el piso, haciendo un pequeño eco que se perdió a los pocos segundos y de ahí se aferró, fuertemente, a la zona afectada por el arco trazado por al espada.

- A...¡AGH!.- Comenzó a gritar aquella muchacha. Doble D, por un momento, se sintió horrible consigo mismo pero tuvo que reconocer que, si no lo hacía, iba a ser demasiado tarde para él.- ¡¿Cómo pudiste hacer esto?! ¡¿Por qué?!.- Preguntó Marie, mientras que continuaba agarrándose a la herida. Se tiró contra el piso y tomó unas vendas pero la sangre seguía manando igual que una fuente.- ¡Eres un maldito!.

- ¡¿Yo soy el maldito?! ¡¿Qué debía hacer?! ¡¿Ponerme de rodillas y rogar de que no me mates?! ¡Tú misma lo dijiste, Marie: "Así es la guerra"!.- Le espetó el chico intelectual.

Se odió así misma y maldijo a la vez. Había sido una completa estúpida con decir que, en un principio, le dio un beneficio pero que, al final terminó por convertirse en un "arma de doble filo". Intentó tomar su arma pero Doble D le lanzó un "Disparo Mágico" y ésta explotó por los aires.

- Se acabó. Ya ríndete y puede que, lo único que recibas tú y tus hermanas sea la "Prisión Perpetua" sin posibilidad de libertad condicional. Es mejor eso antes que el paredón de fusilamiento o la horca.- Le "aconsejó" pero Marie le miró con asco.

- Ya hablas igual que ellas. Esas malditas "Witches".- Advirtió con frialdad.

- Tú no eres nadie para decirme cómo debo expresarme, ni tampoco te dejaré la vía libre para lastimes a Eila, Sanya y mis amigos. Yo intenté con hacerte entrar en razón, pero las palabras fallan, no tienen utilidad en el campo de batalla. Si hay que sobrevivir, entonces debes luchar para conseguirlo.- Finalizó el chico de gorra negra, mientras que la tenía bajo custodia. Acto seguido, tomó una pequeña radio que llevaba consigo, sintonizando el canal correspondiente.- Eila, Sanya, ¿me reciben?.

En medio de la feroz contra-ofensiva que estaban llevando a cabo contra los "Shadow Neuroi" de Marie Kanker, Sanya captó una señal radial en su equipo, por lo que se dispuso en establecer comunicación con el emisor reciente.

- "Eila, Sanya, ¿me reciben?. Cambio".- Habló aquel joven desde el otro lado del frente de batalla.

- Aquí Sanya. Te recibo, Doble D, ¿qué sucede?.- Preguntó la albina.

- "Tengo capturada a Marie Kanker. Por ahora, en donde estoy se encuentra todo tranquilo, pero esto es solo una paz efímera, temporal. Necesito que vengan hasta mí para llevarla en calidad de prisionera".- Fue la respuesta que les dio a ambas.

- ¿Qué sucede? ¿Es Doble D?.- Se acercó Eila a su amiga. Ésta asintió con la cabeza.

- Sí, dice que capturó a Marie Kanker, una de las tres hermanas responsables de todo esto.- Le contó de aquellas novedades y de ahí volvió a ponerse los auriculares en las orejas.- Eila acaba de llegar. Iremos enseguida. Quédate ahí y si pasa algo, resiste, que te ayudaremos.

- "Recibido, Sanya. Tengan cuidado ustedes también. Hacia el Norte y el Oeste están muy tensas las cosas con los "Shadow Neuroi". Es una lucha tremenda".- Les aconsejó e informó respectivamente.

- Descuida, vamos enseguida. Cambio y fuera.- Finalizó la chica de Orussia, quien guardó sus auriculares y de ahí se dirigió hacia su amiga.- Hemos tenido suerte, con la captura de Marie nos permitirá atrapar a las otras dos locas que tiene de hermanas y así poner fin al "Legado del Dr. Reginald Kanker".- Sostuvo la peli plateada pero notó algo en el rostro de la albina.- ¿Sanya? ¿Estás bien?.- Preguntó ante las dudas que tenía la otra.

- Quiero hacer Justicia por Orussia, pero tampoco quiero que esas desgraciadas vuelvan a caminar por este Mundo. No quiero ser pájaro de mal agüero pero deberíamos movernos ya mismo y arrestarla.- Pidió ésta y la otra notó que eran ciertas las palabras de la chica, ya que podía tratarse de algún truco que Marie tuviera bajo la manga y que quisiera usar en su contra.

Justo en ese mismo lugar en el que estaban combatiendo, podía verse a Kevin, Nazz, Johnny y Mio destruir a todo enemigo que se interpusiera en su camino. Por algún motivo, los "Shadow Neuroi" daban una resistencia muy flácida. Casi no combatían y con ello se podía ver que se estaban retirando, cedían el terreno, cosa que no le encantó a la porrista rubia, quien sostenía su katana en la mano.

- No me gusta.- Dijo ella con tono serio.- Hay algo raro en esta retirada. De golpe dejaron de ser hostiles y se van, ¿por qué?.- Quiso saber Nazz. Kevin se hallaba a su lado pero negó con la cabeza, al igual que Johnny y Mio.

- Sea lo que sea, algo debe de haberles causado inconvenientes y van a resolverlo pero, aún así, esta "Paz Temporal" tiene sus horas contadas.- Advirtió la Mayor Sakamoto, la cual se acercó hasta ella.- Y cuando se termine el "plazo", tendremos que estar preparados.- Acto seguido, se giró hacia los demás.- Escuchen, tengan cuidado, no permiten que les cierren el paso. Ataquen con todas sus fuerzas.-

- ¡Sí, Mayor Sakamoto!.- Acataron Kevin y Johnny aquella orden dada por la peli negra del Imperio Fuso.

Nazz tanteó el terreno que estaba cubierto por la nieve y los restos incendiados de los "Shadow Neuroi". El aire era una mezcla de fuego y componentes electrónicos que ardieron a más no poder, mientras que las máquinas de guerra que se habían traído eran pasto de las llamas.

- Debemos seguirlos.- Apuntó la rubia hacia el frente.

- ¿Qué?. Pero Nazz, no sabemos qué es lo que nos pueda pasar allí.- Intentó Johnny en convencerla pero Kevin dio un paso al frente.

- Ella está en lo correcto, Johnny. Si esos desgraciados están preparándose para tomarnos por sorpresa, entonces es mejor jugar al mismo "juego".- Se unió el pelirrojo a la causa de la chica.

Aquello podía ser verdad o no. Se tenía que lanzar los dados y ver qué resultado les tocaría. Para ello, iniciaron una feroz carga contra las filas enemigas, destruyendo una buena parte de las huestes de Marie, mientras que iban avanzando hacia donde se encontraban Marie y Doble D.

La peli azul oscura sentía que sus fuerzas la iban abandonando, su herida parecía que se iba infectando por las bacterias que había en los alrededores pero, al ver que Doble D le colocó su espada, éste se arrodilló y tomó un kit de primeros auxilios. Iniciando con un vendaje empapado de alcohol que se dispuso para colocarlo sobre la zona afectada por el arco que trazó con aquella arma blanca.

- ¡¿Qué harás, maldito?! ¡Aléjate!.- Le ordenó la peli azul oscura.

- ¡Quédate quieta, si no trato tu herida, se irá infectando cada vez más hasta que pueda causarte una septicemia o algo peor!.- Respondió el intelectual pero la chica tenía, aún, fuerzas para pelear.

- Ni en un millón de años.- Se negó en aceptar su ayuda pero sintió que dos personas le cerraban el paso. Se giró, bruscamente y allí se encontró con Eila y Sanya frente a frente. Tragó saliva y sintió que las pocas fuerzas que le quedaban en su cuerpo se iban desplomando ante el hecho de que había estado, por mucho tiempo, provocando a ambas "Witches" y ahora las tenía allí, frente a él.- No...No...¡No, no, atrás!.- Ordenó la chica Kanker.

- Marie Kanker, una de las nietas del Dr. Reginald, quedas bajo arresto por crímenes de lesa humanidad, entre ellos cargos por genocidio, asesinato en masa de civiles, esclavitud y desplazamiento forzado de poblaciones. Tienes derecho a permanecer callada, todo lo que digas será usado en tu contra en una Corte de Justicia. Tienes derecho a un abogado y en el caso de que no lo puedes contratar, el Estado te asignará uno para tu defensa.- Comenzó la peli plateada en leerle sus derechos a la chica, quien miró hacia abajo, sintiéndose "avergonzada" pero, por algún motivo, mostró una sonrisa siniestra en su rostro.

Lo que ellos desconocían era que la rival había presionado un botón que se hallaba en un extraño "reloj de pulsera" y éste empezó a emitir una señal de emergencia que fue viajando por la zona hasta desaparecer en los alrededores de las heladas tierras fronterizas.

En un lejano punto entre Suomus y Orussia, todo parecía sumamente tranquilo y sereno, a pesar del clima gélida que se hallaba instalado, aún, por esas regiones. Un grupo de pájaros pasó volando y se posó sobre los árboles. En tierra, los animales como conejos, ardillas y otras criaturas de la Naturaleza iban recorriendo la zona, mientras que encontraban comida pero, de golpe, algo comenzó a trastocar esa calma tan llamativa y de ahí se produjo un misterioso terremoto que fue azotando la tierra, igual que un látigo contra la carne expuesta de un condenado durante los tiempos de la "Edad Moderna".-

- ¿Qué ha sido eso?.- Se preguntó Lee, mientras que venía, en la pantalla central, una luz roja que titilaba y se ubicaba en una posición desconocida. Calculó su ubicación y cayó en el asombro.- ¡No puede ser! ¡Marie!.- Exclamó ante la decisión que había tomado su hermana.

- ¿Qué sucede? ¿Por qué gritas?.- Inquirió May, apareciendo detrás de ella tras haber sido operada por las heridas en la Batalla de Berlín.- ¿Qué pasó con Marie?.

No tuvo respuesta, sino de que golpeó la mesa con sus puños.

- Esa idiota: ¡Ha llamado a la "Sexta Colmena".- Le dio la respuesta que estaba buscando.- ¡Voy a matarla si llegamos a perderla por su culpa!.- Juró y de ahí ordenó de que le trajeran una nave para ir en busca de la peli azul oscura.

- ¡Voy contigo!.- Se le unió la rubia.

Cuando alzaron a Marie y la esposaron, ella mostró aquella mueca burlona en su rostro contra ellos, sobre todo hacia Eila, Sanya y Doble D. No le importaba nada de lo que había hecho ni mostraba un arrepentimiento. Solo estaba allí, intacta y fresca, igual que un delincuente que era liberado por la mano corrupta de los jueces y en donde podía gozar de mayores privilegios. No le importaba si iba a la cárcel, allí seguiría mandando y cualquiera que le pusiera un dedo encima lo pagaría muy caro. Aprovechando esos momentos de "distracción", el chico de gorro negro consiguió vendar su herida y ahí eliminar todo rastro de infección producida tras el combate que tuvieron pero éste no le quitaba la mirada de encima.

- Espero que sepas muy bien de que puede, incluso, pedir la "Pena de Muerte" contra ti y tus hermanas cuando sean llevadas ante la Justicia. ¿Sabes la cifra de fallecidos que hay por todo el Mundo?.- Le inquirió Eila pero la otra no mostró ningún arrepentimiento.

- Qué me importa. Eran solo números, "Brujita".- Respondió con burla y eso la hizo enfurecer a la otra pero se contuvo gracias a Sanya.

- No eran números, sino personas con vidas, un Futuro que se perdió gracias a ti y tus hermanas con ese deseo de conquista.- Le reprochó Doble D, defendiendo a sus dos novias.

- Oh, ¿y qué sabes tú de eso?.- Preguntó Marie.- Todos ustedes son una verdadera lástima para este Mundo. ¿No saben de que nadie quiere a esta clase de Héroes?.- Señaló hacia la gente del fondo.- Ellos y todos los otros que han estado salvando los alaban porque son ignorantes, creen que ustedes son los buenos pero no es así. Los que yo estoy citando son unos farsantes que viven metiendo deseos y proyectos en la mente débil de la gente cuando la Ciencia y la Tecnología han llevado a la Humanidad hacia el progreso. No fueron la religión ni tampoco el amor. Solo el avance en los distintos campos que permitieron dominar a la Naturaleza y hasta reemplazar a Dios por el pensamiento racionalista.- Apuntó y de ahí se vieron imágenes de diversos eventos del Pasado.- Ocurrió en la Francia Revolucionaria del Siglo XVIII cuando derribaron a la Familia Real.

- La Ciencia y la Tecnología han permitido un excelente desarrollo y expansión del Hombre sobre la Naturaleza pero también se convierte, al igual que pasó con la religión, en una herramienta que, en vez de usarla como es debido, se la emplea para fines malvados e ignorantes como crear armas de destrucción masiva y declarar guerras para probar todo tipo de las mencionadas en los campos de batalla como pasó en la "Guerra de Vietnam".- Le espetó Doble D con frialdad.- Ninguno está libre de Pecado.

- ¡Jajajajaja, la Ciencia sí lo está!.- Exclamó Marie, lanzando una carcajada llena de burla.- Lo que pasa es que ni tú ni los otros lo pueden ver.- Alegó y de ahí fue retrocediendo varios pasos hacia atrás. El chico de gorro negro fue tras ella.

- ¡Quédate donde estás, Marie o dispararemos!.- Le advirtió Nazz.

- Inténtalo. No lo harán porque me necesitan viva.- Se burló la otra y de ahí extendió los brazos en posición horizontal, justo cuando el suelo crujió y de ahí emergió una inmensa "Colmena" que la salvó y llevó consigo al interior de la misma.-

- ¿Y eso?.- Señaló May hacia una misteriosa figura que se recortaba en la distancia. Lee azuzó la vista y ordenó a sus esbirros que aceleraran el paso de la nave.

- Marie...- Quedó la pelirroja sin palabras ante lo que acababa de suceder en ese lugar.

[La situación se ha complicado aún más para nuestros héroes con la aparición de la "Sexta Colmena" en las fronteras entre Suomus y Orussia junto a la llegada de las otras dos Hermanas Kanker.

¿Qué pasará?. Eso lo veremos en el capítulo que viene. Recuerden que a este "Arco VI" le quedan pocos capítulos. Serán diez en total y bien largos, así que a prepararse porque, después de éste, viene el último.

Espero que les guste, amigos. Mando saludos y agradecimientos para Matfix, Franco M. Romano y los demás seguidores.

Cuídense y buen inicio de fin de semana de mi parte, Camaradas.].