Capitulo 1

Hace 15 años atrás

Mimmi regresaba a Mako junto a Zac después de haber pasado con un tiempo con madre en el norte, pero para sorpresa de ambos; ya que encontraron a una bebé de un año flotando en una tabla de madera, y lo más raro era que no vieron a alguien más cerca, pero algunas millas náuticas si lograron encontrar una gran yate hundido

–Zac, mira –dijo Mimmi nadando donde estaba la pequeña –es una bebé –dijo mientras la observaba con detenimiento, noto que estaba algo roja por el sol, y debía estar hambrienta y deshidratada –Debemos hacer algo –en ese momento la bebé le tomo la mano y se la llevo directo a la boca –No es comida, pequeña

–Hay que llevarla a tierra firme –dijo Zac igual que preocupado que su hermana –y que un doctor la revise y tal vez buscar a sus padres

–No creo que sus padres estén vivos –dijo Mimmi muy preocupada ya que no había rastro de nadie –¿Pero crees que tu padre pueda verla?

–Creo que no le molestaría –dijo Zac mirando a la niña, no quería admitirlo frente de su hermana pero la pequeña le enternecía el corazón

–¿Y que opinas? –pregunto Zac a su padre quien era doctor, pero ahora estaba retirado

–Ella se encuentra bien –dijo el padre de Zac, mientras le pasaba un delfín de peluche a la bebe –Y la niña tuvo suerte que ambos pasaran cerca de ahí –dijo mientras le entregaba una latas de formula a Mimmi –unas horas más y la niña hubiese sido comida para algún pelicano –Pero salvo las quemaduras del sol ella esta bien –dijo el señor Blackley

–¿Y que ahora que tenemos que hacer? –Pregunto Mimmi al doctor

–Deberán cuidar nada más de esas quemaduras, y para esto tienen que usar esta pomada –dijo el Sr Blackley –Ahora debe consumir muchos líquidos

–Yo me encargo –dijo Mimmi mientras tomaba la pomada –yo cuidare de esta lindura

–¿Segura? –pregunto Zac a su hermana mayor –Porque Evie y yo podemos cuidarla

–No es necesario –dijo Mimmi ya que el instinto maternal salió a flote –No quiero causar molestias entre Evie y tú –Dijo Mimmi

–Yo los dejo para que conversen –dijo el padre de Zac

– Gracias, papá por todo –dijo Zac cerrando la puerta –¿Y como piensas cuidar de ella?

–Como las sirenas hacen con sus hijas –dijo Mimmi con una idea muy loca, pero sabía que funcionaria de todas formas –En la próxima luna llena la llevare al estanque en Mako, donde a Evie le salió cola

–¿Estás demente? –dijo Zac atonito por la descabellada idea de Mimmi –¿Y como vas a convencer al concejo de sirenas? –Recordó que cuando el callo al estanque toda la manada de Mako salió del arrecife, por un tritón

–Tendrán que aceptar –dijo Mimmi –Además Ondina ahora es la consejera de Veridia, sé que entenderá y la convencerá

–¿Y si no? –Pregunto Zac con ambos brazos cruzados y levantando a una ceja, adoraba a su hermana, pero en algunas ocasiones tendía a ser muy soñadora, y el hecho que el consejo acepte a alguien nuevo era muy complicado; sabia que al menos Ondina no confía al 100% en él, no quería saber que podían hacerle a una bebé –¿Que harás, Mimmi?

–Pues renuncio a la manada y la cuidare en tierra firme –dijo decidida

–Mimmi eso esta completamente prohibido –dijo Ondina a su amiga –Veridia jamás lo aceptaría

–Alguien debe cuidarla –dijo Mimmi convencida en que ella debía cuidar a la pequeña bebé –Y si no la aceptan me vere obligada a dejar la manada

–Pero eso va en contra de las reglas –dijo Ondina tratando de que la morena entre en razón

–Ya ha pasado varias veces y el concejo no hiso nada a excepción de Zac o Evie –dijo Mimmi –no ha sido la única que ha caído al estanque, se que va funcionar –dijo Mimmi –y es una bebé aun puede crecer como una sirena y le enseñaremos todas nuestras costumbres y cultura –dijo tratando de convencer a Ondina –Y se le enseñamos desde pequeña se mantendrá nuestro secreto que también va ser de ella

–Creo que me convenciste –dijo la rubia –pero no prometo nada, solo lo haré porque eres mi mejor amiga y no quiero que dejes la manada

–Gracias

Después de que Ondina logro convencer al consejo a aceptar a la bebe huérfana como parte de la manada; algunas de ellas se encontraban en el estanque lunar Mako para ser parte de la metamorfosis

-¿Lista? –Pregunto Ondina a Mimmi, mientras esta cargaba a la bebé –A partir de ahora ya no hay vuelta atrás

–Estamos listas –dijo Mimmi mientras veía el cráter y admiraba como la Luna se asomaba lentamente y el estanque empezaba a burbujear, esa era la señal que buscaban –Así que ella primero se sumergió al estanque y luego Zac con mucho cuidado se la paso; pero para la sorpresa de todos la niña ya estaba familiarizada con las sirenas –Hay que esperar hasta mañana para que te salga una cola como la mía –La bebé solo aplaudía con las manos y de vez en cuando quería tocar las colas de las sirenas

–Es demasiado adorable –Dijo Sirena mientras hacía caras divertidas a la niña –¿Y como la llamaremos?

–No sé –dijo Mimmi mientras jugaba en el agua con la bebé –Zac y yo la encontramos cerca del arrecife –dijo mientras le pasaba la bebé a Sirena –Mmm… no se, arrecifes, corales, Corina –dijo Mimmi mientras pensaba en un nombre –Creo que su nombre será Corina

–Es un lindo nombre –dijo Ondina que al fin había caído por el encanto de la bebé –He de admitir que es hermosa

–Lo es –dijo con una sonrisa pensando que esta metamorfosis era lo mejor para la pequeña Corina