Historias de mis hijas capítulo 3 La convención.

Ya paso el primer gran cumpleaños de su padre adoptivo, una tradición que sin duda fue toda una locura. Aun así disfruto bastante el poder decirle a alguien feliz cumpleaños papá.

Jamás conoció a su padre biológico y podría decir que su madre biológica no estuvo para ella. Pero eso es historia del pasado, ahora tiene una gran familia y no podría estar más agradecida.

Durmiendo tranquilamente en la habitación que comparte con Lacy, Lupa y Liby, Carly sueña plácidamente con una tierra de dinosaurios y transformers. Gustos poco ortodoxos para una niña de diez años.

Todas las hijas a excepción de Cristina, quien se encuentra en el campus universitario disfrutan de una mañana extrañamente tranquila para su hogar. Les gusta el tibio clima del otoño llegando puesto que sirve como una de calor invisible.

Lemy se levanta tranquilamente, ve a su lado y nota que de nuevo está durmiendo en la habitación de Liena y Lyra, siendo abrazado por la última. Debe dejar de caminar de noche.

-¿Por qué jamás duermes conmigo Lemy? Pareciera que solo quieres tener a Lyra. –Pregunta Liena tranquilamente mientras asoma su cabeza de la litera.

-No lo sé Liena. Quizá la próxima vez que camine dormido suba a tu litera para dormir contigo. –Promete Lemy cansado.

-Sí. Eso me gustaría. –Vuelve a decir Liena con felicidad mientras vuelve a su sueño.

Lemy se encoge de hombros y hace lo mismo. Acurrucándose más en los brazos de su hermana mayor.

De repente se empiezan a escuchar dos voces cantando Una es la suave y tímida voz de Loan mientras que la otra es la entusiasta voz de su padre.

-"El sol brilla en el cielo. No hay nubes a la vista. Ha dejado de llover, todos están jugando. ¿Y no sabes? Es un hermoso nuevo día hey´´ -Cantan padre e hija al unísono con entusiasmo y alegría.

Todas las hermanas y Lemy, en ese exacto segundo abren sus ojos mientras escuchan el entusiasmo de la melodía aumentar.

-´´Corriendo por la avenida, mira el sol brillando intensamente. En la ciudad, en la calles, donde una vez hubo lastima, el señor cielo azul está viviendo hey´´ -Aumentan su tonalidad mientras todas a excepción de Carly maldicen internamente.

-¿Ya tan rápido es noviembre? –Pregunta Leia triste.

-Fue noviembre desde hace diez días. –Responde Lizy frustrada tapándose los oídos.

-Oh rayos. Pensé que se les había olvidado este año. –Maldice Lyra apretando con fuerza a Lemy para liberar su molestia.

Lemy empieza a asfixiarse mientras forcejea inútilmente por su libertad.

-´´Señor cielo azul, por favor dinos ¿Por qué? ¿Tuvo que esconderse tanto? ¿Dónde nos equivocamos? Señor cielo azul. Por favor dinos ¿Por qué? ¿Tuvo que esconderse tanto? ¿Dónde nos equivocamos? "–Proceden ambos para desdén de las chicas y Lemy.

Lupa ajustando sus lentes se levanta triste. Su rostro muestra cierta irritabilidad mientras sigue escuchando la música alegre de su padre.

Liby por su parte golpea la pared mientras llora por saber lo que viene. Lacy solo suspira molesta.

-No lo entiendo. ¿Por qué papá está cantando con Loan? –Pregunta Carly de manera tímida.

-Veras Carly, cada año hay un evento de tres días en Great Lake City. –Empieza Liby cansada mientras frota sus ojos.

-Y por nuestro amor a papá tenemos que ir. –Procede Lacy mientras se pone unos tapones de oído.

-Es lo que llamamos…. –Lupa no termina de hablar puesto que señala la puerta.

Carly confundida ve la puerta. Se escuchan unos pasos entusiasmados. Arquea una ceja mientras se percata de que la canción de su padre paro de repente.

-¡Fin de semana en Michigan Comic Con! –Grita Lincoln pateando la puerta asustando únicamente a Carly. Las otras tres solo rodean los ojos con cierto hartazgo.

-¡Chicas! Es hora de irnos. –Anuncia Loan feliz.

-Viva. –Responde Leia de manera sarcástica.

Loan se encuentra dentro de la casa rodante ajustando los asientos de Lulú y Lani. Ambos bebitas ríen mientras ella les da algunas cosquillas.

Lani curiosa trata de quitarse su cinturón pero Loan la detiene y pone un rostro amable.

-No Lani, si te quitas el cinturón puedes salir lastimada. –Reprocha la mayor con dulzura mientras le revuelve el cabello.

Lani en respuesta le saca la lengua y escupe en la cara. Causando la risa de Lulú pero para sorpresa de ambas infantes Loan no parece desanimada.

-Que linda. Alguien usara el chupón por todo el viaje. –Loan saca un chupón y se lo mete directo en la boca con cierta brusquedad.

Lani ve que en la sonrisa de Loan hay cierta sensación de rencor. Asustada solo decide chupar sin molestar a Loan. Lulú se ríe de eso.

Carly observa que Loan se encuentra más feliz de lo usual, generalmente le sonríe a su familia pero siempre está temblando como un chihuahua y voltea nerviosamente a todos lados.

¿Qué tendrá esta época de especial que puede calmar sus ataques de nervios? ¿Habrá tomado una sobredosis de calmantes?

-Loan te ves más radiante esta mañana. Es genial. –Adula Carly tímidamente.

-Bueno gracias hermanita, es gracias a que esta es de las pocas épocas del año en las que puedo expresarme libremente, sin el constante miedo de que la gente me esté observando y juzgando por mi apariencia, actitud, descendencia y el hecho de que perdí mi virginidad con un tigre. Donde todos esos jurados me marginaran de la sociedad y al final ustedes terminaran dejándome sola, quedando así a mi suerte y terminando muerta en mi departamento sin que nadie jamás se allá dado cuenta. –Responde Loan de manera aterrada mientras se abraza a sí misma.

Carly solo pone una mirada perturbada, quedando callada ante las palabras de Loan. No sabe porque siente el temor de heredar esa actitud incluso si no tienen lazos sanguíneos.

-También estoy tomando este nuevo medicamento de pastillas cannabis. Quizá eso tenga cierta relación. –Añade Loan despreocupada.

-Espera vuelve a decir lo del tigre. –Pide Carly insegura.

-¡Suban todos perras! –Grita Lincoln entusiasta mientras entra con varias bolsas de lavandería cerradas.

-¡Oh vaya! Papá llamándonos perras, eso ayudara a nuestro autoestima. –Comenta Lupa de manera cínica.

-A mí me gustan las perras. Yo quisiera ser una bóxer. –Dice Lacy ignorante al insulto.

Liby entrando solo golpea su frente decepcionada de su hermana.

-Yo también adoro a las perras. –Comenta Lemy con cierto tono lascivo en su voz.

Lyra escuchando eso frunce el ceño y le da a Lemy una palmada con fuerza directo en su nuca haciéndolo gritar.

-Yo quisiera ser un bulldog, son tan adorables, además son toros y perros al mismo tiempo. ¿Saben de qué hablo no? –Bromea Liena feliz.

-Liena eso no tiene sentido. –Comenta Leia confundida.

-De hecho me sodpdende que sepa como se dice todo en inglés y que haya hecho esa compadación. –Confiesa Lizy impresionada.

-Pero todo en ingles se dice ´´All´´ -Corrige Lemy cínicamente.

-Es cierto Liz, debes aprender las palabras. –Añade Liena preocupada por el aprendizaje de su hermanita.

-¡Saben que no puedo pdonunciad esa letda! –Responde Lizy irritada.

-Descuida Lizy pronto tendrás una buena hilera de dientes de leche y hablaras con toda propiedad. ¿No te emociona eso mi pequeña genio? –Pregunta Lincoln entusiasmado mientras le habla en un todo adorable y le hace cosquillas a su hija.

Lizy se ríe por eso mientras Lincoln no para de abrazarla. Quizá no le guste viajar grandes distancias pero vaya que le encanta ver como su padre está feliz y la mima de tal manera. Si fuera por ella lo acompañaría a cada evento que quiera con tal de que siga abrazándola así.

Leia tiene cierta envidia de eso, incluso con eso dicho no puede evitar sentir cierta ternura al ver la imagen de su hermanita y su padre así de cariñosos.

Liby es la que toma la foto de ambos. De seguro será algo que agradecerá cuando vea su galería semanas después.

-Papá. ¿Dónde están nuestras madres? –Pregunta Carly confundida por no ver a ninguna de las hermanas de Lincoln.

-Bueno amor yo no tengo poder alguno sobre ellas por lo que deciden ir a la playa cada año, fingen que se olvidan de la fecha pero sé que mienten. –Responde Lincoln con cierto desinterés a esa actitud de las chicas.

-Vaya eso es grosero. –Comenta Carly indignada.

-Quizá pero algo que aprendí es que no puedo forzarlas a hacer algo que no quieren… Además vaya que me lo recompensan cuando vuelven. –Sonríe Lincoln de manera satisfactoria dejando asqueadas a sus hijas e hijo.

-Bueno si no puedes obligarnos a hacer algo que no queremos supongo que…

-Lyra siéntate en tu asiento o son dos meses sin clases de música. –Amenaza Lincoln tranquilo mientras camina al asiento del conductor dejando a Lizy en el sillón de la casa rodante.

Lyra frunce el ceño y en silencio se sienta al lado de Lizy. Suspira cansadamente mientras se resigna a otro viaje. Quizá saque algo bueno de este, como algunos discos de música instrumental, después de todo muchas de esas cosas que su padre admira con obsesión tienen buena banda sonora.

Lizy ve con pena a Lyra, es obvio que ella no disfruta de ese tipo de eventos pero igual se tiene que aguantar a ir. Vaya hija que es.

Lincoln ve el rostro amargado de Lyra a través del retrovisor. Nota que es el mismo rostro que él tenía cuando sus hermanas lo llevaban de compras y obligaban a probarse ropa que no quería.

¿Qué clase de padre seria de hacerle eso mismo a Lyra? Quiere que todas sus hijas estén con él pero ¿A qué costo si significa hacer miserables a algunas de ellas?

Suspira lamentándose mientras abre la puerta automática de la casa llamando la atención de las chicas.

-Tienes razón hija, lamento hacerte pasar por esto y si quieres salir adelante. Solo quería pasar tiempo con ustedes antes de que se vayan de mi vida. –Confiesa Lincoln apenado esperando a que su hija salga de la casa rodante.

Lyra ve el rostro triste de Lincoln sintiéndose mal. El sentimiento aumenta al ver los rostros de sus hermanas reprochándola. La pena no tarda en invadir su corazón mientras baja la mirada tratando de ocultar su vergüenza.

Recuerda un poco de esos conciertos de música clásica que su madre tenía que aguantar con mala actitud mientras ella sonreía al verlos. Uno de esos gratos recuerdos es el hecho de que su padre estaba allí sonriéndole, siendo feliz solo porque ella lo es.

¿Qué clase de hija seria de no hacer lo mismo por él?

-Sabes… La comida allí no esta tan mal, adoro la comida de convención y no me la perdería por nada. –Confiesa Lyra algo apenada mientras ve tímidamente a su padre.

-Gracias cariño, te prometo que valdrá la pena. –Le asegura Lincoln con leve alegría.

Lyra asiente contenta. Al final de cuenta solo serán tres días, es cosa de nada.

-¡Ahora vamos a Great Lake! –Grita Lincoln cambiando su actitud de manera repentina y acelerando la camioneta asustando a todas las chicas menos a Loan.

-¡La puerta! –Gritan todas al unísono con mucho pavor.

….

Tras unas largar horas de viaje finalmente llegan al estacionamiento del centro de convenciones de Great Lake City, varios autos y autobuses se encuentran estacionados en sus respectivos lugares mientras gente disfrazada camina hacia el interior.

Para Lincoln nada podría ser más genial. El poder pasar un fin de semana entero rodeado de tantos invitados famosos, artistas y la oportunidad de comprar figuras coleccionables. Todo eso rodeado de las personas que más ama.

Carly se encuentra gratamente sorprendida, jamás había ido a una convención y el ver a tanta gente acumulada simplemente le es impresionante. Puede sentir su corazón latir con fuerza mientras desea ver lo que hay adentro.

-¿Sientes esa necesidad de entrar, no es así? –Pregunta Loan entusiasmada hacia Carly.

Carly muda por lo que ve asiente de manera veloz mientras sonríe. Siente el brazo de Loan tocar su hombro y ella se agacha para mirarla a los ojos.

-Bienvenida a esta tradición Carly. Espero que la disfrutes tanto como yo. –Dice Loan esperanzada mientras abraza a su hermanita.

Carly llorando de alegría le corresponde a su hermana, siente como el amor de Loan es tan cálido y sincero, algo en ella le recuerda a aquel hermano que una vez tuvo, no solo por su apariencia sino porque enserio ambos parecen tener la misma vibra. No es igual a las demás, Loan se siente idéntica a él.

-Amor estoy seguro de que la pasaras de maravilla. –Promete Lincoln acariciándole el cabello a su hija.

Carly le toma la mano esperando que el momento se prolongue un poco más.

-¡Muy bien chicas es hora del cosplay! –Grita Lincoln entusiasta mientras toma las bolsas que trajo de su casa.

-Si. –Dicen todas sus hijas a excepción de Loan y Carly, fingiendo entusiasmo.

-¡Para mis tres hijas mayores a excepción de Cristina! ¡Loan, Liena y Lyra serán las aves de rapiña! –Anuncia Lincoln entusiasta mientras viste a sus hijas.

Loan queda de ´´Huntress´´, Liena se vuelve canario negro y Lyra finalmente de batichica.

Lyra nota que está usando el traje de tonos negros y no el de tonos morados. Pone una mirada triste, al menos hubiera preferido usar su color favorito.

-Me siento sexy. –Comenta Liena feliz.

-Y por eso Loan y Lyra te acompañaran todo el día Liena. –Asegura Lincoln de manera protectora.

Ahora voltea con entusiasmo hacia el trio de hijas que comparten el medio de la familia.

-¿Qué será este año? –Pregunta Liby intrigada.

-Algo ridículo de seguro. –Responde Lupa cínicamente.

-¡Para mis hijas les doy a los tres miembros perpetuos del escuadrón suicida! –Anuncia Lincoln entusiasmado.

Viste a Lupa de Harley Quinn de la serie animada original, Lacy es vestida de Capitán bumerang y Liby de Deadshot.

-Al menos es la versión que tiene dignidad. –Comenta Lupa acomodando su traje.

-¡Genial tengo bumerangs! –Grita Lacy feliz.

-Afortunada. Yo solo tengo un ridículo brazal que dispara balas. –Responde Liby inconforme.

-¡A mi único niño y mi pequeña princesita les daré algo respectivo a ustedes! ¡Lemy tú seras quien trajo equilibrio a la fuerza y Leia serás la princesa por la cual te llame así! Dato curioso te concebí viendo la película. –Anuncia Lincoln entusiasta vistiendo a Lemy de Luke como caballero Jedi y a Leia con el traje de Leia como princesa.

-Al menos hubieras usado el traje del castillo de Java. –Dice Leia inconforme.

-Claro que no vestiré a mi dulce princesa de esa manera. Ese traje lo uso con tu madre. –Confiesa Lincoln desinteresado.

-No necesitaba saber eso. –Responde Leia asqueada.

-¿No haremos la escena del imperio contrataca verdad? –Pregunta Lemy intranquilo.

-No, solo yo hago eso. –Asegura su padre feliz. - ¡Para mis tres pequeñas bebitas! ¡Ustedes se vestirán como los Pokemon iniciales de la mejor generación!

Lincoln viste a Lizy de un Piplup, Lulú de Turtwig y Lani de Chimchar.

Todos los presentes exclaman de ternura al verlas vestidas de esa manera tan adorable. Las tres bebitas comparten miradas de molestia combinadas con algo de cinismo.

-¡Finalmente para mi pequeña Carly! ¡Tú y yo iremos vestidos de un increíble dúo de padre e hija adoptivos! –Asegura Lincoln feliz.

-¿Batman y Robin? –Pregunta Carly entusiasmada.

-Cerca pero no. ¡Tú y yo seremos el rey Bartra y Elizabeth Liones de los siete pecados capitales! –Grita Lincoln al ponerle el disfraz a Carly y también ponerse el suyo.

-Aproveche que mi cabello es igual al de un anciano y compre esta barba falsa. Ahora chicas. ¡Disfrutemos un fin de semana de ñoñerías!

-¡Si! –Gritan Loan y Carly entusiasmadas.

Leia y Lemy se encuentran caminando en los pasillos de exhibiciones. Leia puede observar que hay distintos tipos de peluches de todo tamaño y forma. Uno de unicornio le parece adorable ya que es tan grande como Loan, además de blanco con rosa, sus colores favoritos.

Ella escucha las risas de algunas chicas, voltea y nota que algunas se están tomando fotos con Lemy quien sonríe de manera nerviosa.

-Eres adorable muchacho. Esto ira directo a mi galería. –Dice una chica vestida del Androide dieciocho poniendo sus pechos muy cerca del rostro de Lemy.

-Bueno es…. Yo bueno… Debe ser el poder de la fuerza. –Responde el joven con una risa torpe.

Leia ríe por como Lemy está descubriendo poco a poco su hombría. Puede ver como el rojo invade cada centímetro del rostro de su hermano.

Finalmente las chicas se van mientras se despiden cariñosamente de Lemy, quien solo agita la mano con entusiasmo. Su hermanita se le acerca, puede apreciar la mirada coqueta que ella le dedica a su persona.

Se confunde por eso. Por un segundo juraría que ella quiere repetir la escena del imperio contrataca pero sabe que ella no tiene edad para pensar eso.

-¿Qué? –Pregunta Lemy confundido.

-Entonces... ¿Quedarte callado y mover la mano es tu estrategia de ligue? –Pregunta Leia de manera burlona.

-Oye me tomaron por sorpresa. De saber que ellas venían conmigo hubiera usado mis habilidades para el romance. –Presume Lemy con ego en su voz.

-¿No tienes nada verdad? –Pregunta Leia seriamente.

-No realmente, es probable que me case con alguna de ustedes por no tener novia. –Responde Lemy apenado.

-Uno, que sea con Carly por favor. Dos… –Leia no termina la frase por golpear en el estómago a su hermano.

El pequeño solo gime de dolor mientras se recuesta unos segundos en posición fetal.

-Entonces fue cuando vemos el trasfondo del príncipe Vekar y su sentimiento de rencor hacia el príncipe Vrak, donde nos damos cuenta que la historia entre ambos pudo ser mejor aprovechada. Es decir ¿No hubiera sido mejor ver como se forjo tal rivalidad entre hermanos? –Pregunta un hombre de saco café con sombrero del mismo color y lentes gruesos.

Lupa solo lo ve con desinterés mientras sostiene algunos billetes. Su rostro expresa frustración mientras siente que el ojo izquierdo le tiembla.

-No lo entiendo. Si Damaras era el guerrero más fuerte del universo ¿Cómo es que lo vencieron tan solo dos rangers? –Pregunta Lacy confundida.

-¿Y no hubiera sido más fácil simplemente usar todos los megazord en lugar de uno? –Añade Liby igual de confundida.

-Solo véndame el maldito casco por favor. –Suplica Lupa harta de una plática de media hora sobre Power rangers.

-Está bien niñita serán treintaiocho dólares. –Cobra el cajero.

-Muchas gracias. –Dice Lupa irritada.

-¿Oiga quién es este personaje? –Pregunta Lacy mostrando una portada de comic.

-¿No sabes quién es Lord Drakkon? Oh chicas tenemos mucho de qué hablar.

Liby y Lacy se acercan interesadas para escuchar al sujeto, Lupa por su parte hace una mueca de molestia, se pone el casco y grita desesperadamente.

Una estatua del dios nórdico que comparte el nombre con su hermano. Es lo que Carly admira con cierta nostalgia en aquel puesto que promocionaba una nueva historieta que aborda aquellos temas. En este caso Loki usa una armadura dorada que impone respeto, de esta resaltan hombreras y rodilleras verdes.

Por la publicidad puede casi asegurar que él y Thor serán los protagonistas de la serie. Espera leerla con ansias.

-¿Te gusta esta exhibición hija? –Pregunta Lincoln alegre poniéndose al lado de su hija.

-La adoro. Siempre eh sentido fascinación por el nombre Loki, quizá por eso es mi dios favorito. –Confiesa Carly fascinada por la estatua.

A Lincoln ese nombre le trae malos recuerdos, unos sobre una pesadilla de la niñez y otros sobre una pesadilla real. Pero es un simple nombre, algo que otra persona puede tener y significaría otra cosa.

Al notar la mirada feliz de Carly, Lincoln siente cierto alivio en el nombre; Quizá el próximo año pueda vestirse de Odin y a ella de Loki, de seguro lo adoraría.

-Disculpe, quiero el primer volumen por favor. –Pide Lincoln con calma.

-Enseguida.

Carly ve con asombro a su padre quien solo se mantiene sonriente por poder comprarle un lindo recuerdo a su hija. Su corazón se acelera por la gratitud que siente y lo abraza para demostrársela.

-¡Papá! Van a anunciar una nueva línea de transformers en la sala B. –Anuncia una entusiasta Loan a su padre.

-¡Transformers! –Gritan padre e hija con emoción mientras se disponen a correr hacia la sala.

El vendedor solo mantiene el volumen en la mano mientras cuenta los segundos para que se den cuenta que los olvidaron. A paso torpe la pequeña rubia vuelve por ellos.

Lyra se encuentra alimentando a las tres pequeñas mientras escucha como los chicos quieren tomarse fotos únicamente con Liena. Algunos vestidos de flecha verde incluso bromean que los personajes solían salir en las historietas. Se burla de esos sujetos, es el cliché más viejo de todos los ligues de convención.

-¿No se quieren tomar fotos con mi hermana Lyra? –Pregunta Liena inocentemente.

Los chicos ven como Lyra tiene una cara feliz mientras alimenta a sus hermanitas. Ponen una cara de terror y cruzan miradas nerviosas.

-¡Oh no! Mi teléfono murió… Debo organizarle un funeral. –Se excusa uno de ellos y se va rápidamente mientras los demás lo siguen.

Liena ve eso confundida. Rascándose la cabeza trata de entender el cambio total de personalidad tan repentino.

-No lo pienses mucho Liena, lo que la vida me ha enseñado es que los bebés son una imán de chicas pero un repelente de chicos. –Asegura Lyra decepcionada mientras le da palmadas en la espalda a su amiga.

Lulú y Lani empiezan a llorar exigiéndole más comida. Lyra voltea y nota que Lizy ya no está en la carriola. Sorprendida corre hacia ellas buscando por todos lados a su hermanita, solo encuentra una nota mal escrita.

-Me fui a explorar los pasillos. Vuelvo más tarde. –Lee Lyra molesta.

Llena de rabia arruga el papel mientras de alguna manera sus dientes toman una forma afilada.

-¡Lizy! –Grita la chica molesta llamando la atención de varias personas presentes.

Lizy bebiendo una soda se encuentra sentada jugando con una consola portátil contra otros tres adolescentes.

Su rostro muestra desinterés mientras los demás se notan frustrados. Ella bosteza con algo de sueño y oprime una serie de botones. Levanta su puño y espera unos segundos para abrirlo lentamente fingiendo un sonido de explosión, haciendo que los contrincantes se quejen por la derrota.

-Vaya la pequeña es buena. Otra partida por favor. –Suplica uno de los chicos.

-Lo lamento Snot. Se me agota la batedía, pedo con gusto te paso mi clave de amiga pada jugad en línea. –Dice Lizy sonriendo levemente.

-No puedo creer que ni siquiera llegaste a tener un porcentaje de daño tan alto. Jugamos una partida de seis vidas. –Añade otro impresionado.

-No es tan incdeible, Steve. Solo fue cuestión de análisis de movimiento, pdeevención a base de compodtamiento y buenos deflejos. Cosa de niños. –Presume la pequeña rubia con egocéntrica.

Los tres nerds se ven directamente pensando en que decirle a Lizy. Es decir jamás habían visto a alguien de tal habilidad a tan joven edad, definitivamente la necesitan.

-Oye. En unas semanas se viene un torneo de videojuegos y nuestro amigo Barry no podrá asistir. ¿Te nos unes? –Pregunta Steve entusiasta.

-Viejo solo tengo tdes años. No puedo ni salid al patio sin compañía. –Responde Lizy decepcionada mientras se levanta.

Ella ajusta su gorra, se despide amablemente y pasa a retirarse a explorar la convención.

El último nerd solo habla en japonés con un tono histérico. Se nota la decepción en su voz.

-Lo sé Toshi, ni siquiera las niñas nos quieren… Pero debemos ganar ese torneo, sigámosla para encontrar a su padre y convencerlo de que venga con nosotros. –Ordena Steve entusiasmado mientras él y Toshi caminan hacia donde Lizy se fue.

-¿Steve, no crees que se vería raro seguir a una niña? –Pregunta Snot algo incómodo.

-Descuida, para eso tenemos mascaras en nuestras mochilas. –Responde Steve tranquilo.

-Creo que no estás viendo el panorama entero de la situación.

-¡Escanor es león del orgullo, Diane la serpiente de la envidia, Ban el zorro de la avaricia, King el oso de la pereza, Gowther la cabra de la lujuria, Merlín el jabalí de la gula y Meliodas el dragón de la ira! –Grita Lincoln con autoridad hacia un grupo de nerds.

-¡Correcto! –Anuncia Loan fungiendo como jueza.

-¡Bien hecho papi! –Dice Carly animando a Lincoln.

-Muy bien esta no te la sabes. ¿Qué transformer fue confirmado en la quinta película de la saga dirigida por Michael Bay pero jamás apareció?-Pregunta el nerd de manera retadora.

-Es fácil viejo. Cyclonus, incluso hubo un arte oficial de él. –Responde Lincoln de manera prepotente.

Todos revisan sus teléfonos en busca de información.

-¡Correcto de nuevo! ¡Lincoln Loud alías el mejor padre de todos, gana! –Anuncia Loan aplaudiendo.

Lincoln solo pone una pose de victoria mientras la gente le aplaude por su victoria en el duelo de preguntas en el que se metió. Incluso sabiendo que ese conocimiento en la vida profesional es inútil aún está orgulloso de haberlo resguardado tantos años, aunque eso signifique haber eliminado la aritmética de su memoria.

Con admiración recibe un poster, un juguete y felicitaciones de una horda de nerds. Para él es una enorme victoria.

-No entiendo como nuestras madres jamás vienen a esto. ¡Es fabuloso ¡ -Asegura Carly feliz.

-Bueno es que ellas no entienden la complejidad e importancia del mundo de las historietas. Son bastante estiradas en esos temas. –Revela Loan sin perder la sonrisa mientras admira la danza de la victoria de su padre.

Sin duda el haber crecido con él y Cristina mientras recibe más y más hermanas fue algo que siempre agradecerá, los recuerdos de como él y su madre la sacaban al parque pero aún más importante, aquellas noches apasionantes donde padre e hija se quedaban en vela viendo películas de acción y súper héroes donde ocasionalmente venía su madre solo para hacerles compañía.

Bellos recuerdos de la niñez y adolescencia que jamás querrá perder. Siempre se preguntó ¿Cómo Cristina no disfrutaba de cosas así? Claro que de vez en cuando veía una de esas películas pero jamás fue la más entusiasta ante el género, incluso creciendo juntas y unidas salieron tan diferentes.

-Bien chicas. Todavía nos quedan unas cuantas horas. ¿Vamos a ver exhibiciones? –Sugiere Lincoln tranquilamente mientras le sonríe a sus dos hijas.

-Creo que hay una exhibición de personajes femeninos en la ala este. –Dice Carly tranquilamente.

Los tres se miran unos segundos de manera callada. Parpadean lentamente en un silencio ligeramente incomodo; Así de la nada ese silencio se rompe en un montón de carcajadas entre los tres.

-Si claro. Porque el género es ´´Importante´´ en el desarrollo de un personaje. –Dice Loan sarcásticamente mientras hace comillas.

-Vamos chicas. Creo que la exposición de transformers aún no acaba. –Dice Lincoln contento mientras toma de la mano a Carly.

-Usted es el autor de ´´La llamada´´ Adoro ese libro. –Confiesa Liena con admiración.

Detrás de ella se encuentra una desesperada Lyra, sosteniendo la carriola de sus dos hermanitas.

Lyra suspira molesta preguntándose el cómo no pudo percatarse de que Lizy ya no estaba en la carriola. Debe estar muy asustada en estos momentos, rodeada de tantos desconocidos y cosas que no entiende.

Mientras eso piensa Lyra, Lizy se encuentra hablando entusiasmada con un vendedor de historietas.

-¿Dice que este peluche de ´´Reptile´´ tamaño real solo vale cuarenta dólares? –Pregunta Lizy entusiasta.

-Así es joven…. –Antes de terminar de hablar recibe unos billetes arrugados en la cara y ve como la niña alegre abraza el peluche y se dirige a algún otro pasillo.

Toshi vuelve a hablar en japonés indicando el peluche que compro Lizy.

-Lo sé Toshi, Mortal Kombat es genial pero ahora tenemos que seguir a esa niña. –Responde Steve desinteresado.

-Enserio creo que no es la mejor idea seguir niñas pequeñas, Steve. –Añade Snot preocupado.

-Debe tener mucho miedo. –Afirma Lyra preocupada ignorante de la situación de su hermanita.

-Lyra hola. ¿Qué hacen aquí? -Pregunta Lemy, llegando con Leia.

-Lemy gracias al cielo. Necesito que busques a Lizy por mí. –Pide Lyra desesperada.

-¿Lyra perdiste otro bebé? –Cuestiona su hermano menor decepcionado de ella.

-Si ya sé que perdí a Leia una vez pero esto es completamente diferente. –Dice Lyra frustrada mientras recuerdos incomodos entran a su memoria.

-¿Qué cosa? –Pregunta Leia sorprendida.

-¡Oh vamos Leia! Tambien te deje caer de cabeza una vez, no es nada nuevo. –Afirma Lyra enojada.

Leia, callada y con una cara de confusión solo se rasca la cabeza en silencio.

-Bien Lyra, arreglare tu desastre de nuevo. –Responde Lemy mientras toma a Leia de la mano saliendo en búsqueda de Lizy.

Mientras Lyra ve desesperada como sus hermanos se alejan, Liena sigue conversando con el autor quien se encuentra algo desesperado.

-Y enserio adore esa escena donde violas a una niña sin razón aparente. Fue un despropósito total pero divertido de leer. –Termina de contar Liena alegre.

-¿Por qué todos hablan de esa escena? –Se pregunta el escritor frotándose la cabeza.

-Tambien me gusto lo de la bebé asesina. ¿A qué se debió eso? –Interroga Liena con inocencia.

-Era simbólico y significaba…. Cosas. –Responde el escritor sin ninguna otra excusa mientras Liena solo sigue hablando de la novela.

Por primera vez en la convención Lupa se encuentra genuinamente alegre. Tomándose fotos en una exposición de zombies, entre ellas también se toma fotos con figuras tamaño real de los sobrevivientes.

-¡Lacy dame tu dinero! Necesito comprar una réplica del bate Lucille. –Ordena Lupa de manera autoritaria.

-Lo siento hermana. Mi dinero se fue en firmas de autógrafos. –Responde Lacy apenada.

Lupa decepcionada voltea a Liby de manera suplicante. Ella también le niega con la cabeza con una mirada triste.

-¡No! –Grita la chica de manera desgarradora, arrodillándose en el suelo y volteando al aire.

Liby y Lacy confundidas voltean hacia el techo pensando que Lupa le grita a algo allí. Las dos no ven nada y comparten miradas algo incomodas hacia Lupa.

Lizy caminando con su peluche de Reptile, se topa frente a la sala de exhibiciones donde su padre y hermanas salen tranquilas.

-¿Liz? –Pregunta Loan asombrada.

-Rayos Lyra volvió a perder a otro bebé. –Dice Lincoln decepcionado.

-¡Allí estas! Lyra me debe una muy grande por encontrarte. Hola papá. –Dice Lemy ignorante a la situación y toma a Lizy para llevársela.

Leia con seriedad detiene a Lemy de irse, evitando así que se pierdan de la vista de su padre.

-Bueno supongo que ya han pasado algunas horas. Deberíamos ir a la casa rodante para descansar por hoy. –Dice Lincoln mientras toma a la menor empezando a mecerla.

-¡Señor! Quisiéramos que nos preste a su hija el próximo mes. –Pide Steve llegando a escena.

Sus dos amigos y la familia Loud lo ven con una cara extraña pero el muchacho no parece percatarse de eso.

-Enserio debes escucharte hablar viejo. –Dice Snot decepcionado.

-Espera. Creo que tengo gas pimienta en mi bolsillo. –Añade Leia mientras inspecciona el traje.

-¿Exactamente para qué? –Interroga Lincoln de manera sobre protectora. Asustando a los chicos e incluso a sus hijas.

-Para un torneo de videojuegos, su hija seria la pieza fundamental en el equipo. Creo que lo había dejado en claro. –Explica Steve desesperado.

-¡Ja! ¿Lizy? Ella sabe jugar gracias a mí. –Afirma Lincoln orgulloso.

-No lo sé, un hombre mayor en un torneo con adolescentes se vería bastante mal. –Asegura Steve dudando.

-¿Enserio? –Preguntan Snot y Toshi al mismo tiempo con cierto enojo en su voz.

-¡Papá, necesito más dinero! –Grita Lupa corriendo con desesperación siendo seguida por Liby y Lacy.

-¡Lizy! –Lyra gritando corre hacia su hermanita desesperada mientras Liena tranquilamente llega con la carriola de las niñas.

Los tres nerds asombrados ven la enorme cantidad de hijas que el señor tiene. Con la boca abierta analizan los rasgos físicos de cada una de ellas, notando que es posible que algunas de ellas provengan de diferentes madres.

-Olvide el torneo de videojuegos. Señor enséñenos todo lo que sepa sobre conseguir pareja. –Suplica Steve arrodillándose.

Sus otros dos amigos se ven entre sí y hacen exactamente lo mismo mirando de manera esperanzada a Lincoln.

Lincoln no sabe si sentirse alagado o perturbado por la petición de esos chicos. ¿Qué clase de hombre mayor les daría consejos sobre citas a adolescentes que no son sus hijos?

-Bueno… Si están aquí mañana quizá pueda decirles una que otra cosa… Quizá lo básico de como practicar propuestas… Supongo. –Dice Lincoln pensativo a que les podría decir.

-¿Podríamos tener chicas de practica? –Pregunta Snot intranquilo.

-Claro… Solo que no mis hijas. –Responde Lincoln poniendo una mirada perturbadora asustando a los chicos de nuevo.

Ya siendo de noche Lincoln ve como sus hijas e hijo duermen tranquilamente en sus lugares correspondientes de la casa rodante. Feliz porque pudo pasar otro año con ellas y él. Disfrutando así una buena convención.

-Buenas noches papi. Ojala hagamos esto más seguido. –Dice Carly con los ojos cerrados.

Lincoln solo suspira con una sonrisa pacifica mientras le da un beso de buenas noches a Carly. Le encanta el hecho de que ella haya disfrutado un momento tan importante para él, jamás creyó tener otra hija además de Loan que disfrute este tipo de eventos; En definitivo Carly es su hija y nada podrá cambiar eso.

-Papi. –Llama Lizy jalando el pantalón de su padre.

Lincoln sonriente la levanta mientras juega un poco con su cabello.

-¿Qué pasa amor? –Pregunta el hombre con serenidad.

-¿Enserio le enseñadas a esos zoquetes como ligad? –Interroga Lizy confundida.

-Bueno Liz, se ven como buenos chicos y era eso o acompañarlos a un torneo de videojuegos. Creo que se vería menos raro lo primero. –Responde Lincoln tranquilo.

-Pedo ellos me quedían a mí. –Dice Lizy seria.

-Vamos hija. Sabes que de verme jugar me hubieran deseado. –Responde su padre fingiendo una risa.

-Papi, sabemos que soy mejod que tú. –Asegura Lizy sin perder la seriedad.

Lincoln ríe por eso mientras pone a Lizy en el suelo y la ve con una mirada tranquila, de nuevo acomoda el cabello de su hija mientras niega con la cabeza.

-Te reto a un juego. –Lincoln seriamente la desafía mientras saca una consola portatil.

Lizy solo sonríe y saca su propia consola, poniendo así una mirada retadora hacia su padre.

Notas

Sin notas esta vez. Solo una tierna historia de experiencia de convenciones.

Dicho esto yo soy PenguinArrow alías un crítico más y nos leemos pronto.