CAP 4

BAJO PRESIÓN

Sakura pasó todo el resto de la tarde tratando de asimilar la mayor información de parte de Rika, cada vez le agradaba más y se veía tan linda con su embarazo, pero también parecía estar pasando trabajos ya que según le comentaba estaba a poco tiempo de tener a su bebé.

-Bueno, Sakura – la castaña le había pedido que la llamara por su nombre -como puedes ver esta área es muy muy importante, y requiere la mejor actitud y mucha paciencia… Shaoran no es fácil, pero es un hombre generoso y atento.

La castaña rodó los ojos – Si tú lo dices…

Y en respuesta Rika sonrió suavemente – ¿Una mala primera impresión?

-Yo no diría primera… Más bien – hizo cálculos en su mente – ¿una… cuarta?

-¿Conocías a Shaoran de antes?

-Digamos que ha sido una serie de eventos desafortunados

-Ya veo…Pero no te dejes llevar por eso, si te predispones será todavía más difícil. Te propongo algo; trata de iniciar de nuevo, no sé lo que pasó entre ustedes y no intentaré averiguarlo, pero ya de por sí tendrás un trabajo complejo como para añadirle malas relaciones con tu jefe.

-Tienes razón, es que… Bueno, he tratado de disculparme con él por una serie de… Malos entendidos, ¡pero es – se estremeció – insoportable!

Rika sonrió – Oh si, puede llegar a serlo, pero por ahora, lo mejor es que descanses, te espero mañana temprano, ¿te parece?

-Muchas gracias señora Terada

-Rika, estamos en confianza – dijo la amable mujer guiñándole un ojo.

-Está bien, Rika. Pero te espero para que salgamos juntas.

-Espérame un momento hablaré con Shaoran para ver si necesita algo más.

La mujer avanzó lentamente hacia la oficina de su jefe para avisar de su salida y poco tiempo después salió, tomó sus cosas y salió con Sakura, no mucho tiempo después lo hizo Shaoran sin dejar de pensar que en un par de días ya no vería a su fiel asistente sino a la muchachita torpe que su padre le había impuesto. Debía hablar con él, por el bien de esa niñita lo mejor era que la reubicaran, pero se acercó a la oficina y ya no lo encontró allí y pensar en ir hasta la casa de sus padres lo agobiaba; amaba a su familia, pero no era muy fácil descansar, así que esa conversación tendría que esperar hasta la mañana.

Sakura y Rika salieron del edificio conversando, Sakura alcanzó a ver a Yukito a lo lejos pero vio que estaba acompañado de una mujer quien le acariciaba el brazo y él también se veía muy a gusto, pero le restó importancia ya que justamente una de las características de Yukito era su amabilidad con quienes lo rodeaban

Cuando estuvieron frente a frente, alcanzó a notar que Rika le lanzó una mirada significativa a su prospecto amoroso y eso sí que le causo sospecha.

-Hola – Saludó ella con una bella sonrisa

-Sakura… pensé que ya te habías ido, estaba por llamarte para ir a celebrar. Rika, que gusto verte, te ves hermosa.

-Muchas gracias Tsukishiro

-Cuanto tiempo para el feliz suceso? - Preguntó Yukito, pero Sakura seguía observando a Rika quien se veía prevenida.

-Casi 3 semanas – respondió acariciando su vientre y su expresión cambió de inmediato, así que Sakura atribuyó esos cambios al estado de su compañera. – Bueno, yo los dejo, mi esposo me está esperando

-¿Desea que la acompañemos?

-No es necesario, allí viene… Que tengan buena noche, nos veremos temprano Sakura – se despidió de ambos y salió en busca de un hombre alto que se iba acercando.

-Y bueno… ¿Qué tienes planeado para celebrar?

-Hoy se realizará un maravilloso concierto al aire libre en el parque Ueno, logré conseguir entradas para una sección especial, sé que te encantará

-Me parece una magnífica idea… ¿Podría ir al apartamento a ponerme algo más cómodo?

-Claro que sí, si lo deseas podemos encontrarnos allá en un par de horas

-Me parece perfecto.

-O si quieres, puedo acompañarte.

-¿No te molesta?

-Para nada – respondió él tomando su mano, Sakura se sintió arrebolada pero feliz con este pequeño contacto, así que salieron en busca de un taxi que los transportara al apartamento de Touya

Shaoran se sentía muy molesto todavía, la imposición de su padre respecto a la persona que le asistiría en sus labores, era por demás inconveniente, ¿de dónde había sacado su padre que esa niña atolondrada podría con un trabajo tan serio?

Aunque para ser justo… Ya no se veía como aquel día en el avión o en el aeropuerto, su apariencia era más profesional y estilizada, pero eso no significaba nada, su personalidad o capacidades no eran determinadas por su apariencia… Bastaba ver cómo se había distraído cuando él les estaba hablando y explicando sus asignaciones, no se podía imaginar cómo sería cuando tuviera reuniones con personas extranjeras y no pudiera seguir el hilo del asunto. Tenía que hablar con su padre y explicarle que esa muchacha estaría mejor en otra área, porque él, se encargaría de hacerle la vida imposible si no era así.

Entró decidido a la oficina de su padre que se ubicaba en el piso superior, debía hablar con él y revertir el error que se había cometido pero no lo encontró, seguramente había salido temprano; observó su reloj y sopesó sus opciones, podría ir a casa de sus padres y zanjar esa situación de inmediato, pero estaba cansado y era tarde… Tendría que dejarlo para otro día, aprovecharía esa noche para descansar adecuadamente, pronto dejaría de tener a Rika para apoyarlo y no sabía de qué forma lo afectaría su ausencia.

Abordó el ascensor, quería caminar un poco y aprovechar el clima veraniego que tanto le gustaba y alcanzó a ver a su nueva asistente tomada de la mano con… ¿Tsukishiro? Los observó mientras se alejaban y ella se veía realmente contenta, no la había visto sonreír desde que la conocía y debía aceptar que se veía… Algo agraciada, pero el de lentes nunca le había inspirado confianza, se notaba que era un hombre amable pero... Bueno, no era asunto de él de todos modos, así que salió por el lado contrario, le gustaba sentir la calidez en el aire y disfrutar de la soledad, desconectarse un poco de la monotonía de la vida, hasta que un mensaje resonó en su teléfono

-¿Te olvidaste de mí? Aún estoy esperando que te dignes llamarme… No estaré mucho tiempo en Tokio y muero por verte… Isabella

Revisó con renovado interés aquella comunicación, observó su reloj, la noche era joven para divertirse y esta noche no había cansancio que lo hiciera desistir, así que tomó su teléfono y marcó aquel número telefónico siendo atendido casi de inmediato.

-Perdóname preciosa, estuve un poco ocupado

-¿Me estás haciendo rogar, Shaoran? – respondió ella con voz sensual

-Por supuesto que no, jamás lo haría… Es solo que sabes que soy un hombre ocupado, pero no lo suficiente para darte la bienvenida como lo mereces

-Un poco tarde tu bienvenida querido, ya planeo mi regreso a Europa, solo que no estabas en la ciudad para disfrutar a tu lado.

-Solo dime dónde estás y procuraré llegar lo más pronto posible

-Está bien, te enviaré mi ubicación.

La llamada culminó en ese momento y segundos después recibió la ubicación por parte de la mujer, así que entusiasmado tomó un taxi y se dirigió al hotel de su querida "amiga" cambiando radicalmente sus planes de esa noche; aunque no supo realmente por qué, por un segundo los ojos verdes de la mujer que lo exasperaba se cruzaron por su mente así como la escena donde se alejaba de la mano de aquel hombre en quien realmente no confiaba

Sakura miraba con fascinación el escenario mágico que se alzaba imponente frente a ella, los músicos afinaban sus instrumentos y los espectadores se ubicaban en sus lugares. Efectivamente, como Yukito había dicho, tenía un espacio reservado lo suficientemente cerca, otros se ubicaban a lo largo del parque en una especie de picnic nocturno bajo la noche estrellada que tampoco eran muy visibles a causa de las luces de la ciudad pero aun así, todo el ambiente era magnífico.

-Vamos a brindar – dijo Yukito sorprendiéndola un poco y con una copa de champagne frente a ella. Sakura la recibió con una sonrisa – Por ti, por esta noche juntos y por tus futuros éxitos – dijo el muchacho. Sakura sonrió y chocaron suavemente sus copas.

Frente a ellos, no solo estaba la champaña, sino algunos pasabocas y aperitivos; definitivamente era algo que no esperaba pero todo pintaba como una velada soñada, definitivamente Yukito era mejor de lo que imaginaba, pero justo cuando empezaba la primera pieza el teléfono del muchacho demandó su atención y se alejó un poco para poder contestar, Sakura no prestó mucha atención ya que el sonido era tan envolvente, y era una verdadera amante de la música clásica.

Un rato después se unió a ella de nuevo pero su expresión no era la misma de un rato atrás. Se veía algo molesto, incómodo… ella no quiso preguntar para no ahondar mas en la situación, además que no era de su incumbencia, así que solo se relajó y un rato después sintió como él pasaba su brazo por encima de sus hombros y su actitud lucía más relajada, como pensó en un principio, con toda seguridad era algo sin importancia y se dedicaría simplemente a disfrutar de una noche mágica.

-Mmmmmm – La voz de la chica se escuchó como un sensual ronroneo – sigues siendo el mismo de siempre, todo un semental – dijo mientras se recostaba en el pecho de Shaoran, en un perfecto inglés mezclado con acento mediterráneo

Él por su parte recorría con la yema de sus dedos la suave y blanca piel de la espalda de su compañera que hacía un contraste fantástico con su cabello negro

-No sabes lo mucho que me alegra tu visita, Isabella – respondió en el mismo idioma que usó la chica

-No podía irme sin verte, así tuviera que ir directamente a tu oficina y raptarte como la primera vez – Shaoran sonrió

-Yo estaría encantado… ¿De veras debes regresar tan pronto?

-Claro que si, mi familia me espera. Mi hermano contraerá matrimonio el fin de semana y mi madre está como loca. Prolongué mi visita un par de días pero no me será posible permanecer más tiempo.

-Irás mañana a la empresa, ¿verdad?

-Si, debo ir a estudiar la contrapropuesta de Li, ya vi a todos tus demás competidores y ya veremos cuál es la decisión de mi padre.

-Hemos estudiado mucho y estoy seguro que la nuestra será mejor en muchos sentidos.

-No me digas que esa propuesta te incluye a ti, porque si es así…

-Bueno… Casi, tendré una excusa para ir más seguido.

-No hablemos más de eso, solo dediquémonos a disfrutar esta noche – concluyó la mujer besándolo suavemente y envolviéndolo en ese frenesí de pasión que solía darse cuando se encontraban.

-¡Buenos días! – Saludó Sakura con entusiasmo al arribar al piso donde se encontraban las oficinas donde trabajaría. Rika ya estaba allí

-Muy buenos días Sakura, veo que vienes con un excelente ánimo – La castaña solo se encogió de hombros con una sonrisa tímida, recordando lo sucedido la noche anterior.

FLASH BACK

El concierto fue como un sueño maravilloso, acompañado con juegos de luces que iban al compás de la música y al final una serie de fuegos artificiales dignos de un 4 de julio estadounidense, se sentía extasiada y feliz; mucho más cuando la mano de Yukito se entrelazó con la suya y lo sentía tan cercano como siempre deseó.

Cuando el concierto terminó, decidieron caminar hasta el apartamento de Touya, la noche estaba hermosa y ese clima veraniego era simplemente encantador. En ningún momento sus manos se soltaron, Sakura le contaba sobre sus aventuras en Estados Unidos, Yukito compartía sus anécdotas y ese trayecto se hizo sumamente corto..

Al llegar a la entrada del edificio Sakura se sintió sumamente nerviosa, no sabía qué hacer, ¿de qué forma debía actuar? Por Dios Santo, ya era una adulta y se sentía como adolescente.

-Yukito… Yo…

-Descansa Sakura, gracias por esta hermosa noche.

-Yo… No se, ¿quieres pasar?

-No te preocupes, es tarde y tienes un largo día por delante. Será mejor que descanses.

-Vale, está bien. Muchas gracias, la pasé fantástico

El muchacho se acercó lentamente… O así le pareció a ella, sintió como tomaba con suavidad su cintura y acercaba su rostro hasta sentir el roce de sus labios, luego un poco más profundo; sentía que su fuerza la abandonaba, había soñado por años con este momento que al fin se estaba materializando; pero de repente, el recuerdo de los brazos fuertes de Shaoran sujetándola en el avión le vino como un relámpago y se soltó del agarre de Yukito sintiendo que su corazón latía con fuerza… ¿Qué demonios había sido eso?

-Pe… Perdón… No pensé que te incomodara

- ¡No! ¡De ninguna manera! Es solo que…

-No te preocupes – dijo él tomando sus manos – quizá no estás lista todavía, no quiero presionarte, vamos a tu propio ritmo. Descansa – Terminó con una sonrisa

-Discúlpame de verdad, y muchas gracias por todo, fue una velada increíble

El chico partió y Sakura ingresó finalmente al edificio, se sintió como una niña estúpida, quería golpear su cabeza contra una pared a causa de su ridícula reacción y mucho más cuando el tipejo ese estaba involucrado… Aun así, ese roce de labios, había sido suficiente para dejarla en las nubes y poder descansar tranquilamente.

FIN DEL FLASHBACK

-Tuve una buena noche – Indicó Sakura sin parar de sonreír.

-Eso me alegra muchísimo porque te necesito con mucha energía.

-Claro que sí, pero… ¿Siempre llegas tan temprano? – Rika solo se encogió de hombros – A estas alturas de mi embarazo casi no puedo dormir, así que aprovecho el tiempo para dejar las cosas listas aquí.

-Eres muy dedicada

-Sé que tú lo serás también, harás un excelente trabajo

Sakura le sonrió ampliamente – Gracias por tu confianza Rika, prometo que no te voy a defraudar.

En ese momento, las puertas del ascensor se abrieron y Shaoran ingresó con paso firme – Buenos días.

-Buenos días, Señor Li – contestaron ambas al unísono, con la diferente de que esta vez la ojiverde estaba sonriéndole de una forma que él no había visto hasta ahora, todos sus encuentros habían sido bastante… incómodos, por decir lo menos; sobraba decir que los ojos de esa muchacha brillaban maravillosamente. Sintió un pequeño calor subir a sus mejillas y carraspeó su garganta incómodo.

-Ehmmmm, Rika, por favor explícale a la srita Kinomoto, cómo iniciamos el día aquí, entre más pronto se adapte, mejor.

-Por supuesto Sr Li.

Sin decir más, el hombre ingresó a su oficina, y Rika empezó a explicarle a Sakura paso a paso lo que debía hacer. La rutina de Li, iniciaba con un café grande y cargado, además de unos panecillos que Rika compraba en una pastelería cercana al edificio y con ese primer encargo, debía llevar también su itinerario. Explicarle con detalle el orden del día, pues a pesar que era muy organizado podían surgir cosas urgentes u olvidar algún compromiso menor.

Rika le explicaba a Sakura con mucha paciencia paso a paso – Ahora, ven conmigo ¿Podrías llevar la bandeja con las cosas para él? A veces me molestan las muñecas y no quiero que ocurra un accidente.

-¡Por supuesto! – respondió la castaña con entusiasmo

Sakura se levantó con rapidez y tomó la bandeja, organizó los 2 panecillos de forma pulcra y siguió a Rika, quien por su puesto llevaba zapatos bajos y caminaba más lentamente, mientras que Sakura se veía más alta, gracias, en parte, a los tacones que solía utilizar.

La asistente de Shaoran golpeó con suavidad la puerta y la voz de Li les dio permiso para ingresar.

-Buenos días señor Li, traigo su itinerario y la srita Kinomoto trae su café – La castaña se apresuró a poner los elementos pulcramente frente al castaño sin decir una sola palabra y cuando hubo terminado se paró al lado de rika escuchando atentamente todo lo que ella decía.

-Para el día de hoy a las 9 am hay una videoconferencia con los clientes de Alemania, posteriormente, a las 11, junto con su padre recibirán al Ministro de tierra, infraestructura, transporte y turismo.

-Si… respecto a eso, nuestra reunión es muy importante. Almorzaremos en el Salón Principal, señorita Kinomoto. Encárguese de contratar el mejor servicio de catering y confirmar con la asistente del Ministro cuál será el menú, deben estar mínimo con una hora de anticipación y prepararlo todo. ¿He sido claro?

-Claro que sí señor, me encargaré ahora mismo.

-Rika, asegúrate de que todo se haga de forma debida. No podemos tener errores en los documentos presentados, es una reunión muy importante.

Ambas mujeres asintieron y se dispusieron a salir, pero Li las llamó de nuevo

- Rika, tú solo vas a supervisar, no quiero verte esforzándote para absolutamente nada. No pienso repetirlo – Dijo con voz seria y mirando fijamente a la castaña; eso asustó un poco a Sakura, era su primer día oficialmente y tenía una tarea bastante ardua, pero haría todo su esfuerzo para hacerla de manera adecuada.

- Por cierto… ¿Mi padre ya llegó?

- Si señor, muy temprano esta mañana.

- Gracias. Es todo.

Rika fue la primera en abandonar la oficina y posteriormente lo hizo Sakura, bajo el escrutinio de su serio y estricto jefe, sentía como un escalofrío recorría su espalda por esa mirada ámbar clavada en ella. Ese tipo sería realmente un dolor de cabeza.

-Buenos días, padre.

-Oh Xiao Lang, que gusto escucharte.

-Padre, necesito hablar contigo, ¿puedes recibirme?

-Por supuesto hijo, te espero.

Shaoran se apresuró, tomó su café y se encaminó a la oficina de su padre, esa conversación que tenía pendiente no podía pasar de ese momento. Tenía muy claro su lugar en la empresa y en la familia, ya no era un niño que tenía que someterse a decisiones arbitrarias de su padre.

Subió al elevador y llegó al piso donde estaba la oficina de su padre y el salón donde tendrían la reunión más tarde. Era la única oficina que se ubicaba allí; así que la asistente de su padre solo lo saludó con respeto y el hombre llamó a la puerta. – Siga – se escuchó desde el interior.

-Buenos días padre.

-Xiao Lang, hijo, que alegría de verte. ¿Cómo has estado?

El muchacho dudó, su padre era tan afable como siempre pero debía mostrarse firme en esto.

-Estoy bien padre, pero un poco molesto si te soy sincero.

Hien Li, que ya sabía de qué iba esa sorpresiva conversación se levantó de su enorme escritorio e invitó a su hijo a sentarse en la sala que tenía allí

-Te apatece algo de te?

-No es necesario padre – dijo señalando el enorme vaso con café caliente que reposaba en su mano

-Yo si quiero - dijo con tranquilidad mientras llamaba a su asistente

-Padre…

-Oh si, dime, ¿qué necesitas hijo?

Shaoran respiró profundo antes de empezar con su bien elaborado discurso – Padre, sabes que te respeto y a tus decisiones, pero me parece totalmente inadecuado que intervinieras en la elección de quien sería el reemplazo de Rika, ya no soy un niño y la persona que elegiste es… Torpe e imprudente, además me insultó el día de las entrevistas. Si viste que existía algún mérito en esa muchachita para trabajar en esta empresa, lo respeto, pero lejos de mí. No acepto tenerla como mi asistente.

Hien, quien permaneció en silencio todo el tiempo y escuchaba con atención a su hijo, solo respiró profundo y justo en ese momento llegó la asistente con el té. La mujer ingresó previa autorización y en total silencio dejó la bandeja en su lugar y se retiró, conocía lo suficiente a su jefe como para saber cuándo debía darle privacidad. El hombre sirvió el té en el mismo silencio y tomó un sorbo; a leguas podía notarse cómo se deleitó con la bebida caliente mientras la impaciencia de Shaoran crecía exponencialmente.

-Padre…

-Xiao Lang, ¿desde cuándo tienes el atrevimiento de refutar mis órdenes?

Shaoran guardó silencio, su padre era un ser absolutamente pacífico, pero lo conocía lo bastante bien como para saber cuándo estaba molesto… Y por su bien, mas le valía guardar silencio y escuchar. El hombre mayor se levantó de su asiento y empezó a caminar por la oficina.

-Tienes razón, no eres un niño… Tienes a tu cargo el área más compleja de la empresa y créeme, no estarías allí si no fuera porque creo que tienes la capacidad. Has recibido la mejor educación que pudimos brindarte, pero hoy me reclamas que no eres un niño y eres lo suficiente grande y responsable para tomar tus decisiones… Déjame preguntarte algo: ¿Fuiste responsable cuando decidiste dejar tirada la importante reunión de San Remo para fugarte con la hija de uno de los accionistas?

Shaoran Palideció, no pensó que conociera bien los motivos. Había aducido un problema de salud para ausentarse y hasta ese momento había sido un secreto para todos menos para…

-Y no pienses que fue Eriol quien me dijo. Ese muchacho es un alcahueta que solo te cubre las espaldas. Conozco bien tus andanzas Shaoran y no iba a permitir que con la ausencia de Rika quien sin duda es una mujer sumamente ética en su trabajo, pusieras en su lugar a una mujer incompetente solo por su aspecto o lo que pudiera darte más allá de lo laboral.

-Pero padre…

-Ya se lo que me vas a decir y justo por eso te he permitido estar en ese cargo; sé que eres capaz, brillante y disciplinado. Pero esta es mi decisión Xiao Lang, y no está sujeta a tus reparos.

-Está bien, se que mi vida personal no es de tu agrado…

-Es todo lo contrario a lo que debe ser un Li, querrás decir.

-Es mi vida personal, padre.

-Y esa vida personal puede influenciar tu vida profesional. Afectar la imagen de la empresa. Shaoran, hijo – dijo más tranquilo el hombre tomando a su hijo por los hombros – Tú no eres un ejecutivo más, eres el futuro dueño de la empresa, y la credibilidad de esta ha sido impecable y deseo que lo siga siendo.

-Padre, pero esa muchacha…

-Acaso no he sido claro, Xiao Lang? Además, estoy seguro de que la srita Kinomoto hará un buen trabajo

-No la conoces, padre

-Tú tampoco, hijo.

El muchacho suspiró resignado; como siempre, su padre había volteado las cosas en su favor, si algún rasgo compartían era su terquedad; pero él mismo se encargaría de demostrarle lo equivocado que estaba, que esa niña tonta e imprudente había sido un error.

-Bueno padre, me voy, tengo una video conferencia importante y debo estar preparado.

-Nos veremos para la reunión con el ministro, hijo.

Shaoran hizo una reverencia y se dispuso a salir de la oficina.

-Shaoran…

-Si, padre.

-Confío en ti, no quiero enterarme que haces algo para que Sakura se vaya

-Sa…¿Sakura?

-Sí, me oíste bien. Puedes retirarte.

El heredero de los Li asintió y Salió de la oficina, eso había salido definitivamente peor de lo que imaginaba, ahora no solo seguiría con esa muchacha como su asistente sino que sería intocable ante su padre… Pero ¿y si él tenía razón? Quizá estaba siendo prejuicioso.

Sumido en sus pensamientos no se percató cuando estaba de nuevo en su piso. Vio a Rika trabajando en el ordenador mientras Sakura estaba al teléfono; no quiso decir nada, pero en el rostro de su querida asistente se reflejaba el malestar y cansancio.

-Cómo va todo para la reunión de hoy?

-Todo el orden señor Li – contestó Rika rápidamente

El hombre las miró a ambas seriamente, asintió y siguió a su oficina.

Cuando la puerta se cerró, Sakura soltó el teléfono y miró con preocupación a su compañera.

-Rika, ¿segura estás bien?

-Si, no te preocupes, te dije que son contracciones falsas, todavía falta para la fecha de parto.

-Espero que no suceda… Pero sabes que a partir de la semana 37 en cualquier momento se puede producir el parto

-Y cómo lo sabes?

-Soy muy curiosa y me gusta leer. Una compañera de apartamento que tuve en NY estaba embarazada y tenía muchos libros.

-Entonces es bueno tener a alguien como tú cerca.

Sakura se acercó y tomó las mano de su compañera – Rika, por favor, no descuides tus propios síntomas, ante cualquier cosa extraña que sientes, avísame.

-Eres muy dulce, Sakura y créeme que así lo haré, por ahora apresurémonos con esto

-Ya conseguí el servicio de catering, solo estoy a la espera de que me envíen el menú por parte de la oficina del ministro.

-Perfecto, ya estoy terminando de organizar los documentos que se van a presentar con los balances correspondientes para que los podamos organizar.

Rika y Sakura compenetraban muy bien a la hora de trabajar. Sakura era ágil, se relacionaba con los demás de forma maravillosa y con toda seguridad eso la ayudaría a adaptarse pronto al nivel de trabajo que tendrían allí.

Shaoran deshizo el nudo de su corbata. Había tenido una reunión muy compleja con los clientes Europeos, la competencia por obtener ese contrato era bastante difícil, así que había tenido que adquirir una serie de compromisos que aumentarían más su trabajo.

Adicionalmente, la ausencia de Eriol le pesaba mucho, ya que él debía cubrir gran parte de sus funciones, como la reunión que tendría en un rato que originalmente correspondería a su primo. Sacudió su cabello para espabilarse un poco. Sirvió un trago de whisky y llamó a Rika

-En qué puedo ayudarle señor Li? – Se sobresaltó al no escuchar la voz a la que estaba acostumbrado.

-Ahhhh es usted. Rika, ¿dónde está? – Sakura se sintió molesta al escuchar la decepción plasmada en la voz de aquel hombre.

-Se encuentra en el tocador en este momento, ¿hay algo en lo que pueda ayudarle?

-Venga a mi oficina por favor.

-Si señor.

Unos instantes después sintió unos golpes suaves en la puerta.

-Siga

La joven ingresó erguida y orgullosa, con paso firme y aspecto sereno. En ese momento comprendió que el resto de las personas se dirigían a él de forma diferente, como con algo similar al temor. Pero esta niña no, y había logrado ver que en realidad era bastante elegante, estilizada y con esos ojos tan…

-Si, señor Li.

-Si, disculpe. Solo quiero confirmar que todo está preparado y dispuesto para la reunión.

-Si señor, el servicio de catering está instalado en el salón desde hace una hora, se confirmó el menú con la asistente del Ministro, Rika confirmó el suyo y el de su señor padre. Tenemos una gama de diferentes bebidas y entremeses en caso de que la reunión se extienda y las carpetas con todos los informes se encuentran también en el salón.

Una pequeña sonrisa quiso escapar de labios del ambarino pero disimuló revisando unos papeles.

-En ese caso, Se repartirán las funciones. Rika estará con nosotros en la reunión para hacer las actas correspondientes y usted… - Ahora sí dibujó una sonrisa torcida, sería la primera prueba para la castaña – servirá el café

Sakura no se inmutó, algo como eso esperaba de ese patán, ¿creería acaso que ella se sentiría disminuida por eso? Estaba muy equivocado, no le iba a dar ese gusto.

-Por supuesto que sí señor Li, cuente con eso. ¿Hay algo más que necesite?

-No, puede retirarse. Ah… Si, lo más seguro es que deba almorzar aquí también ya que se le puede requerir en cualquier momento.

-Sí señor.

-Puede retirarse.

Con una leve reverencia la castaña se retiró de la oficina, cuando regresó a su puesto notó que Rika todavía no había llegaro y se le hizo extraño… Llevaba un buen rato allí, ¿y si le había sucedido algo?

Se dirigió con rapidez al tocador y no escuchó ningún sonido – Rika… Rika, ¿estás ahí? ¿Estás bien? – escuchó entonces como la llamaba muy suavemente y un golpe seco. La castaña se alarmó en el acto y corrió para encontrarla en medio de un charco de agua y algunos tintes de sangre.

-Ayúdame – murmuró la mujer

-Por Dios Rika! Voy por ayuda.

Resbaló un poco en el líquido pero corrió tan rápido como pudo y no supo donde más ir, abrió la puerta de la oficina de Shaoran de un solo golpe; estaba pálida y su respiración entrecortada

-Qué demonios! – vociferó Shaoran al ver el intempestivo ingreso de esa odiosa muchacha

-Es Rika, necesita ayuda urgente

Shaoran salió rápidamente y corrió tras Sakura, cuando ingresaron al baño ya encontraron a Rika inconsciente y ya no eran solo tintes de sangre

-Demonios – dijo observando horrorizado la escena, se congeló y no supo que hacer

-Li – gritó la castaña sin importarle que fuera su jefe – ¡Reacciona! Llama de inmediato a emergencias, he leído sobre esto, es posible que se haya desprendido la placenta y su vida puede correr peligro

-Si… Si… - Todavía aturdido tomó su teléfono y con pulso tembloroso marcó a emergencias solicitando una ambulancia.

-Tomoyo, si… Es urgente, no hay un minuto que perder… Claro, aquí los espero – hablaba Sakura con Tomoyo

-Ya… Viene la ambulancia, debo avisar a su esposo.

-No te preocupes, ya Tomoyo lo hará. Ayúdame a recostarla por favor, hay que algo que debo revisar.

Shaoran tan solo asintió mientras veía a la castaña revisar el pulso de su asistente y llamarla todo el tiempo para tratar de hacer que reaccionara, era increíble como podía mantener la entereza en una situación de tanta tensión, él mismo estaba totalmente aterrado, sentía ganas de llorar y lo aterraba pensar en lo que pudiera sucederle a Rika.

-Qué demonios pasa que tardan tanto! – vociferó la castaña

-Iré por ayuda – Shaoran al salir del baño se encontró con los otros asistentes que ya habían escuchado el escándalo proveniente del baño – Rápido, no se quedenahí, ayúdennos a sacarla – ordenó a quienes se encontraban allí

-Señor Li… El elevador ha dejado de funcionar

-Carajo, por eso no han llegado – dijo la castaña desde dentro alcanzando a escuchar lo que habían dicho – Li, debemos sacarla de aquí

-Kinomoto, ¡son 45 pisos!

-Debe haber un ascensor de servicio o algo! Es imposible que no exista nada así

Shaoran entonces recordó que desde el piso de su padre había un ascensor privado por motivos de seguridad y de inmediato arrastró al recién llegado asistente de su hermana para que le ayudar a cargar a Rika, solo debían subir un piso y de ahí podrían descender.

Corrieron para sacarla de allí ante la mirada de los demás de aquel piso y buscaron el elevador del que hablaba Shaoran. Hien Li, por supuesto, al escuchar el estruendo fuera de su oficina se angustió mucho al ver que sacaban a rika ensangrentada e inconsciente, contempló el rostro preocupado de su hijo y la templanza con la que la joven castaña daba indicaciones a quienes les acompañaban. Dicen que el carácter de las personas se mide por sus acciones en momentos de crisis y vaya que Shaoran quedaría muy sorprendido con la "niñita" a quien tanto menospreciaba; pero no podía dejar de lado tampoco su preocupación por Rika, era una persona muy preciada para él, la quería como una hija y pondría todo lo que estuviera a su disposición para que saliera de esa situación.

Ingresaron al elevador exhaustos, Sakura pidió que pusieran a Rika en el suelo y ella sostenía su cabeza con las rodillas mientras monitoreaba su pulso.

-Có… ¿Cómo está?

Sakura lo miró con seriedad – Su pulso está muy débil.

-Ya la ambulancia está esperando, los paramédicos están en el lobbie.

La castaña solo asintió mientras acariciaba con cariño el cabello de la mujer que yacía en su regazo – Vas a estar bien y tu bebito también, este será solo un mal momento y le contarás de su valiente mamá que resistió hasta el final… Ya lo verás

Shaoran, mientras tanto, observaba la escena y analizaba a la muchacha. Él estaba hecho un manojo de nervios y ella siempre había estado en control de la situación, de no haber estado ahí quizá no habría sabido qué hacer; estaba pensando que quizá su padre tenía razón y estaba subestimando a la muchacha, aunque por otro lado, quizá se notaba tan tranquila porque no la conocía y apreciaba tanto como él… Sí, era más posible que fuera por eso

El pitido del elevador anunció que estaban en el último piso. De inmediato los paramédicos inmovilizaron a la mujer y la sacaron rápidamente del lugar ante la mirada de todos los presentes ya que no había sido menor el escándalo.

A la entrada del edificio, Shaoran pudo ver al esposo de Rika que de inmediato los siguió, en un rato lo llamaría para no tensionarlo más, pero a su lado vio a la castaña con la mirada perdida observando cómo se llevaban a su compañera y cómo trataba de disimular las lágrimas que salían de sus ojos verdes.

-Estás bien?

-Estoy aterrada – Dijo la muchacha casi sollozando

-Pero te veías muy tranquila y…

-No soy el tipo de mujer que se esconde en circunstancias difíciles Li, la vida de Rika y su bebé están en riesgo, ¿cómo podría quedarme ahí parada sin hacer nada? – a ese paso ya las lágrimas corrían por las mejillas de la joven mujer.

-Ven acá.

Shaoran la arrastró de la mano de vuelta al elevador para empezar a subir nuevamente, allí los sollozos fueron un poco más audibles y sucedió lo que ninguno de los dos esperaba. Shaoran abrazó fuertemente a la castaña permitiendo que se refugiara en su pecho.

Sakura se quedó congelada con sus lágrimas aun fluyendo, no entendía absolutamente nada de lo que estaba pasando pero definitivamente necesitaba sentirse reconfortada.

-Escúchame bien, se que estás desbordada por tus emociones. Lo que está pasando aquí no significa nada en particular y no se volverá a repetir, pero sé cómo te sientes, solo respira y desahógate.

Empatía, simplemente eso, sin necesidad de ningún otro vínculo emocional ni hacer conjeturas innecesarias; eran solo dos personas que se brindaban apoyo mutuamente durante un momento difícil más allá de considerarse como el agua y el aceite.

Hola!

Queridos lectores, un buen tiempo sin leernos! aquí les traigo este capítulo que espero les guste mucho... Me sentí muy feliz de leer sus mensajes en apoyo a mi historia, pero a su vez culpable, no quiero que piensen que los estoy presionando por un review que vergüenza! ejejejeje

Pero en fin, si he sido muy feliz de leerlos y saber que les va gustando.

Les envío un abrazo muy muy muyyy grande!

Ale-San