Había pasado 2 años desde los últimos acontecimientos, en la vida de Asta, Yuno y Daria, quienes continuaron sus estudios y entrenamiento en el manejo temprano de su magia.
Asta seguía entrenando su físico, al no darse por vencido con la idea de que entrenando consiguiera su magia.
Mientras Yuno su hermano, junto con Daria estaba siendo encaminados en el aprendizaje de hechizos simples para mejorar su control de su magia elemental, siendo estas "Magia de Viento" por parte de Yuno y "Magia de Agua" de parte de Daria.
En estos dos años de convivencia tanto Asta y Yuno había formado un lazo de amistad con su nueva amiga Daria.
Las cosas nunca pudieron estar más tranquilo para los tres niños, pero como a veces el destino no siempre trae buenos augurios, empezaron a suceder unas cuantas pérdidas.
El primero fue la partida de uno de la "Guardia Real", el más longevo según registro sobre el poseedor del título.
Orfeo Blash falleció a la edad 87 años, dejando este mundo, la perdida de Orfeo o conocido como el "Guardia Fantasma" y ser portador del "Tesoro del Reino" la "Guadaña".
Asta junto con Yuno y Daria estuvieron presente en el funeral de dicho anciano, junto con sus padres a darle sus condolencias a los hijos y nietos del anciano Orfeo.
Aunque el luto por la pérdida del más longevo de la "Guardia Real", fue alrededor de un mes sus padres Ciel y Loyce, decidieron volver a buscar a alguien que tomara el cargo de Orfeo Blash.
Asta, Yuno y Daria fueron testigo por segunda vez del evento de "Ascensión", en este caso la que logro ascender al puesto de "Guardia Real" fue la nieta mayor de Orfeo de nombre Alma Blash.
Alma era una maga de 17 años, usuaria de "Magia de Aura", una magia desconocida pero a la vez compatible con la magia de su abuelo Orfeo.
Asta estaba sorprendido por la chica más joven que los actuales portadores y no pude evitar soñar a esa edad lograr ser parte de la "Guardia Real".
Yuno miro a su hermano Asta y como este tenía un brillo de determinación sobre que quería hacer de grande y solo pudo sonreír, sabía que su hermano era de quienes se ponían una meta y no descansaría hasta conseguirlo.
Daria también vio la mirada de Yuno hacia su hermano, como ya conocía a su amigo Asta, sabía que su sueño era ser uno de los magos más fuertes del reino y ser parte de la "Guardia Real".
Las vidas de los tres niños siguieron normalmente, entre las clases de parte de su institutriz Silvia y los entrenamientos de magia de parte de Yuno y Daria y los arduos ejercicios físicos de Asta.
Con ello pasaron otros 2 años donde sucedería algo que cambiaría la vida de unos de los tres.
Era un día normal para Asta, Yuno y Daria mientras entrenaban con la guía de su maestra Silvia el control de su mana y Asta cerca de ellos haciendo planchas mientras contaba cada uno de ellos.
Todo transcurría normalmente, hasta que hace aparición uno de los magos que cumplía el labor de mensajero.
La maestra Silvia dio órdenes que Yuno y Daria continuaran sus prácticas y a Asta hiciera ranas para fortalecer sus piernas.
Silvia fue con el mensajero y sin más rodeo pregunto de qué trata su presencia.
"Dime mensajero cual es el mensaje que me tienes, que ando enseñando a los señoritos Yuno y Asta y a la señorita Daria". Pregunto Silvia.
"Mi lady, acaba de suceder una tragedia en el reino Corazón". Dijo el mensajero con nerviosismo.
Silvia Biskup se sorprendió de lo que acaba de contarle el mensajero.
"¿Que acaba de suceder en el reino Corazón?". Pregunto Silvia preocupada.
"Sucedió un atentado a la comitiva de la reina Amalia Heart, ella junto a sus dos hijas mayores que venía con sus esposos, entre ellos los padres de la joven Daria, fueron asesinados junto a todo sus magos que la escoltaban". Dijo alterado el mensajero por lo duro de la noticia.
Aquella noticia fue impactante que dejo en shock a Silvia, ya que eso complicaba que la posible alianza a futuro podría correr peligro.
En eso hace acto de presencia el "Guardia del Hacha" Pedro Petram, su esposo y compañero. La mirada que le dio fue suficiente para confirmar la noticia, ahora debía dirigirse hacia el salón real para escuchar la acción de sus señores.
Mientras eso sucedía en el jardín del palacio, en la sala del trono se llevaba a cabo la reunión de emergencia.
El Rey Ciel y su esposa Loyce estaban tratando de procesar la noticia, sin duda aquel suceso de la muerte de la reina del "Reino Corazón" fue un duro golpe para dicho reino y del pacto que tenía con la reina Amalia.
"Cuál es la situación del reino Corazón". Pregunto la Reina Loyce.
El mensajero miro a sus amos, para luego proseguir con las noticias. "El reino Corazón está consternado, los actuales "Guardias Espirituales" están en alerta máxima y además al parecer solo la hija menor, la princesa Loropechika no fue con la comitiva y es la única junto a su sobrina que están en el corazón y la señorita Daria quien está aquí con nosotros". Conto el mensajero.
"Quiero que alisten todo los preparativos, partiremos hoy mismo hacia el reino Corazón para apoyar a nuestra reino hermano y llame a la "Guardia Real" para que venga a escoltarme y estar presente, para dar nuestro apoyo". Ordeno el Rey Ciel a su subordinado, mientras este asentía y se dirigía a cumplir sus órdenes.
Cuando el mensajero se fue, el Rey Ciel dio un suspiro de cansancio, debido al enterarse de la muerte de la Reina Amalia, su esposa la Reina Loyce le abrazo con la intención de clamar a su esposo.
"Cariño, ahora como daremos la noticia a la pequeña Daria". Hablo el Rey Ciel a su esposa.
La Reina Loyce, también estaba con ese dilema, de cómo tratar del tema con Daria, como explicar a una niña sobre la muerte de sus familiares. Era un tema muy delicado y al no decirlo ahora solo atrasara lo inevitable.
"No lose amor, lo unció que podemos hacer es decirle ahora y así prepararla para cuando vallamos a su hogar". Dijo Loyce a su esposo mientras le confortaba.
Y en ese momento hace presencia la "Guardiana del Bastón" Silvia Biskup y su esposo el "Guardián del Hacha" Pedro Petram, había aparecido para luego arrodillarse frente a sus señores.
"Mi señores, acabamos de enterarnos de la noticia". Hablaron ambos "Guardianes", quienes esperaban las palabras de sus reyes.
"Si lamentablemente las noticias son ciertas". Hablo el Rey Ciel a sus dos "Guardias Reales".
"¿Y como dirán la noticia a la joven Daria?". Pregunto Silvia a sus amos.
Ambos monarcas se miraron, aun no sabía cómo hablar sobre el tema con la pequeña Daria, pero era su obligación decirle para partir este mismo día hacia el reino Corazón.
"Silvia, necesito que traigas a mis hijos y a Daria, tenemos que decirle las noticias". Hablo la Reina Loyce.
Silvia asintió mientras procedía a ir con sus alumnos. Pedro espero también las órdenes de sus reyes.
"Pedro quiero que llames a todos los miembros de la "Guardia Real" y que venga al palacio lo más antes posible para partir hacia el reino Corazón y que todo las fuerzas del reino este alerta por cualquier cosa suceda, con la situación del reino Corazón lo más probable que haya problemas en nuestro reino y más en las fronteras con el reino Diamante". Ordeno el Rey Ciel.
Pedro Petram asintió y partió a cumplir con la orden.
Los reyes del reino Pica solo le quedan esperar que la maestra de sus hijos y Daria fuera a traerlos para contarle sobre la noticia.
Mientras en el jardín del palacio...
Asta seguía con su régimen de entrenamiento físico diario, mientras Yuno y Daria continuaban con sus prácticas de magia.
"Yuno, Daria que creen que haya sucedió para que la maestra Silvia, nos dejara para ir a ver a nuestros padres". Pregunto Asta a su hermano Yuno.
Yuno solo detuvo su entrenamiento, para mirar a su hermano. "No lose Asta, también a mí me sorprende que la maestra Silvia haya ido a ver a nuestro padres". Respondió Yuno.
"Debe haber sido algo importante, para que tenga que dejarnos de enseñar". Hablo Daria mientras manejaba su magia de agua, con un estanque pequeño del jardín.
Asta decidió no preguntar y continuar con su entrenamiento, de seguro cuando vuelva su maestra les contara lo que sucedió.
Y como si fuera una predicción de Asta, su institutriz Silvia apareció escoltada con unos de los magos que vigilaban el castillo.
"Maestra". Dijeron al unísono Asta, Yuno y Daria al ver a su maestra de nuevo.
"Bueno chicos, será todo por hoy". Dijo Silvia a sus alumnos. "Señorito Yuno, señorito Asta, sus padres desean verlos y a usted también señorita Daria". Hablo su maestra.
Asta dejo de entrenar y procedió a secarse con una tela el sudor de su cuerpo, para ponerse uno de sus ropas y acompañar a su hermano y su amiga, hacia el salón donde los espera sus padres.
Yuno y Daria, también dejaron de entrenar y fueron con su maestra hacia el salón donde se encontraban sus padres (Asta y Yuno).
Ya en el salón real...
El Rey Ciel y su esposa Loyce estaban nerviosos de como iba abordar el tema de las muertes de los familiares de Daria.
"No tengo el corazón para decirle sobre la noticia a Daria cariño". Hablo Loyce a su esposo.
"Cariño, debemos decirle sobre esto, no podemos ocultarlo". Respondió Ciel a su esposa. "Además ya todos los preparativos están listos, para que podamos partir de inmediato". Menciono Ciel.
"Pero es muy joven para comprender sobre esto". Escuso la Reina Loyce.
Antes que el Rey Ciel respondiera a la escusa de su esposa, hace acto de presencia Silvia, acompañada de Asta, Yuno y Daria.
"Papa, mama para que nos llamaron". Pregunto primero Asta algo intrigado por el llamado.
"Lo mismo que mi hermano padres, por que nos llaman ahora". También pregunto Yuno.
Daria mantenía al margen de la conversación entre ambos hermanos y sus padres, pero no negaba en su mente que tenía curiosidad.
Ciel y Loyce tendría que tocar el tema con sumo cuidado, pero a su vez debían ser directos.
"Hijos, necesitamos hablar con su amiga Daria". Dijo Loyce a sus hijos.
Los cuales se miraron confundidos para luego dirigir su mirada hacia Daria quien se sorprendió por las palabras de la madre de sus mejores amigos.
"Nuestra pequeña Daria, has estado con nosotros ya 4 años a tal punto que te considero como una hija mía". Hablo la Reina Loyce.
Daria asintió con las pablaras de la madre de sus amigos, además el sentimiento es mutuo con el tiempo que estuvo viviendo en el castillo.
"Pero me temo que tenemos que decirte una noticia". Tomo la palabra el Rey Ciel.
Daria miro con suma curiosidad por las palabras dicha del padre de sus 2 mejores amigos, al igual que Asta y Yuno. Ya que conocían a su padre y con el tono que había hablado delataba que era un tema serio con respecto con su amiga.
El Rey Ciel se tomó unos segundo para mentalizar las palabras que diría a la pequeña Daria.
"Me temo que ha ocurrido una desgracia". Hablo Ciel, a la pequeña Daria.
Daria al escuchar aquellas palabras empezó a sentir algo en su pecho, ese sentimiento lo sintió desde esta mañana.
"Tu abuela, la Reina Amalia junto a tus padres y tus tíos murieron en un accidente". Hablo el Rey Ciel tratando de ser lo más compresible posible.
Pero a penas termino sus palabras, un sollozo se hace escuchar en la sala real.
"¡No, no... mi abuela, mis padres, mis familiares! ¡ELLOS NO PUEDEN ESTAR MUERTOS!". Grito con todas sus fuerzas Daria, mientras varias lagrimas empezaba a salir de sus ojos.
"Escúchame Daria debes ser fuerte, entiendo que el dolor de la perdida es muy fuerte pero...". Decía la Reina Loyce, pero Daria no quiso escucharla y salió corriendo del lugar.
Yuno y Asta vieron como Daria salía con el corazón destrozado por la noticia y sin pensarlo dos veces, ambos fueron a buscarla.
Loyce y Ciel vieron el resultado de contarle sobre la "tragedia" a la pequeña Daria, sabía que la noticia afectaría mucha a la niña pero no espero tal reacción. Solo les quedaba dejarlo todo a sus hijos y que ambos lograran consolar a su amiga.
Mientras en una parte del jardín real...
"¡DARIA!". Grito Yuno, mientras llamaba a su amiga.
"¡DARIA! ¿DONDE ESTAS?". Grito Asta mientras junto a su hermano buscaban a Daria.
Ambos hermanos buscaban con desesperación a Daria, entendía que la pérdida de un familiar era muy duro, pero ellos buscarían la forma de apoyarla en su dolor.
En especial Yuno que sentía como algo en su pecho le dolió al verla llorar a su amiga de esa forma.
Asta también compartía ese sentimiento, por ello buscaba la forma de querer protegerla como ella estuvo haciendo desde que llego al reino.
"Yuno ven por el lado derecho del jardín, yo estaré buscando más a la izquierda". Dijo Asta mientras iba a toda prisa en busca de su amiga.
Yuno asintió y fue a buscar a Daria, pasando así varios minutos donde no daban con su paradero.
Yuno seguía buscando a su amiga por el jardín derecho y cuando se dio cuenta que no la podía encontrar por este lugar decidió mejor ir con su hermano Asta y ver si él tuvo la suerte en encontrarla.
En eso Yuno empezó a escuchar unos sollozos muy débiles. Y guiándose por el sonido de aquel pequeño llanto dio con el lugar donde se encontraba su amiga Daria.
Daria llevaba no sabe cuántos minutos llorando, para ella le pareció una eternidad. El dolor que sentía por la pérdida fue muy fuerte para ella, no solo perdió a su amada abuela, sino que perdió a sus padres y sus familiares, quedando posiblemente huérfana.
En eso escucha a alguien llamar por su nombre. "¡DARIA!". Grito la voz de su amigo Yuno.
Daria dio la vuelta y miro a su amigo Yuno, dando a mostrar su rostro con signos de haber derramado muchas lágrimas.
"YUNO". Dijo con tristeza Daria para luego ir hacia él y darle un abrazo buscando consuelo para el dolor de su corazón.
Yuno fue sorprendido por aquella acción, pero la conocía muy bien para saber que ella necesitaba ahora que la comprendiera y le diera su apoyo.
"Daria, mírame ¿Por favor?, no llores sé que es difícil asumir la perdida". Dijo Yuno mientras la abrazaba. "Pero yo estoy aquí para darte un hombro en que llorar". Finalizo Yuno mostrando ese lado que pocas veces le gusta mostrar a los demás, salvo a su hermano Asta y sus padres.
"Yuno, me duele... me duele el corazón". Dijo en un estado de melancolía. "Mi abuela y mis padres, ellos...". No pudo terminar cuando las lágrimas asomaran en sus ojos.
Yuno continuo al lado de Daria, mientras ella seguía descargando su dolor por la perdida.
"Daria, por favor no sigas llorando, no deseo verte sufrir más". Dijo Yuno tratando de calmar su angustia de su amiga.
Daria hizo el esfuerzo de contener sus lágrimas, para luego mirar con sus ojos vidriosos a su amigo Yuno, quien aprovecho para poner sus manos en sus mejillas para limpiar las lágrimas que seguían cayendo de sus ojos.
Por tal gesto de parte de Yuno, Daria empezó a sentir como algo dentro de ella empezaba a calentarle el alma, después de todo el dolor de saber aquella noticia del fallecimiento de sus seres queridos.
Ambos volvieron a cruzar miradas y entre ellos algo empezaba a florecer en sus corazones, y estaban tan sumergidos en su propio momento que no se percataron el llamado de Asta.
"¡Daria! ¡Yuno! por fin los encuentro". Dijo Asta mientras daba un suspiro.
Tanto Daria como Yuno separaron sus miradas y se pusieron nerviosos, luego prestaron atención a Asta.
"Daria, me alegro que Yuno te encontrara". Dijo Asta muy feliz de que su hermano Yuno la había encontrado.
Daria iba a contarle a Asta sobre el apoyo que le dio Yuno, pero él fue abrazada de sorpresa por Asta, quien con ese abrazo le trasmitía su preocupación por ella.
"Daria, no llores sé que la noticia fue dura y talvez no soy el indicado para decirte que seas fuerte, pero eres mi amiga y alguien importante para mí y mi hermano y lo que menos quiero es verte llorar". Dijo Asta con el sentimiento a flor de piel.
Asta desde hace un tiempo, dentro de él empezó a sentir algo por su amiga Daria, ya que no solo le gustaba pasar tiempo con ella y su hermano, sino que sentía un sentimiento que ardía en su corazón.
Daria al escuchar las palabras de apoyo, ahora de Asta y además del momento que tuvo con Yuno y su afecto entre ambos. Daria luego de comprender el apoyo de ambos hermanos calma su melancolía y luego observa a ambos para luego dedicarles una sonrisa. Lo cual Asta y Yuno empieza a sentir una alegría enorme al ver a Daria de nuevo mostrar su sonrisa.
Y justo en ese momento hace acto de presencia uno de la "Guardia Real".
"Jóvenes por fin los encuentro". Hablo el "Guardia del Hacha" Pedro Petram.
"Señor Pedro". Dijeron al unísono los 3 niños.
"Señorito Yuno, Señorita Asta sus padres lo están buscando". Menciono Pedro, para luego dirigir su mirada a Daria. "Señorita Daria lamento su perdida, pero es necesario que vuelva al salón con la señora Loyce y el señor Ciel, los preparativos para el viaje al reino Corazón están listo para dar nuestro pésame a la pérdida de su familia, señorita Daria". Concluyo Pedro mientras hacia la señal para que los 3 jóvenes fueran con él.
Daria miro por un momento a sus dos amigos, los cuales le dieron una sonrisa con la intención de darle fuerzas a su amiga y poder superar la perdida.
Mientras esto sucedió en el castillo en una zona muy lejana de la capital...
En una de las casas nobles del reino Pica se estaba llevando una pequeña reunión de parte de tres hermanos.
"Así que lograste cumplir con la misión". Pregunto Dante Zogratis a su hermana Vanica.
"Calor hermanito, fue además muy emocionante enfrentar a la misma reina del reino Corazón y a sus hijas". Dijo Vanica sonriendo mientras era atendida por un sirviente de confianza mientras envolvía la pérdida de un ojo.
"Parece que te costó lograr tu objetivo, no hermana". Dijo Zenón Zogratis mientras miraba a su hermana.
"No sería divertido ir y matar nada más a la reina, prefería jugar un poco con ella y verdaderamente valió la pena perder mi ojo en esta batalla". Dijo Vanica con indiferencia.
"No importa, por ahora logramos deshacernos de la Reina del Corazón, es un obstáculo menos para nuestros planes". Hablo Dante mientras daba la espalda a sus hermanos.
"Pero ahora, los reyes están en alerta con el asesinato de la familia real del reino Corazón, no podremos hacer nuestros movimientos". Dijo Zenón mientras analizaba el terreno actual.
"Poco a poco hermanos, solo es cuestión de tiempo para que el reino Pica sea nuestro". Dijo Dante con una sonrisa de suficiencia. "Además debemos entrenar el poder que nos dio nuestros demonios". Menciono Dante.
"Además necesitamos muchos hombres que estén a nuestro favor, si queremos tener existo en nuestros planes". Dijo Zenón siendo consciente de lo necesario para su objetivo.
"Bueno por ahora mejor es que nos tomemos con tranquilidad y encontremos aliados para nosotros". Dijo Vanica aportando su idea a la conversación de sus hermanos.
Dante seguía mirando ahora la ventana de su oficina, mientras la sonrisa maliciosa se mantenía en su rostro viendo como de a pocos su plan se hará realidad.
