Ni glee ni sus personajes me pertenece, solo esta historia.

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Llevaban casi veinte minutos sin decir palabra, cada una pensando en el caso de Rachel Berry, tratando de encontrar alguna explicación a todo el enredo que se había dado desde su llegada.

Santana sabía que algo pasaba con aquella chica, lo supo desde la primera vez que la miró a los ojos, aquellos ojos llenos de dolor y culpa.

Siempre se había considerado una mujer dura, indomable, al parecer nada le tocaba el corazón, hasta el día que conoció a Berry.

Y es que esa niña le recordaba tanto a ella misma, cuando era una adolescente, no sabía cómo, pero iba a descubrir toda la verdad.

Por otra parte, Quinn solo pensaba en cómo una chica tan hermosa, había terminado en prisión.

Si, hermosa, para la rubia no había pasado desapercibida la belleza de la morena, lo cual la asustaba, era una reclusa,y ella no podía verla de diferente manera.

- Santana?

- Mhm?- la latina miraba hacía la nada, pensando en tantas cosas, pero sin mirar a su amiga.

- Crees que Rachel sepa algo?- esta vez Santana levantó su rostro para mirar a Quinn.

- algo de que?

- Pues de todo esto, de lo que está pasando con su caso, porque hasta ahora, no he visto que diga nada al respecto.

- rubia aquí hay dos opciones, la primera es que, haya algo muy grande o muy grave que le impide decir la verdad, o la segunda, que sea una experta en mentir y nos esté engañando.

- Definitivamente es la primera.

- porque estas tan segura de eso?

- oh vamos Santana, tú misma has visto su mirada, si se tratase de un engaño, ella ya hubiera dicho algo para hacernos dudar más, pero no lo ha hecho, no se ha defendido hasta este momento.

- y que podría ser eso tan grave que le impide decir la verdad?

- no lo se, su familia quizás?

- eso!- la morena se paró de su silla y se dirigió a él escritorio de la rubia - muévete rubia- santana tecleaba aquel computador con una velocidad increíble.- Muy bien aquí lo tenemos.

- que rayos haces Santana, de que hablas?

- de esto, mira - la rubia se acercó a su compañera y miró la pantalla. - esto quizás es una pista o algún indicio de algo turbio en el caso de Berry.

- sigo sin entender Santana.

- rubia tonta, mira, aquí dice que en el lugar de los hechos se encontraba la madre y hermano menor de la acusada, pero nadie sabe sus paraderos.

- oh vaya, entonces, ¿crees que ella sabe dónde están?

- no lo creo Quinn, estoy segura de que así es, quizás por eso ella prefiere callar y no meterlos en problemas.

- y cómo podemos saber qué es lo que pasó con la familia?

- tengo una idea…

- dios, tus ideas me dan un poco de miedo.

Siempre pasa algo malo.

- esta vez no será así, confía en mí.

- y que se supone que harás?

- Pues tendré que pedir un poco de ayuda a ya sabes quien.

- pues no, no se a quien, ya que nunca me has dicho el nombre López.

- tranquila rubia, un mago nunca revela sus secretos.- el móvil de la latina vibró, esta lo revisó y leyó el mensaje que acababa de llegar.- es hora de empezar con el plan Fabray.

- que? Por que?

- acaba de llegar la nueva celadora, tengo que ir a recibirla, hablamos en un rato de acuerdo?

- Muy bien, me avisas cualquier cosa.

- por supuesto, hasta pronto.

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La latina llegaba a las regaderas, había tenido que asegurarse de que nadie la viera entrar.

- hey, necesito hablar contigo.

- vaya vaya, vean a quien tenemos por acá, nada más y nada menos que a la jefa de celadores, la oficial Santana López.

- deja las presentaciones para después quieres, ocupo un favor.

- uy pero qué confianza la de usted no? Por qué habría de hacerle ese favor?- la chica se reía de una forma altanera, y eso solo molestaba a la latina.

- porque si no lo haces, le diré a todo mundo la verdadera razón por la cual estas aquí, y dudo mucho que quieras eso cierto?- adiós sonrisa, punto para la latina.

- de que se trata ese favor?

- Has escuchado hablar de Rachel Berry?

- la chica nueva? Por supuesto, creo que todos hemos escuchado hablar de ella,se ha vuelto muy famosa acá dentro, quizás eso se deba a que es nueva… pero que pasa con ella?

- Quiero que investigues todo de ella, absolutamente todo.

- y eso para que o que?

- eso no es de tu incumbencia.- Santana estaba a punto de marcharse pero la otra chica no se lo permitió y la tomó del brazo impidiéndole dar un paso más.

- y qué obtengo a cambio?

- Mi silencio, es poco o con eso te basta?.- la mujer no dijo nada más y dejó que Santana se marchará definitivamente.

La chica miró como la oficial López desaparecía por los vestidores, cuando se creyó sola, se hundió en el piso y comenzó a llorar como un bebé.

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- Oficial Santana López?

- Si soy yo, a sus ordenes. - la latina llegaba a su oficina y se encontraba con una mujer alta y muy mal encarada.

- Soy la oficial Sue Sylvester y a partir de ahora soy miembro de su equipo de celadores en esta prisión.

- OH sí, justo la estaba esperando, ya está todo para que empiece a partir de mañana.

- oh bueno, creí que empezaría desde este momento.

- Quiere empezar desde ahora?

- claro, por qué no? Soy adicta al trabajo en realidad.

- Muy bien pues, le parece si le doy unas listas que debe aprenderse y ya puede empezar?

- Me parece perfecto.

- genial, andando.

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Mercedes llegaba a su celda, su día había sido muy complicado, había trabajado todo este, y para el colmo, se encontró con el grupito de kitty, esa chica era odiosa, necesitaba dormir cuanto antes.

- Rachel? Qué haces acá? Están a punto de servir la cena.

La pequeña morena estaba sentada en su cama, perdida en sus pensamientos.

- yo, no tengo hambre, creo que comí demasiado por la tarde.

- bromeas? La comida que dan en este lugar apenas si te ayuda por unas horas, no puedes estar sin comer.

- Pero no tengo hambre.

- la verdad es que no soy muy buena para escuchar las penas de las personas, pero, si eso es lo que necesitas, yo puedo escucharte.

He visto que la estas pasando mal, y entiendo, los primeros días no son nada fáciles créeme.

Antes de venir acá estuve en una prisión de máxima seguridad, los primeros días fueron un verdadero infierno, ya sabes, hay mujeres peligrosas, que tenían mucho tiempo encerradas, y obviamente ya gobernaban ahí adentro.

Todo fue tan difícil y doloroso.

- Y como le hiciste para sobrevivir a ese infierno? He visto que ahora todas te respetan e incluso te temen.

- Necesitas mucho coraje, valor y carácter, si no lo tienes te comerán viva.

Pero sabes, tú tienes esa ventaja que no todas tienen.

- ¿Cuál ventaja?

- Que cuando se enteran que la razón por la que estás aquí adentro es porque has matado a una persona, lo primero que hacen es temerte, tú debes encargarte de que ese temor les dure y también que te respeten.

- Ya saben porque estoy presa?

- por supuesto Rachel, eso es lo primero que se sabe de la nueva.

- vaya.

- y tu familia cuando vendrá a verte?

- Ellos no vendrán.

- pues, lo lamento.

- Iré a darme una ducha, aprovechando que las regaderas están vacías, nos vemos en un rato.

La morena se puso de pie, y tomó una de las toallas que se le habían entregado al inicio, lo que menos quería era seguir hablando de aquello, de su familia.

- Rachel?

- si?

- Cuidate por favor.

- Claro, nos vemos Mercedes.

Rachel salió de la celda y se dirigió a las regaderas, sin percatarse de que una persona la miraba desde lo lejos, con una escalofriante sonrisa en su rostro.

Cuando perdió de vista a la morena, dejó aquel pasillo y se dirigió a los comedores, tenía planes para esa noche.

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Alex Gordon

Alex Gordon era una de tantas reclusas que se había ganado el ser enviada a una prisión de mínima seguridad, gracias a su buena conducta y a su progreso con el psicólogo de su anterior prisión.

Alex fue arrestada por haber estado involucrada en muchas peleas callejeras, su actitud y su carácter, la hacían ser la mejor en las peleas, pero la desgracia vino a su vida cuando en una de estas peleas, no pudo controlar su ira y golpeó a un hombre hasta dejarlo sin vida.

Su condena fue de 25 años de prisión, cuando apenas tenía 20 años de edad.

Fue atendida psicológicamente en prisión, y fue diagnosticada conTEI (trastorno explosivo intermitente) esto la hacía muy agresiva y peligrosa, pero gracias a esos mismos psicólogos ella pudo controlarse por muchos años, logrando un cambio enorme y exitoso.

Las personas con trastorno explosivo intermitente pueden descontrolarse con un solo golpe.

Llevaba 15 años encerrada, 10 años controlando su enfermedad, y así quería seguir para salir cuanto antes de prisión.

La mujer se encontraba en uno de los comedores con su pequeña pandilla, cuando una de sus compañeras le entregó un pequeño papel que decía, "Sal al pasillo, es urgente"

Miró a todo mundo, no sabía de que se trabajaba así que solo dejó su charola y salió al pasillo.

- Hola?- la pelirroja no veía a nadie por el pasillo, escuchó ruidos y comenzó a caminar para encontrar la razón de aquellos sonidos, sin saber porque, se puso nerviosa, se había alejado del comedor y aun no sabía quién le había enviado la nota.

- Hola Alex

La chica pegó tremendo brinco del susto.- Oficial, me ha asustado, yo, solo vine a tomar un poco de aire.

- tranquila Alex, fui yo quien te envío la nota, tengo un trabajo para ti.

- cómo? Usted? Pero jamás la había visto en esta prisión.

- Soy nueva acá, y necesito tener a una persona que sea algo así como mi mano derecha, obviamente que será muy bien recompensada.

- Ah sí?, y de que se trata esa recompensa?

- Pues verás Alex, me he enterado que, tú familia no puede ayudarte económicamente. Así que, si tu me ayudas, yo te ayudo.

Además, también supe que tu madre está enferma y necesita dinero para una operación cierto? Pues también puedo ayudarte con eso, claro si tu me ayudas.

- Y como puedo ayudarla?- mentiría si decía que no le importaba la recompensa, pues necesitaba ayudar a su madre, pero algo no estaba bien en todo eso, lo sabía.

- pues, supe que eres muy buena en eso de las peleas así que…

- No, no no no, olvídelo no pienso hacer nada que tenga ver con eso.

- Lo harás, porque si no, tu madre se muere, y apuesto que no quieres eso cierto?- la chica solo agachó su cabeza y cerró sus puños con odio y coraje, había luchado tanto contra su enfermedad para que llegara una desconocida y la hiciera caer de nuevo.- si, justo eso pensé, bueno Gordon , tú trabajo será sencillo, y pues cuentas con una pandilla de 3 chicas, no es necesario que tu te ensucies las manos.

- De que se trata?

- De Rachel Berry, acaba de llegar a esta prisión.

- la chica que fue acusada de matar a su padre?

- así es, justo ella.

- Bueno pues, quiero que le lleves un recado de mi parte.

- Y qué recado es ese?

- Dile, que alguien allá afuera, la tiene muy bien vigilada, que más le vale que se mantenga callada con respecto a su caso, porque si no, su familia pagará las consecuencias.

- De acuerdo lo haré.

- Excelente, además de eso, necesito que la tengas vigilada, que me mantengas al tanto de todo lo que esa chica hace y dice acá dentro.

- Por cuánto tiempo?

- Por el que yo te diga, tranquila no será difícil,.

- ¿Cuando empezaría todo?

- En este momento, Rachel acaba de irse a las regaderas, quiero que vayas y le des una pequeña bienvenida, y también que le des mi recado…

Pero ten cuidado, no quiero que se te pase la mano ok?

- Ok…

- Muy bien, si haces todo lo que te digo, y como lo digo, cada semana recibirás una generosa recompensa para ti y otra para tu pandilla, además, tu familia también va a recibir dinero.

- Muy bien.

- Ve y haz tu trabajo Gordon.

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Una Rachel Berry salía de la ducha mucho más relajada y tranquila, había usado el agua como el camuflaje de sus lágrimas, como deseaba volver 10 años atrás, donde su familia era perfecta, donde todo era paz y amor a su alrededor, solo quería devolver el tiempo, pero eso era más que imposible.

Se puso la ropa y los zapatos, sus ojos le ardían de tanto llorar, escuchó voces y la puerta cerrarse, "que bobas" pensó la morena, todas sabían que no se podía cerrar la puerta.

El ruido cesó y a la morena le pareció extraño, miró hacía la entrada y había cinco chicas, totalmente desconocidas, la miraban fijamente, esto la puso muy nerviosa.

- ¿Necesitaban algo?- Rachel se quedó quieta cuando vio que las chicas comenzaron a rodearla, excepto una.

- Pues la verdad Rachel, es que si necesitamos algo.- dijo la chica pelirroja que se quedó en la entrada.

- ¿que necesitan? ¿Cómo sabes mi nombre?-.

- Todo el mundo acá dentro sabe te nombre Berry, todos sabemos tu historia y la razón por la que estás aquí adentro.

Pero no vengo a hablarte de eso, más bien he venido a traerte un recado.

- ¿Que recado? ¿de qué hablas?

- es un recado del jefe.

-¿ Que jefe?

- Sabes bien de quien hablo,

El me pidio que te dijera- la chica entró en el círculo y llegó hasta Rachel, quedó frente a ella, a escasos centímetros de su rostros. - Que mantuvieras tu boquita bien cerrada, que no hablaras de tu caso ni de lo que pasó ese día, o si no…. Tu familia pagará las consecuencias.

¿Te a quedado claro?

- No se de qué demonios me hablas.- la morena estaba temblando de miedo, estaba aterrada, y su voz la delataba.

- Parece que no te ha quedado claro, pues tranquila, ahorita te lo aclaramos, que lo disfrutes.- salió del círculo y volvió a la puerta.

Rachel quiso escapar pero le fue imposible, retrocedió y se topó con la pared, "este es mi fin" .

La chica más alta le propinó un golpe en la cara, el primero de muchos, perdió la cuenta de tantos puñetazos y patadas que recibió.

Comenzó a llorar, de nuevo, como hace quince minutos atrás lo hacía por el dolor de la situación en la que se encontraba, ahora el dolor era otro.

Era físico.

No supo cuando pararon, pues al sentir que su cabeza era impactada contra la pared, cerró los ojos y no supo más de ella.

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HOLA A TOD S LOS QUE LEEN MI HISTORIA, ESTUVE LEYENDO SUS REVIEWS, Y VEO QUE ALGUNAS YA ESTÁN HACIENDO SUPOSICIONES DE LO QUE VA A PASAR EN LA HISTORIA, Y ME ENCANTA LA MENTALIDAD QUE TIENEN, PERO OBVIAMENTE TODO A SU DEBIDO TIEMPO.

Sibeth, me alegro de que te esté gustando la historia, saludos hasta Venezuela.

Luisa, tranquila, no pienso abandonar esta historia, la terminaré para publicar otras que tengo ya listas.

Charliemichele16, gracias por tan hermosos comentarios.

Obviamente no son todos los los que dejan su reviews, pero he decidido qué les responderé a los tres comentarios más lindos o a los que más comentan en cada actualización.

Les agradezco a todas esas personas que se toman su tiempo para comentar En especial a…

- CharlieMichele16

- JessVM

- 15marday.

Nos Leemos Pronto!