Saludos, para hacer un poco corto este asunto de la actualización tardía, entre la pandemia, conservar el trabajo pese a pandemia y otros asuntos bastante desgastadores mentalmente, perdí el camino un poco respecto al escribir, recientemente con ayuda de la música y de darme un tiempo para meditar y aceptar que quiero vivir disfrutando lo que me gusta hacer, pues andamos rascando tiempo de aquí y allá para seguir avanzando jeje, un agradecimiento adelantado a quien aún siga leyendo este fic, sin más vamos a las advertencias y a darle.

Las recomendaciones se mantienen: Normal para hablar, () para acciones, negrita pensamientos, negrita cursiva pensamientos especiales, cursiva citar lo dicho por otro personaje. Y lo ya conocido: Los personajes y franquicia de Bolt (salvo los OC) pertenecen a Disney (A ver si algún día lo aprovechan).


El sabor de la (Desesperación/Calidez)

- ¡BOLT –

El sobresalto que tuvo fue tan fuerte que incluso se salió de su cama, estaba de alguna forma tan impresionado que no se dio cuenta que había lanzado a Mittens un poco por los aires, pues ésta se había acomodado para dormir sobre él para sentir su calidez.

Mittens – (Haciendo clara gala de la capacidad felina había caído de pie) - ¿Bolt? – (podía ver claramente el rostro de su can completamente desconfigurado, su mirada parecía temblar y su expresión era una mezcla como de temor y preocupación) - ¿Tuviste alguna pesadilla? –

Bolt – (No le respondía, podía escuchar a Mittens hablar, pero no podía entenderla, había escuchado claramente una voz gritar su nombre, no podía decir el por qué… pero) – esa voz era… familiar… pero sonaba tan asustada – (movía la cabeza a todos lados intentando saber si acaso aquella voz se encontraba cerca) - ¿De dónde? –

Mittens – (Si antes le preocupaba que algo pasara, ahora más) – Bolt ahora sí me estás preocupando… ¿Qué sucede? – (podía ver claramente que parecía buscar algo con sus orejas, como si buscara escuchar algo, por lo que ella también intentó buscar algún sonido, pero fuera de los sonidos de la noche, no escuchaba nada, salvo alguna ave pues el amanecer estaba próximo) –

Bolt – (No escuchaba nada, comenzó a relajarse además que comenzó a notar a Mittens y el cómo lo miraba preocupada) – yo… perdona jeje… creo que tuve una especie de… -

- ¡Bolt! –

Ahí estaba de nuevo, esa voz que lo despertó, pero no sonaba tan fuerte, era como si estuviese alejándose y mientras más lo hacía más crecía en su pecho un fuerte sentimiento de desesperación, como si sintiera que dejar ir esa voz era un error, que algo terrible sucedería, no dudó y salió corriendo con todas sus fuerzas, siendo seguido de inmediato por Mittens.

Mittens – (No entendía que estaba sucediendo, por un momento vio que se estaba relajando y ahora simplemente salía disparado con una mirada extraña) - ¡Bolt! ¿A dónde vas? ¿Qué está sucediendo? – (pero por más que gritaba él no parecía escucharlo) –

Claro que sus gritos no pasaron desapercibidos, algunos asomaron la cabeza del granero cuando la escucharon gritar, justamente Az y Mint vieron cuando Bolt pasó corriendo por allí y luego vieron a Mittens persiguiéndolo, tanto por las expresiones de ellos dos como por la forma que Mittens intentaba hacer que Bolt reaccionara, sin embargo no se pusieron a pensar realmente, salieron corriendo detrás de ambos sin decir nada, dejando a Garm que era el único que se había despertado aparte de ellos, quien al no entender decidió quedarse para cuidar a los demás, después de todo, sabía que aunque corriera no podría alcanzarlos, pero dentro de sí deseaba con todo su ser que nada malo estuviera sucediendo, mientras al girarse notó algo más…

Garm - ¿Y dónde está Blaine? – (lo buscó con la mirada, pero nada, de hecho, cuando despertó y vio salir a los otros dos cuando se escuchó la conmoción no recordó haberlo visto) – quizá fue a dar un trote… en todo caso espero todo esté bien –

Mittens corría tan fuertemente como podía, pero Bolt le estaba sacando una ventaja considerable, algo que comenzaba a desesperarla poco a poco pues no entendía lo que estaba pasando, simplemente sabía que de pronto él se había despertado arrojándola a un lado, estuvo por hacerle una broma cuando vio su rostro tan preocupado, luego simplemente parecía no escucharla y acto seguido se lanzó a correr sabrá el cielo a donde.

Mittens – El problema es… que si sigue así voy a perderlo rápidamente – (de cierta forma maldecía en este momento el hecho que, al nunca necesitarlo realmente, no hizo nada en general por mejorar su velocidad de carrera) – nota mental… comenzaré a entrenar también – (sus preocupaciones crecieron cuando veía que él se alejaba más y ella comenzaba a cansarse, pero de pronto algo la levantó en el aire dejándola en algo bastante suave, pero parecía haber incrementado la velocidad) - ¿¡Eh?! –

Mint – Espero no te moleste que te de un aventón mi buena amiga – (su tono de voz era casi el de siempre, aunque notaba un cierto toque de seriedad, como si no quisiera mostrar algo más) – no te preocupes, no vamos a perderlo ¿Verdad tío? –

Az – (Sorprendentemente para la felina podía ver a Az corriendo a la misma velocidad de Mint y parecían estar alcanzando a Bolt, pero no parecían tener la intención real de llegar hasta él) – Por ahora vamos a seguirlo únicamente… luego lo entenderás… - (hablaba entrecortado por la velocidad a la que tenía que ir para mantener el ritmo, pero no pareciera mostrar algún signo de cansancio) - ¿Cuántas más sorpresas me va a terminar dando este cachorro? – (luego volteando a ver a Mint) – Imagino que saliste corriendo por la misma razón que yo… -

Mint – Sé reconocer perfectamente ese rostro, no es completamente como el que conozco, pero la mirada es inconfundible… - (no pudo más que dedicar una sonrisa nerviosa mientras veía a su amigo seguir corriendo para internarse al bosque) – no lo he vivido pero puedo sentir que de cierta forma… -

Az – Lo sé… más nos vale estar preparados – (sin duda tanto ella como él habían entendido lo mismo en cuanto vieron al perro salir corriendo, ambos sabían que tenían que ir sin tener tiempo a dudar) – si me atreviese a dudar juro que yo mismo me arrancaré una oreja… - Mint, por orden protegerás primero a la gata y al perro… yo iré primero sea lo que sea –

Mittens – (De alguna forma se sentía completamente fuera de esa conversación, no entendía absolutamente nada) – Y no es como que esta conversación me esté dando pistas de nada… - (detestaba esa sensación, se sentía completamente inútil, aparte estaban hablando de una posible pelea, pero, ¿Por qué Bolt iría hacia un lugar peligroso y cómo es que estaba yendo?) – No entiendo nada… pero eso no es lo importante – (podía ver ese lomo blanco que iba por delante) – estaré a tu lado y pase lo que pase lo enfrentarás conmigo estando ahí para ti –

Para Bolt todo lo que estaba sucediendo atrás le era completamente ajeno, no entendía lo que pasaba eso era cierto, pero esa voz, aunque seguía escuchándola lejana podía sentir que sonaba preocupada, con miedo, por algún motivo que no era claro, escuchar esa voz de esa forma le llenaba el pecho de cierta desesperación, lo único que podía hacer era forzar sus patas a correr con todas las fuerzas que tuviera, de una cosa estaba seguro, no era peligrosa y que tenía que seguirla, algo realmente importante estaba pasando y sabía que si lo ignoraba se arrepentiría de alguna forma.

Bolt – (Seguía corriendo, cuando de pronto dejó de escuchar esa voz, dejó incluso de sentir esa sensación que tenía mientras la escuchaba, por un instante comenzó a pensar que quizá estaba imaginándose cosas) – no lo sé… se sentía completamente real… pero ya no la escucho ni la sien… - (fue en ese momento que algo nuevo captó sus sentidos, ahora que dejó de escuchar la voz, su nariz sintió algo conocido, era un aroma que no podría confundir en toda su vida, pero apenas había tomado dirección hacia ese lugar sintió una fuerte embestida por un costado) - ¡Hmmpp! –

Cuando se dio cuenta se trataba de Mint que lo había embestido derribándolo con facilidad al no haber visto venir eso aparte que ni siquiera sabía que estaban acompañándolo, antes de decir algo más vio a Mittens saltarle al pecho o ser arrojada, no le quedó claro.

Mint – (Mientras estaba corriendo tras Bolt sus sentidos se alertaron de inmediato, su nariz, mucho más sensible lo sintió de inmediato, por lo que ahora sí corrió para alcanzar a Bolt quien parecía haber bajado un poco la velocidad, apenas lo alcanzó lo embistió para derribarlo) – Luego te explico – (dijo rápidamente al saber que Mittens le preguntaría por su actuar, pero aparte su voz había salido completamente seria, tomándola de su lomo la lanzó hacia Bolt) – quédate con él y no permitas que avance más –

Az – (Observó las acciones de Mint, pero no se preguntó la razón, había notado que su nariz se movía incesantemente desde hacía un momento) – es cuando realmente me molesta que nuestras narices no sean tan sensibles en ciertas ocasiones… - (apretó sus colmillos mientras pasaba corriendo al lado de los otros dos, siguiendo a Mint) - ¿Recuerdas lo que te había dicho de nuestra formación de combate? – (le recordó molestándole un poco que a pesar de haber sido bien entrenara se olvidara tan rápido de las órdenes que le había dado… pero nada lo había preparado para ver el rostro que ella le mostraba ahora) – maldita sea… -

Mint – (Había dejado a los otros dos por una muy poderosa razón) – huelo sangre… mucha y… esencia de lobo – (apretó sus colmillos mientras podía sentir su pulso incrementarse, su propia sangre parecía agolparse en sus venas de forma salvaje) – Blaine… - (volteó a ver a Az cuando éste le había reclamado, ella misma no podía verse el rostro, pero sabía que era especial cuando vio la reacción del felino) –

Az – (Nunca en su vida habría pensado que alguien podría poner ese tipo de rostro, al menos, no conscientemente… ante él veía el rostro fúrico de una loba, su mirada temblaba, pero parecía ser aún ella misma, aparte lo que realmente estaba impactándolo, combinado con ese rostro estaban las lágrimas de una hija) – ¡Maldición… maldición!… esto no puede estar pasando –

Mint – (No tenía tiempo para perder, luego de voltear de nuevo corrió con fuerza llegando a un claro donde podía ya ver lo que la esperaba… su corazón estaba apretado completamente y cuando salió del bosque no pudo evitar sentir su pelaje erizarse como nunca mientras corría usando todas sus fuerzas lanzando un grito que asemejaba la mezcla de un aullido y un gruñido) - ¡PADRE! –

En ese mismo momento había una parte del bosque donde no había ningún animal presente, incluso pareciera que los insectos se habían ido del lugar, si bien el alarido salvaje que acababa de resonar podría ser causa, la realidad era que fue culpa de la pelea que allí había sucedido. La tierra que había en el lugar estaba manchada de sangre, trozos de troncos se veían en varias partes, incluso algunos de los árboles estaban marcados con golpes y sangre por igual, en medio del lugar yacía un cuerpo, solamente uno, un can cuyo pelaje era color café, tenía diversas heridas en el cuerpo, marcas de colmillos y garras marcaban desde la cola hasta el cuello, si bien las marcas parecían no ser realmente profundas del todo, el sangrado era sin duda lo que mayor problema representó, sobre él se había lanzado aquella que profiriera semejante aullido hace poco.

Mint - ¡No puedes irte de esta forma! – (sus gritos eran desgarradores, el dolor de su voz era notable) – Esto tuvo que hacerlo un lobo… una de esas malditas bestias – (detuvo rápidamente su tren de pensamiento, Blaine siempre le dijo que tenía que sentirse orgullosa de esa parte suya, su padre era un lobo honorable) – pero… pero ahora mismo… - (estaba hiperventilando, su respiración era en verdad errática, sentía un cúmulo de pensamientos que se agolpaban de diferentes formas) –

Az – (No se había dado cuenta en qué momento, hasta que sintió cierta humedad, sus garras estaban completamente clavadas en sus patas, quizá era ese dolor el que le permitió pensar un instante con claridad) – No puedo dejarme llevar fácilmente por la locura… aun no… - ¡Mint! Rápido… revísalo… no parece que las heridas estén desangrando… - (claro que eso no era realmente un alivio pues podría fácilmente significar que se encontraba ya desangrado, una idea que alejó de inmediato con furia de su mente) –

Apenas escuchar eso, la joven híbrida desechó cualquier pensamiento, ciertamente se había dejado llevar y no había logrado mantener la calma, aunque nadie la podría culpar realmente, comenzó a revisar el cuerpo, se sentía frío, pero no completamente, notó como las heridas, aunque se veían algo abiertas no estaban sangrando, y fue cuando sus sentidos pudieron al fin volver a comunicarse con ella que pudo sentirlo… un pequeño sonido, muy tenue, así que agachó su cabeza hasta el hocico del perro…

Mint – R…r…res…respira... a…¡Aún está respirando! – (el alivio que pudo experimentar en ese momento no tenía igual) – d...debemos llevarlo de inmediato a tratarlo – (sin embargo ella no podría moverlo sobre su lomo sin temor a lastimarlo, no quería, pero necesitaría la ayuda de Bolt) –

Mittens – (Justamente acompañando a Bolt habían llegado, ambos se habían quedado petrificados, podía sentir sus ojos llenarse de lágrimas, el lugar era una pesadilla, la sangre, las marcas claras de la pelea y el cuerpo, lo único que había impedido que gritara aparte de su estado de shock era que había escuchado a Mint decir que aún respiraba) – D…debemos…a…ayudar Bolt –

Bolt – (Para sorpresa de ambas él ya estaba caminando directo hacia el cuerpo para procurar colocarlo sobre Mint, quería llevarlo él mismo pero sabía que no tenía la fuerza suficiente) – ahora es momento de estar en calma… él haría lo posible por actuar correctamente antes de dejarse llevar por lo que sucede… - (como si fuera una terapia se decía una y otra vez mentalmente que debía hacer primero lo necesario y después tendría tiempo de desmoronarse si era necesario) – je… parte de mí no entiende cómo estoy haciendo esto… - (así era, le costaba creer que estaba tranquilo, sentía como si algo hubiese cambiado en él, pero de una forma muy positiva) – Mint… ¿Cómo vamos a llevarlo sin que se caiga? –

Mint – (Escuchándolo reaccionó al respecto, claro que podía cargar y correr con él prácticamente a toda su capacidad, pero, no podría mantenerlo quieto sin haber traído nada para asegurarlo) – No…no había pensado en eso… maldición necesito ir rápido, pero podría dejarlo caer… -

Az – No tienes que preocuparte por eso… - (todos voltearon a verlo, podían verlo calmado en parte, sus colmillos aun sobresalían de su boca y podían ver claramente como tenía sus garras clavadas en sus propias patas para mantenerse así) – sus heridas no se reabrirán tan fácilmente, no han cicatrizado pero fueron tratadas… no hay tiempo para hablar ahora – (sabía que le preguntarían al respecto pero ciertamente desperdiciar instantes valiosos era un lujo que no tenían) – Mittens, sube sobre Blaine y mantenlo en posición mientras Mint corre… e… estoy seguro que puedo confiarte eso ¿No? –

Mittens – (Ya esas palabras la habían sorprendido, pero podía entender que la pregunta no era para que la respondiera, ya que era realmente para sí misma) – Mint, me aseguraré que no caiga… tu encárgate de llevarnos de regreso, Bolt de ser posible intenta correr por el lado izquierdo de Mint ya que la cabeza de Blaine está de ese lado podría dominar el peso hacia allí – primero debemos salvarte, así como nos has salvado a los que estamos aquí – (no dijo más, sabía que si Az se lo había encargado era porque él no pensaba acompañarlos, sabía que era inútil pero tenía que intentar convencerlo que se regresara con ellos) – Az… -

- No… te atrevas… A ir… - Escuchar esa voz para los cuatro traía diferentes emociones en general de cierta forma era de alivio, pero también, dolor, el sonido era rasposo, grave y apenas audible marcando la gran debilidad con las que eran dichas además que denotaban gran falta de aire al intentar hablar

Az – (Se giró para no ver a nadie, sabía que si lo veía) – no debo dudar… yo debo ir a encargarme de ese maldito que se atrevió a dañar a mi familia, no puedes detenerme – (sentía su pelaje erizado, su sangre acelerada agudizando todos sus sentidos, algo no tan positivo para su intención pues podía escuchar más claramente esa voz, pese a todo lo notado previamente, seguía siendo la misma amable voz) –

Blaine – No… vayan… no son… rival – (se escuchaba como le costaba articular cada palabra y entonces no digo más al parecer desmayado, aunque por cómo lo encontraron quizá siempre lo estuvo y de alguna forma pudo decirles eso al sentirlos cerca) –

Az – (Habiendo escuchado esas palabras sentía su ira que estaba hirviendo, simplemente deshacerse) - ¡¿Cómo demonios puedes pedirme eso perro estúpido?!, eres mi hermano, eres mi familia, eres el primero que intentó y supo entenderme, eres el que me hizo entender lo que era tener una familia, eres el maldito que me hizo amar la vida… y estás ahora ante mi casi muerto, Blaine… no importa si pudiera encontrar a todos los demás… no importa si puedo proteger a nuestro hermanito… ¿Qué podría significar para mi quedarme en este mundo donde no voy a estar escuchando tus sermones de amabilidad?... – (lloraba intensamente, no le importara que los demás lo vieran, esto era algo más grande que cualquier cosa para él – amé y respeté a nuestro padre con todo mi ser… pero eres tú a quien yo admiro y a quien genuinamente le debo la vida… - ¡Dense Prisa y llévenlo ya!... yo los alcanzaré luego… -

Los demás no perdieron más tiempo y comenzaron con su misión, Mint se concentró en correr con toda su capacidad aunque intentaba evitar cualquier movimiento brusco, Mittens usaba todo de sí misma para mantener a Blaine posicionado de forma que no cayera, se sentía un poco mal, pues parte de ella deseaba seguir teniendo garras aunque tuviese que clavárselas en el lomo a Mint, por su parte Bolt corría con fuerza, le costaba mantener el ritmo de Mint, pero por alguna razón sentía que podía hacerlo, su cuerpo estaba cansado pero parecía dispuesto a no defraudarlo en este esfuerzo, recordaba que sintió algo similar cuando se lanzó al incendio por Penny.

Por su parte el felino de pelaje negro tenía una lucha interna, cuando sintió que se habían ido, se había limpiado el rostro e intentó buscar y seguir el rastro que seguro había dejado aquél maldito al cual quería hacer pagar, pero cuando había sentido ese rastro, su cuerpo no parecía obedecerle, quería lanzarse, pero sus patas no le obedecían, resonaban en su cabeza las palabras de su hermano, palabras que podrían ser quizá las…

Az - ¡NO!... él es… demasiado necio, no morirá tan…fácilmente por un simple lobo… - (sonaba más a que quería auto convencerse de eso) – quiero ir tras él… puedo desatar toda mi locura… "no son… rival" eso dijiste… ¿Realmente ese sujeto es tan peligroso? Dime, ¿Usaste tu propia sed de sangre?... aun así, yo… - (le costaba obedecer esa orden de no ir… pero de cierta forma era algo inevitable, salvo esta ocasión que lo había admitido prácticamente… para él su hermano era una autoridad) – sería tan fácil desobedecer… … no… no lo sería… además quiero verte recuperado para poder golpearte, si ibas ir a pelear… si ibas a venir - ¡Debiste habérmelo dicho! – (elevaba su voz a los cielos que ya mostraban el amanecer) – no habría dudado en venir y luchar a tu lado – (poco a poco tranquilizaba su mente y sus emociones) – y si teníamos que irnos al infierno, lo haríamos… -

Una vez que sentía que sus emociones comenzaban a estar de nuevo en su control, el felino respiró profundamente, yendo a donde antes estuvo el cuerpo de su hermano, es cuando notó algo, donde había estado, no habían manchas de sangre, entonces supo que sus suposiciones eran correctas, alguien había tratado inicialmente a Blaine, había visto algunas hierbas en el lugar, cuando las tomó las reconoció, era de un tipo cuya savia era capaz de detener sangrados, fue entonces que sus orejas se levantaron y pudo percibirlo, desde que llegaron, no habían estado solos y habían sido observados.

Az – Puedo suponer que fuiste tú – (se giró para ver hacia el bosque donde un par de ojos rojos estaban observándolo) – comenzaré dándote las gracias… ahora bien – (sacó sus garras nuevamente colocándose en posición) – me gustaría escuchar una explicación de tu parte… o la extraeré yo mismo –

Se había despertado con un sobresalto, no recordaba estar soñando con "aquello" que era lo único que según ella le hacía despertar así, esto era diferente, fue como si algo le atravesara el pecho, una punzada, pero al levantarse pudo darse cuenta que no había realmente algo por lo que estar sobresaltada, estaba en el granero, estaba recién amaneciendo, quizá lo único extraño del lugar era el no ver a todos los que normalmente veía ahí, no veía a Mint en ningún lado, Blaine tampoco estaba, Garm estaba despierto pero cuidaba de la pequeña Azur que parecía que era una chica de despertar madrugador, imaginando que estarían haciendo algo respecto a eso de entrenar al perro blanco decidió que se estiraría y esperaría un poco antes de ir a desayunar, sabía que igual tenía que esperar a que las dos humanas se fueran.

Scarlet – MMmmhhhh - (podía sentir sus huesos tronar un poco al estirarse completamente) – sin duda se siente magnífico estar recuperada – ciertamente, él tiene mucho que ver en esto – (sabía que no podría dormir de nuevo así que decidió ver qué hacer en el granero cuando notó una bola de pelo correr hacia ella) – oh no… -

Azur – Señorita Carlet – (le sonreía ampliamente, desde el otro día quedó claro que iba a ser un poco complicado para ella decir bien su nombre) – las señoritas Mint y Ittens no están, ¿Quiere jugar conmigo? – (sonreía radiantemente como la otra vez) – me gustó mucho jugar con usted la otra vez –

Scarlet – Puedes… usar una doble t, no es problema como una sc… - (No entendía del todo por qué le causaba molestia, realmente no le importaba que no pudiera decir su nombre, pero algo en su ser no parecía gustarle que la cachorrita no pudiera decir bien su nombre) – en cambio el de ese dulce sin problemas, a los cachorros les gustan los dulces - ¿No es muy temprano para que juegues tan intensamente sin haber desayunado? – (usaba una voz más bien neutra, procurando no sonar típicamente agresiva como siempre) –

Azur - ¡Nopi! – (esbozó una gran sonrisa) – normalmente me despierto a jugar desde temprano para luego desayunar y estarme quietecita una parte del día – (después de todo por instrucciones de Garm tenía en general que estar tranquila para no llamar la atención del veterinario) –

Scarlet - ¿Mmh? – (dirigió su mirada hacia aquél can, quien asintió silenciosamente, de alguna forma parecía que se sentía culpable por algo, pero aparte se notaba que siempre jugaba con ella) – Oh, pero entonces ¿No quieres jugar con tu papi ahorita? –

Azur – No es eso – (negó con fuerza sacudiendo sus orejitas) – pero, papi se ve un poco preocupado y no quisiera molestarlo… por eso es que vine… a preguntarle si quería jugar conmigo – (poco a poco su voz iba bajando) –

Scarlet – (Luego de escucharla observó de nuevo a Garm, pudo observar ciertamente que algo parecía no estar del todo bien, para colmo eso solo le hizo recordar esa sensación extraña que tuvo al despertar, pero sin los demás no tenía caso buscar respuestas) – por otro lado… ¿En verdad esta pequeña fue capaz de darse cuenta de todo? Y aparte no quiere importunar a su padre… imagino así se ve una cachorra con una relación real con… - ¡Bueno! – (dijo levantando un poco la voz de golpe) – ejem, perdona… vamos entonces, vamos al campo para que las humanas no nos vean –

Azur – (Había dado un pequeño saltito por la sorpresa, pero su sonrisa se hizo bastante presente al escucharla) – ¡Sí señorita Carlet! – (dando saltitos se fue siguiéndola) – papi iré a jugar –

Garm – (Sinceramente se sorprendió un poco, pero sonriendo las vio a ambas) – Claro que si mi pequeña, pero recuerda, debes decir bien el nombre de los demás, se llama Scarlet – (luego dirigió la mirada hacia la aludida) – muchas gracias por jugar con ella, yo… - (pero se calló cuando la vio dirigirle la mirada) –

Scarlet – No tienes que decirme nada, simplemente ella y yo vamos a corretearnos un poco – (luego vio como la pequeña parecía enfrascada en practicar la pronunciación de su nombre) – tranquila pequeña, ya podrás hacerlo en su momento, por ahora ¿No íbamos a ir a jugar? Deja las preocupaciones para otro momento –

Azur – (Había estado algo presionada, pero al escucharla sonrió de nuevo y salió rápidamente tras de la felina escarlata yendo al campo corriendo tras ella) - ¡Sí, a jugar! –

Era cierto que estando únicamente las dos el jugar iba a ser poco menos que una simple actividad de correr, para Scarlet una actividad como esa no representaba realmente algún mérito o algo con sentido, pero para la pequeña ese simple hecho de correr para alcanzarla o para no ser alcanzada parecía ser algo increíble, reía alegremente, disfrutaba en verdad de algo tan simple, le costaba pensar realmente en esto como algo divertido, era claro, para alguien que simplemente no tuvo infancia, algo como esto podía incluso ser algo estúpido, sin duda era lo que su antiguo ser estaría diciendo, pero no ahora, si bien seguía sin encontrarle un significado, sí podía entender lo importante que era para esa pequeña, por tanto no sería ella quien se lo arruinara, de pronto notó algo cerca de ellas.

Scarlet – Oh mira nada más… creo que es tu día de suerte pequeña – (le sonreía un poco a la gatita que se acercó curiosa y de pronto sus ojos se fijaron en algo que sostenía la mayor, era algo como una pelota, pero hecha como de hilos, por alguna razón eso llamaba poderosamente su atención) – jaja esa cara es como si en su vida… -

Azur - ¿Qué es eso? – (su mirada parecía brillar incluso nunca había visto algo así, se parecía a las pelotas que su padre le daba a veces para jugar, pero esta era tan diferente y… atractiva) – se ve muy bonita… ¿Es una pelota? –

Scarlet – En serio ¿No conoces las bolas de estambre? – (incluso ella siendo quien era había tenido alguna que otra bola de estambre, era de esas poquísimas cosas especiales que tenían la capacidad de relajarla, y por lo que veía ahora mismo, parece ser algo intrínseco de los felinos) – bueno, estás a punto de vivir una experiencia como ninguna otra jejeje – (sin más lanzó la bola por el aire, sobre la cabeza de la pequeña) –

Al principio era como una cámara lenta para la joven felina, ni bien observó la pelota pasar sobre ella saltó intentando agarrarla, incluso sacó sus garritas para afianzarla pero aunque logró sentir que la rozó, ésta se le escapó y procedió a perseguirla rápidamente, estaba realmente emocionada, esa Bola de Estambre como le habían dicho se llamaba, era increíble, corría y cuando le daba un zarpazo ésta rodaba pero no como una pelota normal, sino que por trabarse un poco con sus garras terminaba yendo a otra parte.

Azur – Me encanta el estambre – (gritaba feliz a todo pulmón mientras perseguía la bola a todas partes donde rodaba, incluso se atoraba en algunas de las plantas de maíz) – me estoy divirtiendo mucho –

Observarla en ese estado por alguna razón le daba cierta paz, una cierta calidez que no pensaba sentir, cierto era que la otra vez que habían jugado, había sentido un poco de esto, pero era ahora que podía sentirlo más intensamente estando solas y para cuando se dio cuenta estaba corriendo para a veces desviar la bola de estambre a otro lugar o para saltar y destrabarla de lugares que pudiesen quedar demasiado altos para la pequeña, le parecía algo tierno cómo Azur inflaba las mejillas cuando ella intervenía estando a punto de atraparla.

Scarlet – Oh vamos pequeña ¿Olvidas acaso que estamos jugando dos? – (sonrió genuinamente mientras corrían ambas compitiendo por la bola, claro ella se contenía bastante) – no es como que… - (Sentía que estuvo a punto de tener un pensamiento, pero éste se había detenido o acallado, sinceramente no le interesaba, realmente estaba disfrutando este momento) – vamos Azur, ¿Acaso dejarás que te gane? –

Azur - ¡Claro que no! – (moviendo sus patitas para correr y saltar cuando fuera necesario reía con todo su ser, si bien jugaba mucho con su padre, el jugar con Mint, Mittens y claro, Scarlet, era una sensación muy diferente, estando jugando con las tres, y sobre todo en este mismo momento podía sentir una felicidad indescriptible sin duda para ella) – ¿Así es… como se siente… tener mami? – (lejos de deprimirse o entristecerse sonrió más intensamente y se lanzó a jugar con todo su ser) –

Siguieron persiguiendo y jugando con esa bola de estambre, a veces las garritas de la pequeña se atoraban en serio con la madeja, pero Scarlet con calma le enseñaba como poder destrabarse por sí misma, luego de eso incluso a veces se lanzaban la bola una a la otra, es en este momento cuando en una ocasión que Scarlet lanzó la bola y Azur no pudo atraparla, vieron como al rebotar se dirigía para caer al arroyuelo que pasaba por ahí, Scarlet simplemente suspiró ante esa mala suerte, el agua arruinaría la madeja sin duda pero bueno, era algo inevitable, sin embargo, cuando vio los ojos de la pequeña llenos de tristeza mientras veía impotente lo que iba a pasar, simplemente su cuerpo se movió solo… usó toda si velocidad y agilidad como felina para saltar, lograr tomar con sus garras la madeja para lanzarla hacia la pequeña, claro por su naturaleza felina caería de pie, el problema real era…

Scarlet – Odio el agua… Odio el agua… Odio el agua… - (Con la dirección que llevaba la madeja, el haberla salvado solo le había dejado un destino) – Está malditamente fría… ¡AAhhh detesto el agua con cada fibra de mi ser! – (aun así no tuvo mucho tiempo de revolcarse en su furia, podía ver a la pequeña corriendo preocupada, aunque claro sin descuidar la madeja) –

Azur - ¡Scarlet! – (por primera vez pudo pronunciar su nombre, se le veía realmente asustada) - ¿Estás bien?... pe…perdón, d…debí atraparla… pero no llegué y luego… y tú… por mi culpa…- (gruesas lágrimas se comenzaban a formar en sus ojos, cuando sintió una pata acariciarle la cabeza) –

Scarlet – Hey… tranquila ¿Si? – (podía ver esa mirada tan llena de tristeza y culpa cuando hace unos instantes rebozaba de felicidad) – realmente no hace tanto frío – fui yo quien se lanzó al agua además… - (señaló la bola de estambre) – éste es ahora Tu juguete – (le dedicó una sonrisa) – si de ahora en adelante lo cuidas bien, entonces todo estará bien ¿De acuerdo? –

Azur – (Podía sentir lo cálida de la pata que estaba en su cabeza y cuando le dijo aquello no pudo hacer más que abrazar esa madeja con todas sus fuerzas sonriendo con todo su ser) - ¡Sí! … claro que la cuidaré, muchas gracias Scarlet – (nuevamente su mirada estaba brillando con alegría, un poco acuoso, pero estaba feliz) –

Scarlet – Él podría haberla hecho reir incluso… lo que él haría requiere (sabía perfectamente bien algo que podría ayudar, pero se sentía aún bastante insegura, después de todo, hace nada ella había mantenido su mentalidad sobre los cachorros, les tenía aversión, pero no porque los odiara, sino que por su pasado y por todo lo que había hecho, no consideraba que un ser manchado como ella se debiera acercar a una creatura tan pura y dulce… nuevamente sabía que aquel can era el culpable de este cambio aunque no lo hiciera directamente) – bueno linda… si me disculpas – (salió del arroyo para poder comenzar a secarse) – quisiera quitarme un poco el agua de encima jeje –

Fue en ese momento cuando sintió un fuerte escalofrío, no quiso demostrarlo completamente frente a la pequeña, pero sabía que no era por el frío del agua, era un escalofrío de esos que para nada eran naturales, era como un presentimiento, por un momento pensó que algo los estaba acechando, por lo que procedió a ponerse en posición defensiva sacando sus garras, sin embargo, su posición no era para nada protegiéndose a sí misma, estaba cubriendo con su cuerpo a la pequeña, conforme pasaban los segundos comenzó a comprender que la amenaza no era hacia ellas, lo cual le permitió relajarse un poco… sin embargo lo que escuchó a continuación dejó en claro que sí había sucedido algo y que definitivamente no le iba a gustar…

Garm - ¡Blaine! – (fue el grito que se pudo escuchar atravesar los campos, el sonido de la voz no era uno que demostrara que estaba saludando, la voz estaba cargada de preocupación y miedo) –

Scarlet – (Apenas escuchó el grito no dudó en reacomodarse y prepararse para salir corriendo cuando sintió algo) – no estamos solas ¿Recuerdas? - (al voltear hacia abajo pudo ver dos ojos celestes que la veían preocupada) –

Azur – Papi sonaba preocupado… - (su rostro demostraba su preocupación al haber escuchado el grito de su padre) – creo que debemos regresar señorita Scarlet, parece que algo malo pasó – (sus orejitas estaban bajas, pero sus acciones eran claras, se había levantado ya lista para salir corriendo, pero antes de hacerlo pudo ver las patas de la otra gata bloquearle el paso) –

Scarlet – Claro que no linda, apuesto a que todos han regresado y algo habrá hecho ese perrucho para sorprender a tu padre… - (Al menos uno de sus talentos se mantenía estable, era capaz de mentir con naturalidad, al menos la suficiente para que cualquiera que fuera ingenuo le creería) - ¿Por qué no me ayudas a secarme de este baño no planeado que tuve y luego vamos a verlos a todos? – (le sonrió suavemente buscando convencerla, realmente no quería que ella fuera) – es verdad, el tono de ese grito… algo serio pasó… algo le pasó… - (mientras más pensaba las cosas más sentía los impulsos por salir corriendo) – no podemos… ponerla en riesgo – (parte de ese temor que tenía sobre que algo realmente malo había pasado es que apenas escuchó el grito sintió aquella misma punzada que la despertara) – es como si estuviera relacionado… y si lo está… no puede haberle pasado nada… -

Era un momento realmente difícil para ella, en otro momento, no hubiese dudado en abandonar a la pequeña y lanzarse a ver qué sucedía, sabía que era malo, el tono de voz lo dejó claro, sabía que tenía que ver con Blaine por obvias razones, pero lo que realmente le preocupaba era esa sensación en su pecho, era una punzada que parecía atravesarla entera con un intenso dolor, no podía evitar que sus pensamientos siempre terminaran inclinándose hacia una posibilidad, Blaine estaba herido, quizá gravemente, solo pensar eso la hacía gritar internamente para desviar su atención… recordaba perfectamente cuando vio a ese perro dejarse golpear, le había dado rabia que no se defendiera, pero ahora era diferente, si Blaine había peleado en verdad y a pesar de eso había salido herido, entonces era algo grave, ella misma había luchado con él, no era para nada un rival fácil de derrotar o herir, pese a todo, aunque deseaba ir corriendo imaginando que se lo encontraría algo golpeado y sonriendo mientras decía alguna idiotez… esa sensación le decía que no iba a pasar eso, sin embargo, no podía cumplir los deseos de su corazón, no podía ir a averiguar qué pasaba, ahora mismo a su cuidado estaba una inocente cachorrita, alguien que quería mucho a Blaine, al punto de llamarlo tío, si en verdad algo terrible había pasado, podría traumarla.

Azur – B…bueno creo que tiene razón señorita – (la dulce voz de la pequeña la sacó de su ensimismamiento mientras poco a poco retomaba su sonrisa) – a veces papi puede ser un poco exagerado cuando se preocupa jeje – (reía un poco recordando tantas veces que su padre casi gritando preocupado le decía que no hiciera ciertos saltos que para ella como felina le eran algo muy sencillo y hasta como ejercicio) – además el tío Blaine es fuerte, nada le puede pasar – (inflaba el pecho a pesar que era como enorgullecerse por otra persona) – yo la ayudo a secarse – (así acercándose comenzó a ayudar a Scarlet) –

Scarlet – (La vio por un momento observando sus esfuerzos por secarla) – jeje yo también voy a ayudar para secarme – (la pequeña asintió esforzándose aún más) – definitivamente, antes muerta que dejar que le pase algo… y tú perro… más te vale estar bien y que esto no sea nada más que un tonto presentimiento… más te vale que nada te haya pasado… por favor… -


Hasta aquí llega el capítulo, no se vieron muchas cosas ciertamente, pero había que concretar parte de lo que habíamos dejado en el capítulo anterior con un Lobo demente y un perro liberando todo lo que tenía.

Dato curioso: las hierbas mencionadas sí existen, en donde vivo (y quizá tenga ese nombre en otros lugares) existe una planta llamada Piñón, es como un arbusto, su savia es capaz de detener sangrados de una forma increíble, se los dice alguien que se clavó un Pico (de esos de minero) en la pierna y mi padre usando esa savia detuvo el sangrado en pocos segundos.

Sin más pues hasta el siguiente, como dije rasco tiempo cuando me es posible, pero mantendré la constancia en todo lo que me sea posible.