Casi lo olvido, pero finalmente aquí está el nuevo capítulo
Let's Read
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Capítulo 24: Dependencia.Mi cuerpo está totalmente inmóvil, mis alas se encuentran sometidas contra el suelo y mi magia no funciona a causa de lo que creo es un anillo de anulación que sé que ésta loca habrá tenido oculta en la melena.
Sweet Care – Escuche, sé que tal vez es algo loco que… bueno, yo haya reaccionado así y todo eso…
No puedo evitar levantar una ceja ante eso de forma sarcástica. En serio necesito escapar. Pero sin poder pedir ayuda esto solo durará lo que ella dure.
Sweet Care - ¿A quién diablos engaño? Apenas me quite de encima me enviará a la luna… ¿Qué voy a estar comiendo allá? ¿Qué era lo que la Princesa Luna comía?
Mis intentos de moverme se detienen y me enfoco e lo que acaba de decir. No puedo evitar sentir una ligera presión en el pecho, además de la obvia. Realmente no esperaba a que esta lunática mencionase algo así.
Sweet Care - … Tal vez pueda llevarme algunos bocadillos… ¿Princesa Celestia?
Solo cuando finalmente le pongo algo de atención logro sentirme extraña, mi nariz respinga ligeramente y mis mejillas se sienten un poco más húmedas de lo que deberían.
Sweet Care – oh… yo… lo siento, me moveré de inmediato.
Ella se quita de encima de mí y remueve el anillo de mi cuerno, me incorporo suavemente y logro retirar una pequeña bola de hule-espuma de mi boca, permitiéndome hablar.
Sweet Care – lamento el inconveniente, majestad. Aceptaré cualquier castigo que tenga en mente.
Celestia – solo guarda silencio.
Eso pudo haber sonado incluso más severo en mi cabeza de lo que sé que debió haberle sonado a ella.
Doy un suspiro y me acerco a la cama de Juaxen Said, recostándome un poco, atraigo la almohada que la pony de servicio junto a mí estaba olisqueando y la abrazo ligeramente.
Celestia – en serio, no se supone que debas ni puedas hacer eso.
Es lo que alcanzo a decir antes de tener que limpiar una lágrima de mi mejilla.
Celestia – ¿si quiera tienes idea de lo que has hecho?
Sweet Care – Asalto de tercer grado contra personalidad pública, sometimiento en contra de la legalidad, y uso desmedido de fuerza.
Aun si era una pregunta retórica no sé cómo sentirme cuando ella responde. Solo puedo dar un bufido de molestia antes de acostarme por completo en el colchón.
Celestia – No digas nada más, sé lo que tú hiciste, pero dime ¿por qué?
Ella no responde y en su lugar trata de alejarse un poco del hilo de la conversación divagando.
Celestia – habla.
Ella agacha sus orejas y trata de no darse la vuelta, le miro con fuerza y eventualmente logro hacer que se gire, mostrándose bastante más nerviosa de lo que estaba cuando la encontré.
Sweet Care – bueno… y-yo solo quería, ya sabe… hacer eso. Es raro lo sé, pero, desde que conseguí el libro, fue algo… agradable ¿sabe? Pasé años siendo la burla de muchos compañeros a causa de ello. Y ahora qué sé que no estoy loca, que en realidad todo lo que está relacionado con lo que sé es verdad y no solo una mentira bien construida, me hace, perder rápidamente la razón. Es como, si fuera adicta a estar cerca de él.
Mientras dice eso trata desesperadamente de no mostrar su rostro, simplemente acaricia el suelo con su casco por un segundo pienso en regañarla un poco por lo que ella hace pero ¿puedo culparla? ¿Estoy en posición de hacerlo cuando instintivamente he estado oliendo la almohada de Juaxen Said?
Sweet Care - ¡P-pero aceptaré cualquier castigo que usted imponga! S-solo quiero quedarme aquí un tiempo más, por favor.
Ella baja su cabeza y ahora mismo me cuestiono demasiado como para pensar en algo… a menos que…
Celestia – De acuerdo. Podrás quedarte, ¡Pero! Tendrás que hacer algo por mí.
Ella me mira un poco con miedo, solo permitiéndome ver sus ojos, ahora mucho más dóciles en comparación de lo que llegué a ver cuando estaba sometida contra el suelo.
Celestia – como tal, no puedo entrevistarlo personalmente. Pero tu misión será averiguar todo lo que sepas de él y del ente "Darkness". Desde cosas tan simples como su color favorito hasta lo último que hizo antes de llegar a nuestra dimensión ¿entendido?
Ella acepta mi propuesta y eventualmente nuestra conversación termina sin muchos más percances. Tiempo de retirarme, y solo por si acaso uso mi magia para acomodar todo en su lugar antes de girarme hacia la pony terrestre, viéndole con cierta cautela.
Celestia – por cierto, Sweet Care, ¿Dónde rayos aprendiste a hacer eso? Ni siquiera los guardias reales podrían reducirme a esa velocidad.
Ella solo me mira un poco apenada antes de sonreír un poco
Sweet Care – bueno, sobre eso, mi hermano me enseñó mucho antes del Incidente Chrysalis, dijo que tenía miedo de dejarme sola, así que durante algunos meses me estuvo entrenando para poder reducir a todas las razas de ponys, cuando usted apareció, bueno, solo creo que hice todos los pasos al mismo tiempo.
Pienso en ello, supongo que Flash Sentry también tomó en cuenta las habilidades de su hermana cuando la recomendó para este trabajo. Solo por eso no hago más preguntas mientras caminamos hacia la sala de entretenimiento junto a Sweet Care, viendo como los demás habitantes hablan mientras se prepara la comida.
Juaxen Said – Oh, Princesa Celestia, ¿Quiere quedarse a cenar? No es lo mejor que pueda comer en el castillo pero Coffee Sip cocina muy bien.
Sonrio un poco, logrando ver a la pony mencionada, trabajando en la cocina con una leve sonrisa haciendo que sienta una pequeña punzada en mi nuca.
Coffee Sip – vamos, señor, no es tan bueno, Needle también sabe cocinar.
Juaxen Said – es cierto, también cocina muy bien, pero creo que me gusta más cuando me ayuda con mi ropa. Ella simplemente es muy buena en ello.
La mencionada solo adquiere un leve rubor en las mejillas mientras evita hablar cuando lleva una taza de leche tibia a sus sonrientes labios. Haciendo que de nuevo una punzada me dé en la nuca.
Celestia – son casi como una familia.
Se escapa de mis labios haciendo que los presentes me miren con cierta curiosidad en silencio, al menos hasta que escucho algo proveniente de Juaxen Said.
Juaxen Said – Bueno, es porque usted ha escogido muy bien a las personas que están aquí. De verdad, muchas gracias, Celestia.
Tras decir eso, los otros habitantes del subnivel empiezan a recriminarle el no haberme llamado "Princesa" pero no me quejo, y simplemente sonrío hacia él.
Celestia – No hay de qué, Juaxen Said.
