Creo que he tratado de hacer esto tres veces, pero espero por amor al infierno que se suba adecuadamente. Si eso es así, Let's Read.

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Capítulo 27: Los Hijos de la Noche

Es una leyenda muy conocida, un rumor entre las historias de Ecuestria que a pesar de tener más de mil años de edad se ha mantenido vigente.

Los hijos de la Noche

Se dice que antes de su destierro, la Princesa Luna planeó crear un estado independiente de Ecuestria, y para ello aprovechó una noche de luna llena en la cual se llevó a todos los potros huérfanos que quedaron tras la primera derrota de Discord.

Para asegurarse de que su pequeño secreto mantuviese como tal, no mencionó nada a nadie, durante algunos años ella se mantuvo como la legitima monarca de un pequeño pueblo sin nombre más allá de Appleloosa, e incluso, más alejado del reino Cambiante; un área montañosa con muchas cuevas que proveían refugio a sus habitantes. El pueblo vivió y prosperó tras los mil años de destierro de su "madre", y actualmente es posible que los viajeros intrépidos y perdidos lleguen a toparse con uno o dos de estos ponys, acostumbrados a salir únicamente cuando la noche reclama el cielo, y a dormir mientras el sol se muestra.

Hasta ese momento, solo yo sabía de la existencia de dicho pueblo. Sin embargo, ahora dos criaturas más en Ecuestria saben al respecto de dicha información. Personalmente, la aparición de Little Sun es un recordatorio de que de verdad las cosas han cambiado bastante.

Mi caminar se detiene al ver a mi hermana caminar por los pasillos, no como quien es dueña del castillo, sino como alguien que está severamente preocupada por algo.

Luna – si vas a actuar tan erráticamente te aconsejo manzanilla, aunque el cloroformo funciona mejor.

Por su reacción es fácil decir que estaba pensando en mí, y no esperaba a que la encontrara.

Celestia – ah, l-lo siento, Luna, es solo que… bueno, ya sabes…

Luna – No tienes que decirme nada. Estás preocupada por lo que he decidido, lo sé.

Digo sin mirarle mucho, esperando no meterme demasiado en su hilo de pensamiento.

Luna – Él se irá por un tiempo, así que estará bien, y si no vuelve es probable que haya conseguido una forma de regresar a su mundo, y todo volverá a como era antes.

Digo sabiendo que es bastante probable que regrese una vez envíe un informe de todo en orden. Acto seguido, es posible que me vaya a gobernar la aldea, después de todo, Celestia ya me ha demostrado que no es especialmente confiable.

Celestia – bueno, es sobre eso… m-me preguntaba si no podría quedarse un par de días más…

Al escuchar eso no puedo evitar girarme para verle, haciendo que de verdad muestre sorpresa por su afirmación, aunque supongo que tengo derecho a desquitarme ligeramente.

Luna – bueno, no te preocupes, él necesita privacidad también, él suele tener muchos sueños relacionados al servicio de limpieza que contrataste, y también a tu trasero.

Por su reacción puedo ver que esto la toma con la guardia bastante baja, haciendo que sus mejillas se enrojezcan con fuerza a medida que se sienta rápidamente para evitar exponer demasiado sus flancos.

Luna – aunque en sus sueños tu trasero suele ser bastante más grande. Oh, mira la hora, es momento de que me vaya a trabajar.

Digo con un poco de burla en mi voz antes de retirarme a mi habitación en donde entro sin hacer ruido observando en silencio el oscuro, casi abismal interior.

Luna – Accedí a no meterme en sus asuntos si me ayudaban. Pero nunca accedí a una intromisión.

Un par de orbes rubí avanzan desde el punto oscuro en una esquina hacia una tenue luz lunar que se filtra por la ventana, dejando ver a la entidad extraña avanzar hacia mí.

Darkness – esto es un asunto más personal.

Menciona mientras se acerca a mí con un poco de cautela, mostrando que no tiene aparentes intenciones de atacarme, aun así no logro evitar el sentir la necesidad de ponerme a la defensiva.

Darkness – En un principio no me sentí interesado, pero ahora quiero saber qué planea hacer una vez que le demos la información sobre el estado de esta aldea a la que nos envías.

Al decir eso mi expresión cambia, no creo que sea tan idiota como para desenmascarar su propio plan con tal de frustrar el mío.

Luna – es poco probable que la aldea esté en problemas, aunque para estar segura, apenas reciba un informe, sea de todo en orden o que haya un problema, viajaré a la aldea para convertirme en su regente.

Su expresión es impávida, no parece interesado en saber el porqué de mi decisión de irme, y aun así, no parece terminar de sentirse satisfecho con la respuesta.

Darkness – no me parece un plan lógico,

Luna – debo preguntártelo. ¿Por qué pareces tan interesado en saber lo que haré?

No quiero iniciar una discusión que atraiga a los guardias, y me mantengo en silencio al verlo dudar por primera vez.

Darkness – mi deber es hacer realidad el sueño de Juaxen Said, así que debo saber cómo afectará tu decisión a ese plan en particular.

Escuchar eso me hace sentir un leve escalofrío. Por sus ojos fulgurantes, sus palabras tienen un peso incluso mayor al que ya deberían tener. Camino hacia mi cama con cautela mientras le veo seguirme con la mirada.

Luna – no tengo ningún interés en lo que mi decisión altere tus planes, Entidad. Así que puedes intentarlo como quieras, si mi presencia es "necesaria" para que Juaxen Said cumpla su sueño, entonces busca a algo igual a mí.

Tras decir eso procedo a acomodarme para ir al reino onírico. Haciendo que de inmediato me sienta somnolienta. Sin embargo no termino por cerrar mis ojos para cuando los abro de par en par, observando a la entidad, la cual, antes a los pies de mi cama, ahora está justo a unos centímetros de mí.

Luna - ¿¡Qué demonios…!?

Mi magia se activa, creando una barrera para aislar el sonido antes de que los guardias se enteren de lo que pasa en el interior de mi habitación.

Luna - ¡Más te vale tener una buena excusa para hacer esto!

Darkness – aún tengo algo más que preguntarte.

Dice con tranquilidad mientras acerca su mano a mi rostro, haciendo que lo arroje con fuerza usando mis cascos al no poder usar mi magia por estar creando la barrera para insonorizar.

Luna - ¡Aléjate!

Darkness – Necesito preguntarte algo.

Luna - ¡Pregúntalo desde ahí, no te me acerques!

Digo con fuerza mientras me levanto de mi cama para alejarme de la criatura la cual solo me mira con extrañeza por unos instantes antes de dirigirme la palabra.

Darkness – de acuerdo, quiero saber algo sobre Amadeus y tú.

Menciona logrando que por un momento baje la barrera para insonorizar y no aparte la vista de él.