Takashi vuelve a sus días tranquilos en el colegio recibiendo una visita bastante importante, Tami se encuentra nuevamente con la persona que ha estado en la boca de muchos en esos últimos 3 meses. También Tami y Takashi hablaran sobre sus futuros planes para después de la graduación.
CAPÍTULO 14
Faltaban menos de dos semanas para el día de acción de gracias por el trabajo, y era importante que el colegio se preparara para celebrar ese día. Tal como lo llevaban haciendo los últimos tres años, el club de teatro, pintura y costura se unían para hacer una presentación relacionado a la fiesta. Al menos eso hacían los grandes, los más pequeños de la escuela hacían dibujos conmemorando los diferentes trabajos, y que después eran regalados a alguien que tenga ese oficio, que en su mayoría era para sus propios padres.
Tami bajó las escaleras e iba recorriendo los pasillos ahora en la planta baja para encontrar el salón de economía doméstica, se sentía en un deja vu, había hecho lo mismo en julio, pero en ese tiempo era por el 'Gran Festival' y ahora era por la fiesta del 23 de noviembre. Ahora su preocupación no era por hacer caer algo nuevamente, ya estaba mentalmente preparada para no volver a ser torpe, pero le ponía nerviosa ver a Takashi, aunque estaba acostumbrada a verlo en la salida era muy diferente verlo en su club, siempre tan dedicado y perfecto en sus acciones que le daba miedo ponerse embobada por él y que este lo notara, de seguro eso sería muy incómodo.
- ¡Hayashi-kun! - Tami se sobresaltó al escuchar a alguien ser gritado y una puerta abrirse de golpe, agradeció mentalmente por no ser el tal Hayashi. Reconoció inmediatamente esa voz, era Yasuda, la vicepresidente del club de economía doméstica. Aún le faltaba unos metros para llegar hacía la puerta, pero decidió esperar, había dos chicos en la entrada así que esperaría que ellos entraran o se fueran para después acercarse.
- ¡¿Vienes a molestar a nuestro presidente otra vez?! - Escuchando eso, Tami recordó a su compañero Ryohei Hayashi y como Karlly le contaba que Yasuda nunca pierde la oportunidad de reclamarle cada vez que viene al club, el chico alto definitivamente era él, pero el que estaba a lado de él no lo podía ver bien
- N-no – Peh-yan asustado intentaba negar toda esa acusación.
- El presidente está ocupado ahora mismo, así que lárgate -
- Pero solo...-
- Además, ¡¿por qué estás vestido así?! - Yasuda empezó a señalar la camisa del chico - ¡Es porque te vistes así que los profesores siempre se meten contigo! - Tami notó que el chico vestía una camisa de color súper diferente al uniforme correcto, sí, Yasuda tenía razón con retarlo sobre eso. Quería reírse porque Karlly no mentía cuando mencionaba que ver a Yasuda y Hayashi era como ver a una pareja de casados que discute constantemente.
Notó que Yasuda había dejado su monólogo, de seguro porque alguien intervino y ambos chicos entraron. Tami decidió recorrer sus últimos pasos para llegar hacia la puerta. No le pagaban lo suficiente, mejor dicho, no le pagaban nada por venir a dejar unos bocetos, pero ver lo sucedido en la entrada fue realmente entretenido para ella y valió cada segundo.
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Takashi le había pedido de favor a Peh-yan que trajera a Takemichi cuando este saliera de clases, había decidido hacerle su propia chaqueta de la pandilla en forma de agradecimiento. Takemichi sin lugar a dudas se había vuelto alguien bastante importante para él y el resto de los chicos. Después de lo sucedido con Baji, y recordando también lo de Draken se dio cuenta que él como mediador realmente estaba fallando, pero gracias a este chico había podido sentirse más tranquilo porque se sentía respaldado.
Mientras revisaba los trabajos de sus compañeras de club antes de hablar con Takemichi, pudo visualizar a una cabellera castaña en la entrada del salón, notó que era Tami y Yasuda la estaba recibiendo, al menos no le había gritado como lo había hecho con Peh-yan, Takashi pensaba seriamente que lo que tenía Yasuda con el chico iba mucho más allá, quizás se gustaban y ni se daban cuenta o realmente se odiaban, pero parece que lo último no era el caso. Decidió regresar al frente del salón para encontrarse con la chica dueña de sus sentimientos, aunque se veía algo diferente parecía estar sonrojada y había inflado un poco sus cachetes, ¿Acaso tenía ganas de reírse? Fue lo único que pensó Takashi antes de hablarle.
- ¿Pasó algo Tami? - Ella negó, pero pensó que lo mejor sería contárselo, de todas formas, no quería guardárselo.
- Sólo que es la primera vez que veo a Yasuda-san y a Hayashi-san hablar - Se acercó al oído del chico para hablarle, para que los otros dos chicos presentes ahí no la escucharan. Takashi bufó y se dio cuenta que lo de 'hablar' de la chica más bien se refería a 'pelear'.
- ¿Karlly te lo ha contado? - Takashi se refería a las 'peleas matrimoniales' de las que todos los miembros del club eran conscientes menos por Yasuda la cual siempre ignoraba esos comentarios, Tami entendió a la primera y se apenó un poco por Hayashi, pero volvió a ver su camisa y tenía muchas y más razones para ser reprendido por la chica.
- Bueno, su camisa...- Tami dijo en modo de sugerencia esperando que Takashi capte lo que quiere decir.
- Sí, no te preocupes. Realmente a veces se lo merece - Tami soltó una carcajada e inmediatamente se calló para evitar miradas de los demás.
Takashi volvió a su puesto en la máquina de coser, Tami volteó al frente para ver a los dos visitantes, uno lo conocía muy bien así que visitante no era, el otro era un chico rubio con un peinado que ligeramente le quedaba bien, pero podría ser mejor, según los estándares de Tami. Este chico le daba un leve aire de conocido y mientras este conversaba con Takashi pudo darse cuenta por el tema de conversación de que era el mismo chico que salvó a Draken y era la persona de la que tanto Takashi, Chifuyu y Draken le habían estado hablando. Takemichi notó su mirada y empezó a sostenerla, le pareció conocida pero no estaba muy seguro de dónde.
Takashi se había preocupado demasiado por la chaqueta del chico que había olvidado preguntarle a Tami sobre su visita en el salón, de seguro traía algo importante de parte del club de pintura, levantó la mirada para observar como Takemichi y Tami se miraban fijamente, ¿acaso recién se dan cuenta de que si se habían visto antes? Igual, esto es demasiado incómodo. Takashi tosió esperando desviar la atención de esos dos para él, lo cual sirvió.
- Perdón, ¿eres Takemichi-san verdad? - Sin embargo, Tami no le habló a él sino directamente al rubio.
- Oh, entonces si eres tú - Takemichi pareció contestarse a sí mismo después de esa pregunta - El día del festival estabas con nosotros, ¿Cómo te llamas? -
- Ah sí, soy Tami Fujioka y bueno justo ese día había ido al festival con Takashi. ¿Cómo está tu mano? - Tami solo recordaba que el chico había sido herido, pero nunca lo había vuelto a ver hasta que desapareció en la ambulancia.
- Supongo que ahora solo es una cicatriz – Le mostró la mano para que lo confirmara - ¿Eres la novia de Mitsuya-kun? - Era la segunda vez que se lo preguntaban y estaba muy segura que si había una tercera, ella definitivamente tendría que salir corriendo. Takemichi había dicho esa pregunta de la manera más inocente posible, había visto a la chica hablar súper cercana a su amigo hace unos minutos e incluso había confirmado salir con él esa noche, pero después se arrepintió porque quizás había sido muy atrevido.
- ¡No, solo somos amigos! – Ambos hablaron a la vez, ni siquiera supo en qué momento Takashi llegó a su lado. No dijeron nada más hasta después de unos segundos cuando una cuarta voz se escuchó.
- Bueno chicos, Tami-chan sé que trajiste algo importante, ¿Qué pasó con tus modales presidente? - Karlly se había acercado al grupo, estaba en una mesa cercana y le pareció algo incómodo en cómo después de decir eso ambos se quedaron callados. Ella como buena amiga tenía que salvarlos de esa situación.
- Disculpa, justo iba a preguntarle sobre eso - Takashi intentó excusarse.
- Muy tarde ya me ocupo de eso - Karlly arrastró a su amiga hacia su mesa de trabajo.
Karlly no tenía gran cosa que hablar con ella, así que Tami se limitó a mostrarle los folletos mientras que Karlly le mostraba brevemente lo que estaba haciendo en ese momento, solo se tomaron como 5 minutos y Tami vio la ocasión perfecta para retirarse ya que, sin querer, había demorado demasiado en regresar a su club.
Takashi aún estaba ocupado con Takemichi y Peh-yan, así que no había tomado mucho en cuenta a la chica, Tami se despidió de Karlly y al pasar por la mesa de donde estaban los chicos, decidió despedirse.
- Iré a mi club, me dio gusto verte Takemichi-san, adiós Hayashi-san – Les dio una sonrisa a ambos, pero justo antes de salir por la puerta se acordó de que no le había dirigido ninguna palabra de despedida a Takashi así que se giró y alzando la voz lo suficiente le dijo – ¡Takashi-kun, espero nos veamos en la salida! – En la mente de Tami esto había resultado ser mejor, pero literal se lo había dicho al frente de todo el salón, algunas chicas la miraron, otras hablaban por lo bajo y Takashi la miro un poco contrariado así que antes de sonrojarse al frente de él y de los demás, salió corriendo a su salón. Se había prometido no poner incómodo a Takashi pero aun así lo hizo, solo esperaba que a él no le molestara lo sucedido.
Para Takashi no había sido la gran cosa, se sorprendió al inicio porque era la primera vez que la escuchaba hablar alto, pero ella había sido sincera en sus palabras, si a la final no le decía nada y se iba, se iba a sentir mal porque Tami no se había despedido de él, pero de alguna u otra forma lo hizo y eso lo hizo sentir feliz. Los murmullos cesaron después de unos segundos y todos volvieron a centrar su atención en lo que estaban haciendo. Karlly solo rio por lo bajo, jamás espero que Tami hiciera algo así estando muchas personas, pero a la final lo hizo y como dicen por ahí 'El amor te hace hacer locuras'.
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Takashi, Takemichi y Peh-yan esperaban en la salida a Tami, esta se había demorado más de lo normal, Takashi se abstuvo de ir a buscarla, se estaba preocupando de más como siempre, y prefirió calmarse ya que de seguro no podía pasarle nada malo dentro del colegio. Tami estaba caminando más despacio de lo que normalmente era, había ido a dejar unas cosas a su casillero, pero trataba de demorar más el encuentro con el chico por la vergüenza, antes de llegar a la entrada vio que no estaba solo así que se apresuró porque no solo era uno sino tres chicos que la esperaban y eso la hizo sentir mal.
- Lo siento por la demora – Se inclinó un poco por la disculpa, los demás solo dijeron cosas como 'No te preocupes' y 'Tranquila, no demoraste'.
Dos cuadras más adelante los otros dos chicos se despidieron, veía a Hayashi casi todos los días así que no se preocupó por su despedida, pero de seguro no volvería a ver a Takemichi de todas formas estaba feliz de haberlo vuelto a ver y que este se encontrara absolutamente bien. En la siguiente cuadra, Takashi compró helado, Tami había olvidado que era viernes, pero agradeció el detalle del chico y recordó nuevamente el bochorno de hace unas horas, sentía que tenía que disculparse por hacer eso en el club del chico.
- Takashi-kun - Él la miro prestándole toda su atención - Discúlpame por haber hecho eso en el club -
- ¿Hacer qué? - La verdad es que Takashi no le había entendido. Tami se sonrojó, no quería decirle lo que se supone que él ya había visto.
- Lo de...lo de la puerta, no debí despedirme de ti de esa manera, creo que fue incómodo para todos – Tami bajo su mirada, Takashi la miró por un rato, la chica estaba algo despeinada tenía varios mechones fuera de su coleta así que tomó uno en sus manos y lo pasó por detrás de su oreja, haciendo que la chica volviera a mirarlo después de ese toque.
- No tienes por qué disculparte, puedes hacer lo que quieras en el salón y no fue incómodo para nadie – Era la primera vez que Takashi le hablaba con tanta ternura que Tami pensó que iba a morir de tanto sonrojarse.
- ¿Y para ti? -
- Tampoco fue incómodo para mí - Le regaló una sonrisa.
- Pero bueno tampoco es que pueda hacer lo que quiera en el salón de tu club – Tami volvió finalmente a la normalidad después de estarse derritiendo de amor por Takashi.
- De hecho, sí, solo no le grites a Peh-yan porque eso ya lo hace Yasuda-san – Tami soltó una carcajada, Takashi había terminado ya su helado así que tomó su mano para salir juntos de la tienda y caminar hacia su casa, Tami aún no terminaba de comer así que le pareció dulce ser guiado por él mientras ella disfrutaba su helado.
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Takashi había quedado en estudiar con la chica el día domingo, ni siquiera sabía que había que estudiar, tenía entendido que los exámenes parciales estaban para la primera semana de diciembre y aún faltaba mucho para eso, así que se limitó a traer la única tarea que tenía para ese fin de semana esperando que la chica lo ayudara. Tami había sido clara en explicarle en que no podía salir las últimas dos semanas pero que si él quería podía acompañarla en sus horas de estudio así que accedió, estudiar en pleno domingo no le haría daño además le gustaba mucho pasar tiempo con la chica y eso haría que se sintieran más cercano.
- Tami -
- ¿Sí? - Ambos estaban en la sala, en la mesa del centro, cuando llegó, la chica ya tenía algunos libros abiertos, se preocupó un poco porque pensó que quizás se había equivocado en las fechas de los exámenes, aunque como no compartían salón quizás la chica tenía alguna otra prueba, pero quería preguntárselo para estar seguro.
- Los exámenes son en diciembre, ¿verdad? - Esperaba que le dijera que sí, porque no tenía muchas intenciones de estudiar en ese instante.
- Sí -
- Entonces… ¿para qué estudias? O tienes alguna prueba a parte –
- Ah, no. Es para las pruebas de ingreso a la universidad -
- Ah las pruebas – Bueno a él realmente no le interesa darlas, puesto que a lo que se quiere dedicar no necesitaba entrar específicamente a una universidad.
- No las darás, ¿verdad? -
- Yo creo que no, bueno ya escuchaste hace un tiempo sobre lo que quiero hacer y supongo que ya tengo algunos planes -
- Eso es genial Takashi-kun – A ella igual le alegraba y esperaba que Takashi tuviera muchas oportunidades para demostrar su talento.
- ¿Y tú? ¿Qué quieres hacer en el futuro? - Takashi jamás se lo había preguntado, así que ya que estaban hablando de eso sería la ocasión perfecta.
- Quiero estudiar medicina - Pensó que esa carrera iba tan bien con ella, pero recordó que los exámenes suelen ser a inicios de año, ¿acaso no era muy pronto para estudiar?
- ¡Pero las pruebas son en febrero! – Uy no, sonó como un vago - No me mal entiendas, creo que es perfecto que adelantes a estudiar... - No quería quedar mal así que trato de arreglarlo al final.
- Sí, pero las pruebas para estudiar en el extranjero son en dos semanas – Su madre tenía un sueño, un sueño que termino también siendo el de ella, aunque tampoco se molestaría si no llegara a suceder, pero su madre no diría lo mismo.
- ¿En el extranjero? -
- Sí, quiero estudiar medicina en Estados Unidos – Tami le dijo con una sonrisa. No habían hablado nunca de esto, de hecho, Takashi era la segunda persona que se enteraba, Karlly fue la primera la cual se enteró a inicios de ese año. Takashi no le dijo nada, lo único que hacía él era imaginar a Tami en el aeropuerto después de la graduación tomando un avión para ir al otro lado del mundo, se sintió mal porque solo faltarían meses para eso y él quería tenerla para más tiempo, sin embargo, dejó de lado sus malos pensamientos y le regaló una media sonrisa, él como buen amigo la iba a apoyar en lo que ella decidiera hacer no es como si pudiera retenerla toda la vida.
- Bueno, Takashi-kun ¿tienes que hacer alguna tarea? - Dado que Takashi no le dijo nada más decidió cambiar de tema.
- Ah sí, aquí traje lo que necesito -
- Genial, te ayudo – Ambos empezaron a hacer la tarea de Takashi.
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- Gracias por tu ayuda Tami – Takashi empezó a recoger su cuaderno y los lápices que había traído.
- No hay de que, también aproveche a hacer la mía - Tami agradeció que pudieran hacer esa tarea, ella la tenía para el martes así que al menos la tendría a tiempo.
- Tengo que irme – Dijo Takashi mientras se levantaba. Tami se sorprendió, recién llevaba un par de horas en su casa y ya se iba.
- ¿En serio? - Eso sonó demasiado sorprendida para su gusto.
- Sí, mamá me pidió estar temprano en casa – Tami no sabía por qué, pero sentía que después de haber hablado sobre sus pequeños planes a futuro, las cosas entre ellos se habían puesto algo raro, pero no iba a entrar en detalles y le creería el motivo de su regreso a casa.
Pero era verdad, su madre le reclamó que no pasaba tiempo los domingos, los días que justo ella tiene libre, así que esta vez solo le permitió irse por unas horas, fue la razón por la que Takashi llegó después del almuerzo a las 3 y se iría a las 5, y no como normalmente se había acostumbrado que llegaba al medio día y se iba a eso de las 6 o 6:30, así que no se sorprendía que Tami le hubiera tomado desprevenido esto, tampoco quiso ser tan específico con ello y no le explicó las razones.
Se despidieron en la entrada, y así como los anteriores fines de semana, Tami aún pensaba si era adecuado darle o no un beso en la mejilla, ya lo había hecho una vez y no había muerto en el intento, pero aun así le daba mucha vergüenza, siempre se regañaba por ser así, Takashi tomaba su mano o jugaba con su cabello sin esfuerzo alguno y ella aspiraba a hacer en algún momento lo mismo y dejar esa inseguridad, pero quiere pensar que solo es cuestión de tiempo para hacerlo también.
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