gracias por leer esta historia como siempre con mis personajes favoritos.

Que son ...Terry y candy

agradesco su tiempo en leer esta Historia.

Esta es mi segunda historia que es totalmente mía.

Para ustedes my Lady

"Simplemente Tu"

De

Mari Grandchester

El lugar era cómodo, miro a su alrededor algo decepcionada, ya. que estaba acostumbrada a hermosos palacetes, pero ahora estaba en la antigua casa de sus abuelos adoptivos, aunque nunca los conoció, pero eso nadie lo tenia que saber, como siempre tenia que vivir una vida de apariencia, miro sus valijas en la habitación que ahora seria su hogar.

- pase - susurro sin animo al haber escuchado que alguien tocaba.

- vengo a preparar el baño y su cama señorita.

Anny solo asistíos, la mucama fue directo al baño para calentar el agua, minutos después le indico que todo estaba listo, la mucama le ayudo a desvestirla, recogió su cabello y le ayudo adentrarse a la bañera que estaba en medio el lugar.

mientras anny se relajaba, la mucama encendió la chimenea, arreglo la cama quitando lo cojines que adornaban la enorme cama, saco una pijama de seda sobre ella y salió de la habitación, segundo después entro otra mucama, esta trabajaba en la cocina, en sus mano trata una bandeja con te, pasta y una cena liviana.

Mientras eso pasaba la única hija de los Britter pensaba en el hombre que había amado mucho pero que El diplomáticamente la rechazo, aunque en sus pensamiento otra imagen vino a ella unos hermosos zafiro que le quitaban el aliento.

cerro los ojos al recordarlo, solo se había acercado a el una vez, pero eso vasto para que su cuerpo temblara, por desgracias Archie se dio cuenta.

- Al menos hubiera valido la pena al perderte Archie - su voz era aun de enojo al recordar como la había rechazado el futuro duque - pero Terrence fue muy cortante con ella

FLASH BANK

había escuchado que era muy rebelde, muchas decían que ya habían estado en su cama, jamas había sentido esa sensación que sintió cuando el le ayudo a subir de un barranco que por accidente había caído.

- veo que este no es tu día - desde donde estaba lo vio sonreír - espera - dijo inclinándose - creo que te he visto - levanto una ceja - eres la novia del elegante!...verdad?.

- si - susurro tímidamente - puedes ayudarme?.

- enseguida bajo.

- pero...- ya no pudo decir nada mas, ya que El dé un salto llego hasta donde ella estaba.

- bueno querida damisela es el momento de salir de aquí!.

- pero si ahora ambos estamos dentro.

- para mi será fácil salir de aquí, pero para ti seria difícil - anny parpadeo varias veces, pues la imagen de una rubia de ojos verde llego a su mente, negó con su cabeza, el pasado tenia que quedar atrás - No que? - dijo sonriendo de la chica tímida.

- Nada, solo ayúdame a salir de aquí por favor.

Terry se inclino un poco, ella supo lo que haría, ya que era la misma posición que hacia los monos de los establos para ayudarle a subir, lo que no pudo imaginar es que de un solo impulso la subió de sus hombros, como era de esperarse perdió el equilibro y se fue helado, El trato de sostenerla pero sin poder evitarlo ambos cayeron al suelo.

La posición en que quedaron fue demasiado revelador para ella, ya que El estaba encima de ella, sus rostro quedaron cerca, sus piernas estaban abiertas, anny britter por primera vez sintió el enorme miembro masculino de aquel ingles.

sus mejillas estaban rojas con tan solo recordarlo, pero no era de timidez, sino de puro deseo estaba segura que aun amaba a Archie, pero también deseo y quizo a Terrence, pero lo que sintieron en ese momento fue muy diferente para ambos.

- me rechazaste igual que Archie - dijo amargamente.

FLASH BANK

- TERRENCE - le grito por que El se iba a su castillo como lo hacia cada viernes por la tarde, un coche con el escudo de los Granchester lo esperaba.

- si - dijo reconociendo a la joven, que meses atrás sus amigos se la habían presentado una tarde en la villa Andley.

- Hola - le sonrío con ilusión, Terry solo la miro, no entendía por que esa joven lo buscaba.

- Hola - le dio su chaleco al mozo que amablemente le abría la puerta del coche, miro a la joven serio.'

- este domingo toca el quinto domingo - bajo su rostro tímidamente.

- a si es - respondió sin entender nada.

- Mi padre vendrá mañana por la tarde y - lo miro y este tenia su ceja levantada señal de impaciencia - y creo que seria una excelente oportunidad para que hablaras con El.

Terry la miro como si la chica estuviera loca, apenas se acordaba de ella y pretendía que conociera a su padre?...será que era tan tonta que lo confundió, pensaría ella que El era Archie, si era a si esta chica era una verdadera Estúpida, ahora entendía por que Archie se negaba formalizar con ella.

- y por qué haría yo eso? - su voz era de disgusto.

- Tu me has mancillado y es tu deber formalizar conmigo.

- YO QUE? - grito con enojo.

- Tu sabes - volvió a bajar la cabeza con timidez - tu estuviste encima de mi... - un fuerte jalón la hizo callar ya que Terry perdió todo el auto control.

- Tu y yo no existe y nunca existirá, yo jamas hice nada contigo ni lo haré, a si que deja de fingir ser una chica ingenua - la soltó con hazlo - por que conmigo eso no funciona.

- Pero Terrence!.

- GRANDCHESTER - afirmo enojado - tu y yo no somos iguales - nunca le gustaba ser superior a nadie, pero con esta mujer era necesario - te aconsejo que te bájate de esa nube por que yo no soy Archie, jamas me uniría a una mujer como tu.

- una mujer como yo?...se te olvida que soy una dama! - dijo furiosa - me deshonraste cuando estuviste encima de mi, tu deber es cumplirme - Terry la miro furioso, esto ya erademaciado.

- No vengas a fingir inocencia conmigo - la tomo del brazo - tu crees que no se por que te había caído de ese barranco - anny palideció - tu, Eliza y sus amigas acostumbran a espiar a los chicos mientas se luchan en las caballeriza - la salto con hazlo - sabias perfectamente que ese día iba a estar solo y fuiste, pero por tu mala suerte días atrás había llovido y por eso te resbalaste - anny enmudeció - Agradece que soy un caballero, y te ayude - abrió la puerta del coche - No vuelvas acercarte a mi nunca mas, no conoces el poder de Los Grandchester niñita tonta.

Aun recordaba cada palabra, después de ese día que El la ayudo, su cuerpo temblaba al recordarlo encima de ella, dos veces intento hacer lo mismo con Archie mientras se besaban cada vez que podía, pero nunca sintió lo mismo, como pudo pensar en atrapar a un grandchester, si no pudo ni retener a un Cowell.

- Dónde estarás ahora Terrence?...desde que me fui de Londres No supe nada más, cerro los ojos disfrutando el calor del agua, ya había pasado dos años y muchas cosas había pasado, la guerra, la banca rota de su padre y el derrame de su madre provocado por terror de la pobreza ahora estaba devuelta en America, a dos Díaz del lugar donde creció y se obligo a olvidar.

Esa misma noche, una linda chica londinense llegaba en el tren con su amada abuela a la enorme ciudad de Nueva York, ahí los esperaban sus padres que venían de Francia, habían hecho escalas en distinto países ya que los puertos estaban cerrado, todos huían de la guerra, después partirían a su segundo hogar que estaba en florida, en esa ciudad también la esperaba su prometido, estaba muy contenta por que al fin uniría su vida con su querido stear,

- Señorita Mathon? - escucho la voz del hermoso rubio, que la miraba serio.

- Señor Andley!...yo! - Ambos Hombre notaron su palidez, sin duda los dos sabían por que ella estaba ahí, esto hizo enfurecer al Rubio.

- Veo que me mintió verdad! - ella bajo la cabeza avergonzada - comprenderá que después de esto no podrá regresar mas a mi casa.

- pero señor yo necesito el trabajo - trato de suplicar, Albert levanto su mano en negación.

- No trate de disculparse por lo que hizo - miro a George - pagarle lo correspondiente - George solo asintió, de su chaleco saco cuatro billete de cincuenta dólares y dos de veinte, un total de doscientos cuarenta, este seria su pago de dos semana, a si tendría tiempo en buscar un trabajo.

la chica tomo el dinero, sabia que había cometido un graba error, en sus manos miraba el dinero que generosamente le habían pagado, su pago por semana iba hacer 60 dólares, donde solo iba a trabajar seis horas y el fin de semana libre y incluyendo su comida y hospedaje, ella no iba a pagar nada, todo su suelta iba ser solo para ella.

Ahora estaba sin nada, tendría que regresar al hospital y tomar los largos turnos nocturno, donde le pagarían a 1.75 la hora, desconsolada comenzó a caminar hacia la posada de Madan Pier, rogaba a Dios que aun su habitación estuviera disponible, por que un lugar a si seria muy difícil de encontrar, ya que era barato, limpio y muy seguro.

En 1880 se estableció un salario mínimo federal, así evitarían que algunos empleadores abusaran de los empleados, 0.25 centavo era el sueldo laboral para muchos, se diferenciaban lugares como en hospitales teatros, tienda etc...usaba el mínimo como estándar, quien pagara menos que el mínimo era un delito federal, a si que 0.28, 0.30 hasta 0.50 centavo por hora era lo que el proletariado recibía, tras los años esto fue aumentando paulatinamente, 142 años después en la actualidad el salario de algunos estado es de 7.25.

Ya era mas de medio día, habían comido y disfrutado de un baño, ella había tomado un nueva bata de seda muy hermosa y el solo se había cambiado la camisa, la lluvia había terminado pero los caminos estaba cerrado por la fuerte tormenta, así que irse de ese paraíso no era una opción.

ella bajaba las escalera y el estaba seleccionando un buen libro, en la mesa la esperaba una bandeja con te, pasta y unas conserva.

- te siente mejor - su voz era tierna, ella se detuvo en el penúltimo escalón, ya que su voz la paralizaba.

- si - apenas fue un susurro - tome otra bata de casa de tu madre, espero no se moleste por mi atrevimiento - El sonrío.

- No te preocupes por eso, Eleonor ni se debe de acordar de que dejo eso aquí - puso el libro en la mesa - la dama que cuida la casa cocino esto para Nosotros, su esposo fue quien las trajo.

- Asi que no estamos solos - dijo algo aliviada, ya que de seguro pasarían la noche en ese lugar, la noche anterior estaba desmayada pero ahora ambos estaban bien despierto, no temía por lo que podría pasar, lo deseaba y quería que El fuera el primero en su vida, ya que estaba seguro que con nadie mas podría estar, al menos ese recuerdo seria solo suyo, ya después se iría como lo había pensado algunos días atrás, la guerra necesitaba voluntario y ella seria una de ellas, lo que ella temía eran las pregunta que el sin duda las harías, y que ella temía responder.

- No viven aquí - ella lo miro - viven en la propiedad pero no en esta casa.

- Esta lejos de aquí? - El sonrío.

- Por qué lo preguntas? - se acerco a ella y acaricio su mejilla - temes quedarte a solas conmigo pecosa - sonrío - te recuerdo que ya dormimos junto.

- Terry - dijo sonrojándose - no digas eso, si hubiera tercero pensaría otra cosa - ella bajo el rostro, ya que sus mejillas ardían, El estaba complacido.

- te vez Hermosa sonrojada pecosa - ella no podía moverse, el aliento de El le acariciaba el rostro sus labios besaron su naricita - te amo mi dulce niña - y sin esperar mas beso sus labios, ya no era el beso tierno, esta vez El la besaba diferente.

Lo que comenzó como un juego, ya que solo quería robarle un par de beso, pero esa delicia resulto demasiado para sus cuerpo, la suavidad de su boca, el calor de su cuerpo y el ambiente que los rodeaba hizo que perdiera todo su control, ya ante había jugado al seductor con algunas mujer, habían sido algunas que había estado con el íntimamente, pero las mayorías solo terminaban con caricias y besos, al principio quería jugar y después pasar un rato abrasado con ella, ya había seleccionado algunos libro, tenia comida y la chimenea tenia suficiente leños para calentarlos pero besar sus labios, y ser correspondido lo envolvía mas, cuando ella se acostó y su cuerpo la siguió ya no pudo detenerse, sus gemidos y el calor de su cuerpo lo atrapo.

Poco a poco las piernas de ella fueron abriéndose para que El pudiera estar mas cerca de ella, con los movimiento que ella hacia lograron abrir un poco su bata dejando un pecho descubierto como un sediento sus labios descendió por su cuello, bajo a su pecho y su lengua se deslizo hasta llegar a su peso, un gemido de placer lo estremeció provocando que su falo se Irguiera mas, beso con adoración cada pecho de la mujer que siempre amo, la niña de su sueños hoy seria mujer en sus brazos, pero el recuerdo del callejón vino a su mente, no quería dañarla, ni que pensara que la había traído a ese lugar solo para abusar de ella.

De pronto se detuvo, miro sus delicioso pecho que ahora estaban completamente descubierto para El, desde ahí pudo ver sus bellas piernas y parte de su panty, solo la cinta de la bata impedían verla totalmente desnuda para El, pero cuando busco la mirada de ella para saber que estuviera bien, la garganta se le seco.

Su cabello estaba totalmente esparcido en la alfombra, sus ojo estaban oscurecido, profundo en la pasión y muy dispuesta a entregarse a El, sus labios rojo y hinchado por los delicioso besos. "que podían hacer ahora?"...sin duda estaba perdido por esa diosa que estaba debajo de El.

- te amo - susurro - y no quiero hacer daño - candy lo miro con ternura.

- y no lo harás!. - le acaricio su rostro y le dio un tierno beso - solo Amame Terry...solo Amame esta noche sin importar nada mas.

por unos segundo se miraron, candy volvió a besarlo y El correspondió, mientras la besaba metió su mano debajo de ella apretando su cadera, bajo a sus senos y jalo la cinta dejando su cuerpo listo para El, sus labios y lengua recogieron su vientre y llego a su pelvis hundiendo su rostro completamente en El, segundo después su lengua hacia maravilla en la parte mas intima ya no había nada de obstáculo, cuando ella toco las estrésalas el sonrío complacido, siempre quizo hacer esto solo con ella, sabia que un día unirían su alma y cuerpo, hoy hacia el amor con la niña que siempre amo y hoy surgiría en sus brazos la mujer que seria su esposa y la madre de su hijo y sin dudarlo hoy dejaría en el vientre de ella.

Estaba completamente perdida en su orgasmo, como enfermera lo había leído pero era un tabú decirlo, a si que esas parte estaban prohibida para las enfermeras, su cuerpo estaba hirviendo, por el deseo, de pronto sintió frio el se había alejado de ella, abrió sus ojos y lo miro parado frente a ella.

Terrence estaba agitado y anonadado, frente a el estaba ella completamente desnuda, aun disfrutaba su orgasmo, y El le había provocado esas sensaciones, estaba esperando que lo viera por eso estaba de pies frente a ella, cuando sus verdes ojos lo miraron se quito la camisa, ella parpadeo y eso lo hizo sonreír, de un solo jalo la cinta de su pantalón y este callo al suelo, dejando su cuerpo desnudo, candy tenia sus ojos en su erguido miembro, por unos segundo se quedo mirando el hermoso miembro, sus ojos dejaron de verlo hasta que vio que El se acercaba a ella, miro que se inclino y camino hacia ella como un felino, un felino que sin duda la devoraría y ella con gusto se dejaría, El beso sus labios y llegando a su oido le susurro.

- Se Mia amor, se Mia hoy y siempre.

Tomo sus labios nuevamente, llevándola de nuevo a las estrellas, poco a poco su miembro se cobijó con su feminidad, con sus manos entrelazadas y sus bocas unida El la hizo suya, con su boca cayo el grito, con sus cuerpo le dio fuerza y con su miembro la hizo mujer, ahora eran uno.

"ahora ella le pertenecía a El... Y El es solo mio, mio aunque sea esta noche" pensó ella.

Se entrego a El Olvidándose de sus temores, por segundo se olvido del rechazo y los imposibles, la huérfana y El marques, esa noche eran solo ellos dos, el Recuerdo que más atesoraba vino a su mente.

La imagen de dos niños en la colina haciendo una promesa que jamas pasaría, un beso tierno y un adiós, una lagrima se deslizo por su mejilla cuando se convirtió en su mujer, un deseo que sin pensar que pasaría paso, hoy era completamente feliz, aunque fuera solo hoy.

CONTINUARA.

MIL GRACIAS POR SU HERMOSO TIEMPO

SUS LINDO COMENTARIO ME IMPULSA A SEGUIR ESCRIBIENDO.

NUEVAMENTE GRACIAS QUERIDA LECTORAS