Disclaimer: Shingeki no Kyojin pertenece a Hajime Isayama.

Advertencia: SPOILERS del manga


Jinae

Distrito Rose, 878

La noche aún cubría con su manto la región sur de Rose, cuando el Cuerpo de Investigación llegó a un pueblo donde la Gendarmería les salió en el camino.

–¡Comandante Kirstein! –saludó un gendarme –Hasta aquí son los límites considerados seguros

–¿Que ha ocurrido? ¿Han habido bajas? –cuestiono el castaño

–No tenemos reportada ni una baja, ni siquiera desapariciones

–¿Y los titanes? –preguntó Armin

–Algunas personas dijeron que vieron gigantes andando por los alrededores pero nosotros ni las Tropas Fronterizas hemos encontrado alguno

–¿Cuantas personas dijeron ver a los titanes? –cuestionó el subcomandante

–Unas seis –tanto Armin como Jean se miraron examinando la información

–Armin –dijo Jean, el rubio asintió entendiendo la orden

–¡Anansi! ¡Audrey! ¡Irving! –llamó a otros tres soldados quien de inmediato se acercaron –¡vayan con el subcomandante Arlert y sigan sus indicaciones!

–¡Si señor! –los jóvenes junto al rubio se alejaron

Jean vio como los cuatro soldados iban a buscar a esas personas con información sobre los titanes, luego regreso a ver al soldado de la Gendarmería –Dime ¿cual es el pueblo más cercano con señal de radio?

–Es Jinae, señor

Kirstein bufó mentalmente, ese pueblo nuevamente le recordaba a su amigo y su triste fin.

–Bien –dijo sin inmutarse –ante cualquier avistamiento, díganle a las Tropas Fronterizas que nos avisen

–A la orden –el joven se despidió del comandante

Jean Kirstein y compañía se dirigieron al pueblo de Jinae rápidamente, pero al llegar éste estaba vacío y no parecía haber peligro, los soldados se dedicaron a recorrer el pueblo para comprobar que estuviera libre de titanes, con ayuda de las linternas revisaron los alrededores, pero ni siquiera había señales de titanes, ni huellas, ni destrozos, ni victimas que lamentar, algo bastante extraño.

–No hay peligro señor –avisó Elisa al comandante

–En ese caso armaremos el plan previsto –dijo Jean –¡Escuadrón de Armamento, ya saben que hacer!

Lilly Ullrich y compañía pusieron manos a la obra, mientras los demás seguían vigilando los alrededores.

Ya casi al amanecer el Cuerpo de Investigación se dividió en tres frentes, uno se quedó en Jinae y los otros dos partieron a los costados para divisar si había algún titan. El verdadero desafío estaba por comenzar, con el alba de fondo, la búsqueda de los titanes de la región de Rose comenzaba.


...

El grupo liderado por Elisa Blanchett se dirigió hacia el este, mientras el otro grupo liderado por Gabi Braun se dirigió hacia el oeste. Siendo los primeros los que encontraron algo, en un pequeño bosque cerca del pueblo.

–¡Teniente! –gritó un soldado –¡Aquí hay uno!

El soldado no parecía asustado, por lo que la pelirroja decidió acercarse y observar con sus propios ojos a un titan "dormido" apoyado al pie de un árbol, estaba inmóvil y con los ojos abiertos.

–No parece estar activo –dijo Elisa acercándose un poco más

–Ya es de día, debería despertar –dijo el soldado

–Oye Lisa –mencionó Sara mirando el suelo –creo que este no es un lugar seguro –sus ojos grises siguieron un camino de rastros de ramas y hojas

–¡Es cierto! –mencionó Shirley –ningún animal es tan grande como para derribar las ramas de los árboles

Bruce examinó las ramas caídas y se percató de algo, que también habían ramas gruesas que estaban quebradas y colgaban hacia abajo, como si un fuerte peso les hubiese ganado. Pero más allá de las ramas rotas, se lograba observar entre el verde follaje unas siluetas blancas.

El líder del escuadrón veterinario, solo hizo señas, los demás entendieron y miraron hacia arriba, percatándose que habían varios bultos grandes blancos en lo alto de los árboles. Elisa inmediatamente hizo la seña de guardar silencio y de retirase. Aunque para desgracia de Brian, éste piso una rama haciéndola crujir despertando al titan durmiente.

–¡Lo sient... –antes de que pudiera disculparse Sara rebano las sienes del titan quien al caer estremeció el suelo y por tanto despertó a los titanes de los árboles.

–¡Esto no se ve bien! –dijo Natan preocupado

–¡Retirada a Jinae! ¡No batallen hasta llegar al pueblo! –ordenó la pelirroja

Los titanes empezaron a caer de los arboles, una vez incorporados empezaron a seguir con increíble agilidad a los soldados, quienes galopaban a máxima velocidad.

–¡Ahora entiendo por que no los localizaban! ¡El follaje los ocultaba! –señalo Bruce –¡Además son más anormales!

–¡No se detengan! –ordenó Blanchett –¡No estamos lejos, manténganse!

Murakumo logró percatarse de los temblores de Anya, no sabía que pensaba su amiga, pero decidió estar cerca de ella por precaución.


...

–¿Que hora es? –preguntó Hugh mientras bostezaba, estaban colocando las trampas para titanes en el centro de Jinae donde se encontraba una especie de fortaleza pequeña

–Las siete aproximadamente –contestó Eren

–Vaya es extraño tenerte nuevamente –dijo Moe al pelirrojo –casi siempre estas castigado

–Debo seguir un protocolo –se excusó el príncipe

–Incluso aquí sigues esas exigencias –habló Achim Frey –Que elitista y superficial

–¿Eso fue una ofensa? –se preguntó Eren

–¡Que importa! –dijo Jason –que estés con nosotros a merced de los titanes, demuestra tu humildad

–Gracias –contestó el pelirrojo "o mi estupidez" pensó

–Oye ¿has pensado que harás cuando seas rey? –dijo Jason

–Si llega a serlo –mencionó Moe –la reina Ymir puede tener varios hijos

–Pero la reina Ymir aún no esta casada –aportó Hugh

–No importa si esta casada –habló Moe nuevamente –la reina Historia tampoco se casó

–Era muy bella como una diosa, incluso la pretendió un príncipe de Bhara-Dochi –dijo Jason –¿porque no se habrá querido casar?

Inmediatamente todos voltearon la mirada al pelirrojo, quien incomodo se encogió de hombros –No lo sé

–Tal vez por que esos matrimonios por conveniencia son arcaicos y solo aparentan –mencionó Achim

–Es cierto –afirmó Hugh –¿entonces la reina Ymir no tiene ningún pretendiente?

Nuevamente miraron a Eren quien esta vez solo se quedo pensativo, nunca se había cuestionado la importancia de una pareja para Ymir, pues de su unión saldrían los futuros monarcas de Eldia. Y por supuesto, debía haber varios interesados en eso, y no tanto en amar a Ymir.

–No –dijo Eren secamente mientras apretaba de más una cuerda

–Quien quiera que sea el afortunado, tendrá el título de príncipe consorte ¿verdad? –dijo Jason

Nadie contestó en parte porque Eren entrecerró los ojos de molestia y en parte porque Derek los fulminaba con la mirada.

–¡Dejen de hablar y continúen! –ordenó como capataz el chico de ojos zafiro –¡Una bengala negra ha sido avistada!

Eso llevó a los chicos a terminar su trabajo, por lo visto uno de los grupos había tenido un encuentro con los titanes y los llevaban a Jinae. Eren sigilosamente y sin ser visto se movió al lugar dicho por el comandante, se cubrió con la capucha y espero a que fuera su turno de luchar.


...

El equipo de la capitana Braun, no encontró nada de su lado, de hecho estaban por regresar cuando sintieron la vibración del suelo que les hizo pensar lo peor.

–¡¿Una estampida?! –preguntó Thiago

–¡¿James ves algo?! –cuestiono la capitana al joven que estaba sobre un árbol divisando con unos binoculares

–¡Han lanzado una bengala negra y se puede percibir algo grande moviéndose!

–Están llevándolos a Jinae –dijo Rania

–Entonces regresemos a allá y prepárense para luchar una vez que estemos en el pueblo

Bastian se mordió los labios de ansiedad, sabía que esta era una ocasión importante para el Cuerpo de Investigación, y gran parte de eso estaba en sus manos, solo debía usar sabiamente el silbato de Gilbert en el momento adecuado. De pronto un grito los alertó.

–¡Vienen hacia aquí! –exclamó Thiago al ver que una parte de los titanes, se desviaba del camino hacia su dirección

–¡Diablos! –maldijo Gabi mientras observaba si había algún lugar a donde apoyarse con los EM3D, pues esa zona era despejada

–¡¿Que hacemos?! –se preguntaron los demás soldados

Steinbach también espero una indicación, pero no se emitió alguna, por lo que aún con miedo se animó a pedir un favor.

–¡Capitán! –exclamó el castaño acercándose a donde cabalgaba Gabi –¡Yo puedo ayudar!

–¡No es buena idea! –dijo Braun –espera más adelante

–¡Aquí no tenemos como maniobrar! –defendió Bastian –¡Muchos perecerán por eso!

–¡Por eso mismo no pienso arriesgarte! –contestó la capitana

–¡Yo puedo hacerlo!

Gabi notó la seguridad del chico y pensó que tal vez era hora de probar sus teorías con respecto a la manipulación de los titanes.

–¡Thiago, Rania, James! –gritó a los más experimentados del grupo –¡Ayúdenme a parar por un momento a los titanes de modo que hagamos un camino para Steinbach!

–¡Pero Capitán! –sonó la duda en voz de Rania

–¡O nos arriesgamos a confiar en él y cambiar el resultado o aceptamos nuestras bajas posibilidades! –exclamó la castaña –¿Estas listo? –le preguntó a Bastian

–Sí –mencionó incorporándose un poco para poder saltar

–¡Entonces vamos! –gritó Braun dispuestos a atraer a los titanes a las trampas

Bastian saltó del caballo enganchándose del primer titan cercano que habían detenido la capitana y compañía, tragándose el temor empezó a seguir el camino marcado por sus compañeros y cuando estaba a mitad de llegar a Jinae, sacó por fin el silbato y sopló tan fuerte como sus pulmones le dieron, aunque ningún sonido salió de éste.


...

La fila entró sin bajas a Jinae, más una parte de los titanes se había desviado hacia el oeste, por lo que lanzaron una bengala negra intentando avisar a sus compañeros.

Una vez dentro del pueblo, los soldados desplegaron su EM3D y apuntaron sus lanzas relámpago. Si bien no eran gran cantidad, si eran titanes bastante anormales así que no había que confiarse.

–¡Sepárense! –dijo Blanchett mientras hacía un plan para eliminar a la mayor cantidad de titanes sin bajas

–¡Yo me haré cargo de estos de grandotes! –mencionó Sara Zimmerman en referencia a unos tres especímenes de 12 metros

Mientras los demás batallaban, Murakumo y Anya simplemente esquivaban a los titanes. Anya solo quería llegar a donde estaban las trampas para ver cuando Bastian usaba el silbato y confirmar su teoría del ultrasonido, estaba tan ensimismada con sus pensamientos que no notó como un titan se acercó peligrosamente.

Arlert sintió un empujón que la hizo caer en un tejado, al volver los ojos al titán se encontró con una escena estremecedora.

–¡Murakumo! –gritó Anya horrorizada

El titán había logrado atrapar la pierna derecha del mestizo y comenzó a estrujarla, Murakumo gruño de dolor, el titan no parecía querer soltarlo, por lo que aun con el tobillo roto y en una posición desfavorable, logró moverse y apuntar la lanza relámpago directo a la boca del titán, quien cayó abatido soltando al chico. Kirstein logró enganchar su cable y se impulsó hasta el tejado donde estaba Anya.

–¡Mierda! ¡Duele! –confesó el moreno arrodillándose, quien ahora estaba imposibilitado para luchar

–¡E-espera! ¡Buscaré una venda! –dijo la castaña algo aturdida

En esa labor estaba cuando de pronto, una silueta apareció detrás de ellos, Anya volteó lentamente hasta toparse con una cara gigante.

–¡Anya muévete! –gritó desesperado el chico moreno

Pero la chica se quedó inmóvil, aunque contrariamente a lo que pudiesen pensar los demás, Anya no se paralizo por el miedo sino por curiosidad, y es que, era la segunda vez que tenía una especie de sentimiento con un titán. Primero fue con el titán calavera en el bosque de los arboles gigantes, aquella ridícula pero acertada sensación de que ese titán era importante. solo por tener el cabello rojizo parecido al de Eren. Ahora nuevamente sentía algo extraño, especialmente cuando creyó ver por un efímero segundo, una parte del iris azulado del ojo del titán.

De pronto el titán dio la vuelta, y sin más demora marchó hacia el centro, tanto para Anya como para Murakumo eso fue algo extraño, pero más extraño fue cuando vieron que todos los titanes iban a la misma dirección. Hacia el centro, sorprendentemente con Bastian a la cabeza.

–¿Que esta pasando? –preguntó Hugh asustado al ver acercarse a una horda de titanes

–¡Llévalos a las trampas! –indicó Jean a Steinbach, éste asintió

Bastian dándose un último respiro de valor, maniobró el EM3D con gran agilidad, esquivando a los titanes y guiándolos a las trampas.

–¡Todos a sus puestos! ¡Prepárense para acabar con los que estén rezagados! –ordenó el comandante –¡Escuadrón de élite y titan calavera, ustedes capturen con vida a tres ejemplares!

–¡A la orden! –respondieron, Gabi miró al titan calavera y dijo –Ya escuchaste, solo somete a tres y te ayudaremos a capturarlos –el titán asintió

Mientras todos los demás soldados disparaban las trampas o hacían estallar las lanzas relámpago, el titán calavera sometió a dos titanes de forma rápida, el último, que era el titán que estaba por atacar a Anya fue quien le dio batalla.

"¡Maldición!" se dijo "Pareciera que este titán sabe pelear, por lo visto es un anormal muy raro" determinó el pelirrojo.

La capitana Bruan quien ya había terminado por atar a los dos titanes, vio las dificultades a las que se estaba enfrentando el príncipe "¿Porque no simplemente elige a otro titán?", pareciera que el joven heredero quisiera probarse algo, así que se acerco al titan calavera.

–¿Cual es el problema? –le cuestionó con dureza –¿Tan difícil es someterlo con uno de tus poderes?

Eren comprendió a lo que se refería la capitana, de los ocho poderes que podía usar, no podía manipular más que al titán atacante, aunque luego recordó que durante la pelea en Ciudad Industrial fue capaz de usar la cristalización. Mientras pensaba, el titán se le fue directo a la nuca que estaba desprotegida.

"¡Rayos!" se maldijo por el descuido "No puedo perder así"

De forma rápida logró cristalizar la parte de la nuca lo cual dejo aturdido al titan, al chocar los dientes con el cristal. Ya con más confianza, Eren uso su fuerza y por fin pudo someter al rebelde titán.

–¡Bien! –felicitó la teniente Blanchett haciendo sonrojar al príncipe dentro del titán –este es un buen espécimen de investigación

–Ahora que todavía están ocupados puedes salir de tu transformación –recomendó Gabi, Eren obedeció de inmediato y fue en busca de sus amigos

–¿Están bien? –preguntó cuando diviso a los dos jóvenes que caminaban despacio

–Yo estoy bien, pero Murakumo... –hablo la muchacha que apoyaba a su amigo a caminar

–Ese maldito... –gruño el mestizo sudando por contener un poco el dolor

–¡Debes ir a revisión inmediatamente! –dijo Eren quien tomo del otro brazo a su amigo y lo ayudo a caminar

–No es necesario

–Deja de ser necio –le regañaron los dos chicos, aunque luego sonrieron y caminaron entre las manchas de sangre negra y residuos de pólvora.


...

Una vez eliminados todos los titanes, se procedió a levantar un campamento temporal, pues la captura de tres titanes no les permitiría moverse hasta la ciudad. El lugar donde fueron colocados los titanes capturados fue cubierta con una inmensa lona y se puso a varios vigilantes a su alrededor. El comandante Kirstein estaba parado frente a los gigantes encadenados, ninguno de ellos se movía demasiado.

–Así que este pequeño dispositivo los puede controlar –dijo con seriedad mientras miraba el silbato de ultrasonido

–¿Que haremos con ellos comandante? –preguntó Elisa quien esta vez no tenía idea de los planes de su superior

–Los examinaremos –el castaño miro a Auttenberg y su equipo –el escuadrón médico se hará cargo de revisarlos exhaustivamente, hasta el más mínimo detalle

–¡A la orden!

–Una vez hecho eso, reportaran los resultados al subcomandante Arlert una vez que regrese –dijo saliendo de esa especie de tienda

–¿Así que esta vez piensas demostrar esa teoría? –preguntó la capitana Braun cuando le dio alcance

–Es el momento para hacerlo

–Mmmm –meditó la castaña –algo me dice que esto no solo tiene que ver con titanes

–Creo que alguien trató de ponernos en aprietos –contestó Jean

–Lo dices porque dieron la noticia sin haber daños –percibió la mujer –además de la extraña forma en que los titanes llegaron hasta aquí, si no hay agujeros en Shiganshina o en los alrededores

–Así es Gabi –dijo el comandante –y ahora que comprobamos que los titanes si son manipulados por ultrasonidos, no hay duda que el orquestador de este montaje esta aquí en Paradis

–¿Entonces que hacemos?

–Enfrentarlos –dijo Kirstein con determinación y brillo en los ojos –debemos pararlos

–Esto suena peligroso –dijo Gabi

–Y es por eso que hay que planear el próximo paso

Así Gabi y Jean se dirigieron a una casa para comenzar a ordenar ideas y nuevas estrategias que les pudieran llevar un paso adelante de sus enemigos.


...

Armin y sus subordinados terminaron de interrogar a las seis personas que habían visto a los titanes, habían debatido las inconsistencias que encontraron en sus testimonios, por lo que el subcomandante decidió ir a Jinae con sus compañeros y formar nuevas estrategias. Pero antes detuvo al joven de piel oscura alejándolo para tener una conversación privada.

–Anansi, necesito que vayas a ver a alguien que puede darnos información

–Se refiere al viejo gordo –intuyó el joven

–La última vez no le soltó nada a Elisa –comentó el rubio –puede que tú si logres hacerlo hablar

–No creo tengo esos privilegios desde que ingrese a aquí

–Estoy casi seguro de que él sabe contra quienes nos estamos enfrentando, más, hay un motivo fuerte que le impide hablar

Anansi se mostró sorprendido, pero tenía razón el subcomandante, el gordo Reeves estaba ocultando algo.

–Aún así, dudo que me diga algo –respondió con una pizca de tristeza

–Inténtalo, no perdemos nada con eso

Armin se alejaba cuando la voz de Anansi lo detuvo –Esto tiene que ver con la Rebelión de los Muros, ¿cierto?

Arlert le observó por un momento, sus ojos castaños denotaban seriedad y compromiso, esa mirada la conocía muy bien, porque la vio varias veces antes.

–Todo indica que sí –contesto el rubio

–No podemos permitirnos que eso vuelva a ocurrir –dijo con un tono algo melancólico que Armin notó

–Cierto, incluso tu madre luchó por evitar eso –dijo el subcomandante –era todo una idealista –sonrío un poco al recordarla

–¡Entonces yo tampoco dejaré que eso pase! –clamó seguro Anansi

–Confío en ti –el joven asintió y se retiró para ir a su misión, mientras el subcomandante rogaba que aquella molesta intuición fallará.


...

–Ya es hora –dijo un hombre de barba oscura mientras veía desde una lugar apartado el cabalgar de tres soldados del Cuerpo de Investigación hacia Jinae

–¿Esto es buena idea? –preguntó un rubio cenizo

–No sé, pero si no lo hacemos el jefe se va a enojar –dijo temblando otro hombre castaño

–Por algo es llamado "El verdugo" –mencionó el barbón

–Estamos listos para afrontar las consecuencias ¿verdad? –cuestionó el castaño, los otros dos tragaron saliva y asintieron

–¿Que esperamos? ¡Vamos por los demás! –mencionó el rubio

–Es hora de la revancha contra el Cuerpo de Investigación –dijo determinado el de cabellos negros –y de ganarnos un buen dinero

Los tres hombres se perdieron en la maleza.


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****Notas****

*Por si no recuerdan Jinae es una población al sur de la muralla Rose de donde provenía Marco Boldt.

*Los titanes anormales si pueden escalar arboles y correr.

*Se que a nadie le importa, y es que este fic ya tiene un año continuo sin interrupciones (o sea que he publicado cada quincena por un año). Por lo visto no es interesante, debido a los pocos comentarios y favoritos, pero igual es mi creación, así que estoy orgullosa de esto.