.
N/A 1: K.O.F y sus personajes son propiedad de SNK.
N/A 2: Imaginen a los personajes con los rostros y anatomías de "The King of Fighters for Girls".
Por alguna extraña razón que no comprendía lo observó de una manera diferente a la habitual… fue como un extraño revoloteo en su estómago y un vació que subió hasta su garganta como un latigazo. Quizás no lo había notado u observado tan detenidamente como ahora pero lucía bien.
—¿Vas a moverte o te quedarás parada ahí toda la tarde? —
Esa voz gruesa la regresó a la realidad. Cargaba en su espalda un enorme estuche donde tenía guardado su instrumento, vistiendo él una hermosa chaqueta de color negro.
Al entrar Iori ignoró a todos los presentes y se fue a sentar a la parte más alejada de la sala común. Kyo le sostuvo la mirada en todo segundo mientras apretaba sus puños con coraje, contuvo su boca para no generar pleito.
—Bien. Ahora que estamos todos podemos hablar sobre los temas que nos conciernen. —Athena tomó la palabra. —Estamos por componer nuestro primer sencillo, tenemos varias ideas con respecto a ello, queremos pasar a/y probar un nuevo género musical que vaya más acorde con los tiempos de gloria a cuando la música house reinaba en su esplendor. ¿Ideas? —
—¿Por qué no usar percusión suave que conlleve solo el ritmo de la tarola y un par de platillos? Demos un tono más pronunciado al pedal como si fuese electrónico. —
—Me gusta esa idea, Terry. —sonrió Nakoruru.
—¿Qué tal más gravedad para el bajo? Ritmo repetitivo pero que al combinarse con ciertas notas del teclado y la guitarra no se sienta tan estresante, quizás 2 cuartos por intervalos de 3 segundos antes de cambiar a altas o bajas con los mismos instrumentos. —propuso Kyo.
—Iori ¿Tú qué opinas? —
El pelirrojo observó detenidamente a la ídol y tan solo asintió sin mucha importancia mientras volvía a afinar su instrumento.
..::…::…::…::…::…::..
No pasó mucho tiempo en la cual los muchachos intercambiaron ideas y puntos de vista. De hecho más había sido el tiempo en el cual estuvieron esperando a Yagami que en el que terminaron por ponerse de acuerdo para su nuevo tema.
Luego de ganar algo de tiempo la joven Asamiya pidió a Kyo que esperase a que los demás se fueran para hacerle una pregunta personal. Él, un poco extrañado por su actitud se rio pero terminó por acceder.
..::…::…::…::…::…::..
—Jha jha jha. Entonces ¿Qué es lo que querías preguntarme? —el castaño se recostó sobre el sofá aun curioso por saber qué era lo que su amiga tenía que decirle.
—Antes que nada quiero que sepas que no es obligación responderme esto, aunque si no lo haces de alguna manera estarás respondiendo con el silencio, demostrando que te has molestado y es lo menos que quiero. —
A medida que hablaba, la adolescente juntaba la punta de sus dedos índices con un notorio rubor en sus mejillas.
—Pfff. Ajá. —
—Eres mi amigo desde hace mucho tiempo y no quiero que pienses que soy una entrometida o pervertida pero dado el caso de que tienes novia y llevas mucho tiempo con ella necesito saber esto. —
Su voz se volvió más aguda a medida que decía todo eso. Al notarlo Kusanagi se irguió un poco preocupado por su tono. Los jóvenes tuvieron contacto directo con la mirada. Athena tuvo que reprimir una reacción en su cuerpo que ya conocía a la perfección ahogando un gemido al mirar a su amigo de pies a cabeza.
—Claro, puedes preguntar lo que sea. —medio sonrió.
La idól asintió lentamente sin saber por dónde empezar siquiera.
.
.
.
—¡¿QUE TÚ QUÉ?! —
El grito del chico se propagó por toda la casa. Mantenía los ojos en blanco y al igual que la chica un enorme rubor en sus mejillas se apoderó de él.
—¡Athena! ¡¿Por qué quieres saber eso?! —tembló al hacer su pregunta.
—Ya te lo expliqué. Eres mi amigo, tienes novia, eres atractivo. Seguro que puedes decirme algo que me ayude. —
—¿Y no sería mejor que se lo preguntaras directamente a Yuki en lugar de a mí? Digo. —frunció el ceño manteniendo aún su enorme rubor.
—Ambos sabemos que esa no es una buena opción, se lo podría tomar un poco mal. Y tú eres un bruto sin vergüenza que no le importa ser sutil con lo que dice o cómo lo dice. —
—¡Oye! Eso no es del todo cierto. —
—Kyo, por favor. No tienes idea de mi inestabilidad emocional. Literalmente es como si no pudieras controlarte a pesar de saber lo que está pasando contigo y tú eres de las pocas personas que pueden ayudarme ahora. Necesito que me digas si sabes algo, lo que sea será de ayuda. —
El muchacho dio un largo suspiro a medida que se sobaba la nuca, honestamente jamás pensó hablar con Athena sobre el tema.
—Bueno Yuki y yo jamás hemos… 'eso'. Peeero hay algo que me ha contado con respecto a ello que quizás pueda ayudarte. —
.
.
.
Tras la pequeña charla de información algebraica la adolescente despidió a su amigo.
—Caray. Es aún más complejo de lo que pensé. —musitó, dejando resbalar su espalda por la puerta. —Pero entonces por lo que Hinako y Malin me han contado también ¿Cómo se supone que deba hacerlo? —cuestionó con curiosidad tras observar una de sus manos.
Al desviar su mirada notó un estuche a un costado de uno de sus sillones casi oculto por la perspectiva de donde quiera que mirases. Asamiya se levantó de su lugar y fue a por él abriéndolo una vez colocado encima del cojinete.
—¿Este no es…? ¡Es el bajo de Iori! ¡Lo ha olvidado en mi casa! —
