Beso robado

De noche tarde, Mirai se encuentra a Sasuke ebrio en las calles y lo ayuda llevándolo a la residencia Uchiha, hasta que el azabache hace algo sin pensarlo dos veces.

Esta historia será distinta del manga y anime sobre todo eso de los villanos. No tendrá mucho sentido pero bueno, intentare que sea un poco entretenido.

Abra varios OC.

Si no les gusta, no lo lea.

Era de noche y todo está tranquilo e silencioso, Mirai caminaba en las calles de Konoha con tranquilidad sintiendo el aire fresco en su rostro, ya estaba viniendo el invierno, había terminado su turno en la patrullas, ahora se estaba dirigiendo a su casa.

No había casi nadie en las calles porque era algo tarde y a estás horas algunos ya deben estar durmiendo, hasta que se detiene viendo sorprendida a Sasuke Uchiha, tambaleándose torpemente y echando maldiciones, eso la preocupo ¿Desdé cuándo el gran Sasuke Uchiha actuaba así? Además hablando solo palabras inentendibles, él sonaba molesto ¿Se sentirá mal?

–Esto…hum ¿Sasuke-san? ¿Se encuentra bien? – Pregunto acercándose a él con preocupación, el Uchiha detiene sus pasos y voltea un poco, la mira con expresión fría y cabreada, podía ver el sharingan activo por el enojo del hombre, se sintió fascinada, curiosa y a la vez temerosa por esa mirada. Podía ver las mejillas de él con un color carmesí haciéndola entender que estaba ebrio.

–Muy bien, Sarutobi. – Dice serio el Uchiha apoyando una mano en la pared para no perder el equilibrio.

–¿Necesita ayuda? – Pregunto agarrándolo a tiempo de que tocase el suelo.

Él la mira un largo rato hasta que suelta un suspiro resignado y se apoyaba más en ella.

– Si. Pero no te atrevas a contarle a nadie, ni mucho menos al idiota de Naruto cabeza hueca y perdedor. –Balbuceaba bajo y muy mareado dejando que la kunoichi colocase su único brazo en los hombros de ella.

Tenía que admitir que era raro ver al Uchiha en esté estado además él es más alto que ella, no estaba segura si lo estaba sosteniendo bien.

–Claro, no diré nada – Dice sonriéndole con timidez al Uchiha.

Él aún tenía el sharingan activo, se preguntaba ¿Qué era lo que sucedió para que estuviera molesto y borracho? Mientras meditaba se concentraba llevando al azabache gruñón a la residencia Uchiha.

– Ella siempre se desmaya y usa esa maldita ropa que no la cubre su piel ¡Ella muestra demasiada piel! ¡Odio cuándo esos infelices de la calle miran a mí rosadita! ¡Y odio más cuándo mí pobre bebé anda con poca ropa a salir a entrenar con esos malditos mocosos de hormonas alborotadas! El mocoso uno y el mocoso dos. – El Uchiha comenzó hablar molesto.

Podía notar lo celoso que estaba el hombre mayor, era algo gracioso cuándo lo contaba poniendo gestos extraños y divertidos en ese lindo rostro.

Levanta las comisuras de sus labios divertida por el mayor. Era tan raro ver al Uchiha así. Bueno las consecuencias del poder del alcohol por estar así, haciendo que muestre más sus emociones y soltara algo de su orgullo serio.

Ya estaba cerca de la residencia Uchiha, Mirai escuchaba al azabache quejarse, reír, maldecir, y otros como que estaba así de ebrio y salio hacía un bar, había discutido con Sakura por una tontería de que no se acuerda de cual era la razón de la discusión.

–Ya llegamos, Sasuke-san. – Dice amable con alivio mientras soltaba con cuidado al Uchiha cerca de la puerta, él podrá manejarse solo en casa.

– Adiós entonces, Sarutobi. –Dice serio viéndola detenidamente mientras se sentaba en las escaleras con pereza. Estaba bastante mareado pero no tanto, Se corre el cabello un poco para observar bien a la kunoichi.

–Hasta luego. –Dice nerviosa viendo el sharingan y el rinegan de él, que la veía repentinamente con una mirada afilada y depredadora, era la primera vez que veía el rinegan. Era fascinante y extraño a la vez.

Un poco incomoda voltea para irse hacía casa pero es retenida sintiendo que le agarran la muñeca y es jalada bruscamente a hacía atrás cayendo sentada en el regazo del azabache. Lo mira repentinamente sorprendida.

– ¡¿Sasuke-san?! ¡¿Qué haces?! –Pregunto conmocionada y confundida, viendo al Uchiha soltando su muñeca y abrazándola de espaldas apoyando su rostro en su cuello haciendo que temblara sintiendo sus labios fríos en su cuello y su respiración caliente.

–Vueles bien. –Dijo con voz ronca aspirando pesadamente el aroma de la chica haciéndola estremecer.

–sa…Sasuke-san, suéltame. Estás ebrio. –Decía sintiendo su rostro arder, hasta sobre saltarse al sentir como él dio un beso en su cuello hasta que la a cuesta con rapidez al suelo pavimentado poniéndose sobre ella y rápidamente le roba un beso con brusquedad chocando sus labios besándola con un beso apasionado mientras sentía como él metía su mano bajo el chaleco tocando su piel.

Asustándose, intenta separarlo pero él presiona más su cuerpo al la de ella mientras sentía el olor y sabor a sake de él.

Se sintió mareada por un momento pero reacciona y le da un fuerte rodillazo en la entrepierna al Uchiha haciendo que él rompa el beso separándose con un quejido de dolor: Ella se levanta rápido empujándolo lejos de ella mirándolo confundida y molesta, y agitada con el rostro rojo hasta las orejas, pero antes de huir leda una fuerte cachetada en la mejilla al Uchiha, Por su atrevimiento.

– ¡Estúpido! – Dice y ceba con rapidez dejando al azabache atrás con una buena marca de mano en su rostro.

Mirai salta por los tejados de las casas hasta que llega a la suya, entra con sigilo para no despertar a su madre y ceba directamente a su habitación.

Podía sentir su corazón palpitar frenético, no podía creer lo que sucedió ¡Él la beso! ¡Le robo su primer beso! Se tira en su cama boca arriba mirando el techo mientras sentía su rostro arder al recordar ese beso, se toca las comisuras de sus los labios sintiéndose extraña y acalorada, no solo por el beso si no que también por recordar la mano fría y suaves de él entrando bajo su chaleco verde y tocando su piel.

– ¿Por qué hizo eso? – Piensa molesta y con lagrimitas, le ha robado su primer beso.

Será mejor evitarlo, ni acercarse a él en todo momentos, seria vergonzoso y no se sentía lista para confrontarlo ante su arrebato.

–Maldito Uchiha. – Maldijo bajo tocando su labio.

En la residencia Uchiha Sasuke ve como la joven kunoichi huía de él, dejándolo solo. Se toco el rostro adolorido, sonrojado y avergonzado dándose cuenta de lo que había echo.

– Soy un imbécil. – Se insulta molesto mientras se tocaba los labios recordando el beso y el aroma embriagante de la joven Sarutobi. Esto era una estupidez, no debió haber echo eso.

– Tendré que disculparme con ella mañana. – Pensó serio mientras se levantaba y abría la puerta. Tenía suerte de que Sakura y Sarada tuvieran el sueño pesado, o si no, estaría en aprietos.