Esta es la traducción de Backwards. Creditos a Sensational Sista. Quien fue la creadora de esta historia y quiso implementar Este deporte (Remo, regata) ademas de permitirme hacer esta adaptacion. adjunto la original para quien esté interesado/a s/10301705/1/Backwards
Ni los personajes ni la historia son de mi propiedad,
Sin más que añadir, Enjoy It
Backwards.
Capítulo 1
El remo es un deporte para soñadores. Mientras te esfuerces, puedes ser dueño del sueño. Cuando el trabajo se detiene, el sueño desaparece. - Desconocido
La pelirroja estaba de pie contra la cerca, con vistas al fiordo expansivo. El sol naciente enviaba tonalidades rosas y naranjas bailando por el cielo, reflejándose en las olas de cristal. El canal continuaba millas y millas, el agua se extendía hasta donde alcanzaba la vista. No podía esperar para explorar esta nueva agua con el equipo de la universidad; montar en él, escuchar el regazo de cada chapoteo contra los costados de su bote. Cuando los ojos verde azulado se cerraron revoloteando, se imaginó la suave melodía de los remos girando en sus candados, mientras las palas se hundían en el agua, impulsando el bote con una fuerza invisible. El aire del fiordo era fresco, un rocío brumoso le llegaba a la nariz cuando sus brillantes ojos se abrieron una vez más.
Se sintió sonreír cuando una ligera brisa le hizo cosquillas en el flequillo. Incluso al amanecer, este día era maravilloso. Hoy finalmente estaba comenzando la universidad. Y no podría haber pedido un mejor clima para fines de agosto.
—¡Anna! —Volvió la cabeza al oír su nombre. —¿Cómo sabía que te encontraría mirando el agua?
Ella sonrió al ver la figura familiar que se acercaba. Cuando la radiante rubia apareció a su lado, apoyando una mano contra el poste de la cerca, Anna se rió. —Retocaste tus raíces el primer día, ¿eh Punzie?
La chica un poco más alta sacudió su cola de caballo larga, larga, larga (actualmente rubio dorado) sacó la lengua. —Har har, Pippy Long Stockings*. —Tocó ligeramente las características trenzas de Anna. —Solo quería lucir lo mejor posible mientras me pavoneo por nuestra nueva casa.
Anna sintió como sus ojos se ponían en blanco. —"Pavonearte". Sí, está bien. — Cogió su mochila y se la echó al hombro. — Y mis trenzas son increíbles. No estés celosa. —Le sacó la lengua a su mejor amiga.
Rapunzel agarró el brazo de Anna y tiró de ella lejos del mirador del fiordo. Anna soltó una risa reacia y rápidamente se puso al día con el rápido ritmo de la remera. Su vista ahora estaba enfocada en la acera que conducía hacia algunos edificios de ladrillo cubiertos de hiedra.
Aunque el cobertizo para botes de la universidad estaba a unas 2 millas de distancia, tuvieron la suerte de tener el campus residencial con vista al agua. Habiendo desempacado sus pertenencias la noche anterior, Anna sabía que tenía una vista perfecta del río para despertarse todos los días.
—Lástima que no pudimos conseguir el mismo piso—, dijo Rapunzel mientras pasaban por su edificio: Western Hall. Algunos estudiantes entraban y salían de los dormitorios, todavía se mudaban y se despedían de sus padres y familias.
Anna asintió con la cabeza, pero luego hizo un puchero. —Estoy celosa de que no tengas que subir 4 tramos de escaleras todos los días. —Rapunzel sonrió triunfalmente, como si fuera un honor vivir en el primer piso. Lo que sea.
Mientras las dos continuaban caminando por el césped residencial, contemplaron la vista del sol naciente contra los árboles altos que salpicaban el centro del patio residencial. Los rayos de luz brillaban sobre la hierba verde y exuberante, realzando los colores. Los coloridos tulipanes rojos y amarillos todavía se alineaban en los caminos aquí y allá. Definitivamente era un lugar bien cuidado.
Anna sonrió y respiró hondo el aire fresco. Cada vez que hacía un recorrido por la Universidad, que había decidido en numerosas ocasiones en el noveno grado, se enamoraba cada vez más de su hermosa tierra, su hermoso río y su rústico paisaje urbano. Iba a asistir a la escuela aquí sin importar qué, había tomado su decisión. Dejando a un lado lo académico, fue sin duda el lugar lo que realmente la convenció.
Espera. Sobre esa parte académica. Se le ocurrió una idea. Se volvió hacia la chica alta de ojos verdes.
— ¿Recibiste el correo electrónico del horario de clases anoche? —Ya estaba hurgando en su mochila con cordones para sacar la hoja impresa. —¿El que enviaron nuestros asesores?
La rubia dorada rió, sacando su teléfono. — Sí. Y lo comprobaré en mi teléfono del siglo XXI porque no tengo una reliquia que se remonta a la Edad de Piedra. —Anna puso los ojos en blanco ante el tono jocoso. Sí, su teléfono era de hecho una reliquia para los estándares modernos. Básicamente, solo significaba que no era una pantalla táctil con acceso a Internet. Como si necesitara un teléfono inteligente. (No como si pudiera permitirse uno de todos modos, pero eso no venía al caso).
— Como sea. —refunfuñó sacando su hoja impresa arrugada. Se inclinó sobre el hombro de la otra chica para mirar su teléfono. —Así que el lunes...
—Tengo esa clase de orientación de primer año de mierda en la mañana.
— igual. ¿Tienes la Introducción a la escritura profesional justo después de eso?
Rapunzel asintió. — Parece que juntos sufriremos las clases genéricas de primer año. —Ambas sonrieron con pesar mientras Rapunzel continuaba. — Ew. ¡Son los lunes, miércoles y viernes!
—Está bien, está bien. Dejemos las quejas. —Anna pasó al día siguiente. —Los martes y jueves tengo Nutrición General de 11 am a 12:30 pm y Psicología anormal hasta las 2...
—Espera. ¿Cómo saliste de Introducción a la Psicología? —Rapunzel frunció el ceño, notando que su curso de Introducción a Psicología era los martes y jueves por la mañana.
Anna sonrió. — Créditos de colocación avanzada. Pasé el nivel de introducción. ¡Te dije que deberías haber tomado el examen AP!
Dos ojos esmeralda se pusieron en blanco. — Lo que sea... Aw rayos. Tengo mi Introducción al dibujo el jueves por la noche de 6 pm a 9:30 pm ... ¡Qué asco!
Anna le dio una sonrisa torcida a su amiga. — Cuando te postulaste como estudiante de arte, sabías que los cursos de arte son largos y generalmente nocturnos. —Anna era una de las tres estudiantes del último año de su clase que se había postulado para ingresar a la universidad como especialización indecisa. En realidad, estaba más feliz de no tener que sentir el estrés de cursos específicos por el momento, independientemente de lo que le hubiera recomendado su consejero de orientación. Volvió a pensar mirando su papel. —No te preocupes, yo también tengo una clase nocturna. Jueves 6 pm-9pm. Polaco 101
Rapunzel arqueó una ceja ante la elección del curso de idiomas. —Bueno, sin duda fue una elección al azar.
—Habría tomado finlandés si me lo hubieran ofrecido, ya que mi abuelo lo hablaba. Pero el polaco no debería ser muy diferente. —Ella se encogió de hombros. —¿Te quedas con el francés como modo de idioma?
La rubia arqueó una ceja. —Uhm ¡duh! . No pasé 4 años de la escuela secundaria en ese idioma para que se desperdiciara. —Ella hizo una pausa. — Francés 225. Miércoles por la tarde. Hubo una pausa. Ella parecía pensativa, llevando sus ojos a los de Anna. —¿Cuándo es tu reunión con el entrenador de la tripulación?
Con una sacudida, Anna miró su reloj. Su corazón acelerado se ralentizó al leer la hora. Con el brazo caído a su costado, miró al adolescente sonriente a su lado. —No me asustes así. ¡Sabes lo difícil que es para mí llegar a tiempo! Todavía tengo 5 horas.
Con una sonrisa, Rapunzel se guardó el teléfono en el bolsillo trasero y tomó la mano de Anna. — En ese caso, ¡vayamos a explorar el campus!— Anna era muy consciente de que la definición de Rapunzel de "recorrer el campus" no era ver la vista, sino ver a los estudiantes. Típicamente estudiantes de la variedad masculina. —Creo que hay algunos chicos de Junior que están esperando para conocernos. —Bingo. Anna no tuvo que ver la cara de la remera para saber que le guiñó un ojo.
Bueno, socializar era un buen comienzo. A diferencia de la rubia burbujeante, Anna siempre había tenido problemas para hacer amigos en la escuela secundaria. Independientemente de su personalidad igualmente burbujeante, simplemente no era tan competente socialmente como su mejor amiga rubia. Ser parte del equipo de la escuela secundaria de Oslo tampoco ayudó mucho. En su mayoría, solo salía con sus compañeros de equipo. Pero este era el nivel universitario. Las cosas iban a ser diferentes.
Anna parpadeó, regresó al presente y se dio cuenta de que el grupo de chicos se estaba acercando a ella. Se mordió el labio. Esto podría ser bueno. Además, tenía mucho tiempo antes de su reunión por una vez. Esto ya se perfilaba como una gran experiencia universitaria.
Nuevo día.
Nueva escuela.
Nueva Anna.
¡Mierda, mierda, mierda! ¡Voy tarde!
En algún lugar entre conocer a algunos estudiantes de último año realmente geniales, explorar la biblioteca y los estudios de arte, caminar a algunas tiendas en la ciudad y ver la mesa de postres "todo lo que puedas comer" del comedor, Anna acababa de perder la noción del tiempo.
Las grandes puertas del Centro de Atletismo de la universidad chirriaron cuando la pelirroja las abrió con gran fuerza. Eran sorprendentemente pesadas, lo que le hizo soltar un gruñido cuando retrocedió levemente. Los dos estudiantes que manejaban el mostrador de entrada lanzaron sus extrañas miradas mientras ella entraba tímidamente.
Corrió hacia arriba y directamente a través de los sensores frontales justo más allá del escritorio, activando una alarma sonora. Se dio la vuelta con una mirada confusa y vio el ceño fruncido de los trabajadores de la recepción.
—Debes pasar tu identificación cuando ingreses. —dijo uno rodando los ojos. Anna se sonrojó y volvió a atravesar el sensor, activándolo de nuevo.
—¡Ups! —chilló, arrugando los hombros hacia arriba, buscando en su bolso su identificación recién adquirida. Lo sacó de un tirón, enviándolo a volar sobre los sensores. Se apresuró a buscarlo y volvió a disparar el timbre. —¡Lo siento lo siento!
—¡Agh! solo vete. —Dijeron al unísono los molestos estudiantes trabajadores, ahuyentándola.
Se sonrojó y se apresuró a recorrer el vagamente familiar pasillo. Siguió las paredes moradas, decoradas con adornos dorados. La última vez que estuvo aquí fue para reunirse con los entrenadores la primavera pasada como posible recluta. Ahora estaba aquí de nuevo para hablar con el fornido entrenador como estudiante oficial de la Universidad de Arendelle. ¡Ojalá todavía pudiera causar una buena impresión! No es que tuviera elección. Tendría que amar todo lo que Anna tenía para ofrecer.
Resopló levemente mientras se acercaba a la puerta marrón oscuro en el extremo más alejado del pasillo. El nombre chapado en oro todavía estaba atornillado en el centro de la madera: Coach Oaken.
La puerta estaba entreabierta y sonaba como si hubiera voces provenientes del interior. Anna miró su reloj. 2:44 pm. Llegó casi 15 minutos tarde a su reunión. Se acercó a la puerta para tratar de escuchar dónde estaba la conversación. Ella no era realmente de las que disfrutaban esperando. Y había visto algunos sofás blandos en el vestíbulo delantero en los que prefería esperar.
Con una ráfaga de aire, la puerta se abrió y Anna ni siquiera tuvo la oportunidad de esquivar un hombro que chocó fuertemente con el suyo. Sus ojos verde azulado parpadearon sorprendidos por la fuerza, tirándola de lado. Dio un paso torpe, enderezándose en el último segundo. Se tomó un breve momento para dar la vuelta.
Allí, Anna vislumbró un cabello rubio platinado, que pasaba a su lado en una trenza espesa. Dicha trenza estaba unida a la forma de mujer que se retiraba enojada. Caray. Alguien está dejando que se desate una tormenta. Anna pensó con molestia, levantando su mano para frotar donde su hombro fue golpeado. Se tragó un comentario al escuchar la voz retumbante de su entrenador. Se volvió hacia la puerta y estiró el cuello para mirar al hombre macizo.
—¡Yoo hoo! ¡Anna! —Su fuerte acento noruego estaba siempre presente, tal como lo recordaba. —Entra y toma asiento, ¿Yah?
La pelirroja sonrió, feliz de dejar esa molesta interacción en el fondo de su mente, y tomó asiento en la silla junto al escritorio del hombre. Abrió su bolso con cordón y buscó un paquete de papeles que debían entregarse, así como la razón número uno de su reunión. Agarró los documentos ligeramente arrugados y se los entregó al coche de la tripulación.
Él sonrió. —Genial. Toda la documentación física y las firmas establecidas. ¡Estás lista para ser parte del equipo de la Universidad Arendelle!— Él sonrió. —¿Cómo te sientes?
Anna se rió. —¡Impresionante! Estoy tan emociónada por todo esto, especialmente por remar en este río. ¡Continúa por millas!— Sus brazos se extendieron ampliamente para enfatizar su punto, transmitiendo de alguna manera una medida de distancia dentro de sus palmas.
Luego le entregó un silbato plateado. — El último silbato va a mi último Coxswain*.
—Gracias, entrenador. — Anna sonrió ante la bienvenida oficial y tomó la baratija en la mano. Inspeccionó el metal. Estaba grabado el escudo de Arendelle: una flor de azafrán en flor. Rápidamente se colgó el cordón morado y dorado sobre su cabeza y lo dejó colgando de su cuello. Casi no podía esperar para usar el silbato. Era solo para los entrenamientos en tierra firme con el equipo, no para usar en el bote, por supuesto. Pero aún así, se sentía tan oficial.
—Ya hablé contigo la primavera pasada de que serás parte de nuestro equipo universitario. Recuerda que nos reunimos todas las mañanas en el río. No como el equipo novato del entrenador Weselton, que rema por la tarde.— Anna asintió con la cabeza ante la discusión que habían tenido la primavera anterior. El equipo novato era para todos los nuevos remeros y coxswain que no tenían ninguna experiencia previa con el deporte. Anna había pasado toda su carrera en la escuela secundaria en un barco, por lo que tenía mucha experiencia y estaba preparada para ir directamente al equipo universitario. Sin embargo, este concepto de cualquier cosa que involucre remotamente 'mañanas' no la hizo saltar de alegría.
El hombretón se acarició la barba esponjosa. —Ahora Anna. Todavía quiero que vengas a la práctica matutina obligatoria para todos los estudiantes de primer año después del Día de Orientación. Es una orientación general para la tripulación para darles la bienvenida a todos. Presentar el equipo de remo bajo techo, hablar sobre la mecánica del deporte. Suena bien, ¿no?
Anna asintió con la cabeza. —Suena bien entrenador. —Hizo girar el silbato entre sus dedos y se echó el bolso sobre los hombros.
Su entrenador se rió. —No vayas a abusar del poder de ese silbato ahora. Envió un guiño al que Anna saludó.
—¡Cruzo mi corazón, señor!
¡PHEWWWWWWWWWWW!
— ¡Ay Anna, déjalo! — gritaron Rapunzel y Kristoff mientras se tapaban los oídos del penetrante chillido del silbato.
El trío estaba sentado en el dormitorio de Anna esa noche. Todos se estaban poniendo al día con la vida, Kristoff explicando la dinámica del equipo de la universidad en comparación con el propio equipo de Oslo High, y las dos chicas explicando todo el drama que pasó en su último año sin él. Pero en medio de la conversación, Anna no pudo contener su entusiasmo por probar el nuevo juguete brillante por más tiempo.
—Lo siento pero no —Sacó la lengua y volvió a caer contra la pared cuando Kristoff intentó apartar el molesto objeto. Anna se metió el silbato en el sujetador. Kristoff puso los ojos marrones en blanco.
—Por favor, no dudaré en ir tras él.
Rapunzel y Anna simplemente se rieron. Los ojos verdes rebotaron entre sus amigos. —Estoy tan feliz de que estemos todos juntos de nuevo. ¡Equipo de ensueño!
Kristoff era un estudiante de segundo año en la universidad este año. Pero en la escuela secundaria, los tres eran inseparables. Anna y Rapunzel se conocieron en segundo grado, y Kristoff se unió a su amistad en la secundaria durante un incómodo juego de séptimo contra octavo grado de Ultimate Frisbee. A partir de ese día, Anna había jurado no volver a jugar nunca más, o de lo contrario se arriesgaría a ser atacada por enormes y torpes chicos rubios al bucear en busca de Frisbees. Después de una caminata hacia la enfermería y un control de conmoción cerebral, ella y Kristoff se llevaron bien. Y en la escuela secundaria, todos remaban en el equipo universitario de Oslo High.
Con Kristoff dejando Oslo, viajando las 6 horas en coche hasta Arendelle, había sido duro para Anna. Por supuesto que tenía a Rapunzel, pero su vínculo con Kristoff era algo diferente. No era tan popular como la chica rubia y era diez veces más geek. Casi entendía a Anna a un nivel diferente, aunque ella nunca se lo admitiría a Rapunzel. Pero lo hicieron funcionar, las citas de Skype con frecuencia, muchos mensajes de texto, aunque incluso esos se calmaron cuando llegaron los exámenes parciales y finales. Pero eso ya no importaba. Ahora estaban de regreso. Todos en un equipo de nuevo y listos para mover el barco, bueno, por así decirlo.
Se escuchó un zumbido en la cama cerca de la rodilla doblada de Rapunzel. Tocó su teléfono y puso los ojos en blanco, volteandolo para ignorar cualquier mensaje que recibiera. Dejó escapar un gemido exasperado y frunció el ceño. Anna le dio una mirada comprensiva mientras Kristoff miraba confundido, esperando una aclaración. —Es Patrick—, finalmente gruñó Rapunzel.
Frunció el ceño, similar al de Rapunzel. —¿Qué pasa con Pat-dick? —Anna se rió disimuladamente mientras la chica rubia le resoplaba. —Por favor di que finalmente terminaste con esa mierda.
Rapunzel y Patrick habían salido durante dos años, y estuvieron en las rocas durante al menos 22 de esos 24 meses. No hace falta decir que Anna y Kristoff odiaban al chico. Por innumerables razones. Joder. Él fue la razón por la que Rapunzel dejó crecer su cabello y comenzó a decolorarlo de rubio. Algo en la línea de 'no salir con morenas'. Seguro que le dirían con bastante frecuencia cómo se sentían acerca de la relación. Sin embargo, solo podían hacer comentarios y rezar para que no cayera en oídos sordos. Dependía de Rapunzel manejar su propia vida.
La chica rubia asintió. —Sí, terminé con él hace una semana. —Kristoff sonrió y dejó escapar un elogio de Aleluya.
—Pero ahora el idiota no dejará de molestarla por empezar de nuevo y todo ese asunto —añadió Anna también. El rubio se cruzó de brazos y arqueó una ceja.
—Idiota total. Aunque me alegro de que finalmente lo hayas visto. — Kristoff nunca dudó en poner su granito de arena sobre los novios de sus amigas. Aunque no pudo evitarlo. Era como un hermano mayor protector para ambas. Y tenía un juicio de carácter natural y sorprendentemente preciso, lo cual era extraño ya que pasaba tan poco tiempo con la gente. Él era un autoproclamado "experto en amor", lo cual era discutible. Sin embargo, Anna también experimentó su juicio de primera mano. Estaba extasiado cuando ella le dijo que había terminado con su enamorado de la secundaria. Él tenía razón. Derek era un idiota.
— Bueno, me voy a cosas más grandes y mejores. —Anna miró a la decidida chica rubia y sintió que sus mejillas se calentaban. Estaba tan feliz de ver a Rapunzel finalmente mostrando esa vieja confianza en sí misma nuevamente. Patrick la había derribado, pero no más de allí. El equipo de ensueño había vuelto y, de hecho, todos estaban preparados para cosas mejores y más grandes.
—¿Entonces opciones de películas, damas?—Kristoff preguntó como un cambio de tema, ya abriendo Netflix en su computadora portátil. Todos hojearon con entusiasmo el género de la comedia y, después de una ronda de votos y algunas discusiones, se decidieron por su primera película universitaria oficial juntos.
Anna colocó una almohada debajo de su cabeza contra la cabecera mientras Kristoff configuraba su adaptador, conectando la computadora portátil al pequeño televisor de Anna. Dejó que sus ojos bailaran entre las dos rubias que hablaban a quienes tuvo la suerte de llamar sus mejores amigas. Los dos remeros se colocaron en su lugar en la cama cuando empezaron los créditos iniciales de ' She's the Man '. Era dolorosamente obvio quién fue derrotado en la elección de la película, especialmente cuando Kristoff comenzó su típico comentario de película y Rapunzel reprendió sus comentarios. Anna sintió que sus labios formaban una sonrisa.
Por supuesto. Puede que todavía no haya dominado llegar a tiempo, pero hasta ahora todo se perfilaba como un año emocionante.
Mientras sus amigos discutían un poco más, Anna volvió la mirada hacia la ventana.
El sol poniente envió un resplandor anaranjado brillante a través del fiordo, las montañas gigantes dejaron partes del río cubiertas de sombras púrpuras profundas. Pero el agua brillaba con magnífica maravilla, la luz del sol se reflejaba como brasas en las estelas oscuras. Los ojos de Anna se entrecerraron al ver una sombra moviéndose sobre las olas. Un remero singular, una mujer y su Single se deslizaban sin esfuerzo a través del agua como un vaso en la distancia. La luz la golpeó perfectamente, creando un halo de oro alrededor de su cabeza mientras realizaba una elegante danza entre el cielo oscuro y el agua reluciente. Hizo que una cita pasara por la mente de Anna.
" La solitaria remera, sola en el río, o destacada en su carril durante una carrera, es la figura más romántica, más quijotesca de todos los remos".
Los ojos de Anna se volvieron pesados mientras observaba la serena escena. No pudo luchar contra la sonrisa caprichosa que apareció en sus labios.
- Fin del Capítulo 1 -
N/A: Es una historia Slowburn asi que tendran que disfrutar cada agnifico momento de ella, UWU (PD: Silent night pronto se estar actualizando, es que... me quede sin pc :'(
GLOSARIO
*Coxswains: Timonel o Cox El miembro de la tripulación remo-menos, por lo general incluido, que es responsable de la dirección y la estrategia de carrera. El timonel cualquiera se sienta en la popa o se encuentra en la proa de la embarcación, y se enfrenta en el sentido de la marcha.
decidí dejarlo en inglés porque suena chevere asi que veran mucho Cox, Coxear o Coxswain por ahi ^^
*Pippi Longstocking es un personaje literario creado por la escritora sueca Astrid Lindgren.
*Remera: casi todo el mundo asociara esta palabra con una Camisa, pero es la version femenina de Remero (persona que practica el deporte)
¡Nos vemos pronto!