Stranger Things No me pertenece.

No lei nada hasta el momento de un Fem Will, me dio curiosidad intentar algo.

Teoría de universos paralelos

Willow Byers recuerda cuando tiene 5 años, debido a que era una niña demasiado tímida y diferente, la mayoría de personas al verla piensan que es un niño; su padre Lonnie suele gruñir que las niñas no deberían vestir como niños, lo cual deja totalmente claro lo mucho que Lonnie nunca quiso tener niñas. En realidad, Willow supone que su interés de vestirse como niño y usar su cabello corto, era la estúpida idea de querer ser apreciada por su padre, que simplemente la ignoraba para estar con su hermano mayor Jonathan; no importa cuanto su madre le dijera que no tenía nada malo, Willow simplemente no se siente cómoda con ella misma.

Si tan solo fuera un niño, todo sería más fácil.

Pero no todo esta perdido.

Si bien Mike Wheeler también la confunde con un niño ese primer día del jardín de infantes, Willow está feliz de haber obtenido un mejor amigo; incluso cuando días después su madre le explica a Mike que en realidad es una niña, Mike parece ignorar el asunto cuando se da cuenta que ama las historietas y jugar en el barro con él. El menor de la familia Wheeler (en ese momento) parece encandilado con Willow, incluso si es una niña (no es que lo parezca con sus ropas) y simplemente la toma de la mano declarando que serían mejores amigos.

Willow sonríe torpemente, aceptando el apretón de manos, mientras declara que serán mejores amigos por siempre.

Lo cual…claramente no es tan fácil como esperarían.

Los siguientes años no serían muy diferentes a esos años de infancia, incluso cuando Lucas y Dustin se unen al par, ambos niños no parecen importarle que fuera una niña, la mayor parte del tiempo olvidan que es una niña, incluso cuando su cabello crece un poco más por pedido de su madre; ropas anchas que toma del guardarropas de su hermano y gorras, no ayudan a Willow a ser más femenina y su madre solamente la deja ser feliz.

Las cuatro familias actúan bien con la amistad de todos, jugando calabozos y dragones, jugando en el arcade, ignorando a las otras niñas que hablan mal de Willow.

Mike le asegura que es mucho más genial que cualquier niña que conocen.

Lucas simplemente la empujaría como una hermana pequeña.

Dustin correría con ella diciendo que es la mejor amiga del mundo.

Willow sería tan feliz.

Excepto cuando no lo es.

Cuando el otro lado ocurre, cuando Willow deja de ser solamente una niña normal de Hawkins, para convertirse en el epicentro de toda la locura que los acompañara los siguientes años.

.

.

—Will—la voz de su hermano la saca de su trance, haciendo que parpadee confundida antes de ver a todos lados y luego recordar que estaba en su vieja habitación en Hawkins.

Dios.

Los años pasan.

—Jonathan lo siento, estaba algo perdida en pensamientos sin sentido—declara Willow quien ahora es casi legalmente un adulto con 20 años, el cabello mucho más largo que cuando era niña y ropas levemente más femeninas.

Nadie puede ser amigo de Max y El, sin obtener un poco de esa vibra femenina, aunque está orgullosa de que su closet tenga más sudaderas y pantalones que otras cosas. Lamentablemente su cabello sigue siendo sin mucho volumen, no importa que esté de moda, Willow no podría hacer nada ni aunque lo intentara; en realidad eran Max y El intentándolo, ella simplemente se dejaría hacer como una muñeca.

Pero eso no importa ahora.

Su hermano que luce terriblemente mayor, simplemente suspira y la ve casi preguntando si todo estaba bien, lo cual ella sonríe con más tranquilidad de lo que hubiera hecho de adolecente; cuando fue atrapada del otro lado tuvo una crisis de sentirse impotente y que todos la trataran con delicadeza, pero ahora era un adulto y realmente aprecia la preocupación de otros.

No es que aliente ese comportamiento, pero al menos les recuerda que todo ya acabo.

Habían sido luchas de años, enfrentamientos con tipos peligrosos y monstruos que siempre parecían una locura…Henry.

Willow realmente no quería pensar en eso.

Incluso cuando su familia se mudó al otro lado del país, cuando volvieron al inicio del apocalipsis y todas la luchas que siguieron a eso, Willow realmente no sabía cómo sentirse con la ciudad de Hawkins; era su hogar, pero al final ella había decidido marcharse. Todos habían estado sorprendidos cuando la chica tímida del grupo, había decidido marcharse con Jonathan a Nueva York; no dejo notas y solamente intercambio cartas con sus amigos, pero quería dejar todo atrás.

Quería dejarlo atrás.

Quería seguir adelante.

No quería seguir corriendo tras la espalda de Mike toda su vida, piensa con una sonrisa amarga en su rostro.

—Bueno espero que no estés distraída por mucho tiempo, me tomo el tiempo preparar la cena y El te ha extrañado mucho—bromea Jonathan con ese cariño de hermano, que siempre había amado y que siempre fue un apoyo más que necesito para crecer.

Jonathan la cuido como la mejor hermana menor del mundo, Jonathan la ayudo cuando Lonnie no lo hizo y eso mantuvo a Willow cuerda. Ahora por supuesto con su madre unida a Hop, Willow sabe que se siente tener un padre con Hop haciendo el papel y también una hermana con El en la portada. Su familia ha pasado por muchas cosas y claramente recibió un golpe cuando Jonathan se la llevo para estudiar al otro lado del mundo; otra vez.

Pero está bien.

Willow ahora está en la universidad, está estudiando una carrera de artes y le va muy bien ayudando en una revista; tiene el interés de ser profesora, ayudar a los niños incomprendidos que necesitaban de una mano aliada que Willow a veces no tuvo al crecer.

Pero por ahora, solo viene para disfrutar de sus primeras vacaciones de navidad con su familia luego de 4 años. Usualmente eran Joyce, Hop y El quienes volaban al otro lado del mundo para tener unas vacaciones familiares; por eso era importante para todos estar juntos nuevamente.

Cuando sale de la habitación seguida de Jonathan, rápidamente El se abraza a ella y no la deja ir el resto de la tarde, hablando sobre todo y nada a la vez. La chica que una vez había ayudado a traerla de regreso y luchado con súper poderes, ahora se sentaba para hablar cómodamente sobre su última conquista e indicarle que su idea de ser consejera es mucho más fuerte ahora; Willow agradece que El nunca tuviera incomodidad con ella, sobre todo porque ambas gustaron del mismo chico.

Claro que fueron niñas y estúpidas.

Willow recuerda su enamoramiento por Mike, duda que no hubiera un momento que no estuviera enamorada de él, pero todo había explotado en la cara cuando regreso del otro lado; cuando noto como Mike había estado encandilado con la niña que la ayudo a regresar, como este se había obsesionado con El cuándo regreso el año siguiente y como se hicieron pareja. Una parte de Willow que no estuvo nunca interesada en relaciones, había pensado torpemente que siempre serian mejores amigos, nunca había metido la idea de relaciones en la ecuación y claramente fue un error.

Los celos son una perra.

Que Mike en un momento le gritara enojado que no estarían toda su vida jugando en su sótano y que estaba preocupado por El, había dolido incluso más.

Willow sabe que Mike se arrepintió de esas palabras, pero desde entonces en aquel verano, las cosas solamente fueron en decadencia. Incluso cuando Willow siguió amando a Mike, este estaba encandilado con El y realmente no pudo culparlo; entonces solamente hizo lo mejor que se le ocurrió y dio un paso atrás para dejarlos ser felices, convirtiéndose en la terrible tercera rueda más veces de las que recordaba. Luego de eso, cuando sucedió lo de Vecna y Willow tuvo que mentir para que Mike pudiera por fin decirle un "te amo" a El, fue suficiente; lo dejo ir, decidió seguir adelante y se prometió que cuando todo terminara se iría para dejar ese amor infantil de lado.

Lo hizo.

Había salido con otros chicos, lamentablemente para Willow nunca nada parecía suficiente y se odio que tantos años después, aun fuera débil ante la mención de Mike Wheeler. Esta vez la correspondencia entre ambos era tensa, algo incomoda y Willow estaba segura que no era de su parte; cuando El había llamado comentando con tristeza que había roto con Mike, Willow estuvo al borde de perder la locura.

Su cordura y corazón se habían roto para que Mike hiciera feliz a El, solo para que lo arruinara.

Frustrante.

Pero no importaba, una vez Mike había dicho que no la veía como chica, lo cual estaba bien, la mayoría de sus amigos siempre pensaron más en Willow como otro chico más; la llamaban "Will" todo el tiempo en lugar de su nombre completo. Solo que Willow no estaba enamorada de otros chicos, estaba enamorada de Mike, quien había dicho sin que él supiera que ella escucho, como simplemente no puede verla como una niña o hermana; porque eso era demasiado raro para él.

Willow estaba tan cansada de Mike Wheeler, que solamente lloro una noche, lo cual era un record para ella de este asunto.

Obviamente siguen siendo amigos, pero algo era diferente y Willow esta vez no quiso caminar hacia Mike para descubrirlo, simplemente dejo que todo se ahogara y sigue caminando adelante. Max quien era su mejor amiga no era la mayor partidaria de Mike, así que simplemente dejaba que Dustin y Lucas la pusieran al día sobre Mike cuando hablaba con ellos semanalmente. Hubo algunas cartas con Mike, pero al final no era nada importante y más bien ambos jugando a que aún eran amigos.

Su decisión de venir a Hawkins ese año, era porque todos sus amigos habían decidido ir para una fiesta de navidad en cada de Steve, a lo cual Willow estuvo tentada a negarse; Max había casi suplicado y Max nunca suplica, lo cual hizo que la débil Willow terminara aceptando.

—¿Se van a quedar a dormir? —cuestiono Hop luciendo claramente molesto por el hecho, a lo cual El salta a defender que todos dormirían ahí y separarían chicos con chicas.

Willow casi quiere comentar sobre Robín para molestar, pero el rostro de advertencia de Jonathan la hace callar y solamente sonríe torpemente con un poco de pasta en su boca.

—Vamos Hop, se conocen de toda la vida y han pasado por más que un simple grupo de amigos, merecen una noche tranquila—dice Joyce con una sonrisa demasiado confiada.

Tal vez no debería ser tan confiada.

Probablemente Jonathan se pierda con Nancy toda la noche, no por nada estaban prometidos, mientras que El simplemente se iría por ahí para estar con todos; Max simplemente se iría con Lucas, siempre lo hizo antes y duda que ahora cambie en algo. Willow espera poder comer algo de helado, antes de caer en alguna esquina dormida y lo más alejada del licor que pueda; no tiene nada en contra que sus amigos tomen tanto, pero el recuerdo de Lonnie frente a ella siempre le hizo sentir molestia ante la bebida.

Su padre diciendo de forma grosera que era una mujer inútil que no vale nada.

Ojalá pudiera verlo, solo para restregarle en la cara que esta con una beca en la mejor universidad de arte de Nueva York y que tiene un trabajo de medio tiempo que gana bastante dinero; ser ilustradora era asombrosa y tenía mucho talento, según lo que todos decían a su alrededor.

Si fuera un chico le diría algo como: chúpame el pito.

Pero no era un chico, lamentablemente había crecido rodeada de estos como para saber cómo maldecir como ellos.

—Es hora de irnos—gruñe El unas horas más tarde, indignada de verla con las mismas ropas cómodas sobre su cama escuchando algo de música.

¿Que?

Eran sus amigos de toda la vida, no esperaba vestirse diferente para ellos.

.

.

Willow accede a ponerse otro par de pantalones y cepillar su cabello, pero cuando El comenta sobre el maquillaje, simplemente la deja hablando sola; la chica parece ofendida cuando toma una capucha que le pertenecía a Jonathan para salir. No es que tenga nada en contra de la moda, tiene amigas en NY que suelen vestirla igual que Max y El, por lo que su guardarropa es decente; simplemente no quiere vestirse de más, tomando en cuenta la clase de fiestas que sus amigos suelen planear. La comodidad siempre ganaría, así que simplemente deja que El vaya gruñona todo el tiempo; no es que signifique nada si va bien vestida o no, lo cual parece molestar aún más a esta.

Algo oculta.

Pero antes que pueda saber que sucede, Jonathan llega a la casa de Steve y Willow debe saltar del coche cuando ve una mancha naranja a lo lejos.

La usual chica tímida y recatada, siente que va llorar cuando corre hacia adelante y se impacta contra la otra joven que suelta una carcajada feliz regresando el abrazo.

—Mi querida Willy sigue siendo tan linda—

—Max te extrañe mucho—

Se separa de Max casi obligada y sintiendo las lágrimas salir de sus ojos, porque ha pasado un año desde que vio a la chica, quien se había auto invitado a su departamento con Jonathan y Nancy; Willow casi tiene un infarto cuando había abierto el departamento y Max había saltado sobre ella con diversión. El cómo hermana de Jonathan y Willow solía ir todo el tiempo a su hogar, pero los demás tenían muchas más dificultades, Max siempre se hizo campo para ir a verla y solían hablar mínimo dos veces por semana todo el tiempo.

Extrañaba a su mejor amiga.

—Hola a ti también Lucas, ¿te has hecho más alto?, no te preocupes Will siempre te extraño también—gruñe Lucas al lado de Max claramente ofendido, pero cuando intenta abrazarlo, Max la abraza con más fuerza contra ella.

—Aléjate Sinclair ella me pertenece—señala Max con tono altanero que indigna a su pareja.

—La conocí primero—habla indignado a lo cual Max lo ignora claramente abrazándola con fuerza.

Max no era alguien muy físico, pero siempre había tenido una debilidad por Willow, que la chica dejaba ser; amaba los abrazos de Max. Aun así, se alejó de esta para abrazar con fuerza a Lucas que prácticamente la levanto por los aires emocionado; puede que pasaran mucho en el pasado, pero Lucas siempre había visto a Willow como una hermana menor.

La trata mucho mejor que a Erica.

Detalles.

—WILL—chilla Dustin quien estaba saliendo de la casa probablemente por los sonidos y Willow rápidamente siente el terrible abrazo de oso que la deja sin aire.

Chilla divertida cuando se abraza a Dustin, la inocencia y honestidad brillando en sus ojos, que provocan que Willow se sujete a este declarando que no se alejara toda la noche; el chico se declara ganador y Max parece lista para morder a quien fuera que se entretuviera entre ambos.

Mientras entra en un abrazo doble con Max y Dustin, seguido de El quien parece molesta de ser dejada atrás, casi puede ver por el rabillo del ojo la figura de Mike a la distancia cerca de Steve y Nancy en la cocina. No lo ve muy bien y espera que sus ojos no se desvíen mucho en este, pero solamente el hecho de verlo más alto y su cabello atado descuidadamente en un moño, hacen cosas por Willow que no puede contener; Max diría que Mike no es atractivo, pero tiene algo que la vuelve completamente loca.

Es un desastre.

Siente en medio del abrazo la mirada incriminatoria de Max y decide ignorarla cuando llega para abrazar a Robín.

La chica silba dándole la vuelta, diciendo que, si fuera menor iría totalmente por ella, dejándola totalmente roja mientras Max comenta similar sobre la idea de estar con ella y El comenta que faltaba un cambio de ropa; Dustin y Lucas toman esa señal para dar media e irse lejos del lugar, ambos levemente sonrojados.

Willow quiere seguirlos, pero Max la sujeta con fuerza, cuando voltea a ver a Jonathan para pedir ayuda este solamente sonríe divertido y la deja sola.

Maldito bastardo.

.

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Si alguien nota o no la distancia entre Willow y Mike, son lo suficientemente amables para no comentarlo y Willow realmente agradece que Max este con ella casi toda la noche; excepto cuando la chica claramente algo tomada decide zambullirla a la piscina; porque es navidad y hace un jodido frio. Pero eso provoca una fiesta improvisada en la piscina, que provoca que todo el mundo lance a los otros y terminen riendo como niños en medio de todo el caos. No es hasta que sus labios comienzan a volverse azules y su piel demasiado blanca, que Jonathan la ayuda a salir del lugar y le grita a Steve por permiso para cambiarse; el tipo lo ve incrédulo, diciendo que son de la familia y Willow asegura que puede estar sola unos momentos.

Voltea a ver a Max que sigue en una lucha con Lucas para arrojar a Dustin del trampolín, por lo cual supone que podrá cambiarse un rato.

Había traído ropa extra, porque nadie pasa tanto tiempo con el party, sin conocerlos y saber que siempre se necesita un par de ropa extra…o tres.

El intento de Dustin en la cocina de hacer un postre, había terminado una vez con todos (los 4 originales) ellos cubiertos de salsa roja, que ni siquiera necesitaban para el flan; sus padres siguen sin entender y probablemente hay una foto o dos por alguna parte de los viejos álbumes de fotografías.

Temblando se mete en el baño principal y sujetando su mochila para buscar un cambio de ropa, toma asiento en la taza del inodoro cerrada, tomando una toalla y secando su cabello; era muy largo y claramente ahora sería más útil corto. Se quita parte de la camiseta y se detiene un momento viéndose en el espejo, solamente con un sujetador en la parte superior, puede notar su piel demasiado blanca; lo que realmente llama la atención es la cantidad de cicatrices bañadas en su torso y brazos.

Willow había salido con chicos, pero siempre que alguno de ellos mantenía la relación lo suficiente para intentar seguir al siguiente nivel, Willow los detenía; lo cual probablemente llego a la finalización de muchas de ellas. Pero aparte de la dificultad para mantener una relación, de engañarse de que podría amarlos como Mike, la realidad es que Willow no podría imaginar a alguien viendo este cuerpo y sintiéndose a gusto.

Ella odiaba el reflejo del espejo.

Odiaba lo que había sucedido.

Pero no puede cambiar quien es.

El sonido de un jadeo provoca que voltee el rostro incrédulo, Mike parece encontrarse en medio de un accidente de tránsito por la mirada perpleja en su rostro; todo él destilaba agua como Willow y es difícil pensar que es la primera vez que están en un espacio solos, con la risa de todos en el fondo. La incomodidad es clara para Willow, pero cuando Mike baja el rostro y ve su torso (descubierto lo suficiente para ser incomodo), su rostro cambia a uno de completa nostalgia.

Ella voltea el rostro incomodo, pero no se cubre, su pecho realmente no era tan grande como el de Max o Eleven, era demasiado delgada y apenas si tiene curvas.

Además, es Mike.

Su amor platónico de toda la vida y el chico con quien ha tenido las aventuras más locas en su vida, duda que tenga alguna cicatriz que este no hubiera visto como se creó; ignorando que tal vez llevan demasiado tiempo sin una charla decente entre ambos, Willow realmente no está avergonzada con que Mike la vea.

Lo que si la avergüenza es como Mike cierra la puerta detrás de él y los nervios que siempre nacen al estar cerca de Mike, siguen fluyendo como si tuviera nuevamente 5 años y el torpe niño caminara a ella pidiendo ser amigos. Mike ignora sus pensamientos ya que toma una toalla que coloca sobre sus hombros, cubriéndola en gran manera y sujetando la que tiene en sus manos para seguir secando su cabello, como hizo cuando eran niños.

—Estas empapado—señala Willow y está segura que, en todos estos años, no pensó que lo primero que le diría a Mike Wheeler serían esas palabras.

Irónico.

Extraño.

Como todo lo que es con ambos.

—Culpa a Dustin y Lucas, pero no importa, sé que eres más propensa a enfermarte así que no debiste quedarte tanto tiempo—declara con indiferencia y le gustaría contradecirlo, pero la verdad es que es cierto.

Bufa, Mike sonríe levemente victorioso y Willow aparta la mirada del rostro del chico, ya está suficientemente enamorada del idiota como para ser más evidente con el chico; sus facciones han cambiado mucho, sin la grasa de bebé y dedos tal vez demasiado largos, que Willow simplemente quiere dibujar en papel toda su vida sin cansarse.

Mal.

Mike Wheeler es malo para ella.

La vuelve estúpidamente cursi.

Sujeta la toalla de las manos de Mike y se aleja un poco, gruñe que puede hacerlo sola mientras Mike rueda los ojos sin agregar nada, claro que Willow simplemente esta por escupir sus pulmones cuando el chico se quita la camisa (descaradamente lento) frente a ella.

—Mierda Mike, ¿Qué rayos haces? —le pregunta incrédula y conteniendo su voz baja para no llamar la atención de nadie.

Si hace una doble toma al torso del chico, Willow puede negarlo incluso bajo tortura; pero los ojos divertidos de Mike dicen, que probablemente se dio cuenta.

—Por favor Will, has visto más que eso de los chicos, además hace un frio de cojones—

—Ve a otro baño—

—Nah—

Willow aprieta la toalla con furia, antes de tomar rápidamente la mochila del suelo y salir a trompicones del lugar antes que haga algo estúpido; gruñe molesta cuando pasa por un espejo, notando sus mejillas sonrojadas y caminando al siguiente cuarto vacío. Cierra con llave esta vez, antes de cambiarse rápidamente de ropa mojada y dejando la húmeda extendida con la esperanza que se seque un poco antes de que se vayan el día siguiente.

Con ropas cálidas y la toalla aun sobre sus hombros, sale del lugar notando que todos siguen afuera jugando y riendo.

Mike parece haber ido a la cocina, el aroma de chocolate caliente hace cosas en Willow, quien supone que, si ha estado con Mike en un baño sin que el mundo explote, tal vez pueda pasar un poco más con él; la realidad es que le da miedo que la vuelvan arrojar a la piscina si sale, lo cual no sería nada extraño para Max.

Al entrar a la cocina Willow se replantea la idea, porque la espalda de Mike está a su vista con esa camiseta algo pegada al cuerpo y no ocupa esa imagen en su cerebro; el chico es una cabeza más alta que Willow y tiene extremidades muy largas, que sinceramente la chica solo quiere que la tome entre sus caderas y la abrace contra la mesa.

Si.

Esto es una mala idea.

Antes que pueda irse, Mike la ve de reojo con algo de sorpresa, antes de indicarle que tiene una tasa de chocolate caliente y el frio la obliga a dar unos pasos para aceptar la bebida; se asegura de alejarse unos pasos de este, solo como prevención.

Nuevamente si lo nota o no, Mike simplemente levanta su propia tasa de chocolate en saludo y Willow sonríe levemente antes de concentrarse en el líquido entre sus manos.

Delicioso.

De la manera que a Willow siempre le ha gustado.

Incluso tiene marshmallows en este.

—¿Puntuación? —cuestiona Mike del otro lado de la cocina y Willow lo ve de reojo, antes de bajar la mirada con una leve sonrisa.

—Un sólido 6—su repuesta hace que Mike se vea claramente ofendido, lo que le hace difícil mantener el rostro serio frente a él.

—Vamos eso es mínimo un jodido 9, lo hice tal como recuerdo que te gusta…al menos que ya no te guste así—la broma toma un giro inesperado cuando ve el dolor en el rostro de Mike, probablemente ante la idea de que las cosas cambiaran tanto.

Lo entiende.

Mike y Willow siempre han sido malos para el cambio.

—Es una broma Mike, es perfecto; aunque le quitaría un punto por lo acosador que suena que recuerdes esos detalles de mí, así que un nueve solido—intenta tomar la broma nuevamente, a lo cual Mike levanta la vista para mirarla, antes de ver a otro lado.

Willow se siente algo incomoda.

—No es que olvidara las cosas que te gustan Will, simplemente yo…solo…maldita sea no se supone que tengamos esta charla ahora—la voz de Mike suena cansada y Willow se sorprende que quiera hablar con ella; todo esto da un giro cuando Mike la ve de reojo luciendo culpable—no te olvide Willow, incluso cuando todo parece diferente y no me gusta, yo…siempre serás mi mejor amiga—parece que quiere decir más, Willow sabe que si lo presiona podría obtener más.

Pero no lo hace.

Porque Mike parece asustado y dolido, lo cual siempre es la debilidad de Willow.

No es culpa de Mike que Willow quisiera más que amistad, no es culpa de este que se hubiera enamorado y que aun sintiera cosas por él, por lo cual es más difícil tener una charla seria cuando de fondo se escuchan risas. Durante mucho tiempo Mike no la vio como chica y duda que alguna vez como potencial romántico, incluso si para Willow, Mike era quien puso las estrellas en el cielo e iluminaba su camino.

No es culpa de Mike.

Es de Willow.

Ha pasado los últimos años manteniendo una distancia que duele, pero que ha protegido su corazón y no debería caer ahora; pero cuando ve los ojos de Mike, solo puede suspirar dando unos pasos eliminando la distancia entre ambos.

Figurativa y literalmente.

Su mano se posa sobre el brazo de Mike que la ve con tanta esperanza y anhelo que duele.

Solo esta noche, piensa algo alarmada y preocupada por ella, solo esta noche será la mejor amiga de Mike y luego regresara la distancia; es buena fingiendo, es buena creando y manipulando la muralla en su corazón. Sabe que con esfuerzo puede mantener una mejor amistad con Mike ahora, no sentirse una basura cuando este tenga sus parejas y poder mantener relaciones levemente estables; algún día encontrara un chico que pueda amar y Mike también tendrá alguna chica que se case con él.

Y está bien, dolerá, pero ambos son adultos y esta bien.

—Desde que eras un niño de cinco años que me pediste ser tu amiga, siempre has sido mi mejor amigo Mike, incluso cuando las cosas no han sido las mismas, siempre te he querido como mi mejor amigo—es difícil no decir esto sin sonar como una declaración, pero que el rostro de Mike parezca brillar le hace notar que todo este tiempo se ha visto algo opaco.

—¿De verdad? —su pregunta suena como la de un niño y eso provoca que Willow sonría.

Suavemente coloca su tasa de chocolate contra el mostrador y toma la de Mike para hacer lo mismo, antes de asegurarse que solo ser una vez.

Solo un momento y luego dará unos pasos atrás.

El abrazo es nervioso de parte de Willow, ya que no se han abrazado de esa forma desde que tienen 13 años y se sorprende que tan rápido Mike regresa el abrazo con fuerza; no es como Dustin o Lucas, es diferente y Willow se culpa de que no pueda sentirlo como los demás.

Se siente cálido, su aroma es adictivo y solamente quiere fundirse con él sin soltarlo nunca.

Joder.

Se estaba volviendo loca, todo esto era una mala idea y su debilidad por Mike Wheeler iba ser su perdición.

—Te extrañe Willow, te extrañe muchísimo—usualmente Mike no dice su nombre completo, lo cual la hace estremecerse y simplemente suspirar ante el desastre que está hecha.

Ve de reojo al chico que simplemente sonríe de una forma brillante, que no puede evitar ver nuevamente al niño de 5 años que hace tantos años había jugado a los columpios con ella.

Un desastre.

Pero igualmente sonríe.

.

.

Para su sorpresa el resto de la noche Mike decide abrazarla, lo cual provoca incomodidad cuando todos entran para seguir la fiesta y recibe miradas demasiado comprometedoras; Willow quiere chillar cuando Max y El se ven algo fanfarronas, porque claramente no está pasando lo que están pensando. El alcohol solamente hace que Mike sea más pegajoso y Willow deja de intentar que Jonathan la ayude, dejándose llevar por el borracho abrazador que era Mike Wheeler. No sabe si está en el cielo o el infierno conforme la noche avanza, dudando sobre revivir a Vecna solo para que acabe con ella de una vez y volver a respirar.

No puede estar más feliz cuando conforme la noche se acerca, por fin puede ayudar a Mike a acostarse sobre la cama de invitados, totalmente intoxicados como la mayoría de ellos; Lucas y Max habían desaparecido hace tiempo, el grupo los había encontrado tantas veces en situaciones comprometedoras, que Willow no tiene interés en buscarlos.

Esperaba irse a dormir a uno de los sofás de la sala principal, pero Mike parece seguir siendo abrazador borracho Mike, que la obliga a sostenerla entre sus brazos; Willow gimotea incomoda, pero Mike parece cómodo abrazándola y con el rostro enterrado en su cuello.

Maldita sea.

Su corazón no ha dejado de correr en toda la noche y está cansada de sentirse ebria de la presencia del chico.

Ojalá la tierra se abriera y la tragara.

Todo sería muy fácil.

—Deja de moverte Will, quiero dormir—la forma en como este musita las palabras y el aliento choca contra su cuello, hace que deba morderse el interior de su mejilla para no moverse alterada por las sensaciones.

Ignora el aroma a alcohol que odiaría en cualquier otro momento, porque sigue sintiendo el aroma natural de Mike y eso es peor.

—Esta ebrio Mike, solo duérmete—para poder escapar de aquí cuanto antes, continua mentalmente para poder mantenerse estable.

—Quiero mi premio—claramente no es un Mike fácil de dominar, pero eso deja a Willow confundida.

—¿Premio? —

—Gane contra Dustin, quiero mi premio—

—Si hablas sobre el reto de quien se quitaba la camiseta y se lanzaba de regreso a la piscina, Dustin gano, tu no dejabas de abrazarme—

—Ahhh, cierto, entonces no importa, igual tengo lo que quiero, Willow entre mis brazos—

Maldita sea Mike Wheeler, lo detesta con cada fibra de su corazón y es el principal culpable si muere de un infarto en este momento; su rostro debe estar rojo como un tomate y solamente deja que el chico siga abrazándola con tranquilidad.

Debido a que no tiene nada más que decir y duda que sus labios puedan formular algo cuerdo, solamente decide respirar para no morir, mientras el cuerpo de Mike parece relajado al descubrir que no piensa irse; al menos no hasta que este inconsciente, lo que espera sea pronto.

Pide a todos los cielos que sea pronto.

—Hey Willow—llama Mike, quien para su desgracia no está dormido y solamente hace un sonido leve entre sus labios para que sepa que no está dormida; duda que pudiera dormir en este estado—eres preciosa—musita en un susurro y esta es casi la gota para mandarla a volar a la luna.

Toma aire cuando se da cuenta que ha dejado de respirar, Mike no parece procesar lo que dice, esta ebrio y está totalmente segura que mañana todo esto quedara en ideas locas que pasan cuando te emborrachas; toma nota mental para no estar nuevamente cerca de borracho Mike en el futuro, por el bien de su corazón.

—Estas demasiado ebrio—decide en voz alta y Mike gimotea, lamentablemente, acercándose aún más si es posible a ella.

Esta deliciosa tortura no está ayudando a mantener los pensamientos de una chica cuerda, que ya es bastante difícil un día normal, como para sumar esta cantidad excesiva de espacio cercano luego de años de abstinencia.

—No, Willow siempre ha sido preciosa—maldice que el chico siga usando su nombre completo—pero yo no lo dije, porque no quería que se sintiera mal—ahora habla como si no estuviera aquí con ella, lo cual Willow no está segura si es algo bueno o malo—solo quería que siguiera siendo mi mejor amiga, los sentimientos son estúpidos, pero es imposible no ver a Willow y sentir que todo es maravilloso con ella a mi lado; la extraño…te extraño—sus palabras parecen algo incoherentes en algunos partes y su respiración cada vez más profunda, porque antes de que diga algo parece totalmente dormido.

Bien.

Excelente.

Willow medita sobre tomar una almohada, enterrarse en ella y gritar ante la confusión que siempre era Mike Wheeler para ella; pero luego de que pasen varios minutos, tal vez horas mientras procesa que acaba de pasar, puede separarse del chico que esta inconsciente.

Bien.

Genial.

Maravilloso.

Prácticamente huye a la cocina, donde no hay nadie y ve casi tentador ahogar todo en licor por primera vez en su vida, porque su cabeza no deja de doler y todo se vueltas; todo es culpa de Mike Wheeler.

Como siempre.

Toma una de las almohadas del sofá, enterrando su rostro en ella y gritando.

Maldita sea todo es confuso.

.

.

Despierta con el delicioso aroma del desayuno creado por mamá Steve, provocando que por un momento piense que lo sucedido anoche fue un extraño sueño de un mundo alterno, pero no tiene tanta suerte; nunca tiene tanta suerte. Toma el desayuno en silencio y Steve es la típica madre comprensiva que parece saber que su hija más tímida no quiere hablar, pero es comprensivo para darle otra rebanada de hot cakes que Willow agradece. Su mente sigue intentando correr sobre los eventos de la noche anterior, la cual se arrepiente de no haber bebido, ya que de esa forma todo estaría en el limbo de memoria perdida entre borracheras.

Con suerte Mike sea así, no recordando nada y solo dijera palabras sin significado.

Pero para Willow no era así.

Esas palabras, esas malditas palabras que ha querido escuchar toda su vida, seguirán acompañándola el resto de esta; probablemente nunca tenga una relación funcional, porque siempre pensara en el estúpido y borracho Mike Wheeler que dice que tiene sentimientos por ella.

Quiere irse.

Quiere correr.

Quiere gritar.

Quiere saltar en la piscina de Steve y quedarse bajo el agua, hasta que el mundo exterior desaparezca.

En su lugar camina hacia el dormitorio donde estaba Mike, ya que ahí tiene su mochila y decide que puede caminar unas cuantas horas a casa, solo para no tener que estar aquí cuando Mike despierte; el destino claramente la odia cuando abre la puerta y Mike está sentado en la cama luciendo totalmente destruido por la resaca.

Este voltea a verla, Willow aparta la mirada algo incomoda, pero cuando ve que este parece al borde del vomito debe correr a su lado para ayudarlo; porque claramente Willow puede estar enojada con este, pero iba ayudarlo en cualquier momento.

El idiota Wheeler (si, piensa a veces en este por su apellido cuando está molesta) debe saberlo bien, ya que cuando se acerca a este, deja de lucir como al borde del vómito y sujeta con fuerza su muñeca; no quiere dejarla ir, lo ve en su mirada y este debe ver su rostro fastidiado.

—Eso es trampa—habla con una nota traicionada en su voz y Mike gimotea un poco ante el sonido alto cerca de este.

—Lo siento, soy un perdedor aprovechado, pero parecías que ibas a huir—no va negar eso, ya que es cierto y solamente se desploma a su lado en la cama—estaba asustado cuando no estabas aquí cuando desperté—añade algo tembloroso y Willow voltea el rostro.

No durmió aquí, pero no iba decir eso, lo cual no era mentir, era ocultar parte de la verdad.

—Steve hizo el desayuno, también café, deberías ir por un poco—enojada o no, siempre ayudara a sus amigos.

Para alguien que debe tener resaca, Mike es bastante ágil ya que en un giro de eventos a su alrededor, un chillido sorprendido de Willow, está nuevamente en la cama con Mike abrazándola; el Deja Vu es fuerte, porque hace apenas unas horas que tuvieron esa posición. Pero aunque antes estuvo nerviosa (igual que ahora) había pensado que todo era culpa de un borracho Mike, lo cual es contrario al Mike con rescata y consciente de su cerebro en este momento.

¿Volvió a tomar?

Su rostro es confundido y el de Mike algo desesperado.

—Quédate conmigo Willow, por favor no te vuelvas a ir—no hay reproche en su voz, solo la súplica que provoca que años de fortalezas sean derribadas como de costumbre.

Tan malo.

No la deja ir, no la deja seguir adelante.

Pero si es sincera con ella misma Willow realmente supone que lo entiende, porque una parte de ella siempre estaba sujetando esa pequeña cadena del destino que la unía a Mike Wheeler, sin querer soltarlo tampoco y sin poder seguir del todo adelante.

Suelta un suspiro, porque Mike no está hablando de forma tan literal, porque ella piensa regresar las siguientes semanas a su universidad, pero sabe que Mike habla de otra forma; debe extrañar tener un mejor amigo, lo cual Willow también extraña. No la extraña amistad que tuvieron luego y durante los eventos de Hawkins con el otro lado, si no la amistad de dos niños de cinco años que se toman de la mano y prometen estar juntos para siempre.

Puede que salga herida de nuevo, puede que todo sea más doloroso y solo repita mismos errores; pero no puede decir nada que dañe a Mike con esa mirada que le está dando.

Tan desesperada.

Sonríe mientras usa una de sus manos para acariciar levemente la mejilla de Mike, asombrada por como el rostro de este cambia rápidamente a uno esperanzado y cansado; se ve demasiado para su edad, pero supone que todos tienen esa mirada ahora.

—No me volveré a ir Mike, yo también te he extrañado—susurra en voz baja, sin querer abrir la compuerta de sus sentimientos y decidida a controlarlos mejor que nunca por el bien de esta amistad.

O eso pensaba.

Los ojos de Willow se abren incrédulos cuando unos labios tocan los suyos, un aleteo de un momento, que la deja completamente en shock; Mike se aleja luego de unos segundos, solo para verla con esa sonrisa algo torcida y ojos brillantes, que le hace pensar que tal vez interpreto sus palabras de otra forma.

Su boca se abre incrédula.

Vaya.

Mierda.

—Te lo dije anoche Willow, eres preciosa, aquí y en todos los universos, así que no te dejare ir y prometo compensarte toda mi estupidez—habla Mike sujetando sus mejillas con cariño y Willow sabe que ha muerto, que esto verdaderamente es el cielo y está bien.

Porque cuando sus labios se vuelven a unir, todo parece tan correcto y emocionante, que se pregunta tardíamente que si todo este tiempo que estuvo alejándose de Mike, este probablemente estuvo intentando buscarla.

Fin

Espero les gustara.

La idea nace de pensar por un instante, que si Will hubiera sido chica y aun así se hiciera amigo de Mike, sin duda sería mucho más fácil para ellos estar juntos; pero amo el drama.

Nota:

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Sayonara sexys lectores.