ficción

Historias de Albert y Candy

presenta

Quédate Conmigo

Por Mayra Exitosa

En la familia Legan recibían la llamada del asistente de William, quien proporcionaba la fecha del evento de boda de Eliza, sin demora fueron tratados como la familia importante que eran, pues les habían otorgado el salón más difícil de conseguir el Resort Andrew Park, el cual tenía un paquete todo incluido, con armoniosa banda musical, tanto en la comida como en el baile, era un deleite costoso tener ese salón de doscientas personas incluidas, por lo que tendrían que ser muy selectos al invitar ya que debían confirmarse sus asistencias.

Habiendo realizado la última compra y entrega del resto que conllevaba la dote de su supuesta hija mayor, su suegro enviaba las notificaciones formales a su espléndido yerno, William Andrew donde se le informaba su liquidación total, mencionando el cumplimiento de los detalles con respecto al tratado de sus abuelos, asegurando que ellos habían llevado a cabo todo lo establecido y se notificaba al despacho donde se había llevado a cabo el matrimonio, el cual detectaba algunos inconvenientes, que no tenían estimados y esos los notificaban solo a los contrayentes, es decir a William y a su esposa.

William leía y sonreía sobre el aviso de su suegro, sabía que habían realizado trampa, pero ahora los haría comer polvo si le quitaban a su esposa, ellos quedarían en la ruina, si Candy no firmaba como era debido, le podían reclamar su fraude, más meditaba que, con ese oro, podía bien refinanciarse para finalizar dos de las más grandes inversiones que tenía, pero de solo pensar en ella el dolor de saberla lejos lo hacía creer que sería capaz de darle todo eso y más, si con ello lograba que se quedara a su lado. - ¡Candy! ¡perdóname!

Mientras que Sara confirmaba con su hija que debían realizar un brindis de compromiso en la mansión lo antes posible, así que tenían que agendarlo con el asistente del actor. Elizabeth en una cita sorpresa con su espléndido prometido trataba el tema,

- Si, Terry, sé que dicen que esa resbalosa se metió a tu cama, pero nosotros somos pareja y tenemos mucho tiempo, esa mujer es una arribista, soy quien ha estado contigo en las buenas y las malas, por eso he conseguido el patrocinio de la empresa que pagará lo que pediste. - Cariño, eres mejor que mi representante, pero dime, ¿qué es eso de que vamos a casarnos? - Mis padres supieron del encuentro con la actriz esa, Marlow, y yo les dije que íbamos a casarnos y que ella no significaba nada, solo publicidad. Terry se sentía abrumado por como ella lo había defendido, realmente lo amaba y él sentía por ella más que solo pasión, había estado con él desde sus comienzos y no iba a darle la espalda a una mujer que hacía por él, lo que nadie más haría, con un beso sellaba su boca y suspiraba diciendo su nombre, - ¡Eliza!

- Me prometiste que, si cumplíamos tres años de novios, nos casaríamos, sabes bien que hemos estado juntos y Susana fue quizás solo un desliz de una noche, lo cual te dije que no me importaba, estaría contigo para que ella no se introdujera en tu habitación de nuevo de ser necesario. - ¡cariño! ¡muy bien! ¡nos casaremos!

Terry no le aclaraba que Susana había permitido ese anuncio solo por publicidad, que realmente no se hallaba con ella en ninguna habitación ni le había sido infiel, sabía que Susana venía de una relación donde fue rechazada y que se estaba colando a su habitación cuando esta se encontraba vacía, la segunda ocasión que lo había intentado fue con uno de sus guardaespaldas con quien había yacido la actriz, ebria y llorona delirando todo lo que había pasado y siendo grabada, pero para Terry saber que su novia le perdonaba eso, con tal de que continuara su relación, misma que había sido muy satisfactoria entre ambos desde el comienzo, al poseer un fuego interno que los envolvía cada que yacían juntos, era más que suficiente para él. Ella apenada bajaba el rostro y declaraba, - Sabes bien que te amo Terry - También te amo preciosa, no tienes nada que temer, sigues siendo la única para mí. Aseguraba con tal eco que nadie podía dudar de sus palabras.

La efusividad de Terry ante lo que ella había escuchado la hizo llorar, pero el actor de inmediato la besaba y le decía que eligiera el mejor anillo de compromiso, que lo pagaría y se lo daría de inmediato. Elizabeth había conseguido muchos de los contratos a través de sus contactos e influencias, incluso los patrocinios de Chanel, Nike y Calvin Klein, eran por ella que había insistido en su nivel actoral y escultural presencia era del agrado de miles de fans, le debía mucho, por lo que casarse ya lo había estimado, aunque no le gustaba la idea de hacerlo ese año, ya no importaba, ella lo había dicho y debía apoyarla, al menos desde que estaban juntos le iba mejor, con su anuncio de boda, lo seguro era que Susana saldría huyendo y dejaría de insistir, al final era buena actriz y podían llegar a trabajar en alguna obra o película en un futuro, más Elizabeth representaba mucho más que una amante en la cama, ya que a la fecha ella era la novia tras bambalinas y había estado en toda su carrera a su lado desde antes que fuera famoso y contara con los resultados del rating que poseía actualmente.

Eliza veía la agenda con el representante de su novio, buscaba cuando estuviera un fin de semana en Chicago para el brindis del compromiso y así mismo elegir la fecha que ya tenía estimada en New York para su boda, a lo que solo tenía ese día disponible y ella lo agendaba tan segura como que él ya le había dicho un sí. A lo que el asistente sin saber de qué se trataba aseguraba el día mencionado presentarse en New York, en el hotel Resort Andrew Park, uno de los más selectos en la zona lujosa de la ciudad.

Candy por su parte, por fin coincidía con la asesora inmobiliaria, la cual personalmente le mostraba las propiedades, notando el costo superior a sus presupuestos, sin embargo, la rubia fingía ignorarlo, meditaba que podía pedirle dinero a Ludivina para completar, estaba segura de que se lo daría, pues al parecer su padre anterior continuaba sin darle información de que ya no era su hija, más no podía confiarse en eso, así solo continuaba viendo las casas cercanas a las playas y todas le recordaban a él, su flamante marido de manera obligada, pero al final su marido, quien ella había pensado amoroso y apasionado solo con ella.

Continuara...

Mil gracias por sus comentarios en cada capítulo, deseando siga siendo de sus favoritas, también agradecida por no tomar mis escritos, ni adaptar ni utilizar por ningún medio auditivo o plataforma alternativa, en parte o completa ninguno de estos.

Con sincero aprecio,

Un abrazo a la Distancia

Mayra Exitosa