"Cuéntame, ¿ha pasado algo en estas noches de campamento juntos?" Esperó impaciente que se produjera respuesta al otro lado de la línea telefónica, pero no recibió palabras algunas hasta que no hubieron transcurridos unos importantes minutos, pudo imaginarse en su mente el rostro de Ayako jugando con algunos de sus rizos pensativa.

"No, solo hemos hablado durante las prácticas, no hemos tenido ningún momento los dos solos, y ya quedan solo dos noches, dudo que tengamos tiempo, los chicos pasan mucho tiempo entrenando durante el día y después simplemente caen rendidos agotados por el esfuerzo" Contestó de carrerilla justificándose en cierta medida por no haber intentado acercarse a Ryota, cuando lo cierto era que no lo había hecho porque pensaba que aún no era el momento, cuando acabe el campeonato nacional será "¿Y tú? ¿Cómo va todo por Kanawaga?".

"Pues muy bien, hoy estoy agotada, los chicos y yo estamos ayudando a mi hermano con un entrenamiento especial que el profesor Anzai le ha asignado, no te puedo contar nada al respecto porque Hanamichi se enfadaría, nos ha ordenado que lo mantengamos en secreto, ya lo conoces" Jugó con el cable del teléfono mientras recapacitaba eventos importantes que hubieran sucedido y que mereciera la pena que su amiga conociera "Mayoko centrada en el baile y echando de menos a Mitsui y yo muy bien" Hizo una breve pausa en la que su mente viajó hasta el moreno "Shinichi y yo vamos conociéndonos más, esta noche hemos quedado para ir a ver los fuegos artificiales".

"Vaya, qué romántico ¿cuándo se lo vas a decir a Hanamichi?" Preguntó interesada la manager de Shohoku imaginando en su cabeza cómo sería aquel momento, no pudo evitar soltar una leve carcajada inapreciable desde el otro lado de la línea.

"No sé, creo que todavía es pronto para contarle nada, me da miedo cómo reaccionaría" Pensó que sería mejor contárselo a que lo descubriera por otro lado, los chicos le habían dicho que Hanamichi iba a asistir a los fuegos con Haruko, por lo que era probable encontrárselo allí, sintió unos pasos descender por las escaleras y al inclinarse descubrió a su hermano bajando con el torso desnudo y una toalla alrededor de su cabeza, Hanamichi se estaba preparando para salir, ella ya lo estaba desde hacía rato, por ello había decidido llamar a Ayako para saber cómo se encontraba mientras esperaba a que su acompañante de aquella noche viniera a recogerla "Te dejo Ayako, muchos besos y dales ánimos a los muchachos" Colgó el teléfono tras escuchar la despedida de su amiga algo más efusiva de lo que había sido la suya.

Hanamichi se dirigió a la cocina, probablemente comería algo antes de salir, su gran desempeño durante estos días le estaba exigiendo una mayor ingesta de kilocalorías. Lo vio abrir el frigorífico desde la distancia y pensó que era ahora o nunca. Carraspeó un par de veces antes de entrar en la cocina y tragó saliva, su hermano la miró extrañado, no acostumbraba a verla tan tensa.

"Mellizo" El hecho de que continuara sin decir más palabras estaba alertando a Hanamichi de que algo no iba del todo bien y le dedicó una mirada más preocupado aún.

"¿Estás enferma o algo? ¿Qué te pasa? No me digas que me voy a tener que quedar cuidándote y voy a tener que cancelar mi cita con Haruko" Mientras llegaba a precitadas conclusiones puso una mano en la frente de su hermana buscando indicios de fiebre o malestar, volvió a observarla frunciendo el ceño buscando una explicación a su extraño comportamiento.

"No es eso" Negó al fin y Hanamichi resopló visiblemente aliviado, parecía gritar con su rostro que le dijera la causa, aprovechó que había cesado el contacto visual entre ambos y que el pelirrojo estaba entretenido bebiendo agua para volver a hablar "Estoy conociendo a alguien" El contenido líquido se escapó de la boca de Hanamichi fruto de la sorpresa que se secó con el brazo las gotas que se habían escurrido por su boca.

"¿Cómo? Tu eres muy chica aún para esas cosas, olvídate" Gina lo miró enarcando una ceja.

"¿En serio me vas a venir con eso Señor enamorado de Haruko? Además, ni que fuera la primera vez" Dijo en alusión a Sendoh, el rostro de su hermano se pobló de un tono rojizo.

"No tiene nada que ver una cosa con la otra, no es que no, no te lo permito, en aquella época padre te autorizó pero en esta mando yo y te digo que no" Gina rio irónicamente al escuchar aquello, aunque realmente no le hacía ninguna gracia.

"Perdona señor machista, pero yo soy ya una mujer hecha y derecha y me mando sola, no tienes poder sobre mí, yo decido si quiero salir con alguien o no" Valoró el continuar discutiendo con ella al respecto, sabía lo cabezota que era su hermana y que posiblemente su negativa a que tuviera una relación solo conseguiría el efecto de que le entrasen más ganas aún de estar con alguien, decidió abandonar esa postura, ya que si quería conocer más al respecto aquello no le favorecería.

"Entonces, ¿quién es?" Preguntó interesado, había duda en el rostro de su hermana, e incluso podía leer miedo a su reacción, lo cual solo podía indicar que él conocía al susodicho, un miedo horrible se apoderó de él "¿No te habrás atrevido a salir con el zorro dormilón no?" El silencio de Gina fue entendido como positivo por parte de su hermano que cayó de rodillas en el suelo con las manos en la cabeza "¿Cómo has podido hacerme esto? ¡Tú! ¡Mi propia sangre me traiciona con mi peor enemigo! ¡Tengo al enemigo bajo mi techo! ¿Cómo no pude darme cuenta antes!" La rubia no pudo evitar pensar mientras oía los lamentos de su hermano que cuando le contara quien era realmente esa persona no parecería tan malo al menos Hanamichi estuviera aliviado de que no fuera Rukawa.

"No es Rukawa la persona con la que estoy saliendo" Hanamichi elevó su mirada hacia arriba buscando el rostro de su hermana y se levantó del suelo progresivamente mientras secaba sus lágrimas con sus antebrazos, Gina cerró los ojos para evitar presenciar la reacción de su hermano "Es Shinichi Maki, el capitán de Kainan" Abrió primero el ojo izquierdo con temor y presenció como su hermano había retrocedido andando hacia atrás hasta que había chocado con el mueble de la cocina y mientras lo hacía elevaba una mano señalándola.

"¿Con el viejo cabeza de carbón?" Preguntó deseando que su hermana lo negase "Pero eso no puede ser, si te dobla la edad, ¡estás bromeando!" Gina forzó una sonrisa mientras negaba con su cabeza, era un exagerado, únicamente tenían dos años de diferencia de edad.

"Llevamos saliendo juntos dos semanas, te lo iba a decir, pero no sabía como te lo ibas a tomar".

"No, esto no puede estar pasando" Negó Hanamichi acompañando a su voz la negación con su rostro.

El timbre de la casa sonó alertando a ambos que se miraron extrañados pensando en quien podría estar al otro lado de la puerta. Hanamichi miró a su hermana interrogándola con la mirada sobre si esperaba visita, al descubrir la duda en su rostro supo que seguramente la persona objeto de la discusión se encontraba allí, intentando acceder al hogar de ambos. Cuando Gina leyó el pensamiento de su hermano empezó a correr dirección a la puerta para poder llegar antes que este, pero él también empezó a correr y logró alcanzarla justo en el momento en el que ella giró el pomo de la puerta haciendo aparecer al capitán de Kainan que parpadeó un par de veces observando la situación.

"¡Tú!" Exclamó Hanamichi mientras lo apuntaba con un dedo acusador "¿Cómo te atreves viejo abusador? Me las vas a pagar" Gritaba mientras intentaba llegar hasta el moreno, que se encontraba protegido por Gina justo detrás de ella.

"Hanamichi eres un idiota y un egoísta, yo nunca te digo nada sobre las muchachas en las que te fijas, ¿por qué tu tienes que torturarme a mí?" Preguntó exhausta de retener al pelirrojo que pareció relajarse al escuchar aquella pregunta, ¿realmente la estaba torturando? Gina era su única hermana, no quería aquello para ella, lo único que quería en esta vida era que fuera feliz.

"Pero melliza por qué no te fijas en otra persona" Dijo adoptando un tono conciliador e ignorando por completo la presencia del moreno que continuaba al resguardo de la furia del moreno tras la espalda de la rubia, Hanamichi cogió entre sus manos las de su hermana "No sé alguien más joven por ejemplo o alguien que no sea contrincante de tu talentoso hermano" El moreno suspiró y apartó a Gina para ponerse frente al pelirrojo.

"Sakuragui, te guste o no, estoy enamorado de tu hermana, mis sentimientos hacia ella son sinceros, me gustaría que los aceptaras porque sé lo importante que es tu opinión para Gina y no hay nada que quiera menos en este mundo que verla triste, pero si no los aceptas, debes saber que mi posición no cambiará, porque yo estoy dispuesto a luchar por ella" El pelirrojo se irguió tras escuchar aquellas profundas palabras y el rostro de Gina se ruborizó, ¿había reconocido Shinichi en voz alta que estaba enamorado de ella?

"Muy bien, por fin estamos hablando en serio" Del rostro del pelirrojo había desaparecido cualquier rastro de burla mientras observaba la mano que el moreno le tendía, miró a su hermana y sin quitar la vista de ella chocó la mano de Maki y se retiró a su cuarto a cambiarse sin mediar ninguna palabra más entre ellos.

Shinichi miró interrogante a Gina, no sabía como interpretar aquella actuación, si era algo positivo o no, la rubia se encogió de hombros.

"Hoy también va a ir a los fuegos artificiales, quizás lo mejor sea que nos quedemos en casa" Dijo acercándose a Maki y observando por primera vez la ropa que llevaba puesta, portaba una camisa blanca que resaltaba sus rasgos, se veía extremadamente guapo.

"Ni creas que te voy a dejar aquí sola con él" Sentenció Hanamichi mientras bajaba las escaleras, Gina enarcó unas cejas, menos mal que el pelirrojo no era consciente de cuantas veces había dormido ya en compañía del moreno, Shinichi elevó sus manos en señal de inocencia y alejándose un poco de Gina, no quería desatar la furia del pelirrojo que se posicionó entre la pareja aumentando la distancia que los separaba "Fuegos artificiales con gente sí, casa abandonada y oscura los dos solos no" La explicación era breve, concisa y clara, la pareja asintió obediente "Vamos" Dijo mientras los instaba a comenzar a caminar ocupando él un lugar central entre ambos.

Cuando llegaron al lugar donde comenzaban las luces, espectáculos y puestos Hanamichi divisó en la distancia a Haruko, tras maldecirse mentalmente por haberla hecho esperar se dirigió hasta donde ella estaba, no sin antes advertir al moreno sobre las consecuencias que se derivarían si trataba de una forma incorrecta o si se excedía con su hermana, ambos volvieron a asentir obedientemente como había hecho cuando estaban en la casa.

En cuanto su hermano se hubo alejado ambos suspiraron sonoramente dejando escapar el aire que habían estado conteniendo con motivo de la situación estresante que acababan de presenciar.

"Lo esperaba peor" Fruto de su relación en la cancha había comenzado a comprender como funcionaba la mente del pelirrojo y la forma de actuar del mismo, Gina emitió una mueca de excusa por el comportamiento de su hermano "No te preocupes, podremos lidiar con ello".

"¿Es cierto lo que has dicho en la casa?" Preguntó la rubia interesada haciendo referencia al momento en el que el moreno había afirmado estar enamorado de ella.

"No sé de lo que me hablas" Contestó este encogiéndose de hombros.

"Lo que tu digas, payaso" Comenzó a reír al ver la mueca que había ocasionado en el siempre seguro de sí mismo rostro del moreno "Vamos a buscar un sitio donde podamos disfrutar bien de los fuegos" Sentenció antes de comenzar a caminar cogiendo de la mano a su acompañante que se sorprendió de tal acto y apretó fuertemente la mano de la rubia gritándole con su gesto que no lo abandonase nunca.

El resto de la noche trascurrió pacíficamente, tras dar un paseo ambos en solitario, se unieron al resto del grupo conformado por Hanamichi, los amigos de ambos hermanos y Haruko y sus amigas. El grupo le contó el incidente que habían tenido minutos previos con unos sujetos abusadores y cómo este había sido resuelto sin problema alguno por los cuatro fantásticos, y tanto el moreno como la rubia rieron con las apreciaciones que realizaban de la pelea y los detalles de la misma que señalaban Noma, Okusu y Takamiya. Yohei con su rostro amable se mantenía más callado de lo habitual analizando la situación y bajo la atenta mirada de Fujii.

"Oye ¿y si apostamos sobre qué tan lejos llegará Shohoku en el campeonato nacional? Preguntó Takamiya motivado por haber aportado una idea que él consideraba excelente, Hanamichi comenzó a gruñir en señal de desaprobación.

"Ni caso gordo, es mejor apostar en cuántos partidos expulsarán al Rey de las expulsiones" La idea añadida por Okusu generó que Hanamichi comenzara a correr con gesto amenazante detrás de ambos que intentaban huir de los cabezazos del pelirrojo.

"Muchachos van a espantar a la visita" Observó Noma, Shinichi pareció preguntar con la mirada si aquello era habitual a lo que esta contestó afirmativamente con esa complicidad que ambos tenían gracias a la que en muchas ocasiones ni siquiera necesitaban mencionar palabras algunas para entenderse.

Presentar a Shinichi Maki como su pareja delante de sus seres queridos la llenó de un sentimiento difícil de describir pero que generaba sin duda alguna sensaciones agradables en ella. El moreno conocedor de ello se sintió feliz, a la par que sorprendido ya que no esperaba que pudiera disfrutar de un tan cálido rato con los amigos de Gina, sin duda los prejuicios habían nublado su juicio y le habían impedido darse cuenta de las personas tan maravillosas que tenía Gina a su alrededor.