1 Estrella estaba por dar el golpe de gracia a Kanon y Honoka las cuales se separaron justo cuando estaban por ganar la batalla, todo parecía que estaba perdido.

Sin embargo…

- Aun poseo el poder de las Scales y con eso es suficiente para ganarles, ¡morirán! – el cosmos de 1 Estrella comenzó a crear otra bola de energía y la lanzaría hacia todas ellas que no podían hacer nada, no obstante…

- ¡Miren eso! – un tridente llegó al campo de batalla lo que llamó la atención, incluso del dragón.

- ¿Un tridente? ¿Qué hace eso aquí? – una respuesta se le vino a la mente – ¿Poseidón?

- ¡Hikari-chan! – el cuerpo de Hikari estaba iluminado y sus ojos también, no solo eso, el arma del dios de los mares se estaba brillando y no solo eso, la armadura de Poseidón fue al pequeño cuerpo de la peli azul envolviéndolo.

- ¿Pose-chan?

- Maldición… esto se pone feo – susurró 1 Estrella. La peli azul pequeña estaba elevando más su cosmos por lo que cuando estaba por atacar el dragón, este sabía que no sería nada fácil.

- El cosmos de Pose-chan se está elevando más y más – susurró Ai.

- Esto se ha puesto muy duro, si de por sí Honoka-san y Kanon-san fueron vencidas por su energía, siento que si Hikari-chan batalla con todo podríamos ganar – Ren dijo eso.

La Kamui o Armadura de Poseidón le daba más energía a la pequeña Sonoda por lo que esta tomó su tridente apuntando hacia 1 Estrella quien no se inmutó.

- No creas que solo porque el dios de los mares ha reencarnado en un bebé me voy a empequeñecer, ¡voy a matarte a ti! – exclamó el dragón por lo que cuando estaba por atacar a la peli azul, pero el tridente de esta evitó que el tipo le diera, cosa que fue muy llamativo para todos – no puede ser, el cosmos de esa bebé sigue aumentando y no puedo acercarme a ella.

- Hikari-chan – Honoka miró a su sobrina, no solo eso, sino que esta comenzó a acercarse a donde estaba la peli jengibre.

- Tía… Honoka – la pequeña peli azul se le notaba bastante preocupada por la oji azul quien estaba muy herida, eso hizo que la Sonoda menor comenzara a llorar por ver a su tía de ese modo, las lágrimas de Hikari cayeron sobre el cuerpo de la líder de μ's y esto causó un milagro ya que la Scale de Honoka sufrió una transformación.

La bestia Hipocampo era conocida porque era la que llevaba el carruaje del dios de los mares surcando los océanos con fiereza, por lo que, para Poseidón, esta bestia era muy importante, lo que representaba el vínculo que poseían Hikari y Honoka.

Ante todos, la Scale sufrió una transformación muy grande haciéndose más imponente, con alas que salieron detrás de ella de color naranja y dorado, pero estas parecían más aletas que alas normales, las protecciones de las piernas y brazos se hizo más evidente su grandeza y el cosmos que desprendía era fenomenal.

- ¿H-Honoka-san?

- Maldición, ya cuando parecía que esto estaba ganado y resulta que por Poseidón ha despertado una armadura divina.

- Tía Honoka – la peli jengibre tomó en brazos a su sobrina quien lucía más feliz, aunque para ella la pequeña Hikari se notaba bastante linda vistiendo su armadura de divinidad.

- Realmente creo que tenemos oportunidad de ganar esto – susurró Kyoko quien estaba siendo ayudada por Sayaka a ponerse de pie.

- Pero sería más fácil si tuviéramos nuestras armaduras – susurró Homura siendo ayudada por su novia peli rosa.

- ¿Cómo le haremos? Ese malnacido tiene las Scales dentro de si – la Butai Shoujo Hikari decía eso siendo ayudada por Karen.

- Hikari-chan, por favor dinos que hacer – Futaba fue la que siguió que estaba siendo atendida por Kaoruko.

- Honoka, gana esto por favor – susurró Tsubasa junto con sus compañeras de A-RISE, la musa peli jengibre dejó a su sobrina en el suelo y caminó directo hacia 1 Estrella.

- Has causado mucho daño a todo el mundo… ¡es imperdonable! – exclamó Honoka quien se puso molesta por todo lo que pasó, sin perder tiempo, fue directa hacia el dragón quien detuvo algo los avances de la Marina, pero esta seguía empeñada en acabar con el dragón de una vez por todas.

- Ni creas que con ese poder que has adquirido de Poseidón acabarás conmigo, ni siquiera estando fusionada con esa otra idiota pudieron vencerme.

- No tengo el poder cualquiera de Poseidón, son las lágrimas de Hikari-chan que depositó en mi porque estaba triste de verme derrotada, aunque mi cuerpo esté destrozado y Hikari-chan quiera que pelee me levantaré una y otra vez y gracias a eso tengo este poder y no lo desperdiciaré – con eso, Honoka fue hacia 1 Estrella y ambos comenzaron a intercambiar golpes tras otro, esto lo convertía en una especie de danza mortal.

- Hikari-chan – las demás Generales miraron como la pequeña peli azul iba hacia ellas mirando cómo estaban y se le notaba muy triste. Homura, Tsubasa, Kyoko, Futaba y Hikari fueron reunidas por la peli azul.

- Prima, ¿Qué pasa? – preguntó la peli negra de ojos azules y esta le limpió las lágrimas a la pequeña, no solo eso, sino que al hacer eso, las heridas de las chicas parecían querer sanarse un poco, no del todo, pero estaban retomando algo de fuerza ya que el cosmos de Hikari hizo que recuperaran energía.

- Su cosmos… nos ha curado.

- ¡1 Estrella! – Honoka fue a toda velocidad hasta el dragón y esta le dio un fuerte golpe en la espalda haciendo que este se estremeciera duro.

- Maldita perra, ¿cómo es que me estás hiriendo de ese modo? – exclamó el dragón, aunque la cosa no acabó ahí ya que un arma voló hacia donde estaba y era justamente el tridente dorado – ¡¿Qué demonios?! ¡¿Me atacaste Poseidón?!

- Deja… a… tía Honoka – susurró la peli azul pequeña quien lanzó el tridente, hiriendo al dragón en la espalda, Honoka entendió la señal de su sobrina.

- Ya veo… que lista eres Hikari-chan – la peli jengibre atacó al dragón que recién se levantaba del ataque que le dio la diosa de los mares, un puñetazo bien dado en el rostro fue algo que lo dejó atontado, pero este solo recibió más puñetazos de parte de la oji azul.

- Honoka está peleando ella sola usando una Scale Divina… todo con la confianza que le dio Hikari-chan – Tsubasa tomó a la pequeña bebé quien estaba atenta al enfrentamiento.

- ¡Véncelo Honoka-chan!

- ¡Dale con todo Honoka-san!

- ¡Kousaka-san, derrótalo a como dé lugar!

- H-Honoka-san está batallando duro… si tan solo pudiera levantarme de nuevo como lo he hecho – susurró Kanon por lo bajo, sin embargo, un milagro sucedió de nuevo con ella y todo el mundo lo supo.

- ¿E-Este cosmos de dónde viene?

- Kanon-chan – la pelea entre Honoka y el dragón se detuvo por un momento para mirar cómo es que la peli naranja se levantaba a duras penas, pero no solo ella, las demás compañeras de grupo de Kanon estaban atentas a lo que fuera a hacer ella.

- ¿Kanon-chan?

- ¿Qué harás?

- ¡No te dejaré vivir, miserable! – 1 Estrella aprovechó esta distracción y fue a atacar a Kanon, pero cuando estaba por darle un duro golpe, esta esquivó el puño del dragón – ¿Qué?

- No me pongas las manos encima – susurró la joven Shibuya dándole un fuerte puñetazo en el estómago hacia atrás, el cosmos de Kanon siguió subiendo hasta que un aura blanca la envolvió, no solo eso, sino que llevó su poder a un nivel inimaginable causando que la armadura que poseía de Pegaso volviera a su estado mítico.

Un enorme Pegaso apareció detrás de ella y cuando todo el cosmos estalló, la armadura de nuevo estaba con imponentes alas, sus extremidades cubiertas y el torso con armamento blanco con detalles dorados.

- E-Eso es…

- La Armadura Divina de Pegaso ha regresado – susurró Chisato quien se limpió las lágrimas de ver a su querida amiga en ese estado, toda una guerrera lista para el combate.

- No volverás a dañar a nadie más… desde ahora yo pondré fin a tu reino de maldad – susurró la peli naranja quien se lanzó hacia el dragón quien tuvo que hacerse a un lado, no obstante, una lluvia de golpes lo azotaron por todas partes.

- ¿De dónde viene todo este poder que posee? ¡Es imposible! Se supone que ya tendrían que estar muertas – reclamó el tipo, cuando menos acordó, Kanon apareció detrás de él – ¡¿Cuándo?!

- ¡Meteoros de Pegaso! – los golpes a velocidad luz fueron hacia el dragón, más específico en su espalda que le dieron más daño, de por sí había sido dañado por el ataque del tridente de Hikari.

- ¡Vientos Huracanados! – exclamó Honoka apareciendo de la nada y dando con su ataque al dragón, de nuevo fue en la espalda.

El ataque entre los tres era espectacular, sin embargo, el poder divino de ambas era superior a 1 Estrella quien parecía que las cosas no se estaban poniendo de su lado, es más, llegó un momento en el que tanto Kanon como Honoka le dieron un poderoso en la espalda.

Los golpes a velocidad luz se mostraba en como el sonido se rompía y causaban ondas de rompimiento, no solo eso, llegó a un momento en el que el dragón se hartó.

- ¡Ahora si las mataré malnacidas! – 1 Estrella se elevó al cielo y con toda su energía comenzó a crear una enorme bola de energía maligna, el poder era tanto que el color del cielo cambió a un rojo sangre y este usaba todo el poder de las esferas y las Scales – ¡Mueran! ¡GRAN BOLA MALIGNA!

- Demonios, ¿ahora atacarás con todo?

- Acabemos con esto de una vez – susurró Honoka quien elevó su energía cósmica aún más, el poder que tenía ahora era descomunal.

- Te ayudaré Honoka-san – Kanon se unió, pero algo más pasó, las demás Marinas se unieron.

- Atacaremos en nombre de Hikari-chan – el cosmos de Hikari respondió al llamado de sus Generales por lo cual ocurrió un nuevo milagro.

- M-Mi poder está… ¡¿Qué ocurre con mi poder?! – las Scales se desprendieron de 1 Estrella y estas regresaron a sus portadoras originales envolviéndolas – ¡¿Cómo pasó eso?!

- Todos los golpes que te dimos en la espalda fueron con un propósito 1 Estrella, las Scales estaban ahí y sencillamente hicimos que esa parte se debilitara, ahora estás despojado del poder de ellas, así que espero que sepas lo que te espera, en nombre de Poseidón, no, de Hikari-chan morirás aquí – el poder de las 6 Scales se unieron nuevamente y ahora, era turno de las guerreras de acabar con todo esto.

- D-Demonios… que tipas más aguerridas.

- ¡Chicas! – Honoka tomó a su sobrina y a la vez se dirigió hacia las demás Generales que ya tenían sus armaduras de vuelta – acabemos con esto de una vez, si vamos a defender a Hikari-chan en el futuro, acabemos a este tipo de una vez, Kanon-chan, te agradezco la ayuda, pero por favor… déjanos a nosotras el resto.

- Honoka-san – la peli naranja asintió y se hizo a un lado, ya con eso, las Generales unieron sus cosmos mirando al dragón quien no se puso con miedo y este lanzó la bola de energía negativa hacia ellas, pero esta no poseía la energía que pensaba, todas las 6 unieron las energías que poseían.

- ¡VAMOS POR HIKARI-CHAN! – el poder de las 6 Generales dirigidas por Honoka fue con todo hacia el dragón el cual estaba luchando contra eso, pero sus fuerzas se iban perdiendo.

- N-No puedo perder ante ellas… ¡no perderé!

- ¡Vamos Hikari-chan! – Honoka voló por los aires hacia el dragón llevando consigo a la peli azul y ella empuñando su tridente dieron un golpe directo a 1 Estrella, en especial en el pecho destruyendo las esferas que poseía.

- N-No… no puedo perder así… ¡NO ME LO CREO! – el cuerpo del dragón se destruyó al mismo tiempo que las esferas salían volando por los aires destruyéndose en el aire.

- Tía Honoka.

- Sí, lo logramos Hikari-chan – sonrió la peli jengibre bajando y quitándose el estado divino de su Scale, por lo que ya las cosas se calmaron.

- Lo hemos logrado – Kanon perdió el estado divino también.

- Una larga batalla en donde casi morimos ha llegado a su fin.

- Creo que la paz ahora será una opción – las Generales se reunieron alrededor de Hikari quien lucia muy feliz por tener a todas sus tías alrededor de ella.

Luego de muchos encuentros duros y peligrosos, el enemigo más fuerte fue vencido por lo que ahora la paz era una opción para todo el mundo.

.

.

Continuará…