Hola a todos por la demora de este capítulo fue atrasado por mis compañeros en las Vegas que apostaron todo. Por lo que la compañía aseguradora fue a remediar la situación, y también lo perdieron todo.

Me gustaría disculparme por todo el tiempo que tuvieron que esperar, y tratar de sacar capítulos más seguidos. Quizás no... acepten el caos.

Fuera de broma, mil disculpas por el atraso de este capítulo. Pero a veces en la vida, hay cosas que te impiden escribir. Sé que fue mucho tiempo el que tuvieron que esperar y hacerles perder la esperanza de que no iba a salir el próximo capitulo. Pero todo ocurre por un motivo, pero tuve la oportunidad de escribir y pude al fin de subir un nuevo capítulo.

Bueno, para no quitarles mucho tiempo. Aquí les dejó un capitulo de 16,5k palabras. Espero que lo disfruten.


Bueno, cómo sabrán me drogaron hace un tiempo atrás. No fue la gran cosa. Hice otras cosas: Un montón de locuras, resolver un crimen y gané un concurso para mi hermano, Lars. Lo cual él me debe un favor, lo que significa que puedo pedirle a mi hermanito cualquier cosa. Imagínense las posibilidades. Tengo el poder de cumplir lo que cualquier niña de once años siempre ha deseado. Puedo pedirle que me ayude a subir el Monte Everest; Montar en bicicleta desnudo; cambiar legalmente mi nombre a Susan. Las posibilidades son infinitas. Pero preferí hacer lo correcto, y pedir algo que si me gustaría que fue...

—¿Quieres que te ayude a drogarte? — Preguntó Lars por la loca petición que pidió Linka.

—Así es— dijo Linka a su hermano.

—Debes estar loca. ¿Por qué te ayudaría en hacer eso?

—Simple. Me debes un favor por ganar el concurso, además...— Linka le mostró un libro, pero no cualquier libro. Era el último libro de la saga de Vampiros de la Melancolía, la serie de libros favorito de Lars. Ella obtuvo limpiamente ese libro ganando un concurso de Trivia para su hermano. Pero, ahora, lo está utilizando para chantajearlo — No obtendrás este libro, y se lo puedo dar a otra persona.

Lars estaba en una situación difícil. Por una parte, su hermana le daría el libro que tanto deseaba. Pero, por otra parte, estaría ayudando a su hermana a hacer algo muy ilegal. Por suerte, Lars sabía que era una decisión y no un ultimátum, por lo que tenía otra forma de obtener el libro—Sería molesto no tener el libro, pero podré esperar para cuando salga.

—Así que no te molestaría que se lo diera a Loni.

—Suspiro, no te atreverías. — Se preocupó Lars. Ya que Loni es conocido entre todos sus hermanos de arruinar las sorpresas o entregar spoilers de todo. Estaba en un conflicto, y de verdad pensaba en aceptar el trato de Linka. Pero no tenía muchas opciones, por lo que solo le quedó decir una cosa. Y era algo que le llegaba a disgustar en el centro de su alma— Lo haré, pero no quiero nada ilegal.

—¿Algo ilegal? Estás bromeando, ¿crees que haría algo ilegal?¿crees que sería capaz de arriesgarme a la policía, en especial a la capitana del Departamento de Policías?

—Ehh…

—Estoy lo suficientemente drogada para enfrentarme a cada uno de mis hermanos, ¿pero al departamento de Policías de Royal Wood? Noooo, gracias.

—De… acuerdo. Pero ¿por qué quieres drogarte? Solo te hace hacer cosas estúpidas.

—No recuerdo haber hecho alguna estupidez.— respondió con certeza Linka.

Lo cual, Lars lo encontró tonto, ya que la esencia de Linka drogada era una estupidez—¿Y cuándo jugaste como una idiota al ajedrez? — preguntó cuando se drogó la primera vez, hace varios meses

—No lo recuerdo.

—¿Cuándo entraste un concurso y decías cosas incoherentes?

—Eso fue loco, casi lo había olvidado.

—¿Trataste de comer a un murciélago?

—¿Acaso fue algo grave?

—Era Colmillito, mi mascota.

—Bueno, eso fue tu culpa, ¿cómo iba a saber que era tu mascota, y no de los murciélagos que se pueden comer? Además, cuando ves un murciélago, tu primer instinto es tratar de comerlo.

A Lars le empezó a doler un poco la cabeza ya que era difícil razonar con su hermana en su estado actual —Bien, veo que no voy a ninguna parte. Pero enserio, ¿por qué quieres drogarte?

—Es simple, grandes cosas en la historia se han podido hacer gracias al poder de las drogas, por ejemplo: David jamás podría haber matado a Goliat sin las drogas.

—Estoy bastante seguro de que no había drogas en esa historia.

—¿Lanzar una piedra a un gigante? Uno tendría que estar muy drogado para pensar que eso iba a funcionar, y funcionó.— explicó Linka —Además ¿Acaso no me viste con las drogas? Gané un concurso de trivia.

—Ganaste por suerte. A lo más, esas drogas te hicieron una mediocre.

—Para tu información, me hicieron una ganadora mediocre normal ejemplar. Y fue por eso por lo que gané este libro. Así que respóndeme: ¿Me ayudaras, o le doy este libro a Loni?

A Lars no le gustó la situación, pero si quería tener ese libro. Pero el costo de ayudar a su hermana a drogarse más definitivamente era una locura. — No estoy de todo convencido.

—Bien, ¿qué te parece esto? Si me ayudas a drogarme más, regresaré a la van. Tendrás tu libro.

Lars no podía creer lo que escuchado. Ese comentario ayudó un poco a convencer a Lars. —¿Lo prometes?

—Sí. Y si eso no te convence, también te puedo ofrecer mi ropa interior.

—Yo no quiero eso.

—¿No quieres mi ropa interior? Pff, afeminado.

Lars decidió ignorar lo último. — Bien, entonces. Si te ayudo a drogarte, te iras con nosotros y me darás el libro.

—Sí, lo prometo. Si quieres, puedo jurarlo en la biblia. Podríamos ir a buscar uno en la librería. Estoy seguro de que debe estar en la sección de educación sexual.

—No será necesario. Solo quiero terminar con esto.

—Pero la única condición es que seamos solo tú y yo en esto.— respondió Linka.

—¿Y eso por qué?

—Ninguno de mis hermanos me ayudaría. Pero tú sí lo harás ya que tengo este libro. Hablando de eso, te pediré tu celular para que no contactes con nadie. — Lars no hizo ninguna emoción y pasó el teléfono a su hermana.

—Excelente, si esas son las únicas condiciones, me gustaría hacer esto rápido. — dijo el pequeño gótico— Qué tal si vamos a esa droguería. Estoy seguro de que le vende drogas a cualquiera si le preguntamos amablemente.

—¡Claro que no! — reclamó Linka a esa idea de Lars— No conseguiré drogas en una droguería. Esos canallas son todo lo que está mal en el mundo de las drogas. Tienen una loca política de vestimenta. Aparentemente, para comprar debo tener mis pantalones puestos. Como si los pantalones ayudarán a comprar. Montón de ineptos —Lars no sabía que, si eran las drogas que estaban hablando, o si era el instinto de su hermana de desnudarse. De todas formas, si no iban a una droguería a conseguir drogas, no tenía la menor idea a donde iba todo el asunto.

—¿Entonces cómo quieres drogarte?

—Bueno, traté conseguir drogas en una máquina expendedora que hay por todo el centro comercial. Pero, por alguna extraña razón, no tienen drogas. Entonces, decidí ir por otro camino, se lo preguntaremos a un experto— respondió Linka… Se quedó en silencio varios segundos, y se dirigió a Lars. —Bien, ahora dime, Lars, ¿cómo me drogó?

Lars estaba confuso, aunque con el día que estaba viviendo, no era raro que hubiera momentos de confusión— ¿Acaso no lo sabes?

—Perdóname, estuve inconsciente mientras me drogaron. Tú sabes todo lo que me hicieron para estar así, ¿verdad? —Lars solo negó la cabeza —Interesante. Bien, creo que debería irme por otro enfoque. Dime, ¿cómo la gente se droga normalmente?

—No lo sé— dijo Lars, ya que era verdad que no sabía cómo la gente se drogaba en realidad.

—¿Cómo que no sabes?

—Linka, tengo ocho años— respondió su hermano a la observación más grande. Que Lars es un niño.

—Pero lees novelas de vampiros. Seguro que tú sabes sobre las drogas.

Lars simplemente no supo cómo responder a eso último que dijo su hermana— Linka, ¿Que piensas que hay exactamente en mis novelas?

—¿Yo que sé? Vampiros, romance, osos panda, drogas y pingüinos. Ya sabes, cosas oscuras y misteriosos.

—¿Qué tiene de oscuro los pingüinos y los osos panda? — preguntó Lars ya que le dio curiosidad a ese comentario de su hermana.

—Todo el mundo sabe que las cosas que tienen blanco y negro son malas. Escuchaste el incidente de los perros dálmatas que escaparon. Escuché que una desquiciada con cabello blanco y negro lo hizo todo. — dijo Linka, saltando el detalle que fue ella haciéndose pasar por Cruella de Vil para asustar a unos perros y dejar un momento de caos para escapar— Genial, estoy con el único niño gótico de ocho años que no sabe de drogas. Ahora tengo que pensar en otra forma de drogarme.

—¿Ese era tu plan? — preguntó Lars— Preguntarme a mí cómo se droga la gente.

—¿Plan? ¿Acaso parezco a alguien que hace planes? — dijo Linka dando vuelta su cara, mirando directamente su cara como una desquiciada que había perdido la cordura.

—Ehhh— Lars no sabía cómo responder a eso. Ya que ella misma se llama "la chica con el plan".

—Exacto. Nadie sabe lo que pasa en mi cabeza. Pueden creer que todo esto lo planeé desde un principio. Todos pueden creer que planeo todo, como si fuera un agente de la maldad. Pero la verdad, no tengo un plan. Dejo que el caos y los eventos al azar guíen mi camino.

—¿Dejar que el caos y los eventos al azar guíen tu camino? En serio que esos gases destruyeron tu cerebro, Linka.

—Entonces haremos la siguiente mejor cosa que podemos hacer. Primero entraremos a esta tienda.— apuntó a una tienda que estaba cerrado permanentemente, por lo que podían entrar sin que nadie los observara— Lo segundo, invocaras el espíritu de un drogadicto.

—¿Qué? ¡Claro que no! — se negó rápidamente Lars a la petición de Linka.

—Por qué no. ¿Es sobre lo que dice nuestros padres sobre los drogadictos y te guiaran a las drogas? No te preocupes, eso no es cierto. Son los padres, ellos me drogaron.

—No es eso. Prometí a Mamá que nunca invocaría el espíritu de alguien peligroso, ya sean: dictadores, asesinos, estafadores. ya sabes, criminales. Papá trató de convencerme de no invocar fantasmas, pero ambos sabemos que eso no iba a ocurrir. De todas formas, los drogadictos están fuera de lugar.

—Vaya. Para ser alguien que le gusta la oscuridad, sí que tienes problemas de no querer romper las reglas. De acuerdo, qué tal si invocado el espíritu de un drogadicto que no era tan malo.

—¿A qué te refieres a uno no tan malo? — preguntó Lars, ya que no sabía a dónde iba Linka con esa idea.

—Ya sabes, que la línea entre hacer lo correcto y lo que es ilegal es muy delgada. Como uno de esos ladrones que roban pan para alimentar a su familia. Entonces buscas uno similar, como uno que vendía drogas para comprar un videojuego. O el espíritu que se robó el videojuego ya que se drogó, cuando se supone tenía que vender esas drogas. El punto es que consigas el espíritu de un drogadicto que no sea tan malo, o uno que tenga videojuegos.

—Trataré de buscar uno no malo. Pero no invocaré a ningún ejemplo tuyo.


Más adelante, Lars, se comunicó con un fantasma. Y le dijo de un método para drogarse, y junto con Linka, iban a ir a una tienda en específico.

—¿Crees que sea correcto lo que dijo ese espíritu? — preguntó Lars— No creo que sea una forma de drogarse esa.

—Claro que tiene sentido. Lo único que no tiene sentido es que no se me haya ocurrido antes.

—Explícame, ¿cómo rayos lamer ranas va a ayudarte a drogarte? — cuestionó, Lars cuando iban a la tienda de mascotas, ya que un espíritu les dijo que una forma de drogarse era lamiendo ranas. — Eso no tiene sentido.

—Claro que tiene sentido— explicó Linka— Las ranas saltan bien alto. Y yo quiero drogarme hasta el cielo, por lo que las ranas con los que capturan la esencia del cielo.

—No sé si será verdad, pero dudo mucho que sea así.

—¿Qué más va a ser? ¿Acaso crees que cuando las ranas se asustan secretan un sudor que para los humanos es un alucinógeno? ¡Quitá esa tonta idea de la cabeza, Lars!

—No sé por qué discuto contigo. —Lars miró que estaban en las afueras de la tienda de mascotas— Bien, hemos llegado. Ahora, Linka no puedes entrar allí y lamer sapos. Hay que pensar esto adecuadamente, ¿entendido?... ¿Linka? —Lars se dio cuenta de que Linka no estaba. — Rayos— Lars entró rápidamente en la tienda de mascotas y fue a la sección donde estaban las ranas, pero no había señales de Linka— ¿dónde estará?

Lars salió de la tienda de mascotas, preguntándose dónde estaba Linka, pero al salir, vio por la ventana de otra de las tiendas, y Linka estaba allí. Estaba en una juguetería, y estaba lamiendo ranas de peluches.

Lars entró a la tienda— Linka ¿qué estás haciendo?

—¿Qué parece que estoy haciendo? Estoy drogándome. — y siguió lamiendo los peluches.

—Pero ¿por qué no fuiste a la tienda?

—Porque no tenían ranas, solo tenían sapos. Así que fui por estás ranas de peluche.

—Pero eso no cambia… espera, ¿Por qué discuto de la forma de drogarte? — se dio cuenta que ahora Linka no se estaba drogando, así que podía dejarla tranquilamente que hiciera, lo que estaba haciendo. — Continua, y lame hasta el último de esas ranas.


Después de varios minutos, Linka y Lars fueron expulsados a patadas de esa juguetería.

—Y no vuelan nunca más— dijo furioso el encargado.

—¡Vaya! No puedo creer que nos expulsaran. Fue algo inesperado y repentino. — dijo Linka.

—No diría eso. — comentó Lars— Empezaste a lamer cada rana. Luego abriste el estómago de unos de esos peluches, le sacaste el relleno, lo pusiste en tu cabeza, te llamaste "La Reina de las Ranas", empezaste hacer cosas raras con tu lengua hacía las otras ranas, ya que para ti es "la forma de proteger tus crías de la reina de los lagartos". Después, cuando un niño intentó sacar, lo atacaste, dijiste que si se llevaba algunas de tus crías que lo atacarías con tu lengua de hocico a trasero.

—Y 'pum' nos sacaron repentinamente de la tienda.

Lars simplemente suspiró —Bueno, ya cumplí mi parte del trato te ayudé a drogarte. Ahora, devuélveme mi teléfono y el libro, y volveremos a casa.

—Claro que no. Aún no cumples tu parte del trato

—¿Qué?— se sorprendió Lars.

—Así es, me tenías que ayudarme a drogarme lo más posibles. No pensaste que solo haríamos un método para drogarme, ¿verdad?

—Claro que sí. Solo te iba a ayudar en una cosa ¿Qué tan drogada quieres estar?

—Quiero llegar al punto donde escucho colores brillantes, vea sonidos lindos, y que se me olvide cómo ir al baño.

—¿Colores brillantes, sonidos lindos, olvidar cómo ir al baño? No sé cuál de las tres cosas es peor. Pero mala suerte. Yo dije que te ayudaría, lo hice y quiero que cumpas tu parte.

—No creo que estés en posición de negociar. — dijo Linka sosteniendo el libro que quería Lars.

Lars se dio cuenta, que no podía hacer nada, excepto una sola cosa —Gruñido.


Después de varios minutos, Linka y Lars fueron a otra tienda para seguir con la ridícula misión de Linka. — Aquí estamos en la florería.

—Bien, recuerda Linka. El espíritu dijo que cierta hierba te ayudaría a drogarte. Así que preguntaremos al encargado cuál planta puede ser peligroso para un bebé, y que no sean venenosas, para no levantar sospecha.

—No será necesario. Porque ya sé cuál planta consumiré. — Linka escogió una planta, y le dio una gran mordida.

Lars se perturbó por lo que vio— ¿Por qué Linka? ¿Por qué?

—Porque es una planta muy exótica con mucho jugo. Mira siento mi boca llena de jugo. — Linka abrió su boca y empezó a caer de su boca mucha sangre de ella, ya que ella mordió un cactus. — Sabes, uno pensaría que el jugo se cactus sería refrescante, pero no lo es, sabe a sangre.


Como era de esperar, ambos fueron expulsados de la florería por destruir sus productos y dejar sangre en una florería.

—Sí que nos expulsaron rápidamente, Linka— dijo Lars.

—Ni que lo digas. Nos expulsaron en el mejor momento. Sentía buenas vibraciones de Audrey.

—¿Audrey?

—La planta carnívora de ahí. —Linka apuntó dentro de la tienda, y había una gran planta carnívora allí— Él tenía hambre y pensé que podíamos ir a comer a un lugar lindo.

Un trabajador estaba barriendo por ahí, de repente Audrey atacó a ese trabajador de la florería, lo que perturbó un poco a Lars— Quizás fue una buena idea que nos sacaran rápido de la tienda.


Y así siguieron la rutina Linka y Lars. Él contactando un espíritu, y ella buscando la forma de drogarse con la información que dijo el espíritu.

—Uno de los espíritus dice que los deportistas son drogadictos.

—No me digas más. Iré a buscar la cosa más loca que los deportistas consumen. Bebidas energéticas. — dijo Linka sosteniendo un par de billetes.

—¿De dónde sacaste ese dinero?

—De tu billetera.

—¡Qué! — Lars se dio cuenta que le habían quitado el dinero. Y que tenía unos cupones rosados dentro de su billetera. —¿Qué son estos? ¿Cupones para emporio del helado?

—Sí, te cambié por algunos cupones de helado. ¿Qué? Pensaste que te robaría.

—¿Y de dónde sacaste esos cupones?

—De la billetera de Lexx.

—¡Qué! ¿Cuándo?

—Creo que fue cuando lancé los boletos cuando estaba en el árcade, o quizás cuando dejé unos quintillizos locos lo atacaran. O cuando los dálmatas se lanzaron. El punto es que no lo recuerdo. Por lo que no hice ningún crimen. Bueno, ya vuelvo. Necesito drogarme con una bebida energética.

Lars cayó al piso, todo estresado. — No aguanto más a Linka. Necesito una forma de pedir ayuda a mis hermanos, pero Linka tiene mi teléfono. Necesito encontrar una forma de detenerla, y que sea barato ya que me quitó todo el dinero y me dejó estos cupones para…— en ese momento a Lars se le ocurrió una idea— Suspiro, lo tengo, creo que puedo detener a Linka. Y lo puedo hacer sin ayuda de los demás. Solo tengo que esperar que termine de tomar tu bebida energizante, creo que es imposible que haga una locura con ella— Lars miró donde estaba Linka y…— ¿Pero que rayos estás haciendo?

Linka estaba vertiendo toda la bebida en su cabeza como si estuviera dando una ducha.— Quiero está cosa lo más cerca de mi cerebro posible.

—Eso es perturbador.


Finalmente, cuando Linka terminó su bebida energética, fueron a contactar a un nuevo espíritu. El cual, Lars le mintió, ya que no contactó ningún espíritu. Y lo llevó al siguiente lugar para drogarse.

—¿Estás seguro de que está es una forma de drogarse?— preguntó Linka fuera de una heladería. Ya que Lars se "comunicó" con un espíritu y le dijo que se podía drogar con helado.

—Sí, eso fue lo que dijo el espíritu.— dijo Lars mintiendo, ya que no se comunicó con un espíritu. Solo lo dijo ya que era parte de su plan— Que te puedes drogar con helado, con mucho helado.

Linka estaba sospechando de la situación. Ella toda su vida ha comido helado, y nunca ha tenido una sensación de estar drogada después de comer tanto helado.—¿Y cómo se llamaba ese espíritu?

—Emm… Mendacium Pseudologos— dijo Lars con lo primero que le pasó por la mente.

—¿Qué clase de nombre y apellido es ese?

—Creo que su apellido es griego y su nombre es del latín.

—Bueno, no se puede discutir con alguien con ese nombre. Pero ¿Cómo pagaremos esos helados? Ya te dije que no robaré nada, a no ser que haya sido robado antes. De esa manera, esa cosa no le pertenece a nadie. Eso dice la ley.

—Estoy bastante seguro de que no hay ley como esa. Pero no te preocupes. Yo me encargo del dinero— dijo sosteniendo los cupones que Linka le había pasado.

—Bueno, es hora de comer helado. — Linka entró a la tiendo y se acercó al vendedor— Quiero un helado de chocolate, uno de menta, uno de chocolate con menta.

—De acuerdo— respondió el trabajador— ¿en qué lo quiere?

—Mmm...— Linka pensó— Podría colocarlo todo en mi ropa interior.

—Emm, me… refería si lo quería en un vaso o en un cono. — aclaró el trabajador.

Lars intervino— ella lo quiere en un cono, ya que no recibirá helado si no come en un cono.

—De acuerdo, pero para tu información aún lo quería en mi ropa interior.— Le entregaron el cono que pidió Linka, y ella comenzó a comerlo.

Lars estaba sonriendo ya que logró llevar a Linka a la heladería para ejecutar su plan. Luego, el gótico, se dirigió al espectador— Se preguntarán por qué le he dicho a Linka que con el helado se puede drogar. Bueno, una de las debilidades de Linka es que cuando come mucho tiende a quedarse dormida. Pasa en cada día de acción de gracias, ella come mucho pavo que no alcanza a comer nada para el postre. Después de cada Halloween, después de comer una gran cantidad de dulces. En Pascua cuando recibe muchos huevos de chocolates. Y cada vez que termina de comer un gran desayuno de Papá haya preparado, cuando recién se levanta de la cama, después de haber dormido por más de 10 horas. No importa cuánto haya descansado, si ella come demasiado, se dormirá una vez. Ahora, solo debo esperar que se llene y será fácil llevarla de vuelta.

—Mesero— gritó Linka, después de terminar su helado, lista para pedir otra porción de helado a ese mesero.

Lars le pasó otro cupón al vendedor —Y con la ayuda de todos estos cupones, tendremos un montón de helado para que pueda comer. Eventualmente se quedará dormida. Es solo una cosa de tiempo.


—Mesero.

Lars le pasó otro cupón al vendedor—En cuestión de segundos.


—Mesero.

Lars le pasó otro cupón al mesero —En cualquier segundo.


—Mesero.

—En cualquier segundo— dijo preocupado Lars después de ver que Linka seguía pidiendo helado.


Después de varios minutos, Linka tenía la cara desorientada como si se fuera a dormir en cualquier segundo.

El mesero se acercó a los chicos—Lo siento, no podemos servir más helado.

—¿Qué? Aún tenemos cupones.

—Bueno. Pero nosotros ya no nos queda más helado. Ya usamos casi todo el helado. Incluso de esos helados que nadie les gusta. El helado de pescado, el de ajo, el de espagueti. Lo cual es bueno, es decir, esa niña devoraba el helado como una maniática. Un sujeto que estaba comiendo un pastel entero sin utensilios y sin servilleta preguntó si ella se podía calmar.

—No tendrán alguno atrás, o quizás uno secreto, o alguno oculto, o algo por el estilo— preguntó Lars, desesperado ya que necesitaba hacer dormir a su hermana.

—Bueno… hay un helado, pero por lo general no lo ofrecemos a los niños…

—No me importa— interrumpió, Lars— Solo denle el helado. —dijo Lars, entregando el cupón al trabajador. Lo cual hizo que preparara la copa de helado a Linka.

Mientras tanto, Linka estaba luchando para no quedarse dormida. Pero todo lo que tenía en su estómago no la ayudaba para nada— ¡Ugh! No quiero ver más helado en toda mi vida. — le sirvieron un helado de color marrón. — Uuh, más helado. — y siguió comiendo el helado. Pero cuando dio el primer mordisco, cayó derrotada y se durmió, hasta el punto de que roncaba. Lars lo había conseguido.

Lars simplemente sonrió, y se dio vuelta para monologar— Esto fue genial. No puedo creer que planear cosas funciona. Ahora entiendo por qué Linka planea todo. Quizás debería hacerlo bien seguido. ¡Nah! es cosa de Linka, sería una locura si yo lo hiciera. Ahora lo único que tengo que hacer es quitarle mi teléfono a Linka y llamar a mis hermanos, y podremos salir de aquí... — Lars se dio vuelta para ver donde estaba Linka, y no estaba ella— Pero ¿dónde está?

—¡Hola, Lars!

—¡AAHHH!— gritó Lars al asustarse con la aparición repentina de Linka por la espalda, algo que solo Lars está acostumbrado a dar, pero no recibir.— Linka, ¿cómo llegaste ahí? ¿cómo es que estás despierta?

—No lo sé. Unos segundos atrás sentía que me estaba quedando dormida, y ahora, me siento con mucha energía, tanta, que siento que puedo cumplir los sueños, de no solo de una niña de once años, sino, también las de un niño de once años: Tocar el trasero de un toro; meter 30 uvas en la boca y 2 en la nariz; Azotar a un pato; Cambiar legalmente mi nombre a Susan. Ya sabes cosas normales de niños de once.

—Linka, estoy bastante seguro de que esos no son los sueños de nadie. Y, dime, ¿por qué estás tan agitada? — preguntó, Lars. Si bien, Linka estaba bastante despierta de alguna manera. Estaba llena de energía, ya que no se quedaba quieta.

—No lo sé— Y a Linka se le ocurrió una posible razón— Ya sé lo que está ocurriendo. Los gases, lamer sapos, el jugo de cactus, la energizante y el helado han desbloqueado el verdadero potencial de mi mente. Y es demasiado poder que mi cuerpo no lo puede controlar y, ahora, estoy perdiendo todo el control

—No creo que sea eso. — Lars se dirigió al vendedor, quizás él sepa lo que pasó— ¿Qué le sucedió?

—Nada— dijo el vendedor— solo le di el helado sabor café.

Eso impactó directamente a Lars—¿Qué hiciste qué?

—Tú me dijiste que le diera el helado. Normalmente, no le servimos a los niños, a que no muchos niños les gusta ese sabor. Pero como lo pediste…

—¡Oh, rayos! — Lars sabía que una de las peores cosas para darle a alguien que quería hacerle dormir era el café, y con eso todo el plan de Lars se fue a la basura. Lars se dirigió a su hermana— Linka estás así por el café.

—Así que es por el helado de café.— decía Linka sin poder mantenerse quieta— Tiene sentido, es 50% helado y otro 50% de Cofe, Cofu, Cafi, — tartamudeaba Linka ya que no podía decir la palabra correcta— Coffy, cony, digamos que es 50% de cocaína.

—Se pronuncia cafeína, ya sabes, lo que se encuentra en el café. — dijo el vendedor corrigiéndola.

Linka se mantuvo quieta al escuchar ese comentario. Y se dirigió al vendedor—Me estás diciendo que esta cocalfaína.

—Cafeína— corrigió el vendedor.

—Esta Cucufeina es lo que hay en el café. Y yo como tonta aquí comiendo helado, cuando debería estar drogándome con café.

Lars se preocupó por lo que dijo su hermana—Linka, no. El café no es una droga.

—Técnicamente, el café sí es una droga.— respondió el vendedor.

—Eso no ayuda.— dijo Lars al vendedor— Mira, Linka— y Lars se dio cuenta que Linka ya no estaba.

—Creo que se te escapó.— dijo el vendedor.

—Ya me di cuenta.— Lars salió corriendo en busca de su hermana, pero no sabía dónde estaba, pero sabía a donde iba ir —Bien, tengo que buscarla en una cafetería. No debería ser difícil cuantas cafeterías puede haber dentro de un centro comercial. —Miró en un mapa del centro comercial, donde había siete cafeterías en varios lugares distintos— Rayos.


Después de varios minutos, Linka se encontró en una de las siete cafeterías que tenía el centro comercial. E iba ordenar algo simple que muchas personas ordenan en las cafeterías.

—Quiero Moca de Caramelo Latte chino, sin el chino, con leche de soya, pero sin crema, agréguele un poco sal, con azúcar de otoño, con vainilla de primavera, con miel de otoño y caramelo de verano. Colócalo en vaso grande, pero coloquen la misma cantidad a un vaso largo, de esa manera tendrá espacio extra para no salpicar el café.

—De acuerdo.— se dirigió a otro trabajador— tráiganme un número siete.— dijo el vendedor ya que aparentemente, no era sorpresa esa loca demanda de Linka— Serían cuatro dólares.

—Tome.— dijo Linka y le entregó algo al vendedor

—Esto son cupones para unos helados— dijo el vendedor con unos cupones.

—Sí, que valen diez dólares. Usted saldría ganando.— dijo Linka, ya que no tenía dinero para cosas.

—Lo siento, pero hasta que no me traiga dinero de verdad, no le podré dar café.

—Rayos— salió Linka de la tienda— ¿Cómo conseguiré ese café ahora?

—Conque aquí estabas.— dijo una voz, y Linka volteó.


Hace meses atrás.

Lane estaba conversando con un grupo de amigos para crear nuevos personajes de comedia para su canal en internet. Pero tenía algunos problemas por varios motivos. Por lo que se reunieron en una video llamada con todos sus amigos.

—Vamos chicos. Necesito que me den ideas graciosas para el sitio web.

—Tengo una idea— dijo Leona, una de las compañeras de Lane— una anciana y una comadreja van a una consulta médica porque la señora tiene cáncer y...

Antes que pudiera seguir, Lane la interrumpió— Ya hablamos de esto, Leona. No podemos hacer chistes de enfermedades graves.

—Tengo una idea—dijo Rudy, un compañero de Lane —Que tal si estamos en la segunda guerra mundial. Hay sangre y destrucción en todas partes— explicó, y se mantuvo en silencio por unos segundos

—¿Y?— preguntó Lane ya que no había nada graciosos con eso.

—No sé, pero pienso que sería genial ver esas cosas en tu sitio. — y a muchos de ellos les gustó la idea, excepto Lane.

—Vamos, chicos. Necesito buenas ideas. Algo que rompa el esquema de los chistes en internet.

—Ya sé. Qué tal si todo esto es el chiste. Nosotros tratando de hacer un acto de comedia y sin tener resultados. — dijo uno de los amigos de Lane.

—Sería una mala broma.— dijo Lane.

—No, lo digo en serio. Y estamos en un sketch, ahora mismo.— todos estaban mirando fijamente al espectador.

—Y yo tengo cáncer.— dijo Leona.

Lane, estaba harto. No es que estuviera furioso, solo frustrado por no tener algo nuevo.—Chicos, no podemos seguir así. Dejémoslo aquí por hoy.

—De acuerdo. Adiós a todos— dijeron los compañeros de Lane y todos se desconectaron de la video llamada.

Lane suspiró ya que aún tenía el problema— Necesito más ideas, pero ya no tengo.

—Hola, Lane— dijo Linka

—¡Ahh!— Se asustó Lane al escuchar a Linka. Lo que le pareció raro ya que era normal que Lars lo asustara.—¿Linka? No que estabas con Lars.

—Así es— dijo Lars

—¡Ahh!— se asustaron Lane y Linka, con la aparición repentida de su hermano.

—¡Lars!— exclamó Linka— ¿De dónde apareciste?

—¿De qué hablas? Ambos entramos a la habitación al mismo tiempo.

—¿Qué raro? No recuerdo haberte visto. — dijo Linka algo confundida, aunque con las drogas en su sistema, era posible que se confunda con todo.

Lars ignoró el comentario de Linka y se dirigió a su hermano —Lane es tu turno de cuidar a Linka.

—¿Puedes darme unos minutos?— preguntó Lane— Estoy algo ocupado por el momento.

—No puedo. Tengo que ir a recoger un premio que me gane ¿No es cierto Linka? — dijo Lars mirando a Linka, ya que, gracias a ella, él obtuvo un premio

—¡Ahh!— gritó Linka al igual que antes.— Lars, ¿de dónde apareciste?

A Lars le pareció rara esa reacción de Linka— Estuve aquí en todo momento.

—Oh. No me di cuenta de eso.

—Bueno. Tengo que ir rápido ya que no sé hasta qué hora estará la estación de radio abierta y tengo que ir a buscar mi premio. Por lo que te dejo a Linka. Adiós, Linka— se despidió Lars.

—¡AAAHHHHHHH!— gritó Linka, ya que se asustó con su hermano. Lars la ignoró y se fue de la habitación dejando Linka gritando.


Después de varios minutos de gritos, Lane seguía buscando ideas para su página de comedia, pero sin tener suerte alguna. Lo que lo frustró. Y Linka se dio cuenta del estado de su hermano.

—¿Qué haces?

—Estoy pensando en chistes, pero es casi imposible.

Linka quería ayudar a su hermano. Suerte para Lane, a ella se le ocurre buenas ideas. Lo malo es que en su estado puede pasar lo que sea.— Lane, sabes lo que hago cuando no sé algo. Deberías pensar que haría un profesional como un payaso. Y dónde están los mejores payasos del mundo.

—Bueno eso es relativo. Por instancias, muchos van al "Condominio de la Risa" ya sabes, el club de la risa. Pero a muchos otros payasos les gusta ir a un hotel en las Vegas, pero esos...

—En el Congreso.— interrumpió Linka a su hermano. — ahí están los mejores payasos.

—Linka, en el Congreso no hay payasos.

—¿Ah, no? — se preguntó Linka— Y cómo es que mamá siempre dice que en el Congreso está lleno de payasos.

Lane entendió a lo que iba, pero la política es un tema que no toca Lane. —Linka, es bueno que tomes la iniciativa, pero a nadie le gusta la política. Nadie puede hacer gracia en la política. Además, es una línea muy delicada ya que, si haces un chiste sobre un partido político, molestará a muchas personas. Es un territorio muy peligroso para hacer chistes. No creo que nadie sea capaz de hacer chistes sin molestar…

De repente, las luces de la habitación se apagaron, y se encendieron dos focos de luz.

—Bienvenidos al debate político del año dos mil y algo— dijo la Señora Cocos que estaba siendo controlada por Linka, la cual estaba haciendo el papel de una moderadora de un debate.— Estamos aquí para ver las campañas políticas que tienen estos dos grupos políticos: por un lado, tenemos al partido purpura.

Y donde la Señora Cocos apuntó, apareció Linka con la ropa interior de Luke en su cabeza, que eran de color purpura.— Soy del partido purpura y nosotros decimos que todos los gays deben tener armas.

La Señora Cocos apuntó al otro lado— Y por aquí tenemos al partido Amarillo.— donde Linka apareció con la ropa interior de Lane en su cabeza.

—Nosotros, el partido amarillo, declaramos que todas las armas son gays.

—¿Así?— dijo Linka Morada, con la ropa interior de Luke— Te crees mejor que nosotros.

—Orden en la sala— dijo la señora cocos, controlada por Linka.— Vamos a ver cuáles son los grandes cambios que nos promete el partido amarillo.

—Linka se colocó detrás de un estrado que nadie sabe de donde salió— El partido amarrillo prometemos que los superhéroes trabajaran aún más por las pequeñas cosas como remover la nieve, o si alguien se burla de mi cabello y golpear a los idiotas.

—Interesantes puntos— dijo la señora Cocos.— Partido Purpura, cuáles son sus mejoras en el sistema.

—Nosotros el partido purpura apoyamos la pena de muerte a todos los patos que pueden volar, pero no a los que pueden nadar. Nadar es algo natural y necesario, pero además volar es ser demasiado presumido.

—Difícil mejoras que superar.— dijo la señora Cocos.— Partido Purpura, sobre religiones.

—Nosotros apoyamos las religiones, y cada uno de los libros sagrados como el código de Da Vince.

—Partido Amarillo.

—Declaramos que será festivo el día martes, que son de julio solo a las 4 de la tarde.

—Mmm, cerca de mi cumpleaños. Me gusta. Partido Purpura ¿Cuáles es la característica más grande del partido purpura?

—Somos decididos. Espera, no. Cambie mi opinión.

—Muy tarde. Partido Amarillo. ¿Cuáles son sus campañas?

—Nosotros comenzaremos la campaña Anti-pirateo de fotocopias.

Y así siguió este supuesto "debate". Lane no podía creer lo que veía, material de oro para su canal de comedia. Sacó una libreta de notas, y comenzó a escribir todo lo que sucedía. Tenía material de oro, y ese fue solo el principio, ya que llevó a grandes discusiones que existen hoy en día.


1) Frio vs calor.

—El calor es mejor que el frío.— dijo Linka Amarilla.

—¿Cómo vas a preferir el calor?— respondió la Linka Purpura— Si tienes frío te abrigas. Pero si hace calor, solo te puedes quitar la ropa y seguirás teniendo calor.

—Hablaras como si desnudarse fuera algo malo. — respondió la Linka Amarilla, en ropa interior, y otra ropa interior amarillo en su cabeza.

La señora Cocos intervino, controlada con una Linka que no tenía ropa— ¡Oye! Nadie quiere verte desnuda. Pero al de la partida Purpura— la señora Cocos se dirigió a la Linka Purpura, que tenía ropa puesta. — No me molestaría verte sin ropa.


2) ¿Qué es esa cosa?

—Es una máquina del tiempo— dijo la Linka Purpura, apuntando al objeto en cuestión que había en la habitación.

—Es una máquina para viajar a otra dimensión.— contestó la Linka Amarilla.

—Máquina del tiempo.

—Máquina Interdimensional.

—Máquina del tiempo.

—Máquina interdimensional.

—Máquina del tiempo.

—Máquina Interdimensional.

Parecía ser de esos temas complicados de la política que es imposible encontrar una solución. Esos temas que no son ni blanco ni negro. Son territorios grises que nadie sabría cómo resolver.

—Chicas— respondió Lane, ya que llevaban mucho tiempo discutiendo del tema.— Es una tostadora.— Resultan que estaban discutiendo sobre una tostadora.

—Sí, que trae pan tostado del futuro.

—Que trae pan de otra dimensión


3) ¿Los robots están vivos?

—Los robots sí están vivos.— declaró la Linka Purpura.

—¿Cómo van a estar vivos? Son técnicamente unos zombis.

—Claro que no. Si te muerde un zombi, te transformas en zombi. Si me muerde un robot, no te vuelves un robot. Un robot es un humano con cables en vez de venas, y aceite en vez de sangre.


4) Las secuelas de las películas

—Las segundas siempre son malas. — dijo la Linka Purpura— Todas las segundas partes de películas son malas

—Pero hay muy buenas segundas partes— respondió la Linka Amarilla.

—Pero hay miles de malas. Como ese del vampiro, el… ¿cómo se llama la del vampiro?

—Esa es mala hasta la uno.— dijo la Señora Cocos

—Si no te gustan las secuelas, ¿por qué las ves?— dijo la Linka Purpura.

—Estoy obligada a verlas por si hacen las tres.


5) Golpe de Gancho vs la patada voladora

—Es obvio que el golpe de gancho es el mejor.— dijo la Linka Amarilla— Le das el mejor golpe en la cara, el oponente sale volando y cae al suelo. ¿Qué podría ser mejor movimiento que te lleva a la victoria que eso?

—¿Acaso eres tarada? Las grandes peleas no se hacen solos. Se pelean en grupo. Por eso cuando tu amiga, que debería separar la pelea, llega con la patada voladora es mil veces mejor que llegue con un golpe de gancho— Contraargumentó la Linka Purpura— Imagina a Clydia llegar con una patada voladora cuando estás peleando con León.

—¡Oh, eso sería genial! — dijo la Linka Amarilla al imaginar a Clydia llegar con una patada voladora contra un bebé— Quiero decir, es tonto y probablemente lo odie cuando lo vea.


6) Guerra de consolas

—Había una guerra entre las consolas de juego. Pero después de varios años decidimos que esta es la mejor consola. La máquina de wafles. Tiene las mejores gráficas, fácil de usar, no se destruye después de usarla en una lavavajilla como otras consolas. Quizás el mayor problema es que en sus juegos no aparecen personajes femeninos, pero tampoco tiene masculinos así que está bien.


—7) Los video juegos provocan violencia.

—¿A quién le interesa eso?— dijo la Linka purpura.

—El tiempo que perdemos discutiendo de esto, es tiempo que podríamos estar jugando videojuegos.


—8)Cual es el dios más poderoso.

—Es Artemisa. Diosa de los animales salvajes, enfermedades y los niños. Ella nos protegería de los ataques de los animales salvajes, ataques de las enfermedades y ataques de los niños.— dijo la Linka amarilla.

—Estás loca. El dios más poderoso es Chartí-Hygienic. El dios que hace que se acabe el papel higiénico en el baño. A él le tengo miedo. Y hablando de que se acabe el papel higiénico, pido una pausa para ir al baño.— salió corriendo de la habitación— AWW, ¡SÍ! WOO, ¡CASI NO LLEGO! WOO-HOO-HOO-HOO.

—Vaya, sí que se estaba conteniendo— dijo Lane al escuchar a Linka gritar en el baño.

—Ni lo digas— dijo la Linka amarilla... mientras que se escuchaban los gritos de la Linka purpura.

—¿Cómo es que estás aquí si estás en el baño?

Apareció la Señora Cocos, controlada por Linka— Estamos en un debate de dos grupos, y una moderadora, hecho por una sola persona, ¿y ese es el error de la trama que te estás fijando?


9)Gatos o Perros

Para está discusión estuvieron presentes Charles y Cliff para tener en claro cuál de las dos especies eran mejor. No lo malinterpreten, ellos se llevan bien, pero ese tema es un tabú para ellos ya que provoca pelea entre ellos.

—Los perros tiene colmillos y corren muy rápido, lo que es asombroso.— dijo la Linka Amarrilla— También tiene un olfato que es imposible de superar. — Eso hizo que Charles se sintiera orgulloso, y molestó un poco a Cliff.

—Pero los gatos pueden ver en la oscuridad, pueden saltar muy alto y tienen nueve vidas.— contraargumentó la Linka Purpura. Lo que hizo a Cliff sentirse superior, y molestó a Charles.

—Por eso la Chica Canina sería mejor. — respondió la Linka Amarilla que apoyaba a los perros. Pero ese argumento confundió a Charles.

—Que no, idiota. Será mejor Chica Felina. — contestó la Linka Purpura que apoyaba a los gatos. Pero con su argumento confundió a Cliff.

Lane también estaba confundo— ¿Chica Canina? ¿Chica Felina? ¿De qué están hablando?

—¡Duh!— dijo la Linka Amarilla— qué sería mejor: ¿ser mordido por un perro radioactivo o por un gato espacial llamada Molly y obtener poderes de superhéroes? Lo que es difícil de decidir ya que no me agrada la idea de beber el agua del inodoro.

—Esperen, ¿deberé ir al baño en una caja de arena? — dijo la otra Linka.

Lane siguió escribiendo en su libreta ya que tenía un montón de ideas para su página web para cubrir por meses.


10)

—Se nos están acabando los temas.— dijo la Señora Cocos— Tenemos nuestro invitado, Brinquitos.

La Linka amarilla estaba preocupada, ya que su oponente era lista. Pero ella pensaba en el verdadero problema de la siguiente discusión —«Tengo que ganar este tema, ya que sé lo que están pensando esos idiotas del partido morado»— pensó la Linka amarilla

Mientras que la Linka morada estaba en su posición mirando brinquitos.— «Me pregunto que sabor tiene las patas de ranas, su textura»

—«Conociendo su tipo, debe preguntarse el sabor que tiene las patas de ranas y su textura»

—«Quizás si lo cocino con pan tostado y mantequilla, podría ser un gran platillo»

—«Ahora, probablemente, se esté preguntando como quedaría con pan tostado y mantequilla»

—«Mmmm, patas de ranas. Ahhhhh»

—«Para este punto, debe estar diciendo: Mmmm, patas de ranas. Y debe estar haciendo ese sonido 'ahhhhh'»

—«Ahhhhh»

—«Ahhhhh»

Mientras que Lane y los demás, no sabían que rayos estaba pasando. Veían a la Linka purpura mirando detenidamente a Brinquitos, y a la Linka amarilla mirando a su adversario —¿Por qué se quedó todo el mundo en silencio— reclamó la Señor Cocos?

—Ahhhhh— todos miraron directamente a la Linka amarilla que fue la que hizo ese sonido.

La Linka amarilla entró en pánico—«Oh no. ¿Acaso hice el sonido en voz alta? Oh no»

—«Me descubrió»— entró en pánico la Linka purpura.


Volviendo al presente, dentro del centro comercial, Lars seguía buscando a Linka por todas partes del centro comercial. —Porque hay tantas cafeterías en este lugar. — Lars estaba molestó, pero se calmó para pensar tranquilamente.— Rayos, han pasado varios minutos. Linka puede estar en cualquier parte ahora... Ah, no. Ahí está— notó Lars estaba en otra de las cafeterías. Y vio que Linka estaba sentada, e iba a beber de una de taza de café.

Lars se preocupó, ya que Linka drogada era insoportable, pero tener una que además tomaría café debería estar a otro nivel de molesta. Fue corriendo rápidamente para detener a su hermana. Cada paso que daba, cada centímetro que se acercaba, ella se acercaba su tasa de café a su boca. Lars se lanzó con todo su cuerpo y... golpeó la taza y derramó el café.

—¡Lars! ¿Por qué hiciste eso? — reclamó Linka por lo que había hecho su hermano.

—Era algo que tenía que hacer. Lo bueno es que no podrás tomar el café.

—Sí...— dijo algo deprimida Linka— Bueno, obligada a tomar los otros cinco.

—¿Los otros cinco qué?— se preguntó Lars.

Resulta que Linka tenía otras cabeza por todos lados, como si su cerebro estuviera teniendo la reacción más rara del mundo. Después de unos segundos, Linka se detuvo, miro al frente, y comenzó a sonreír. Lo que asustó a Lars, por una parte, era una sonrisa, pero era una sonrisa de una Linka drogada con un litro de café en su sistema —Tengo tanta energía, qué hacer lo que sea. Lo que anhela toda la humanidad: Ser amigos de un oso; hacer un número dos sin tener que hacer el número uno en el baño; tocar inapropiadamente a un mago; y cambiar legalmente mi nombre a Susan.

—¿Te sientes bien, Linka?— preguntó algo preocupado Lars ya que no sabía que iba pasar en ese momento.

—Bueno, es algo difícil de decir. En la escala de drogada del glorgium al zidium, me siente poco un trudulo. A lo más un corcostu.

—¿Eso se supone que son números?— preguntó algo desconcertado, Lars.

—Diddly didly do do. — respondió su alocada hermana.

—¿Eso se supone que sea un sí?

—Boob beep

—Creo que se te rompió el cerebro, Linka.

—Gleep gorm palara ocu para yabala du ro kinolurodium.

Al darse cuenta de que Linka hablaba como idiota, se dio cuenta de algo— Espera un segundo, pensé que no tenías dinero. ¿De dónde sacaste dinero?

Linka estaba ahí con una cara de idiota, pero no hacía nada.

—¿Linka?

—¡Achoo!— resulta que era por un estornudo, y ahora iba a explicar de dónde sacó el dinero— Geep coom fafalafa jerjer blr blat...

Lars se golpeó la frente—En español, Linka— reclamó Lars.

Linka nuevamente puso una cara de idiota— Lo siento, cuales la traducción de "¡Achoo!" en español.

—Por el amor de... Solo dime cómo conseguiste el café

De repente, apareció Lane— Lo siento, Linka. Solo me dieron 15 recipientes pequeños de crema. Aparentemente tienen un límite por cliente.— Lane se dio cuenta que estaba Lars— Hola, Lars. ¿Qué cuentas?

Lars entendió de donde Linka sacó el dinero de café. Por lo que Lars tomó un gran respiro, y pensó que lo siguiente que tenía que hacer era preguntar de manera calmada a su hermano:—Tú le diste café a Linka. ¿Acaso estás loco? — respondió prácticamente gritando por la locura que hizo.

Por lo que Lane respondió— Claro que no, o sea sí le di café, pero no estoy loco. Todo está bajo control. ¿No es así, Linka?

—Gorb, gorb.— respondió ella.

—Lo ves, está completamente bien.— Lars miró enojadamente a Lane. Por lo que Lane admitió por qué lo estaba haciendo.— Está bien. Claramente no está bien. Pero sabes lo valiosa que es la mente de Linka en ese estado.

Lars se dio una palmada en su cabeza— He estado evitando que Linka se drogue más de lo que ya está. Tienes idea de lo que puede pasar.

—Oh, vamos. ¿Qué es lo peor que puede pasar?

Lars siguió discutiendo con Lane.— En serio, Lane. ¿En qué mundo te parece buena idea drogar a Linka?

—No lo entiendes, Lars. La mente de Linka en ese estado es una mina de oro de la comedia. Ella fue la que inventó los personajes del partido amarrillo y morado. Lo que incrementó mucho las visitas de mi canal y aumentó las quejas de Luke sobre de ponerme su ropa interior en la cabeza.— Lars no parecía sorprendido por lo que contaba Lane.— Solo mírala. — ambos hermanos observaron a su hermana viendo sus manos por alguna razón.

—Mis dedos son como salchichas que salen de mi mano. Y mis manos es una salchicha que sale de mi brazo, y mi brazo es una salchicha que sale de mi torso

—Lo vez es un genio. Y puede hacer cualquier cosa graciosa, no importa lo aburrido que sea.— Lane miró una tienda, y quería poner en prueba a Linka.— Te lo voy a demostrar.

Lane llevó a una tienda que ningún niño iría jamás.— Aquí estamos en la tienda de artículos de oficina. Uno de los lugares menos divertidos del mundo. Un poco atrás de los funerales.

—¿De qué hablas? Los funerales son de lo mejor— comentó Lars.

Lane siguió con su idea— Bien, Linka. ¿Ves algo que te interesa?

Linka miró alrededor— ¡Uhh, una engrapadora! — y se fue por un momento. Y Lars, aprovechó para entrar en razón a su hermano.

—¡Estás loco! Tenemos que hacer llamar a nuestros hermanos para llevarnos a Linka.

—Vamos, Lars. Necesito el material de Linka. Además, supe que conseguiste Linka para que te ganara un concurso.

—Suspiro, ¿quién te dijo eso?

—Linka me dijo.

—Rayos.

—¿qué te parece si dejamos que Linka decida? — dijo Lane.

—Me parece bien.

—Oigan, chicos— dijo Linka— Por fin tengo una hermanita— Resulta que Linka se sacó la ropa y usó la engrapadora para que estuviera sostenido en la pared con los engrapes, y con unos lápices dibujó la cara.

—!Oh! Esto es genial.— comenzó Lane a escribir en su cuaderno de notas.

Lars miró y solo pudo comentar una cosa— No sé si las drogas de verdad la hacen un genio de la comedia o la idiota más grande que haya existido.— pero no era hora de responder esa pregunta.— Linka, ponte la ropa.

—No sé por qué exageras. Si todo esto es un sueño.— respondió Linka.

Lars no entendía a qué se refería Linka. Pero, en ese día nada lo que dice Linka tiene sentido —¿Qué te hace pensar que es un sueño?

—Porque si no lo fuera, esto me dolería— Linka procedió a dar un cabezazo a una mesa de madera.— Lo ves, no me dolió. Pero ahora que lo pienso, tengo toda la cara entumida.

Lars estaba un poco molesto con tratar todo lo que le pasaba a su hermana— Linka solo ponte la ropa— Linka procedió a hacerlo. Y Lars tenía que tratar de convencerla de irse, en vez de hacer cosas de Lane— Mira Linka, Lane y yo hablamos y ambos queremos hacer cosas distintas. Verás yo quiero...

—Hagamos lo que dijo Lane.— contestó Linka sin escuchar lo que quería Lars, lo que puso a Lane feliz y a Lars un poco molesto.

—Ni siquiera me dejaste explicar.— dijo enojado, Lars.

—No es necesario. Tú das miedo, y por eso escogí a Lane.

—¿Por eso?

—Sí, es decir, mira esa sonrisa tuya.

—¿Sonrisa?— preguntó Lars ya que él nunca sonríe.

—Esa sonrisa es demasiada tierna para ser verdad. Debe ocultar la personalidad de un sociópata. Y esa mirada dulce y amigable, me da escalofríos con solo mirarla. Además, mira esos ojos, parece que tiene pestañas postizas, y eso da miedo de verdad.

Lars no sabía de dónde vino todo eso. Es decir, Linka podía algunas veces encontrar lo lindo en lo que hace Lars, pero principalmente era su instinto de hermana mayor, tal como puede encontrar lindo lo que hace Leif. Entonces al escuchar todas esas tonterías de Linka, miró nuevamente a Lane para tratar de convencerlo de llevarla a casa— No te parece que está loca.

—En su defensa, si un hombre con pestañas postizas me sonriera, también tendría miedo.— respondió Lane.

—Es suficiente— dijo Lars, harto de la situación.— nos vamos de aquí

Linka, al terminar de vestirse, fue a detener a su hermano—¡Espera, Lars!— comenzó a tirar de las mangas de la camiseta de Lars. Y a los pocos segundos, desgarró su camiseta

—¡Ahh, Lars te corté el brazo!— gritó Linka

—No, solo arrancaste la manga de mi camiseta. No es la gran cosa.

—¡Que no es la gran cosa! ¡Claro que es la gran cosa, es la mayor cosa! Preferiría haberte sacado el brazo. Pero no te preocupes.— Linka empezó a buscar en la tienda hasta que encontró algo que la podría ayudar— ¡Cinta adhesiva! Esto lo arreglará— Linka comenzó unió la ropa con cinta adhesiva.

—Supongo que arreglaste el problema.

—Claro que lo arreglé. La cinta adhesiva arregla todo, incluso la ropa y lo hará más duradero. Incluso, puedo hacer esto— Linka comenzó a hacer algo con la cinta adhesiva— Aquí tienes. Ropa interior de cinta adhesiva. La parte divertida es sacarlo

—Jajajajaja— comenzó a reír, Lane— Estas ideas son de lo mejor.— ya que le pareció genial la idea de la ropa interior hecha de cinta adhesiva.

Lars estaba un poco harto de esta nueva dinámica—¿Por qué tenía que estar con Lane, y no alguien racional como Luke? Incluso hasta Loni. Ellos no harían la situación peor.


Mientras tanto, en la cárcel del centro comercial por usar un hacha de combate en el centro comercial. Loni estaba encerrado dentro de la celda había, y Luke estaba junto a él, y este último no estaba nada feliz sobre eso.

—Puedo sentir que estás molesto conmigo y quiero decir lo siento.— dijo Loni con mucha sinceridad.

—¡Qué demonios Loni!

—Mi mente se desvinculó de cuerpo. Ni siquiera sé lo que hice.

—¡Oh, bueno! Te lo voy a recordar. Estuviste por todo el centro comercial usando un hacha de combate, y las personas pensaban que las atacabas. Luego fuiste a la zona de kioscos donde, se activó esa extraña fobia tuya sobre los kioscos (referencia al capítulo 28), e ibas a usar el hacha para destruir el puesto de lociones de manos, hasta que los guardias de seguridad te detuvieron y me arrestaron porque pensaban que también estaba involucrado.

—Lo siento, vi esa tienda. Y lo único que quería era destruirlo. Pero no te preocupes, tengo un plan para escapar. He estado planeando este escape por años. Desde que me enteré de que existe una cárcel en el centro comercial, he investigado todo por si algún día entro en este horrible lugar, donde estás en un centro comercial, pero no puedes comprar nada. — A Loni le dio un escalofrío— ¡Qué horrible! No hay un lugar más horrible que eso. Es decir, ¿qué lugar podría ser más horrible que aquí.

—Emm… ¿la cárcel de verdad? — dijo Luke.

—¿Por qué querías ir a comprar ropa en la cárcel? Luke, eres un idiota. —Loni se puso de pie y se acercó a la reja para hablar con la guardia de seguridad, que era una adolescente de la edad de Loni.

—Por favor, Loni. No vengas con esas idioteces. Ya que fueron esos los que nos trajeron estos problemas.

—Hola, Hilary

—Hola, Loni. ¿Cómo estás?

—Ya sabes. Un poco de esto y un poco de aquello. Dime, ¿cómo está tu hermana?

—Está bien. Gracia por el consejo del otro día.

Luke se acercó a su hermano para entender lo que estaba pasando—Loni, la conoces.

—Sí, ella es Hilary.

—Cómo es que la conoces.

La misma guardia de seguridad se encargó de responder esa pregunta— Loni me ayudó con el regalo para el cumpleaños de mi hermana.

—¿En serio?

—Sí, así te saqué varias veces de la cárcel hoy. — explicó Loni a Luke, y la razón de cómo pudieron sacar a Luke varias veces de la cárcel— Una de las formas de sobrevivir en la cárcel es tener buenas relaciones con los encargados de la cárcel. Es por eso por lo que soy amigo de Hilary, y del alcaide de la cárcel de Royal Woods.

—Espera, qué. Eres amigo de un alcaide. Bueno, no importa. Después tendremos una conversación con mamá y papá sobre la gente que ves — Luke se dirigió a la guardia— Oye, Hilary, ¿puedes sacarnos de aquí?

—Claro que sí.

—Genial.

—Es lo que me gustaría decir.

—¿Qué?

—Lo siento. Pero Loni ha pedido que te sacara tantas veces que me meteré en problemas por sacarlos.

—O sea que estamos atrapados. — dijo Loni algo decepcionado— Bueno, hora del plan b de estar en una prisión: Ser amigos de los criminales que ya hay en la cárcel— dijo Loni apuntando a las otras tres personas que habían: Un hombre muy musculoso con una cicatriz en el ojo; un hombre bastante delgado y pálido (parecido al color natural de Lars); y otro bastante gordo, pero tenía cara de malo—. No debe ser difícil, soy amigo de los prisioneros de la cárcel de Royal Woods, después que les enseñé a cómo abrir cerraduras y como hacer crochet. Seré amigos con estos que están en la prisión.

—¿Eres amigos de unos criminales de la cárcel de verdad? —preguntó Luke preocupado por ese dato.

—Así es, fue más difícil enseñarles el crochet. Y para tu información, los criminales pueden ser personas increíbles que fueron perjudicados por la sociedad. En serio, ellos han vivido duras vidas.

—De acuerdo, Loni. Me está empezando a preocupar tu loco conocimiento de la cárcel y las decisiones que has tomado.— Luke se dirigió a Hillary.— ¿No hay nada que puedas hacer?

—No te preocupes. Pronto comenzara el turno de otra compañera y le pediré que firme para que los saque. No creo que le moleste, ella es super amable.

Luke se sintió aliviado con lo que había dicho Hillary. —Me alegra que podamos salir de aquí.

—Mira, justo está allí. Julia, ven aquí. — dijo la guardia de seguridad a su compañera.

—No puede ser. — dijo Luke al ver quién era, y se enfureció.

Loni dirigió su mirada a la guardia de seguridad— Oye, Luke. No es esa Julia, la amiga de Sam que tu odias demasiado y ella también te odia. — Luke apretó con fuerza los barrotes de la celda que pudo doblar el metal.

Resulta que la otra guardia de seguridad era Julia, la rival de Luke en el amor por Sam. Ella es su vecina, y ellos dos se odian ya que ambos quieren a Sam.

—Bien, ya sé lo que pasó. — reflexionó Luke— Loni me mató con el hacha de batalla. Y parte de mi tortura eterna por dejar Linka escapar es que la hija bastarda del demonio sea mi carcelera.

—¿Qué hace esta cosa aquí? — Julia se acercó toda molesta a Luke, ya que mirarlo le hacía enojar —Deberías estar en un zoológico. O en un laboratorio, para que examinen esa horrible cosa en su cuello a lo que le llamas cabeza.

—Mira no tengo tiempo para ser parte de tu trabajo. Torturar a las almas vivientes de la tierra. Pero, Loni y yo tenemos cosas que hacer. Así que tal si nos sacas de aquí. Porque si no lo haces, te juro que después que seas enterrada en un cementerio, viva o muerta, me da igual cual sea, Loni y yo bailaremos todas las semanas sobre tu tumba, ¿cierto Loni?

—No me siento cómodo bailando sobre la tumba de una persona. — respondió Loni a la proposición de su hermano.

—¿Por qué? Ella será un montón de huesos, con restos de carne podrida y gusanos en sus ojos. Nada diferente a lo que es ahora.

—Por favor— respondió ella— ¿Crees que moriré primero? Acaso se te olvida que los gusanos como tu son fáciles de matar.

—Mejor dicho, que tú vivirás más porque las cucarachas son difíciles de matar.

Loni se sentía algo nervioso al estar en el medio de su discusión—Iré a hablar con los otros prisioneros antes que esto se ponga más feo y donde me siento más seguro.


—Y por eso, para estar sanos, hay que tener el mejor sistema inmune. Por eso, hay que estar al día con nuestras vacunaciones y lamer el fondo de los zapatos una vez al año. —dijo Linka hablando sobre…— ¿Por qué te conté esto?

—No tengo la menor idea— dijo Lars, harto de lo que hablaba Linka.

—Oh, esto está genial. —Pero, por otra parte, Lane, estaba encantado con todo lo que estaba sucediendo— Tienes un gran talento con la comedia

—O tienes un gran problema. — dijo Lars

—Es ambos— respondió Linka— siempre es ambos. Muchos de mis dones son así. Pero eso soy la mejor versión de mí. ¿No estás de acuerdo, Lars?

—Eres todo lo que yo no quiero ser en esta vida.

Cada conversación, cada cosa que pasaba Lane anotaba todo su cuaderno de notas— Vamos, es genial. Dime la cosa más genial que se te ocurra.

Linka dijo lo primero que se le ocurrió— Si un día me convierto en la alcaldesa de Royal Woods, lo primero que solicitaré es que me den la llave de la ciudad; lo segundo que pediré serán las llaves de las casas dentro de un radio de 500 metros. Y le daré la faja de la Miss Royal Woods a Philippa Phillipini, conocida como Flip, y la obligaré a usar un bikini de dos piezas.

A Lars y a Lane les dio asco con solo imaginar eso

—Bueno, no todas las ideas pueden ser ganadoras. Aunque creo que puedo usar la idea de la llave de la ciudad y las llaves cercanas.

—Uhh, miren ese señor está haciendo dibujos a la gente. — dijo Linka caminando sin que nada le importe.

Por otra parte, Lars estaba mirando molesto hacía Lane.

—Vamos, no me mires así— se quejó Lane a su hermano— ¿De dónde sacaría yo mis ideas? No es que la gente digas cosas graciosas o se estén insultando por ahí.


Mientras en la cárcel de Royal Woods.

—Eres tan feo que los bumerangs que lanzas niegan en regresar. — dijo la guardia de seguridad, Julia a Luke.

—Eres tan horrible que el gobierno está considerando cambiar Halloween a tu cumpleaños. — respondió Luke a la guardia de seguridad.

—Lo único bueno que tienes es que tienes un cerebro nuevo, ya que se nota que nunca se ha usado.

—Tu nombre en alemán es argg.

—Cada día eres más feo. Debe ser porque eres alérgico a tu propia estupidez.

—Tu aliento es tan apestoso que tu cara debería usar pañales.

Por otra parte, fuera de la celda, la guardia de seguridad, Hillary, estaba viendo como discutían mientras comía palomitas de maíz.

—Es mi idea o esos chicos de verdad se odian, Loni. — dijo Hillary a Loni, pero Loni no le respondía— ¿Loni?

Loni estaba con unos prisioneros.

—Esta chica de que hablas. Debes ser paciente, ella se dará cuenta que también le gustas. — dijo uno de los prisioneros.

—¿Lo crees? — preguntó Loni.

—Si

—Claro

—Eres increíble,

—Te vistes bien, hueles bien, gracioso. Además, tienes un buen estilo para la moda.

Uno de los prisioneros, comenzó a decirle con mucha sinceridad que hasta le salía una lagrima en el ojo—No tengas miedo de decirle lo que sientes en tu corazón.

Todos esos cumplidos alegraron el día a Loni— ¡Vaya! todo lo que he escuchado de prisión es mentira. La prisión sí que es una buena experiencia donde aprendes lecciones de vida. Los prisioneros no te pueden golpear como tus hermanos, la renta es gratis. Estoy pensando que la prisión es la casa de la gente lista.

Por otra parte, fuera de la celda, Hillary no creía lo que estaba pasando. — Una discusión con entre una guardia y un prisionero. Y varios prisioneros hablando de cosas románticas, y un chico que inocente, le está gustando la idea de ir a la prisión. — Hillary se dio cuenta de algo— Es como dijo esa gitana que me leyó la fortuna. Pero es hora de terminar todo esto— Hillary se acercó a Julia—. Oye, Julia, ¿puede sacarlo a él y a su hermano de aquí?

—¿Crees que lo sacaré de aquí? Ni siquiera tiene buen comportamiento. — reclamó a Julia, ya que no quería que Luke saliera de ahí.

Lo que Luke se defendió, inmediatamente— Estoy actuando como alguien mejor que tú, lo cual no es difícil, incluso un dictador es más bueno que tú. Además, tú comenzaste con los insultos.

—Por favor, no necesitas ayuda para ser insultado. Ser tú es burla suficiente.

—Ver tu cara es el mayor insulto que una persona puede sufrir.

Y así Julia y Luke comenzaron a discutir nuevamente, lo que decepcionó a Hillary

—Lo siento, Loni. Pero no creo poderte sacar pronto. — Lo que no tuvo respuesta de Loni.

—Y así se hace una mariposa con lana. — dijo uno de los prisioneros a Loni, mostrando que hizo una mariposa con lana que nadie sabe de dónde salió.

—Vaya, me está gustando la idea de estar en la cárcel— afirmó Loni.


De vuelta con nuestro trío favorito.

Ahora, Linka, Lars y Lane fueron a una galería de arte, donde varios artistas exponen sus obras o pintan personas. Linka, sugirió sentarse en un banco… eso es todo. Simplemente sentarse sin hacer nada. Ella estaba sentada, mientras que Lane estaba con su cuaderno de notas, esperando a que Linka hiciera algo, y Lars esperaba la hora de irse.

—¿Podemos irnos? No estamos haciendo nada. Y si seguimos esperando creo que Linka hará algo terrible o algo estúpido. No hay punto medio con ella en ese estado.

—Lars. Ten paciencia. Estamos en una galería de arte —dijo calmadamente, Linka— El arte es una de las cosas más bellas del mundo. Las obras pueden llegar a expresar los grandes sentimientos que tienen las personas. Esas sensaciones que tienes al dormir, al momento de levantarte. Saber si es posible enfrentar a todos esos problemas. Somos capaces de seguir con esto, o preguntarnos, acaso puedo hacer eso.

—Vaya, eso fue profundo, Linka

—Sí, pero el arte también pueden ser dibujos de perros en traje de baño. Así que no me quejo.

Lars se desilusionó con el último comentario— Y ahí está la parte estúpida. — se dirigió a Lane. — Lane, podemos llevarnos ya a Linka. Dudo de algo de esto pueda servir para tu canal de comedia.

—Calma, Lars. Linka está por hacer algo. —Lo puedo sentir.

—No te aburres de esperar.

—No, y no me distraigas, ya que siento si la pierdo de vista por solo un segundo, me perderé de algo.

—No puedes estar hablando en serio.

—En serio, Lars— Lane miró a Lars— ¿puedes esperar por unos minutos y…?— miró donde estaba Linka, o mejor dicho dónde estaba antes. — Y… ¿dónde está Linka?

—Desapareció. Tenemos que encontrarla.

—Sí, antes que haga algo gracioso y no lo vea.

—Creo que ese no es el problema. — Lars notó algo— Ahí está.

Linka estaba junto con uno de los artistas que había. Tal artista había terminado de pintar algo, y Linka estaba admirando su trabajo.

—Oh, vaya. Ese dibujo está genial. — respondió la pequeña Linka al dibujo que había hecho el artista.

—¿En serio?

—Eres muy talentoso.

—Por favor, continua. — pidió el artista.

—Sí, me diste un buen cuerpo. Mientras más lo veo es como decir "Está no soy yo". Y me preguntó quién esa chica.

—Creo que estás exagerando las cosas.

—Es como: podría ser yo, si fuera más hermosa, me cuidara mejor de mí, me vistiera mejor. Espera, esto es como quisiera que me viera, ¿verdad? — empezó a cuestionar todo el dibujo que si era ella en primer lugar.

—Uh, creo que estás imaginando cosas. — respondió el artista a Linka, ya que quizás Linka lo llevó un poco a otro nivel las cosas.

—Entonces, quién es esta mujer llena de mucha confianza. — dijo Linka algo enojada, ya que tenía muchas dudas de la pintura— Esta mujer que jamás se sintiera tan insegura como para gritar a un cuadro.

—Emm, niña…

—Es demasiada buena para ser yo, tendría que ser yo, o quizás, — se dio cuenta que había otra posibilidad— ¿es otra? ¿Es así cómo me dices que no quieres verme ni en una pintura? Esto es peor que suban una imagen humíllate por internet. ¿Es así como humillaban las personas durante el renacimiento? Esto Es lo peor que le puede pasar una persona. No puedo estar aquí. — salió llorando Linka por lo que le había hecho el pintor con su obra.

—¡Linka! — gritó Lane, y comenzó a perseguir a Linka.

Lars, por otra parte, se puso detrás del sujeto para ver el famoso cuadro que volvió loco a Linka. Pero cuando lo vio, no entendía nada de lo que estaba viendo.

—¿Qué clase de cuadro es eso? ¿Una mariposa?

—No— respondió el artista, confundido por todo lo que había pasado, mostró su pintura, y resulta que eran un montón de manchas negras — Es una pintura Rorschach. Las que se ocupan en psicología. Estaba haciendo mis propias pinturas para mi curso de psicología.

Así que lo que en verdad sucedió es que Linka vio en esas pinturas Rorschach, que son imágenes de manchas negras, una imagen de ella, de alguna forma. Probablemente por culpa de las drogas.

—Ohh, — ya que era lo único que podía decir Lars— y me imagino que determinaste que ella tiene muchos problemas.

—No soy un experto aún, pero por su reacción puede decir que es una narcisista, egomaniática, bipolar, patológicamente mentirosa, con tendencias sociópatas. Es eso o está bien drogada. Aunque hay formas de curar ambas cosas

—Ya veo. ¿Y hay alguna cura?

—Bueno, no soy experto, pero conozco dos formas de corregirlo. Uno es controversial, ya que no está aprobado por el Ministerio de la Salud. Que es una terapía de shock que consiste en golpear el paciente con un bate de béisbol, hasta que se quite.

—De acuerdo, obviamente no haremos eso. Tendría que ser algo mil veces peor para aplicar eso. — respondió Lars, ya que, si Linka sigue así, podría aplicar la cura, pero obviamente sin golpearla. — ¿Y la otra?

—Que se consiga novio. — dijo el sujeto con mucha confianza.

Lars se quedó callado por unos segundos— De acuerdo, ¿el bate de béisbol tiene que ser el típico de madera o es más efectivo con uno de metal? — preguntó Lars. Ya que aparentemente, prefiere mil veces golpear a su hermana con un bate, que tenga un novio. Lo cual, muchos de sus hermanos estarían de acuerdo.


—En serio. Preferiría golpear con un bate de béisbol a Linka, que esté alguien como tú. — dijo Loki a Ron, ya que estaban juntos sentados. Obviamente, lo dijo en el momento que Bebe no estaba con ella.

—Está bien… solo te pregunté si querías comerte mis papas fritas, ya que estoy lleno. — respondió Ronnie.

—Sí, y como te dije: Pff, ¿a cambio de qué? De mi hermana. En serio. Preferiría golpear con un bate de béisbol a Linka, que esté alguien como tú. Déjame darte un consejo, Ron. No me agradas

—Eso no es un consejo, es una aclaración algo hiriente. Además, no es algo nuevo. Tus hermanos me lo dicen de lunes a viernes durante la hora del almuerzo en la escuela. Incluso, una vez, no fui ya que me enfermé y tus hermanos fueron a mi casa a decirlo.

—Déjame darte otro consejo. No me importa.

—Deberías buscar la palabra 'consejo' en el diccionario, puede que te sorprendas. Bueno, ahora si me disculpas— Ron se levantó de la silla— Me voy de aquí.

—Sí, sería mejor. Además, déjame darte otro consejo.

—No, gracias. — con eso Ron se fue lejos de Loki a ver si podía hacer algo en el centro comercial.


Por otra parte, del centro comercial, Lane y Lars alcanzaron a Linka y pasaron otro momento de calidad juntos, que hasta los echaron de una tienda.

—No puedo creer que nos echaran de la tienda de pasatiempos— dijo Lane.

—Yo si— respondió molesto Lars— después de que Linka se metiera toda la brillantina en su nariz.

—Yo no hice eso. Y no tienes pruebas que lo demuestren — Linka le picó la nariz, lo que la hizo estornudar— ¡Achoo!— y le salió brillantina de color rosa de la nariz. Lo que Lars apuntó directamente a la brillantina para marcar su punto— Eso no prueba nada, todo el mundo sabe que los mocos de las niñas son de color rosa.

Lars de verdad estaba harto de todas las estupideces que estaba pasando. Y estaba molesto de Lane ya que dejaba a Linka hacer todo lo que ella quisiera— Podemos hacer algo diferente. No sé, algo responsable.

—Buena idea. — dijo Linka, animada esperando hacer algo responsable— Busquemos a Mamá. Espera, está trabajando. A Papi entonces, espera, está trabajando. Rayos, todos están trabajando. ¿Acaso nosotros también deberíamos estar trabajando?

—¡No! Deberíamos estar en casa.

—¡Ay, aguafiestas! — respondió Lane.

Linka se acercó a Lane— Calma, Lane que no cunda el pánico. He sentido que Lars no nos ha querido ayudar.

—¿En serio? Cual fue tu primera pista— dijo sarcásticamente Lars, ya que ni siquiera lo ha tratado de ocultar.

Linka ignoró el comentario de Lars, no porque le molestaba, sino que no le importaba. Y ahora iba a tratar de convencerlo de que deje que ella haga lo que ella quiera sin que él lo moleste.—Bien, Lars. Sé cómo pedir tu ayuda. Si nos ayudas te prometo ayudarte con tu bar mitzvah.

Lars no podía creer la estupidez que decía Linka, y comenzó a explicar el problema de ese trato. —Linka, no soy judío.

—¿Con tu quinceañera?

—No soy latino, ni soy mujer.

—¿Y cómo se supone que yo sepa eso?

—Hay tantos problemas con eso que no sé por dónde empezar. Bien, ya estoy harto. ¡Nos vamos de aquí!

El hermano mayor, Lane, le pidió a su hermano menor, como un hermano mayor— Solo unos minutos más.

—Lars, tiene razón. — dijo Linka— Tenemos que irnos ahora.

—¿Qué? ¿Por qué? — se quejó Lane ya que no quería que esto terminara. Pero cuando vieron la cara de Linka, solo se reflejaba el miedo en su cara. Como si todas sus pesadillas se fusionaran, se clonará, hacen un hijo al frente de ella, ve como nacen.

—¡Por él!— dijo Linka apuntando, señor corpulento, de piel moreno y calvo. Además, sus ojos eran bastantes grandes que parecían de una caricatura japonesa —Ahí está la versión futura de Lars. Y por las reglas del viaje en el tiempo debemos evitar tener contacto con él para no alterar la línea temporal.

Ambos chicos no podían creer lo que acaban de escuchar. Lane se rio a carcajadas, mientras Lars se molestó —¿Crees que eso es mi versión futura?

—Es parecido es increíble. Ahora vámonos antes de que cambiemos el futuro. — al decir eso, Linka salió corriendo, mientas que sus hermanos la siguieron por detrás.


De vuelta con Ron, él estaba caminando tranquilamente, pensando en irse ya que solo quería dejar el almuerzo a su hermana, pero tuvo que estar con su novio que lo odia profundamente. Pero era algo común que los Louds lo odien por ser amigo de Linka. Pero bueno, era algo normal en su vida.

Iba llegando a la salida del lugar, cuando ve el arcade que había en el centro comercial algo que le llamó la atención. Y no sabía cómo reaccionar al asunto. Vio a varias personas jugando, golpeando al topo, no es un juego raro, pero estaban encima de la máquina y estaban tratando de golpear a los topos, como si fuera una máquina de baile.

—Saben que así no se juega a ese juego, ¿verdad?

—Lo sabemos, pero una niña jugó de esa forma y obtuvo la puntuación máxima, y ahora estamos haciendo el desafío de pisar al topo.

Ron siguió mirando a los jugadores. Uno de ellos, estaba pisando de manera furiosa y frustrada el piso ya que no pisaba ningún topo mientras que otro, estaba sufriendo en tratar de pisarlos, pero no podía y seguían apareciendo, sin parar. Hasta que uno de los topos se levantó justo en su pie, perdió el equilibrio y se cayó.

—De acuerdo— dijo Ron a sí mismo— Esto es raro. Pero se ve genial, así que lo intentaré


De vuelta con Linka y sus dos hermanos, se escondieron en una tienda para evitar al Lars del futuro. Lars no sabía en qué pensar, por todas las cosas estúpidas que le hizo pasar su hermana. Por otra parte, Lane, estaba teniendo el mejor momento de su vida.

—Esto es genial. — dijo Lane, y se dirigió a Linka— Te sientes segura, Linka.

—No, creo que el Lars del futuro me contagió una enfermedad del futuro. — dijo Linka jadeando con toda la capacidad que le permitía su pulmón— Me empieza picar la nariz, siento que me falta el aliento, y estoy recordando Vietnam.

—Bien, podemos salir de aquí e irnos a la van. — respondió Lars.

—Sí, tenemos que escapar de este agujero del terror que nos metió el Lars del futuro. — contestó Linka.

—De acuerdo.— se alegró Lars, ya que Linka se quería ir o al menos eso parecía— Nos vamos, por cierto. ¿Dónde estamos?

Los chicos miraron en su alrededor, estaban dentro de una dulcería que había en el centro comercial —¿Estamos en una tienda de dulces? Cómo no nos dimos cuenta antes.

Linka explicó su parte de la historia—Bueno, yo estaba salvando el universo de una paradoja ocasionada por el Lars del futuro. No tengo idea que estaban haciendo ustedes. — Luego miró a Lars— Y aún espero esa gracias y disculpa de Lars, por haber reparado su error— dijo Linka convencida de que la persona con los ojos grandes era la versión futura de Lars.

—¿Lo ves, Lars? Estamos todos seguros en está tranquila dulcería. — respondió Lane tranquilamente, esperando a que Linka hiciera algo— Ahora solo necesitamos que Linka haga…— Lane se detuvo por un segundo, y se puso algo nervioso— Pensándolo mejor, porque no simple nos vamos a otro lugar.

—Espera, ¿qué? — preguntó Lars, ya que le sorprendió que Lane quisiera hacer su idea, en vez de la de Linka.

—Sí. Espera, ¿qué? — preguntó Linka, tratando de sacar un lollipop del techo, que era parte de la decoración de la tienda de dulces.

—Sí, por que simplemente no nos vamos— dijo Lane agarrando a Linka del techo, y llevándolo en sus brazos como si fuera un bolso, y a Lars llevándolo con el otro brazo. — Nadie quiere ver algo graciosos en una dulcería. Todos quieren ver…— Lane mirando por todas partes para buscar una excusa— vamos a esa tienda de aspiradoras. Así que vamos a esa tienda…

—Espera un segundo— dijo Lars, para detener a Lane. Y sacó algo de su bolsillo para distraer a Linka— Linka, juega con estás cartas del tarot.

—Uhh, ¿tienes al dragón mago de polvo estelar intergaláctico del vacío?— preguntó a su hermano.

—No, pero tengo una carta de mago, de estrellas, del vacío. — Eso no convenció a Linka del mucho— y una carta de un vagabundo.

—Tienes al mago vagabundo de las estrellas del vacío— Linka comenzó a jugar con las cartas del tarot. Mientras que Lars se acercó a Lane.

—¿Qué sucede Lars?

—Simple, nos vamos a casa, o le digo a Linka que nos vamos a esa dulcería a probar cada dulce.

—Pff, cómo si eso fuera a pasar. Claro, ella debería estar muy drogada para... rayos. —se dio cuenta que Linka sería capaz de hacer eso— ¿y a ti qué te importa?

—Porque noté algo muy importante en tu cara cuando estuvimos dentro de esa tienda.

—Pff, no era nada.

—No, era algo muy importante. Era miedo.

Lane se preocupó un poco— Debió haber sido tu imaginación.

—No, he visto el miedo a cada uno de ustedes. Cada vez que les habló veo esas caras de miedo. Y sé perfectamente cuando tienen cada uno de ustedes ese sentimiento. Y el tuyo fue algo curioso. No fue por miedo espontaneo, no. Se sintió como un trauma. Tu mirada no era derecha, iba hacia abajo, por lo que no le tenías miedo al encargado, o alguien que estuviera en esa tienda de la tienda. No era un alguien, era un algo. Siento que tienes miedo a uno de esos dulces.

Lane no podía creer lo acertado que estaba su hermano. Todo lo que había dicho era verdad, había un dulce entre todos los presentes que dejó a Lane una especie de trauma. Pero él sentía que no había nada de qué preocuparse, la tienda tenía cientos de dulces. Era imposible que Lars pudiera saber cuál de todos era.

—Por cierto, Lane. Sé cuál dulce te da miedo.

—Pff, eso es imposible. Es ciertamente imposible.

—Bueno, no sé cuáles exactamente son, pero sé dónde están.

—De acuerdo, me estás asustando.

—Lo sé, lo veo en tu cara— dijo Lars remarcando el hecho que conoce como ver el miedo en sus hermanos, lo que hizo que Lane se cubriera un poco la cara, para evitar que Lars lo lea como un libro abierto— Verás, cuando nos sacaste de la tienda, noté que tus manos estaban sudando, y cada vez que nos alejábamos disminuía el sudor, cuando giraste por error, el sudor aumentó nuevamente. Así que, conociendo la cantidad de sudor, en ambos puntos, y el sudor al momento que nos sacaste. Estimo que lo que te da miedo, está al final de la tienda, lado derecho, tercer, justo al medio.— Lars sacó el dulce.— esto te da miedo.

—Aleja esa cosa de mi cara.—dijo Lane tirando el dulce que lo asustaba— Dulce Sonrisa.— un dulce, que cada paquete tiene polvo azucarada, que podría ser dulce o agrio. Y por alguna razón, Lane le tenía miedo.

—No lo entiendes, esa cosa está prohibida en todo el mundo. En ningún país estaba permitido venderlo. Ni siquiera está permitido en aguas internacionales, y en ese lugar duelo de monos a muerte con cuchillos está permitido. El único lugar donde no hay restricciones para comprarlo es el planeta Venus. ¿Por qué crees que todos los astronautas van a Marte? Es para estar lo más posible lejos posible de esos dulces.

—En primer lugar, los astronautas van a marte, no para alejarse del Marte, lo hacen para alejarse del sol, y créeme que los entiendo. No hay nada que odie más que el sol. En segundo lugar, si es tan prohibido ese dulce, porque está a la venta en esa tienda.

—Porque el idiota de nuestro antiguo presidente pensaba que, si se volvía legal esos dulces, se acabaría el problema del exceso de inmigración en nuestro país, ya que nadie quería venir a este país o huiría lo más lejos posible. Lo cual no entendió que puede llevar al colapso del universo.

—¿No crees que exageras?

—No lo entiendes. Fue en uno de los primeros cumpleaños que tuve, los niños comían solamente esos dulces y hacía todas clases de estupideces. Todos gritaban, todos se golpeaban, eran ruidosos, se golpeaban, se sacaban la ropa, lanzaban comida por los cielos, orinaban, sacaban mocos, vomitaban, hacían que todo apestara, hacían popo por todas partes, incluso hubo explosiones. Entiendes esa clase de locura. Era como un Armagedón, pero era raro.

—De acuerdo, primero que todo, literalmente describiste lo que pasa cada 5 minutos en nuestra casa.

—Hicieron llorar a un adulto

—Una vez hiciste llorar a papá, ¿recuerdas? Movías sus llaves por todas partes hasta el punto de que le hiciste creer que estaba loco.

—El punto es que tenemos que alejarnos.

—Bien, nos vamos a casa o le doy a Linka esos dulces.

—No te atreverías. La harás la criatura más insoportable de la historia.

—O sea como está ahora mismo. Por lo que no tengo nada que perder.

—Eres un maldito...— Lane lo pensó por unos segundos— De acuerdo. Lo más seguro que podré tener algo más material en el auto.

—Fue un placer tener un trato contigo.— dijo Lars dando la mano a su hermano. Y unos segundos apareció Linka— Linka ¿dónde estuviste?

—Bueno después que me pasaste esas cartas, lo cambié por un par de cartas de un juego de cartas para niños. Después me di cuenta de que me estafaron ya que me engañaron, ni loco un mago con poderes oscuros usaría una túnica morada, y ese dragón ni siquiera era blanco, sus ojos sí eran azul, pero el dragón no era blanco. Así que después me encontré. Luego me encontré con unos chicos, uno tenía un cabello tan extravagante con un montón de colores como rojo, negro y amarillo; y otro chico de cabello café que no sonreía. Ellos me cambiaron las cartas y me dieron una esfera de cristal de color naranja con cuatro estrellas en ellas, llegó un hombre bien musculoso que tenía sus piyamas de color naranja puesta, dijo que quería la esfera, y yo le dije, "está esfera no tiene un dragón, por qué se llamaría..." ¿cómo fue lo que dijo?, la bola de cristal del dragón. En serio, era un idiota, pobre el tonto que sea su hijo, creo que hasta un hombre babosa verde será mejor padre. Luego me pasó un libro negro, que era el libro de la muerte, lo acepté para que se fuera. Luego me preocupé ya que para qué quería un libro con nombres de gente muerta, para eso tomo un libro de historia. Luego llegó un chico que quería el libro y tenía un amigo de color azul volando, pensé que era una mala influencia, pero estaba comiendo una manzana, así que no debía ser malo, me cambió el libro por un sombrero de paja. Llegó un chico con una sonrisa de idiota, te juro que era tan idiota como el hombre musculoso, pero sí que era flexible, parecía que su cuerpo era de goma, le cambié el sombrero por un libro que tenía en la portada una mano con seis dedos y el número seis. Seguramente el libro era de cómo hacer trucos cuando tienes seis dedos, tales como: "cómo sacar tu pulgar" o "cómo levantar el dedo medio con seis dedos". Luego, llegaron un niño y una niña que eran gemelos, que querían el libro. Me ofrecieron dinero, y la niña me dio este dulce.

Lane se dio cuenta que Linka tenía un paquete de Dulce Sonrisa— ¡Linka, espera no!— Linka abrió el paquete y se lo comió todo.

Ambos chicos esperaban alguna reacción rara, pero no pasaba nada— No era la gran cosa.— dijo Linka de manera desinteresada. Pero eso no evitó el miedo de su hermano.

—Lars, tenemos que irnos a casa.


Revisado

Linka iba caminando por el centro comercial, mientras que Lane y Lars caminaban por detrás, y Lane no le quitaba el ojo de encima de su hermana, como si tuviera una bomba, preocupado por el efecto raro que podría tener los dulces que consumió. Todos iban directamente donde estaba el estacionamiento. Le mintieron a Linka diciendo que había algo super genial en una de las tiendas en ese sector, la idea fue de Lane. Pero Lane quería llegar lo más rápidamente a ese lugar.

—Me pregunto que puede ser lo genial que hay al final del centro comercial, podrías ser algo que siempre he querido saber, como: ¿Si hay una vida después de la muerte? ¿Si existen los alienígenas? ¿o cuánto es 8x7?

—Podrías dejar de mirar así de raro a Linka— dijo Lars a Lane.— podría llegar a sospechar

—No lo entiendes, consumió "Dulces Sonrisa" ahora se puede volver la peor cosa del universo, ya lo verás, sin duda dirá la cosa más horrible y despiadada que podrías escuchar en esta vida.

—Qué día más agradable— dijo Linka.

—Bueno, un día agradable no es de mi gusto.— dijo Lars a Lane.— Pero no creo que sea el dulce que le está haciendo decir esas cosas.

—Ya lo verás, se convertirá en tu peor pesadilla, o hará que sientas que estás en tu peor pesadilla— explicó Lane.— Te lo digo, no puede existir nada peor que una Linka afectada por Dulce Sonrisa.

—No veo ninguna diferencia con la Linka drogada que hemos estado lidiando todo este momento.

—Así actúa ese dulce, parece inocente, pero en verdad es lo peor.— Lars de verdad no entendía los sentimientos de Lane. No tenía ningún problema de que Linka estuviera drogada o que tomará sustancias que la hicieran sentir diferente, pero tenía problemas que consumiera unos dulces. Pero decidió ignorar esos sentimientos, ya que no lo llevaban a ninguna parte, y, además, lo llevaban donde exactamente quería. La verdad estaba a punto de llegar.

—Esperen un segundo— dijo Linka— Estamos caminando a este lugar super genial, pero son las primeras tiendas que vi, y no vi ninguna tienda que vendiera algo genial. Entonces ya sea que están ustedes mintiendo, o quizás...— Lane y Lars, se dieron cuenta que Linka iba a descubrir que lo llevaban al estacionamiento donde estaba Vanzilla— Esperan un segundo— los chicos estaban a punto de lanzarse para detener a Linka si intentaba de escapar— ¿Acasos esos son Flippees?

Junto se dieron cuenta que era verdad, se había puesto el pequeño puesto para vender unos Flippees, unos granizados que son una de las bebidas favoritas de Linka

—Eso estuvo cerca— dijo Lars.— Pero estamos cerca de terminar esta pesadilla.

Linka se acercó a los chicos con tres flippees. — Chicos, tomen uno. Yo invito.

—Espera, pensaba que no tenías dinero ¿de dónde sacaste dinero?

—De la billetera de Lane.

—¿Qué?— Lane miró su billetera, y se dio cuenta que le faltaba dinero. Eso molestó un poco a Lane, pero lo dejó pasar ya que querían terminar con todo esto.— Gracias, Linka— así que tomó la bebida y comenzó a beberlo. Y Lars hizo lo mismo. Lo tomaron tranquilamente, donde nada malo podía pasar.

—Ahh— gritó un poco, Lars— Cerebro congelado.— Lars estaba sufriendo de cerebro congelado, un dolor que aparece en la cabeza al beber algo muy frío, en este caso el flippee.

Lane no pudo evitar reírse un poco, pero a los pocos segundos, también empezó a sufrir de cerebro congelado.

Si bien, ese dolor es bastante doloroso, no suele en tardar de calmarse. No suele durar más de unos segundos de dolor constante.

—¡Ahhhh!— empezó gritar más agudamente Lars, al punto parecía de una niña— ¡Ahhhhh!

—Está demasiado frío.— el dolor de ambos solo empezaba a aumentar, no parecía quitarse a ninguno de los dos.

—¡Oh, por dios! ¿Por qué duele tanto? —Lars y Lane, cayeron al suelo por el dolor.

—¿Qué rayos es este dolor? No recuerdo que fuera tan doloroso.

Linka se pudo al frente de ellos.— No sé por qué se quejan. No es que la nueva fórmula de los flippee les hiciera dolor.

—¡AAAHHH! ¡Qué clase de formula nueva— preguntó Lane tratando de aguantar el dolor que le estaba dando!

Linka comenzó a explicar—Son los nuevos flippies. Hechos con el antiguo flippies de cereza, mezclado con esto.— dijo Linka mostrando a Lane lo peor cosa que podía haber agregado.

Fue un envoltorio de un dulce, pero no de cualquier tipo de dulce —Dulce sonrisa. ¡Pusiste dulce sonrisa en nuestros flippies!— Lane la sujeto por la ira que sentía, pero la soltó por el dolor que sentía— ¡Ahhh!

—¿Por qué hiciste eso?— sufría de agonía Lars en el piso.

—Pensé que combinarían bien. Después de todo, hicieron cosas increíbles a mi cabeza.

—¿Por qué?— dijo Lars, que apenas le salían las palabras por el dolor en su cabeza— Dijiste que no eran la gran cosa.

—Fácil, es porque mentí— a Lars le sorprendió un poco la respuesta, pero no podía responder, dado al dolor que sufría —En serio, está fue la mejor cosa que pude probar. Me hizo ver una jirafa que sacaba de su boca un dinosaurio que escupía arañas.

—Eso es... ¡AHHHH!

—Bueno, si no me van a dar las gracias, creo que lo mejor que puedo hacer es irme.

—¿A dónde?— preguntó Lars.

—A donde se me dé la gana. Estoy en el centro comercial

—No que ibas a Vanzilla.— dijo aguantando lo más posible el dolor— Teníamos un trato del concurso, ahora vamos todos de vuelta a Vanzilla.

—¿Y?—dijo Linka dando la vuelta, y acercándose a su hermano— Creíste que volvería a la van solo porque "di mi palabra" ¿En serio crees que las palabras de una drogadicta valen algo? Que me detendría que solo porque lo prometí. Piensa, Lars, piensa.

—Mi cerebro.— fue lo único que podía decir Lars.

—Sí, piensa con tu cerebro. Y trata de pensar en qué loco mundo cumpliría con mi palabra.— Linka comenzó a caminar para ir a otra parte del centro comercial.

—No tan rápido— dijo Lane, sujetando a Linka. — si bien, estaba sufriendo de dolor, trató lo más posible de sujetar a Linka. Iba a hacer lo más posible para que su hermana no se escapase. Y, aunque, sufría de dolor, él era físicamente más fuerte que Linka, lo suficiente para mantenerla. Por la sencilla razón de que era su hermano mayor.

Lane la sostenía con todas sus fuerzas. No iba a dejar que su pequeña hermana se escapara. Lo que hizo que Linka siguiera luchando. Parecía que Lane iba a poder mantenerla a raya. Pero de repente algo raro comenzó a pasar.

Por alguna razón, Linka comenzó a crecer de tamaño, crecía de estatura de manera alarmante. Ella comenzó a crecer, de un gran tamaño, que la estatura que tenía, Lane apenas podía sostenerle su meñique.

—Sabía que consumir Dulce Sonrisa haría cosas raras al cerebro— se dijo a sí mismo Lane.— ¡Lars, necesito que te encargues de Linka, ahora!... ¿Lars?— dijo Lane a su hermano, que no le respondía. Miró donde estaba su hermano, y está en el suelo quejándose del dolor, y probablemente con daño cerebral— Esto se va a poner feo.


Lane imaginaba que apareció de la nada un teatro gigante, como el Teatro de Royal Woods, y a su lado estaba Linka, gigante que podría sostener a Lane con una sola mano.

Llegó a tener , y sostenía una cuerda, resulta que Lane era un mayoneta de madera, y estaba siendo controlada por Linka. La Linka gigante controlaba a Lane para que bailara un baile ruso en un escenario que salió de la nada, y que se reía por una gran cantidad de personas, lo cuales todos eran Linka de diferentes tipos: gordo, flaco, alta, bajo, con bigotes, con barbas, con sombreros, y hasta una Linka varón, todos riéndose de Lane. A Lane le gustaba las risas, pero algo en las risas de todas esas Linkas estaba bastante mal. Pero por suerte, en un momento, la cuerda que controlaban a Lane se cortó. Por lo que cayó al piso, cuando se levantó, se dio cuenta que su cuerpo ya no era de una mayoneta, sino de un muñeco de madera, tal como la Señora Cocos. Y hablando de la Señora Cocos, Lane se dio cuenta que lo controlaba una Señora Cocos

Gracias por salvarme señora cocos. Espera hay algo distinto en usted. — y la miró para ver, como si el hecho de ser una Señora Cocos de tamaño gigantesco no era señal suficiente— ¿Hiciste algo con tu cabello?

—No, pero tenemos un espectáculo que hacer.— se reveló que aún estaba en el teatro con todas esas Linkas— ¿No habíamos escapado de ese lugar?

—Lo siento, pero el publicó nos ama. Además, eso es lo que quiere la jefa.

—¿La jefa?— dijo Lane, ya que no entendía de lo que hablaba. Por lo que la Señora Cocos, apuntó hacia arriba. Lane, miró donde indicaba la muñeca, y notó el horror. Había una Linka más gigantesca, que controlaba a la Señora Cocos— ¿Trabajas para Linka?

—Lo siento, pero que puedo decir. Paga mejor, trabajo menos, tengo seguro dental, más tiempo de vacaciones. Y no sé qué se aplica en sus manos, pero es muy suave. Es como si el trasero de un bebé estuviera tocando, bueno, mi trasero. Tu mano es como si estuviera pasando con astillas de madera, lo cual es irónico ya que yo soy de madera. Ahora toma esto.

Y todas las Linkas riéndose de Lane.


Por otra parte, en el cerebro de Lars.

Lars estaba en un campo, alejados de la ciudad, el cielo estaba rojo, y muchas cosas estaban en llamas, como si hubiera ocurrido varias explosiones. Todo era caos a su alrededor. Y de repente, todo comienza a temblar, y todo apuntaba a un volcán que había cerca que iba a eructar en cualquier segundo, lo cual eructó, trayendo más destrucción a esa tierra. Y toda la lava iba directamente a Lars, lo que hizo que se cubriera la cara. Y lo inundó, pero... no lo quemó.

Miró, buscando una explicación de por qué no se estaba sufriendo quemaduras grado mil, y lo más seguro que no era por algún protector solar. La lava no estaba caliente, y no era roja, era un arcoíris. Y que tocaba toda la tierra, cambiándolo a una imagen de caricatura infantil. Los árboles con cara, jugando a lanzar un balón, la tierra parecía de ser algo como de goma, había perritos, gatitos y peluches de felpas todos sonriendo y cantando alrededor de Lars. Claramente una pesadilla para él.

—¿Dónde están los murciélagos en este lugar?

A lo alto del cielo aparecieron varios murciélagos normales volando por la cercanía. Pero fueron golpeados la lava arcoíris, y los transformaron en lo genial y aterradores que son los murciélagos en lo opuesto, unos conejitos muy tiernos y aburridos.— Te quiero— decían los conejitos a Lars, lo que lo asustó y les dio una patada para alejarlo, pero todos se acercaba a él para darle abrazos y besitos.

Lars comenzó a darle patadas para que se alejaran, pero no importa lo que hacía aparecían más de esas cosas. Pero cuando todo parecía no poder estar peor, se escuchó un sonido y la tierra tembló un poco, y se escuchaba como algo se acercaba, como los pasos de un dinosaurio.

—Por fin ha llegado— dijo uno de los conejitos. A través de todos los árboles apareció un conejo gigante de color rosa, y nariz de color turquesa— El rey Fluffy.

—¡TE QUIERO!— dijo el conejo gigante con la voz bastante grave dado del tamaño que tenía, y lo pequeño que era Lars en comparación.

—Esa cosa debe ser destruido.


Eso era lo que estaba ocurriendo en el cerebro de los chicos. Pero para el resto del mundo estaban en el suelo, sin ninguna reacción—Quiero pedirles disculpas por adelantado por drogar sus bebidas. Finjamos que nada ha pasado, y haremos algo más tranquilo para otra ocasión, ¿de acuerdo?— Linka se fue del lugar caminando y silbando. Pero se detuvo ya que se dio cuenta de algo, y regresó donde sus hermanos— Aunque esta es una oportunidad única, quizás los flippies con la dulce sonrisa sea algo potente. Y tengo la curiosidad de que esto me haga sentir genial, y si no lo hago ahora, me arrepentiré de no conocer lo que me pueden hacer. Supongo que debo probarlo, aunque no tenga sentido que me deje igual como estos chicos. Pero se ven felices, y ya sabes lo que dicen: Un pavo feliz hace un gran sándwich de tocino.— comenzó a tomarse el granizado con Dulce Sonrisa.— Cerebro congelado— Linka cayó al suelo y empezó a convulsionar igual que sus hermanos. —Esto es genial es como si gas de la risa, la Dulce Sonrisa y las cosquillas tuviera un bebé en mi cerebro, y el bebé se hizo en los pantalones.

Un anciano que estaba en el puesto de flipies, miró a los chicos, y tenía una sola que decir a la vendedora— Deme lo que les dio a esos chicos.


Eso ha sido todo por hoy, espero que haya valido la pena la larga espera que tuvieron que hacer con el nuevo capítulo. Y espero, que el siguiente no se demore tanto como fue la espera para este capítulo.

Bueno, con las preguntas:

¿Les gustó el capítulo?
¿Qué esperan para el próximo capitulo?
¿Qué partido son? ¿Del partido purpura o del amarillo?
¿Qué les dio más risa de Linka?
¿Cuál creen que fue la droga más peligrosa?

Escriban sus reviews para comentar la historia.

Si tienen idea para este capítulo o para uno futuro, no duden en escribir

Eso sería todo, espero que tengan un buen día y los espero para la próxima.