CAPITULO 7

¡¿Un futuro terrible?! ¡Mundo de Smile Precure!

Kanna y Rakki salieron por el otro lado del portal, llegando así a la habitación de la chica, justo en frente de su posesión más preciada, aquella foto con sus padres enmarcada en un cuadro color magenta.

— ¿Huh? — dudó Kanna, algo le parecía extraño — ¿Estamos en mi habitación? — preguntó — Pero si antes de irnos estábamos en la calle, lejos de aquí — dijo la chica de cabello negro mirando al conejo hada.

— Ya te había dicho que tu foto esa funciona como un "ancla" a este mundo, cada portal que yo abra a este mundo nos traerá a donde la foto se encuentre-raki... — contestó Rakki cansado por abrir otro portal — Por eso aparecimos aquí en tu cuarto y no es la calle-raki — dijo desmayándose.

Kanna atrapó al conejo antes que se golpeara con el piso.

— Descansa, Rakki — dijo ella — Voy a prepararte algo de cenar, ¿Te parece un okonomiyaki? — preguntó ella, sin embargo, alguien más en la casa la había escuchado.

— Kanna, ¿Eres tú? ¿Ya llegaste? — preguntó su mamá desde el piso de debajo de la casa.

— ¡AH! — reaccionó Kanna — ¡S-Sí mamá, ya volví de la escuela! — respondió la chica desde su cuarto, bajando las escaleras.

— ¿Hija en qué momento llegaste? — preguntó su madre, Tomoko.

— Eh... Hace apenas — mintió nerviosa.

— ¿Y por qué llegaste tan tarde ahora? — preguntó Tomoko ligeramente preocupada.

— ¿Por qué? ¿Qué hora es? — preguntó Kanna extrañada, ni siquiera había visto la hora.

— Son las 6PM, casi siempre llegas a casa a las 2PM — mencionó Tomoko.

"¡¿Ya son las 6?! ¡Pero ni siquiera tardamos tanto en el mundo de Heartcatch!" pensó Kanna.

Un par de horas en el mundo de Heartcatch habían sido más que solo unos minutos en el mundo de Kanna, dejándole ver a la chica de cabello negro que el tiempo realmente era muy impredecible en otros mundos.

— ¡A-Ah! Yo... Pues... Ah...! — dijo Kanna nerviosa, no se le ocurría que excusa inventarle a su madre, mucho menos podía decirle la verdad, que estaba en otro mundo ayudando a las Pretty Cure, tampoco es como si su madre fuera a creer eso...

— ¿Tienes novio? — preguntó su madre sin previo aviso.

Esa pregunta le cayó a Kanna como un balde de agua fría, dejando a la pobre chica más roja que un tomate.

— ¡No no no no no no no claro que no...! — dijo Kanna más nerviosa todavía, eso y su repentino sonrojo, le dieron una falsa idea a su madre — ¡Mamá te equivocas yo...! — intentó decir Kanna, pero su madre ya se había hecho a la idea que ella estaba en lo cierto.

— ¿Y cómo es? — preguntó su madre mirando con una sonrisa a Kanna — ¿Es algún chico de tu clase? ¿De tercer año? — Tomoko bombardeó a su hija con tantas preguntas que ni le estaba dando oportunidad de responderlas.

— Mamá ya basta, esto es vergonzoso — dijo Kanna mirando a otro lado para ocultar su sonrojo.

— ¿Pronto lo invitarás a cenar, cierto? — preguntó Tomoko tomando a su hija de las manos.

"Ni aunque tuviera novio lo invitaría a cenar con una madre así..." pensó Kanna con una sonrisa incomoda.

— Cuando yo tenía tu edad, también llegaba tarde a casa por ir a citas con tu padre — recordó su mamá con corazoncitos en los ojos.

— Lo sé mamá, ustedes dos me contaban esa historia a diario — dijo Kanna, su expresión cambió totalmente, ahora con una sonrisa.

Ambas se miraron en silencio, ninguna dijo nada, era un tema sensible te tratar y había pasado muy poco tiempo aún desde que el señor Kadoya Masahiro, había fallecido, dejando solas a Tomoko y Kanna.

— Lo extraño — dijo Kanna para luego ser abrazada por su madre.

— Lo sé, yo también — dijo Tomoko aguantándose las lágrimas, debía ser fuerte por su única y amada hija.

Al día siguiente, durante la hora del almuerzo en la escuela de Kanna, ella estaba sentada comiendo en la azotea de la escuela, otra vez había algunos otros alumnos ahí mismo. La chica de cabello negro abrió su bento con su almuerzo, solo para ver algunas migajas de lo que alguna vez fue un tamagoyaki y algunos vegetales...

— ¡¿Qué?! — se preguntó Kanna al ver que alguien se había comido su almuerzo, entonces miró dentro de su mochila — ¡Rakki! — gritó al verlo ahí durmiendo.

— Hola-raki — dijo este despertando.

— ¡No me vengas con "hola-raki"! ¡Te comiste mi almuerzo! ¡¿No es así?! — dijo mientras sacudía al pobre conejo con sombrero de mago — ¡Esa era mi comida! ¡Rakki eres tan malo conmigo! — se quejó cómicamente la chica de cabello negro.

El pobre Rakki tenía los ojos en espiral, estaba mareado, pero se lo tenía bien merecido.

— ¡No es mi culpa! ¡Tu misma me dijiste que me prepararías algo de cenar anoche y nunca lo hiciste-raki! — el conejo igualmente hizo un puchero.

Ambos estaban haciendo una escenita que definitivamente llamaba la atención de las demás personas, quienes solamente pensaban que Kanna había traído un conejo a la escuela o bien, estaba hablando con un peluche de conejo, no le dieron mayor importancia, excepto...

— Kadoya — dijo una voz que Kanna conocía bien.

— ¡Rina! — exclamó Kanna sorprendida de ver de nuevo a la presidenta del consejo estudiantil de la secundaria.

— ¿Todo en orden? — preguntó amablemente la chica de cabello castaño.

— Eh... Sí, solo estaba almorzando — explicó Kanna ligeramente nerviosa.

— ¿Eh? ¿Ese es un conejo? — preguntó Rina mirando a Rakki en las manos de Kanna, desafortunadamente, ahora no podía fingir que era un peluche, pues el mismo se estaba moviendo, como queriendo vomitar por la sacudida que le había hecho Kanna.

— ¡AH! ¡N-No es lo que parece...! — dijo nerviosa la chica de cabello negro.

— Kadoya, sabes que no se pueden traer animales a la escuela, aunque sean mascotas pequeñas como un conejo — le recordó Rina seriamente.

— Lo siento Rina — se disculpó Kanna — Yo no quería traerlo, él solo se metió en mi mochila sin darme cuenta ¡Incluso se comió mi almuerzo! — técnicamente Kanna dijo la verdad, a medias, pero dijo la verdad.

— Me cuesta creer que este pequeñín te causara tantos problemas, Kadoya — dijo Rina acariciando a Rakki como si este fuera un conejo común.

— Te sorprenderías — dijo Kanna desviando la mirada.

— Me gusta mucho su sombrerito de mago — dijo riendo la chica de cabello castaño.

— A-Ah, es que los vendían en la tienda de mascotas — mintió Kanna.

— Entonces, ¿Puedes llamar a alguien para que venga a recogerlo? No quisiera tener que reportarlo a la dirección de la escuela — dijo Rina mirando a Kanna.

— Creo que Rakki puede irse solito a casa, ¿No es así, Rakki? — preguntó Kanna haciendo hincapié al conejo, después ajustaría cuentas con él.

— ¿En serio? Rakki debe ser muy inteligente entonces — Rina se sorprendió al escuchar eso, entonces la chica de cabello castaño se sentó al lado de Kanna — Es tan inteligente que te dejó un tamagoyaki y un poco de vegetales, como si se hubiera apiadado de ti — comentó riendo.

— Pues a mí no me causa tanta gracia... — dijo Kanna con lágrimas de caricatura en los ojos.

— ¿Quieres que te comparta de mi almuerzo? — dijo Rina amablemente.

— E-Eh... No gracias, estoy bien, en serio — negó Kanna, no quería ser una inconveniencia para Rina, sin embargo, su estómago dijo otra cosa.

— Me parece que tienes más hambre de lo que me dices — dijo Rina sonriendo — Adelante, come — entonces la presidenta estudiantil abrió su bento, mostrando así camarones fritos, vegetales al vapor y gohan (arroz decorado).

— ¡Whoa! — reaccionó Kanna — ¡Todo se ve delicioso! — y era cierto, o quizá era por el hambre que sentía en ese momento.

— Gracias — dijo Rina — Yo misma lo preparé todo — agregó.

— ¡¿En verdad?! — preguntó Kanna sorprendida, es cierto que ella en veces se preparaba su propio almuerzo, pero jamás le había quedado tan apetitoso como el almuerzo de Rina.

Después de compartir el almuerzo, sonó la campana, Kanna y Rina debían regresar a sus respectivas clases, la chica de cabello negro se despidió.

— Gracias por la comida, Rina, estuvo delicioso — dijo Kanna con una sonrisa.

— No fue nada, Kadoya — dijo Rina en respuesta.

— ¿Sabes? Estuve pensando, si yo te llamo por tu nombre, tú también puedes llamarme por el mío si tú quieres — comentó Kanna.

— Entiendo, Kanna — dijo Rina — Cuida mucho a Rakki, no queremos que los de dirección te lo confisquen — bromeó la chica de cabello castaño mientras se retiraba, entonces, mientras nadie la veía, en un pasillo de la escuela, esta sacó dos cartas de su bolsillo, mirándolas fijamente — Ace y Mooonlight, ellas dos son muy fuertes de por sí, pero dos cartas no serán suficiente — comentó para sí misma.

En la tarde, los estudiantes de la escuela secundaria Keisho volvían a sus casas, esta vez, Kanna tomó un camino más corto para llegar a su hogar, pues no quería repetir lo de ayer y dejar que Rakki abriera un portal en medio de la calle. Una vez en casa, Kanna saludó a su madre, después de comer, subió a su habitación, donde Rakki salió por fin de su mochila.

— ¡Por fin-raki! — dijo este de impaciente como siempre — ¡Toma tu monedero, Kanna! — prácticamente se lo ordenó...

— Yo no te puedo dar órdenes, ¿pero tú a mí sí? — preguntó Kanna estirándole las orejas al conejo.

— ¡Ouch! ¡¿Y eso por qué fue-raki?! — preguntó molesto.

— ¡Por haberte comido mi almuerzo! — dijo Kanna de brazos cruzados.

— Deberías agradecerme — dijo Rakki — Gracias a eso, pudiste almorzar con la presidenta de tu país o lo que sea-raki — comentó obstinado.

— Rina no es la presidenta del país, Rakki — corrigió Kanna riendo un poco — Es la presidenta del consejo estudiantil — dijo.

— Como sea, ¿Nos vamos-raki? — preguntó el conejo con sombrero de mago.

— Muy bien — dijo Kanna tomando su monedero color magenta y el NeoCure Commune.

Rakki abrió un portal en la habitación de Kanna, estos dos entraron, esperando no tardar mucho tiempo esta vez.

Del otro lado del portal, Kanna abrió los ojos, estaban en una calle cerca de un montón de árboles de sakuras, a lo lejos se veía una escuela.

— Así que este es el mundo de Smile — dijo Rakki mirando el "All Worlds Map", poco después, el cansancio llegó al hada conejo, por lo que este cayó por la fatiga.

Kanna lo atrapó en sus manos como siempre hacía, ya se había acostumbrado a esto.

— ¿Y ahora que eres? ¿Una secretaria-raki? — preguntó cansado por el viaje.

— Me parece más bien que soy una bibliotecaria — respondió Kanna mirando su ropa, una camisa de botones color magenta, corbata, lentes (aunque sin aumento) y una identificación que leía "Biblioteca de ciudad Nanairogaoka".

— Bien, busquemos la biblioteca-raki — dijo Rakki.

El estómago de este gruñó fuertemente.

— Primero busquemos un lugar donde puedas comer algo — dijo Kanna caminando con el conejo hada en manos.

Ambos visitantes se adentraron a la ciudad de Nanairogaoka, una ciudad tranquila, como el resto de las ciudades a las que habían ido, no pasó mucho tiempo hasta que Kanna se encontró con un restaurante llamado "Akane", el esquicito olor de la comida de adentro fue demasiado para Kanna, por lo que no dudó en entrar al local.

— Rakki, recuerda que tienes que fingir ser un conejo de peluche, ¿Ok? — susurró Kanna para que el conejo con sombrero de mago no hiciera un escándalo en el restaurante.

— Si soy un peluche entonces deja de hablar conmigo, la gente pensará que estás loca-raki — respondió el conejo un tanto grosero.

— Que bien huele — dijo Kanna entrando al restaurante y tomando asiento, era un restaurante de okonomiyaki (una masa con varios ingredientes cocinados a la plancha).

"Okonomiyaki, que curioso, es justo lo que le quería cocinar a Rakki anoche" recordó Kanna en sus pensamientos.

Kanna vio que una chica de cabello naranja estaba detrás de la parrilla, con dos espatulas en las manos, atendiendo a los clientes.

— Disculpa — dijo Kanna.

— Oh, bienvenida — saludó la chica de cabello naranja, hablaba con cierto "dialecto kansai".

— ¿Tu eres la que atiende aquí? — preguntó extrañada, pues la chica se veía no mayor que ella.

— Así es, cuido el restaurante mientras mi papá se recupera de su lesión en la espalda — afirmó la chica de pelo naranja — Soy Hino Akane — se presentó — ¿Puedo tomar tu orden? — preguntó sonriendo.

— Quiero dos okonomiyaki para llevar, por favor — dijo Kanna sonriendo.

— ¡Enseguida! — respondió Akane.

No pasaron ni 5 minutos para cuando la orden de Kanna ya estaba lista, eso había sido un buen servicio.

— Listo — dijo Akane entregando la orden a la chica de cabello negro — Esta es nuestra especialidad, okonomiyaki estilo Osaka — con eso, Kanna tomó su orden y pagó lo que debía.

Afuera del restaurante, Kanna se lamentaba de sus recientes decisiones financieras, en otras palabras, ya no tenía casi dinero...

La chica caminó hasta encontrar un parque en el cual ella y Rakki pudieran comer en tranquilidad sin llamar mucho la atención, entonces ambos se sentaron en una banca debajo de la sombra de un árbol.

— Necesito encontrar un trabajo en vacaciones de verano... — dijo Kanna mirando su casi vacío monedero, entonces pudo ver adentro algo que llamó su atención — ¿Huh? — la chica de pelo negro tomó el extraño broche en sus manos, se trataba de un Cure Decor, sin embargo ella no lo sabía en ese momento.

— ¿Encontraste algo útil-raki? — preguntó Rakki.

— Esta cosa, es como un broche rosa en forma de moño — Kanna le mostró el objeto a Rakki — Se parece mucho a un Cure Lovies del mundo de Doki Doki — comentó ella con el broche en sus manos, para luego volverlo a guardar en su monedero.

— Puede que tenga una función similar-raki — pensó Rakki — Transformar a una chica en una Pretty Cure, la Pretty Cure que debía despertar en este mundo-raki — dijo el hada conejo.

— ¿Crees que debamos volver al restaurante de Akane? — preguntó Kanna.

— ¿Por qué lo dices-raki? — preguntó el conejo empezando a comer su okonomiyaki — ¿Quieres comprar algo más ahí-raki? — ahora mismo el conejo hada solo pensaba en comida...

— No es eso — dijo Kanna — Puede que Akane sea la chica que debía convertirse en la Pretty Cure de este mundo — explicó su teoría.

— Lo dudo-raki — dijo este comiendo — Esa chica tenía cabello naranja y blusa naranja-raki — comentó.

— ¿Y? — Kanna no entendía el punto de Rakki.

— Y, que las Pretty Cure de otros mundos que hemos ayudado, todas tenían ropa rosa y cabello rosa, convirtiéndose en Cures rosas, seguramente la Pretty Cure de este mundo tambien es una chica de cabello rosa-raki — sonaba tondo, pero Rakki tenía un buen punto.

— Pues, para empezar, el cabello de Mana y Tsubomi era color magenta, no rosa — corrigió Kanna igualmente comiendo su okonimiyaki.

— Ya vas a empezar con eso-raki — dijo el conejo con sombrero de mago — ¿Por qué te molesta tanto que se confunda el color rosa con el color magenta? — preguntó este.

Kanna miró a la nada, con cara seria, recordando.

— Mi papá era un fotógrafo muy reconocido, al menos en la ciudad — dijo melancólica, Rakki bajó la mirada, sintiendo que había dicho algo malo — Él había ganado varios premios por sus fotos, incluso había viajado al extranjero muchas veces — recordó Kanna — Recuerdo que él no podía evitar corregir a la gente cuando confundía el color magenta con el rosa en sus fotos — dijo Kanna riendo un poco triste — Decía cosas como "No es rosa, es ma-gen-ta"— comentó sonriendo levemente — Supongo que puedes decir que... Yo heredé eso de él — agregó mirando a Rakki.

Rakki no supo que responder, se sentía culpable de haberle preguntado algo así a Kanna en ese tono de voz que él acostumbraba.

— Lo siento mucho, Kanna — dijo Rakki con las orejas caídas.

— Gracias, Rakki — dijo ella con una ligera sonrisa, entonces se puso de pie — Bien, entonces, ya sé que debemos hacer en este mundo — comentó — Solo debemos ir a la biblioteca de la ciudad, cuando encuentre a la chica que debía convertirse en una Pretty Cure, le entregaré esto — mostrando el Cure Decor — Andando, glotón — dijo riendo.

Kanna y Rakki caminaron por la ciudad en busca de la biblioteca, usando el "All Wolrds Map" para ubicarse mejor, al poco tiempo dieron con su destino, la biblioteca de Nanairogaoka.

La chica de cabello negro entró fácilmente al edificio, tenía una identificación bastante convincente después de todo, era un edificio bastante acogedor, agradable y muy tranquilo, salvo por un pequeño ruido que perturbaba el silencio de la biblioteca, se escuchaba como si alguien quisiera salir de un lugar, eso llamó la atención de Kanna, quien fue a investigar de que se trataba, llegando a una estantería, un libro en lo alto se estaba moviendo por sí solo, como queriendo salir de la estantería.

"¿Ese libro se está moviendo solo?" se preguntó Kanna en sus pensamientos, no quería hacer ruido en la biblioteca.

Entonces Kanna se puso de puntitas para alcanzar el libro, muy apenas lo consiguió mover, pero eso fue más que suficiente para hacer que el libro se liberara solo, cayendo al piso.

El libro era de color rosa, pero estaba envuelto en una cinta negra, como para que nadie lo pudiera abrir, o más bien, para que nadie pudiera abrirlo desde dentro, eso llamó la atención de Kanna.

— Debería... — dudó la chica de pelo negro.

— Cuidado, podría ser un monstruo o algo-raki — dijo Rakki susurando.

Kanna quitó lentamente la cinta del libro, este se abrió fuertemente, dejando salir una pequeña hada que estaba atrapada en él, asustando a Kanna y a Rakki.

— ¡AHH! — gritó Kanna cayendo de espalda al piso, haciendo mucho ruido, sobretodo porque todos en la biblioteca estaban tranquilamente en silencio.

— ¡Gracias por salvar a Candy-curu! — dijo el hada que había salido del libro, una pequeña hada blanca con orejas amarillas, parecía una especie de oveja.

— ¡SHHH! — hizo Kanna — Cállate, estamos en una biblioteca — dijo Kanna tomando a Candy en sus brazos y tapando su boca.

— ¡Señorita! — dijo el encargado de la biblioteca — Tendré que pedirle amablemente que se vaya — la regañó por perturbar la paz y la tranquilidad del lugar.

Afuera del edificio, Kanna aún sostenía a Candy entre brazos.

— ¡Gracias por salvar a Candy-curu! — dijo esta agradecida, hablando en tercera persona.

— Por nada, Candy — dijo Kanna aún asustada por el alboroto que habían armado en la biblioteca.

— ¿Quién eres-raki? — preguntó el conejo con sombrero de mago.

— Candy es un hada del Reino de los Libros, Merchenland-curu — dijo esta.

— ¿Reino de los Libros? — repitió Kanna.

Kanna y Rakki se miraron fijamente, dejando un poco de lado a Candy.

— ¿Será que ella puede ayudarnos con nuestra misión en este mundo-raki? — preguntó el hada conejo.

— Posiblemente — dijo Kanna.

— ¡Oh! ¡No puedo perder el tiempo-curu! — dijo Candy apresurándose y dejando hablando a los otros dos.

— Muéstrale el broche que encontraste en tu monedero-raki — sugirió el conejo con sombrero de mago.

— ¡Oh! ¡Es verdad! — dijo Kanna buscando el Cure Decor — Candy, ¿De casualidad tú sabes... — cuando volteó, el hada blanca con orejas amarillas se había ido.

— Se fue... — dijo Kanna con una gota de sudor en la frente.

— Sí, eso creo-raki... — dijo Rakki con una cara chistosa.

— Aunque dejó aquí el libro del que salió — mencionó Kanna con el libro rosa en manos.

Mientras tanto, en "El Mundo Vacío", una figura salía de las sombras, se trataba de uno de "Las 3 Calamidades" que le servían a una mujer con vestido blanco y cabello dorado.

— Mi señora, debo informarle que Cure Union ya se encuentra visitando el Mundo de Smile — avisó Mamiko, el hombre con traje de mayordomo de color dorado.

— Smile... — repitió con rencor la mujer de vestido blanco.

— Dado a que, Rakiko y Sakiko no han vuelto aún de la misión que les ha encomendado, quisiera preguntar si desea que yo visite personalmente el mundo de Smile para detener a Cure — sin embargo, el hombre fue interrumpido por ella.

— ¡No! — gritó la mujer para luego suspirar profundamente e intentar calmarse — Ustedes 3 tienen prohibido visitar el mundo de Smile de nuevo — dijo ella seriamente.

Mamiko no dijo una palabra, solo escuchaba a su señora.

— Mamiko, tú y yo sabemos mejor que nadie que las Smile Pretty Cure no eran más que unas egoístas que solo se preocupaban por ellas mismas, es por eso que insisto en que ninguno de ustedes 3 visite nuevamente ese mundo, no es digno de su presencia — señaló la mujer de cabello dorado con un rencor profundo hacia las Smile en particular — Y es por eso mismo que deshacerme de ellas, evitando que existieran, fue tan gratificante — dijo con una sonrisa malvada en su rostro.

— Entiendo, mi señora, ¿Pero, respecto a Cure Union? — reiteró su pregunta el mayordomo de traje dorado.

— Ese mundo será su tumba — respondió fríamente la mujer — Pierrot y sus lacayos se encargarán de ella ahí — aseguró — Ahora todos los mundos piensan que Cure Union es "la Destructora de Mundos", no será diferente en el asqueroso mundo de Smile — dijo ella con odio.

De vuelta en el mundo de Smile, Candy saltaba por los tejados de las casas, preocupada.

— ¡Pretty Cure! ¡¿Dónde están-curu?! — dijo el hada con una mirada de angustia en su rostro, entonces se detuvo en seco al ver en el cielo a Wolfrun — ¡El lobo ya está aquí-curu! — Candy estaba asustada.

Wolfrun sobrevolaba la ciudad, sonriendo.

— ¡Pretty Cure! ¡¿Dónde están-curu?! — preguntó Candy desesperada buscando por los tejados de la ciudad, ella no podía volar, a diferencia de otras hadas, por lo que solo iba saltando — ¡El lobo! ¡El lobo ya está aquí-curu! — gritó Candy, pero sin saberlo, había llegado al final de la cuadra, se acabaron los techos, por lo que inevitablemente empezó a caer.

Afortunadamente, Kanna estaba ahí para atraparla sana y salva.

— Candy — dijo Kanna feliz de haberla encontrado.

— ¡Curu! — gritó Candy desesperada queriendo que Kanna la soltara.

— ¡Espera un poco! — la chica de cabello negro intentó calmarla — ¿De que tienes tanto miedo? — preguntó.

— ¡El lobo ya viene! — dijo Candy — ¡En el cielo-curu! — gritó apuntando arriba.

— ¿Un lobo en el cielo? — repitió Kanna mirando arriba.

Efectivamente, Candy decía la verdad, había un lobo con forma humanoide en el cielo.

— Es hora de empezar con esta ciudad — dijo Wolfrun desde el cielo — ¡Démosle a este mundo el peor final posible! — entonces el lobo sacó un libro con las páginas en blanco — ¡Será cubierto por un Bad End! ¡Que sus futuros blancos sean pintados de negro! — gritó exprimiendo tinta negra sobre las páginas del libro.

El ambiente cambió, rodeado por una atmosfera morada, con una enorme luna llena en el cielo.

— ¿Qué está pasando? — preguntó Kanna.

— ¡Wolfrun está llevando al mundo hacia un Bad End-curu! — dijo Candy entrando en pánico.

— ¿Bad End-raki? — preguntó Rakki.

— ¡Es un futuro terrible para todos-curu! — respondió Candy.

— ¿Futuro terrible? — preguntó la chica de cabello negro.

Todas las personas en la calle del distrito comercial yacían en el piso, de rodillas, todos se lamentaban.

— Es inútil continuar — dijo un señor.

— Todo se acabó... — se lamentó una chica de cabello rosa oscuro sujetado en dos moños enrollados sujetados por lazos amarillos.

— ¡Oh no! ¡La Bad Energy está saliendo de todos-curu! — dijo Candy preocupada.

— ¡La Bad Energy de todos estos humanos resucitará al emperador del mal, Pierrot-sama! — dijo Wolfrun recolectando la energía en su libro.

— ¡Ya basta-curu! — gritó Candy, llamando la atención del lobo, quien bajó para confrontarla.

— ¿Huh? ¿Viniste a este mundo también, hadita? — preguntó intimidante el lobo.

— ¡Wolfrun detente-curu! — pidió Candy saltando de los brazos de Kanna.

— ¡El futuro es un Bad End! Los esfuerzos de todos no valen nada en realidad — se burló este.

— Basta, no digas más — dijo Kanna en tono confiado cerrando los ojos y con una sonrisa — Solo tengo que derrotar a ese lobo y mi misión en este mundo estará completa, ¿cierto? — preguntó presumiendo un poco.

— ¡Hagámoslo cuanto antes-raki! — dijo el conejo con sombrero de mago, sacando la Cure Card de Union.

— ¡Pretty Cure! ¡Unite Memories! — gritó Kanna, iniciando su transformación.

— ¡¿Qué?! — preguntó Wolfrun cerrando los ojos, la luz de la transformación de Kanna era demasiado brillante.

— ¡Los lazos nos unen! ¡Nos guía su luz! — dijo Cure Union.

— ¡Encontré a una Pretty Cure-curu! — dijo Candy saltando de alegría.

— Y no es cualquier Pretty Cure-raki — dijo Rakki presumiendo a su compañera.

— ¡Cure Union! — se presentó ella, de inmediato la expresión en la cara de Candy cambió totalmente — ¡Una nueva era comenzó, sé que tú lo — sin embargo, Candy detuvo a Union pegándose en su rostro — ¡Gahh! ¡Candy, quítate! — se quejó Union, apartando al hada, tomándola en sus manos.

— ¡Cure Union, vete de este mundo-curu! — pidió Candy incluso más asustada que cuando vio a Wolfrun aparecer en el cielo.

— ¡¿Q-Qué?! — preguntó Union — Candy, ¿qué pasa? Yo estoy de tu lado — dijo la Pretty Cure morada, no entendía nada.

— ¡No dejaré que lleves este mundo a un Bad End-curu! — dijo Candy asustada.

— ¡¿Ehh?! — reaccionó Cure Union, poco después entendía lo que sucedía, el rumor se había esparcido también a ese mundo — B-Bueno... Al menos no me llamó "Destructora de Mundos..." — dijo Union rodando los ojos.

— ¡¿DESTRUCTORA-CURU?! — gritó Candy, casi se desmaya del susto.

— ¡Union, la asustas! — gritó Rakki golpeando a Union en la frente.

— ¡Curu! — gritó Candy para luego zafarse de las manos de Cure Union, el hada blanca con orejas amarillas corrió despavorida a esconderse entre las casas del distrito comercial.

Cure Union y Rakki vieron correr a la pobre de Candy...

— Creo que le causé una muy mala primera impresión — dijo Union desviando la mirada.

— ¿¡Eso crees!? ¿Qué te hace pensarlo-raki? — preguntó Rakki sarcásticamente.

— ¡Es por culpa de ese tonto rumor de que yo soy "la Destructora de Mundos"! — se excusó Cure Union.

— ¡Ejem! — dijo Wolfrun — ¡Destructora de Mundos o no, todas las Pretty Cure son enemigas juradas del gran Pierrot-sama! — gritó el lobo para luego arremeter contra Union.

Wolfrun atacó usando sus garras, Cure Union había ganado algo de experiencia de sus anteriores batallas, por lo que esquivar ataques le era mucho más sencillo ahora, entonces Cure Union tomó a Wolfrun del brazo y lo lanzó lejos, sin embargo, el lobo aterrizó de pie, dándole la espalda a Union, este se volteó y la pateó lejos.

— ¡Union! — gritó Rakki volando hasta donde estaba ella — Cambia de cartas-raki — dijo el conejo sacando la carta de Cure Blossom de su sombrero.

— ¡Sí! — dijo Union, deslizando la Cure Card de Blossom en el NeoCure Commune.

"¡Open my heart! ¡Blossom!" anunció el NeoCure Commune, transformando a Cure Union en Cure Blossom, aunque solo en su traje, pues su cabello seguía igual, blanco y largo, "Watashi, kanninbukuro no o ga kiremashita!", dijo el teléfono.

— ¡¿Cambió de forma?! — dijo Wolfrun sorprendido.

Ahora como Cure Blossom Union (vaya nombre), la Pretty Cure se lanzó contra el lobo con una patada doble, lanzándolo lejos.

— ¡Maldición! ¡Nadie me dijo sobre esto! — entonces Wolfrun se teletransportó detrás de Cure Blossom Union para atacarla por sorpresa.

El lobo atacó con ambas garras a la Pretty Cure, esta lo bloqueó tomando a Wolfrun de las muñecas, resistiendo, pues el lobo tenía mucha fuerza, Wolfrun terminó por lanzar a Cure Blossom Union hacia un estante de un pequeño puesto de libros que había por ahí.

Al impactar, varios libros cayeron sobre Cure Blossom Union, esta se levantó, enojada.

— ¡Acabaré contigo con mi nuevo movimiento! — dijo la Pretty Cure — ¡Blossom Oshiri Punch! — Cure Blossom Union se puso de espaldas, saltó y golpeó a Wolfrun con... ¿Su trasero?

Wolfrun bloqueó el ataque con su antebrazo, entonces tomó a la Pretty Cure de su pierna y la volvió a lanzar contra el mismo puesto de libros, ahora no solo varios libros cayeron encima de ella, sino la estantería completa.

— ¡Maldición, Blossom! ¡Tus ataques no sirven! — gritó la Pretty Cure haciendo un puchero.

(En algún lugar, en el mundo de Heartcatch, Tsubomi estornudó).

Entonces Cure Blossom Union tomó el estante que estaba encima de ella y lo lanzó hacia Wolfrun, este lo cortó en dos con sus garras, sin embargo, detrás del estante estaba esperándolo la Pretty Cure, lista para atacar.

Wolfrun estaba desprevenido, sin tiempo de reaccionar, el lobo fue golpeado por el próximo ataque de la Pretty Cure.

— ¡Blossom Impact! — gritó Cure Blossom Union, golpeando al lobo en el rostro y lanzándolo lejos al cielo.

Wolfrun dejó de girar, se estabilizó, empezando a volar, furioso gritó.

— ¡Nos volveremos a ver, Cure Union! — dijo el lobo con la mano en el rostro, lo habían golpeado fuerte.

Wolfrun desapareció, el efecto que cubría a la ciudad se desvaneció junto con él, la luna llena en el cielo cambió a un hermoso sol y las personas se recuperaban del ataque.

Kanna deshizo su transformación, mirando el desastre que había causado su pelea con Wolfrun.

— ¡Puff! — hizo Kanna, mirando al puesto de libros.

— Quizá no seas "la Destructora de Mundos", pero vaya que sí eres la destructora de libros-raki — comentó el conejo con sombrero de mago.

— ¡Ya cállate! — dijo Kanna tomando a Rakki en sus manos — Debemos buscar a Candy, rápido — recordó ella.

Continuará...