Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen, son propiedad de Masami Kurumada y toda su banda.


Extra.


La noche era caliente, como la mayoría de las noches de verano; sin una brisa aminorando las temperaturas, todo lo que se tenía era el calor y el cansancio por un largo y productivo día de trabajo sin remuneración.

Era el segundo momento más esperado por todos en el restaurante. Las puertas ya se habían cerrado, la mayoría de las luces estaban apagadas y en el lugar sólo quedaba un único cliente, disfrutando, por fin, de su delicioso pastitso. Los empleados, todos con los uniformes a medio poner o sin ellos, rodeaban una mesa cerca del cliente final, bromeando entre ellos, con una copa del vino que Dysnomia finalmente había logrado abrir sin golpear a alguien, esperando por los resultados, porque esa noche, a esa hora, finalmente se sabría quién había ganado su competencia de popularidad.

—... cómo te decía, Erda, cuando yo gane la competencia seré coronado como el rey…

—Ja, no vas a estar ni en el último lugar…

—¿Así? ¡Apuesto a que incluso Regulus y el extraño hermano de Deathmask estarán en puestos más altos que tú y eso que nunca salieron de la cocina hasta ahora!

Erda se mantuvo en silencio mientras veía a Kanon y Afrodita discutir frente a ella. Sin que ninguno de los dos se diera cuenta, se alejó lentamente de ellos y se acercó a sus amigas, que hablaban con Mariya, Celintha, Lithos y Dysnomia sobre su trabajo del día.

—Tengo una pregunta y necesito que me respondan con honestidad —dijo, interrumpiendo la explicación de Katya sobre cómo Deathmask, Milo y Aioria lograron salir impunes de la furia de Saga cuando uno de estos le arrojó una extraña masa apenas el mayor abrió la puerta de la cocina—, ¿por qué nos seguimos juntando con estos sujetos?

—Porque son divertidos —respondió Kyoko, viendo que a la discusión se habían sumado Milo y Aioria, ahora concentrados sobre qué era más dificil, si trabajar en la cocina o en el servicio—. Y bastante atractivos, la pregunta aquí es, ¿por qué no nos comenzamos a juntar con ellos desde antes?

—Este podría ser el momento adecuado para decir que me sorprende verlas aquí, ellos no aceptan que cualquier chica se una a su grupo, por algo ninguno tiene muchas amistades femeninas —dijo Celintha, obteniendo que Lithos asintiera.

—¿Significa que somos sus primeras amigas? —Kyoko miró al grupo de chicos con una mirada ilusionada.

Ignorando el "no exactamente" de Lithos, la joven se acercó a ellos y pasó los brazos por los hombros de Shura y Mū, para decirles lo adorables que eran, avergonzando a ambos jóvenes.

Después de un par de minutos de espera, y de que el último cliente le contara a Aldebarán como su pastitso le había recordado a las tardes en casa de su abuela después de un largo día de escuela, entre lágrimas y un infinito agradecimiento, el contador que había llevado Shaka salió de la oficina del jefe, le deseó buenas noches a todos y se retiró, murmurando todo lo que se compraría con el dinero que había ganado ese día.

—¿Cuánto le pagaste? —le preguntó Saga a Shaka, que estaba leyendo lo que le había dado el contador, los resultados.

—Lo suficiente —Shaka alzó lo hombros, y antes de que alguien le preguntara cuánto era "lo suficiente", continuó— Aquí estan los resultados, ¿seguros que quieren continuar?

—Deja el preludio y continúa, dile a todos el maravilloso mesero que soy —dijo Afrodita con aire pomposo, el vino comenzaba a hacer efecto en el botánico.

—De acuerdo, en primer lugar hay un empate —leyó Shaka, alzando una ceja—, entre Kanon y Afrodita…

Los mencionados se sorprendieron, su empate no evitó que se abrazaran y festejaran frente a todo el equipo de meseros, al menos hasta que escucharon la voz de Shaka, con algo que sólo ellos y el resto de sus amigos, que lo conocían desde la niñez, pudieron identificar como un tinte de burla, pero que para los demás sonó normal.

—... en el último lugar.

—¡¿Qué?! ¡Pero dijiste que en primer lugar! —reclamaron.

—Sí, en primer lugar, lo primero que iba a decir, es que hubo un empate, entre ustedes, en el último lugar.

—¡Ja! ¡Buena esa! —Deathmask empezó a reir, junto con Erda y Celintha, principalmente de Afrodita; Saga y Milo hicieron lo suyo al sonreír con burla mientras miraban a Kanon— Continúa, Shaka, no dejes que sus miradas asesinas te intimiden.

—En sexto lugar está Dysnomia —Shaka carraspeó al ver a Dysnomia sonreir feliz—, al parecer los clientes temían que los golpearas con una botella…

—Me disculpé por eso, y no fue mi culpa por completo —se defendió ella.

—Es cierto, ese tipo puso su cara en medio —la defendió también Milo, abrazando de inmediato a la chica para celebrar su victoria sobre Kanon y Afrodita.

—Después están Lithos, Celintha y Mariya —todos aplaudieron ante la mención de las jóvenes, ellas, por su parte, lucieron más sorprendidas que cuando Kanon y Afrodita escucharon que estaban en último lugar.

—¡¿Qué?! ¡¿Y ellas por qué?! —Y hablando de ellos, no tardaron en quejarse de inmediato.

—Fueron eficientes —Shaka alzó los hombros—. En cuarto lugar está Mū.

—No creí que me meterían —murmuró Mū, ligeramente sonrojado—, y que tendría un lugar tan alto.

—En tercer lugar está Erda, porque fue quien atendió más mesas.

Erda chocó su copa de vino con Aioros y Aldebarán, festejando, a pesar de que al principio estaba en contra de la competencia.

—Y en primer lugar —Aioria, Shura y Regulus comenzaron a golpear la mesa, llenando de expectativa a todos los presentes, mientras Kyoko tomaba la mano de Camus, quien sólo rodó los ojos, como si fueran finalistas de un concurso de belleza—... Camus.

El mencionado entrecerró los ojos, y dijo, junto con Afrodita y Kanon:

—Estas jugando con nosotros.

—No, es verdad —Shaka mostró la hoja con los resultados, para darle validez a los mismos—. En primer lugar está Camus; segundo, Kyoko; tercero, Erda; cuarto, Mū…

—Sí, ya aceptenlo, Camus sólo ganó porque se ve antojable con ese uniforme —dijo de inmediato Katya, logrando que algunos rieran ante el pícaro comentario, mientras Mariya intentaba quitarle a su hermana su tercera copa de vino.

—Estoy de acuerdo —concordaron Milo y Shoko, ambos chocando sus copas cuando escucharon al otro.

—Pues yo no y exijo un reconteo —reclamó Afrodita.

—Su lado más narcisista sale cuando bebe de más —murmuró Aioros con una sonrisa, la última vez que había visto a Afrodita así había sido cuando cuatro de sus amigos, incluyendo al botánico, decidieron comenzar a vivir juntos.

—Pues si quieres un reconteo tendrás que hacerlo tú mismo, yo tengo sueño —Shura señaló la oficina de su tío—Shaka, ¿me llevas?

—De acuerdo.

—¡¿Qué?! Shaka, soy tu hermano de otra madre, llévame a mí también —dijo de inmediato Aioria.

—Bueno.

—¡Shaka! ¡Yo seré el padrino de tus pequeños rubios! ¡Llévame también! —Milo se tomó el resto de su vino de un trago y después sostuvo a Shoko de los hombros— Y a Shoko —continuó, recibiendo un codazo de la mencionada—... Y a Kyoko.

—Si no tengo opción...

—¿También puedo ir yo? —preguntó Aioros, no queriendo caminar de vuelta a casa.

—Claro.

Cuando Shaka se levantó, preparado para irse, la mayoría de sus amigos comenzaron a seguirlo, esperando poder obtener un viaje gratis de regreso a casa, a excepción de Afrodita y Kanon, quiénes se encaminaron a la oficina de Izo, dispuestos a hacer su reconteo, así les tomara toda la noche.


Comentarios:

¡Gracias por leer!

Cómo dije antes, hace mucho, mucho, tiempo, tengo un anuncio importante, o una petición más bien.

Esta es la historia 95 dentro de este universo alterno que inició hace más o menos cinco años (en diciembre se cumplen los cinco). Naturalmente, tengo planeado algo especial para cuándo se llegue a la entrada 100; pero antes, durante lo que quede de este mes y noviembre, que es el tiempo que me tomará publicar las cuatro historias restantes, me gustaría que todos aquellos que han pasado por este largo viaje conmigo, ya sea durante estos cinco años o en un par de meses, me contaran sus impresiones, lo que les gusta y lo que no, y sus sugerencias.

Durante diciembre me gustaría complacer un poco más al público lector. Así que durante el resto de este mes y noviembre leeré sus ideas, si las hay, y haré pequeñas historias basadas en ellas, porque al cliente lo que pida. Ahora, si alguien me dice "más que pedirte que escribas x cosa, yo escribí algo", con todo gusto es recibido y publicado, no necesariamente en este perfil y siempre y cuando se adecue con las reglas establecidas en el Universo Banal.

Esto es como un tipo de actividad para celebrar la historia número 100 del universo, algo pequeño pero significativo. A pesar de escribir las historias, me gusta pensar que no sólo son mías, también son del público que las lee, que se toma su tiempo explorar conmigo este universo, y que le gusta Saint Seiya. Al final del día, como fan de la franquicia, sólo me gusta darle algo de amor a estos hermosos personajes, y ponerlos en situaciones poco comunes.

De nuevo, y cómo siempre, gracias por leer!