Capítulo 22: Consecuencias.

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Sin más preámbulo los equipos partieron en dirección al feudal, en donde después de unos días sus misiones fueron asignadas.

Deidara iba notablemente molesto, sus dos compañeros parecían llevarse bien, aunque el de cabello bermellón eran notablemente más parlanchín y el pelirrojo se limitada a contestar con educación sin expresión alguna en su rostro.

-Yahiko san- exprespo el rubio- ¿Por qué cambiaron los grupos en último momento? -preguntó, tenía varios días queriendo hacerlo, pero su frustración se lo impedía. Evitar exaltarse o sonar molesto era prioridad.

-No sé respondió sonriendo mientras se rascaba la cabeza- discúlpame.

-Supongo que- intervino Gaara- querían mantenerse unidos, ningún ninja de Konoha viaja solo, probablemente eso buscaban.

-Quizá- respondió Yahiko- la verdad a mí también me tomó por sorpresa.

"Si, como no, lo único que quería era separarme de ella" pensó apretando los dientes – Yahiko san ¿no es usted uno de los lideres de la aldea?- cuestiono de nuevo, él asintió- entonces… ¿Por qué dejo que pasaran sobre su autoridad?, yo lo vi junto a Nagato san hacer las listas, debió defender su trabajo- Yahiko miró a Deidara sorprendido- es como si el trabajo de ustedes no hubiera servido de nada para ellos, ¿no cree que tanto Itachi Uchiha como ese tal Neji Hyuga se están tomando atribuciones que no les corresponden?.

-Quizá eso parezca, pero confió en sus decisiones. Itachi ha trabajado durante años en la policía militar de Konoha, es un tipo estratega y Neji Hyuga ha viajado con el desde hace un tiempo. Tambien es muy inteligente en ese aspecto. Cuando llegaron a la aldea fue un respiro para nosotros, ayudaron a organizar todo, de hecho, le ofrecimos a Itachi que fuera nuestro líder temporal, pero no quiso, dijo que ese era nuestro trabajo, que contaríamos con él, pero que nosotros éramos la imagen de la aldea.

-Me parece una decisión acertada- respondió Gaara- al final, algún día se ira y serán ustedes quienes continúen levantando su hogar- Yahiko asintió.

-Por eso es que no me molesta, sé muy bien que Itachi lo hizo con la intención de maximizar nuestras habilidades- Deidara apretó los puños ante la impotencia. Estaba seguro que Neji Hyuga estaba detrás de todo, recordó su mirada desafiante, era como la de un perro guardián. Su estrategia no había funcionado. Sin más continuaron hacia la aldea de la cascada en donde debían capturar a unos ladrones que hace unos días habían asaltado los almacenes. Después ayudarían a eliminar unas piedras que bloqueaban el camino y rellenar con las mismas algunos hoyos. Yahiko por otro lado supervisaba todo y platicaba con los lideres tratando de formar una nueva alianza con ellos. Si todo resultaba bien, quizá podrían abrir un balneario en Amegakure.

Con Neji las cosas iban bien. Su trabajo era más sencillo. Trabajaban limpiando para después arar los campos de cultivos en un pequeño pueblo en las afueras del país del viento. El puño suave de Neji facilitaba las cosas, el viento direccionaba la basura y maleza hacia un solo punto, en donde Sasuke la incineraba

Shino casi se infarta cuando se enteró que debían exterminar una plaga de insectos que se comían los tomates de un granjero, por lo que pidió expresamente un tiempo necesario para lograr domesticarlos. Neji y Sasuke comenzaban a dudar de su salud mental, cuando lo escuchaban hablarles "vamos amigo, tú puedes, hazlo por el equipo" y se emocionaba cuando alguno de sus bautizados regresaba después de un tiempo. Ninguno de los dos comprendía como es que los distinguía.

Konan y Sasori habían sido contratados debido a sus dotes como artistas y habían conseguido ganar buen dinero haciendo presentaciones en diversas ferias. De alguna manera Sasori aprendió a formar figuras con papel y esto lo aplicó a sus marionetas. Las personas veían asombradas como decenas de animales hechos de papel volaban por todo el cielo y en la noche apagaban las luces dando un espectáculo de fuegos artificiales.

También se habían unido a una compañía de teatro, Sasori actuaba como titiritero y había creado una marioneta con la apariencia de un joven hombre muy atractivo el cual estaba enamorado de Konan, la protagonista que estaba enamorada de un joven de cabello castaño, quien era interpretado por Sasori, después de situaciones absurdas la chica caía sobre el castaño y accidentalmente se besaban, luego el otro hombre o más bien la marioneta los veía y comenzaban una pelea. Para Sasori fue algo difícil tener que interpretar a dos personajes al mismo tiempo y sobre todo besar a Konan, pero después de tres funciones diarias durante cuatro días, ya les parecía algo normal.

Por las noches Konan creaba grandes esculturas de papel, las cuales vendía a un módico precio y Sasori abrió un espectáculo de marionetas que actuaban un cuento para hacer que los niños se fueran a dormir temprano.

La misión de Shisui e Ino, era mucho más seria, espiaban a un asesino clase S, y a pesar de ello disfrutaban de los acontecimientos; en el primero pueblo eran hermanos- Nuestro padre es un pillin- respondió Shisui, cuando le preguntaron ¿Por qué su hermana era rubia y de ojos azules?

En el segundo pueblo eran dos extranjeros mudos. En ese momento eran dos recién casados. El hotel estaba lleno, así que para que nadie pensara mal de ellos, habían acordado decir aquella mentira. Ino se reía bastante de las ocurrencias de Shisui, ya que cada que alguien se le acercaba actuaba como un marido celoso que insultaba en un idioma desconocido, aunque en realidad no decía nada.

Mientras el equipo de Itachi estaba en la aldea de la nube. Las lluvias en esa región parecían no cesar. Su misión era escoltar a la Mizukage hasta Kirigakure. Antes Hinata se había sentido bastante incomoda con la chica de la roca, pues en todo el camino se la había pasado tratando de llamar la atención de Itachi, afortunadamente para ella este parecía más ausente que nunca. Itachi se sentía tan avergonzado de haber cedido a uno de sus arranques y recordar las últimas palabras que Neji le había dicho después de haber terminado con las reagrupaciones, no ayudaba- Itachi san, ¿no me había dicho que no debía mezclar los asuntos personales? - se quedó mudo ante su reclamo.

Pero ahora ambas mujeres parecían haber unido fuerzas ya que la coqueta Mizukage parecía estar muy entusiasmada con Itachi- No hay cosa que me haga más feliz que ver a un hombre joven y guapo, ustedes los Uchiha sí que son atractivos… me fascinan- se atrevió a decir sin pelos en la lengua. Itachi solo se quedó parado sin hacer nada, fingiendo que aquello no lo había puesto nervioso y que no se daba cuenta del como lo recorría con los ojos de pies a cabeza. Las dos kunoichis simplemente miraron con desdén a la mujer "Es demasiado joven para ti" pensaron las dos notando como sacaba cualquier pretexto para tocarlo- Ven a mi camarote esta noche, cenemos juntos, hay cosas que "deseo"- pronunció casi en su oído- discutir contigo- las chicas le desearon tortura de mil formas. Aquella había sido una invitación bastante sugerente, obvia y directa que cualquier hombre aceptaría encantado al ser ella una mujer extremadamente atractiva y terriblemente seductora. Aquello sacó de balance al Uchiha quien se sonrojo levemente y desvió la mirada disimuladamente hacia la esquina desde donde Hinata y la chica de la roca los espiaban. El colmo fue cuando colocó un dedo sobre los labios de él y lo bajo lentamente hasta jugar con el collar - la Mizugake quiere…que le cumplas un capricho- pronunció acercando lentamente sus labios- veremos si tu fuego y mi lava crean un nuevo elemento, te espero esta noche- terminó guiñándole un ojo. Itachi por su parte, no sabía que hacer, estaba preocupado, por un lado se sentía bastante incómodo tenerla encima todo el tiempo, pero al mismo tiempo era la líder de la niebla y sabía que tenía que tener tacto con ella, no podía arruinar las cosas, pero sin duda lo que más le afligía en ese momento es saber que Hinata había escuchado todo, ¿ahora como asistiría a la reunión sin que pensara que ciertas cosas pasaron entre ellos? Debía pensar en una forma de evitar que pensara eso, para Itachi era crucial hacerle saber que no existía ninguna mujer en su vida, si quería empezar a ganarse con sus acciones el amor de Hinata, pues a sus ojos que ella ya lo amara no era suficiente, no lo merecía, necesitaba sentir que la había enamorado. También porque odiaba la idea que ella llorara o se sintiera mal de nuevo, ya era suficiente haberla hecho sufrir de forma innecesaria.

Al anochecer la mujer esperó pacientemente a que el susodicho apareciera, la chica de la roca había decidido dejarlo por la paz y dormitada en su habitación, sin embargo, aunque Hinata ya se había mentalizado desde hace tiempo que él era libre, no podía dejar de pensar que quizá en ese momento Itachi y ella estaban…juntos. Suspiró resignada, deseaba tanto ir hacia allá e interrumpirlos, pero se había prometido madurar, deseaba tanto ir a detener a Itachi, pero también había dicho que lo dejaría ser feliz si ella era lo que quería.

Por fin después de un rato, Hinata salió de su habitación y se fue hacia al proa del barco, esa noche era fresca y por fin había dejado de llover, después de tres días podía quitarse al fin el impermeable. Necesitaba respirar y despejar su mente, que la brisa marina golpeara su rostro y le ayudara a deshacerse del dolor que sentía. Algo dentro de ella había cambiado, pues su "yo" anterior a estas alturas estuviera llorando su desdicha, quizá habría inventado algo para impedirlo, pero tal cual había sucedido, la vida le había enseñado a afrontar las situaciones con buena cara y ahora era lo suficientemente madura para entenderlo; debía ser feliz para ella misma, no para otro. Sonrió disfrutando de la estrellaba noche y del como las ondeantes olas mecían el barco. Vio la luna que se reflejaba en la inmensidad del mar, formando un camino de luz, ver ese paisaje le había hecho olvidar todo.

A varios metros detrás de ella, se abría una puerta. Itachi sabia por experiencia no había cosa más desesperante para una mujer que ser asquerosamente terco en cuanto a la misión. Hablar solo de la misión y nada más que eso, hacerle saber que toda su vida giraba en torno a la misión- ya está- dijo encaminándose hacia el camarote de la Mizukage cuando vio a una mujer a lo lejos, apoyada sobre el barandal de la proa, su azulado cabello ondeaba, parecía disfrutarlo, se miraba feliz, luego aprecio como la silueta de su cuerpo era iluminada por la luna, la chica movió la cabeza hacia un lado y sonrió. Itachi entró y salió de nuevo.

Hinata respiro profundamente y cerró los ojos por última vez antes de sentir que algo con un delicioso aroma de pronto cubría sus hombros- Es una noche fría Hinata chan, podrías resfriarte- escuchó la serenidad de esa voz abriendo los ojos abruptamente, luego giró su cabeza hacia la derecha y vio de nuevo esa sonrisa que tanto le gustaba y esa mirada tan dulce más cerca que nunca- es…está bien Itachi san, me gusta el frio- exclamó percibiendo cada vez más el aroma que la manta desprendía- puede que hoy no sientas nada, pero el día de mañana quizá sea diferente- respondió sin dejar de ver sus ojos. Hinata ya no era la niña de hace años y había comprendido a la perfección la preocupación de Neji- Mizugake sama, lo está esperando- dijo olvidando que sabia de aquello gracias a un trabajo de espionaje- ¿Quién? - respondió- de…de verdad ¿le preocupa que me enferme? -preguntó casi en susurro- por supuesto- miró sus labios y volvió a sus ojos. Hinata hizo lo mismo- más de lo que crees -terminó siendo el primero que comenzó a acercarse, luego Hinata dejó que el momento se apoderada de ella y terminaron dándose un par de besos cortos, se separaron y Hinata abrió los ojos avergonzada- l-lo…lo siento mucho, no fue mi intención- se disculpó recordando el desastre de la primera vez. Ante sus palabras Itachi sintió un golpe en el pecho, si hubiera sabido el impacto que causaron sus palabras, primero se hubiera cortado la lengua. Itachi se mantuvo en silencio observando a Hinata quien era incapaz de verle a los ojos. Ladeó la vista viendo como la puerta se abría de nuevo y vio a la Mizukage salir, probablemente los buscaba, pues era tarde y prácticamente la había dejado plantada. Centro de nuevo su atención cuando sintió como Hinata le dio la espalda, para ella el silencio de Itachi lo decía todo, quizá estaba molesto o decepcionado o quizá no, estaba muy confundida, tanto que de nuevo no supo si soñaba o estaba despierta. Intento dar el primer paso, pero sintió que se lo impedía, Itachi la tomó del antebrazo, ella volteó e Itachi la miro de nuevo "necesito más" pensó y después la haló repentinamente hacia él, Hinata no tuvo tiempo de hacer ni de decir nada, simplemente sentía la humedad de sus labios sobre los suyos, el como con su otro brazo rodeaba su cintura y la mano que la había jalado de pronto se posaba sobre su rostro dando pequeñas y delicadas caricias y su pecho estaba pegado al de él, ya estaba segura que aunque lo pareciera, no era un sueño porque sentía como la temperatura de su cuerpo se había disparado, dudo un momento pero al final paso sus brazos por detrás de la nuca de Itachi. La mizukage volteó en el preciso momento en el que a lo lejos parecían una pareja de recién casados. Vio con claridad lo apasionado de los besos, el cómo se acariciaban, parecía que en cualquier momento algo sucedería ahí mismo. Dio media vuelta bastante molesta y se fue.

Hinata e Itachi sintieron por primera vez un inmenso calor que les quemaba hasta la espina dorsal, necesitaban aire, pero ambos se negaban a abandonar sus labios. Estuvieron un buen tiempo así, hasta que Hinata no aguantó más y cedió. Al separarse se miraron fijamente notando la respiración agitada del otro. Hinata dio un paso hacia atrás y sin decir nada huyó del lugar. Itachi sonrió. El amor de Hinata era tan puro que a pesar del tiempo se mantenía, ni sus tonterías e indecisiones habían podido destruirlo, se sintió estúpido al pensar que ese caprichoso y pasajero amor infantil que tanto el como Shisui creyeron todo el tiempo no existía, Hinata siempre lo amo. Era increíble pensar que una niña tan pequeña supiera desde esa edad lo que quería y él a sus veintitantos o trataba de atinarle o dudaba a cada rato, desde esa perspectiva ¿Quién era el inmaduro entonces?

Suspiro y rio un poco a modo de burla, definitivamente no, aquella era la excusa más grande que pudo haber puesto, el había dejado de ver a Hinata como su hermanita desde ese beso, ya que un hermano no era capaz de besar a su hermana en primer lugar, tampoco podía hacerlo con esa intensidad y mucho menos sentirse excitado. Era la primera vez que lo experimentaba, que alguien era capaz de llevarlo a ese punto; era una reacción natural del cuerpo humano bastante hermosa si ocurría con la persona indicada que te hacía sentir más vivo que nunca. Itachi se quedó un poco más fuera, esperando que sus latidos y cuerpo regresaran a la normalidad y luego entro de nuevo al barco.

Hinata todavía no entendía lo que pasaba, pero de algo estaba segura; estaba viva y asustada de la reacción que tuvo su cuerpo, aunque disfrutaba de sus caricias, nunca había sentido la necesidad de querer llevar un beso al siguiente nivel, de sentirlo cerca y ser uno solo. Itachi, no, no era posible que Itachi la viese como a Sasuke después de semejante acontecimiento ¿o si? . Además ahora que su cerebro funcionaba con normalidad no había sido ella quien lo buscó,no era ella quien inicio los besos, él la había besado varias veces, el había sido el primero en buscarla.

Hinata se quitó la manta que llevaba encima para respirar esa dulce esencia; era su aroma, estaba impregnado en ella. Escuchó de pronto como tocaban la puerta, se levantó molesta pues habían interrumpido su momento, vio por la mirilla de la misma y su corazón comenzó a latir fuertemente, pero esta vez no fue por emoción, sino de angustia, era Itachi y seguramente iba a disculparse con ella. Aquel comportamiento era algo típico de él "lo siento Hinata chan, no debí haber hecho esto, lo siento, no debí confundirte, lo siento no quise hacerlo" ya lo podía escuchar.

Hinata se armó de valor para afrontar lo que se avecinaba, abrió la puerta tratando de mostrar su mejor cara, lo vio frente a ella tallando su nuca con la mano izquierda– Hinata chan…yo.

-Lo sé- interrumpió- está bien Itachi san, no tiene por qué disculparse, entiendo que fue un accidente.

Itachi pauso, la miro fijamente y de nuevo sintió otro golpe en el pecho; demonios, ¿tanto daño le había hecho? -No- dijo con rapidez- Antes que llegara, veías la noche y disfrutabas de ella, del mar, de la luna- Hinata lo miro confundida- mañana llegaremos a Kirigakure, por lo tanto esta será la última noche a bordo, yo- le desvió la mirada intentando disimular un poco su nerviosismo-abrígate, bueno quiero decir, si así lo deseas, claro y salgamos a disfrutar de la noche, el mar… y-pauso, cada vez era más difícil continuar y hablar con ella después de lo ocurrido, ahora existía cierta incomodidad que estaba seguro, después descubriría ¿que era?- juntos- terminó. Hinata enrojeció como tomate ante la proposición, llevó ambas manos a su pecho y comenzó a respirar con dificultad -Itachi san…que…que directo, es…es muy pronto, no creo que sea apropiado- exclamó. Ahora fue él quien la miró confundido- si no quieres, está bien, lo entiendo- aquello se sentía como un rechazo, sintió un hueco, pero en el fondo sabía que lo merecía- bue- buenas noches- concluyó con una voz más apagada- no- escucho con cierta desesperación, lo cual no comprendió. Tampoco era para tanto, era solo un simple paseo nocturno. La vio tomar rápidamente la manta para poder salir con él. Ninguno de los dos se miró, pero durante el trayecto a la proa sus manos chocaban, como si estuvieran buscándose y después de un rato se entrelazaron, sentaron en una banca a disfrutar del ruido de las olas en completo silencio. Hinata estaba muy feliz y a la vez ansiosa, lo miraba de vez en cuando notando un leve sonrojo en su cara, ¿Cuándo se lo pediría?, "esta muy nervioso" pensó – Hinata chan, es agradable esta noche tan tranquila, ¿verdad? - ella abrió de par en par, volteo la cabeza muy apenada dándose cuenta de lo mucho que había malinterpretado sus palabras.

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Continuara….

Bueno, aquí va el otro cap.

No le queda mucho, gracias a los que han apoyado el fic y siguen los capítulos.

Cuando termine este, haré otro pero ahora si será minific, con los personajes (de Naruto) que deseen o la circunstancia que deseen. Le daré prioridad a quien más comentó.

Chau.