¡Aparecí! Al final del cap les explico algunas cosas, pero bueno esta historia la termino sí o sí, no la voy a dejar así que no se preocupen.
ONE PIECE NI SUS PERSONAJES ME PERTENECEN, PERO LA HISTORIA SÍ
Sin más que decir ¡A leer!
THE REALLY IMPORTANT
CAP 14
UTOPÍA
No podía moverme, mi cuerpo se sentía demasiado agotado como para intentar un movimiento. La brisa me revolvía el cabello con fuerza, luces de diferentes colores resaltantes en la oscuridad pasaban con mucha velocidad a través de mis ojos como si estuviera en una especie de festival y viera todo a través de un carrusel. La posición en la que estaba amenazaba con traicionarme y llevarme hacía un lado contra el suelo, capaz no fuera tan malo como sonaba.
-No seas más inútil de lo que has sido últimamente, sujétate bien.
Sonreí, por supuesto que era la realidad, no tenía ni derecho a morir; aun así, aunque lo tuviera tampoco podía hacerlo. Las nubes aglutinadas en el cielo empezaron a soltar todo lo que retenían mediante una leve llovizna que pasó rápidamente a tempestad; me empapé en seguida, hacía frío, parecía uno de esos días en dónde todo parecía sumamente triste. Tristeza... De repente lo recordé en seguida y sentí como si una flecha me hubiese atravesado el pecho.
-Prométemelo...
Llevaba tanto tiempo con la mano cerrada que los dedos se habían entumecido, dolía un poco abrirla, pero fui despacio recobrando la movilidad acompañada de un molesto hormigueo. Cuando por fin pude extenderla por completo, el frasco cayó al suelo perdiendo su contenido entre las gotas incoloras. El sonido de la lluvia y los truenos opacaron el del vidrio destruyéndose, así es, estaba completamente destruido; por lo menos había logrado salvar a alguien con ello, un objetivo cumplido en mi vida.
-Lo logré Law- susurré como si el pudiera escucharme, capaz lo hacía, esperaba que sí.
La moto se volvió inestable, mi cuerpo se tambaleó junto con ella. Arlong no parecía querer parar. No me importaba, cerré los ojos y me permití ignorar el dolor en mi pecho pensando en lo feliz que sería con un chocolate caliente y una sábana.
POV LUFFY
Entré a la universidad, no había cambiado nada desde la última vez que fui tampoco la extrañaba, tuve que estudiar mucho para los exámenes que tenía atrasados porque le prometí a Ace que papá no sospecharía nada. Fue horrible, Zoro me pegaba cada vez que me equivocaba en algo ya que la maestra terminó huyendo a los dos días shishishi.
-Luffyyyyyyy-alguien se me lanzó encima, algo suave me impedía respirar. -Te extrañé mucho, no sabía dónde estabas y luego me dijeron que estabas enfermo en casa, pero Margaret es muy lenta y hoy fue que conseguí tu dirección.
-Hamo... No... Puedo ...
Hamock me soltó de inmediato y tomé aire.
-¿Te sientes bien Luffy?- preguntó, Hamock también estaba igualita. Siempre muy amable.
-Estoy bien Hamock- le sonreí, me sentía muy bien.
-Dijiste mi nombre... Eso significa... ¡Qué me amas!
Hamock empezó a decir cosas raras y a hacer muecas divertidas, me hubiera gustado jugar con ella pero si llegaba tarde a mis exámenes Zoro, Ace y el abuelo me matarían y no podría salvar a Nami. Capaz me quedaba algo de tiempo, no importaría si me demoraba un poquito nada más, solo tardaría unos minutos. Corrí, amé la sensación de la brisa pegarme en la cara y mis músculos moverse libres, se sentía increíble después de tanto, ya podía entrenar. Al llegar a la taquilla me mantuve trotando en el mismo sitio, había que aprovechar cada momento y era divertido estar en movimiento, mantenerme en cama fue demasiado aburrido, creí que moriría.
-Hola Luffy ¿Cómo estás? Hace tiempo que no te veía, tu ausencia es muy notable por aquí.
-Shishishi ¡Hola Makino! tengo que llegar a los exámenes, pero quería saber si una chica llamada Nami ha venido aquí. –dije algo apurado.
-¿Una chica? Vaya nunca me lo hubiera esperado- me miró como si hubiera dicho un chiste-¿Sabes su apellido?
-Emmm
-No te preocupes- tecleó en la computadora, que se veía súper genial, se parecía a la que tenía en mi cuarto, tenía demasiados juegos increíbles. -Luffy ¿Estás seguro que estuvo inscrita aquí? No hay ningún registro de ella, no existe.
-No existe... Nami sí estuvo aquí, yo la vi
-Lo siento Luffy, será mejor que te apresures o Akainu no te dejará entrar
No pensé más nada y me di a la carrera contra el reloj shishishi. Llegué justo cuando estaba a punto de cerrar la puerta ¡Qué suerte!
-Todo lo bueno acaba pronto, ya lo estaba disfrutando. Monkey.D Luffy.
No entendí que quiso decir con eso, pero apartó el brazo dejándome entrar. Todos se me quedaron viendo ¿Tendría algo en la cara?
-Oi- saludé y todos volvieron a mirar sus hojas ¿Ya había empezado? Tenía que apurarme.
Akainu me tiró la hoja y eran puros números, por suerte recordaba algunas cosas, los gritos de Zoro y Sanji se me venían a la mente shishishi, prometió prepararme carne si los pasaba. Volví a la hoja, era difícil concentrarme...
Cuando acabó el tiempo me dolía la mano, nunca había escrito tanto en mi vida, pero me sentí orgulloso de haber terminado casi todo, esperaba no haberme equivocado, no quería quedarme sin carne. Aun me quedaban unos más, odiaba los exámenes. Dos me parecieron súper fáciles, capaz los profesores tenían razón, si estudiaba todo era sencillo shishishi. Una vez terminé el último, sentí que me iba a explotar la cabeza, pero estaba feliz no tendría que presentar más y podía empezar a entrenar.
Hamock estaba en la entrada, pero no tenía tiempo, los demás me estaban esperando así que rápidamente me monté en mi moto y arranqué a máxima potencia, de verdad extrañaba eso. Me recordé de repente de la vez en que Nami estuve detrás de mí abrazándome, lo calientito que me sentí cuando sus brazos me rodearon; mantuve esa imagen en mi cabeza todo el recorrido. El sitio que acordamos era una vieja bóveda que le pertenecía a la familia de Usopp, menos mal Zoro se encargaba de cubrir todo con mis papás, porque nunca se creían mis mentiras, no entendía por qué si lo hacía muy bien.
POV NAMI
Los reflejos de la luna se reflejaron débiles en mi rostro, no llegaba demasiada iluminación aquella habitación sucia y apagada dándole un aspecto lúgubre y penoso, más de lo que ya era. Hace semanas que había dejado de importarme en donde estaba, cada sitio parecía ser peor que el anterior; desde lo ocurrido en la fiesta Arlong, este empezó a ser perseguido por la Marina que gracias a los interrogatorios consiguió suficientes pruebas para incriminarlo; y aunque la situación me resultaba muy conveniente para traicionarlo aún tenía hombres en Cocoyachi amenazando la vida de mi gente y para colmo me tenía a mí entre ceja y ceja. Sabía lo que haría si me dejaba a mis anchas, igualmente hacerlo me implicaría esconderme tanto de los hombres de Arlong como de la Marina.
El tiempo también había dejado de tener sentido, más bien importancia. Pasé días inconscientes y hubiera preferido quedarme así, despertar luego de todo lo ocurrido y descubrir que no era una cruel pesadilla, hacía todavía más amarga la realidad. Law estaba muerto, una opresión me invadía el pecho, su cadáver frío desangrándose... Él no merecía una muerte así, él solo quería que todos no murieran por un virus que hizo su padre, capaz tenía sus motivos personales, pero aun así salvó mucha gente y nadie si quiera lo recordaría por ello. No era justo, no era justo que hubiera muerto ¡Nada parecía ser justo! Solo me quedaba esperar que Ace si estuviera bien, quería pensar eso para relajar mi mente.
La situación tampoco colaboraba para ayudarme a superar lo sucedido, estaba encerrada en cada asqueroso lugar en donde se le ocurría ponerme. Duré más o menos una semana aislada del mundo en mi propia mente. Pero un día me dije basta, aun mi familia estaba amenazada en Cocoyashi, no logré aguantarlo, así que empecé a escaparme cada noche, me llevaba un lapso de tiempo descubrir cómo hacerlo eficazmente cada vez que nos trasladábamos; pero no podía rendirme, debía liberar mi isla, debía escapar de Arlong, estaba muy cerca de cubrir lo que habíamos acordado, pronto terminaría, pronto todos serían libres, pronto yo también. Aun así aunque me motivaba constantemente con ese pensamiento, las horas en que permanecía quieta pesaban, todos los pensamientos y recuerdos que me carcomían la cabeza, uno tras otro. No me molesté en moverme de la cama vieja, pude haber tenido un castigo mucho peor por haber fallado nuevamente.
Lo hubiera tenido probablemente, pero Arlong preocupado por la Marina no tenía suficiente tiempo para pensar en mí, ni en reprimendas. Di una vuelta en la cama, a veces imaginaba la sonrisa de Luffy, pensar que aparecería de repente por la puerta y diría "Ven conmigo" era una de mis más recurrentes fantasías. Desde que lo conocí me había negado pensar en él, al principio porque me daba remordimiento lo que había intentado hacer, luego porque quería protegerlo y por último porque era muy frustrante querer poder estar con él y que fuera imposible. Tanto tiempo encerrada usándolo como mi ancla para no volverme loca me había hecho llegar a una conclusión con respecto a todo ese remolino de emociones que provocaba en mí: Alegría, expectación, desesperación, tristeza, frustración, anhelo... Todas sumamente contradictorias.
Lo quería
No sabía a qué nivel, nunca había sentido algo así por alguien que no fuera mi familia y aun así era diferente. Era muy claro y confuso a la vez, pensaba en él, me preocupaba, podía hacer lo que fuera con tal de que estuviera bien, incluso si eso significaba que no le volvería a ver nunca. Siempre hacía que bajara mis defensas, con él era verdaderamente yo. No era idiota, solo que era preferible negar la realidad, dolía aceptarla, era mejor cuando no tenía tiempo para pensar. Todos esos momentos juntos aunque no fueran demasiados, impactaron demasiado mi vida, por primera vez desde que era niña quise algo para mí, algo egoísta, me divertí como nunca, tenía amigos, podía salir a divertirme, discutir y reírme al final. Por fin me sentía protegida en cierta forma, era cierto que muchas veces causaba mucha preocupación, pero siempre viene incluida cuando quieres a alguien. El amor nunca está excepto del dolor.
Cuánto dolía ahora, estaba consciente que relacionarme con ellos y en especial con él podría terminar así, probable más que protegerlos a ellos, me quería proteger a mí de sentirme así.
Rota...
Incompleta...
Al final ¿De qué valía saberlo? ¿De qué valía saber que era mi felicidad o bien gran parte de ella?
Absolutamente nada, jamás podría decírselo, no podría estar con él. Las lágrimas amenazaron con salir, toda mi vida consistía en una comedia trágica e irónica, yo era el simple títere sometido a los deseos de su creador, recibiendo burlas del público, deseando constantemente soltar los hilos y salir corriendo a ser él mismo. Como un pirata... Recorrer el mar tal como Luffy me había dicho, sentí la brisa en el rostro sin saber cuál será exactamente la aventura que deparará el próximo destino. Nadie que te ate, nadie que te impida nada, solo tú recorriendo el mundo a placer viendo cosas extraordinarias, sería genial con muchos lujos por supuesto. Cumplir mi sueño...
Casi lo olvidaba, mi sueño
"Bellemere mira, dibujé un mapa de la isla"
-"Genial Nami, es realmente bueno"- sonrió de oreja a oreja viéndolo admirada.
Nojiko se acercó con curiosidad animándose también al verlo.
-"¡Quiero visitar el mundo entero y dibujar un mapa de él!"
-"Lo lograrás Nami, tenlo por seguro, tienes un talento increíble"
Mis mejillas empezaron a humedecerse, a la larga solo eran un montón de sueños rotos que debían morir prevaleciendo como un recuerdo igual que Law y Bellemere. Me restregué las lágrimas con el brazo, tenía que continuar.
Me levanté de la cama y saqué las varillas que cubrían la ventana, una por una. Estaban tan viejas que no tardé demasiado en lograr que cedieran, pasé mi cuerpo por ella y no tardé en estar afuera. Caí en la grama, mi habitación estaba un poco bajo el nivel del suelo, era perfecta. La oscuridad era tan densa que me ayudaba a camuflarme por la seguridad de Arlong con gran facilidad, todos eran unos idiotas. Esta vez estábamos escondidos una especie de castillo abandonado, probablemente las propiedades de Arlong no registradas oficialmente. El patio era extenso pero logré salir en cuestión de minutos, habían muros de piedra rodeándolo fáciles de escalar. Un vez estuve del otro lado vi un montón de árboles, estaba en medio de un bosque; robar en sitios tan alejados en los que no tenía idea alguna de si habían viviendas lujosa o comercios cercanos de ese tipo era un reto; las anteriores veces Arlong se asentó en sus casas residenciales dónde personas de su mismo calibre solían esconderse, el gobierno no tardó en pisarle los talones por supuesto.
Sería difícil está vez conseguir algo. Asegurarme si alguien habitaba cerca parecía ser mi primera opción, era mejor que quedarme pensando en el sótano donde me tenían por supuesto.
Faltaba muy pocos, podía lograrlo.
POV LUFFY
-Stk me estás diciendo que vamos a buscar a esa bruja, pero no tienes ni idea de cómo hacerlo.
-A Nami- asentí, estaba emocionado, sería como una aventura y esta vez no fallaría, como buen Nakama recuperaría a Nami.
-Tú de verdad ¿Por qué sigo conti...
-Oi Luffy sigo sin entender cómo es que Nami está en esa isla, no sabía que ella navegaba como el gran Usopp en sus buenos tiempos. Aún recuerdo la brisa y el olor a sal, se venía una tormenta ese día...
-¡En serio!
-Si Luffy, apareció un monstruo de la nada y por supuesto que el gran Usopp no se acobardó, lo enfrenté con...
Zoro golpeó a Usopp de repente ¿Estaría jugando? Zoro tenía cara de limón agrio pero podía ser muy divertido a veces.
-¡Oi por qué me pegas!
-Calla de una vez, quiero irme de aquí lo antes posible, tengo cosas más importantes que hacer y estoy aquí esperando que a este idiota se le ocurra como sacar a esa bruja
-No llames así a una dama marine estúpido
-Como me dijiste cocinero de mierda.
-Lo que escuchaste
Volvieron a jugar, se veía divertido capaz me les unía
-Luffy como que Zoro está de muy mal humor, auch como pega. - dijo sobándose la cabeza, sabía cómo dolía shishishi
-Zoro siempre está así
-Bueno tienes razón pero está vez más. Aunque siempre le ha caído mal Nami
¡Es cierto! ¡Nami!
-¡OI!- grité para que me prestaran atención, Ace me dijo que no tenía mucho tiempo y realmente no quería fallarle otra vez-¡OI! ¡OIIIIIII!
-Calla gomu mierdoso que ya te escuchamos-me golpeó, itee las patadas de Sanji también dolían, pero no importaba tenía que concentrarme.
-Nami estará en una isla llamada Cocoyashi, un tipo de nariz larga, como la de Usopp pero fea.
-¡Oye!
-Lastima a Nami, tenemos que salvarla- mencionarlo me molestaba un poco, pero debía concentrarme. Ace me dijo que tendría una oportunidad antes que papá ataque la isla.
-Después de tanto tiempo de hacernos esperar con el misterio de Nami-swan y nos dices esto tan vago.
-Es que lo olvidé todo shishishi
-¡Cómo pudiste olvidar eso!- me dijo Usopp zarandeándome
De verdad no lo recordaba, el pasado de Nami no es importante, solo importa quien es ahora, divertida, sonriente, gruñona a veces shishishi y... Sensible, era extraño pero si podía recordar perfectamente como lloraba y su cara en la isla, se veía tan triste, se sintió como si pudiera golpear a todos lo que hicieron eso, pero también como si mi pecho se rompiera, no sabía cómo explicarlo, solo quería que parara porque me gustaba más verla sonreír.
-No importa si no te acuerdas, lo importante es que Nami swan está en peligro, la rescataré, seré su príncipe azul, se enamorará de mí y seremos felices para siempre- Sanji empezó a dar vueltas por todos lados, pero por alguna razón no me pareció divertido, más bien molesto un poco, pero no entendía por qué
-¡Oi Luffy! ¿Me estás escuchando?
-Perdón me distraje shishishi.
-Bueno que vamos a hacer- soltó Zoro viendo el mapa que teníamos la mesa.
El sitio parecía una base de operaciones de esas películas que veía con Ace, todo estaba desordenado, un montón de materiales de construcción por todas partes, el bombillo en el medio y nosotros los agentes especiales estábamos alrededor con poses geniales haciendo planes.
-No sé por qué si quiera te tomas la molestia de ver el mapa si no lo vas a entender.
-¡Yo sé ubicarme!
-Por supuesto ¿Cuál es tu izquierda?
Zoro señaló la derecha shishishi
-¡Esa es la derecha marine estúpido!
-¡ya lo sabía solo quería probarte ero cook!
Me fijé en el mapa, me costaba entenderlo, probable Nami si lo entendería, era muy inteligente... Intenté pensar en los caminos de la isla, por suerte no solía perderme como Zoro, sabía cuál era la izquierda y cuál la derecha. Ace me había dicho que lo más importante era sacar a Nami sin pelear, pero en verdad quería darle una golpiza a ese nariz larga.
Tenía que concentrarme
Si entrabamos por el mismo sitio nos iban a agarrar, aunque esta vez me encargaría de darles una paliza, pero ¿Y si le hacían algo a Nami? Ni importa, yo la salvaría, aun así Ace me dijo que no fuera de frente, para mí era la mejor opción por qué había que esconderse, había estado entrenando un poco mientras estudiaba y ahora podía entrenar de lleno, los derrotaría.
Yo quería pelear solo con Arlong, los demás daban igual ¿Si entrabamos por el extremo contrario de la isla llegaríamos más rápido al castillo ese del nariz larga?
¡SI!
-Ya sé cómo entraremos
-Llegué justo a tiempo entonces Monkey. D Luffy fufufu.
POV NAMI
Deambulé por varias horas, tenía frío, no había ningún habitante cerca y si lo hubiera valido la pena quitarle un centavo. Un ambiente lúgubre predominaba en el bosque, las chicharras y animalitos nocturnos eran los rompían el silencio, no me molestaba, solo me crispaba un poco los nervios no sentir el terreno controlado. Al llegar al castillo pensé en entrar tal cual como había salido, pero como cosa rara las cosas no se daban nunca como las planeaba.
Una mano de gran tamaño me cubrió el rostro y con una fuerza descomunal me haló hasta su pecho, el pánico me invadió, no lo había visto venir ¿Quién era? ¿Iba a matarme? Quise hacer algo, morder la mano, patearlo, un codazo, pero estaba acorralada... Tenía miedo
-No son buenas horas para andar por ahí Nami- esa voz maldita sea
El miedo se convirtió en odio que me recorrió cada vena de mi cuerpo, cómo se atrevía, su mano me soltó pero mis músculos no se relajaron en lo absoluto.
-Tu...- me zafé de inmediato de su amarre, no me importaba que me podía hacer, necesitaba golpearlo, maldito infeliz.
-No creo que tengas facultad de molestarte ¿No crees?- soltó burlón, cuando odiaba su actitud, me daba tanta repugnancia el solo verlo.
Intenté calmarme y ver con claridad la situación nunca salía bien dejarse llevar por los impulsos, me había escapado y él estaba justo ahora frente a mí, sin embargo, andaba muy tranquilo, inquietantemente tranquilo ¿Que quería? Me mordí el labio en un intento de mantenerme aparentemente imperturbable aunque por dentro tuviera miles de emociones chocando unas contra otras, no muy positivas precisamente.
-¿Y bien? ¿Qué quieres? Sea lo que sea hazlo de una vez.
-Vaya, nunca pierdes tu arrogancia- sonrió sujetándome el rostro con rudeza, no desvié la mirada- Supongo que esas agallas es lo que te han hecho mantenerte aquí
Se alejó lo necesario para poder tener una conversación, no me iba a castigar, quería algo, nunca significaba algo bueno.
-Has fallado demasiado ya, empiezas a ser inútil Nami, una carga.
Las palabras me cayeron pesadas, nunca esperé escuchar eso, no sabía ni siquiera qué pensar.
-¿Cuánto llevas reunido ya?
-Casi lo tengo completo- respondí imprecisa
Vi una mueca de satisfacción a pesar de la oscuridad
-Te propongo cumplir nuestro trato por la cantidad que tienes ahora. Me la entregas y tú y tu pueblo serán libres.
-¿Cómo esperas que te crea? ¿Así de fácil? Arlong no soy estúpida.
-Necesito el dinero, la Marina me anda persiguiendo y no tengo más fondos para huir. Agradece que te lo estoy pidiendo por las buenas, Nami.
No supe cómo contestar, todo parecía tener sentido, estaba desesperado. Nunca había ideado un escenario así en mi mente, era tan extraño, algo en mi interior quiso creer que en verdad era real, que podía ser libre, que había valido la pena todo solo por esa oportunidad ¿No tenía por qué importar las circunstancias cierto? Lo importante era el resultado, cumpliría mi promesa con Cocoyashi, podría ser libre, podría cumplir mi sueño.
-¿Y bien?- preguntó haciéndome notar que se estaba acabando su paciencia.
-Está bien, te diré dónde está.
Su sonrisa cínica y desagradable resaltó a pesar del manto de oscuridad que nos rodeaba.
-Siempre has sido inteligente Nami.
POV LUFFY
Era una chica, me pregunté si la habría visto antes, solía pasarme, lo nombres no son lo mío shishishi
-¿Quién eres?-pregunté, no la recordaba, de todas formas, siempre es divertido conocer gente nueva
-Nico Robin, pero puedes llamarme Robin- sonrió, parecía agradable
Sanji se arrodilló y le besó la mano, a veces era extraño, pero era bastante divertido shishishi.
-Ara ara parece que aquí hay mucha caballerosidad, no es así chico de pelo verde.
-Stk di una vez que haces aquí y sino vete.
-Marimo estúpido no le hables así a una dama
-Nadie la invitó.
-Oi Oi quiero escuchar que va a decir
-Fufufu, son bastante curiosos. Ace me mandó a ayudarlos.
-¿Ace?- si venía de su parte de seguro era alguien genial con alguna habilidad súper increíble, que emoción
-¿Cómo podemos confiar en ti? Capaz eres parte de la banda de Arlong y quieres engañarnos. - soltó Zoro y quizás tenía razón
-Oye ¿Nos quieres engañar?
-No
-Ves Zoro, es de confianza
-¡No seas idiota!
-fufufu , que desconfiado eres
-No te preocupes, tanto pelo verde como tú pueden confirmarlo y prometo que seré muy muy útil.
-onna
-Fufufu parece que nos llevaremos excelente.
Robin se veía divertida y agradable, Usopp y los demás se acercaron para preguntarle cosas pero decidí intentar concentrarme en mi plan, por Nami. Vi el mapa nuevamente, no entendía mucho shishishi, aun así agarre un marcador rojo y empecé a trazar lo que tenía en mente, fue más fácil de lo que creí
-¡Oii Aquí está el plan!
Todos se quedaron viéndome como si me hubieran salido dos cabezas ¿Había dicho algo raro? Si lo analizaba con dos cabezas podía comer doble, pero también necesitaría dos estómagos
-¡Gomu mierdoso!
Por suerte logré esquivar la patada que me iba a dar en la cabeza, menos mal estuvo cerca. Me había distraído, otra vez.
-¡Aquí está!- extendí el mapa para que todos pudieran verlo, me había quedado genial, de seguro quedaban sorprendidos
-Luffy que coño es eso
-Zoro es normal que no lo entiendas, es difícil si no sabes cuál es la derecha y cuál es la izquierda
-En eso tiene razón marino, tu no podrías entender ningún mapa
-Tú...
-Oi Oi yo si lo entiendo Luffy intentaste dibujar a Arlong cierto? Veo toda la estrategia, el gran Usopp puede derrotarlo solo darle un puñetazo de lleno, pero para eso tiene que reconocerlo, muy ingenioso muy ingenioso.
-¿Ah? No lo había pensado pero es un gran plan también shishishi
-Luffy te parece si me explicas tu plan- me preguntó Robin
-Por supuesto que sí- puse mi mapa en la mesa y empecé a explicarle el recorrido, Robin me estaba prestando mucha atención, era increíble
-Entiendo entiendo- agarró otro mapa que había de repuesto y empezó a trazar como yo había hecho antes.
Duró unos minutos creo, Usopp seguía hablando y Zoro y Sanji andaban peleando.
-¿Es esto lo que me quisiste decir?- me mostró su mapa y era exactamente lo que le había dicho, tenía que admitir que estaba un poco mejor que el mío, solo un poco.
-¡Sugoi eres genial!
Mi teléfono empezó a sonar, me gustaba escuchar la canción de Soul King, por eso siempre tardaba un poco en contestar. Lo tomé y Vi que era Ace
-Hey Ace ya conocí a Robin, es increíble
Robin me sonrió
-Luffy ya es hora. Arlong va a Cocoyashi.
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Bueno primero que todo perdonen como siempre, esta vez la universidad me absorbió, pero ya estoy en vacaciones de navidad o casi, realmente el viernes pero yo autoproclamé mis vacaciones para montarles este cap que ya lo tenía casi terminado. No estoy segura de cómo les parecerá, pero espero que les guste, ya entramos en la etapa final de esta historia; así que pronto dejarán de estresarse conmigo de que me tardo demasiado. En fin solo quería decirles que estoy pendiente a continuar y a todos sus comentarios y opiniones ¡Feliz Navidad!