EL EMBLEMA DE LA ARMONÍA

EL EMBLEMA DE LA ARMONÍA

Por: Ariadna

Capítulo 2: ¿¿Dónde estamos??

Izzy apareció como si nada en el cielo del Digimundo, y cayó estrepitosamente en el suelo del mismo Digimundo…

Extrañamente no le dolió nada, y por suerte su computadora estaba intacta. Miró a su alrededor con curiosidad y después de un rato vio caer a Kari, Tai y los demás cerca de él. Luego de verificar que todos estuvieran bien, se instaló frente a su computadora para buscar a Gennai, o por lo menos saber en que parte del mundo Digital estaban.

Luego de un rato…

Tai no podía estarse quieto. Se movía de un lado para otro con impaciencia. Al haber pasado solamente un año no había cambiado mucho físicamente, aún con su cabello rebelde y sus Goggles, y su personalidad seguía siendo aparentemente la misma.

-¿qué te toma tanto tiempo Izzy? ¡Necesitamos movernos de aquí ya!

-no debemos movernos hasta que sepamos donde estamos, solo espera un poco más Tai. – le respondió sin mover sus ojos de la pantalla.

Matt estaba apoyando su espalda en el árbol más cercano, de brazos cruzados y con el ceño fruncido, mirando como Tai se movía de un lado para otro, y tratando de contenerse de golpearlo para que se detuviera. Y es que Matt seguía teniendo cierto resentimiento contra Tai, pero ya en un nivel mucho menor. Sabía que si se dejaba llevar por ese sentimiento quedaría solo, y no quería eso, nada de eso…

Sora se percató de la tensión de Matt y se dirigió hacía Tai para obligarlo a sentarse junto a ella.

Matt se lo agradeció con la mirada.

Siempre había sido así, ella la mediadora entre ambos para que no pelearan, incluso después del Digimundo. Sora durante ese año había dejado de lado muchas cosas que le gustaban, como usar su gorro de la suerte, o sus prácticas de fútbol, pero no podía dejar el papel de 'hermana mayor' del grupo, aunque lo intentara…

Joe se quitó sus lentes para limpiarlos con un paño. El estar de vuelta en el Digimundo le provocaba un gran dolor de cabeza. Por un lado necesitaba estudiar urgentemente para volver a subir sus notas, que bajaron notoriamente luego de esas vacaciones de verano hace un año, pero por otro lado tenía unas ganas enormes de volver a ver a Gomamon, y eso para él era más importante. Pero algo más lo molestaba; en el tiempo en que estuvo en el Digimundo la primera vez siempre fue el responsable, y aún seguía siéndolo, por lo que se preguntaba si realmente podrían vencer a Apocalymon, la última vez no lo hicieron…. ¿Cómo lo harían en esta ocasión?

Mimi miró hacía Sora y Tai y suspiró profundo. Ella era la única que sabía sobre los verdaderos sentimientos que tenía Tai por Sora, y se mordía el labio inferior para no gritarlo en voz alta cada vez que los veía juntos. Tai había confiado en ella para mantenerlo en secreto y no quería perder aquella confianza, pero por más que intentara impedirlo la información seguía rebotando en su mente pidiendo salir. El silencio nunca había sido su fuerte. Agitó su cabeza y giró su vista hacía otro lado, donde Izzy se había instalado tecleando sin parar frente al computador portátil. "me pregunto si Palmon estará bien…, Dios, por favor que esté bien…"

TK y Kari se mantenían en silencio, sentados en un rincón. Takeru estaba ansioso de ver a Patamon, estaba feliz que su promesa se hubiese cumplido, quería que su amigo Digimon viera cuanto había crecido, mucho más que Kari, y cuanto había madurado, para un niño de nueve años, claro. En cuanto a Kari, ella siempre fue una chica madura, por lo que era la que menos había cambiado de todos, aún con su luminosa sonrisa y su mirada dulce.

La chica se movió del lado de TK para acercarse a Izzy.

-¿alguna novedad?

Izzy negó con la cabeza. Kari se quedó un rato más junto a él, pero viendo que Izzy no le daría más información, volvió con TK.

El pelirrojo aún mantenía todas sus "manías" de ignorar a la gente y no hablar muy seguido con nadie. Tecleaba desesperadamente en su vieja computadora pero no lograba hallar ni a Gennai ni a sus Digimons, y tampoco sabía en que parte del mundo Digital habían caído. Sabía que los demás estaban aburridos y ansiosos de partir, pero era peligroso irse si él no les decía por donde, dependían de él…

-¡¿cómo no se me ocurrió antes?! – exclamó Tai poniéndose de pie.

-¿qué piensas hacer, hermano?

-escalaré un árbol y veré yo mismo si reconozco los alrededores.

Y antes de que nadie pudiera contradecirlo, el líder del equipo comenzó a trepar por el árbol donde estaba apoyado Matt y al llegar a la cima sacó sus binoculares, tratando de no perder el equilibrio. Miró de un lado a otro, con la mala suerte de no reconocer nada, toda la vegetación era distinta a la que habían visto antes, y además, extrañamente, a lo lejos se veían espacios en blanco, como si no existiera nada ahí… "obra de Apocalymon" pensó Tai. Luego giró su vista hacía otro lado, hacía algo que llamó su atención… cinco… no, siete u ocho puntos distantes en el cielo… Taichi enfocó sus binoculares para un acercamiento y vio… ¡chicos! ¡Chicos como ellos en el Digimundo!

No se demoró mucho en bajar del árbol ya que a mitad de camino tropezó y cayó derechamente encima de Matt. Se puso de pie de inmediato para encontrarse con las miradas interrogantes de sus amigos.

-no van a creer lo que acabo de ver…

*************************

-AAAAAHHHHHH!!!!!!!!

PAFF!!!

Ryoga cayó al suelo sonoramente. Se sobó la nuca.

-ay… ¿huh? ¿Dónde están los demás?… ¿¿Dónde estoy yo??

El chico miró a su alrededor con cierto pánico, no reconociendo nada en esa extraña playa en la que había caído. Luego escuchó gritos sobre su cabeza y distinguió varias figuras cayendo del cielo.

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-uno… - Ryoga comenzó a contar cuando llegaban a tierra.

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-dos…

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-tres…

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-cuatro…

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-cinco…

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-seis…

-AAAAAHHHHHH!!!!!!

PAFF!!!

-siet… - no terminó de decir el número, ya que reconoció a la figura. - ¿Lina? ¡Hermana!

Los otros siete chicos aterrizaron de forma tan desastrosa como Ryoga, y aún así, sin ningún dolor por la caída.

Ryoga corrió hasta Lina para ayudarla a ponerse de pie, pero ella negó la ayuda rotundamente.

-¿qué demonios estás haciendo aquí, Ryoga? – le preguntó ella, claramente no muy feliz de ver al chico.

-buuaaa!!!! ¿¿Dónde está mi papá?? – interrumpió la niña más pequeña de todos comenzando a llorar amargamente.

-¿Jar? – Lyslee reconoció a la niña y fue a abrazarla para calmarla. - ¿¿dónde estamos??

Los demás chicos parecían igualmente desorientados.

-si esto fue una broma, estuvo bien echa. – comentó Ivan mirando a su hermano y a Yaen.

-¿¿y crees que nosotros podemos hacer algo así?? – cuestionó Rock, sacándose los lentes por un momento para limpiarlos, y luego volvérselos a poner. – esto es muy raro…

-parece Dimensión desconocida… - murmuró Lina.

-¡¿alguien me puede decir que esta pasando aquí?! – preguntó Ariadna casi gritando, y bastante enojada por cierto.

-hey, yo te conozco… - Ryoga comentó indicando a la chica. – eres del grupo de chicos nuevos de la escuela que entró la semana pasada junto conmigo, estás un nivel arriba mío…

-ok, ok. Un momento. – Yaen hizo un ademan con la mano indicando tiempo fuera. – al parecer aquí algunos de nosotros nos conocemos, pero todavía hay muchas caras nuevas para mí. Será mejor que nos presentemos antes que nada. Empiezo yo: me llamo Yaen y tengo 14 años, aquel pequeño es Ivan, y tiene 12, y más allá está…

-Rock. – finalizó el mismo.

-¿'Rock'? ¿Y ese es tu nombre? – se burló Lina.

-¿algo así como 'roca'? – preguntó Lyslee, dudosa.

-no, no – dojo Yaen. – ese es su apodo, su verdadero nombre es…

Rock! Me llamo Rock y punto. – insistió él, dándole una mirada asesina a su amiga, advirtiéndole no seguir con el tema.

-está bien, y él es Rock, y también tiene 14.

-yo soy Ryoga, 8 años. Y ella es mi hermana Lina. – dijo indicando a la susodicha.

-media hermana. – aclaró ella, lo que dio entender a todos que su relación con Ryoga no era de las mejores. – y tengo 12.

-mi nombre es Lyslee, pero pueden llamarme Lys, y también tengo 12 años. Y la pequeña aquí tiene 7 y se llama Jar.

-¡no me llamo así! – gritó la niña de repente.

-claro que si, tu nombre es Jar. – insistió Lys.

-no, si él se cambió el nombre yo también quiero. – dijo caprichosamente refiriéndose a Rock. – yo me llamaré… ¡Goku!

-¿¿¿Goku??? – repitieron todos al unísono.

-si, Goku. – asintió la pequeña, feliz con su idea.

-¿cómo el protagonista de Dragonball? – preguntó Ivan.

-¡¡Sí!!

-¿y por qué él?

-porque sí.

-¿y no prefieres un personaje femenino, como Bulma, o Videl…?

-¡no! ¡Quiero Goku! – Jar amenazaba con ponerse a llorar.

Todos intercambiaron miradas como diciendo "¿qué hacemos?", hasta que Yaen se acercó a la niña.

-está bien, te llamarás como tu quieras, Goku-chan ¿bien?

La chica asintió con una sonrisa.

-jum… de todas maneras Vegeta es mejor… - murmuró Rock.

-o Trunks… - agregó Lys.

-claro que no, ¡el mejor de todos es el gran Mr. Satan, el héroe del mundo! jajajaja – exclamó Ivan, como si fuera el mismo Satan el que hablara, hinchando el pecho orgullosamente con una sonrisa victoriosa.

A los demás les apareció una enorme gota de sudor por la espalda…

-bueno, bueno. Solo queda una por presentarse. – recordó Lina, volviendo al tema original.

Todos los ojos se posaron en la chica de la cual no sabían el nombre.

-Ariadna. 10 años. – se limitó a responder ella.

-tienes un bonito nombre, Ari-chan. – le dijo Lyslee.

La chica se sonrojó con el comentario.

-si… tu también… Lys…

-bien, ya sabemos nuestros nombres. – declaró Yaen. – y al parecer nadie conoce este lugar ¿no?

-así es, pero me recuerda algo… - murmuró Lys.

-si, a mí también… - asintió Ryoga.

-se parece a esa cosa que se vio en el cielo hace tiempo… - comentó inocentemente Jar.

-¡Sí! Es exacto como mostraba esa franja que se formó en el cielo el año pasado. – explicó Ariadna.

-¿te refieres a cuando aparecieron esos monstruos extraños que se supone nos capturaron y todo lo demás? – le preguntó Lina.

-¿quieren decir que todo fue cierto? Como los medios de comunicación no dieron información al respecto pensé que me lo había imaginado… - declaró Lys.

-fueron los marcianos que querían apoderarse de la Tierra. – aseguró Goku-chan.

-no lo creo, pequeña. Yo pensé que algo explotó en una planta nuclear e hizo mutar a los animales o algo así, y que nos imaginamos cosas a causa de la contaminación. – dijo Yaen.

-y nosotros nos creímos esa teoría. – agregó Ivan refiriéndose a su hermano también.

-detenganse un poco. Ya sin tanta teoría, ¿creen que estemos en otro mundo? – interrogó Lina.

-posiblemente. – respondió Ryoga.

-¡no te pregunté a ti! – dijo Lina de mala gana.

-pero…

-Ryoga tiene razón. Este paisaje no es de Yokohama… - Yaen miró hacía el bosque tropical que estaba atrás de ellos.

-ni es Odaiba… - Ariadna agregó.

De pronto, Jar comenzó a llorar.

-¿qué pasa, Ja… perdón, Goku-chan? – le preguntó Lyslee.

-¡¡¡buuaaa!!! ¡¡Yo estaba durmiendo antes de aparecer aquí e iba a ir a una fiesta de cumpleaños y tengo sueño y tengo hambre y mi papi me prometió un helado que no voy a poder comer!! Snif!

-ya, por favor cálmate, todo está bien… - Lys miró a su alrededor y vio a algunos metros la bolsa que ella andaba trayendo en el momento en que desapareció de donde estaba. Se acercó y revisó que el contenido estuviera bien. – mmm… supongo que esto nos servirá. Lo estaba comprando cuando aparecí aquí.

-muchas gracias, Lys. – dijo Ryoga. - ¿pero ahora que hacemos? No sabemos dónde estamos ni cómo llegamos aquí.

-lo primero es que no cunda el pánico. Mientras todos estén tranquilos no habrá problemas. – Yaen habló. – de tanto hablar se nos pasó la hora, será imposible investigar el lugar de noche. Será mejor que armemos alguna especie de campamento porque pasaremos la noche al aire libre. Mañana veremos que hacer.

-hey, ¿y quien te nombró a ti líder? – cuestionó Lina, frunciendo el ceño.

-yo misma. – Yaen sonrió. – soy la mayor y por lo tanto soy responsable por ustedes.

-…er… en realidad yo soy mayor que tú, Yaen. - murmuró Rock.

-¿quieres ser tú la persona a cargo? No lo creo, además solo me ganas por unos meses… - aclaró Yaen. –bien, como decía, sería bueno buscar madera para armar una fogata, no sabemos si aquí las noches son frías. Esperemos que cuando despertemos mañana esto no haya sido más que un sueño…

Continuará…

Notas:

Al fin el cap 2…

Ay, ya me duelen los dedos de tanto escribir, no sé como se las arreglará Kou-kun para pasarse todo el día tecleando…

Bien, me las ingenié para ponerle a Jar 'Goku-chan' (que es su verdadero nick), y para mencionar la fascinación de Ivan por Mr. Satan (que es su nick también -_-U)…

Espero sus comentarios ^^