(21 de julio de 2001) ¡Hola! Ya regresé de mis vacaciones. Realmente me hacía falta alejarme del ruido y el aire sucio de mi ciudad. Luego de dos semanas de paz y tranquilidad estoy inspirada para continuar con mis historias. Especialmente después de todo lo que leí, mi mayor fuente de inspiración son los mismos libros. Bueno, pues me voy a apurar con esta historia porque ya debo continuar la de salto al Futuro. Y lo peor es que sólo me quedan dos semanas para acabarlas porque ya voy a regresar a la escuela y el trabajo y ya casi no voy a tener tiempo. Lo bueno es que también mi cumpleaños es en dos semanas. Y finalmente van a estrenar la segunda temporada en mi canal local (Canal 5, XHGC de la Ciudad de México), a ver si ahora sí entiendo los primeros episodios.

Por cierto, quiero hacer una aclaración con respecto al capítulo anterior: Mik no odia a su padre. Es sólo que sus personalidades son muy distintas ( o por lo menos, eso es lo que Mik cree) y eso le dificulta una relación cercana. Pero ya verán lo que ocurre más adelante. Siento haber terminado el capítulo anterior tan abruptamente pero es que ya no tuve tiempo para terminarlo donde quería. Pero con este capítulo cierro lo que paso en el anterior y ya veré que más invento. Muchas gracias por leer esta historia y por sus reseñas. Ya casi tengo armado el capítulo 5 de Salto al Futuro, sólo me falta escribirlo a computadora. Nos vemos!! =)


Capítulo 4: Extrañas Criaturas


El reloj marcó las 7 de la noche. Las siete campanadas despertaron a Tai Kamiya de su letargo. Como de costumbre se había perdido en sus pensamientos, como lo hacía todos los días al regresar del trabajo y se sentaba en el sillón de la sala a esperar a que Teki subiera al departamento después de pasar un par de horas con Kari y Davis en el piso inferior. Por lo general reflexionaba acerca del despacho y los casos difíciles, pero ese día los recuerdos del Digimundo habían invadido su mente. El reencontrarse con TK Takaishi lo había impresionado mucho. El verlo convertido en esposo y padre de una niña le había recordado que el tiempo había pasado y que su infancia y juventud habían quedado atrás. Aunque Tai no era precisamente un hombre viejo- acababa de cumplir los 37- últimamente pensaba que la vida se le iba de las manos y que la había desperdiciado. Kari le había dicho hasta el cansancio que eso no era cierto, que debería sentirse orgulloso de lo que había logrado en su vida. Había sido un buen hermano mayor e hijo, salvado al mundo dos veces, estudiado una carrera y finalmente tenía un niño muy bueno. Sin embargo, Tai a veces se sentía vacío...y el conocía la razón: hacía mucho tiempo que no sabía lo que era amar. Extrañaba a Jin.

Jin había sido una estrella fugaz en la vida de Taichi Kamiya...literalmente. Recordaba claramente como la había conocido. Ese día no pintaba nada bien para el joven abogado. Tenía en sus manos un caso difícil. Tenía que defender a un hombre de los cargos de homicidio y era tan clara su culpabilidad que Tai no encontraba argumentos que pudieran salvarlo de la cárcel. Y la verdad es que no quería hallarlos. Un hombre que había sido capaz de matar a otro ser no podía estar libre. Sin embargo, Tai se había visto obligado a tomar ese caso en sus manos. Eso era algo que odiaba de su profesión: Cuando tenía que defender a alguien que no merecía ser defendido. Era algo que se oponía a sus principios, a la razón por la que había estudiado Derecho y renunciado al fútbol, para sorpresa su familia y amigos: El deseaba ayudar a los inocentes, no a los culpables. En fin, ese día llegó al juzgado listo para un juicio difícil. Entró el juez, entraron los testigos, entró el prisionero...y entró la fiscal. Y fue entonces cuando su corazón dio un vuelco. Jin no sólo era una mujer muy inteligente, sino que había algo en ella que inmediatamente hacía que te sintieras a gusto. No era precisamente bella, pero eso era algo que a Tai no le importó cuando la vio. El juicio pasaba y el tuvo que hacer un enorme esfuerzo para mantenerse atento. Tal como lo había previsto, perdió el caso gracias al trabajo de Jin y a la falta de pruebas del abogado defensor. El juicio terminó y él se acercó a la abogada y la invitó a tomar un café "para discutir el caso".

Y lo que fue una visita a la cafetería, se convirtió en una cena, luego en una visita a un club nocturno y antes de que Tai se diera cuenta estaba besando a esa mujer en la entrada de su casa. Los días pasaron y cuando acababan de cumplir un mes de noviazgo Jin informó a su novio que se iban a convertir en padres. Se casaron en el mismo juzgado donde se conocieron al día siguiente y un mes después se juraron amor eterno ante el altar. Los siguientes meses fueron los más felices en la vida del matrimonio Kamiya. Jin entró a trabajar al mismo bufete que su esposo y permaneció ahí hasta que su embarazo se lo impidió. Mientras tanto se prepararon para la llegada de su bebé. Finalmente llegó el ansiado día del nacimiento y Tai casi choca mientras llevaba a su esposa al hospital. Jin se despidió de Tai poco antes de entrar al quirófano, ya que el bebé venía en una mala posición y era necesaria una cesárea. Tai no podía imaginarse que ese iba a ser su último beso. Tres horas después el médico informaba a Tai que había habido una complicación en la cirugía y que su esposa había muerto. El no lo podía entender. Habían ido a comprar la cuna del bebé esa misma mañana. Ella estaba sana. No podía estar muerta. Tai no lloró cuando recibió la terrible noticia, ni siquiera cuando depositó las cenizas de Jin en el mar como ella se lo había comentado un día. Sin embargo, en cuanto entró a su departamento con el pequeño bebé en sus brazos y vio la recámara que Jin había puesto tanto empeño en decorar para el niño se derrumbó. Entró en una profunda depresión que casi le hizo perder su empleo. El antiguo representante del valor estaba aterrado...aterrado porque en su panorama sólo había oscuridad, una vida sin Jin.

Afortunadamente, su hermana Kari nunca lo dejó. Ella se hizo cargo del niño e incluso le escogió el nombre porque el padre no daba señales de hacerlo en un futuro cercano. Le puso Teki porque le gustó como sonaba. Poco a poco Tai se recuperó de la pérdida de Jin y se hizo cargo de su hijo. Pronto vio que aunque no se parecía físicamente a Jin (Kari le decía que el niño era su clon), su carácter era el mismo. Jin formó parte de la vida de Tai Kamiya por sólo 10 meses, pero dejó un recuerdo muy valioso, uno que duraría toda la vida. Tai y Teki eran muy unidos, aunque Tai lo dejaba durante el día con Kari o en una guardería, el tiempo que pasaba con el lo aprovechaba al máximo. Jugaban fútbol, iban a cine, al parque. Poco después comenzó a contarle cuentos de su infancia y de su madre, y cuando su imaginación se agotó Agumón salió al rescate. Tai se alegraba cuando veía como su pequeño hijo escuchaba casi sin parpadear los relatos de las aventuras que había compartido con Agumón mucho tiempo atrás. Kari lo regañaba a menudo por ello, pero Tai lo adjudicaba a que su hermana se había vuelto muy dura con el tiempo. Ella también había sufrido mucho en el pasado y casi había perdido su dulzura e inocencia. Afortunadamente, su matrimonio con Davis le había hecho mucho bien y poco a poco volvía a ser ella misma. Especialmente ahora que iba a ser madre.

El reloj marcó las 7:20. El timbre sonó y Tai se acercó a la puerta mientras se acomodaba la corbata y se pasaba la mano por el pelo, su antiguo signo distintivo y del que se había tenido que deshacer cuando comenzó la carrera. Abrió la puerta.

-"¡Papito!"- exclamó el pequeño Teki mientras se lanzaba a los brazos de su padre.
- "¡Hasta que finalmente llegas!"- dijo Tai- "¿Cómo te fue?"
- "¡Genial papá!"
- "Que tal Tai"- dijo Anya mientras entraba al departamento con Caro
- "Hola Anya, por favor siéntate. ¿Quieres algo de tomar?"
- "No muchas gracias. Pero me gustaría hablar contigo"

Tai se sentó junto a la mujer extrañado. Teki llevó a Caro a su cuarto para mostrarle sus juguetes.

- "Bueno, ¿de que quieres hablar?"

Anya sacó el sobre de fotografías y se lo entregó a Tai. El hombre examinó las fotografías y una amplia sonrisa se dibujo en su rostro antes serio.

-"¡Esto es genial! Todavía existen las fotos"
- "¿A qué te refieres?"
- "Estas fotos las tomó mi hermana. Perdió los archivos cuando se robaron su computadora hace algunos años y temíamos que todos nuestros recuerdos del Digimundo se habían esfumado para siempre. Pero por lo visto mi hermana le dio una copia de las fotos a TK antes de que se fuera a Francia"
- "Así parece. Le preguntaré eso a mi esposo"
- "Supongo que nunca te las enseñó"
- "Supones bien. Quiero preguntarte una cosa"
- "¿Sí?"
- "¿Ese muchacho rubio es mi esposo?"
- "Sí. Y la niña es mi hermana"
- "Muy bien. Entonces el joven que está a lado de TK es su hermano, ¿verdad?"

Anya notó que la mirada de Tai se entristecía.

- "Así es. Ese es el miserable de Matt Ishida"
- "¿Miserable?"
- "No me tomes en serio. Así le decía cuando estaba molesto con él"
- "Supongo que estás molesto"
- "Sí. Desapareció y nunca volvimos a saber nada de él. Era mi mejor amigo"
- "¿Podrías platicarme de él?"
- "Por supuesto"

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- "Y bueno, aquí es donde vivo"- dijo Kari mientras le mostraba a TK su edificio.
- "Vaya sorpresa...siempre has vivido aquí"- el tono de voz de su amigo no mostraba sorpresa alguna.
- "En parte sí. Pero verás, mis padres vivían en el piso 15, Tai vive en el piso 6 y yo vivo en el piso 5"
- "Oh, ya veo"
- "Así me encontré con Davis"
- "¿Perdón?"
- "Ya te dije que él trabaja en una agencia de bienes raíces. Pues me quería mudar al mismo edificio que Tai para ayudarlo con Teki, que en ese entonces tenía como 2 años de edad. Un día vi que uno de los departamentos estaba en venta, fui a la agencia de Bienes Raíces y Davis estaba ahí. Me enseñó el departamento y luego fuimos a comer para platicar de los viejos tiempos. Me costó trabajo atraparlo"- Kari sonrió
- "¿Qué? ¿Atraparlo?"
- "Así es. Davis se acababa de divorciar por lo que no quería saber nada de mujeres"
- "Así que esta vez la que batalló fuiste tú"
- "Digamos que fue a cambio de todo lo que él insistió cuando éramos niños"
- "Entonces te costó mucho trabajo, ¿verdad?"
- "Pues sí. Pero finalmente nos hicimos novios y nos casamos"- Kari volteó hacia la esquina y vio a un hombre que se acercaba a ellos- "Hablando del rey de Roma...ese es Davis"- Kari empujó a TK hacia la puerta- "Escóndete"
- "Vamos Kari..."
- "Cállate. Ya está cerca"

Davis se sorprendió cuando encontró a su esposa esperándolo en la puerta. Normalmente ella ya estaba en la casa cuando él regresaba del trabajo.

-"¡Kari! ¿Qué haces aquí?"
- "Hola mi amor. Acabo de llegar de la redacción"
- "Pero si son las 7:30 de la noche. No me digas que estás trabajando horas extras. Ya sabes que no me gusta que salgas sola de noche, especialmente con el embarazo y..."
- "Tranquilo cielo, ya tengo quien me acompañe. Además me siento muy bien"
- "¿Y quién es tu acompañante si puedo preguntar?"
- "Yo, Davis"- TK salió de su escondite sonriendo- "Cuánto tiempo sin verte"
- "¿TK?"
- "El mismo"
- "Pe...pero. ¿Cómo?"- Davis estaba tenso.
- "TK es el nuevo reportero cielo. Ahora somos colegas"
- "pe...pero..."
- "¿No me vas a decir otra cosa Davis?"
- "Por supuesto. Me da mucho gusto verte"- Davis abrazó a su amigo- "¿Dónde has estado?"
- "Aquí y allá...pero ahora me voy a establecer en Odaiba"
- "Qué bien. Vamos arriba, a Tai le va a dar mucho gusto verte"
- "Ya nos encontramos. De hecho, me reencontré con Kari gracias a Teki"
- "¿Por qué?"
- "Mi esposa es la maestra de Teki. Y por lo visto mi hija ya es su amiga"
- "Conque estás casado. Felicidades"- Kari notó como Davis se veía visiblemente aliviado al enterarse del matrimonio de TK. Por lo visto algunas cosas nunca cambian. Davis se relajó y la platica que sostuvo con TK fue más amena conforme subían las escaleras.

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-"¿Qué haces Mik?"- preguntó Fiori mientras veía a su amigo trabajar delante de una computadora- "Pensé que odiabas estos aparatos"
- "Los odio, pero aún así se utilizarlos. No sería digno hijo de mi padre si no supiera usarlos. Por cierto, ya deberías estar en tu casa"
- "La señora Ichijouji me va a recoger a las 8, le hablé por teléfono porque quería hacerte compañía"
- "Ese es el problema al ser el hijo de la directora. Tengo que esperar a que todos se vayan para que mamá pueda cerrar la escuela."- Mik volvió a concentrarse en la pantalla.
- "¿Y qué estás haciendo entonces?"
- "Bueno, pensé que sería bueno aprovechar el tiempo y hacer un poco de investigación. Esta base de datos contiene los nombres de todos los niños que han estudiado en este distrito en los últimos 60 años. Mira por ejemplo a mi madre"

Mik tecleó el nombre "Mimi Tachikawa" en la computadora e hizo clic en un botón que decía buscar.

-"¿Tachikawa? Pensé que era la Profesora Izumi"
- "Izumi es el apellido de mi papá. Mamá siempre usa su nombre de casada"

El monitor mostró los resultados de la búsqueda.

"SE ENCONTRARON 5 RESULTADOS PARA 'Mimi Tachikawa'"

-"Ahora voy a ver cuál es el archivo de mamá. Por lo visto hay otras niñas con su nombre. Mira este es"

La pantalla ahora mostraba la foto de la madre de Mik a los 12 años de edad. Aparecía el nombre, fecha de nacimiento y el promedio de la primaria.

- "Este archivo sólo contiene datos hasta la primaria porque mamá se fue a Estados Unidos en cuanto la terminó. Si se hubiera quedado aparecerían los datos de la secundaria y la preparatoria, así como una foto más reciente"
- "Muy bonito Mik, pero para qué quieres ver los promedios de tus padres"
- "No quiero ver los promedios de mis padres Fiori. Lo que quiero es encontrar el archivo de tu tío. Si aparece seguramente habrá una foto de él"
- "Eso sería fabuloso. Nunca he visto una foto de él. Sólo se que se parece a papá"
- "Muy bien, entonces voy a teclear...¿Cómo se llama tu tío?"
- "Creo que Takeru"
- "Muy bien, entonces voy a poner 'Takeru Ishida'"

La computadora realizó la búsqueda.

"SE ENCONTRARON 2 RESULTADOS PARA 'Takeru Ishida'"

-"Uno de estos archivos debe ser el de tu tío Fiori"- dijo Mik emocionado. Pero la búsqueda fue en vano ya que los dos Takeru Ishida no correspondían a la poca información que Fiori tenía de su tío. Uno de los archivos mostraba a un jóven que había nacido 3 años antes que el padre de Fiori ("Mi tío era el hermano menor, Mik") y el otro era un niño que había fallecido a los 9 años de edad.

-"¡No puede ser!"- dijo Fiori angustiada
- "¿Estás segura de que tu tío estudió aquí"
- "Por supuesto. Mi tío estudió la primaria y parte de la secundaria en esta escuela, al igual que mi papá...podrías buscar a mi papá"
- "Claro"

Mik realizó la búsqueda de 'Yamato Ishida' y minutos después los dos niños contemplaban el archivo del padre de Fiori.

-"Ese es mi papá cuando salió de la preparatoria. Un año después se fue a Europa a buscar a su familia y ocurrió lo que te dije"
- "Voy a imprimir esta foto"
- "¿Por qué?"
- "Porque dices que tu tío se parece a tu papá. Y bueno, quiero tener una referencia para ayudarte en la búsqueda"
- "Gracias Mik"

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- "Que bien estuvo esta noche"- dijo TK mientras entraba al departamento con Caro en brazos
- "Tantos cuentos me tienen mareada"- dijo Anya mientras tomaba a Caro y se dirigía al cuarto de la niña- "Especialmente el esposo de Kari. En cuanto Teki le preguntó acerca de la criatura que aparecía en las fotos se puso como loco a hablar de V-mon"
- "Dice que hacía mucho tiempo que quería hablarle de sus aventuras a Teki, pero Kari se lo impedía. Así que digamos que se desahogó esta noche...por cierto, debo hablar con Caro acerca de abrir cajones que no son los suyos"
- "Tienes razón...aunque en ese caso yo también debo pedirte una disculpa cariño, porque también vi las fotos y leí lo que habías escrito"
- "Bueno...y qué te pareció"
- "Está muy bien, aunque me parece que la parte del demonio que mata a tu amigo Angemon es un poco atemorizante para una novela infantil"
- "Pues es la verdad Anya...y eso no es nada comparado con lo que pasamos más adelante"
- "Ven acá"- Anya ya había regresado a la sala después de dejar a Caro en su cama. Se aproximó a su esposo y lo abrazó- "Lo bueno es que todo eso quedó atrás cariño, ya no hay mundos en peligro ni monstruos que quieran matarte"
- "Eso sí...aunque no sabes como quisiera ver a mis amigos una vez más"
- "Creo que el único consuelo que te puedo dar es que mientras haya personas que quieran escuchar los relatos acerca de los Digimon, ellos estarán presente"

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- "Y el otro amigo de papito platicó acerca de una criatura que se llamaba V-mon"- Caro le platicaba a su huevo. A diferencia de los otros tres niños que pensaban que sus hallazgos no eran más que huevos de Pascua, Caro seguía afirmando que su huevo lo había puesto un pajarito y que muy pronto nacería un bebé pajarito. Caro no tenía permiso para tener mascotas en el departamento (órdenes de la casera) por lo que el día anterior lo había escondido muy bien antes de ir a casa de Teki. EL huevo estaba dentro de una canasta en la que Caro solía dormir a sus muñecas. Eran las seis de la mañana de Viernes y mamá no tardaría en levantarla para ir al jardín de niños.

-"Pero mi favorito es Patamón, el amigo de papito. Es muy bonito, ya incluso vi una foto de él. Y por lo visto quería mucho a papá. Yo también quiero que veas las fotos de Patamón y conozcas a papito, te va a caer bien y nos va a contar cuentos cuando nazcas. Mamá también es muy linda. Su nombre es Anya. Y el nombre de papito es Takeru, pero le dicen TK de cariño"- Caro tomó una foto donde aparecen sus padres con ella y se la mostró al huevo- "¿Puedes ver la foto? Mamá es la de la izquierda, y papito es el de la derecha. Mira"

Caro acercó aún más la foto al huevito y en cuanto hizo contacto el cascarón se rompió. La niña brincó del susto y casi se cae de la cama.

-"Ya vas a nacer"- dijo la niña emocionada- "Y vas a ver a mis papás y a Teki. Me pregunto que clase de pollito serás, te voy a tener que buscar unos gusanos y..."

Pero el huevo se abrió y lo que salió no se parecía en nada a un pájaro. Era una criatura pequeña y blanca. Parecía un enorme malavisco con dos pequeños ojos negros. Hizo unos extraños ruiditos y examinó a Caro. La niña intentó tomar a la criatura pero ésta retrocedió asustada.

-"¡Ven aquí! No te voy a hacer nada"- dijo Caro mientras acercaba la mano al malvavisco, pero éste brincó de la canasta y se arrastró a lo largo de la cama, mientras intentaba escapar de la niña.- "¡Oye regresa!!"

Los gritos de Caro despertaron al matrimonio Takaishi que estaba durmiendo en el cuarto de al lado.

-"¿Qué ocurre?"- preguntó TK
-"Debe ser Caro jugando a las seis de la mañana"- murmuró Anya medio dormida- "Voy a ver que le ocurre. Espero que no haya sido una pesadilla producida por tantas historias que le contaron"
- "Eso espero"

Anya dejó el cuarto y TK ya se iba a levantar cuando los gritos de su esposa lo asustaron.

-"¡AHHHH! ¡Una larva!"

TK corrió al cuarto de Caro y encontró a Anya sosteniendo a Caro con una mano y señalando algo en la cama de la niña.

-"¿Qué te pasa Anya?"
- "Una larva enorme está en la cama de Caro"
- "¿Larva?"- TK se acercó a la cama y notó un pequeño bulto temblando debajo de una manta.
- "Es mi bebé, pero me tiene miedo, no quiere que lo toque"
- "Ni te atrevas Caro, puede ser venenoso"- dijo Anya- "Ten cuidado Takeru"


TK levantó la manta y encontró a la "larva" hecha bola temblando en medio de la cama.

-"No puedo creerlo"- dijo TK. La voz del hombre puso en alerta a la criatura, que volteó a ver al humano. En cuanto los ojitos de la criatura entraron en contacto con los ojos de TK dejó de temblar y brincó hacia él, aterrizando en sus manos y brincando visiblemente alegre.

-"EL bebé no le tiene miedo a papá"- dijo Caro
- "Suelta eso TK, te puede lastimar"
- "Nada de eso Anya, es inofensivo"
- "¿Cómo lo sabes? ¿Qué es esa cosa?"
- "Es un Poyomón"

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- "Hola Fiori. Perdona por no despedirme anoche cuando llegó la señora Ichijouji pero es que tenía que ayudar a mamá"
- "No te preocupes Mik"- pero Fiori se veía alterada
- "¿Qué te pasa Fiori?"
- "Tenemos que hablar"
- "¿De qué?"
- "Aquí no. Vamos a un lugar donde no nos pueda ver nadie"
- "Muy bien"


Los dos niños salieron al patio y se escondieron detrás de un árbol que estaba al fondo del mismo.

-"Muy bien Fiori, dime que pasa"

Fiori se aseguró de que no hubiera nadie en los alrededores, abrió su mochila y sacó una criatura de color rojo que parecía un guante de cocina. La criatura temblaba de miedo y quería escapar de las manos de Fiori.

-"¿Qué es eso?"
- "Es lo que yo quisiera saber, debe ser un animal japonés porque nunca los he visto"
- "Pues yo tampoco. ¿Dónde lo encontraste?"
- "Eso es lo peor de todo. Salió del huevo de pascua que me llevé. Mik, no son huevos de Pascua, hay animales adentro de ellos."
- "¿Qué? Eso quiere decir que también hay un monstruo raro adentro del mío. ¿Cuándo se rompió el tuyo?"
- "Esta mañana. Lo tenía adentro de la mochila y lo saqué para guardar mis libros. Lo puse en una repisa donde tengo una foto de mi familia y el huevo se rompió. Me lo llevé porque no quiero que lo vea la Señora Ichijouji. Sería el colmo que con sólo dos días en su casa ya esté metiendo animales raros"
- "Tengo que ir a mi casa Fiori. ¿Qué tal si mi huevo se rompió y hay una criatura babeante rondando por mi cuarto? A mamá le daría un infarto si viera algo como esta cosa roja"- Mik señaló a la criatura roja que seguía temblando asustada.
- "Lo bueno es que tu mamá no está ahora en casa"- dijo Fiori
- "Eso sí. Bueno, saliendo de la escuela me voy a ir a casa corriendo"
- "Yo te acompaño...por cierto, tenemos que advertirle a los otros dos niños"
- "Nos encargaremos de eso después Fiori"

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-"QUe bueno que tu mamá se quedó un rato más en la escuela"
- "Es que un reportero la llamó por teléfono"- dijo Mik- "Eso es lo que alcancé a escuchar cuando le pedí las llaves de la casa. Eso me da tiempo suficiente para encontrar el huevo o la criatura y sacarla de la casa"
- "No podemos abandonarlas Mik"- dijo Fiori- "Son seres vivos"
- "Las podemos llevar al zoológico. Es un mejor lugar que adentro de tu mochila"
- "Eso sí"
- "Muy bien Fiori, ya llegamos"- Mik extrajo las llaves de su bolsillo y abrió la puerta- "Bienvenida a mi casa"
- "Gracias Mik"

Los dos niños entraron a la casa, que se encontraba a oscuras.

-"No hay nadie"- dijo Mik- "Vamos a buscar mi huevo"

Entraron a la recámara de Mik, que también estaba a oscuras. Fiori abrió la cortina mientras Mik se dirigió a su librero, donde había dejado al huevo la noche anterior. Sólo encontró unos pedazos de cascarón con estrellas moradas.

-"¡No puede ser! Ya no está"- dijo Mik pálido mientras buscaba en los alrededores- "¿Dónde se metió?"
- "¿Buscabas esto hijo?"- una voz de hombre asustó a Mik y Fiori que se dieron la vuelta. En frente de ellos estaba un hombre un poco bajito con el cabello rojizo y los ojos negros, igual que los de Mik. Su expresión era muy seria, no así la de la extraña criatura que tenía en la mano derecha, que parecía un molusco verdoso con un tubito por boca. A diferencia de la criatura de Fiorir, el molusco se veía muy contento y a gusto en las manos del hombre.

- "Pa...papá"- murmuró Mik. Fiori examinó al hombre, ¿Con que ese era el padre de Mik? No se veía tan extraño como lo había descrito el niño el día anterior.
- "¿Esto es lo que buscabas Mik?"- repitió el hombre- "¿Buscabas a éste Babumón?"

-"¿BABUQUÉ?"


-Continuará-