Capítulo 2 "Del pasado al futuro"
Izzy acercó una silla a la cama de su hijita, tomó asiento en ella y acto seguido se dedicó a mirar a su único tesoro. Podía notar el color lívido de la piel de Osen. La niña dormía de forma intranquila. Él acarició a su pequeñita para ayudar a que se tranquilizara y poco a poco la criatura se fue quedando quieta.
Koushiro estaba invadido por una especie de culpabilidad, el pasado lo atormentaba.... y
sin darse cuenta comenzó a recordar.
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Retrospección #1
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Koushiro estudiaba incasablemente, había encontrado unos extraños signos y se propuso descifrarlos. Su amigo Tentomon se encontraba ausente debido a un misterioso viaje a la ciudad Inicio (de esa ciudad regresaría con su digihuevo o hijo, Motimon que sería el compañero del vástago de su mejor amigo humano). El tiempo lo fue consumiendo y sin darse cuenta llegó la media noche.
"Oh, no... olvidé que hoy Yue me prepararía la cena" el pelirrojo no recordó que tenía un compromiso con su encinta (o embarazada) esposa, tenía muchos remordimientos y se apresuró a llegar a su casa..... trataría de conseguir el perdón de su mujer.
Nuestro mencionado amigo había contraído nupcias meses atrás, pero no se veía muy enamorado (incluso él sabía que se había casado con la dentista para calmar el dolor de haber perdido a su amor verdadero), parecía conformarse con la idea de tener una familia.
El problema principal de este personaje es que se concentra demasiado en las incógnitas que surgen en su cerebro y descuida su alrededor... tal vez, sin darse cuenta fue descuidando un poco a su familia --sin mala intención, sólo que lo absorbía el trabajo-- .
Izzy Izumi entró a su casa. Era un lugar pequeño pero tenía dos plantas; el sitio estaba a oscuras, lo cual extrañó al hombre, pues conocía el miedo que le tenía su esposa a la oscuridad. Dio un clic a un extraño generador y la casa se iluminó por completo.
"Esta vez me pasé de la raya" se decía "Yue estará muy molesta.. y con justa razón". El hombre pensó que su esposa estaría en la planta alta durmiendo, por lo que se dispuso a subir.... cuando lo hacía se topó con la sorpresa de su vida: su esposa estaba desmayada y golpeada. Al parecer había tenido el terrible accidente de rodar por las escaleras; era un cuadro terrible, más aún estando embarazada su mujer. La sangre que había en la cabeza del genio Izumi se esfumó, corrió hacia donde yacía su esposa, le tomó el pulso ¡aún estaba viva!.
Sabiamente checó que su compañera no tuviera algún hueso roto o algún derrame interno (¡claro que no era un experto en ello!); pero del bebé no podía suponer nada....
"Si espero a que venga una ambulancia podría ser demasiado tarde" pensó mientras la tomaba en brazos y corría a su auto.
.... Estaba sudando frío mientras conducía. Hubiera querido llevar a Yue al hospital donde trabajaba Joe, pero el lugar estaba tan retirado que decidió llegar al hospital más cercano.
Izzy llegó al hospital jadeando del cansancio y la desesperación. Vió como se llevaban a su esposa en aquella fría camilla y las esperanzas lo abandonaron; deseó tener al pequeño TK con su emblema brillando a toda potencia.... pero ahora eso no serviría de nada.
Las horas fueron pasando, nadie le daba informes y eso lo exasperaba, sentía que el ambiente de un hospital era frío e indiferente... pero sabía que así tenía que ser, no es que las personas fueran insensibles, sólo que cada quien tiene intereses propios (los médicos y las enfermeras no se van a poner a llorar por cada paciente que muera ¿O sí?).
Una gorda y horrenda enfermera se acercó a Izzy.
- ¿Es usted el Ingeniero Izumi?
- Sí, soy yo - contestó un tanto seco - ¿Tiene usted noticias de mi esposa?
- Sí, lamento informarle que la hemos perdido
- ¡¿Ha muerto?! - dijo temblando y tartamudeando - ...pe-pero ¡¿Cómo!? ¿Por qué?!
- Fue a causa de una costilla que se le fracturó y le reventó los pulmones - replicó la enfermera como si fuera algo común y sencillo de afrontar.
Koushiro no pudo permanecer en pie y poco a poco fue cayendo al cómodo sofá de la sala de esperas. Las fuerzas que le obligaban a seguir desaparecieron y por primera vez en la vida sintió miedo, miedo a estar solo y a muchas cosas más. La obesa mujer le veía, esperaba que el hombre cuestionara algo más, pero al verle tan mal decidió "alegrarlo"
- ¿No va a preguntar por su bebé? - dijo la tipa, Izzy miró los ojos de la enfermera, y sin evitarlo, comenzó a llorar.
- ¿No es suficiente el dolor que encarna mi alma al haber perdido a mi esposa?..... no, al parecer también estoy condenado por el sufrimiento de perder a mi hijo ¡Todo es culpa mía!
- Su hija está viva - dijo la mujer - está muy delicada, pero viva... por cierto, lamento lo de la muerte de su esposa pero así es la vida.
Izzy no podía articular palabra, la gota de esperanza que le llegaba sería ahora su única ilusión en la vida... ¡VIVA!, su bebé respiraba... él no dejaría morirse a esa niña, esa criatura era ahora su nuevo sostén, la nueva base de su alma.
Con ánimos renacidos corrió para pedir información "La bebita tiene dificultades respiratorias serias, Sr. Izumi" le había dicho un médico "eso se debe a que nació muy prematura y al desafortunado accidente de su esposa". Izzy miró a Osen a través del vidrio. Podía ver cómo su primogénita estaba en una moderna incubadora conectada a varios aparatos, que cubrían la diminuta figura de la pequeña; sin embargo notó que tenía sus ojos negros.
Creo que es horrible afrontar duros golpes en la vida. La unión de varios tropiezos causa que cualquier individuo se deprima. Koushiro enterró su dolor (cosa que hacía muy a menudo) y se dedicó a tratar de salvar a su bebé "Oh Yue.... todo ha sido culpa mía... bueno, no es mi culpa directamente.." su esposa no tenía familiares así que Izzy evitó el funeral y la convirtió en cenizas. Los restos de su esposa estaban ahora en una pequeña caja.
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El teléfono sonó en casa del doctor Joe Kido; su esposa Jun Motomiya (nombre de soltera) dejó de alimentar al pequeño Doguen para contestar.
- Hola, habla a la casa de la familia Kido.
Izzy escuchó la voz de la antigua perseguidora de Matt con algo de indiferencia, pero se tornó melancólico "lo que son las cosas, esta mujer decía amar a Matt como loca y se ha casado con uno de los amigos de éste, que si no es lo contrario, al menos es muy diferente a Yamato"
- Jun.... - dijo con voz temblorosa - ¿Podrías pasarme a Joe?; habla Izzy
- Si, permíteme... por cierto Izzy ¿Cómo está Yue? ¿Cuándo nace tu bebé?
La mujer de los pelos de escoba no obtuvo respuesta, pero escuchó como el hombre suspiraba de forma triste.
- ¡Querido!, Izzy te habla por teléfono por la vía antigua.
- En un momento contesto
El Médico se introdujo en su consultorio privado para charlar con más libertad y evitar que su llorón bebé interrumpiera. Jun era curiosa por naturaleza y un tanto entrometida... se puede afirmar es que estaba ansiosa por saber qué quería Koushiro Izumi; aquel hombre nunca llamaba a su casa al menos de que fuera estrictamente necesario.
- Oye Jun ¿Con quien habla Joe?
- Con Izzy, Gomamon - contestó la mujer.
Joe salió de su consultorio hogareño, su rostro tenía asentado mucha preocupación, tomó su maletín y brazalete.
- ¿A dónde vas Joe? - preguntó su digimon con arrogancia.
- Voy a casa de Izzy
- ¿Qué tenía? Se notaba extraño - agregó su mujer
- No es para menos su actitud, Jun - el hombre secó el sudor de su frente y prosiguió - su esposa acaba de morir y su hijita esta muy enferma, muy cerca también de la muerte.
- ¡Por Dios! ¡Que horrible, pobre Izzy!
- Sí... me ha pedido que sea el médico de Osen de forma particular porque él ya no quiere saber más de hospitales.
- ¿Osen?
- Ese es el nombre de la bebé, Gomamon - dijo Joe mientras se ponía los zapatos.
- ¡Vaya! Y luego dicen que Doguen es un nombre raro.
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Sobra decir que esa noticia se extendió y llegó los oídos de todos los exelegidos; quienes le brindaron apoyo a Izzy, cada uno a su manera. Incluso Tai le ofreció a Izzy que se fuera a vivir junto a él y Kari en un gran departamento, el pelirrojo terminó aceptando después de tantos ruegos y desde entonces los hermanos Yagami han compartido techo con Izumi y la descendencia de éstos se ha criado casi como hermanos (para aquel entonces Kari ya había perdido a su marido y Taichi era padre soltero).
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Fin de retrospección #1
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Osen abrió sus ojos y vio a su progenitor velando su sueño.
- Papá, gracias por estar aquí - la niña había recuperado su color y se veía fuerte. Sonrió levemente, vio que su padre había estado pensando en cosas perturbadoras (era muy observadora) pero no le dijo nada. - ¿Y Motimon?
- Está en la guardería con los demás, Tentomon, Gatomon y Agumon han ido a recogerlos.
- Es curioso - dijo Osen mientras bostezaba
- ¿Qué cosa?
- Todo lo relacionado con digimons - dijo con voz clara - me refiero a que es muy interesante la relación entre un digimon y un humano, es algo así como "estrecha" e implica en muchos casos, fidelidad.... pero no siempre es así ¿Verdad?
La curiosidad de la niña era parecida a la de su padre, sólo que un poco más subjetiva. Izzy la miró con ternura, le daba orgullo que se le pareciera "a menudo los hijos se nos parecen, así nos dan la primera satisfacción". Momentos después el cuarto fue invadido por los demás habitantes de la casa que tenían como propósito visitar a Osen.
- ¿Cómo te sientes O-chan? - preguntó Toshiro - ¿Necesitas algo?
- Estoy bien - dijo la niña mientras Kari le ofrecía el alimento que compraron en el restaurante de Davis.
Taiki la miró fijamente y comenzó a reprenderla.
- De ahora en adelante vas a tener mas cuidado con el inhalador - el niño de 10 años colgó de un cordón el dichoso inhalador y lo arrojó al cuello de Osen - No lo vas a perder, de eso me encargo yo!!
- Eh... gracias
Los adultos miraban la escena entretenidos, entonces la puerta sonó y al abrir entraron los digimons, que llegaban a su hogar. Eran: Gatomon, Tentomon, Agumon, Koromon, Salamon y Motimon.
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(En otra parte de Odaiba)
La mujer llegaba del supermercado, a su lado iba un pequeño de aproximados seis años, parecía muy concentrado en cargar una pequeña bolsa con víveres, como si fuera un importante trabajo.
Sora entró a su casa junto con Kotaro (su hijo) y caminó hacia la cocina con la lógica intención de acomodar los artículos que había comprado. Una niña rubia estaba viendo la televisión, parecía estar muy aburrida. El pequeño Kotaro fue hacia su hermana y la saludó.
- ¡Hola hermana! ¡Ya volvimos! - dijo efusivamente
- ¿No me digas? - preguntó en tono irónico - Con razón te estoy viendo.
La madre también saludó a su primogénita.
- ¿Cómo te ha ido en la escuela, Mayumi? - preguntó para tratar de sacarle plática a su hermosa pero apática hija.
Mayumi se levantó del sillón y cargó a su digimon (Pyokomon), tenía planeado que su "digital monster" tomara una siesta. Kotaro aprovechó que su hermana abandonaba el sitio (más que nada la televisión) y puso una grabación que solía ver 2 o 3 veces al día.
- Me fue igual mamá - dijo la chica - sólo que cambié de extracurricular
- ¿Abandonaste tu clase de gimnasia?
- Sí, ya me había aburrido - comentó mientras dejaba a Pyokomon en una camita especial junto a Biyomon que dormía plácidamente - desde que a Osen le prohibieron practicar gimnasia por su asma, la clase se volvió aburrida, por lo que decidí entrar el equipo de fútbol junto a Taiki y los demás.
- Me parece perfecto - replicó Sora, recordando su niñez.
· Mayumi Ishida era una rubia poco femenina, digamos que tenía un toque de marimacha (sobre todo por su vestuario). Era una obra de arte ya que estaba formada por la mezcla de Sora y Matt, lo que la hacía muy agraciada; se distinguía por ser rebelde, callada, apática, irónica... aún así resultaba tener un gran sentido de responsabilidad (como Sora) y un sentimentalismo oculto (como Matt). Cursaba el cuarto grado junto a Osen y Taiki por lo que es lógico pensar que tenía 10 años. Ella estaba muy afectada por el divorcio de sus padres, aunque no lo dejaba ver, e incluso decía que no le importaba ni perjudicada en lo más mínimo, pero la verdad es que le tenía cierto resentimiento a Matt. Su digimon era Pyokomon, al cual acostumbraba mimar más que a su hermano.
· Kotaro Ishida era un angelito de 6 añitos que reflejaba una ternura inexplicable; era extrovertido y llorón. Su cabello era café rojizo, así como sus ojos... y el color de su piel era más oscura que la blanca tez de su hermana mayor. Estaba consentido en demasía, especialmente por su padre, al cual parecía estar muy apegado. Kotaro veía a Matt como el más grandioso héroe (aceptémoslo, no cualquiera tiene un padre astronauta) y cuando su padre no estaba en una misión espacial solía irse a vivir con él. Su digimon es Tsunomon.
- ¿Puedes ver que hace tu hermano? - ordenó Sora a Mayumi (apodada May).
- Está viendo de nuevo el video de cuando papá pisó Marte; ¡¡Está obsesionado!! - renegó.
Mayumi abandonó la cocina para encerrarse un rato en su habitación; Sora, en cambio, se unió a su hijo y comenzó a ver a su Exesposo en la TV. Kotaro miraba el video embelesado.... Sora no pudo evitar comenzar a derramar lágrimas por el pasado que poseía.
El futuro era tan incierto que era mejor olvidarse que existía un mañana, o sea que era mejor disfrutar el presente; pero del dicho al hecho hay un largo trecho.. y para aquella mujer ex - portadora del amor era complicado avanzar...
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Retrospección #2
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Cada quien daba su propia interpretación a la hermosa redondez de la luna; Tai pudo decir que parecía ser un balón de soccer, pero en cambio Matt pudo haber dicho que se veía como un botón de rosa blanca; ambos estaban en su lecho, pensando en la belleza lunar y a la vez en Sora.
Ese baile había marcado el destino de aquellas tres almas. El resultado de ciertas declaraciones de amor no podía ser ni positivo ni negativo... cada quien le daba su enfoque.
En otro lecho, Sora estaba tratando de dormir... pero no podía hacerlo, su mente entrelazaba hechos y su alma sentía gran presión y tensión, ya que de su elección no sólo dependía su felicidad, sino la felicidad de 3 personas (Matt/Tai/Sora).
"¿Qué haré?" se cuestionaba la joven "No logro comprender porqué se formó este triángulo amoroso... ¿Cómo pude ser la portadora del amor si no sé ni lo que quiero?"
La chica había tenido una noche difícil, dos de sus amigos le habían declarado su amor y ella con su indecisión no pudo dar contestación... estaba tan confundida que no sabía lo que quería.
Primeramente comenzó a pensar en el chico que conocía desde los más remotos días de su infancia: Taichi Yagami.
"¡Oh, Tai!! ¿Por qué tu?" se había dicho "Pensé que el afecto que nos unía era fraternal... pero ahora tengo mis dudas"
Ella podía clasificar a su coetáneo como una persona firme, valiente y con auges de liderazgo; pero bajo esa imagen Sora sabía que había un joven inmaduro y temeroso de negativas.
Por otro lado estaba Yamatto Ishida, su callado e interesante (por no decir popular) amigo. Sora sentía atracción por el rubio... no podía negarlo; además, llevaba tiempo teniendo una especie de relación amorosa con él; sin embargo, había aspectos de Matt que no aprobaba simplemente porque no los conocía. Ella sabía que el chico había sido azotado por un dolor pasado y resentimientos de índole familiar; y por ello sentía la extraña necesidad de consolarlo, pero no estaba segura de que era amor.
Por aquel entonces estudiaba Diseño de modas. Su talento para realizar vestidos era notable (¿Quién lo iba a imaginar?), especialmente si se trataba de trajes tradicionales o kimonos.
El destino fue tejiendo su camino, Sin quererlo, terminó magullando el corazón de Tai y casándose con Matt debido a que el cariño que sentía por el primero podía traducirse como "amor de hermanos" y el afecto hacia el segundo era distinto.
El futuro va haciéndose pasado sin darnos cuenta; Sora no imaginó que terminaría siendo madre de dos hermosos niños y divorciada del amor de su vida...... ¿Divorcio?, ella no estaba segura de que eso fuera una solución, pero si entre Yamato y ella no había una relación estable lo mejor era una separación... probablemente temporal.
Era mejor que se alejaran antes de llegar a discutir... tenían diferentes opiniones y actividades (¡Pues claro!, una era modista y el otro astronauta). Aunque ellos en el fondo tenían la esperanza de regenerar su hogar, es decir... volver.
Para Yamato era difícil comprender cómo había podido caer en el mismo error que se padre, y no es que Sora fuera la persona equivocada.... el silencio de su alma le consumía de rara manera, tal vez lo que en realidad quería era independencia; pero no, él no podía tener "libertad" porque había dos seres a los que amaba y eran su responsabilidad "¿Cómo es posible que le haga a mis hijos lo mismo que me hicieron a mí?" solía decirse "es irónico". Su alrededor oscuro (el espacio exterior) lo embobaba y evitaba pensar más en torturarse "Después de todo mi trabajo jamás me hubiera permitido tener un hogar estable; Sora tiene razón".
No había abandonado la idea de reconquistar su hogar, pero sólo el tiempo le diría si era conveniente.
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Fin de retrospección #2
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La Sora de aproximados 39 años seguía viendo la televisión con su hijo que parecía disfrutar el momento.
- ¿Ves a Gabumon, mami?
- Sí Kotaro, se ve muy apuesto junto a tu papá
- Mi Tsunomon será como Gabumon ¿Verdad?
- Si, eso creo... por lo menos así debe ser - agregó la madre.
Kotaro miró a Tsunomon de forma curiosa, el digimon se sonrojó un poco.
- Ya oíste a Mamá, amigo mío - gritó contento - Vas a ser como tu papá Gabumon... ¡Yo también seré como mi papi y me iré a conquistar el espacio!
El niño volvió a cuestionar a su madre.
- Mami ¿cuándo llegará papá?
- Al parecer mañana, mi niño... pero no lo sé con exactitud
- ¡Qué bueno!, ya quiero verlo para que se vuelva a casar contigo.
Ella entonces se quedó callada y admirada ante el comentario del niño "lo que es la inocencia" se había dicho; acto seguido se fue a preparar la cena.
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Esa noche la responsable ama de casa estaba histérica, sus ojos mieles estaban deprimidos pero también algo exaltados por el enojo y su melena morada estaba sostenida por una pañoleta roja.
- ¿¡Cómo es posible que no venga!? - gritó ante su hija mayor - comprendo que tu padre sea un "héroe", pero esto es el colmo Kurumi; no le pido que venga, sólo que llame y que extinga mi preocupación.
El nombre de aquella conocida mujer era Miyako, que estaba preocupada porque su querido esposo Ken no se había aparecido en la casa los últimos días. Yolei comprendía que el ser un famoso detective robaba tiempo, sabía que su esposo era ingenioso, listo y con carácter ideal para ser "detective".. y se sentía orgullosa por ello (al menos lo aceptaba); pero había extremos, y si su esposo estaba en una complicada MISIÓN al menos podía avisarle.
- Esta vez papá se pasó de la raya - dijo la linda Kurumi con su larga cabellera azul marino - Jamás había faltado tanto a la casa, siempre nos avisaba.
- ¿Quieres decir que a mi papá le pasó algo? - interrumpió un pequeño que no podía pasar de 9 años, su voz se quebró al final de la frase replicada y sus ojitos azules estaba llorosos.
- ¡Ni se te ocurra pensar eso Zetaro! - ordenó la madre de forma exaltada y en tono regañón. Aunque Yolei tenía sus dudas, tal vez su hijo mediano tenía razón - mejor váyanse a la cama, seguro Ken llegará tarde.... Kurumi, Zetaro ¡Obedezcan!
Los dos hermanos se retiraron, sabían que cuando su madre estaba tensa lo mejor era alejarse.
Miyako escuchó un llanto que reconoció en seguida, su bebé lloraba... era hora de darle alimento. Se asomó a la cuna y llevó a sus brazos a aquel ser tan indefenso, comenzó a mecerlo con ternura y el exigente llanto de la criatura se fue extinguiendo; miró una foto de su boda y suspiró melancólica... la vida había sido buena con ella, los sufrimientos no habían azotado su existencia de forma drástica como había ocurrido con otros de sus amigos.
· Kurumi era la mayor de los hijos de los elegidos, era toda una adolescente de 13 años; poseía un encanto común en las chicas: la coquetería y el ser extrovertida.
Tenía gran sentido de la moda y solía tomarle interés a las cosas triviales. Una de sus metas era conquistar a muchos chicos con sus encantos. También era muy picueca, es decir, enfadosa. Era un As en la mecánica, su rapidez al armar y desarmar cosas lo demostraba. Tenía una altura notable y los ojos de su madre, por lo mismo, heredó problemas visuales y usaba lentes. A ella le encantaba lucirse ante los demás y hacerlos quedar en ridículo, pero en el fondo era muy sensible y llorona. La relación con su digimon, llamado Poromon, era buena, sin llegar a considerarse excelente. Era la primogénita de Ken y Miyako.
· Zetaro heredó los ojos de su padre, también la mirada y ciertos ademanes; de Yolei, su madre, tomó el color de cabello y otros aspectos sin importancia. Estaba próximo a los 9 años y era un niño muy dependiente, distraído, inocente, ingenuo y juguetón. Su mayor aptitud la encontramos en el dibujo y junto a Seiyuro y Osen (que eran fantasiosos e imaginativos) solía crear comics bastante originales. Era fácilmente engañado, especialmente por su hermana mayor. Su digimon era Minomon, y juntos pasaban largo rato dibujando (bueno, el digimon solo lo veía ) .
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Takeru Takaishi terminó de cenar y lavó los trastes. Su hijo aún no llegaba a casa pero no estaba preocupado porque sabía que se encontraba en casa de alguno de sus amigos. Encendió un moderno ordenador y comenzó a idear la trama de su nueva novela, la cual trataría del mundo digimon y los niños elegidos (basada en hechos reales, jaja). El adulto pensaba que sería su obra cumbre o por lo menos su más grande éxito. Dentro de su ser deseaba volver a ser un niño pequeño y de nuevo tener aventuras; Patamon voló desde su sitio hasta donde estaba su amigo.
- ¿Interrumpo, TK?
- Para nada Patamon.... no estoy inspirado para escribir el día de hoy
- TK... estaba pensando en que Seiyuro y Tokomon no han vuelto...
- ¡Bah!, no te preocupes - dijo sonriente - Debió haber ido a la casa de Toshiro o de Kyosuke, no debe tardar.
Y como si hubiera sido invocado, el rubio vástago del escritor Takaishi apareció.
- Hola papá - dijo con su habitual alegría junto con su peligroso digimon (¿han visto la dentadura de Tokomon?... es peligrosa).
- ¡Pero Tokomon! - reprendió Patamon como todo un "padre" - es terrible no avisar, a la próxima no olvides hacerlo!!
- No lo regañes Patamon - dijo Seiyuro (o Sei) - en realidad no es su culpa, pasé muy tarde por él a la guardería.
- Sei, sabes que no me molesta que llegues tarde, pero a la próxima asegúrate de avisarme donde estás ¿OK?
- No es mi culpa, si Osen no se hubiera enfermado me hubiera acordado de avisarte.
Llegaron al comedor y mientras dialogaban, Takeru recalentaba la cena para su hijo.
- Entonces la pequeña Izumi volvió a Recaer...
- Perdió su medicina - dijo Sei - pero el tío Joe dice que está bien.
- Ya veo, luego le hablaré a Izzy aprovechando que la editorial me dio un descansito, jeje... sería bueno ir pensando en salir de vacaciones a algún lugar - Takeru pensó que si Joe había ido a la casa Yagami/Izumi debió haber llevado a su hijo... él sabía que su hijo Sei no llevaba una buena relación con el hijo de Kido.
- Cambiando de tema ¿De casualidad no te peleaste con Doguen?, la última vez Joe me habló y me dijo que le habías arrojado arena en los ojos.
- Mmmm, no peleé, sólo que mientras jugaba ping pong con Toshiro lo golpeé en la cabeza con la pelotita y el gallina se fue llorando; ¡Fue un accidente!
- Eso dices siempre
Tokomon y Patamon aparecieron de pronto; el menor traía en su hocico el teléfono, entonces Patamon dijo
- ¡TK! Te habla Joe; Se oye molesto- Sei se enrojeció de la vergüenza, otra vez el chismoso de Doguen le iba a causar un castigo.
- Aquí vamos otra vez, ya me estoy cansando de esto - dijo el dueño o el antiguo portador de la esperanza.
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Daisuke Motomiya cerró su restaurante (creo que es un puesto móvil, uno de tantos en Japón.. pero hay que agregar que la comida del líder de los elegidos era una de las predilectas de toda la ciudad). Decidió sentarse en una banca de un cercano parque, lo hizo con tal naturalidad que fácil fue creer que eso era costumbre, ahí solía sentarse a pensar junto a V-mon mientras esperaba a su hijo.
- El trabajo ha estado muy pesado - dijo su agradable digimon azul.
- Sí, pero me tomaré unas cuantas semanas de descanso... dejaré todo en manos del gerente - dijo Davis con cierta flojera dando un gran bostezo.
V-mon le observó por largo rato. Su mejor amigo parecía bastante cansado de seguir la rutina diaria que la vida le había impuesto. Daisuke había escondido casi por completo su espontánea alegría y estaba vacía gran parte de su corazón. El hombre dio un suspiro y al final logró articular la palabra "Kari", pues sí, al parecer este personaje seguía enamorado de un imposible.
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Retrospección #3
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Este joven, cuando tenía 11 años se enamoró perdidamente de una niña que aunque parecía notarlo, no le daba importancia especial. Desgraciadamente no fue sólo un inocente primer amor, sino un sentimiento duradero y eterno. Davis no tenía experiencia sobre amar, podía haber gritado a toda potencia que amaba a "Hikar Yagami", pero no le daba experiencia ni afirmaba su amor... su deseo frustrado era tener al menos una aventura con aquella chica.
Los sucesos que marcaron su historia influyeron también en el destino de otras dos personas: Takeru y Hikari; pero lo que si es cierto es que ese triángulo amoroso existió y nunca se consumó ni enfrentó.
Cada uno dejó de luchar por obtener y saciar sus sentimientos y siguió un camino diferente; los tres encontraron la manera de casarse sin involucrar mucho al amor y estuvieron viviendo en paz.
Hikari (Kari) había contraído nupcias con un economista serio y reservado de apellido Sugiyama; de ese matrimonio nació el Kawaii de Toshiro. En realidad nadie puede dar una hipótesis de la relación que llevaban esos esposos, ni siquiera Tai que era el hermano de Kari...
TK se casó con la cineasta Yoshisaki Yínbee, y tuvo el gusto de quedar embarazada de forma veloz, Seiyuro nació después de 9 meses; la relación de Takeru con aquella ingeniosa mujer era muy buena debido a que ambos compartían los mismos intereses.
Hay cuestiones sin resolver todavía; ¿Por qué el hermano de Matt nunca tuvo valor para aclarar los sentimientos de su alma?, Él había decidido no preguntarse si en verdad sentía amor por cierta mujer que irradiaba una luz incontrolable; era mejor dejarlo a la duda...
Este hombre siempre estaba resguardado por una esperanza eterna que parecía la cura a todos sus males. La inocencia infantil nunca le abandonó, lo cual era muy bueno.... ojalá muchos adultos conservaran el espíritu maravilloso de la niñez; porque si Kari nunca dejó de ser misteriosa, él tampoco dejó de tener la inocencia de un niño.
El último en ser líder de los digielegidos y de portar la cresta o el emblema del valor (o coraje) y amistad, al verse desplazado por su "amor" se fue enrolando con una mesera llamada Makoto, su apellido era Dosai y sobra decir que era un encanto de chica. Davis no podía pedir más en una mujer, se sentía realmente amado.... eso era en esos momentos lo único que le importaba... ser amado como nunca. Tuvo entonces a su hijo Kyosuke y su esposa le dio la idea de ser cocinero y dedicarse a fabricar comida tradicional japonesa. El negocio fue creciendo muchísimo a través de los años y Daisuke fue haciéndose famoso de una manera sorprendente, siguió un camino muy distinto del que pensó pues cuando él era chico se imaginaba como estrella de fútbol soccer. Su matrimonio en cambio fue decayendo y debilitándose hasta agotarse .
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Era un hermoso día de abril, el telecomunicador de la casa Motomiya se encendió y el juvenil rostro de Kari apareció en la pantalla. Davis, al atender la llamada, no pudo evitar sonrojarse como cuando era chico y estaba "libre". Makoto notó la turbación de su esposo desde lejos; lo miraba con tristeza sin que él se diera cuenta.
- ¿Davis? - dijo Kari con una dulce sonrisa.
- Ka.. Kari - saludó él - hace mucho tiempo que no nos comunicábamos ¿Verdad?
- Sí, la última vez que nos vimos fue hace dos años, cuando nacieron nuestros hijos - la voz de la joven madre se oía algo entusiasmada - por lo mismo he querido hablarte; Quiero que tu familia y la de mi querido Takeru tengan el honor de venir a pasar un fin de semana en la casa que mi esposo y yo compramos en el campo. Creo que es bueno que los elegidos convivan en veces ¿No es así? ¿Qué me dices?
- Creo que.... está bien ¡Claro, será genial!; Acepto la invitación que nos haces - dijo algo contento mientras el corazón le latía con furia y emoción.
(
Cabe mencionar que ese día de campo nunca llegó a realizarse; sin embargo, estuvo en proceso... sólo que un terrible accidente lo impidió)
Las tres nuevas familias (Takaishi, Motomiya y Sugiyama/Yagami) viajaban junto a sus digimons en un auto enorme y aerodinámico; el camino era tranquilo, pero todo en la vida es incierto y desconocido.. un enorme trailer (cuyo conductor venía ebrio) se estampó contra el vehículo, el choque fue imprevisto y muy fuerte; Kari se aferró a su bebé con la fija idea de protegerlo... Abrió los ojos a la vida una vez más, pero ya no era la misma, aquel accidente dejó muertos a su marido, Kiúgoro Sugiyama, y a Yoshisaki Yínbee, la esposa de su amigo TK.
Por otra parte, el accidente marcó también al matrimonio Motomiya. Makoto no soportaba ver como su "esposo" amaba y consolaba a una viuda. Ella recordaba que Davis jamás le había prometido amarla; antes era suficiente con tenerlo en cuerpo... ahora no, ella también necesitaba el alma de Daisuke. Lo más curioso es que a pesar de haberse separado como pareja vivían actualmente en la misma casa y se llevaban como amigos. Para ellos lo esencial era criar a su hijo: el expresivo Kyosuke.
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Fin de retrospección #3
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Dos niños caminaban por el parque. El mayor era un varón de aproximados 13 años y cabello desparpajado; la menor era una niña con rostro angelical y jovial.
- Pero Kyo ¿No será mucha molestia pedirle a tu padre que me lleve a casa?
Kyo miró a su interlocutora con ternura y se sonrojó (no había duda de que esa pequeña le fascinaba).
- Ya te dije que no, Yuri; nuestros padres son buenos amigos, estoy seguro de que a papá le dará gusto llevarte a casa.
La niña, (que poseía los mismos ojos verdes de Iori), le sonrió, pero parecía apenada de pedirle ese favor a su amigo.
- Mira Yuri, allá está papá- entonces con su efusividad diaria gritó - ¡papá!
Temerosamente le tomó la mano a su coetánea y corrió hacia su padre, Daisuke Motomiya.
- ¡Con que aquí estabas, Kyo! - le dijo sonriente olvidando sus pensamientos tristes - ¡Vaya! Y parece que traes a una compañera - el rostro de Davis se tornó pillo - o... ¿Acaso tenían una cita?
- ¡Cómo crees papá! - dijo su hijo alterado y rojo como un tomate.
- Kyosuke me hizo el favor de acompañarme al museo - dijo la pequeña - en mi clase me dieron como deber visitarlo...
La voz de la niña era muy dulce, quizás demasiado melosa, era muy educada, como su padre.
- ¡Cada día que te veo, querida Yuriko, estás más grade! - agregó el hombre - Cody debe darte vitaminas todo el santo día.
- Papá, tenemos que llevar a Yuri a su casa, también debemos pasar a la guardería por Chibimon ( o Demiveemon).
- Pues no perdamos más tiempo aquí - dijo Davis olvidando su melancolía y centrándose en verse divertido ante su hijo.
- ¿No será mucha molestia? - preguntó Yuri
- ¡No te digo!... no eres igual a Cody nomás porque eres niña - dijo el hombre bromeando.
· Kyosuke (apodado Kyo) era un chico bastante "loco" o extrovertido. Era imprudente, acelerado y deportista. Ocultaba sus sentimientos con dificultad debido a la espontaneidad de su carácter, así que la ira, la emoción, la tristeza y muchos otros sentimientos que lo acogían, nunca fueron un secreto para el mundo. Tenía una faceta que reflejaba algo de timidez en asuntos amorosos. Entablaba una buena amistad con Toshiro y Seiyuro, sólo que con el último solía tener cierta rivalidad, especialmente si se trataba de ganar el amor de Yuriko Hida. Su digimon era Chibimon.
· Yuriko era la única hija de Iori (el más pequeño de los elegidos). A la corta edad de 11 años se había convertido en toda una dama. Sus modales eran refinados pero su personalidad sencilla, era servicial y practicaba Kempo. Su capacidad de convivir de forma pacífica la hacía diferente a los demás vástagos de los elegidos. La madre de Yuriko era la amable Hiromi Hida, la cual llevaba un armónico y duradero matrimonio con el abogado Iori (Por fin algo que no es tragedia ¿no?), su digimon era Upamon.
---Al llegar al hogar de Cody---
La casa Hida era antigua y parecía que en tiempos pasados había sido un dojo. Para Davis era raro entrar a un sitio donde la tecnología no había arrasado con la vida de las personas; se sentía bien estar ahí.
- De nuevo te doy las gracias por traer a Yuri de regreso, empezaba a inquietarme ¿No te quedas al té? - inquirió Cody
- No gracias, no me apetece; además no quiero importunar; seguro y tienes que prepararte para tus casos.
Iori sonrió, pudo notar algo tenso a Davis, tal vez los recuerdos lo invadían.
- Hoy salí de vacaciones - dijo al fin - pero si gustas dejamos el té para otra ocasión
- Estaría bien, amigo... hace tiempo que no nos reunimos.
- Habrá entonces que organizarnos.
-- (Mientras tanto)
- ¿Ya terminaste, mamá?, hemos comprado tantas cosas que ya no recuerdo a qué veníamos - renegó Ben.
- ¡Ay!... no te quejes ¿quieres? - dijo la madre muy entretenida mientras miraba el escaparate - Ben ¿Ves ese vestido?
- Sí, me parece que te va perfecto - dijo el chico en tono irónico.
- Mmmmm.... sí, ése compraré - agregó la bella mujer - es ideal para el programa del día de mañana porque será en la feria... además, será el último programa de la temporada y tendremos unas lindas vacaciones.
Ben estaba harto de dar vueltas y comprar en el centro comercial. No podía negar que le causaba orgullo el tener a una madre tan conservada y moderna, pero había ciertos límites que su madre había sobrepasado.
- ¡Ya me cansé! - gritó a punto de iniciar un berrinche. Su pequeño digimon, llamado Tanemon, al ver la expresión del rostro de su "amo" decidió imitarlo (cosa que hacía muy seguido Palmon con Mimi).
Mimi Tachikawa respiró profundamente "paciencia" se dijo, su hijo era en ocasiones bastante terco, berrinchudo y mimado; lo peor era que eso lo había heredado de ella misma, no podía reprocharle mucho.
- Palmon, ayúdale
- Pero Mimi, yo también traigo cosas - se excusó su digimon.
- Ok, Ok... sólo compro mi vestuario y nos iremos.
En aquel entonces ella trabajaba en la televisión. Su programa tenía el nombre de "Cocinando con Mimi" por lo que era lógico pensar que se dedicaba a la cocina, especialmente a la repostería. Debido "según ella" a su profesionalismo le habían dado unas vacaciones, y el día de mañana haría un programa especial en Digimonlandia.
Cuando la señora Tachikawa terminó sus compras, emprendieron el regreso. El centro comercial era grande, pero sin duda uno de los lugares favoritos de la antigua portadora de la pureza. Las pupilas de Mimi se congelaron al ver una tienda de cómputo virtual; se detuvo y miró con atención esos artefactos complicados, parecían recordarle algo.
Mimi estaba embobada en esa tienda, su hijo de 10 años estaba "asustado"
- Palmon... ¿Por qué mamá se detiene en esa tienda? - Ben no estaba impuesto a que su madre apreciara artículos computacionales.
- Yo, no lo sé - dijo el digimon verde - deben ser los recuerdos.
- ¿Los recuerdos? - interrumpió el niño - ¡Bah!, lo más seguro es que esté tan cansada que ya ni sepa lo que ve.
· Ben (su nombre completo era Benjamín) era el fruto de cierta relación entre la mencionada Mimi Tachikawa y el digielegido Michael; nunca se casaron (vivían en unión libre), pero cuando dejaron de entenderse se separaron. Ben tenía 10 años y asistía a un colegio de varones. Era muy presumido, despreciativo y terco debido a que estaba criado de forma consentida. En el fondo era muy sensible pero prefería aferrarse en la terquedad y la fanfarronería de su YO externo. Estaba impuesto a comodidades extremas y no practicaba deportes. Hay que agregar que era muy celoso y tenía un buen sentido de la moda; sus berrinches sacaban de quicio a cualquiera, era enemigo de la ridiculez y por eso evitaba ser efusivo preferiendo ser seco y agresivo. Tanemon y Ben la llevaban muy bien, así como Palmon y Mimi.
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Retrospección #4
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Ella estaba notablemente furiosa, al entrar a su alcoba se encargó de estrellar la puerta como demostración de su ira. Si algo odiaba aquella chica era el ser ignorada, el no ser escuchada y el que no la tomaran en cuenta. Y no era que él no la atendiera, simplemente su enojo surgía al ver a su novio pegado a ese maldito aparato... su egoísmo le llevaba a pensar que la relación que tenía con Izzy no era la adecuada; en parte tenía razón, los dos eran algo egoístas.
Simplemente no le cabía en la cabeza como para su Koushiro el estar frente al ordenador tanto tiempo era entretenido. Estaba consciente de que el joven genio no iba a cambiar nunca y si ella lo aceptaba tendría que sufrir las consecuencias de su aserción (consecuencias que ella misma pudo suponer).
"Izzy, no creo que esto funcione..." había dicho después de la última discusión que tuvieron; Koushiro le había desviado la mirada.
"Si lo dices porque me evado con la computadora, yo.... prometo" había dicho él, pero fue interrumpido por ella "No es sólo eso" la voz de Mimi se oía temblorosa por el sentimiento "¡Ya no prometas cosas que no cumplirás!!" gritó.
Izzy trató de calmarla, la acogió en sus cálidos brazos y la consoló, sabía lo inestable que era ella y aunque la quisiera no iba a contradecirla; su corazón ya estaba impuesto a tropezar y a despedazarse; eso no lo hacía insensible.. solo le hacía ver las cosas desde una manera más indiferente. Él nunca había comprendido a Mimi, y siendo francoa, jamás se había entendido a sí mismo "El ser humano es muy complejo" solía decirse " ¿Y quién soy yo para juzgar su decisión?"
- Mimi ¿Estás segura? ¿En verdad quieres que terminemos? - Izzy temblaba al emitir estas palabras; ya sentía su próximo vacío - no importa lo que decidas, al final siempre terminaré sintiendo lo mismo por ti.
- No lo sé.... - había contestado entre llanto - Hay algo que no me llena, que no me convence.
- Bueno - dijo él - una separación nos caerá bien, ya dirá el futuro si volvemos a formar una pareja.
Al decir esas últimas palabras, Izzy la soltó y se dio la vuelta.
- Nos veremos - le dijo y comenzó avanzar. Mientras lo hacía pudo oír el tenue llanto de su exnovia; pero bueno, él no había decidido dejarla, sino ella.... eso había sido consecuencia de la inmadurez de su amada.
"¡Oh! ¿Qué he hecho?... no lo sé" se dijo Mimi mientras veía como Izzy se alejaba; secó sus lágrimas y sonrió "Te volveré a ver"
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Mimi regresó a EUA; estuvo trabajando en distintos programas de cocina que no tuvieron mucho éxito. Su fracaso se debió a que muchas recetas de Mimi hacía eran extrañas mezclas, no a cualquier persona le gusta el huevo con azúcar. Se relacionó amorosamente con Michael, pero nunca quiso formalizar su relación con él; tuvo un hijo al que llamó Ben.... En el futuro, la antigua portadora de la pureza regresaría a su patria para trabajar en el programa "Cocinando con Mimi", el cual tendría bastante éxito pues estaba enfocado a la repostería.
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Izzy Izumi, después de romper su relación con Mimi, no parecía verse muy triste; no sabía porqué, pero le desconcertaba no darle entera importancia a ello.
Llegó a su casa y revisó sus mensajes; había uno de Taichi Yagami, en donde le pedía ayuda urgente. Koushiro pensó que su despistado e imprudente amigo había descompuesto de nuevo su brazalete virtual, y compadeciéndose de él decidió ir en su ayuda.
---Al llegar a casa de Tai---
Koushiro tocó el timbre. El Tai que abrió la puerta estaba hecho un desastre, un mandil le cubría la ropa, estaba cumpliendo a la perfección su objetivo ya que evitaba que la ropa de Taichi se ensuciara. Tai estaba manchado de leche, talco y diversas sustancias desconocidas para Koushiro; cualquiera hubiera pensado que Tai cuidaba a un bebé, pero eso era imposible porque Tai no tenía hijos ¿O sí?
- ¡Cielos, Izzy, gracias por venir!
- Pero Tai ¿Qué ha pasado? - preguntó Izzy bastante entretenido por la graciosa escena que dramatizaba su amigo.
Un llanto potente y tierno se escuchó, Taichi puso una cara de sufrimiento.
- ¡Ahora ¿Qué será lo que quiere?! - replicó en son de súplica.
Los dos hombres cruzaron el pequeño apartamento y entraron al cuarto del joven Yagami, que, por cierto, estaba muy desordenado.
Koushiro Izumi vio a un pequeño bebé que parecía ser una réplica exacta de su amigo. Se asombró un poco ¿De dónde había sacado a ese niño?, sin duda era el hijo de Tai.
- Tai ¿Qué significa esto?; ¿Cómo es que es tuyo este bebé?
- ¿Eh? ¿Cómo te diste cuenta de que era mío? - dijo ingenuamente Tai
- Supongo que por el parecido ¿No crees?
Taichi golpeó su cabeza como queriendo decir "Es verdad, qué torpe soy". El bebé se había callado, al parecer sólo quería compañía (por ahora).
- ¿Vas a decirme de dónde lo sacaste?.... ¿O vas a seguir contemplándolo?
- Pues verás, es una larga historia - Tai tomó asiento con el bebé en sus brazos, su pelirrojo amigo lo imitó sentándose en una silla contigua, entonces Yagami se dispuso a continuar - No sabía que él existía; aquella mujer nunca me lo dijo...
- ¿Quieres decir que no sabes quién es la madre?
- Si sé quien es, pero no sé ni como se llama.
- ¡Vaya Tai!, ya me imagino con que tipo de mujer estuviste.
- No me juzgues Izzy, ha sido difícil afrontar esto... tú sabes que cuando Sora y Matt se casaron quedé muy afectado; entonces....
- Entonces buscaste refugio en una ramera ¿Verdad? - continuó Koushiro - Sí.... eso es típico en las personas heridas; buscan refugio en cualquier lugar... te comprendo.
- Ni siquiera consideré esa relación como un romance esporádico; pero hoy me encuentro con ella y me da al niño como si fuera un juguete, dijo que el bebé le estorbaba...
- Habrá que hacer la prueba de paternidad - dijo Izzy
- ¡Pero si es idéntico a mí!
- Sí, ya lo noté pero hay muchos humanos que se parecen; el mismo Davis tiene cierto parecido contigo... es mejor estar seguros.
Desde la cocina se oyó un grito - ¡TAIIIII!!!, después se escuchó una pequeña explosión.
- ¿Qué ocurre?
- Seguro que Agumon hizo un desastre en la cocina con eso del biberón.
El bebé, que posteriormente fue llamado Taiki, volvió a llorar, esta vez sus chillidos eran más fuertes.
- Esto no es agradable - dijo Izzy - Ninguno de los dos sabe cuidar niños ¿Por qué no le hablas a Kari?
- Se fue a un día de Campo con su familia y las de TK y Davis.
- Ah... ya veo
- Pero le hablé a Matt; ya viene en camino... él tiene una hija y podrá aconsejarnos.
- Eso espero - rogó "no entiendo como Tai puede llevarse tan bien con Matt después de lo de Sora... ¡eso es ser noble!, aunque siempre, en el fondo, fueron los mejores amigos".
Más tarde llegaron Yamatto, Gabumon y su hija, la pequeña Mayumi...... hay que agregar que con la ayuda del moderno padre pudieron controlar la situación. Al ver Taichi cómo se comportaba su rubio amigo con su hija le dio por sentir la necesidad de ser el verdadero padre del niño; después de todo, una paternidad improvisada le caería bien.
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Fin de retrospección #4
**
No se puede agregar mucho de Cody, Ken, Yolei y Joe, probablemente porque no tienen un pasado trágico.
*Cody vive aún un fructuoso matrimonio con su amada esposa Hiromi y su hija Yuri.
*Yolei y Ken también viven "felices" (con las complicaciones de un matrimonio común); actualmente Miyako se encuentra preocupada por la desaparición de su esposo.
*Joe se casó "extrañamente" con Jun (el cómo sucedió y porqué es un misterio para los digiestinados) y tiene un solo hijo, el llorón Doguen.
Fin del capítulo 2.
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Izzy acercó una silla a la cama de su hijita, tomó asiento en ella y acto seguido se dedicó a mirar a su único tesoro. Podía notar el color lívido de la piel de Osen. La niña dormía de forma intranquila. Él acarició a su pequeñita para ayudar a que se tranquilizara y poco a poco la criatura se fue quedando quieta.
Koushiro estaba invadido por una especie de culpabilidad, el pasado lo atormentaba.... y
sin darse cuenta comenzó a recordar.
*
Retrospección #1
*
Koushiro estudiaba incasablemente, había encontrado unos extraños signos y se propuso descifrarlos. Su amigo Tentomon se encontraba ausente debido a un misterioso viaje a la ciudad Inicio (de esa ciudad regresaría con su digihuevo o hijo, Motimon que sería el compañero del vástago de su mejor amigo humano). El tiempo lo fue consumiendo y sin darse cuenta llegó la media noche.
"Oh, no... olvidé que hoy Yue me prepararía la cena" el pelirrojo no recordó que tenía un compromiso con su encinta (o embarazada) esposa, tenía muchos remordimientos y se apresuró a llegar a su casa..... trataría de conseguir el perdón de su mujer.
Nuestro mencionado amigo había contraído nupcias meses atrás, pero no se veía muy enamorado (incluso él sabía que se había casado con la dentista para calmar el dolor de haber perdido a su amor verdadero), parecía conformarse con la idea de tener una familia.
El problema principal de este personaje es que se concentra demasiado en las incógnitas que surgen en su cerebro y descuida su alrededor... tal vez, sin darse cuenta fue descuidando un poco a su familia --sin mala intención, sólo que lo absorbía el trabajo-- .
Izzy Izumi entró a su casa. Era un lugar pequeño pero tenía dos plantas; el sitio estaba a oscuras, lo cual extrañó al hombre, pues conocía el miedo que le tenía su esposa a la oscuridad. Dio un clic a un extraño generador y la casa se iluminó por completo.
"Esta vez me pasé de la raya" se decía "Yue estará muy molesta.. y con justa razón". El hombre pensó que su esposa estaría en la planta alta durmiendo, por lo que se dispuso a subir.... cuando lo hacía se topó con la sorpresa de su vida: su esposa estaba desmayada y golpeada. Al parecer había tenido el terrible accidente de rodar por las escaleras; era un cuadro terrible, más aún estando embarazada su mujer. La sangre que había en la cabeza del genio Izumi se esfumó, corrió hacia donde yacía su esposa, le tomó el pulso ¡aún estaba viva!.
Sabiamente checó que su compañera no tuviera algún hueso roto o algún derrame interno (¡claro que no era un experto en ello!); pero del bebé no podía suponer nada....
"Si espero a que venga una ambulancia podría ser demasiado tarde" pensó mientras la tomaba en brazos y corría a su auto.
.... Estaba sudando frío mientras conducía. Hubiera querido llevar a Yue al hospital donde trabajaba Joe, pero el lugar estaba tan retirado que decidió llegar al hospital más cercano.
Izzy llegó al hospital jadeando del cansancio y la desesperación. Vió como se llevaban a su esposa en aquella fría camilla y las esperanzas lo abandonaron; deseó tener al pequeño TK con su emblema brillando a toda potencia.... pero ahora eso no serviría de nada.
Las horas fueron pasando, nadie le daba informes y eso lo exasperaba, sentía que el ambiente de un hospital era frío e indiferente... pero sabía que así tenía que ser, no es que las personas fueran insensibles, sólo que cada quien tiene intereses propios (los médicos y las enfermeras no se van a poner a llorar por cada paciente que muera ¿O sí?).
Una gorda y horrenda enfermera se acercó a Izzy.
- ¿Es usted el Ingeniero Izumi?
- Sí, soy yo - contestó un tanto seco - ¿Tiene usted noticias de mi esposa?
- Sí, lamento informarle que la hemos perdido
- ¡¿Ha muerto?! - dijo temblando y tartamudeando - ...pe-pero ¡¿Cómo!? ¿Por qué?!
- Fue a causa de una costilla que se le fracturó y le reventó los pulmones - replicó la enfermera como si fuera algo común y sencillo de afrontar.
Koushiro no pudo permanecer en pie y poco a poco fue cayendo al cómodo sofá de la sala de esperas. Las fuerzas que le obligaban a seguir desaparecieron y por primera vez en la vida sintió miedo, miedo a estar solo y a muchas cosas más. La obesa mujer le veía, esperaba que el hombre cuestionara algo más, pero al verle tan mal decidió "alegrarlo"
- ¿No va a preguntar por su bebé? - dijo la tipa, Izzy miró los ojos de la enfermera, y sin evitarlo, comenzó a llorar.
- ¿No es suficiente el dolor que encarna mi alma al haber perdido a mi esposa?..... no, al parecer también estoy condenado por el sufrimiento de perder a mi hijo ¡Todo es culpa mía!
- Su hija está viva - dijo la mujer - está muy delicada, pero viva... por cierto, lamento lo de la muerte de su esposa pero así es la vida.
Izzy no podía articular palabra, la gota de esperanza que le llegaba sería ahora su única ilusión en la vida... ¡VIVA!, su bebé respiraba... él no dejaría morirse a esa niña, esa criatura era ahora su nuevo sostén, la nueva base de su alma.
Con ánimos renacidos corrió para pedir información "La bebita tiene dificultades respiratorias serias, Sr. Izumi" le había dicho un médico "eso se debe a que nació muy prematura y al desafortunado accidente de su esposa". Izzy miró a Osen a través del vidrio. Podía ver cómo su primogénita estaba en una moderna incubadora conectada a varios aparatos, que cubrían la diminuta figura de la pequeña; sin embargo notó que tenía sus ojos negros.
Creo que es horrible afrontar duros golpes en la vida. La unión de varios tropiezos causa que cualquier individuo se deprima. Koushiro enterró su dolor (cosa que hacía muy a menudo) y se dedicó a tratar de salvar a su bebé "Oh Yue.... todo ha sido culpa mía... bueno, no es mi culpa directamente.." su esposa no tenía familiares así que Izzy evitó el funeral y la convirtió en cenizas. Los restos de su esposa estaban ahora en una pequeña caja.
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El teléfono sonó en casa del doctor Joe Kido; su esposa Jun Motomiya (nombre de soltera) dejó de alimentar al pequeño Doguen para contestar.
- Hola, habla a la casa de la familia Kido.
Izzy escuchó la voz de la antigua perseguidora de Matt con algo de indiferencia, pero se tornó melancólico "lo que son las cosas, esta mujer decía amar a Matt como loca y se ha casado con uno de los amigos de éste, que si no es lo contrario, al menos es muy diferente a Yamato"
- Jun.... - dijo con voz temblorosa - ¿Podrías pasarme a Joe?; habla Izzy
- Si, permíteme... por cierto Izzy ¿Cómo está Yue? ¿Cuándo nace tu bebé?
La mujer de los pelos de escoba no obtuvo respuesta, pero escuchó como el hombre suspiraba de forma triste.
- ¡Querido!, Izzy te habla por teléfono por la vía antigua.
- En un momento contesto
El Médico se introdujo en su consultorio privado para charlar con más libertad y evitar que su llorón bebé interrumpiera. Jun era curiosa por naturaleza y un tanto entrometida... se puede afirmar es que estaba ansiosa por saber qué quería Koushiro Izumi; aquel hombre nunca llamaba a su casa al menos de que fuera estrictamente necesario.
- Oye Jun ¿Con quien habla Joe?
- Con Izzy, Gomamon - contestó la mujer.
Joe salió de su consultorio hogareño, su rostro tenía asentado mucha preocupación, tomó su maletín y brazalete.
- ¿A dónde vas Joe? - preguntó su digimon con arrogancia.
- Voy a casa de Izzy
- ¿Qué tenía? Se notaba extraño - agregó su mujer
- No es para menos su actitud, Jun - el hombre secó el sudor de su frente y prosiguió - su esposa acaba de morir y su hijita esta muy enferma, muy cerca también de la muerte.
- ¡Por Dios! ¡Que horrible, pobre Izzy!
- Sí... me ha pedido que sea el médico de Osen de forma particular porque él ya no quiere saber más de hospitales.
- ¿Osen?
- Ese es el nombre de la bebé, Gomamon - dijo Joe mientras se ponía los zapatos.
- ¡Vaya! Y luego dicen que Doguen es un nombre raro.
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Sobra decir que esa noticia se extendió y llegó los oídos de todos los exelegidos; quienes le brindaron apoyo a Izzy, cada uno a su manera. Incluso Tai le ofreció a Izzy que se fuera a vivir junto a él y Kari en un gran departamento, el pelirrojo terminó aceptando después de tantos ruegos y desde entonces los hermanos Yagami han compartido techo con Izumi y la descendencia de éstos se ha criado casi como hermanos (para aquel entonces Kari ya había perdido a su marido y Taichi era padre soltero).
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Fin de retrospección #1
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Osen abrió sus ojos y vio a su progenitor velando su sueño.
- Papá, gracias por estar aquí - la niña había recuperado su color y se veía fuerte. Sonrió levemente, vio que su padre había estado pensando en cosas perturbadoras (era muy observadora) pero no le dijo nada. - ¿Y Motimon?
- Está en la guardería con los demás, Tentomon, Gatomon y Agumon han ido a recogerlos.
- Es curioso - dijo Osen mientras bostezaba
- ¿Qué cosa?
- Todo lo relacionado con digimons - dijo con voz clara - me refiero a que es muy interesante la relación entre un digimon y un humano, es algo así como "estrecha" e implica en muchos casos, fidelidad.... pero no siempre es así ¿Verdad?
La curiosidad de la niña era parecida a la de su padre, sólo que un poco más subjetiva. Izzy la miró con ternura, le daba orgullo que se le pareciera "a menudo los hijos se nos parecen, así nos dan la primera satisfacción". Momentos después el cuarto fue invadido por los demás habitantes de la casa que tenían como propósito visitar a Osen.
- ¿Cómo te sientes O-chan? - preguntó Toshiro - ¿Necesitas algo?
- Estoy bien - dijo la niña mientras Kari le ofrecía el alimento que compraron en el restaurante de Davis.
Taiki la miró fijamente y comenzó a reprenderla.
- De ahora en adelante vas a tener mas cuidado con el inhalador - el niño de 10 años colgó de un cordón el dichoso inhalador y lo arrojó al cuello de Osen - No lo vas a perder, de eso me encargo yo!!
- Eh... gracias
Los adultos miraban la escena entretenidos, entonces la puerta sonó y al abrir entraron los digimons, que llegaban a su hogar. Eran: Gatomon, Tentomon, Agumon, Koromon, Salamon y Motimon.
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(En otra parte de Odaiba)
La mujer llegaba del supermercado, a su lado iba un pequeño de aproximados seis años, parecía muy concentrado en cargar una pequeña bolsa con víveres, como si fuera un importante trabajo.
Sora entró a su casa junto con Kotaro (su hijo) y caminó hacia la cocina con la lógica intención de acomodar los artículos que había comprado. Una niña rubia estaba viendo la televisión, parecía estar muy aburrida. El pequeño Kotaro fue hacia su hermana y la saludó.
- ¡Hola hermana! ¡Ya volvimos! - dijo efusivamente
- ¿No me digas? - preguntó en tono irónico - Con razón te estoy viendo.
La madre también saludó a su primogénita.
- ¿Cómo te ha ido en la escuela, Mayumi? - preguntó para tratar de sacarle plática a su hermosa pero apática hija.
Mayumi se levantó del sillón y cargó a su digimon (Pyokomon), tenía planeado que su "digital monster" tomara una siesta. Kotaro aprovechó que su hermana abandonaba el sitio (más que nada la televisión) y puso una grabación que solía ver 2 o 3 veces al día.
- Me fue igual mamá - dijo la chica - sólo que cambié de extracurricular
- ¿Abandonaste tu clase de gimnasia?
- Sí, ya me había aburrido - comentó mientras dejaba a Pyokomon en una camita especial junto a Biyomon que dormía plácidamente - desde que a Osen le prohibieron practicar gimnasia por su asma, la clase se volvió aburrida, por lo que decidí entrar el equipo de fútbol junto a Taiki y los demás.
- Me parece perfecto - replicó Sora, recordando su niñez.
· Mayumi Ishida era una rubia poco femenina, digamos que tenía un toque de marimacha (sobre todo por su vestuario). Era una obra de arte ya que estaba formada por la mezcla de Sora y Matt, lo que la hacía muy agraciada; se distinguía por ser rebelde, callada, apática, irónica... aún así resultaba tener un gran sentido de responsabilidad (como Sora) y un sentimentalismo oculto (como Matt). Cursaba el cuarto grado junto a Osen y Taiki por lo que es lógico pensar que tenía 10 años. Ella estaba muy afectada por el divorcio de sus padres, aunque no lo dejaba ver, e incluso decía que no le importaba ni perjudicada en lo más mínimo, pero la verdad es que le tenía cierto resentimiento a Matt. Su digimon era Pyokomon, al cual acostumbraba mimar más que a su hermano.
· Kotaro Ishida era un angelito de 6 añitos que reflejaba una ternura inexplicable; era extrovertido y llorón. Su cabello era café rojizo, así como sus ojos... y el color de su piel era más oscura que la blanca tez de su hermana mayor. Estaba consentido en demasía, especialmente por su padre, al cual parecía estar muy apegado. Kotaro veía a Matt como el más grandioso héroe (aceptémoslo, no cualquiera tiene un padre astronauta) y cuando su padre no estaba en una misión espacial solía irse a vivir con él. Su digimon es Tsunomon.
- ¿Puedes ver que hace tu hermano? - ordenó Sora a Mayumi (apodada May).
- Está viendo de nuevo el video de cuando papá pisó Marte; ¡¡Está obsesionado!! - renegó.
Mayumi abandonó la cocina para encerrarse un rato en su habitación; Sora, en cambio, se unió a su hijo y comenzó a ver a su Exesposo en la TV. Kotaro miraba el video embelesado.... Sora no pudo evitar comenzar a derramar lágrimas por el pasado que poseía.
El futuro era tan incierto que era mejor olvidarse que existía un mañana, o sea que era mejor disfrutar el presente; pero del dicho al hecho hay un largo trecho.. y para aquella mujer ex - portadora del amor era complicado avanzar...
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Retrospección #2
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Cada quien daba su propia interpretación a la hermosa redondez de la luna; Tai pudo decir que parecía ser un balón de soccer, pero en cambio Matt pudo haber dicho que se veía como un botón de rosa blanca; ambos estaban en su lecho, pensando en la belleza lunar y a la vez en Sora.
Ese baile había marcado el destino de aquellas tres almas. El resultado de ciertas declaraciones de amor no podía ser ni positivo ni negativo... cada quien le daba su enfoque.
En otro lecho, Sora estaba tratando de dormir... pero no podía hacerlo, su mente entrelazaba hechos y su alma sentía gran presión y tensión, ya que de su elección no sólo dependía su felicidad, sino la felicidad de 3 personas (Matt/Tai/Sora).
"¿Qué haré?" se cuestionaba la joven "No logro comprender porqué se formó este triángulo amoroso... ¿Cómo pude ser la portadora del amor si no sé ni lo que quiero?"
La chica había tenido una noche difícil, dos de sus amigos le habían declarado su amor y ella con su indecisión no pudo dar contestación... estaba tan confundida que no sabía lo que quería.
Primeramente comenzó a pensar en el chico que conocía desde los más remotos días de su infancia: Taichi Yagami.
"¡Oh, Tai!! ¿Por qué tu?" se había dicho "Pensé que el afecto que nos unía era fraternal... pero ahora tengo mis dudas"
Ella podía clasificar a su coetáneo como una persona firme, valiente y con auges de liderazgo; pero bajo esa imagen Sora sabía que había un joven inmaduro y temeroso de negativas.
Por otro lado estaba Yamatto Ishida, su callado e interesante (por no decir popular) amigo. Sora sentía atracción por el rubio... no podía negarlo; además, llevaba tiempo teniendo una especie de relación amorosa con él; sin embargo, había aspectos de Matt que no aprobaba simplemente porque no los conocía. Ella sabía que el chico había sido azotado por un dolor pasado y resentimientos de índole familiar; y por ello sentía la extraña necesidad de consolarlo, pero no estaba segura de que era amor.
Por aquel entonces estudiaba Diseño de modas. Su talento para realizar vestidos era notable (¿Quién lo iba a imaginar?), especialmente si se trataba de trajes tradicionales o kimonos.
El destino fue tejiendo su camino, Sin quererlo, terminó magullando el corazón de Tai y casándose con Matt debido a que el cariño que sentía por el primero podía traducirse como "amor de hermanos" y el afecto hacia el segundo era distinto.
El futuro va haciéndose pasado sin darnos cuenta; Sora no imaginó que terminaría siendo madre de dos hermosos niños y divorciada del amor de su vida...... ¿Divorcio?, ella no estaba segura de que eso fuera una solución, pero si entre Yamato y ella no había una relación estable lo mejor era una separación... probablemente temporal.
Era mejor que se alejaran antes de llegar a discutir... tenían diferentes opiniones y actividades (¡Pues claro!, una era modista y el otro astronauta). Aunque ellos en el fondo tenían la esperanza de regenerar su hogar, es decir... volver.
Para Yamato era difícil comprender cómo había podido caer en el mismo error que se padre, y no es que Sora fuera la persona equivocada.... el silencio de su alma le consumía de rara manera, tal vez lo que en realidad quería era independencia; pero no, él no podía tener "libertad" porque había dos seres a los que amaba y eran su responsabilidad "¿Cómo es posible que le haga a mis hijos lo mismo que me hicieron a mí?" solía decirse "es irónico". Su alrededor oscuro (el espacio exterior) lo embobaba y evitaba pensar más en torturarse "Después de todo mi trabajo jamás me hubiera permitido tener un hogar estable; Sora tiene razón".
No había abandonado la idea de reconquistar su hogar, pero sólo el tiempo le diría si era conveniente.
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Fin de retrospección #2
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La Sora de aproximados 39 años seguía viendo la televisión con su hijo que parecía disfrutar el momento.
- ¿Ves a Gabumon, mami?
- Sí Kotaro, se ve muy apuesto junto a tu papá
- Mi Tsunomon será como Gabumon ¿Verdad?
- Si, eso creo... por lo menos así debe ser - agregó la madre.
Kotaro miró a Tsunomon de forma curiosa, el digimon se sonrojó un poco.
- Ya oíste a Mamá, amigo mío - gritó contento - Vas a ser como tu papá Gabumon... ¡Yo también seré como mi papi y me iré a conquistar el espacio!
El niño volvió a cuestionar a su madre.
- Mami ¿cuándo llegará papá?
- Al parecer mañana, mi niño... pero no lo sé con exactitud
- ¡Qué bueno!, ya quiero verlo para que se vuelva a casar contigo.
Ella entonces se quedó callada y admirada ante el comentario del niño "lo que es la inocencia" se había dicho; acto seguido se fue a preparar la cena.
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Esa noche la responsable ama de casa estaba histérica, sus ojos mieles estaban deprimidos pero también algo exaltados por el enojo y su melena morada estaba sostenida por una pañoleta roja.
- ¿¡Cómo es posible que no venga!? - gritó ante su hija mayor - comprendo que tu padre sea un "héroe", pero esto es el colmo Kurumi; no le pido que venga, sólo que llame y que extinga mi preocupación.
El nombre de aquella conocida mujer era Miyako, que estaba preocupada porque su querido esposo Ken no se había aparecido en la casa los últimos días. Yolei comprendía que el ser un famoso detective robaba tiempo, sabía que su esposo era ingenioso, listo y con carácter ideal para ser "detective".. y se sentía orgullosa por ello (al menos lo aceptaba); pero había extremos, y si su esposo estaba en una complicada MISIÓN al menos podía avisarle.
- Esta vez papá se pasó de la raya - dijo la linda Kurumi con su larga cabellera azul marino - Jamás había faltado tanto a la casa, siempre nos avisaba.
- ¿Quieres decir que a mi papá le pasó algo? - interrumpió un pequeño que no podía pasar de 9 años, su voz se quebró al final de la frase replicada y sus ojitos azules estaba llorosos.
- ¡Ni se te ocurra pensar eso Zetaro! - ordenó la madre de forma exaltada y en tono regañón. Aunque Yolei tenía sus dudas, tal vez su hijo mediano tenía razón - mejor váyanse a la cama, seguro Ken llegará tarde.... Kurumi, Zetaro ¡Obedezcan!
Los dos hermanos se retiraron, sabían que cuando su madre estaba tensa lo mejor era alejarse.
Miyako escuchó un llanto que reconoció en seguida, su bebé lloraba... era hora de darle alimento. Se asomó a la cuna y llevó a sus brazos a aquel ser tan indefenso, comenzó a mecerlo con ternura y el exigente llanto de la criatura se fue extinguiendo; miró una foto de su boda y suspiró melancólica... la vida había sido buena con ella, los sufrimientos no habían azotado su existencia de forma drástica como había ocurrido con otros de sus amigos.
· Kurumi era la mayor de los hijos de los elegidos, era toda una adolescente de 13 años; poseía un encanto común en las chicas: la coquetería y el ser extrovertida.
Tenía gran sentido de la moda y solía tomarle interés a las cosas triviales. Una de sus metas era conquistar a muchos chicos con sus encantos. También era muy picueca, es decir, enfadosa. Era un As en la mecánica, su rapidez al armar y desarmar cosas lo demostraba. Tenía una altura notable y los ojos de su madre, por lo mismo, heredó problemas visuales y usaba lentes. A ella le encantaba lucirse ante los demás y hacerlos quedar en ridículo, pero en el fondo era muy sensible y llorona. La relación con su digimon, llamado Poromon, era buena, sin llegar a considerarse excelente. Era la primogénita de Ken y Miyako.
· Zetaro heredó los ojos de su padre, también la mirada y ciertos ademanes; de Yolei, su madre, tomó el color de cabello y otros aspectos sin importancia. Estaba próximo a los 9 años y era un niño muy dependiente, distraído, inocente, ingenuo y juguetón. Su mayor aptitud la encontramos en el dibujo y junto a Seiyuro y Osen (que eran fantasiosos e imaginativos) solía crear comics bastante originales. Era fácilmente engañado, especialmente por su hermana mayor. Su digimon era Minomon, y juntos pasaban largo rato dibujando (bueno, el digimon solo lo veía ) .
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Takeru Takaishi terminó de cenar y lavó los trastes. Su hijo aún no llegaba a casa pero no estaba preocupado porque sabía que se encontraba en casa de alguno de sus amigos. Encendió un moderno ordenador y comenzó a idear la trama de su nueva novela, la cual trataría del mundo digimon y los niños elegidos (basada en hechos reales, jaja). El adulto pensaba que sería su obra cumbre o por lo menos su más grande éxito. Dentro de su ser deseaba volver a ser un niño pequeño y de nuevo tener aventuras; Patamon voló desde su sitio hasta donde estaba su amigo.
- ¿Interrumpo, TK?
- Para nada Patamon.... no estoy inspirado para escribir el día de hoy
- TK... estaba pensando en que Seiyuro y Tokomon no han vuelto...
- ¡Bah!, no te preocupes - dijo sonriente - Debió haber ido a la casa de Toshiro o de Kyosuke, no debe tardar.
Y como si hubiera sido invocado, el rubio vástago del escritor Takaishi apareció.
- Hola papá - dijo con su habitual alegría junto con su peligroso digimon (¿han visto la dentadura de Tokomon?... es peligrosa).
- ¡Pero Tokomon! - reprendió Patamon como todo un "padre" - es terrible no avisar, a la próxima no olvides hacerlo!!
- No lo regañes Patamon - dijo Seiyuro (o Sei) - en realidad no es su culpa, pasé muy tarde por él a la guardería.
- Sei, sabes que no me molesta que llegues tarde, pero a la próxima asegúrate de avisarme donde estás ¿OK?
- No es mi culpa, si Osen no se hubiera enfermado me hubiera acordado de avisarte.
Llegaron al comedor y mientras dialogaban, Takeru recalentaba la cena para su hijo.
- Entonces la pequeña Izumi volvió a Recaer...
- Perdió su medicina - dijo Sei - pero el tío Joe dice que está bien.
- Ya veo, luego le hablaré a Izzy aprovechando que la editorial me dio un descansito, jeje... sería bueno ir pensando en salir de vacaciones a algún lugar - Takeru pensó que si Joe había ido a la casa Yagami/Izumi debió haber llevado a su hijo... él sabía que su hijo Sei no llevaba una buena relación con el hijo de Kido.
- Cambiando de tema ¿De casualidad no te peleaste con Doguen?, la última vez Joe me habló y me dijo que le habías arrojado arena en los ojos.
- Mmmm, no peleé, sólo que mientras jugaba ping pong con Toshiro lo golpeé en la cabeza con la pelotita y el gallina se fue llorando; ¡Fue un accidente!
- Eso dices siempre
Tokomon y Patamon aparecieron de pronto; el menor traía en su hocico el teléfono, entonces Patamon dijo
- ¡TK! Te habla Joe; Se oye molesto- Sei se enrojeció de la vergüenza, otra vez el chismoso de Doguen le iba a causar un castigo.
- Aquí vamos otra vez, ya me estoy cansando de esto - dijo el dueño o el antiguo portador de la esperanza.
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Daisuke Motomiya cerró su restaurante (creo que es un puesto móvil, uno de tantos en Japón.. pero hay que agregar que la comida del líder de los elegidos era una de las predilectas de toda la ciudad). Decidió sentarse en una banca de un cercano parque, lo hizo con tal naturalidad que fácil fue creer que eso era costumbre, ahí solía sentarse a pensar junto a V-mon mientras esperaba a su hijo.
- El trabajo ha estado muy pesado - dijo su agradable digimon azul.
- Sí, pero me tomaré unas cuantas semanas de descanso... dejaré todo en manos del gerente - dijo Davis con cierta flojera dando un gran bostezo.
V-mon le observó por largo rato. Su mejor amigo parecía bastante cansado de seguir la rutina diaria que la vida le había impuesto. Daisuke había escondido casi por completo su espontánea alegría y estaba vacía gran parte de su corazón. El hombre dio un suspiro y al final logró articular la palabra "Kari", pues sí, al parecer este personaje seguía enamorado de un imposible.
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Retrospección #3
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Este joven, cuando tenía 11 años se enamoró perdidamente de una niña que aunque parecía notarlo, no le daba importancia especial. Desgraciadamente no fue sólo un inocente primer amor, sino un sentimiento duradero y eterno. Davis no tenía experiencia sobre amar, podía haber gritado a toda potencia que amaba a "Hikar Yagami", pero no le daba experiencia ni afirmaba su amor... su deseo frustrado era tener al menos una aventura con aquella chica.
Los sucesos que marcaron su historia influyeron también en el destino de otras dos personas: Takeru y Hikari; pero lo que si es cierto es que ese triángulo amoroso existió y nunca se consumó ni enfrentó.
Cada uno dejó de luchar por obtener y saciar sus sentimientos y siguió un camino diferente; los tres encontraron la manera de casarse sin involucrar mucho al amor y estuvieron viviendo en paz.
Hikari (Kari) había contraído nupcias con un economista serio y reservado de apellido Sugiyama; de ese matrimonio nació el Kawaii de Toshiro. En realidad nadie puede dar una hipótesis de la relación que llevaban esos esposos, ni siquiera Tai que era el hermano de Kari...
TK se casó con la cineasta Yoshisaki Yínbee, y tuvo el gusto de quedar embarazada de forma veloz, Seiyuro nació después de 9 meses; la relación de Takeru con aquella ingeniosa mujer era muy buena debido a que ambos compartían los mismos intereses.
Hay cuestiones sin resolver todavía; ¿Por qué el hermano de Matt nunca tuvo valor para aclarar los sentimientos de su alma?, Él había decidido no preguntarse si en verdad sentía amor por cierta mujer que irradiaba una luz incontrolable; era mejor dejarlo a la duda...
Este hombre siempre estaba resguardado por una esperanza eterna que parecía la cura a todos sus males. La inocencia infantil nunca le abandonó, lo cual era muy bueno.... ojalá muchos adultos conservaran el espíritu maravilloso de la niñez; porque si Kari nunca dejó de ser misteriosa, él tampoco dejó de tener la inocencia de un niño.
El último en ser líder de los digielegidos y de portar la cresta o el emblema del valor (o coraje) y amistad, al verse desplazado por su "amor" se fue enrolando con una mesera llamada Makoto, su apellido era Dosai y sobra decir que era un encanto de chica. Davis no podía pedir más en una mujer, se sentía realmente amado.... eso era en esos momentos lo único que le importaba... ser amado como nunca. Tuvo entonces a su hijo Kyosuke y su esposa le dio la idea de ser cocinero y dedicarse a fabricar comida tradicional japonesa. El negocio fue creciendo muchísimo a través de los años y Daisuke fue haciéndose famoso de una manera sorprendente, siguió un camino muy distinto del que pensó pues cuando él era chico se imaginaba como estrella de fútbol soccer. Su matrimonio en cambio fue decayendo y debilitándose hasta agotarse .
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Era un hermoso día de abril, el telecomunicador de la casa Motomiya se encendió y el juvenil rostro de Kari apareció en la pantalla. Davis, al atender la llamada, no pudo evitar sonrojarse como cuando era chico y estaba "libre". Makoto notó la turbación de su esposo desde lejos; lo miraba con tristeza sin que él se diera cuenta.
- ¿Davis? - dijo Kari con una dulce sonrisa.
- Ka.. Kari - saludó él - hace mucho tiempo que no nos comunicábamos ¿Verdad?
- Sí, la última vez que nos vimos fue hace dos años, cuando nacieron nuestros hijos - la voz de la joven madre se oía algo entusiasmada - por lo mismo he querido hablarte; Quiero que tu familia y la de mi querido Takeru tengan el honor de venir a pasar un fin de semana en la casa que mi esposo y yo compramos en el campo. Creo que es bueno que los elegidos convivan en veces ¿No es así? ¿Qué me dices?
- Creo que.... está bien ¡Claro, será genial!; Acepto la invitación que nos haces - dijo algo contento mientras el corazón le latía con furia y emoción.
(
Cabe mencionar que ese día de campo nunca llegó a realizarse; sin embargo, estuvo en proceso... sólo que un terrible accidente lo impidió)
Las tres nuevas familias (Takaishi, Motomiya y Sugiyama/Yagami) viajaban junto a sus digimons en un auto enorme y aerodinámico; el camino era tranquilo, pero todo en la vida es incierto y desconocido.. un enorme trailer (cuyo conductor venía ebrio) se estampó contra el vehículo, el choque fue imprevisto y muy fuerte; Kari se aferró a su bebé con la fija idea de protegerlo... Abrió los ojos a la vida una vez más, pero ya no era la misma, aquel accidente dejó muertos a su marido, Kiúgoro Sugiyama, y a Yoshisaki Yínbee, la esposa de su amigo TK.
Por otra parte, el accidente marcó también al matrimonio Motomiya. Makoto no soportaba ver como su "esposo" amaba y consolaba a una viuda. Ella recordaba que Davis jamás le había prometido amarla; antes era suficiente con tenerlo en cuerpo... ahora no, ella también necesitaba el alma de Daisuke. Lo más curioso es que a pesar de haberse separado como pareja vivían actualmente en la misma casa y se llevaban como amigos. Para ellos lo esencial era criar a su hijo: el expresivo Kyosuke.
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Fin de retrospección #3
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Dos niños caminaban por el parque. El mayor era un varón de aproximados 13 años y cabello desparpajado; la menor era una niña con rostro angelical y jovial.
- Pero Kyo ¿No será mucha molestia pedirle a tu padre que me lleve a casa?
Kyo miró a su interlocutora con ternura y se sonrojó (no había duda de que esa pequeña le fascinaba).
- Ya te dije que no, Yuri; nuestros padres son buenos amigos, estoy seguro de que a papá le dará gusto llevarte a casa.
La niña, (que poseía los mismos ojos verdes de Iori), le sonrió, pero parecía apenada de pedirle ese favor a su amigo.
- Mira Yuri, allá está papá- entonces con su efusividad diaria gritó - ¡papá!
Temerosamente le tomó la mano a su coetánea y corrió hacia su padre, Daisuke Motomiya.
- ¡Con que aquí estabas, Kyo! - le dijo sonriente olvidando sus pensamientos tristes - ¡Vaya! Y parece que traes a una compañera - el rostro de Davis se tornó pillo - o... ¿Acaso tenían una cita?
- ¡Cómo crees papá! - dijo su hijo alterado y rojo como un tomate.
- Kyosuke me hizo el favor de acompañarme al museo - dijo la pequeña - en mi clase me dieron como deber visitarlo...
La voz de la niña era muy dulce, quizás demasiado melosa, era muy educada, como su padre.
- ¡Cada día que te veo, querida Yuriko, estás más grade! - agregó el hombre - Cody debe darte vitaminas todo el santo día.
- Papá, tenemos que llevar a Yuri a su casa, también debemos pasar a la guardería por Chibimon ( o Demiveemon).
- Pues no perdamos más tiempo aquí - dijo Davis olvidando su melancolía y centrándose en verse divertido ante su hijo.
- ¿No será mucha molestia? - preguntó Yuri
- ¡No te digo!... no eres igual a Cody nomás porque eres niña - dijo el hombre bromeando.
· Kyosuke (apodado Kyo) era un chico bastante "loco" o extrovertido. Era imprudente, acelerado y deportista. Ocultaba sus sentimientos con dificultad debido a la espontaneidad de su carácter, así que la ira, la emoción, la tristeza y muchos otros sentimientos que lo acogían, nunca fueron un secreto para el mundo. Tenía una faceta que reflejaba algo de timidez en asuntos amorosos. Entablaba una buena amistad con Toshiro y Seiyuro, sólo que con el último solía tener cierta rivalidad, especialmente si se trataba de ganar el amor de Yuriko Hida. Su digimon era Chibimon.
· Yuriko era la única hija de Iori (el más pequeño de los elegidos). A la corta edad de 11 años se había convertido en toda una dama. Sus modales eran refinados pero su personalidad sencilla, era servicial y practicaba Kempo. Su capacidad de convivir de forma pacífica la hacía diferente a los demás vástagos de los elegidos. La madre de Yuriko era la amable Hiromi Hida, la cual llevaba un armónico y duradero matrimonio con el abogado Iori (Por fin algo que no es tragedia ¿no?), su digimon era Upamon.
---Al llegar al hogar de Cody---
La casa Hida era antigua y parecía que en tiempos pasados había sido un dojo. Para Davis era raro entrar a un sitio donde la tecnología no había arrasado con la vida de las personas; se sentía bien estar ahí.
- De nuevo te doy las gracias por traer a Yuri de regreso, empezaba a inquietarme ¿No te quedas al té? - inquirió Cody
- No gracias, no me apetece; además no quiero importunar; seguro y tienes que prepararte para tus casos.
Iori sonrió, pudo notar algo tenso a Davis, tal vez los recuerdos lo invadían.
- Hoy salí de vacaciones - dijo al fin - pero si gustas dejamos el té para otra ocasión
- Estaría bien, amigo... hace tiempo que no nos reunimos.
- Habrá entonces que organizarnos.
-- (Mientras tanto)
- ¿Ya terminaste, mamá?, hemos comprado tantas cosas que ya no recuerdo a qué veníamos - renegó Ben.
- ¡Ay!... no te quejes ¿quieres? - dijo la madre muy entretenida mientras miraba el escaparate - Ben ¿Ves ese vestido?
- Sí, me parece que te va perfecto - dijo el chico en tono irónico.
- Mmmmm.... sí, ése compraré - agregó la bella mujer - es ideal para el programa del día de mañana porque será en la feria... además, será el último programa de la temporada y tendremos unas lindas vacaciones.
Ben estaba harto de dar vueltas y comprar en el centro comercial. No podía negar que le causaba orgullo el tener a una madre tan conservada y moderna, pero había ciertos límites que su madre había sobrepasado.
- ¡Ya me cansé! - gritó a punto de iniciar un berrinche. Su pequeño digimon, llamado Tanemon, al ver la expresión del rostro de su "amo" decidió imitarlo (cosa que hacía muy seguido Palmon con Mimi).
Mimi Tachikawa respiró profundamente "paciencia" se dijo, su hijo era en ocasiones bastante terco, berrinchudo y mimado; lo peor era que eso lo había heredado de ella misma, no podía reprocharle mucho.
- Palmon, ayúdale
- Pero Mimi, yo también traigo cosas - se excusó su digimon.
- Ok, Ok... sólo compro mi vestuario y nos iremos.
En aquel entonces ella trabajaba en la televisión. Su programa tenía el nombre de "Cocinando con Mimi" por lo que era lógico pensar que se dedicaba a la cocina, especialmente a la repostería. Debido "según ella" a su profesionalismo le habían dado unas vacaciones, y el día de mañana haría un programa especial en Digimonlandia.
Cuando la señora Tachikawa terminó sus compras, emprendieron el regreso. El centro comercial era grande, pero sin duda uno de los lugares favoritos de la antigua portadora de la pureza. Las pupilas de Mimi se congelaron al ver una tienda de cómputo virtual; se detuvo y miró con atención esos artefactos complicados, parecían recordarle algo.
Mimi estaba embobada en esa tienda, su hijo de 10 años estaba "asustado"
- Palmon... ¿Por qué mamá se detiene en esa tienda? - Ben no estaba impuesto a que su madre apreciara artículos computacionales.
- Yo, no lo sé - dijo el digimon verde - deben ser los recuerdos.
- ¿Los recuerdos? - interrumpió el niño - ¡Bah!, lo más seguro es que esté tan cansada que ya ni sepa lo que ve.
· Ben (su nombre completo era Benjamín) era el fruto de cierta relación entre la mencionada Mimi Tachikawa y el digielegido Michael; nunca se casaron (vivían en unión libre), pero cuando dejaron de entenderse se separaron. Ben tenía 10 años y asistía a un colegio de varones. Era muy presumido, despreciativo y terco debido a que estaba criado de forma consentida. En el fondo era muy sensible pero prefería aferrarse en la terquedad y la fanfarronería de su YO externo. Estaba impuesto a comodidades extremas y no practicaba deportes. Hay que agregar que era muy celoso y tenía un buen sentido de la moda; sus berrinches sacaban de quicio a cualquiera, era enemigo de la ridiculez y por eso evitaba ser efusivo preferiendo ser seco y agresivo. Tanemon y Ben la llevaban muy bien, así como Palmon y Mimi.
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Retrospección #4
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Ella estaba notablemente furiosa, al entrar a su alcoba se encargó de estrellar la puerta como demostración de su ira. Si algo odiaba aquella chica era el ser ignorada, el no ser escuchada y el que no la tomaran en cuenta. Y no era que él no la atendiera, simplemente su enojo surgía al ver a su novio pegado a ese maldito aparato... su egoísmo le llevaba a pensar que la relación que tenía con Izzy no era la adecuada; en parte tenía razón, los dos eran algo egoístas.
Simplemente no le cabía en la cabeza como para su Koushiro el estar frente al ordenador tanto tiempo era entretenido. Estaba consciente de que el joven genio no iba a cambiar nunca y si ella lo aceptaba tendría que sufrir las consecuencias de su aserción (consecuencias que ella misma pudo suponer).
"Izzy, no creo que esto funcione..." había dicho después de la última discusión que tuvieron; Koushiro le había desviado la mirada.
"Si lo dices porque me evado con la computadora, yo.... prometo" había dicho él, pero fue interrumpido por ella "No es sólo eso" la voz de Mimi se oía temblorosa por el sentimiento "¡Ya no prometas cosas que no cumplirás!!" gritó.
Izzy trató de calmarla, la acogió en sus cálidos brazos y la consoló, sabía lo inestable que era ella y aunque la quisiera no iba a contradecirla; su corazón ya estaba impuesto a tropezar y a despedazarse; eso no lo hacía insensible.. solo le hacía ver las cosas desde una manera más indiferente. Él nunca había comprendido a Mimi, y siendo francoa, jamás se había entendido a sí mismo "El ser humano es muy complejo" solía decirse " ¿Y quién soy yo para juzgar su decisión?"
- Mimi ¿Estás segura? ¿En verdad quieres que terminemos? - Izzy temblaba al emitir estas palabras; ya sentía su próximo vacío - no importa lo que decidas, al final siempre terminaré sintiendo lo mismo por ti.
- No lo sé.... - había contestado entre llanto - Hay algo que no me llena, que no me convence.
- Bueno - dijo él - una separación nos caerá bien, ya dirá el futuro si volvemos a formar una pareja.
Al decir esas últimas palabras, Izzy la soltó y se dio la vuelta.
- Nos veremos - le dijo y comenzó avanzar. Mientras lo hacía pudo oír el tenue llanto de su exnovia; pero bueno, él no había decidido dejarla, sino ella.... eso había sido consecuencia de la inmadurez de su amada.
"¡Oh! ¿Qué he hecho?... no lo sé" se dijo Mimi mientras veía como Izzy se alejaba; secó sus lágrimas y sonrió "Te volveré a ver"
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Mimi regresó a EUA; estuvo trabajando en distintos programas de cocina que no tuvieron mucho éxito. Su fracaso se debió a que muchas recetas de Mimi hacía eran extrañas mezclas, no a cualquier persona le gusta el huevo con azúcar. Se relacionó amorosamente con Michael, pero nunca quiso formalizar su relación con él; tuvo un hijo al que llamó Ben.... En el futuro, la antigua portadora de la pureza regresaría a su patria para trabajar en el programa "Cocinando con Mimi", el cual tendría bastante éxito pues estaba enfocado a la repostería.
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Izzy Izumi, después de romper su relación con Mimi, no parecía verse muy triste; no sabía porqué, pero le desconcertaba no darle entera importancia a ello.
Llegó a su casa y revisó sus mensajes; había uno de Taichi Yagami, en donde le pedía ayuda urgente. Koushiro pensó que su despistado e imprudente amigo había descompuesto de nuevo su brazalete virtual, y compadeciéndose de él decidió ir en su ayuda.
---Al llegar a casa de Tai---
Koushiro tocó el timbre. El Tai que abrió la puerta estaba hecho un desastre, un mandil le cubría la ropa, estaba cumpliendo a la perfección su objetivo ya que evitaba que la ropa de Taichi se ensuciara. Tai estaba manchado de leche, talco y diversas sustancias desconocidas para Koushiro; cualquiera hubiera pensado que Tai cuidaba a un bebé, pero eso era imposible porque Tai no tenía hijos ¿O sí?
- ¡Cielos, Izzy, gracias por venir!
- Pero Tai ¿Qué ha pasado? - preguntó Izzy bastante entretenido por la graciosa escena que dramatizaba su amigo.
Un llanto potente y tierno se escuchó, Taichi puso una cara de sufrimiento.
- ¡Ahora ¿Qué será lo que quiere?! - replicó en son de súplica.
Los dos hombres cruzaron el pequeño apartamento y entraron al cuarto del joven Yagami, que, por cierto, estaba muy desordenado.
Koushiro Izumi vio a un pequeño bebé que parecía ser una réplica exacta de su amigo. Se asombró un poco ¿De dónde había sacado a ese niño?, sin duda era el hijo de Tai.
- Tai ¿Qué significa esto?; ¿Cómo es que es tuyo este bebé?
- ¿Eh? ¿Cómo te diste cuenta de que era mío? - dijo ingenuamente Tai
- Supongo que por el parecido ¿No crees?
Taichi golpeó su cabeza como queriendo decir "Es verdad, qué torpe soy". El bebé se había callado, al parecer sólo quería compañía (por ahora).
- ¿Vas a decirme de dónde lo sacaste?.... ¿O vas a seguir contemplándolo?
- Pues verás, es una larga historia - Tai tomó asiento con el bebé en sus brazos, su pelirrojo amigo lo imitó sentándose en una silla contigua, entonces Yagami se dispuso a continuar - No sabía que él existía; aquella mujer nunca me lo dijo...
- ¿Quieres decir que no sabes quién es la madre?
- Si sé quien es, pero no sé ni como se llama.
- ¡Vaya Tai!, ya me imagino con que tipo de mujer estuviste.
- No me juzgues Izzy, ha sido difícil afrontar esto... tú sabes que cuando Sora y Matt se casaron quedé muy afectado; entonces....
- Entonces buscaste refugio en una ramera ¿Verdad? - continuó Koushiro - Sí.... eso es típico en las personas heridas; buscan refugio en cualquier lugar... te comprendo.
- Ni siquiera consideré esa relación como un romance esporádico; pero hoy me encuentro con ella y me da al niño como si fuera un juguete, dijo que el bebé le estorbaba...
- Habrá que hacer la prueba de paternidad - dijo Izzy
- ¡Pero si es idéntico a mí!
- Sí, ya lo noté pero hay muchos humanos que se parecen; el mismo Davis tiene cierto parecido contigo... es mejor estar seguros.
Desde la cocina se oyó un grito - ¡TAIIIII!!!, después se escuchó una pequeña explosión.
- ¿Qué ocurre?
- Seguro que Agumon hizo un desastre en la cocina con eso del biberón.
El bebé, que posteriormente fue llamado Taiki, volvió a llorar, esta vez sus chillidos eran más fuertes.
- Esto no es agradable - dijo Izzy - Ninguno de los dos sabe cuidar niños ¿Por qué no le hablas a Kari?
- Se fue a un día de Campo con su familia y las de TK y Davis.
- Ah... ya veo
- Pero le hablé a Matt; ya viene en camino... él tiene una hija y podrá aconsejarnos.
- Eso espero - rogó "no entiendo como Tai puede llevarse tan bien con Matt después de lo de Sora... ¡eso es ser noble!, aunque siempre, en el fondo, fueron los mejores amigos".
Más tarde llegaron Yamatto, Gabumon y su hija, la pequeña Mayumi...... hay que agregar que con la ayuda del moderno padre pudieron controlar la situación. Al ver Taichi cómo se comportaba su rubio amigo con su hija le dio por sentir la necesidad de ser el verdadero padre del niño; después de todo, una paternidad improvisada le caería bien.
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Fin de retrospección #4
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No se puede agregar mucho de Cody, Ken, Yolei y Joe, probablemente porque no tienen un pasado trágico.
*Cody vive aún un fructuoso matrimonio con su amada esposa Hiromi y su hija Yuri.
*Yolei y Ken también viven "felices" (con las complicaciones de un matrimonio común); actualmente Miyako se encuentra preocupada por la desaparición de su esposo.
*Joe se casó "extrañamente" con Jun (el cómo sucedió y porqué es un misterio para los digiestinados) y tiene un solo hijo, el llorón Doguen.
Fin del capítulo 2.
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