Capítulo 7: Desastre en la Sala 5.

9:35 de la mañana. Estaba viviendo el día más largo de mi vida y apenas estaba iniciando. Pero también era el más feliz. Me encontraba en la sala de mi casa...bueno, la que solía ser mi casa hace diez años. Todos mis amigos estaban ahí. Matt estaba sentado a mi lado y no me quitaba los ojos de encima, probablemente temía que me desvaneciera en cualquier momento como si fuera una ilusión. Mamá estaba del otro lado. Ya estaba tranquila, por un momento temí que se enfermara de la impresión que le dió verme. Se llevó una mano al pecho y se desmayó. Matt apenas pudo sostenerla y entre los dos la llevamos al sillón.

Eso había ocurrido 3 horas antes. En ese tiempo les conté mi historia como pude, ya que estaba tan nervioso que las palabras se me atoraban en la lengua. Apenas me estaba acostumbrando a la idea de estar de vuelta en casa...me sentía muy extraño.

Pero en fin, poco después llegaron Tai y Kari, y los demás muchachos les siguieron. Todos me miraban como una aparición y me hacían miles de preguntas a la vez. Tanta atención me aturdió. Afortunadamente Tai les pidió que se callaran y finalmente les conté mi historia. Todos se quedaron fríos.

- "¡Esto suena a película de ciencia ficción!"- exclamó Mimi cuando terminé.

- "¿Quieres decir que no somos humanos?"- preguntó Joe.

- "Sí somos humanos"- contestó Izzy muy seriamente- "Es sólo que tenemos una ligera mutación que aún no se ha hecho evidente"

- "¿Me pregunto si eso ocurrirá algún día?"- dijo Kari

-" Espero que no"- dijo Sora

- "Eso no es lo que importa. Tenemos que hacer un plan ya que esos científicos van a tratar de capturarnos"- dijo Tai mientras se ponía de pie.

- "¡No puedo creer que quieran arruinar mi boda"- dijo Mimí muy indignada.

- "No lo harán"- dijo Matt- "Pase lo que pase TODOS nos vamos a quedar"- eso último lo dijo mirándome.



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- "Míralos Humon, ya saben todos nuestros planes. ¡Y es tu culpa!"- grité a mi idiota ayudante. Estábamos espiando a los chicos a través de la computadora que estaba en la sala del código de la Amistad.

- "Lo siento mucho maestro"

- "Eso ya no importa. Ahora tenemos que hacer que esos chicos desarrollen sus poderes. El peligro se acerca"

- "¿Pero cómo...?"

- "Sabía que ibas a intentar una tontería Humon, así que he creado un medio para desarrollar los poderes de los defensores artificialmente. Me hubiera gustado que lo hicieran de forma natural como el código de la Esperanza pero ya no hay tiempo"- dije mientras presionaba un botón que estaba oculto debajo de su computadora.

- "¿Qué está haciendo maestro?"

- "Estoy enviando un tipo especial de radiación a través de la computadora de ese chico. Las partículas D desencadenarán sus poderes"

- "¿Y qué hay de los otros chicos?"- dijo HUmon mientras señalaba a cuatro chicos que estaban entre los defensores.

- "He hecho varios cálculos Humon, las partículas no afectarán a esos cuatro humanos"

- "Y...¿Cuándo van a mostrar sus poderes los defensores?"

- "Esta misma noche.. ¡Prepárense defensores, porque su destino ha llegado y no le importa si están listos!"

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Esa noche la pasé en mi hogar. Con mi familia. Bueno, faltaba papá, pero él estaba de viaje. Matt lo localizó y en cuanto se enteró de mi regreso dijo que tomaría el primer avión de regreso. Había sido un día muy largo. Mis amigos se fueron alrededor de las 5 de la tarde. Pasamos todo el día platicando y haciendo planes.

Eran las 7 de la noche y estaba viendo unas fotografías de mi hermano, cuando estaba en la preparatoria. Me enteré que fue en esa época cuando su carrera como músico llegó a su punto más alto. Cuando ingresó a la Universidad se le bajó la emoción por la música y se dedicó a otros asuntos...como las mujeres.

Cuando se acabaron las fotografías nuevas, Matt tomó las viejas y pasamos un buen rato mirándolas.

- "Mira esa"- dijo mientras me enseñaba una foto donde aparecíamos los dos montados en un "carrito chocón"- "Es de cuando cumplí 6 años"

- "Lo recuerdo. Me metiste de contrabando a ese juego ya que estaba muy pequeño para subir"

- "Sí, todo iba bien hasta que ese niño nos pegó por atrás y te estrellaste con el volante"

- "Ese sí que fue un buen chichón (chipote, moretón). Pero de todos modos nos divertimos ese día"

- "Sí...fue el último cumpleaños que pasé con toda mi familia junta"- dijo Matt.

- "Oh..."- ya no supe que contestarle.

- "¿Qué están haciendo muchachos?"- dijo Mamá mientras se sentaba a nuestro lado

- "Viendo fotos, ¿te nos unes?"

- "Claro"- se sentó a mi lado y tomó un álbum fotográfico más reciente- "Oh mira, son ustedes con sus amigos cuando hicieron esa fiesta tan improvisada"

Señalaba una foto de cuando yo tenía 8 años. Era el día que volvimos a casa después de vencer a Apocalypmon.- "Ahora que lo pienso...no recuerdo el motivo de esa fiesta"

- "Nosotros tampoco mamá"- se apresuró a decir Matt.

- "Oh...y mira esa foto. Es la última que tengo de ustedes dos juntos"- en esta ocasión señalaba una foto en la que aparecíamos Matt a los 14 y yo a los 11, sentados en el mismo sillón donde nos encontrábamos ahora.- "Tan tiernos que se ven"- de pronto se soltó a llorar.

- "Mamá..."

- "Y luego desapareciste. Y fueron 10 largos años sin verte. No sabes como sufrí"

- "Mamá...no llores. Estoy aquí y no me voy a ir. Te lo prometo"- Mamá me abrazó fuertemente y luego me miró detenidamente a los ojos.

- "Eso lo sé"- dijo más tranquila- "Y eso me hace tan feliz. Mi bebé...ya es todo un hombre. Y uno muy guapo debo agregar. Estoy tan orgullosa."

- "Pero mamá...."- dije poniéndome todo colorado. Matt tuvo que hacer esfuerzos sobrehumanos para no reirse. Le di un codazo disimuladamente.

- "Bueno...creo que es hora de actualizar esa fotografía"- dijo Mamá poniéndose de pie- "Voy por la cámara. Quiero una foto de mis dos hijos...juntos de nuevo"



Mamá salió de la sala y Matt y yo nos quedamos solos. Matt seguía riéndose como un tarado.

- "¡Ya basta!"

- "Ay hermano, es que es tan gracioso escuchar a mamá llamarte 'su bebé'. Pero debo admitir que nunca la había visto tan feliz. Así me siento yo también...todos estos años pensé que era mi culpa...que debí haberte buscado más"

-"Y sabes que eso hubiera sido inútil Matt. Ya no hablemos de eso por favor. No es culpa de nadie. Quiero olvidar y empezar una vida nueva"

-"En serio...¿y qué piensas hacer?"

-"Antes que nada quiero terminar la escuela. Humon y Geekmon me enseñaron muchas cosas y pasaba casi todo el día leyendo, por lo que voy a tratar de revalidar mis estudios hasta la preparatoria. El Lunes voy a ir a la escuela a pedir informes"

- "¿Y luego?"

- "Pues...me gustaría estudiar una carrera, aunque sea una corta. Pero como no estoy seguro de qué es lo que quiero estudiar voy a buscar trabajo. Mañana mismo empiezo"

- "Me da gusto ver que tienes algunos planes. Cualquier cosa dime y con gusto te ayudaré"

- "Gracias Matt. Todos han sido muy buenos conmigo"

- "Especialmente Kari, ¿verdad picarón?"- dijo con una sonrisa torcida

- "Sí...especialmente ella"

- "Dime la verdad, ustedes dos..."

- "Bueno...yo...este..."- dije poniéndome rojo- "Pues...nos besamos y bueno..."

- "¡Vaya! Hasta que se decidieron"- exclamó Matt interrumpiendo mi fluidez verbal- "Llevo más de diez años esperando eso"

- "Muy bien muchachos sonrían"

(click) ----- [efecto especial para flash de cámara]

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- "¡Ándale mi amor! Vamos afuera. Estoy tan emocionada por lo de TK que no creo poder quedarme en casa toda la noche"

- "Perdóname Mimí. Pero debo terminar esta codificación. Si no la entego el Lunes ahora sí me van a correr"

- "Siempre te amenazan con lo mismo. ¡Deja que te corran! Peor para ellos"

- "Sí pero entonces me quedo sin el sueldo...y tú bien sabes cómo lo necesitamos"- desde que se me ocurrió pedirle matrimonio a Mimí el dinero ya no me rendía para nada. Tuve que dejar mi trabajo como aprendiz en el laboratorio de Sistemas e ingresé a una compañía muy grande de Software como capturista. Cuando me contrataron me dijeron que si era bueno muy pronto me ascenderían a programador, pero ya llevaba varios meses y el dichoso ascenso no se veía por ningún lado, mas sí una carga cada vez más pesada de trabajo. Lo que más odiaba de mi trabajo era que no tenía que pensar. Sólo tenía que copiar páginas enteras de códigos como una máquina. ¡No había estudiado 4 años y medio de Ingeniería en Sistemas para eso!. Pero el sueldo era aceptable y los gastos que tenía encima eran muchos. No solo la boda, tenía que pagar el enganche de nuestro futuro hogar y miles de cosas que ahora no quiero ni recordar. Mimí también contribuía con su sueldo. Ella trabajaba en una editorial como ilustradora...más bien, como asistente de la ilustradora. Ese era nuestro problema, como aún no terminábamos la carrera aún no podíamos aspirar a un mejor empleo. Pero eso iba a acabar en unos seis meses, cuando terminara la carrera. Ya tenía una oferta muy buena de trabajo pero necesitaba mi título para acceder a ella.

Pero a pesar de tanto sacrificio y problemas económicos...el solo pensar que en unos meses Mimí y yo estaríamos juntos para siempre hacía que todo valiera la pena. Aún no sé cómo es que me enamoré de ella. Simplemente ocurrió y por primera vez en mi vida no tengo una teoría para explicarlo.

-"Bueno, si no vamos a salir, mejor me pongo a trabajar"- dijo Mimí mientras se sentaba enfrente de su computadora- "De todos modos debo corregir estos diseños"

- "Gracias por entenderme. Te propongo algo: Nos quedamos esta noche en casa para terminar y mañana dedicaré todo el día a tí. Nada de pensar en el trabajo"



Mimí me sonrió desde su lugar

-"¿En serio? ¿Lo prometes?"

- "¡Claro!"

- "Muy bien"- dijo más animada mientras regresaba al trabajo. Unos minutos después me dio mucha sed y decidí ir por un vaso de agua a la cocina...bueno, cocineta. Mimí y yo compartíamos cuarto en la Universidad. Ella decidió dejar el suyo para ahorrar el dinero de la renta y así pagar su vestido de novia. ¡Y por supuesto que yo no puse objeciones a su decisión!. Pero teníamos que dejar el cuarto en cuanto nos tituláramos, por eso me estaba apurando a pagar nuestro propio departamento.

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Ví a Izzy dirigirse a la cocina.

-"¿Se te ofrece algo?"

- "No te preocupes mi amor, gracias"- le dije sin quitar la vista del monitor. Pobre, el trabajo lo estaba matando. Y todo lo hacía por mí. Izzy no era muy expresivo sentimentalmente hablando, pero detalles como ese eran los que me indicaban cuánto me quería.

CRASH PING! PING! BROOOM!! BOOM! PLAS! CLAP! (ruidos al azar)

El ruido me asustó por lo que me dirigí a la cocina y lo que ví me extrañó: Todos, ABSOLUTAMENTE TODOS los electrodomésticos estaban encendidos. La licuadora, el horno, la tostadora...hasta el refrigerador, que lanzaba hielo como loco a...

-"¡IZZY!"- exclamé al ver a mi novio pecho tierra tapándose un ojo.

- "Ayúdame Mimí. ¡Se volvieron locos!"- me gritó. Corrí hacia los enchufes y desconecté todos los aparatos. La cocina quedó en paz.

- "¿Sabes una cosa mi amor? No es necesario encender todos los aparatos para tomar un vaso de agua"

- "¡Yo no fui! Sólo entré a la cocina y todo se encendió. Deben ser los fusibles, al rato los reviso"- quitó su mano del ojo y vi como se ponía morado

- "¡¿Qué te pasó?!"- exclamé asustada

- "Nada Mimí. Sólo es un pedazo de hielo"- dijo con una mueca extraña.

- "Ven, recuéstate en el sillón"- dije mientras lo arrastraba hacia el mueble

- "Pero Mimí...las codificaciones"

- "Pueden esperar"- me senté en el sillón y puse su cabeza en mi regazo.- "Déjame ver bien ese ojo"- coloqué mi dedo encima del párpado. Izzy lo cerró con fuerza.

- "¡No Mimí, eso duele!"

- "Cálmate cariño, parece que tienes 8 años. Déjame ver"- realmente el ojo no estaba mal. Solo tendría que estar un par de días con un ojo moro pero eso era todo.

- "¿Está muy mal?"

- "Pues...se de un tratamiento para curarlo"- dije con un tono de voz muy seductor

- "¿Ah sí? ¿Cuál es?"

- "Este"- me acerqué a su ojo y le dí un beso. Pero no me detuve ahí y le besé la nariz, la mejilla y finalmente los labios. El puso sus manos alrededor de mi cuello y me atrajo hacia su rostro, profundizando el beso. Me recosté en el sillón, a su lado y seguimos besándonos. Sentí su mano recorrer mi pecho y...

- Click- -Click- -Click-

- "¿Qué es ese ruido?"- dijo Izzy incorporándose en el sillón. ¡Diablos!

- "Oh no es nada, ven acá"- dije mientras le tomaba el brazo y lo jalaba hacia mí.

Volvimos a nuestro "round de amor" pero entonces...

-Click- -Click- -Click.

- "¿No lo oíste Mimí?"

- "Escuché unos ruiditos, pero eso no importa"

- "Creo que vienen de mi computadora. ¡Si se arruinó mi trabajo estoy frito!"

- "Pero amor..."- suspiré frustrada mientras veía a mi novio levantarse del sillón para revisar la computadora. En eso vi como su rostro se ponía aún más pálido de lo normal.

- "Esto...¡Esto es imposible!"

- "¿Qué pasa?"

- "Mimí ven a ver esto"

Me levanté y me acerqué a la computadora y lo que ví me sorprendió: La computadora estaba copiando los códigos...¡POR SÍ SOLA!

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Eran las 10 de la mañana de Domingo. Hacía media hora que me había levantado y en ese momento estaba dando unos toques finales a mi maquillaje. Salí de la recámara y encontré a mi madre en la cocina.

- "Buenos Dïas cielo"- dijo desde la barra.

- "Buenos días"

- "¿Qué? ¿No me vas a saludar?"- volteé a ver al comedor y vi a mi hermano.

- "Ah, hola Tai. ¿Y ese milagro?"- Tai vivía solo, en un departamento a pocas cuadras del nuestro. Pero venía tan a menudo a casa que parecía que aún vivía aquí.

- "¿Cuál milagro? ¿No te encanta la idea de que te acompañe a desayunar?"

- "Claro que sí"- dije mientras le apretaba la nariz y me sentaba a su lado

- "¡Oh Kari!"- dijo frotándose el rostro- "En fin, ¿tienes planes para hoy?"

- "Pues...quedé con TK de enseñarle la ciudad. En diez años han habido muchos avances que él desconoce"

- "Sí como no...yo creo que quieres enseñarle otras cosas"- dijo poniendo la mejor cara de pervertido que tenía.

- "¡Tai!"

- "Aquí está el té"- dijo mamá dándonos dos tazas y sentándose a mi lado- "¡es cierto! Tai me estaba contando todo acerca del regreso de ese muchacho. No sabes el gusto que me da, ya que ustedes dos se llevaban muy bien. ¿Qué le ocurrió?"

- "Este...fue secuestrado"- dijo Tai. Ese era el mismo pretexto que le habíamos dicho a la madre de TK

- "Pobre. Tengo muchas ganas de verlo, debe estar muy grande. ¿Por qué no lo invitas a cenar?"

- "Me parece muy bien"- dijo Tai- "Después de todo, TK necesita conocer a su suegra"

- "¿Suegra?"- preguntó mamá

- "Creo que mejor llamo a TK"- dije poniéndome de pie y lanzándole al metiche de mi hermano mi mejor mirada asesina.

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Mientras mi hermana llamaba a su "noviecito", fui sujeto al interrogatorio semanal por parte de mi madre.

- "¿Ya lavaste tu ropa?"

- "Sí"

- "¿Los trastes?"

- "Sip"- mentí, tenía una enorme torre en el fregadero

- "¿Y Sora?"

- "Muy bien"

- "¿Cuándo vas a formalizar con ella?"

- "Pronto"- y así concluyó el interrogatorio. Justo a tiempo porque Kari entró a la cocina con la mirada triste.

- "¿Qué pasa?"

- "Creo que mi plan se canceló. Matt dice que TK salió muy temprano de casa y no dijo a donde iba, pero que llegaría tarde"

- "Que mal"- dijo mamá- "Creo que lo veré después"

- "Sí"- Kari se veía decepcionada. Así que decidí animarla.

- "Oye Kari, ¿no te gustaría ir al cine con nosotros?"

- "¿Al cine? Claro, pero no quiero molestarlos"

- "¡Para nada! Quiero ir al nuevo cine que abrieron a las afueras"

- "¿El Centeplex?"

- "El mismo. ¿Te animas?"

- "Sí. ¿Cuál vamos a ver?"

- "No sé, cuando veamos a Sora decidiremos. Mientras tanto ¡vamos a desayunar!"- dije tomando mi palillos.

- "Creo que ya se les enfrió el té"- dijo mamá

- "Déjame ver"- dijo Kari probando el suyo- "No tanto mamá, para mí está bien"

- "¿Y tú Tai?"

- "Veamos"- tomé la taza y sin pensar le di un sorbo, confiado en que estaría a buena temperatura como dijo mi hermana. Pero instantes después lo escupí mientras sentía mi lengua arder

- "¡Está ardiendo!"- dije

- "Que raro, los serví al mismo tiempo"- mamá iba a tomar mi taza pero se detuvo. Y cuando miré el recipiente entendí la razón: Mi té estaba burbujeando, ¡como si mis manos lo estuvieran calentando!.

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- "Muy bien, ¿a quién le toca escoger la película?"

- "Yo escogí la semana pasada"- dijo Gin, mi novia

- "Y yo hace dos"- dijo Yolei- "Y Ken nos hizo ver esa película histórica tan aburrida una semana antes"- Ken murmuró algo que no alcancé a entender.

- "Bueno, creo que entonces te toca Davis"- dijo Gin

- "Oh Dios"- suspiró Yolei- "Mientras no sea otra película de La Guerra de las Galaxias..."

- "Nel, la próxima sale en 3 años"- dije pensando en el episodio VIII, película que narraría las aventuras del hijo de Han Solo en el planeta de los Ewoks.

- "¿Entonces que nos vas a hacer ver?"

- "Déjame ver"- dije mientras inspeccionaba las opciones de la cartelera.

- "¿Qué tal Titanic 2?"- dijo Gin

- "¿Estás loca? No me interesa ver a un montón de científicos clonar a Leonardo Di Caprio a partir de un pelo que encontraron en el barco hundido"

- "¿Qué tal El caso Watergate?"

- "Mejor ni te escucho Ken"

- "¿Pokémon 2012?"- sugirió Yolei

- "¿Qué? ¿Un montón de niños que viajan a través de un mundo alterno acompañados de criaturas fantásticas? ¡Qué absurdo!"

- "¡Ya decídete!"- dijo Gin fastidiada

- "Bueno...¿qué tal Godzilla contra el sobrino del calamar mutante del espacio?"

Mis tres acompañantes pusieron cara de espanto

- "Creo que será Godzilla entonces. Voy por los boletos"- dije mientras me dirigía a la taquilla,

Una vez hecha la cola, finalmente me encontré en la caja.

- "Buenas tardes, quisiera 4 boletos para..."

- "Déjame adivinar, "Godzilla contra el sobrino del calamar mutante del espacio", ¿no es así Davis?"

Levanté la vista y entonces, vestido con un estúpido chaleco rojo y un gorro, vi a

- "¿TK?"- sólo él podía usar un gorro tan estúpido sin avergonzarse.

- "Hola Davis"- dijo el aludido mientras me sonreía a través del cristal. Me pasó los boletos y yo le dí el dinero

- "¿Qué haces aquí?"

- "Pues encontré trabajo aquí. Estoy en entrenamiento"- dijo mientras me enseñaba su gafete de aprendiz.

- "Me da mucho gusto. Gracias por los boletos"

- "Que te diviertas"

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Vi a Davis alejarse con los boletos. Ken, Yolei y una chica lo esperaban en la entrada. Seguramente se trataba de la novia de Davis. Era linda. Davis debe haberles comentado su encuentro conmigo porque vi a Yolei saludarme con la mano desde la entrada. Yo le respondí mientras atendía a una cliente, que no se podía decidir entre ver Titanic 2 o El Bisabuelo de la Novia.

- "Oye Takaishi, quiero que vayas a la sala 5 a recibir los boletos"- me ordenó mi nuevo jefe, el Señor Ajinomoto.

- "Está bien"

Llegué a la sala 5, precisamente donde iban a mostrar "Godzilla contra el so...", bueno, creo que ya se saben el título. Me puse en la puerta y recogí los boletos de los asistentes. Como estaba muy ocupado no noté a Kari acercarse a mí hasta que tomé la mano.

- "¡Kari! No esperaba verte aquí"

- "¿Qué pasó con nuestro plan de conocer la ciudad?"- me reclamó. Diantres...¡se me olvidó!.

- "Perdóname Kari, pero necesitaba encontrar algo que hacer con mi vida y bueno..."

- "Tranquilo, estaba bromeando. Me da gusto que hayas encontrado por lo menos este trabajo"

- "Gracias. No es que me vaya a quedar aquí para siempre pero..."

- "Vaya, vaya. Mira quién está aquí"- dijo Tai mientras se acercaba con Sora. Me entregó los tres boletos

- "Hola Tai, Sora"- murmuré mientras revisaba los boletos- "Bueno, son tres lugares para Godzilla, ¡que se diviertan!"- recité tal como me habían enseñado pocas horas antes.

- "Gracias TK"- dijo Tai mientras entraba

- "Apártenme un lugar, voy por palomitas"- dijo Kari

- "¿Quieres que te acompañé?"- me ofrecí

- "Oh, no te preocupes. Tu debes quedarte aquí"- se acercó y me besó- "Nos vemos al rato"

Y se alejó.

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Bajé las escaleras que me conducirían a la dulcería. Faltando unos cuantos escalones, unos niños pasaron a mi lado corriendo, y me hicieron perder el equilibrio. Cerré los ojos esperando el trancazo...el cual no llegó. Cuando abrí los ojos vi que estaba ¡levitando a pocos centímetros del suelo!. Me asusté y el efecto se acabó pronto.

- "¿Te encuentras bien Kari?"- escuché una voz. Levanté la vista y ví a Mimí e Izzy al pie de la escalera.

- "Sí...pero...ustedes vieron lo que pasó"

- "¿De qué hablas?"- dijo Izzy

- "Floté. Se que es absurdo pero no me pasó nada, me quedé flotando"- Mimí me miró extrañada.

- "Pues yo sí te creo"- dijo Izzy- "Después de lo que pasó anoche creo en todo"

- "¿Qué pasó?"

- "Su computadora terminó el trabajo por sí sola. Por eso pudimos venir hoy al cine. Vamos a ver Godzilla contra..."

- "...el sobrino del calamar mutante del espacio"- concluyó Izzy- "Mejor que Titanic 2"- Mimí lo vió enojada- "Te prometo que vamos la semana que entra"

- "Pues es increíble"- dije, obviamente hablando de la computadora.

- "Sea lo que sea fue algo bueno"- Izzy miró su reloj- "La película está iniciando"

- "Déjame compro mis palomitas y subimos"

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Una vez terminados los cortos cerré la puerta de la sala 5. Tenía que permanecer dentro los primeros 15 minutos, para resolver cualquier inconveniente con un cliente. Miré la audiencia antes de que se apagaran las luces y sonreí. Por alguna razón todos mis amigos estaban ahí, incluso Joe. Parece que todos decidieron ir a ver Godzilla al mismo tiempo. Supongo que fue buena suerte tenerlos a todos en mi primer día de trabajo. Las luces se apagaron e inició la película. Godzilla contra el sobrino del calamar mutante del espacio. Esa iba a ser la primera película que vería en 10 años.

Aparecieron los créditos y poco después una vista panorámica de la ciudad de Tokio se preoyectó en la pantalla. De pronto, la ciudad se oscureció por la presencia de un enorme OVNI, el cual se posó en un parque. Se abrió la puerta, para dejar salir al calamar espacial...pero lo que salió no fue un monstruo del espacio, sino algo mucho peor, algo que me heló la sangre.

Era Geekmon...¡adentro de la película!

- "¡GEEKMON!"- grité alterado. Toda la sala me volteó a ver.

- "Buenas tardes damas y caballeros, lamento interrumpir la película pero entre los asistentes hay un grupo de muchachos que deben iniciar su entrenamiento inmediatamente, así que si me disculpan"- dijo Geekmon desde la película con aquella voz fría que aún me aterrorizaba.

Se escucharon gritos en la sala. Tai se puso de pie y levantó a Sora. Kari me volteó a ver con mucho miedo.

- "¡Abre la puerta TK!"- gritó Joe. Corrí hacia la puerta, pero por alguna razón estaba atascada.

- "¡No puedo abrirla!"

Era demasiado tarde, Geekmon sacó una pistola y disparó. De la pantalla salieron unos rayos verdes. Uno de ellos me atrapó y antes de que me diera cuenta me atrajo hacia la pantalla y la atravesé.

Después ya no supe de mí.



- CONTINUARÁ-