Ser de Viento y Agua
Por alien2506
Esta basado en Haruka y Michiru, personajes que pertenecen principalmente a Naoko Takeuchi. Me gustaria que me dejaran sus reviews con su opinión al respecto de este poemfic… es el primero que escribo y me parece sumamente raro ¬¬
Una sola luz se escapaba de su habitación
y yo, cual Romeo furtivo me colé por su ventana.
Le encontré degustándome dormida,
le encontré amándome en sus sueños,
sabiendo que era yo quien susurraba
cerca, muy cerca de ella con ésta, mi voz.
Me ruboricé al deslizarme por su ropa aquamarina
pero todo dejó de importarme
cuando sus manos me tomaron
y en un embebido abrazo
me invitó a dormir junto a ella.
No es posible describir la belleza,
la fascinación que sentí al perderme en sus sonrisas,
no es posible que ustedes sepan
cómo se siente hacerle el amor a una sirena,
lo que se siente tocar su cuerpo escurridizo
con manos que en realidad no existen,
lo que se siente besar sus labios
con labios invisibles en un rostro quimérico.
Como un ladrón que se roba un objeto muy valioso
escapé sin que ella me oyera
como un Romeo que no se atrevió a besar a su Julieta,
como el niño que se roba la cinta de cabello de esa niña,
huí lejos de su cuerpo cristalino,
huí lejos de esa maravilla que aspiraba mi cuerpo
y me ahogaba en una tierna sonrisa de espuma blanca,
como ese Romeo que huye de su Julieta
por no poder ofrecerle ni siquiera un nombre al cual amar
me colé fuera hacia el mundo exterior.
Corrí por campos y por las ciudades,
ebrio de alegría, sobrio de melancolía
llegué a colocarme entonces en la cima del mundo
allá donde ni los mas audaces llegan
y grité con todas mis fuerzas
mi amor por ella,
No hubo valle, montaña, pantano, llanura,
estepa, iceberg, ser vivo o inerte
que no escuchara mi voz.
Desde aquella tarde vuelvo siempre a ella,
no importa cuánto viaje mi destino son sus brazos,
siempre regreso cuando va ahogando su lámpara
en las faldas de su manto azul
me sonrojo mientras lo hace
fundiéndome en sus matices rojos y lilas,
y en sus entrañas verdes, azules y doradas.
Ahora me llamo Haruka Tenoh,
ya no soy el ser informe que antes se mecía en las olas del mar,
ya no soy ese Romeo furtivo que dormía en el lecho de su Julieta
y huía poco antes de desprenderse el alba.
Ya no huyo a su tacto,
pero sigo revolviéndome en sus manos,
sigo meciéndome en su regazo,
sigue domesticándome como antaño
aunque sólo soy salvaje
si no están sus ojos para tranquilizarme.
Después de tantos siglos,
sus manos han cobrado la blancura de su espuma
y han sustituido esos murmullos disfónicos
por una tierna y dulce voz.
Su canción ya no va en voz de las sirenas,
va en la propia y en el violín que la acompaña,
el azul extremo que tantas madrugadas me envolvió
ahora se concentra en sus ojos,
envolviéndome de la misma hipnótica manera.
Sus pasos ya no murmuran ni tienen límite,
ya no se estremece a causa de la orilla,
de esa orilla que tantas épocas no pudo franquear.
Su nombre ya no es océano, ya no es mar,
ya no se describe como agua y sal,
como profundidad oscura,
ya no es su corazón un interminable oleaje.
Con voz propia puedo llamar su nombre: Michiru.
Con sus manos puede acariciar mi rostro.
A partir de hoy, podemos amarnos,
ser una sola, ser de viento y agua.