Alpha: no es un giro, si no un... "tiempo de Espera"
Leia-Pandora: Este cap sin duda te gustará
MELLIZA: aquí tienes más, no permitiria que le pasara algo a Sevy.
Angelina: Más de la pareja Sevy/Ivonne
GUTY: Deseo concedido espero que te guste, si te gustó dejame tres revews (es broma)
NA: este capítulo va dedicado a cierto chico que ha hecho nacer en mí todas estas fantasías... aunque el no lo sepa está siempre en mi corazón (se oyó cursi pero es cierto)
Capítulo 14
-Pasa por favor- dijo Snape del otro lado de la puerta, estaba totalmente diferente, él vestía una túnica negra de gala, llevaba el cabello arreglado aunque un poco graso todavía, la habitación tenía una mesa hermosa adornada con velas, juego de cubiertos para dos personas, dos copas, un balde con vino y suculentos platillos –Ponte cómoda
La chica vestía un hermoso vestido ROJO, muy sexy, con escote enfrente y espalda semidescubierta, entallado al cuerpo, tenía una figura muy bonita, no muy delgada pero tampoco muy voluptuosa; llevaba poco maquillaje en el rostro, sólo un poco de rimel, sombras y un toque de brillo labial color rojo muy discreto. El vestido llegaba a media rodilla, llevaba las piernas descubiertas y unas hermosas sandalia rojas de talón descubierto y con poco tacón, lucía muy hermosa.
-¡Valla Sevy! ¡Te has lucido!- dijo la chica al tiempo que se escuchaban las hermosas notas de una canción totalmente desconocida en el mundo muggle. La cena transcurrió tranquilamente, al parecer no había mucho de que hablar, y ninguno se atrevía a mirar al otro, temían que algo se desbordara justamente allí durante esa cena. Cuando terminaron la música seguía, una canción tras otra, balada tras balada.
-¿quieres bailar?- dijo él ofreciendo su mano a la chica
-Claro que si- tomó la mano varonil y un escalofrío recorrió su cuerpo cuando la otra mano de Snape tomaba su cintura y pegaba sus cuerpos. Ella se dejó llevar por la música en los brazos del hombre que más quería en el planeta, apoyó su cabeza sobre los hombros de Snape y éste puso ambas manos femeninas alrededor de su cuello, para tomar con ambas manos la cintura de la chica.
-Sevy- susurró ella en voz baja
-¿si?
-¿qué sientes en este momento?
-No lo sé ¿y tu?
-Mucha paz, me siento segura en tus brazos
-No me dejes osita
-no lo haré Sevy… no lo haré
Severus tomó el rostro de la joven y lo llevo hacia el suyo, sus labios apenas rozaron para después hundirse en un beso profundo, ella correspondió, él llevó sus manos a recorrer las formas femeninas, que parecían temblar ante las caricias, así al compás de la música, en compañía de las caricias, fueron llegando poco a poco a la cama que había junto ala chimenea, el frío no se sentía mas, y el fuego de la chimenea apenas brillaba ya, Snape dejó de besar a la chica por un momento y bajó los tirantes del vestido que ceñía su cuerpo para besar los hombros desnudos, subir por el cuello hasta los lóbulos de las orejas; las piernas de la chica falsearon un poco así que ambos cayeron al suelo víctimas del éxtasis. Ella desabrocho cuidadosamente la túnica de gala de Snape y se la quitó, quedaba debajo una camisa blanca y un pantalón negro que lo hacían ver realmente varonil, ella desabrochó pacientemente la camisa, mientras él seguía bajando el vestido poco a poco, cuando ella hubo terminado con la camisa él llegaba ya a los senos bien formados de la chica, y los besaba con ternura haciendo que ella se retorciera del placer; ella trató de desabrochar el pantalón de él, pero el éxtasis que provocaban los besos en su vientre era ya demasiado. Snape seguía bajando el vestido, hasta que decidió despojarla por completo de él, ella pudo al fin desabrochar el pantalón, hasta que los dos quedaron sólo en prendas intimas.
-Ivonne te amo- decía Snape besando la boca de la joven
-Severus…- no pudo terminar, pues un gemido ahogado salió de la boca de la joven, se habían desprendido ya de aquello que los estorbaba, y él penetraba su vagina con una delicadeza extrema, que a ella le causaba placer, el vaivén de sus cuerpos era cada vez más rápido, aunque lo disfrutaban acompañados de besos y caricias, que hacían de ella una noche aún más placentera.
Eran ya las nueve de la mañana, y el sol brillaba ya entre las oscuras cortinas del cuarto provisional de Severus Snape, cuando él abrió los ojos sintió a alguien que se abrazaba a él con infinito cariño, cuando reaccionó, recordó que había pasado una placentera velada con la chica que más amaba en el mundo y ella seguía allí, con él y para él.
-¡buenos días osita dormilona!
-Buenos días Sevy
-¿cómo has amanecido?
-Muy bien, ¿y tu?
-Cerca de ti, y dio un beso a la cabeza de la chica que tenía asida a su pecho
****************--------****************
-Buenos días a todos, Feliz navidad- exclamó la chica que llegaba a la sala común de Gryffindor vestida ya con un conjunto deportivo y una sudadera, ya cambiada y bañada lógicamente asumieron que había pasado la noche con Snape.
-Hay un montón de regalos al píe de tu cama- dijo Hermione algo molesta llevando a la chica al dormitorio
-¿Qué pasa Mione?
-Es obvio- dijo cruzando los brazos y poniendo una actitud de desapruebo a la brujita que tenía frente a ella. –Has pasado la noche con Snape- y puso una cara de asco infinito
-¡Hay Mione!- dijo la chica evitando su mirada –He pasado muchas noches con Snape, yo no sé de qué te sorprendes
-Pero han sido por tu trabajo…
-Y cuestiones sentimentales, alegrías, sinsabores e incluso hasta por tonterías, ¡No veo por qué no pasar Noche Buena con él!
-¿quieres a George?
-Claro que si, es un Weasley
-Pero entonces no lo quieres a él, si no a su apellido…
-Es como si dijeras que adoro a Malfoy solo por ser un Malfoy
-¡¿Adoras a Malfoy?!
-Si, y no es secreto, creo que debiste de haberte dado cuenta.
-Lo siento Ivonne, pero estábamos en el asunto de Severus Snape NUESTRO profesor de Pociones
-Ah, ya te lo dije, no debería extrañarte… ¡Mira Mione una lechuza!- el ave voló y se posó sobre la cabeza de cabellos enmarañados de color castaño y dejó caer una carta escrita con tinta negra y una letra bastante hosca, era de Víktor Krum , que le mandaba felicitaciones y le pedía que ella y sus amigos lo vieran jugar la final del torneo estatal de Quidditch que se jugaría a mediados de Marzo del año que entraba, había avisado a Dumbledore y éste estaba encantado con la idea.
-¡Genial!- exclamó Hermione algo molesta -¡Lo que me faltaba! Un motivo para lograr que Ron se ponga celoso
-¡Mione! ¡es excelente! ¡Krum te ha invitado a la final del torneo estatal de Quidditch!
-Yo no sé por qué tanto escándalo por un juego estúpido
-¡Mira es Tzuki!- tomó al gatito entre sus brazos y vio que del collar le colgaba una hermosa rosa azul como la que le había regalado Snape el día anterior, junto había una nota que decía:
Ivonne
Anoche fue la mejor noche que he tenido en toda mi vida, gracias por compartirla con migo.
Severus Snape
Aún no terminaba de leer la nota cuando alguien llamó ala puerta, se oyó una voz varonil que preguntaba a las chicas si estaban listas.
-Charlie eres un desesperado, no he abierto mis regalos
-¡que bueno! Faltaba el mío- y extendió a la chica un regalo un poco plano, que estaba envuelto en un papel muy barato y parecía pesado, lo abrió y se dio cuenta que era un certificado enmarcado hermosísima y cuidadosamente.
-Me lo envió Percy- dijo él sonriendo –me dijo que te haría feliz pero que al ministerio no le agradaría que yo te lo diera, me costó trabajo convencerlo.
-¡Es mi certificado de animago registrado! ¡Eres genial Charlie!
-Ahora si serás mi "gatita"
-gracias
terminó de abrir los regalos, Ron le dio una bolsa de grageas multisabores de Berttie Botts, Harry un pequeñísimo "libro" escrito con su puño y letra acerca de los hechizos que había aprendido lo que emocionaba mucho a Ivonne; Hermione le dio toda una colección de libros muggles de un autor chileno que Ivonne adoraba, Lee le mandó una rosa roja cortada de los jardines privados de miss Sprout, Fred un estuche de "Bromas Mágicas Profesionales Para Magos Bromistas Profesionales" de los que él y George tenían ya tres. Un paquete grande y cuidadosamente envuelto y puesto sobre la cama, era de George y tenía un hermoso vestido azul largo y escotado, muy sencillo pero prácticamente perfecto:
Feliz Navidad amor, espero que lo uses para bailar conmigo esta noche.
Te amo: George
Ivonne puso una cara de preocupación evidente, lo cierto era que Charlie había llegado justo a tiempo para ayudarla aunque sabía que quizá después de esto él no la volvería a querer igual
-Ivonne- dijo el chico que la esperaba en la puerta -¿sucede algo?
-En realidad... que bueno que me lo preguntas… justamente quería hablar contigo.
-Está bien, iremos afuera a dar un paseo y charlar
-está bien
Ambos chicos salieron del castillo después de haber desayunado algo, dieron un paseo por los terrenos de Hogwarts; Ivonne contó lo que había pasado desde su primera pelea y la reconciliación, el beso con Snape en el Vestíbulo, lo mucho que le había dolido el que no estuviera, la confusión que sentía en esos momentos.
-¿Y has hablado con George?
-No, no lo considero prudente en estos momentos... o bueno más bien no lo consideraba correcto, sin embargo no sé como decirle Charlie, si no tuviera problemas con ello ni siquiera lo habría mencionado ¿no lo crees?
-No sé que es lo que mas me decepciona de ti, si el que no sepas lo que quieres o el que lastimes a mi hermano, o peor aún que sea por Snape
-¡Charlie!- dijo ella molestándose un poco -¡Eso es lo único que no te permitiré más!
-¿qué cosa?
-Que te burles de mis sentimientos y que te expreses mal de Snape en mi presencia
-¡Si quieres ya cásate con él!- dijo él sarcásticamente, sonriendo al tiempo que esquivaba un golpe leve y juguetón de parte de Ivonne
-¡No cambias Charlie!
Lo que Charlie no acababa de entender era la razón por la cuál Ivonne había decidido rechazarlo por cuestión de edades cuando Severus Snape debería ser por lo menos lo triple de viejo que ella. Pero al fin y al cabo eran las decisiones de Ivonne.
Esa noche la luna brillaba en todo lo alto, Ivonne había dicho a George que no quería estar con él como pareja, pero que no sería la de nadie más, Ron y Hermione discutieron como siempre simplemente por una tontería, y Ginny había confesado a Harry que no sentía más que admiración hacia él, pero que no dejaría nunca de admirarlo; realmente se había estado viendo en la biblioteca nada más y nada menos que con Draco Malfoy, y su corazón de pollo (de Ginny) había logrado captar la atención del chico que no se encontraba en sus mejores momentos. Al parecer todo el amor se esfumaba lentamente de las manos de aquellos jóvenes. Charlie los acompañaba esa noche así que a pesar de todo trataron de poner sus mejores semblantes, poco antes de iniciar la cena Ivonne jaló a George hacia el vestíbulo.
Ya a solas, Ivonne explicó a George lo que había pasado desde el día del regreso de Snape, y cómo se sentía ella ante la noticia de su desaparición y la alegría que sintió ante su regreso... absolutamente todo lo que sentía hasta esos momentos, y que sin embargo seguía sintiendo una gran atracción y un gran cariño hacia él, después de todo no por nada había logrado superar todo aquello.
-Tu me impulsabas a seguir- dijo ella con lágrimas en los ojos, después de todo no era fácil para ella decir y admitir lo que sentía enfrente de alguien que la amaba tanto y a quien ella había amado tanto. –No es fácil para mí tampoco George...
-Lo sé- dijo él comprensivo –No sé por qué imaginaba que esto sucedería tarde o temprano
-George yo... créeme no he querido hacerte daño... es solo que yo... yo..
-Calma pequeña- dijo cariñosamente y la abrazó, parecía que se había resignado incluso antes de que ella le hubiese dicho
-George...
-Ivonne, supe desde el primer momento que los vi juntos que estaban hechos el uno para el otro, y como tú me lo dijiste en una ocasión, pocas personas han sufrido lo que ustedes han sufrido, sé que ambos se complementarán muy bien, además creo que no será fácil para ninguno de los dos porque Snape es un profesor y tú solo una estudiante del último curso en Hogwarts.
-Snape no es tan mayor, además creo que cuando salga de aquí será más fácil para ambos pero George... ¡gracias! Por comprenderme y quererme tanto
Regresaron al gran salón, donde en esos momentos Albus Dumbledore por petición de sus escasos alumnos que se habían quedado allí para navidad, arrinconaba las mesas para dar paso a una pequeña e improvisada pista de baile, en uno de los extremos había una pequeña radio mágica, cuya música era amplificada con magia. Los escasos alumnos cogieron a sus respectivas parejas, tomando chicas de aquí y de allá y sin muchas ganas de compartirlas.
-Hermione ¿quieres bailar?- preguntó sorpresivamente Fred Weasley que había notado la cara de añoranza de la chica.
El baile no fue de lo más bello que ello pudieron haber disfrutado, había mucha tensión en el ambiente y nadie sabía como comportarse, Snape había llegado llevándose a Ivonne para charlar con ella y quizá para bailar un rato.
********************---------*****************
Capítulo interesante, creo que seré escritora de "El libro Vaquero" (jeje chiste mexicano) mi final ya está planeado, pero parece que con lo del certificado de animago (eso me lo inventé, creo que no viene en ningún libro así que acepto más mentitas) Ivonne tiene muchas posibilidades de tener más aventuras...
¡¡¡Dejadme Revews!!!
Leia-Pandora: Este cap sin duda te gustará
MELLIZA: aquí tienes más, no permitiria que le pasara algo a Sevy.
Angelina: Más de la pareja Sevy/Ivonne
GUTY: Deseo concedido espero que te guste, si te gustó dejame tres revews (es broma)
NA: este capítulo va dedicado a cierto chico que ha hecho nacer en mí todas estas fantasías... aunque el no lo sepa está siempre en mi corazón (se oyó cursi pero es cierto)
Capítulo 14
-Pasa por favor- dijo Snape del otro lado de la puerta, estaba totalmente diferente, él vestía una túnica negra de gala, llevaba el cabello arreglado aunque un poco graso todavía, la habitación tenía una mesa hermosa adornada con velas, juego de cubiertos para dos personas, dos copas, un balde con vino y suculentos platillos –Ponte cómoda
La chica vestía un hermoso vestido ROJO, muy sexy, con escote enfrente y espalda semidescubierta, entallado al cuerpo, tenía una figura muy bonita, no muy delgada pero tampoco muy voluptuosa; llevaba poco maquillaje en el rostro, sólo un poco de rimel, sombras y un toque de brillo labial color rojo muy discreto. El vestido llegaba a media rodilla, llevaba las piernas descubiertas y unas hermosas sandalia rojas de talón descubierto y con poco tacón, lucía muy hermosa.
-¡Valla Sevy! ¡Te has lucido!- dijo la chica al tiempo que se escuchaban las hermosas notas de una canción totalmente desconocida en el mundo muggle. La cena transcurrió tranquilamente, al parecer no había mucho de que hablar, y ninguno se atrevía a mirar al otro, temían que algo se desbordara justamente allí durante esa cena. Cuando terminaron la música seguía, una canción tras otra, balada tras balada.
-¿quieres bailar?- dijo él ofreciendo su mano a la chica
-Claro que si- tomó la mano varonil y un escalofrío recorrió su cuerpo cuando la otra mano de Snape tomaba su cintura y pegaba sus cuerpos. Ella se dejó llevar por la música en los brazos del hombre que más quería en el planeta, apoyó su cabeza sobre los hombros de Snape y éste puso ambas manos femeninas alrededor de su cuello, para tomar con ambas manos la cintura de la chica.
-Sevy- susurró ella en voz baja
-¿si?
-¿qué sientes en este momento?
-No lo sé ¿y tu?
-Mucha paz, me siento segura en tus brazos
-No me dejes osita
-no lo haré Sevy… no lo haré
Severus tomó el rostro de la joven y lo llevo hacia el suyo, sus labios apenas rozaron para después hundirse en un beso profundo, ella correspondió, él llevó sus manos a recorrer las formas femeninas, que parecían temblar ante las caricias, así al compás de la música, en compañía de las caricias, fueron llegando poco a poco a la cama que había junto ala chimenea, el frío no se sentía mas, y el fuego de la chimenea apenas brillaba ya, Snape dejó de besar a la chica por un momento y bajó los tirantes del vestido que ceñía su cuerpo para besar los hombros desnudos, subir por el cuello hasta los lóbulos de las orejas; las piernas de la chica falsearon un poco así que ambos cayeron al suelo víctimas del éxtasis. Ella desabrocho cuidadosamente la túnica de gala de Snape y se la quitó, quedaba debajo una camisa blanca y un pantalón negro que lo hacían ver realmente varonil, ella desabrochó pacientemente la camisa, mientras él seguía bajando el vestido poco a poco, cuando ella hubo terminado con la camisa él llegaba ya a los senos bien formados de la chica, y los besaba con ternura haciendo que ella se retorciera del placer; ella trató de desabrochar el pantalón de él, pero el éxtasis que provocaban los besos en su vientre era ya demasiado. Snape seguía bajando el vestido, hasta que decidió despojarla por completo de él, ella pudo al fin desabrochar el pantalón, hasta que los dos quedaron sólo en prendas intimas.
-Ivonne te amo- decía Snape besando la boca de la joven
-Severus…- no pudo terminar, pues un gemido ahogado salió de la boca de la joven, se habían desprendido ya de aquello que los estorbaba, y él penetraba su vagina con una delicadeza extrema, que a ella le causaba placer, el vaivén de sus cuerpos era cada vez más rápido, aunque lo disfrutaban acompañados de besos y caricias, que hacían de ella una noche aún más placentera.
Eran ya las nueve de la mañana, y el sol brillaba ya entre las oscuras cortinas del cuarto provisional de Severus Snape, cuando él abrió los ojos sintió a alguien que se abrazaba a él con infinito cariño, cuando reaccionó, recordó que había pasado una placentera velada con la chica que más amaba en el mundo y ella seguía allí, con él y para él.
-¡buenos días osita dormilona!
-Buenos días Sevy
-¿cómo has amanecido?
-Muy bien, ¿y tu?
-Cerca de ti, y dio un beso a la cabeza de la chica que tenía asida a su pecho
****************--------****************
-Buenos días a todos, Feliz navidad- exclamó la chica que llegaba a la sala común de Gryffindor vestida ya con un conjunto deportivo y una sudadera, ya cambiada y bañada lógicamente asumieron que había pasado la noche con Snape.
-Hay un montón de regalos al píe de tu cama- dijo Hermione algo molesta llevando a la chica al dormitorio
-¿Qué pasa Mione?
-Es obvio- dijo cruzando los brazos y poniendo una actitud de desapruebo a la brujita que tenía frente a ella. –Has pasado la noche con Snape- y puso una cara de asco infinito
-¡Hay Mione!- dijo la chica evitando su mirada –He pasado muchas noches con Snape, yo no sé de qué te sorprendes
-Pero han sido por tu trabajo…
-Y cuestiones sentimentales, alegrías, sinsabores e incluso hasta por tonterías, ¡No veo por qué no pasar Noche Buena con él!
-¿quieres a George?
-Claro que si, es un Weasley
-Pero entonces no lo quieres a él, si no a su apellido…
-Es como si dijeras que adoro a Malfoy solo por ser un Malfoy
-¡¿Adoras a Malfoy?!
-Si, y no es secreto, creo que debiste de haberte dado cuenta.
-Lo siento Ivonne, pero estábamos en el asunto de Severus Snape NUESTRO profesor de Pociones
-Ah, ya te lo dije, no debería extrañarte… ¡Mira Mione una lechuza!- el ave voló y se posó sobre la cabeza de cabellos enmarañados de color castaño y dejó caer una carta escrita con tinta negra y una letra bastante hosca, era de Víktor Krum , que le mandaba felicitaciones y le pedía que ella y sus amigos lo vieran jugar la final del torneo estatal de Quidditch que se jugaría a mediados de Marzo del año que entraba, había avisado a Dumbledore y éste estaba encantado con la idea.
-¡Genial!- exclamó Hermione algo molesta -¡Lo que me faltaba! Un motivo para lograr que Ron se ponga celoso
-¡Mione! ¡es excelente! ¡Krum te ha invitado a la final del torneo estatal de Quidditch!
-Yo no sé por qué tanto escándalo por un juego estúpido
-¡Mira es Tzuki!- tomó al gatito entre sus brazos y vio que del collar le colgaba una hermosa rosa azul como la que le había regalado Snape el día anterior, junto había una nota que decía:
Ivonne
Anoche fue la mejor noche que he tenido en toda mi vida, gracias por compartirla con migo.
Severus Snape
Aún no terminaba de leer la nota cuando alguien llamó ala puerta, se oyó una voz varonil que preguntaba a las chicas si estaban listas.
-Charlie eres un desesperado, no he abierto mis regalos
-¡que bueno! Faltaba el mío- y extendió a la chica un regalo un poco plano, que estaba envuelto en un papel muy barato y parecía pesado, lo abrió y se dio cuenta que era un certificado enmarcado hermosísima y cuidadosamente.
-Me lo envió Percy- dijo él sonriendo –me dijo que te haría feliz pero que al ministerio no le agradaría que yo te lo diera, me costó trabajo convencerlo.
-¡Es mi certificado de animago registrado! ¡Eres genial Charlie!
-Ahora si serás mi "gatita"
-gracias
terminó de abrir los regalos, Ron le dio una bolsa de grageas multisabores de Berttie Botts, Harry un pequeñísimo "libro" escrito con su puño y letra acerca de los hechizos que había aprendido lo que emocionaba mucho a Ivonne; Hermione le dio toda una colección de libros muggles de un autor chileno que Ivonne adoraba, Lee le mandó una rosa roja cortada de los jardines privados de miss Sprout, Fred un estuche de "Bromas Mágicas Profesionales Para Magos Bromistas Profesionales" de los que él y George tenían ya tres. Un paquete grande y cuidadosamente envuelto y puesto sobre la cama, era de George y tenía un hermoso vestido azul largo y escotado, muy sencillo pero prácticamente perfecto:
Feliz Navidad amor, espero que lo uses para bailar conmigo esta noche.
Te amo: George
Ivonne puso una cara de preocupación evidente, lo cierto era que Charlie había llegado justo a tiempo para ayudarla aunque sabía que quizá después de esto él no la volvería a querer igual
-Ivonne- dijo el chico que la esperaba en la puerta -¿sucede algo?
-En realidad... que bueno que me lo preguntas… justamente quería hablar contigo.
-Está bien, iremos afuera a dar un paseo y charlar
-está bien
Ambos chicos salieron del castillo después de haber desayunado algo, dieron un paseo por los terrenos de Hogwarts; Ivonne contó lo que había pasado desde su primera pelea y la reconciliación, el beso con Snape en el Vestíbulo, lo mucho que le había dolido el que no estuviera, la confusión que sentía en esos momentos.
-¿Y has hablado con George?
-No, no lo considero prudente en estos momentos... o bueno más bien no lo consideraba correcto, sin embargo no sé como decirle Charlie, si no tuviera problemas con ello ni siquiera lo habría mencionado ¿no lo crees?
-No sé que es lo que mas me decepciona de ti, si el que no sepas lo que quieres o el que lastimes a mi hermano, o peor aún que sea por Snape
-¡Charlie!- dijo ella molestándose un poco -¡Eso es lo único que no te permitiré más!
-¿qué cosa?
-Que te burles de mis sentimientos y que te expreses mal de Snape en mi presencia
-¡Si quieres ya cásate con él!- dijo él sarcásticamente, sonriendo al tiempo que esquivaba un golpe leve y juguetón de parte de Ivonne
-¡No cambias Charlie!
Lo que Charlie no acababa de entender era la razón por la cuál Ivonne había decidido rechazarlo por cuestión de edades cuando Severus Snape debería ser por lo menos lo triple de viejo que ella. Pero al fin y al cabo eran las decisiones de Ivonne.
Esa noche la luna brillaba en todo lo alto, Ivonne había dicho a George que no quería estar con él como pareja, pero que no sería la de nadie más, Ron y Hermione discutieron como siempre simplemente por una tontería, y Ginny había confesado a Harry que no sentía más que admiración hacia él, pero que no dejaría nunca de admirarlo; realmente se había estado viendo en la biblioteca nada más y nada menos que con Draco Malfoy, y su corazón de pollo (de Ginny) había logrado captar la atención del chico que no se encontraba en sus mejores momentos. Al parecer todo el amor se esfumaba lentamente de las manos de aquellos jóvenes. Charlie los acompañaba esa noche así que a pesar de todo trataron de poner sus mejores semblantes, poco antes de iniciar la cena Ivonne jaló a George hacia el vestíbulo.
Ya a solas, Ivonne explicó a George lo que había pasado desde el día del regreso de Snape, y cómo se sentía ella ante la noticia de su desaparición y la alegría que sintió ante su regreso... absolutamente todo lo que sentía hasta esos momentos, y que sin embargo seguía sintiendo una gran atracción y un gran cariño hacia él, después de todo no por nada había logrado superar todo aquello.
-Tu me impulsabas a seguir- dijo ella con lágrimas en los ojos, después de todo no era fácil para ella decir y admitir lo que sentía enfrente de alguien que la amaba tanto y a quien ella había amado tanto. –No es fácil para mí tampoco George...
-Lo sé- dijo él comprensivo –No sé por qué imaginaba que esto sucedería tarde o temprano
-George yo... créeme no he querido hacerte daño... es solo que yo... yo..
-Calma pequeña- dijo cariñosamente y la abrazó, parecía que se había resignado incluso antes de que ella le hubiese dicho
-George...
-Ivonne, supe desde el primer momento que los vi juntos que estaban hechos el uno para el otro, y como tú me lo dijiste en una ocasión, pocas personas han sufrido lo que ustedes han sufrido, sé que ambos se complementarán muy bien, además creo que no será fácil para ninguno de los dos porque Snape es un profesor y tú solo una estudiante del último curso en Hogwarts.
-Snape no es tan mayor, además creo que cuando salga de aquí será más fácil para ambos pero George... ¡gracias! Por comprenderme y quererme tanto
Regresaron al gran salón, donde en esos momentos Albus Dumbledore por petición de sus escasos alumnos que se habían quedado allí para navidad, arrinconaba las mesas para dar paso a una pequeña e improvisada pista de baile, en uno de los extremos había una pequeña radio mágica, cuya música era amplificada con magia. Los escasos alumnos cogieron a sus respectivas parejas, tomando chicas de aquí y de allá y sin muchas ganas de compartirlas.
-Hermione ¿quieres bailar?- preguntó sorpresivamente Fred Weasley que había notado la cara de añoranza de la chica.
El baile no fue de lo más bello que ello pudieron haber disfrutado, había mucha tensión en el ambiente y nadie sabía como comportarse, Snape había llegado llevándose a Ivonne para charlar con ella y quizá para bailar un rato.
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Capítulo interesante, creo que seré escritora de "El libro Vaquero" (jeje chiste mexicano) mi final ya está planeado, pero parece que con lo del certificado de animago (eso me lo inventé, creo que no viene en ningún libro así que acepto más mentitas) Ivonne tiene muchas posibilidades de tener más aventuras...
¡¡¡Dejadme Revews!!!
