III Capitulo

Tropiezos, paseos y ¿Quiénes son las Guerreras Mágicas?

El día amaneció soleado en todo el castillo, desde la mañana se sentía mucho alboroto, personas que caminaban de aquí para allá, limpiando, buscando a alguien más o cuchicheando acerca del regreso de las Guerreras Mágicas.

- Escuchaste, Las Guerreras Mágicas han vuelto

- Sí, pero no recuerdan nada

- ¿Qué?

- Al parecer perdieron la memoria

Estos eran algunos de los tantos comentarios que se hacían en el palacio.

Guru Clef estaba reunido en el salón del trono con Presea, Ráfaga, Caldina, Paris.

- Muy bien- dijo Clef- anoche llegue a la conclusión de que es mejor no decirle nada a las muchachas sobre su vida de Guerreras Mágicas

- ¿Pero porqué?- pregunto Paris

- Paris, ayer escuchaste lo que dijo el joven que es su amigo, no pueden recibir ninguna noticia impactante- le dijo Clef

- Y su pasado es bastante impactante- dijo Presea

- Pero...

- Pero nada Paris- le dijo seriamente Clef- tú no quieres que Anaís o alguna de las muchachas resulte lastimada

- Claro que no

- Bueno entonces no reclames, tal vez llegue un día en el que recuperen la memoria- les dijo Clef

- Esta bien- dijeron todos

En otra parte del palacio nuestras amigas estaban algo dormidas, la primera en despertarse fue Anaís y luego Lucy

- Bueno días Anaís

- Buenos días Lucy

- Toc, Toc,

- Lucy abre la puerta por favor- le dijo Anaís

Lucy se dirigió a la puerta y la entre abrió

- Hola Lucy buenos días- dijo alegremente Caldina

- Hola Caldina, pasa- le dijo Lucy abriendo completamente la puerta

- Hola Anaís, ¿durmieron bien?

- Sí, gracias Caldina- le dijo Anaís

- Vine a mostrarles la ropa que les hice- dijo abriendo el armario, dentro de este había cientos y cientos de ropas de todos los tipos, faldas, vestidos, pantalones, y ropas cefirianas.

- Woww- dijo Lucy- ¡cuanta ropa!

- Si, yo misma la diseñe- dijo Caldina

- Gracias- le dijo Anaís

- Por nada- le dijo Caldina con una sonrisa.

Se sentaron en unos sofás y se pusieron a hablar de cosas comunes, como el clima, Tony, los jardines, Tom, el palacio, Mario, y lo insoportables que son los tres jóvenes. Ya llevaban como una hora hablando,

- Esta niña si duerme... -_-U- decía Caldina mientras miraba a Marina que aún dormía.

- Sí, Marina siempre duerme mucho ^-^- Anaís peinaba su cabello mientras hablaba, estaba sentada en un banquillo blanco enfrente del tocador.

- Es verdad, hoy me siento muy bien...

- Que bueno Lucy, me alegra, hoy tienen que estar perfectas - dijo Caldina

- ¿Y por qué?- le pregunto Lucy

- Por nada- dijo Caldina- por cierto Anaís, el cabello largo te queda muy lindo, además tus ojos lucen más que cuando usabas esas cosas en ellos.

- Gracias, ¿que cosas? ¿Los lentes? ha, es que ya no me hacen falta- dijo Anaís.

En ese momento se abrió la puerta de la habitación dándole paso a una pequeña bolita blanca con una gema roja en la frente, entró y comenzó a saltar por toda la habitación

- ¡¡¡¡¡Nikona!!!!! ¿¿¿Dónde te habías metido???- le pregunto Caldina

- Pu pu pu pu pu- Cuando salto sobre la cama donde Marina aún dormía, y para mala suerte del animalito la despertó

- ¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿Qué demonios?????????????????- Marina aún estaba un poco dormida y se restregaba los ojos.

- Pu pupupu

- ¡¡¡¡¡¡¡Pero si eres tú, bola de algodón!!!!!!! ¿¿¿¿¿¿¡¡¡¡¡¡Porqué me despertaste!!!!!!??????- Marina comenzó a correr a la pobre de Nikona por toda la habitación haciendo reír a todas. Marina se cambio luego de dejar de perseguir a Nikona. Ella tenía puesto un vestido por los tobillos, de la cintura para arriba era negro sin mangas, pegado al cuerpo y de la cintura para abajo era celeste como descolorido, un poco volado, pero no mucho, y en la cintura tenía una cinta medio gruesa color celeste también, con unas sandalias negras. Anaís se puso una camisa verde clara con un escote en la espalda y sin mangas, levemente pegada, y una falda por las rodillas negras, y sandalias negras. Lucy por su parte aún no terminaba de escoger lo que iba a ponerse.

- Lucy, ¿porqué no te decides ya?- le decía Marina- tengo hambre

- Es que hay muchas cosas, no se que ponerme- decía Lucy mientras veía la ropa.

- Bueno Lucy que te parece si nos alcanzas en el comedor- le dijo Caldina- te dejamos a Nikona para que no te pierdas

- Está bien- dijo Lucy midiéndose un sombrero negro de terciopelo.

Así, Anaís, Marina y Caldina salieron de la habitación dejando a Lucy y Nikona dentro, luego de quince minutos Lucy ya estaba lista, decidió ponerse un vestido rosado sobre las rodillas, cuello largo y sin mangas pegado al cuerpo y sobre el una chaqueta negra hasta la cintura con un solo bolsillo del lado izquierdo, su trenza, y su medallón en el pecho complementaban su atuendo.

- ¿Qué te parece?- le pregunto a Nikona dando una vuelta, Nikona salto alegremente- Gracias- Nikona salto hacía la puerta.

- Sí vamos, de seguro ya todos desayunaron, con el hambre que tengo- Abrió la puerta y ambas comenzaron a caminar por el corredor, Lucy veía el paisaje que mostraban las ventanas, jardines enormes, flores de todos los tipos y tamaños, árboles y un sol que brillaba. De pronto Nikona comenzó a correr muy rápido por el pasillo

- ¡Nikona, espera no corras, me voy a perder!- gritaba Lucy corriendo tras la bolita blanca que cada ves se veía más lejos, dio vuelta una esquina y:

- ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡PAST!!!!!!!!!!- Lucy tropezó con algo y callo de espalda al suelo.

- Ahí me dolió- dijo sobándose el golpe

- Disculpa ¿estás bien?- le pregunto una voz

- He... si no hay problem...- subió la cabeza y miro por primera ves "la cosa" con la que había tropezado, y quedo en blanco, no era una cosa si no un hombre, pero eso no fue lo que más la sorprendió, era alto, muy alto, de cabello negro y ojos azulados morados, pero su atractivo tampoco fue lo que la sorprendió, no, lo que la sorprendió fue que era el mismo hombre con el que soñaba, el mismo que ocupaba sus pensamientos a cada momento, no pudo reaccionar, se quedo viéndolo, sin palabras, sin emociones, y logro escuchar de lejos algo -Lucy- y ese Lucy, este Lucy la volvió a la realidad.

- Disculpa Lucy ¿te lastimaste?- le pregunto el joven ayudándola a levantar del suelo.

- No, no me lastime, gracias- le dijo Lucy ya parada- Debo suponer que me conoces

- Si, disculpa, lo olvide, soy Latiz- dijo el muchacho

- Ha- dijo Lucy- "Latiz, Latiz"

- ¿Piensas en algo?- le pregunto

- No, en nada, ¿tú no estabas ayer aquí?- pregunto Lucy

- No, ayer llegue de Autosam- le dijo

- ¿Autosam?- pregunto extrañada

- Si es un planeta

- Ha.

- Y dime Lucy ¿para dónde ibas corriendo?- pregunto Latiz

- Bueno iba siguiendo a Nikona, íbamos al comedor, allá me esperan

- Si quieres te acompaño

- Gracias- dijo Lucy- creo que si no me perdería

Comenzaron a caminar hacia el comedor, cada uno fundido en sus pensamientos, sin hablar. Cada uno que otro momento Lucy miraba a Latiz de reojo para comprobar que era el mismo de sus sueños. Llegaron a una puerta enorme.

- Bueno aquí es- dijo el joven- nos vemos luego Lucy- Y se fue sin dejar siquiera que Lucy le diera las gracias, pero antes de que se hubiera alejado demasiado Lucy le grito- ¡¡Gracias!!- El se dio vuelta y con una sonrisa le hizo un saludo con la mano, saludo que hizo que a la chica se le subiera el rojo al rostro.

Abrió la puerta y entro, había mucha gente, entre ellos estaban Marina, Anaís, Caldina, Tony, Mario, Tom, Paris, Guru Clef y cuatro personas que Lucy no recordaba haber visto, un joven vestido de verde y de cabello castaño oscuro, con un flequillo que no le dejaba ver los ojos, una mujer muy hermosa, alta, blanca, de cabello castaño claro sujetado en una cola alta y de ojos miel, un hombre alto rubio de ojos azules y por último una niña de unos cuatro años, de tez blanca, ojos y cabellos rosados, muy lindo.

- ¡¡¡Hola Lucy!!!- la saludo Marina alegremente parándose de su asiento- ven siéntate aquí- le dijo señalando una silla vacía a su lado.

Lucy se acerco y se sentó.

- ¿Dormiste bien Lucy?- le pregunto Guru Clef

- Si gracias

- Mira Lucy- Marina estaba de muy buen humor- ella es Presea- corrió poniéndose tras la joven de cabello castaño claro

- Hola Lucy ¡Que gusto verte!- Presea le dijo saludándola con una sonrisa

- Hola, yo también me alegro de verte.......creo-

- Y él es Askot- Marina dijo yendo rápidamente detrás del puesto del joven de cabello castaño, el cual por alguna razón se sonrojo (¿Por que será?  ^^)

- Hola Lucy- Askot la saludo

- Hola-

- El es Ráfaga- dijo Marina yendo hacia el asiento de este

- ¿Cómo has estado Lucy?

- Bien, gracias-

- ¿Y a que no te imaginas?- le pregunto Marina emocionada

- ¿Qué?

- Ráfaga es el esposo de Caldina. Y ella- Marina fue hasta el asiento de la niña- es Cristal, su hija

- Hola pequeña- dijo Lucy- se parece mucho a ti Caldina

- Gracias, por cierto Lucy, ya te íbamos a ir a buscar, Nikona llegó sin ti ¿Cómo llegaste sin perderte?- Caldina parecía confundida mientras veía a Lucy

- Ah si- dijo Lucy con el tenedor en la mano, el cual tenía un trozo de melón a punto de metérselo en la boca- un muchacho me guió

- ¿Un muchacho?- Presea pregunto extrañada

- Si, un muchacho llamado Latiz me acompaño hasta aquí.

Todos quedaron en silencio, y las personas venidas del mundo místico se sorprendieron

- ¿Dije algo malo?- pregunto la pelirroja

- No, claro que no Lucy- le dijo Guru Clef

- ¿Y por que se quedaron tan callados de pronto?- pregunto Anaís

- Por nada- respondieron todos a coro con una sonrisa fingida y una gota en la cabeza a causa de su imprudencia

- No sabía que Latiz había vuelto- dijo Presea

- Si- respondió Guru Clef muy serio- llego en la mañana

- ¿Que les parece si salimos hoy?- propuso Caldina para romper el hielo que se había formado

- Claro- Marina dijo alegre

- Si este lugar es muy lindo- Anaís veía por un gran ventanal el sol en su esplendor

- Y podremos disfrutarlo los dos juntos- Mario hablo por primera ves en la mañana, viendo empalagosamente a Anaís

- Yo también voy

- Paris, nosotros tenemos mucho trabajo- le dijo Guru Clef de manera ceremonial, Mario solo una risa burlona y Paris dirigió a Clef una mirada que claramente decía Más te vale no decirme que no, así que Guru Clef sonrió con una gota en la cabeza- pero nada que no podamos dejar para después.

Mario gruño, Paris sonrió a Anais y ella le correspondió la sonrisa.

- Y bien ¿para dónde vamos a ir?- pregunto Marina

- ¿Qué les parece si vamos al río?- propuso Presea

- ¡¡¡Sí!!!- viboroteo alegremente Cristal- el río es muy lindo y azul mami

- Sí cariño- le respondió dulcemente Caldina

- Por cierto Paris ¿qué te paso en el ojo?- Marina lo miraba inquisitivamente como sabiendo lo que paso, aunque en el fondo no lo sabía.

- He... No, nada- respondió mirando hacía otro lado

- Ja- murmuro Mario

- ¿Y a ti que te pasa?- le pregunto Anaís

- No nada princesita

- Bueno vamos- dijo Askot

- ¡Si!- dijeron todos parándose de la mesa

- ¿Y va a ir Latiz?- pregunto Lucy

- Iré a preguntarle- Ráfaga se propuso a ir en busca del joven espadachín

- Te esperamos afuera cariño- le dijo Caldina

Todos salieron del comedor, Ráfaga por un lado y los demás por otro.

En algún lugar del palacio se encontraba un joven, estaba sentado en la rama de un árbol, pensando, con los ojos cerrados. Era Latiz. Se encontraba recordando el momento en que había llegado a Céfiro, este día.

Flash Back

- Veo que regresaste- dijo Guru Clef

- Si, ayer sentí la presencia de las Guerreras Mágicas, pero no pude venir hasta hoy. Guru Clef dime como esta Lucy- Latiz estaba con su semblante serio igual que siempre, pero al pronunciar el último nombre sus ojos se iluminaron vivazmente.

- Latiz, ha ocurrido algo- así fue como Guru Clef le contó a Latiz lo ocurrido con las Guerreras Mágicas, su perdida de memoria y las razones por las que era peligroso decirles la verdad de su vida- y esa es la razón por la cual no pueden saber nada de su pasado o podrían salir lastimadas ¿comprendes Latiz?

- Si claro que comprendo, pero Guru Clef no puedes hacer ningún hechizo para que recuperen la memoria

- Eh estado buscando, pero aunque lo encuentre no lo haré

- ¿Porque no?- pregunto Latiz

- Por que ellas no quieren

Fin Flash Back

- Hola Ráfaga- dijo Latiz sin abrir los ojos aún

- Hola Latiz, tiempo sin verte- Ráfaga estaba cruzado de brazos

- igual ¿Cómo esta Cristal?- Latiz se bajo del árbol de un salto

- Bien, Caldina organizó un paseo con las muchachas, Paris, Clef y yo vamos a ir ¿quieres venir?

- No gracias

- Anda Latiz, ven- Ráfaga insistió

- No, mejor me quedo, no tiene sentido, ella... ya no es la misma

- Te refieres a Lucy ¿no?. Latiz el que no recuerden nada de su pasado no significa que hayan cambiado, son las mismas, claro ahora son más maduras y mayores, pero ven y verás que Lucy sigue siendo la misma- dijo Ráfaga

- Bueno esta bien- Latiz acepto y ambos salieron del jardín.

No tardaron mucho en llegar hasta la puerta principal donde todos estaban esperándolos animadamente. Anais y Presea hablaban mientras Paris y Mario se echaban miradas de fuego, Lucy trataba de quitarse a Tony de encima, él estaba empeñado en que fueran tomados de la mano, Askot llevaba en los hombros a Cristal. Marina hablaba con Guru Clef y Tom intentaba explicarle a Caldina lo que era un avión.

Cuando Lucy vio a Latiz, corrió hacia el dejando caer al suelo de bruces a Tony que intentaba besarla, provocando las risas de todos.

- ¡Hola Latiz!- saludo Lucy emocionada

- Hola Lucy, Marina, Anaís- el joven saludo muy calidamente

- Hola- Marina y Anaís veían fijamente al hombre

- ¿Y quien es ese Lucecita?- Tony le pregunto a Lucy, Lucy lo miro enojada por ese "Lucecita" y Latiz lo miró muy fríamente

- Mi nombre es Latiz ¿Quién eres tú?- su tono helaba hasta la sangre mas caliente

- Soy Tony- el muchacho tenia una gran seriedad y Caldina viendo aproximarse una pelea más intervino

- Bueno en marcha- todos comenzaron a caminar.

Dirigiendo el grupo iba Nikona, detrás Askot con Cristal en hombros, luego Caldina y Ráfaga seguidos por Paris, Guru Clef y Latiz, después iban conversando amenamente Presea, Tony, Tom y Mario y un poco más alejadas del grupo Anaís, Marina y Lucy.

- ¿De verdad es el?- Marina pregunto incrédula

- Te digo que sí, Latiz es el mismo hombre de mis sueños

- Entonces Lucy, eso quiere decir que Guru Clef, Latiz y Paris son las personas que hemos buscando desde hace tanto- Anais medito

- ¿Y ahora que? les vamos a preguntar quienes son ¿o que?- pregunto Marina

- No se-  dijo Lucy

- Es mejor dejar las cosas así, ahora sabemos que ellos son reales, por lo tanto lo que sucede en las pesadillas también, no quiero saber más, me gustaría no estar aquí, y seguir pensando que todo esto es una horrible pesadillas- Anaís bajo la cabeza tristemente

- A mi también- dijeron a la par Lucy y Marina

- Pero vamos a disfrutar esto, es un lugar muy lindo y todos ellos son muy simpáticos- Lucy se trataba de alegrar a sus dos amigas

- ¡¡¡Lucy, Marina, Anaís, no se queden atrás!!!- les grito desde adelante Caldina

- ¡Si, ya vamos Caldina!- grito Lucy, agarro de las muñecas a Marina y Anais y corrió con ellas hasta donde estaban los demás.

Caminaron por un rato hacía llegar a un lugar despejado había un río azul y caía de el una enorme cascada cristalina.

- ¡Qué lindo lugar!- El lugar tenía maravillado a los jóvenes del mundo místico, sobretodo a Lucy que se divertía mucho.

- Marina, cielito lindo- Tom le hablaba a Marina mientras ella prestaba atención a las palabras de Guru Clef, Marina lo volteó a ver- ¿no te parece que es un hermoso lugar para pasar un día romántico juntos?- Marina se volteó sin decir nada y siguió hablando con Guru Clef.

- Aja Clef, como te decía... no creo que...

- Marina- la interrumpió Clef- ¿no le vas a responder al joven?

- No, es que se me gastaron los insultos

- Ha ^_^U

Mientras tanto Anais reía de unos muyyyyy malos chistes que le estaba contando Paris, pero ella reía sinceramente y Mario gruñía con cada uno

- ... y se cayó- Paris termino el chiste

- jajajaja, fue muy bueno- Anaís reía aun

- Princesita ese chiste es uno de los peores que he oído en mi vida, es... es... balurdo- gruño Mario

- Mario- lo llamo tranquilamente Anais- si dices que me quieres tanto ¿puedes hacerme un favor?

Paris frunció el ceño

- Si princesita yo hago lo que sea por ti

- Bueno te pido que- Anais se acerco a Mario de una manera sensual y estaba a una distancia muy corta a su rostro, lo que hizo que el ceño de Paris se profundizará aun más- no me vuelvas a Llamar princesita, ¿¿¿entiendes o te lo vuelvo a explicar???- con eso Paris rompió en risas y carcajadas, Anais se paro del piso- vamos Paris- le dijo y ambos dejaron a Mario echando humo.

Lucy estaba hablando con Presea cuando apareció Caldina muy preocupada

- ¿Han visto a Cristal? no la encuentro

- No- dijeron las dos

- ¿Donde se metió esta niña? Ráfaga ayúdame que no encuentro a Cristal

- ¿Qué?

Pronto todos estuvieron separados en grupos que fueron sacados por sorteo

1er grupo: Ráfaga, Guru Clef, Tom

2 do grupo: Caldina, Paris, Mario

3er grupo: Lucy, Marina, Anaís y Nicona

4to grupo: Presea, Latiz, Tony, Askot

- Cuando pasen dos horas regresaremos a este punto- índico Guru Clef

- Bien- dijeron todos y cada grupo tomo un distinto camino

- Que bueno que Nicona vino con nosotras- dijo Lucy- Así no nos vamos a perder

- Bueno eso es verdad- dijo Marina- ¿pero no puedes hacer que deje de saltar?

- Marina eso no molesta, no te quejes- le dijo Anais

- Esta bien-

Hablaban sin darse cuenta que cada ves se internaban más y más en un espeso bosque.

En otro lugar más alejado

-¡Cristal!¡Cristal! ¿Dónde estas?- gritaba Ráfaga llamando a su pequeña hija

- ¡Cristal! - Guru Clef y Tom llamaban a la niña

- No esta- ¿Guru Clef no tienes idea de dónde se pudo haber metido?

- Tranquilo Ráfaga, ya la vamos a encontrar

- Si, ya va a aparecer- Tom trataba de animar también

En otra parte

- Cristal ¿estas allí?- Paris buscaba a la niña entre los arbustos, recordando que cuando ellos jugaban a las escondidas ella solía esconderse en lugares así

- ¡Quitate de allí!- le dijo Mario intentando quitarlo de los arbustos- Niña, Cristal ¿estas aquí?

- Deja la idiotez, no ves que no esta- Paris le reprocho molesto, seguía de mal humor "¿Por que demonios tenía que tocarme la búsqueda con el?" ese pensamiento recorría la molesta mente del joven príncipe, creyendo que tal vez le había caído una maldición.

- Eso no importa yo la voy a encontrar- dijo Mario comenzando a imaginar una escena- Yo llego con la pequeña Cristal y le digo a mi princesita "princesita Anaís mira, rescate a la niña" (el fondo es rosado y romántico con burbujas por todas partes) y estoy con la niña en brazos enfrente de Anaís y ella me dirá "querido Mario eres mi héroe, ¿quieres tomarme la mano?" dejo a Cristal a un lado y tomo la mano de mi princesita y ella se me acerca, nos vamos a bes...

-¡¡¡¡GRAHSSS!!!!- Mario salió de golpe de su transe, ya que Paris le acababa de mojar con una cubeta de agua fría en toda la cabeza (¿De dónde la saco?)

-¡¡¡¿¿¿QUE TE PASA IMBECIL???!!! ¡¡¡¿¿¿PORQUE ME MOJAS???!!!

- Porque eres un tarado

- ya dejen de pelear y busquen a Cristal- les dijo Caldina

- Oye Marina, esta muy oscuro

- Lucy, no te preocupes, Anais ¿dónde estas?

- Aquí

- Demonios no veo nada

Marina se quejaba no veía nada "Demasiada oscuridad" por alguna razón estas palabras resonaban  en la mente de las tres jóvenes. Las muchachas se habían internado demasiado en el bosque, y ahora además de estar perdidas estaban en completa oscuridad.

- ¿Y Nikona? ¿Dónde esta Nicona?- pregunto Lucy, cuando algo salto a sus brazos. Nicona.

- Aquí estas, creí que te habías perdido

- Pu, pu pu pu

- Es mejor tomarnos de las manos, no veo nada- sugirió Anais y las tres se tomaron de las manos, Marina dirigiendo, Lucy en el medio y Anais de última.

- Marina, Anais mejor quedémonos aquí, si no nos vamos a perder más

- No Lucy- dijo Anais- es mejor buscar la salida

En un lugar muy despejado

- Es mi culpa- se recrimino Askot- no debí dejarla sola

- No es tú culpa Askot, esas cosas pasan- dijo Presea

- Ya es tarde, en 10 minutos tenemos que regresar al río con los demás- dijo Tony

- Quien sabe, tal vez ya la encontraron- dijo Presea

- No. Dijo repentinamente Latiz, no había pronunciado palabra alguna hasta hora. Askot suspiro decepcionado

- ¿Y cómo lo sabes?- le pregunto Tony

- Solo lo se- dijo Latiz tan frío como un témpano de hielo y Tony se quedo confundido por la frialdad del joven

En otra parte

- Lucy, Marina ¿ven esa luz?- dijo de repente Anais

- ¿Cuál luz?- preguntaron ambas jóvenes.

- Esa, parece que es la salida- dijo Anais señalando un par de árboles de donde se emitía una extraña luz y las tres amigas más Nicona se encaminaron hacia ella, buscando la salida.

- ¡Te encontré!- grito Mario por unos arbustos

- ¿Qué? ¿encontraste a mi pequeña?- pregunto esperanzada Caldina al joven. Y en ese instante de los arbustos donde estaba Mario salió saltando un extraño animal como un gato pequeño, salto, miro al joven y salio corriendo

- Idiota- le dijo Paris

- Yo creí que era Cristal- dijo el joven

- Si Caldina, no sabía que Cristal ahora tenía orejas- dijo irónicamente Paris

- Claro que no las tiene- dijo Caldina

- No me importa- dijo triunfal Mario- yo la encontraré y le mostraré a Anais que soy el mejor

- Miren, es una fogata- dijo Lucy viendo el fuego delante de ella, la luz que habían visto provenía de aquella fogata

- Pero no hay nadie aquí- dijo a Anais,  en eso detrás de varios arbustos una pequeña figura salió corriendo a los brazos de Anais.

- ¡Hola Anais!

- Pero si eres tu Cristal- dijo asombrada Anais

- Es mejor que vallamos regresando- propuso Presea bajándose de un salto del árbol al que se había subido para ver mejor

- Espero que la hayan encontrado

- Bueno compañero- Tony colocó una mano en el hombro de Askot- si no es así, te toca vértelas con una madre muyyy enojada

- No digas eso- le respondió Presea frunciendo  el ceño- ya quedamos en que no fue culpa de Askot ni de nadie- Latiz por su parte no pensaba ni decía nada, al parecer pensaba.

- Cristal ¿dónde estabas? Todos se preocuparon mucho por ti- le pregunto Marina mientras la niña seguía abrazada a Anais, se alejo un poco de su pecho y miro divertida a Marina- me perdí jugando

- Bueno pero ya estas bien, así que vámonos

- Espera Lucy, aun no les presento a mis amigas

- ¿Qué amigas Cristal?- Anais frunció el cejo ¿Qué amigas podría tener una niña de cuatro años a mitad de un bosque tétrico?

- Pequeña…- una voz se oyó acercarse, una voz fina, de mujer.

- ¡Ellas!- Cristal corrió hacia  donde la maleza no permitía ver más, y de allí salieron dos mujeres, una anciana, su piel morena estaba arrugada y era de baja estatura, pero a pesar de que parecía ser una mujer mayor, en los rasgos de su rostro se dejaba ver que había sido una hermosa mujer, de ojos verdes claros y cabello castaño pero sin ninguna cana, la mujer que estaba a su lado era muy hermosa, alta, delgada, su cabello de un tono azul y violeta, corto hasta el mentón, sus ojos eran del mismo color que la anciana, pero pequeños y alargados. Ambas estaban vestidas con ropas marrones de campesinas. Cristal corrió hacia ellas y abrazo las piernas de la joven mujer que sonrió.

- Vamos regresando- anunció Guru Clef a Ráfaga y Tom

- Ojalá la hayan encontrado

- Si, Caldina debe estar preocupada- Ráfaga pateó frustrado una piedra.

- Hola- saludo la muchacha- ustedes deben ser amigas de Cristal ¿no? Mucho gusto soy Rubí y ella es mi abuela Zafiro.

- Mucho gusto yo soy Anais Hououji  y ellas son mis amigas

- Soy Lucy Shido

- Soy Marina Ryuzaky

- Que bueno que llegaron, no queríamos tener que ir al castillo a llevarla- dijo la anciana  con voz rasposa.

- Muchas gracias por haberla cuidado- Anais agradeció con una inclinación

- No es problema, mi abuela y yo la cuidamos bien

- Ustedes viven en el castillo- la anciana  pregunto, mas bien afirmo

- Si, en realidad estamos como de vacaciones aquí, no sabemos por cuanto tiempo- explico Marina

- ¿Pero como supo que vivíamos en el castillo?- Lucy pregunto extrañada

- Es fácil saberlo, por sus ropas, cuando vimos a Cristal supimos inmediatamente que era del castillo, una niña del pueblo no se viste tan fino, telas  de seda y oro no son nuestro estilo- explico con una linda sonrisa Rubí.

- Ya veo- Lucy quedo pensando- ¡¿Por qué no vienen con nostras?! Estoy segura que Caldina y Ráfaga querrán agradecerles por haber encontrado y cuidado a Cristal

- No – respondió la anciana Zafiro con su voz- no tenemos ningún afecto por las personas que allí moran- y sin decir nada se perdió en la oscuridad

- Disculpen a mi abuela- dijo inclinándose- a  veces puede ser un poco… seca.

- No importa, ¿pero porque no le agradan las personas del castillo? A mi me parece que son personas muy agradables

- Bueno Lucy esa es una historia larga, si quieren siéntense

Todas se sentaron. Rubí frente a las muchachas y con Cristal sentada en sus piernas.

- Hace algunos años la princesa Esmeralda, el pilar de Céfiro fue raptada por su guardia Zagato, la princesa convoco a una leyenda de las Guerreras Mágicas- tomo un respiro y aunque notó incomprensión en los rostros de las tres muchachas continuó hablando- ellas debían salvarla y regresar la paz a Céfiro, pero en vez de eso mataron sin compasión a la princesa- su rostro se afligió y el de las tres muchachas se horrorizó, pero ninguna dijo nada- luego desaparecieron dejándonos sin pilar y cayendo en la destrucción. 

- Que horrible…- susurro Anais

- Y eso no es todo Anais, Céfiro sin la existencia de un pilar cayo en crisis, varios planetas trataron de invadir este mundo, pero ellas regresaron y a su parecer salvaron el mundo, una de ellas fue elegida como pilar- su rostro se endureció y reflejo mucha ira- pero la muy estúpida resulto ser un pilar irresponsable, en vez de admitir su destino, prefirió dejarnos a nosotros esa responsabilidad de cuidar al planeta.

- Pero… ¿eso no es mejor?

- No Marina, el deber del pilar era mantener hermoso y estable este mundo, velar por su seguridad, ahora esa responsabilidad es nuestra y no es fácil, ahora no podemos estar tristes o muy preocupados porque entonces Céfiro corre peligro, todo por culpa de un pilar irresponsable, unas guerreras ineficientes y los habitantes del castillo que no fueron capaces de hacer nada para evitarlo.

- Y por eso tú y tú abuela viven aquí

- Así es Lucy, nosotras preferimos vivir lejos de todos

- Ya veo…… ¡es tarde! Hace 15 minutos que deberíamos haber regresado, tus padres deben estar preocupados Cristal

- Si Anais- dijo la niña yendo hacia ella

Todas se pararon

- Bueno espero volverlas a ver, pórtate bien Cristal.

- Si Rubí

- Hasta luego- se despidieron las jóvenes y comenzaron su camino de regreso al lugar de partida con Cristal y Nikona.

- Fue una idiotez haberlas dejado ir solas- Mario y todos estaban reunidos nuevamente en el lago, llevaban veinte minutos esperando a que las tres guerreras Mágicas y Nicona regresaran

- No fueron solas, Nicona esta con ellas- replico Presea al comentario del chico

- Si, gran ayuda una almohada con patas- rió Tony irónicamente

- Tal ves encontraron a Cristal y por eso tardan- propuso Askot

- Bueno si ese fuera el caso, ellas ya…

- ¡¡¡Mami, Papi!!!- las palabras de Tom fueron interrumpidas por los grititos de Cristal, ella iba corriendo hacia los brazos de su madre que no espero y corrió hacia ella tomándola en brazos y abrazándola fuerte, detrás de la escena estaban Lucy, Marina, Anais y Nicona contemplando complacidas la escena, al igual que todos.

- ¡Qué bueno que llegaron! Estábamos preocupados.

Nicona salto a los brazos de Presea y para sorpresa de todos ella la acarició.

- Bueno, es que nos tardamos algo en encontrarla y luego…

- ¡¡¡MIS NIÑAS!!!- Anais  no terminó de hablar cuando por segunda vez en Céfiro las tres muchachas fueron abrazadas por Caldina pero con mucha fuerza, ya que no solo se  golpearon las cabezas unas a las otras, si no que vieron estrellas, estrellas, incluso el sistema solar entero- ¡¡¡Gracias, gracias, gracias!!!

- No te preocupes Caldina- dijo Marina más o menos recuperada- pero ya suéltanos ¿si?

- ¿Ah? Si perdón

Ya recuperados todos de la emoción, iban de regreso al castillo cuando el sol comenzaba a ocultarse, iban casi de la misma forma en que partieron, dirigiendo el grupo Nicona, Caldina y Ráfaga con Cristal dormida en brazos atrás, Askot y Tom hablaban, luego Paris, Latiz y Presea, seguidos por Tony, Guru Clef y Mario y al igual que antes, un poco apartadas, Lucy, Anais y Marina.

- Oye Guru Clef- por alguna razón la voz de Anais temblaba

- ¿si?- pregunto el sin voltear a verlas

- ¿te podemos hacer una pregunta?

- Si claro Marina- contesto Clef aun sin verlas

- ¿Quiénes son las Guerreras Mágicas?- pregunto Lucy

Notas de la autora:

Hasta que por fin regrese, ayer termine este capitulo, y por cierto se lo dedico a la Tía Ele ya que fue ella la que me dio ánimos para continuarlo,  gracias tía!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Espero que te guste este capitulo….

Kary

Ja ne