-Todos conocían a la pequeña gata mágica que se había casado con el más fuerte de los caballeros dorados. Aunque no sabían que ella era un poquito celosa. Cada vez que cierta chica de pelo rubio estaba cerca Saga se ponía a la defensiva, hay quienes cuentan que casi se armó una guerra campal entre las dos féminas cuando Katya se cayó "por accidente" sobre el caballero dorado…
Pero los celos de la pequeña gata mágica subirán a un nuevo nivel cuando la hielera andante como le llamaba a la saintia de pelo rubio y cierta persona estuvieran cerca de su amado y algo mañoso esposo.
xEl caso de Mei y Asuka (Ceres)x
-De enemigas a algo más… (Advertencia contenido sensible para algunas personas)
Templo de Géminis - Interior
—¿Qué estás haciendo aquí, Tachibana-san? —Preguntó la gatita mágica un poquito sacada de onda por ver a su amiga con derecho a roce como le llamaban a esa extraña relación que tienen sentada en la cama matrimonial.
—Pues..vine a hablar con Shion-chan pero estaba ocupado con los otros santos de oro y decidí dar una vuelta por el santuario. Bueno, la verdad es que vine a verte a ti, gatita —la demonio que ahora tenía el pelo castaño estaba cruzada de piernas con su brazo derecho debajo de sus grandes pechos. Ella miraba de forma lasciva a su amiga quien se tensó por como la más alta le miraba.
—Am..he.. Yo.. —Empezó a tartamudear la jovencita de pelo morado dando pequeños pasos hacia atrás intentando huir de su amiga.
—¿Qué pasa, cariño? ¿Acaso no te gustó? —La chica de cabellera castaña habló fingiendo tristeza.
—Cla..Claro..que.. —En ese momento el cabello de la pequeña gatita mágica cambió a gris y sus ojos se volvieron rojos. Ahora era su hermana gemela Salem..
—Ara. Ara veo que has despertado Salem —dijo Asuka con una pequeña sonrisa enmarcada en su rostro.
—Quién te has creído para hablarme como si fuéramos amigas, demonio —mencionó la malvada de pelo gris.
—No sabes como me dañas con tus palabras, Salem —la castaña seguía sentada en la cama de su amiga mirando con una sonrisa burlona a su contraria que elevó su cosmos.
—De nuevo te pregunto que te has creído para llamarme por mi nombre, demonio pervertida —amenazó Salem o Mei a Asuka que en ningún momento se movió o titubeó por la creciente energía de la hermana de Blair.
—Usando sus nuevos poderes la ahora ascendida a diosa sonríe con superioridad. Moviendo traviesa su dedo índice con el cual atrajo el cuerpo ajeno…
—¿Qué carajos? ¿Por qué no puedo moverme…? —Se quejaba la chica de pelo gris intentando mover alguna parte de su cuerpo para así darle su merecido a la intrusa.
—Sabes que me molesta cuando las gatitas malas como tú, Salem me hablan de esa forma.. —Dijo Asuka que en ningún momento dejó de sonreír teniendo ahora a la hermana de su amiga sentada sobre sus piernas.
—Me importa una mierda..sabes que no me gustan las mujeres.. prefiero a los hombres y… —Antes de que dijera otra cosa los labios de la chica de ojos rojizos fueron tomados por la recién llegada al santuario. Por esto los ojos de la hermana de Blair se abrieron como si estos fueran platos. A los pocos minutos de haber empezado a besarse ambas chicas se separan debido a la falta de aire en sus pulmones.
—Para que no te gusten las mujeres como a tu hermana.. Salem besas muy bien, cariño además tienes un rico sabor quizás un poco más dulce que el de tu hermana —eran las palabras de la antigua Saintia misma que se limpiaba un pequeño rastro de saliva que había quedado en la comisura de sus labios siempre mirando divertida a su contraria que estaba en silencio pero teniendo sus mejillas rojas como un par de tomates.
—Eres una pervertida..maldita demonio..además a quién le..gustaría recibir un beso tuyo… Para que sepas me dio asco ser tocada por ti… —Renegó la de cabellera gris.
—Asuka con una pequeña sonrisa pintada en sus labios habló—. —Dices eso pero ¿por qué tu rostro está rojo?
—Es..por la vergüenza.. nunca admitiría que me gustó que me besarás, no soy mi hermana a ella puedes besarla todo lo que quieras, además de batear para ambos lados es una pasiva —dijo Salem o Mei mirando a un lado evitando mirar a su captora.
—Te dije gatita que no me gusta cuando una linda dama como tú me habla así, sabes que hieres mis sentimientos —responde con un pequeño puchero la chica de pelo castaño misma que puso una mano sobre el trasero de Mei mientras que la otra la usó para que su gatita le mirara a los ojos.
—Qué-Qué-Qué… Mierda haces pervertida del demonio… No me toques el culo… —Mei seguía quejándose pero esas palabras quedarían en segundo plano cuando…
—Por ser una niña mala tendré que castigarte —Asuka se acercó al oído ajeno antes de morder el lóbulo de la oreja de su pequeña presa que soltó un lindo gemido.
—No..no hagas eso..pervertida… Sabes bien que no me gustan las mujeres… —Volvió a decir la gemela de la chica de melena morada mirando a un lado teniendo sus mejillas rojas.
—Esa actitud tan rebelde que tienes me calienta mucho y por eso te haré mía. Te haré tocar el mismo cielo con mis manos, Luego puedes seguir odiándome si quieres pero.. —La demonio o ahora diosa de cabellera castaña dijo en voz baja. Asuka usó una de sus manos para hacer que su pequeña gatita le mirara antes de volver a besar los labios ajenos esta vez siendo correspondida por su contraria.
—Qué te den..demonio idiota… —Responde Mei luego de haberse separado de los labios ajenos.
—¿Oh? Pero a la que le daré será a ti traviesa. Me cobraré todas las veces que me rechazaste y sobre todo por el golpe que me diste hace un tiempo —comentó la más alta poniendo ahora ambas manos en el trasero de la peli gris.
—Esto es una venganza de tu parte. Qué infantil eres —dijo la gemela de Blair-chan con una sonrisa.
—Puedo ser infantil pero te haré gritar mi nombre. ¿Estás preparada, gatita mala? —Pregunta la diosa de pelo castaño.
—Haz lo que quieras demonio pervertida… —Susurró Salem quien se acomodó en el regazo de su captora. Una vez que estuvo cómoda la pequeña bruja de pelo gris unió sus labios con los ajenos fundiéndose en un apasionado beso que fue subiendo poco a poco su intensidad…
El beso entre ambas mujeres fue subiendo su intensidad. Los masajes que la demonio daba al trasero de su pequeña gatita rebelde por alguna razón hicieron que ella se encendiera a pesar de estar besándose con una mujer, no pasó mucho tiempo para que Mei pidiera permiso para entrar en la boca de su enemiga jurada, cuando la demonio dejó entrar a la más bajita, sus lenguas empezaron a bailar juntas. Intentando ganar el dominio de la otra pero al parecer una diosa que ha vivido miles de años no era rival para una malvada y sexy peli ceniza que en menos de lo que se esperó Ceres acabó siendo dominada.
De nuevo el aire hizo falta en los pulmones de ambas féminas que se separan dejando un pequeño hilo de saliva uniendo sus labios. Las dos mujeres que estaban compartiendo un momento a solas se quedaron mirando sin decir nada…
Sonrieron como niñas pequeñas que guardan un secreto. De un rápido movimiento Salem empujó a su captora a la cama dejando a la demonio a su total merced, la rebelde gatita se quedó por unos momentos contemplando el cuerpo de su enemiga, al trascender a una deidad el cuerpo de Tachibana como era llamada por su amiga de pelo morado había cambiado. No solo su cabello sufrió un gran cambio pasando a ser ahora de color castaño sino que sus pechos se hicieron un poco más grandes, sus caderas se hicieron un poco más estrechas, sus piernas se volvieron una obra de arte para los ojos de cualquiera que la viera pero su trasero se volvió un poco más grande sin exagerar tampoco.. En otras palabras, la palabra diosa quedaba corta para la ahora mujer de cabellera castaña.
Sin poder creer que un simple beso dado por su enemiga llegaría a calentarla tanto, Salem sin ningún problema rompió la camisa que estaba llevando la demonio o ahora diosa haciendo que los botones de esa prenda salieran disparados hacia distintos puntos del sitio. Si no era la pequeña Mei quien rompiera esa prenda de vestir serían los grandes melones de la demonio que romperían aquella apretada camisa que dejó libres dos grandes pechos que le saludaron…
Relamiendo sus labios como si estuviera mirando el platillo más exquisito nuestra pequeña brujita de ojos rojos se acercó a uno de los pechos de su enemiga tomando con su boca el pezón erecto de aquella mujer de cabellera castaña. Con su otra mano empezó a darle un pequeño tratamiento al seno izquierdo, pellizcando, tirando, era tanto el placer que la castaña que dejó escapar una serie de perversos gemidos mismos que llenaron cada rincón del templo de Géminis por mientras la pequeña bruja de ojos rojos seguía chupando el pecho de su enemiga. Terminando con el primero fue por el segundo haciendo lo mismo que hizo con el seno derecho que había quedado completamente lleno de su tibia saliva…
Al acabar de saciar su sed con los pechos de su enemiga, Salem limpió su saliva pero esto no iba a acabar tan pronto ya que sus ropas también volaron de su cuerpo, quedando con sus pequeños pero perfectos pechos al descubierto sonrió perversa antes de ponerse de pie solo para acomodarse en una posición que era comúnmente conocida como "69" la pequeña y malvada brujita movía su culito frente a su contraria que soltó una risita antes de poner ambas manos sobre los glúteos de la maga.
Estando las dos con sus pechos al descubierto y tan llenas de lujuria además que estando en una posición tan pervertida hizo que la mente de ambas chicas se nublara. Tenían en sus mentes una única cosa..eso era hacer disfrutar a la otra.
Sin perder tiempo la mujer de cabellera castaña corrió las bragas de color negro que estaba usando su pequeña y rebelde gatita dejando al descubierto una linda vagina rosada. Tachibana como era llamada por Blair tuvo que tragar duro ya que estaba ante una gran exquisitez que pronto podría comerse al mismo tiempo Salem que corrió las bragas ajenas se encontró con la vagina de su enemiga jurada. La pequeña de ojos como el mismo fuego no podía creer que la intimidad de esta mujer fuera tan linda como también pequeña a comparación de su busto..sin perder tiempo y llevada por el peculiar aroma de las feromonas de la demonio o diosa Salem sacó su lengua rosada para dar una primera lamida al intimidad ajena. Sus ojos se abrieron como grandes platos cuando el sabor a la sal y perversión recorriendo sus papilas gustativas.
Continuó lamiendo casi desesperada. Estaba encantada de poder probar algo tan rico. Nunca en su vida pensó que podría probar la vagina de otra mujer y que esta tuviera un sabor tan dulce..
A su vez la demonio hizo su trabajo dándole algunas lamidas a la pequeña vagina que tenía frente a ella y solo para ella. Metió su lengua que hizo crecer un poco para llegar a lo más profundo de ese manjar que estaba comiendo en ese momento.. Sus manos se aferraron al culito de su gatita rebelde. Ninguna de las dos mujeres quería perder contra la otra por eso dieron lo mejor de sí misma para hacer que su rival terminará corriéndose..cosa que no tardó mucho para ser la primera vez que Mei hacía algo así con otra mujer su técnica era demasiado buena como para que la demonio no soltará vergonzosos gemidos mientras continuaba comiendo el ya hinchado clítoris de su contraria…
Unos minutos después las dos féminas terminaron en la boca de la otra.., Salem siendo la primera vez que bebía los jugos de amor de otra mujer tardó un poco en tragarlos, sintiendo que estos era como la más dulce miel continuó lamiendo el lugar por donde habían sido derramadas. Por su lado Asuka bebió con gusto los deliciosos jugos que había dejado escapar su pequeña y traviesa brujita.
Las ropas de ambas mujeres habían quedado dispersas por todo el suelo. Los gemidos de las dos enemigas juradas llenaron todo el templo del santuario.. Para ser la primera vez de Mei-chan teniendo sexo con una mujer ella parecía disfrutarlo demasiado moviendo sus caderas que chocaban contra las ajenas.., dejando que su pequeña vagina se besara con la de su demonio idiota, ninguna de las dos quería perder ante la otra por eso mismo dieron lo mejor de sí mismas. Pasaron unos cuantos minutos en donde el calor empezó a subir dentro del lugar así como también los cuerpos sudorosos de ambas no hicieron mella en este divertido juego.
Entre besos y caricias las dos mujeres que al parecer se tenían cierto resentimiento continuaron con este maravilloso pero al mismo tiempo peligroso juego que empezaron..
Se separan por unos cuantos minutos en donde la demonio hizo aparecer un pequeño gran dildo doble mismo que usó en ella poniéndolo dentro de su vagina que al estar lubricada con sus jugos pudo entrar fácilmente. Para incrementar el morbo Asuka hizo que la pequeña Mei lamiera desde la punta hasta la base de aquel juguete antes de terminar recostada en la cama abriendo con una de sus manos sus labios inferiores casi como si estuviera invitando a su amante para que la penetrara. Sin perder tiempo la demonio de pelo castaño tomó la punta de ese juguete sexual y comenzó a moverlo por encima de la hinchada vagina de Mei-chan quien dejó escapar una serie de lindos y vergonzosos maullidos siendo estos la evidencia de lo bien que la estaba pasando con su enemiga.
De un solo empujón la demonio que tenía a su merced a la pequeña gatita rebelde comenzó a penetrar la entrada de su ahora amante que gemía… La risita de Asuka era prueba de que ella también estaba gozando de ese momento tan espontáneo como sexy.. Aquella peli castaña teniendo ese maldito pero bendito juguete dentro de su vagina se movía como poseída. Entrando y saliendo del pequeño coño húmedo de Mei quien se aferró a la espalda ajena rasguñando apenas la piel expuesta de su amante de una noche; para evitar que la gatita de pelo gris siguiera maullando, Tachibana como era llamada por Blair-chan tomó posesión de los labios ajenos, las dos féminas se besaron por un largo rato sintiendo como ese maldito pero bendito juguete hacía mierda el interior de sus vaginas. Revolviendo sus entrañas calientes mientras sus lenguas traviesas jugaban la una con la otra…
La ahora diosa se alejó un poco de los labios ajenos para poder saciar también su sed con los pechos de su pequeña y sexy amante que si bien nunca imaginó estar cogiendo con otra mujer dejó que su demonio idiota probará sus pechos…
La mujer de cabellera castaña luego de haberse saciado con los pequeños pero perfectos pechos de su gatita rebelde. Tomó a Mei-chan de los hombros para que esta se sentara encima de Asuka quien ahora estaba recostada sobre la cama..si bien la brujita sabía lo que significaba no dijo nada y solamente empezó a montar a su amante de una noche metiendo y sacando de su interior aquel maldito y bendito juguete mismo que estaba revolviendo su interior…
Cómo todo lo bueno tiene que terminar Tachibana como era llamada por su amiga con derecho sujetó fuertemente las caderas de su amante de una noche para hacer que la punta de aquel maldito pero realmente bendito juguete llegará al interior del útero ajeno provocando en Mei-chan una sensación tan placentera que casi se desmaya luego de haber corrido. Dejando que sus fluidos calientes salieran disparados mojando aquella cama así como parte del cuerpo de su amante de una noche quien también terminó corriéndose mezclando sus jugos de amor con los ajenos… Para ser la primera vez de la pequeña Salem cogiendo con otra mujer parecía que lo había disfrutado mucho ya que, su carita mostraba una gran sonrisa, esto era evidencia que ella había gozado como nunca el haber cogido con una mujer..
Unos minutos después…
—Wow.. Wow.. Eso fue increíble.. —Dijo la pequeña Salem quien estaba abrazando el cuerpo desnudo de su amante.
—Me gustó bastante —mencionó la castaña de ojos azules. Esta mujer que se encontraba desnuda al igual que Salem miraba el techo con una gran sonrisa.
—Aunque seas una mujer..te mueves muy bien… —mencionó Salem mientras se acomodaba un poco en el cuerpo ajeno.
—Tampoco es para tanto, cariño pero si quieres podemos hacerlo cuando desees —comentó Asuka quien seguía acariciando el brazo de su amante de pelo gris.
—El que estuviéramos cogiendo esta vez no significa que lo volveré a hacer.. Aunque me gustaría hacerlo —lo último fue dicho en voz baja. Mei mostraba una gran sonrisa en su rostro.
—Eso significa que somos..ya sabes… —Murmuró la diosa de pelo castaño.
—Puede..que..no sea tan malo tenerte cerca, demonio idiota —dijo la gatita de pelo grisáceo abrazando de forma celosa a su amante.
—Vaya, eso lo tomaré como un cumplido, pequeña traviesa —mencionó Asuka con una gran sonrisa pintada en su rostro.
—Espero volver a repetirlo… Asuka —fue lo último que dijo la pequeña de cabello gris antes de caer dormida cambiando su cabello a morado.
—También me gustaría repetirlo, Salem —respondió la más alta dejando un beso sobre los labios ajenos.
¡Fin!
Extra: Lo que sucedió después..
—¿Se puede saber qué haces aquí, súcubo? —Preguntó un molesto Saga que estaba viendo a su enemiga cambiarse de ropa.
—Solamente pasaba a saludar, Sacchan —la castaña se encoge de hombros rodeando la cama en donde estuvo teniendo sexo con la hermana gemela de su amiga.
—¿Saludar o viniste a cogerte a mi esposa? —El caballero estaba más que molesto por la visita de su superiora.
—Eres muy aburrido, Sacchan. Además deberías tenerme respeto soy una diosa —comentó la mujer de cabellera castaña estando frente al santo de oro.
—Aja claro y yo soy una chica mágica… No me importa que seas una diosa o no. Para mi siempre serás una rompe hogares —dice el hombre de pelo azul teniendo el ceño fruncido.
—Por cierto, ¿ya terminaron de hablar con Shion-chan? Quiero ir a verlo —Asuka había ignorado por completo a su kouhai quien apretó el puño con fuerza.
—Ya hemos terminado la reunión pero.. —De nuevo las palabras del hombre de pelo azul quedaron en segundo plano ya que su enemiga lo había ignorado nuevamente.
—¡Gracias, Sacchan! ¡Iré a ver a Shion-chan ahora mismo! —Exclamó Asuka pasando al lado del santo dorado quien tenía el ceño fruncido..
—¡No me ignores demonio idiota! —Gritó Saga dándose la vuelta solo para sentir los labios ajenos sobre los suyos.
—El pequeño beso no duró mucho ya que la mujer de pelo castaño se retiró rápidamente del lugar dejando al santo de oro con el rostro rojo y más molesto que nunca…
—¡Luego de mi reunión con Shion-chan me encargaré de ti, Sacchan! —Exclamó Asuka desde lejos.
—¡Deja de llamarme así..demonio pervertida! —Responde molesto el caballero de Géminis poniendo el grito en el cielo. Pero sin saberlo él llevó sus dedos a sus labios sonriendo de forma involuntaria…
—¿Qué pasó, Saga-chan? —Preguntó su esposa que despertaba de su sueño.
—No, no pasó nada…
