Los personajes de Ranma ½ no me pertenecen, son de la gran mangaka Rumiko Takahashi. Hago este fic sin fines de lucro, sólo para el entretenimiento del fandom.

Historia participante en el #Gran_Concurso_MundoFanficsIyR el cual lleva por nombre #WeLoveFicsMundoFanficsIyR #Por_amor_al_fandom_MundoFanficsIyR

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BESOS

–Bien chicos, eso es todo por hoy –se despedía el profesor de poesía –no olviden sus tareas para el lunes, las indicaciones vienen en las hojas que les hice pasar a inicio de clases y recuerden que la entrega es en pareja –salió del salón mientras la campana del Instituto Furinkan anunciaba el término de la jornada escolar.

Los alumnos comenzaron a elegir a su pareja con la que trabajarían; Sayuri jaló a Yuca antes de que Akane escogiera a alguna de las dos. Por su parte Hiroshi y Daisuke ya habían hecho equipo dejando de lado a un malhumorado Ranma.

–Creo que tendrán que trabajar juntos –le dijo Yuca a Akane y a Ranma.

No es que al azabache no le gustara trabajar con Akane, al contrario, amaba pasar tiempo con ella, pero últimamente algo lo intranquilizaba cuando estaba junto a ella. De un tiempo atrás por alguna extraña razón que desconocía, se ponía más nervioso estando en su presencia, buscaba cualquier pretexto para tener un contacto con ella. En la hora de la comida le pedía que le alcanzara algún aderezo o salsa, sólo para poder rozar sus dedos. Rara vez caminaba sobre la reja del río, lo hacía a su lado y aprovechaba el movimiento natural de sus brazos al caminar para hacer contacto con ella. Se estaba volviendo loco. Si hacían el trabajo juntos quería decir que pasarían horas los dos solos encerrados en la habitación de la joven.

–¿Y por qué soy yo el que tiene que hacer equipo con ella? –preguntó indignado.

–Porque es tu prometida, porque viven en la misma casa y porque ya no hay nadie más disponible con quien puedas hacer el trabajo –aseguró Sayuri.

–Si Ranma, además quien no quisiera hacer equipo con Akane.

–Ni quien quisiera hacer algún trabajo con esta marimacho –y ahí estaba de nuevo Ranma, hablando de más. Akane se encontraba más que molesta, estaba a punto de sacar su mazo cuando una cantarina voz se oyó.

–Ran-chan hagamos el trabajo, juntos, lo podemos hacer en el restaurante y te cocinaré muchos okonomiyakis y si no terminamos hoy puedes quedarte a dormir conmigo –decía sonrojada la chica llena de entusiasmo.

–Lo siento U-chan, pero ya hice equipo con Akane –dijo rápidamente tomando la mano de su prometida y alzándola.

Aquella acción descolocó un poco a las dos féminas, pero Ukyo decidió no tomarle importancia. Se alejó de ellos buscando a alguien que estuviera libre. Ranma no soltaba la mano de Akane hasta que una voz lo volvió en sí.

–Muy bien tortolitos, nosotros nos vamos que se diviertan –Hiroshi le guiñó un ojo a Ranma y se fue con su amigo y las otras dos chicas. El ojiazul soltó rápidamente la mano de Akane como si de una brasa caliente se tratara, su cara se tornó de un rojo intenso y tomó su maleta.

–Te espero afuera –fue lo único que logró decir el joven antes de salir corriendo del salón dejando a una sorprendida Akane en el aula quien enseguida salió para dar alcance a su prometido.

–No puedo creer que el profesor nos haya dejado esa aburrida tarea, es más, la clase de poesía ni siquiera debería existir –se quejó el muchacho mientras caminaba sobre la valla del río con las manos detrás de la nuca, no quería estar junto a Akane, no sabía cómo actuar después de haberla tomado de la mano.

–No es aburrida –recriminó la chica –se me hace muy romántica e interesante –soltó un suspiro.

–¿Y qué vas a saber tú de romanticismo, marimacho? –le sacó la lengua y salió corriendo rumbo al Dojo antes de que su prometida le diera su merecido. Akane frunció el ceño y fue tras de él.

Cuando llegaron a la residencia de los Tendo seguían discutiendo, Akane estaba a punto de perder la paciencia y es que no había hombre más testarudo y cabeza hueca que su prometido. Se anunciaron mientras se quitaban los zapatos en la puerta y seguían discutiendo.

–Qué bueno que ya llegaron –los recibía una sonriente Kasumi –vayan a lavarse que la comida ya está lista –los jóvenes obedecieron y pronto ya estaban sentados a la mesa.

Como todos los días, las peleas entre el patriarca Saotome y su hijo no faltaron. Al terminar sus alimentos ayudaron a Kasumi a recoger la mesa para después subir a la recámara de Akane y empezar con la tarea. La joven tomó asiento en la silla de su escritorio mientras Ranma se acomodaba en la cama de la chica. Akane sacó su libreta y la hoja que les había dado el profesor.

–De los siguientes títulos de poemas, elegir el que más les agrade y contestar las preguntas de su libro de la página 185. En clase pasarán a hacer una pequeña reflexión sobre su lectura –leyó la menor de los Tendo –el profesor puso unos poemas, pero el que más me llama la atención es el de "Besos" de Gabriela Mistral ¿Qué opinas?

El joven se intranquilizó ante el nombre de aquel poema.

–Que tonto se oye –le contestó Ranma fingiendo desinterés –pero si ese es el que prefieres por mi está bien. De todos modos ¿Para qué nos va a servir la poesía?

–Deja de quejarte Ranma y mejor presta atención, comenzaré a leer y tú vas tomando nota de lo que te parezca interesante ¿De acuerdo?

Ranma soltó un bufido de fastidio, pero en cuanto su prometida comenzó a leer prestó atención a cada palabra que ella leía.

Hay besos que pronuncian por sí solos

La sentencia de amor condenatoria,

Hay besos que se dan con la mirada

Hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles

Hay besos enigmáticos, sinceros

Hay besos que se dan sólo las almas

Hay besos por prohibidos, verdaderos.

Akane paró por un momento su lectura, repasando lentamente las líneas que acababa de leer, recordó aquella vez en la que Ranma la besó cuando estaba en estado neko, sabía que él no lo recordaba y eso la entristecía, Ranma carraspeó al ver que su prometida no continuaba con la lectura.

Hay besos que calcinan y que hieren,

Hay besos que arrebatan los sentidos,

Hay besos misteriosos que han dejado

Mil sueños errantes y perdidos.

Hay besos problemáticos que encierran

Una clave que nadie ha descifrado,

Hay besos que engendran la tragedia

Cuantas rosas en broche han deshojado.

Hay besos perfumados, besos tibios

Que palpitan en íntimos anhelos,

Hay besos que en los labios dejan huellas

Como un campo de sol entre dos hielos.

Ranma no podía pensar en otra cosa que no fuera beso, cuántas veces había anhelado en darle uno a su prometida, pero su cobardía siempre ganaba. Se enteró por sus amigos de cuando la había besado en estado neko, pero él ni siquiera lo recordaba. Al principio se sintió mal pues sabía que era el primer beso de Akane ¿Y si ella no quería ser besada? ¿Si guardaba su primer beso para alguien más? Él sabía lo que era que te quitaran eseprimer beso y que te besaran a la fuerza. Se sintió culpable de haberle hecho eso a Akane, pero ella nunca le reclamó nada.

–¡Ranma! ¿Estás prestando atención? –al no ver respuesta le aventó una un libro para que reaccionara.

–¿Qué te pasa Akane? –le dijo indignado.

–Pues que no estás poniendo atención, si sigues así haré la tarea por mi cuenta y se lo diré al profesor.

–Claro que estoy poniendo atención, estás hablando de besos –ambos se miraron a los ojos y se sonrojaron, Akane apartó primero la vista para continuar con su lectura.

Hay besos que parecen azucenas

Por sublimes, ingenuos y por puros,

Hay besos traicioneros y cobardes,

Hay besos maldecidos y perjuros.

El azabache no podía apartar los ojos de su prometida, y de vez en cuando bajaba su mirada hacia sus labios, esos labios que lo invitaban a ser besados con un hermoso color rosado.

Desde entonces en los besos palpita

El amor, la traición y los dolores,

En las bodas humanas se parecen

A la brisa que juega con las flores.

Hay besos que producen desvaríos

De amorosa pasión ardiente y loca,

Tú los conoces bien son besos míos

Inventados por mí, para tu boca.

Ranma se fue acercando poco a poco a Akane, ya no podía más se estaba volviendo loco. La sentía tan cerca, pero a la vez tan lejos. Akane percibió su presencia más, volteó sin imaginar lo junto que quedarían. Sus frentes casi chocaban, su nariz estaba prácticamente rozándose podía sentir su respiración.

–Ranma.

–Akane yo, yo –cerró los ojos y tomó valor.

Terminó con la distancia que había entre ellos, juntó sus labios con los de su prometida y se separó enseguida. Fue un beso demasiado corto, pero que lo hizo ver fuegos artificiales a su alrededor.

–Lo siento Akane es sólo que, que –las palabras no salían, no sabía que decirle, su rostro estaba en un color rojo intenso que parecía fuera a explotar.

–Ranma ¿Qué fue eso? –la chica llevó sus dedos hacia sus labios, no podía creer lo que acababa de pasar.

Llevaban tanto tiempo deseando aquello y ahora que finalmente se habían besado no sabían cómo actuar.

–Yo, lo siento Akane –el ojiazul se alejó de ella y se dirigió a la puerta.

–Ranma espera –la joven lo tomó de la mano impidiendo que se fuera –¿Por qué hiciste eso?

–Perdón Akane es sólo que –trataba de que su mente trabajara en una respuesta rápida –en verdad lo siento, sé que tu no querías debí preguntarte primero pero… –el joven fue acallado por los labios de su prometida.

Al principio quedó en shock, no pensó que Akane lo besaría. Iba a responder el beso cuando ella se alejó.

–Estamos a mano –fue lo único que dijo la joven sonrojada hasta las orejas, se dio la vuelta y volvió a su escritorio, abrió la ventana para que el aire la refrescara un poco.

Ranma no comprendía ¿Lo había besado porque en realidad quería o porque lo sintió como un reto? No se quedaría con la duda, había esperado tanto por ese momento y era hora de declarar sus sentimientos. No le importaba si ella no le correspondía porque haría lo posible para que al final ella lo amara sólo a él.

–Akane tengo algo que decirte –se colocó atrás de ella –escucha yo, yo, ¡Te quiero! –lo último lo dijo tan rápido que la joven Tendo pensó que había escuchado mal.

–¿Qué acabas de decir? –preguntó incrédula.

–Lo que escuchaste, te, te quiero.

–No juegues conmigo Saotome –Akane se volteó para encararlo.

–No estoy jugando, es la verdad te quiero y no voy a negarlo.

–Pues ya lo hiciste una vez, no me extrañaría que sólo quieras tomarme el pelo.

–¡Por Kami Akane! –Ranma se empezó a desesperar jalando su cabello –escucha bien lo que voy a decir. Te quiero, incluso más que a mi propia vida. Eres mi mejor amiga, conoces todo de mí como yo lo sé de ti, sólo tú sabes cuando algo me preocupa o me enoja, me aceptas tal cual soy incluso con mi maldición, no hay momento del día en que no piense en ti. Hemos pasado por tantos momentos juntos, siempre curas mis heridas después de las peleas. No sabes lo orgulloso que estoy, tú eres mi lugar seguro. Perdón por todas las malas palabras que te he dicho, no pienso que seas un marimacho ni que tengas pechos planos, es solo que tengo miedo de expresar mis sentimientos pero ya no podía más con esto. Llegaste a cambiar mi vida y no imagino mi futuro sin ti.

Los ojos de Akane comenzaron a humedecerse ante las palabras de su prometido, tanto tiempo había esperado por algún tipo de afecto de su parte que ahora se le hacía tan irreal. Las lágrimas comenzaron a rodar por sus ojos, su prometido se acercó y la abrazó para consolarla.

–Lo siento Akane, está bien si no sientes lo mismo, sólo quería decirlo.

–Eres un bobo –la joven hipaba por el llanto –¿Qué no te dabas cuenta que también te quiero?

–¡Oye! No me insultes, te acabo de abrir mi corazón –lo dicho por el joven logró que su prometida comenzara a reír.

Él tomó el rostro de su prometida, con su pulgar limpió los restos de lágrimas que había y se acercó nuevamente para besarla. Esta vez fue un beso más largo, al principio algo torpe e inexperto, pero al poco tiempo se fue acompasando. Él rodeó la estrecha cintura de la chica mientras ella se colgó de su cuello. Se separaron por falta de aire, se miraron a los ojos y volvieron a fundirse en otro beso.

Para ambos ese contacto se estaba volviendo adictivo, cada vez se hacían un poco más expertos y decidieron aventurarse un poco más jugando con sus lenguas y dando suaves mordiscos entre beso y beso. Ya no pudieron seguir con la tarea, pues estaban ocupados en recuperar el tiempo que habían perdido por tantas peleas, ya encontrarían un espacio para cumplir con sus obligaciones escolares.

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Si han llegado hasta aquí gracias por leer.

Llegando como siempre a última hora, gracias a la página Mundo Fanfics Inuyasha y Ranma por el apoyo que siempre dan a los escritores y por las dinámicas que siempre tienen para nosotros.

Como siempre agradezco infinitamente a Sweetsimphony, quien es quien da su visto bueno a mis historias antes de ser publicadas.

Espero les guste y disfruten de esta historia tanto como yo disfruté escribirla.

Nos leemos pronto.